Algo no andaba bien, Neji lo sabía al momento que Lee o Tenten no pasaron a visitarlo. Lo más probable sería que les encargaron una misión con uno de los otros integrantes.

La misión de traer a Sasuke de vuelta había sido un fracaso, los enemigos habían sido más fuerte que ellos por lo que le dejaba un sabor amargó

Se dio cuenta que tenía que entrenar más que antes, esos sujetos no eran lo únicos con un poder similar. Aunque al estar con ese tipo llamado Orochimaru era una ventaja para ellos

Cuando llegó a la residencia ahí fue que noto algo extraño, por lo que se detuvo a una distancia observando aquella escena

Hinata se encontraba en la entrada con una chica hablando animadamente, está se encontraban de espalda por lo que no podía de ver su rostro

Su cabello era un color castaño, podía escuchar la risa de esa chica y un pequeño sonrojó en Hinata. ¿Quién era ella?

Nunca la había visto, Hinata raramente salía de la residencia y si lo hacía era para sus entrenamientos o para salir con Kiba y su otro compañero.

—¿Neji-niisan? —La voz de Hinata lo saco de sus pensamientos, ella lo miraba con una expresión sorprendida. Al parecer no esperaba que llegara en ese momento

La otra chica parecía haberse sobresaltado al escuchar su nombre, su mirada no se aparto de ella cuando lo miro sobre su hombro dejando ver sus ojos color chocolates.

Se acercó a pasos lentos hasta tener a las dos chicas frente de él, la castaña era delgada de piel morena. Ella lo observaba sorprendida y con curiosidad

—Neji me alegra que hayas salido del hospital —Le ofreció una leve sonrisa aunque el chico había notado que estaba nerviosa, asistió levemente ocultando su confusión ¿Acaso lo conocía?

Puso los ojos en blanco, era más que obvio siendo que lo acababa de llamar por su nombre. Aunque nunca llegó a toparse con ella, ni en los exámenes chunnin

—Neji-niisan ¿salió solo del hospital? —Pregunto preocupada Hinata dando un paso al frente—. Debió al menos avisar.

—No he querido causar molestias, Hinata-sama. —Se limitó a decir. Seguidamente miro de reojo a la otra chica quien lo observaba en silencio, pudo ver la intriga en sus ojos

—¿Recuerdas a Akari-chan, Hermano?

Akari

Neji volvió su mirada hacia Hinata con el ceño levemente fruncido, no reconocía el nombre. Akari, aquella chica de cabello castaño pareció soltar una risa nerviosa por lo que su mirada se dirigió nuevamente a ella

—Fueron las pocas las veces que hemos tenido la oportunidad de hablar —Revelo la castaña y le regaló una sonrisa a la Azabache—. Hina, ¿Entonces me prestarás tus recetas medicinales? Neji puede acompañarme mientras lo buscas

—¿Qué yo que? —pensó incrédulo, Hinata pareció sonreír y asistió.

—Regreso enseguida —Dicho esto, ingreso a la casa dejándolos solo en un silenció que le resultaba incómodo, miro a la chica que se hacía llamar Akari quien le dio una pequeña sonrisa.

—No eres el Neji que conocemos. —Frunció el ceño ante lo mencionado;

—¿Disculpa? —pareció desconcertado ¿Qué era lo que hablaba aquella chica?

Akari suspiro

—No posees el aura de m... ¡Digo! Del verdadero Neji —Aclaro nerviosa mirando hacia otro lado mientras se rascaba su mejilla. El Hyuga solo pudo arquear una ceja

—No comprendo lo que estás tratando de decir

La chica de ojos chocolates soltó un suspiro y desvío la mirada:

—Soy una sacerdotisa, o al menos mi sensei lo es. Ella me enseñó sentir el aura de las personas, por eso puedo saber que tú no eres el Neji que conozco pero también sé que no eres un impostor.

—¿De que estás hablando?. —La miro con confusión, ¿Qué no era el Neji que ella conocía? ¡Si nunca habían cruzado alguna palabra!

—Antes de despertar en el hospital... ¿Tuviste un enfrentamiento? —Neji asistió lentamente con el ceño fruncido, había quedado débil antes el enfrentamiento que había tenido con su oponente dónde casi salió con vida.

—Tuve una batalla con uno de los hombres de Orochimaru, con la intención de traer a Sasuke de vuelta.

—¿Traer a Sasuke....?

