¿Qué deseas, Rogers?
Mi primer fic Stony 💙❤️ y me declaro oficial en el fandom de Marvel.
Amo muchísimo este shipp, me gustó por las películas, pero leyendo los cómics y viendo Avengers Assemble los comencé a shippear al triple. Ya es mi otp suprema <3
Contiene escenas explícitas; espero que les guste!! (✿^‿^)
[...]
—Viajaste siete horas para verme, debes admitir que estas un poco obsesionado conmigo—Dijo el multimillonario mientras servía un par de copas; Steve no consideraba a Tony como alguien que bebería a plena luz de la tarde.
—Vine porque debo saber como estas—Respondió Steve con el mismo tono pacífico de siempre, después Tony se sentó frente suya en el comedor con ambas copas—Sabes que no soy fan del alcohol.
—¿De qué hablas? Los dos son para mi—El multimillonario bebe un poco, dejando más que claro que no le interesa lo que Rogers está diciendo.
—Yo…te busqué en Nueva York, pero me dijeron que estabas tomando vacaciones en Virginia siempre es fácil dar contigo.
—No tengo secretos, así de fácil—Tony no mira al rubio, finge que hay algo interesante en su móvil mientras Steve intenta tomar la situación con calma.
—¿Cómo te encuentras? Sé que no has estado pasando recientemente por Industrias Stark.
—Estoy de vacaciones, algo normal para alguien tan ocupado como yo.
—Igual estoy preocupado, ni siquiera Pepper me dijo donde estabas…
—No hables de Pepper como si fuera tu amiga—Interrumpió Tony, levantando la mirada molesto, a lo que Steve callo. La manera rápida y agresiva de atraer la atención de Tony siempre es la señorita Potts.
—Lo siento pero necesito que hablemos.
—¿Exactamente que quieres, Cap?—Tony ya estaba harto, esperando que Steve se fuera por donde había entrado—¿Qué te cuente mi día? ¿Mis planes? ¿De mis sentimientos?
—No he tenido noticias de ti en los últimos cinco meses, no pienses que vine aquí para arruinar tu día, en verdad estoy preocupado.
—Estoy contento—Dijo Tony abruptamente, recostando su espalda en la silla—¿Eso era todo? Estoy bien.
Steve no dijo nada, lo seguía mirando con esa expresión triste. Esos ojos azules para Tony eran una perdición.
Maldita sea, el viejo en verdad estaba preocupado, y no se irá de aquí hasta que Tony sea sincero.
—Tony, vine aquí porque necesitaba verte—Aclaró Steve—Entiendo que no confíes en mí, y está bien, respeto eso, pero no evitarás que me sigas importando, eso nunca cambiara.
—Esa obsesión tuya siempre me ha molestado, la forma en que tu…—Tony toma su copa medio llena mientras intenta ordenar sus palabras para no hablar más de la cuenta—La forma en la que crees que debes protegernos a todos como si no pudiéramos protegernos a nosotros mismos.
—Tu no te estás protegiendo, estás huyendo.
—¡Cierto!—Exclamó Tony, sorprendiendo a Rogers—Estoy huyendo, no quiero recorrer las calles en la que hace unos años estábamos combatiendo, tampoco quiero ver mis máquinas, ni las caras de lo que solía llamar “mi equipo”.
Tony se levantó, caminando un poco. Cap siempre actúa así, bajo su lupa culpable. Tony no quería lidiar con eso, no en ese estado lamentable. Por supuesto que no estaba bien, estaba en una casa escondida en Virginia donde pasaba las tardes bebiendo y hablando con Pepper por teléfono esquivando sus obligaciones.
No tenía confianza en sí mismo, había sido traicionado por la persona en la que Tony más confiaba. En el hombre en el que sin pensarlo, confiaría su vida.
Llegó un punto en el que Tony sentía más que respeto y compañerismo por el Capitán América; tenerlo ahora aquí, con esa mirada triste diciendo esas dulces palabras dolían. Dolían porque ahora existe una capa de rencor sobre lo que fue un profundo cariño.
