/Cualquier parecido con otro anime es mera coincidencia.

Al terminar su charla en el cuarto de la iglesia, Hestia fue le dijo a Bell que esperaría hasta que la noche llegara, e iría a la mansión de la chimenea cuando las cosas parecieran más tranquilas. Bell quiso esperar con ella, pero ella le dijo que sería mejor si se encontrara con Aiz pronto.

Bell salió del lugar. Pensó que sería lo mejor llegar a la sede de la familia Loki, sin embargo, como ya era de esperar. No parecía una buena idea. Podría ser que Finn y los demás de verdad no se hayan tragado la mentira de que él quería a Wiene como presa.

"Sr. Cranell, ¿Qué hace?".

"Oa! Señorita Ryuu, ¿Cuánto tiempo lleva ahí?".

"Casi nada. No deberías detenerte así en medio de las calles", le dijo Ryuu a Bell.

"Lo siento, realmente, estoy un poco perdido en estos momentos".

"¿Estas perdido? Según se llevas un tiempo en la ciudad, no esperaba que pudieras perderte".

"No, eso no era lo que quería decir".

"¿Entonces, que pasa?".

– Bell no estaba seguro si decirle. Aunque ella podría ser de apoyo, no quería molestarle con algo así. – "No es nada. No es nada que no pueda resolver", le dijo.

"Entiendo", dijo Ryuu. – "Espero que lo resuelvas".

Cuando Ryuu se fue, se escucharon pasos del otro lado, corriendo. Era una esquina, y había una escalera hacia el lado contrario. Como esa ocasión en la que Bell perdió su daga y encontró a Seal, y Ryuu junto a Lile.

Sin ninguna razón alguna, Bell corrió tras los pasos, y al final de una calle, se encontró con Aiz. Ella, parecía estar escapando de él. Parecía que buscaba una salida entre el final de esa calle, pero ya no la había.

Finalmente se habían reencontrado, pero realmente fue un encuentro casi demasiado oportuno, eso fue lo que pensó Bell.

¿Quién sabía lo que habría estado haciendo en ese lugar?

– Realmente no importa, se dijo Bell. Pero no sabía que decir. Se había comportado muy mal con ella, y realmente no le sorprendería que ella simplemente no lo quisiera ver más. A pesar de lo que había dicho Hestia, él no se sentía seguro de que ella le perdonaría todo lo que había estado haciendo hasta ahora. Tal vez, eso explicaba el hecho de que escapara de él, o eso pensó. –

– Aiz se sentía igual. Luego de aquel alboroto se puso a caminar, y decidió visitar la iglesia abandonada. Sin embargo, en el camino termino encontrándose con Bell hablando con Ryuu. Sabía que no era lo que imaginaba, pero, aun así, pensó en salir de ahí. –

Bell no sabia como empezar a decirle. En primer lugar, se le acerco, y Aiz con lo infantil que era, desvió su mirada. La instantánea reacción de Bell fue parar. Lo siguiente que pensó en hacer fue decirle a Aiz, fue que necesitaba que ella escuchara. Sin embargo, fue ella quien empezó.

"Bell...... Estas devueltas", dijo ella. Sus manos entrelazándose mientras lo decía.

"Si", respondió él cortante y mirando hacia abajo después.

"Es bueno, ¿No lo crees?".

"Si", le volvió a responder Bell, quedándose callado una vez mas. Con la ausencia de cosas que decir, Aiz regreso hacia Bell. Camino cuidadosamente hacia el otro lado, despidiéndose.

"Diablos, lo arruine, otra vez". – Bell pensó que nunca podría decirle nada a Aiz. – "¿Que hice? No soy capaz de empezar de nuevo con ella".

Enserio era así. No podía comenzar a interactuar con ella de nuevo. Se sentía tan incómodo estar cerca de ella. No obstante, realmente quería hablar con ella, pero no sabia que separarse por tanto tiempo de ella le causaría este sentimiento.

/*Esta última parte, fue tomado de un párrafo de "Perdida". Buena obra en mi opinionsh*/.

Aiz lo miro desde atrás, como cayo apenado, ligeramente temblando. Bueno, Bell era menor que ella. Él seguramente era incluso mas tímido que ella. Podría ser que no supiera que hacer, al igual que ella.

– Bueno, si Bell no tenia el valor para decirlo, tendría que ser ella la que comenzara. Pero ya se había alejado de él, así que no hizo otro movimiento.

Se escondió atrás de la pared.

"Por favor, Bell. Ven a mí. Levántate y ven conmigo".

Ella espero que eso sucediera. Espero, pacientemente y al final...... sucedió. Bell se levanto y corrio hacia donde ella había salido. En un instante, Bell apareció a su lado en la esquina en la que se había detenido, y Bell de inmediato le dijo.

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Chan chan chan...

Hasta el próximo capitulo rwr

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