—Aquí tienes Akari-chan —Hinata había llegado interrumpiendo lo que la morena estaba a punto de cuestionar, La castaña había sonreído tomando el pequeño libro que la Hyuga le extendía.

—Muchas gracias Hina, esto me servirá mucho cuando Hiroshi o Shiori tenga alguna herida. —Ojeo las hojas con una sonrisa, Neji la miro con interrogativa. ¿Qué era lo que estaba a punto de decir?

Llevó su mirada hacía el cielo ¿Acaso la chica trataba de decirle que no era de ahí? Eso era absurdo

—Me tengo que retirar, mañana mi padre tiene la última misión con los chicos antes que ellos se vayan a entrenar durante tres años. —Soltó un suspiró Akari dándole una sonrisa a Hinata quien bajo la mirada con desánimo, algo que Neji no paso desapercibido—. Fue un gusto volver a verte Neji, espero que te recuperes pronto. Oh, y entrena tu visión.

—Si...—Emitió dudoso cuando cruzó con su mirada, sus ojos chocolates agarraron un brillo de advertencia. ¿Acaso le aconsejo mirar a su alrededor?

Aquella extraña chica se fue a pasos tranquilos sacudiendo su mano despidiéndose, Hinata hizo lo mismo devuelta.

—¿Te gustaría tomar té Neji-niisan? —Invito Hinata con una sonrisa, Neji la miro por un segundo. ¿Desde cuándo Hinata no era tan tímida? Ya no se notaba que tartamudeara tanto

—Esta bien, así aprovecharé de notificarle a Hiashi–Sama de mi llegada. —Su prima asistió y se adentro a la residencia ante la señal del mayor.

Tenía que saber que era lo que estaba pasando.

Cuando había caído la noche él se despidió de su prima con la intención de ir a dar una vuelta por la plaza de Konoha, quizás podría comprarse algo para la cena antes de acostarse.

—(Quizás me encuentre con aquella chica) —No pudo evitar pensar distraídamente hasta que detuvo sus pasos al percátese de sus pensamientos. ¿Por qué había pensando en eso?

Soltó un suspiro llevando la palma de su mano hacia su frente, el agotamiento lo estaba consumiendo. Sacudiendo la cabeza prosiguió su camino hasta llegar al puesto de Onigiris, dónde hizo la fila tras un hombre pelinegro que parecía fastidiado.

—¿Por qué tenemos que hacer fila para comprar Onigiris? Fácilmente podemos hacerlo en casa. Puedes venir a mi apartamento, o yo voy al tuyo, después de todo siempre comemos juntos.

—Olvídalo, aquí hacen los mejores Onigiris de Tomates. —Respondió una voz delante de él. Neji frunció el ceño al reconocer aquella voz, por lo que dio un paso al frente disimulando mirar hacia el frente y se quedó estático al reconocer a Sasuke en aquella fila. ¿Qué hacía él allí? ¿Acaso pudieron traerlo de regreso?

¿Y por qué parecía tan cercano a ese hombre? Según tenía entendido el Uchiha no tenía familiares y no se relacionaba con nadie, era un lobo solitario.

Decidió no decir nada al respecto, todo esto era demasiado extraño pero Sasuke se topo con su mirada y solo dio un leve asentimiento como saludo. Neji solo lo miro con desconfianza

¿Qué estaba pasando?

—Mañana es tu última misión en equipo, ¿No es así? —Cuestiono el desconocido. Eso llamo la atención de Neji ¿Última misión en equipo?

No pudo evitar sentirse incomodo al recordar que la chica menciono que su padre tendría una última misión con su equipo al día siguiente. Podría ser una sola casualidad, ¿cierto?

—Hm. El idiota de Naruto le insistió a ese hombre que lo entrenará, después lo sucedido en los exámenes chunnin muchos de nosotros quedamos impotentes. Yo también debo de hacerme fuerte.

El Hyuga aplanó los labios y salió del local más confundido de lo que estaba. Algo no andaba bien, ése no era su hogar.

—¡Kai! —Concentro todo su chakra para realizar la liberación, posiblemente todo era un Genjutsu. Pero al abrir todo seguía igual, volvió a cerrarlos pará activar el Byakugan.

Algunas personas lo miraban con rareza pero él se concentro en mirar a su alrededor, no veía nada fuera de lo común. ¿Entonces por qué él estaba en esa situación?

—¿Neji?