—¿Tony?—Dijo Steve antes de ponerse de pie, dudando sobre si acercarse o no—¿Qué sucede? ¿te sientes mal?
Stark no dejaba de mirarlo. El saber que aún existe un destello es lo peor. Tony deseaba que no quedara rastro de ese sentimiento, aunque para su desgracia, seguía existiendo, y de manera muy latente.
—Me hiciste mucha falta, ¿porque…porque no puedes dejarme en paz?—Sin poder evitarlo, Tony bajó la mirada mientras sus ojos comienzan a retener un par de lágrimas.
En menos de un minuto, Steve ya lo estaba consolando. Colocando su mano sobre la mejilla de Tony, acercándolo. Esto no era producto del alcohol dado que Tony no bebió lo suficiente; esto es sinceridad.
Esto es una conexión.
—Estoy aquí, puedo compensarlo—Dijo Steve en un tono suave, mientras Stark intentaba calmarse.
—No, no puedes, es demasiado tarde.
—Nunca es demasiado tarde, si todavía me necesitas con gusto estaré aquí para ti.
Otra vez. De nuevo cayendo en lo mismo. Tony no creyó que volvería a tener momentos así con Rogers; cuando pelearon y se separaron, dio por hecho que la relación había muerto.
Steve no lo eligió aquella vez. Pero ahora lo estaba consolando y diciendo todo lo que Tony quería oír.
—No debemos hacer esto, no ahora que tenemos prioridades distintas—Dijo Tony mientras retrocede unos pasos para romper el contacto.
Tony se conoce lo suficiente para saber que si esto sigue así, no dudará en aferrarse al cuerpo de Steve.
Pero entonces, el rubio lo toma de la barbilla para hacer que se miren a los ojos. De nuevo esos condenados ojos azules, cautivadores, profundos y ciertamente hermosos.
—Un roce y seré tuyo para siempre, Tony—Dijo Steve con una sonrisa; siendo esta su propuesta final.
Tony no necesitaba saber más. Se traicionó así mismo otra vez cuando abraza a Rogers por el cuello y lo besa en los labios. Hace tanto que no se besaban…hace tanto que Steve no lo toca…
Hace tanto que no terminaban acorralados contra la pared y desesperados por desnudar al otro.
Steve descubrió un nuevo lado suyo gracias a Tony. Ese lado más apasionado, intenso y hasta dominante. La forma en la que tomaba las muñecas de Tony para besar su cuello y dejar alguna marca lo demuestra.
Cuando Tony muestra su vulnerabilidad ya sea una decaída por una derrota, o su molestia por un plan fallido; despierta en Steve su instinto protector y amable. Lo consuela y le hace saber que no importa el que, siempre lo considerara un genio invencible.
Incluso cuando Tony bromea y reluce su sarcasmo, Steve le sigue la corriente, porque aprendió a bromear con él, y aunque el sarcasmo no sea su fuerte, puede reír con Tony, incluso puede devolverle las bromas.
Así que cuando Tony yace jadeando y pidiendo más, nace en Steve el instinto de arrancarle la ropa y hacerlo suyo toda la noche.
Steve se avergüenza de ese lado mientras que a Tony le encanta.
Pero esta vez será diferente. Steve tiene la intención de hacer notar lo mucho que ama a Tony en cada movimiento. Por eso comenzó a besar su cuello delicadamente mientras los primeros jadeos de Stark comenzaron a salir.
No iba a ser delicado, iba a ser especial.
—Rogers…
—Steve—Corrigió el soldado mientras desabrochaba la camiseta blanca del multimillonario, resistiendo la tentación de simplemente rasgarla—La primera vez que lo hicimos gritaste Steve.
Ambos caminan hasta llegar a la alcoba, donde Steve básicamente empuja a Tony a la cama.
Tony quería responder a las provocaciones pero cuando Steve tuvo la brillante idea de deslizar su mano debajo de los pantalones, sintió como todo se le derrumbaba encima. Tocando su intimidad, excitando cada fibra a una velocidad que asusta.
—T-Te odio…—Murmuró Tony mientras Steve lo masturbaba ligeramente al mismo tiempo en que besaba su cuello.
Steve beso y toco todo a su alcance. Deslizando para besar el pecho de Stark mientras escuchaba sus gemidos, primero saboreo un pezón mientras su mano se movía un poco más rápido.
—¿Porqué estás tanteando?—Expresó Tony con algunos jadeos de por medio pero sin ocultar su tono de fastidio. Steve es cursi, eso es cierto, pero también es frenético, ahora estaba tomándose su tiempo en explorar el terreno.
—Te lo dije, un roce y seré tuyo para siempre—Respondió Steve antes de besar a Stark, saboreando cada centímetro mientras intenta introducir su lengua. Tony se rehusaba al principio pero después permitió que Rogers explorara su boca a su placer.
—¿Para siempre? ¿Lo juras?—Preguntó Tony en voz baja.
—Si, lo juro por mi honor, por encima de mi escudo.
—Siempre alardeando tu escudo—Tony por fin muestra una sonrisa, esas clásicas medias sonrisas burlescas que Steve adora tanto—Juralo por ti, no por tu título de supersoldado.
—No soy más que eso…
—Claro que si, Steve, si solo fueras el Capitán América, jamás me hubiera interesado en ti—Tony colocó una mano en la mejilla del rubio—Júralo por todo lo que hemos pasado…
Steve volvió a besar a Tony, esta vez con más delicadeza. Ambos cerraron los ojos, disfrutando del momento.
Rogers se encuentra aquí, y no tiene pensado marcharse; así que continuó acariciando el cuerpo del multimillonario para hacerle entender eso.
—Lo juro Tony—Dijo Steve con una sonrisa—Pero sé que te importan más las acciones que las palabras, así que pienso demostrarlo.
—¿Chupándome la p…?—Bromeaba Tony antes de ser interrumpido por la mano del rubio de nuevo sobre su entrepierna, debajo del pantalón, con cierta velocidad mientras continuaba degustando de su pecho—Cap…
—Es Steve, yo no te llamo Iron Man, así que es lo justo.
—Bien…—Tony intentaba mantener la sonrisa, pero sus nervios están a flor de piel—Pero solo yo estoy semidesnudo, por ende…
Tony no espero una respuesta, colocó sus manos en las orillas de la camiseta negra de Steve, el cual, estaba tan ajustada a su cuerpo que se puede admirar su ejercitada figura.
Tony siempre ha estado rodeado de personas atractivas, de hombres musculosos y mujeres esbeltas; pero Steve tiene el cuerpo perfecto, ojos azules deslumbrantes y una sonrisa que puede ser dulce o puede ser seductora.
En estos momentos, es la segunda opción.
Tras haberle retirado la camisa a Rogers, Tony paseó su mano sobre su enorme pecho. Volvieron a besarse, donde ahora Tony exploró la boca del otro mientras las manos de Steve desliza el cinturón de Tony de un solo movimiento.
El rubio corta el beso para paladear el cuello de Tony; este decide no ocultar sus suspiros. Las manos del supersoldado tocan los muslos del millonario, hasta llegar al boxer negro ajustado, donde por fin los retira para dejar sin prenda alguna al de cabello oscuro.
—Ahora sonríes tímidamente—Comenta Steve en un desdén de burla.
—Cuando veo tu cuerpo…no puedo evitar pensar que eres mucho más fuerte y grande que yo.
—¿Eso es un problema?
—Cuando vas a partirme en dos, si, lo es.
Steve rió un poco al mismo tiempo en que sus mejillas se coloraron.
—Extrañaba tus comentarios vulgares—Steve tras decir eso, le entrega un beso corto—Espero que puedas seguir con ellas entre tantos gemidos.
—Vaya Steve, has mejorado tu vocabulario—Dice Tony con una sonrisa mientras su excitación se triplica; escuchar a Steve como un boca sucia es un gusto culposo.
Steve besa el cuerpo de Stark. Comenzando por el cuello, deslizando por su pecho—teniendo cuidado de no tocar el reactor—, acariciando el abdomen hasta llegar a la erección. Donde lame delicadamente la punta mientras escucha como Tony vuelve a ser un manojo de respiraciones agitadas.
—Descuida, tendré cuidado—Expresa Steve, antes de lamer el tronco del pene, provocando que una corriente de placer escale por la espalda del cabello oscuro.
—S-Steve…—Tony mantiene los ojos fuertemente cerrados, sintiendo como su miembro es envuelto en una cavidad húmeda—Carajo, te odio…
—¿Quieres que me detenga?
—No, te odiaría más.
La respuesta que Rogers quería oír.
Vuelve a introducir aquella erección, haciendo uso de la lengua para estimular cada centímetro.
Tony siente espasmos, Steve pocas veces ha ofrecido un oral dado que no tiene mucho cuidado, y la primera vez ambos se llevaron un desagradable momento. Pero ahora Steve saborea gustosamente; a pesar de que su propia erección necesita atención.
Observar como Tony jadea su nombre mientras enloquece por cada movimiento es una imagen que calentará siempre cada fibra de Rogers. Continua un poco más, pero no quiere que Tony se corra todavía.
—Necesitarás aguantar un poco más, lo siento—Dice Steve mientras desabrocha su propio pantalón.
—Lo que me preocupa es que tu no soportes—Comenta Tony mientras mira la entrepierna del rubio—Vamos, has llevado el control hasta ahora.
Steve sabe lo terco que es Stark, así que permite que haga lo que quiera. Cambian de posición, teniendo a Rogers con la espalda sobre el colchón, Tony no pierde tiempo en bajarle la ropa interior y exponer el miembro erecto del supersoldado.
—Tony, no quiero que te precipites—Dice Steve mientras su corazón se acelera.
—Descuida, que este desesperado no me hace estúpido—Responde Tony mientras masturba un poco a Rogers, aunque no muy deprisa—Busca en el cajón de al lado, hay un frasco de aceite de coco.
Steve estira un brazo hasta la mesita de noche junto a la cama, rebusca en el cajón hasta que encuentra un frasco de color blanco que tiene escrito “Aceite de Coco Orgánico”.
—¿Usaremos esto como lubricante?—Pregunta Rogers—¿Es seguro?
—Tiene muchas propiedades bacterianas, no pasa nada—Tony toma el frasco—¿A qué viene esa cara? Que esté deprimido no signifique que deje de cuidar mi apariencia.
—Bien…—Steve le quita el frasco al de cabello oscuro—Quiero prepararte.
—No, esa parte la hago yo.
—Lo sé, pero…
—Me quieres consentir, lo entiendo, pero esta parte es importante, pero hey, puedes ayudarme de otra manera—La sonrisa de Tony denota su burla—Creo que sabes a lo que me refiero.
Claro, ese gusto culposo que por fortuna Steve sabe tratar a la perfección.
—El genio, millonario, playboy y filántropo Tony Stark le gusta que le hablen sucio—Dice Steve con una sonrisa un tanto maquiavélica—¿Que quieres que diga?
—Usa tu imaginación—Tony pasea una mano sobre su pecho, incluído el reactor, aún tiene el frasco en la otra mano—¿Has pensado en mi, Steve?
—Si, sobre todo por las noches—El rubio da rienda suelta a esos pensamientos que lo llevan atormentando desde que pelearon—Extrañaba el sabor de tu pecho, tus labios y en como gemías.
—¿En serio?—Tony humedece la punta de sus dedos en el aceite de coco y después los conduce hacia la parte baja de su espalda—¿Y que hacías cuando tenías esos pensamientos?
—Solo…—Steve se queda perplejo ante el espectáculo que está sucediendo arriba suya, ver como Tony con cuidado mete los dedos en su entrada—Me tocaba.
—Vaya—La sonrisa de Tony crece más mientras sigue hundiendo los dedos hasta el falange—Vamos Steve, se que puedes ser más sucio que eso.
Steve quería ser tierno, pero también pasional; y si Tony quería que desatara su lado vulgar, entonces se esforzará para dejarlo complacido.
—Me masturbaba pensando en como quería hacerte gritar, quería ponerte de rodillas y dejarte afónico, para después dejarte sin caminar por tres días.
Tony mueve sus dedos lentamente sin romper el contacto físico. Se inclina a besarlo, saboreando su lengua.
—La primera vez que lo hicimos creí que moriría—Susurra Tony sin dejar de embestir—Gruñiste, eres un salvaje.
—Tu eres quien me pone así, y más cuando trabajas con esa camisa negra ajustada—Steve observa como los dedos de Stark se mueven más frenéticamente—Cuando entraba a tu taller y te veía así pensaba en follarte sobre la mesa.
—S-Steve…—Tony cierra los ojos, no quiere correrse pero es difícil con las palabras de Rogers.
—Vamos Tony, si no puedes con eso no estás preparado para que te folle, hazlo más rápido.
El millonario obedece; haciéndolo lo más precipitado posible. De su boca ya no hay más que gemidos; Steve también intenta soportarlo, carajo, en verdad quiere tumbarlo y pasar a lo bueno.
—Steve, n-no puedo más, te necesito…
Tanto dentro suya como en su vida.
—También yo, te amo.
Y antes de que Tony pudiera abrir los ojos, Steve toma su cintura y lo obliga a intercambiar de posición. Toma las muñecas de Stark e introduce en él la punta de su pene.
—Steve—Tony sonríe por los nervios—¿Sin rencores?
—¿Crees que me acostaría contigo si estuviera enojado?
—Quizás esta es la única manera en la que podemos hablar sin matarnos.
—No es verdad—Steve le entrega un cálido beso—Puedo demostrar que te amo sin necesidad de acostarnos.
—Lo sé—Tony suaviza sus expresiones—Pero…¿qué quieres? ¿qué deseas, Rogers?
—Ser tuyo para siempre—Steve acaricia el rostro del cabello oscuro—Y que tu seas mío de la misma forma.
Tony no responde a eso, cruza sus piernas en la cadera del rubio, obligándolo a que penetre todavía más. Steve lo interpreta como una iniciativa, así que mueve ligeramente las caderas, metiendo su miembro al completo de una manera lenta.
Tony cierra los ojos y aprieta las sábanas debajo suya. Su cuerpo está al límite y lo mejor de todo es que Steve lo sabe.
—Me correré—Advierte Tony y Steve responde con una embestida—¡Steve!
—Descuida, si te corres varias veces mejor para mí—Steve sonríe con dulzura, feliz de poder disfrutar de su querido Tony debajo suya con ese brillo en los ojos.
Steve comienza a moverse despacio, aunque para Tony ya es lo suficientemente desbordante, sintiendo una corriente cruzar por su espina dorsal.
—Steve…—Tony abre un poco los ojos—Más rápido, y no te detengas.
Rogers se inclina a besarlo de nuevo, moviéndose un poco más acelerado, conoce tan bien el cuerpo de Tony que sabe cuando se va a correr; por ejemplo cuando respira de esa manera tan pesada y aprieta los labios.
—Tony…—Suspira Steve antes de tomar el miembro del millonario y masturbarlo con rapidez. La gota que derramó el vaso.
Tony gime fuerte, y sin poder—ni querer—hacer nada, su cuerpo expulsa aquel líquido blanquecino sobre su propio abdomen, aunque también mancha un poco el abdomen de Rogers.
—Steve…—Suspira Tony con cansancio pero el supersoldado no ha dejado de moverse, provocando nuevamente una erección—Carajo Steve…
Tony quería decirle que lo seguía odiando. Pero es difícil cuando aquellos ojos azules te observan y te provocan una oleada de placer.
Tony entendió que no podía odiar a Steve de la forma en que quería. Puede alejarlo de su vida pero también puede permanecer a su lado.
Y ciertamente la segunda opción tiene más pros que contras.
—Tony…—Gruñe el rubio mientras aumenta la velocidad, mordisquea con cuidado el cuello de Stark—¿Qué deseas tú?
Tony no quería responder a eso, aun sentía la herida de la traición, pero Steve lo está volviendo loco; lo hace gritar, lo confunde, y todo con esa estúpida sonrisa capaz de decir palabras sucias pero también dulces anhelos.
Steve es todo lo que Tony odia, por eso lo fascina.
—Te quiero…—Tony abre los ojos, mientras siente como otro orgasmo se avecina—Te quiero…pero…
—¿Pero?—Pregunta Steve con una sonrisa, pues sabe que Tony volverá a correrse; eso es tiempo récord.
—No preguntes eso ahora…—Tony acaricia el rostro del rubio—Cumple tu palabra.
—¿Tres días sin caminar?—Tony asiente, así que Steve obedece—Como quieras.
Y por fin Steve demuestra sus dotes de supersoldado, porque la forma en que embiste a Tony no lo hace cualquiera; claro, intenta no sobrepasarse porque eso sería sumamente doloroso, pero tampoco hay gentileza.
Tony grita, clava las uñas y un segundo orgasmo se desenvuelve. Siendo más que el anterior; Steve lo silencia con un beso apasionado.
—¿Cómo es que…todavía tienes energías?—Pregunta Tony mientras intenta recuperar el aliento pero Steve sigue sin detenerse—¿Buscas matarme?
—Descuida, ya estoy cerca…—Responde Rogers—Tony…te amo tanto…
Stark ya no tiene energías para seguir hablando, así que pasea su mano por el rostro del otro con una tierna sonrisa.
—Lo sé…eres mío ¿no?—Dice Tony antes de que Steve lo volviera a besar, porque ahora el rubio va a correrse.
Pasa en cuestión de segundos, Steve cierra los ojos y por fin libera su corrida. Tony arquea la espalda, debe admitir que esta no es su parte favorita, sentir aquello dentro suyo no le causa tanto éxtasis.
Pero ver a Steve correrse mientras exclama su nombre, eso sí que lo maravilla.
—¡Tony!—Expresa el rubio seguido de un suspiro largo—¿Estás…bien?
—Si, soy más fuerte de lo que crees—Responde Tony con una sonrisa, y cuando Steve saca su miembro un dolor característico se posa sobre su cadera—Esto fue…raro, no se que pensar al respecto.
—Quería demostrarte lo mucho que te he extrañado, y como no pienso irme.
—Steve, estoy demasiado confundido ahora—Tony mira el techo como si ahí se encontrarán las respuestas—Estoy dolido, y no solo por mi trasero, también emocionalmente hablando.
—Lo sé, es comprensible.
—Pero con esto que acaba de suceder, descubrí lo bien que me haces, y no solo por el sexo, sentimentalmente hablando.
—Tony, deja los chistes, por favor.
—Lo que intento decir es…—Tony intenta sentarse pero Steve no se lo permite por el dolor punzante—Bien, cuando no estás estoy en mi peor momento, pero darte una segunda oportunidad me da algo de temor para ser sincero.
—No te fallaré, lo prometo.
Tony sonríe con cansancio; Steve sigue siendo su debilidad.
—Ahora tendrás que cumplir tu promesa, y no me refiero a la de no caminar en tres días, sino el otro.
—Un roce y sería tuyo para siempre.
—Suena tentador.
Steve se acuesta junto a Tony y le besa con ternura en los labios.
—Pienso demostrarlo todos los días.
—No creo que soporte tanto.
—No me refiero al sexo, que tambien, sino a todo lo demás, a lo que significa estar con alguien.
—Bien…no se como resultara esto pero vamos a averiguarlo.
Un último beso, uno que marcaría un punto y aparte en su relación. Steve tiene una segunda oportunidad, y no piensa desaprovecharla; Tony es ahora su prioridad, y nadie podrá cambiar ese hecho.
Fin
[...]
Intenté que esto sea horny y tierno, pero creo que el resultado es medio extraño XD igual no duden en decirme que les pareció, cualquier crítica se agradece.
Tengo muchas ideas para este shipp así que es seguro que publicaré más sobre ellos en un futuro no tan lejano ✨
¡Gracias por leer! Vota y comenta si quieres más historias así 💙❤️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top