Minatozaki Sana no podía estar más feliz, la amistad con Momo va súper bien, se la pasan hablando y casi siempre en llamada por las noches, cuando no se pueden ver, ahora han llegado a un punto en el que se coquetean pero nada sale de ahí, cosa que lame frustra un poco, como muchos ya saben, porque no puede ser más evidente, a ella le encanta Hirai y le gustaría estar con ella en una relación amorosa, es que al pensar en eso se le acelera el corazón lo que significa que es bueno porque ella no es de creer mucho en eso.

Gracias a la mayor se ha dado cuenta que me encantan muchas cosas y que la vida no todo el tiempo tiene matices oscuros, a veces es tan rosa como hoy, un color que le da tranquilidad y que le encanta, como el vestido que lleva puesto, verano, estación en la que debe estar pensando si suicidarse oír el calor o ir a la playa, no sabe cuál elegir ya que Mina ha estado un poco ocupada con varias cosas y le gustaría que le preste atención pero parece que hoy es unos de esos días en los que es mejor pasarle por un lado.

Abrió un poco los labios pero los volvió a cerrar, encontró una casa con piscina a la que deberían ir ya que estar en unas mini vacaciones, el sábado es la boda de Nayeon y Jeongyeon a la que obviamente van a asistir, Sana no sabe a quién llevar de acompañante pero de seguro lo solucionara rápido, como es miércoles, el único día de la semana en la que ambas deciden hacer cosas juntas sin interrupciones, Minatozaki estuvo buscando lugares para invitar a Momo y Chaeyoung, las cuatro estaría divirtiéndose bastante, además de que eso la acercaría a la pelinegra.

Tal vez es lo que necesita para que dé el último paso y que por fin puedan comenzar a "salir", porque ahora no son nada oficial y la última vez que se besaron no supieron que decir, fue un pequeño beso de despedida que no llego a nada más, es que ni sintieron sus lenguas tocándose, como el beso que no acabo muy bien, fue algo sutil y lindo que movió algo en ambas pero parece que les gusta estar inmóviles porque no hicieron nada la una por la otra.

Nada más que mirarse, sonreír y dar media vuelta, sin decir ni una sola palabra, ahora Sana espera que las cosas vayan bien y que la salida a la casa con piscina, que obviamente será un día porque Momo tiene demasiado trabajo, sea perfecta y lo que ambas necesitan para que estén juntas, sin nada más que pensar le tocó el hombro a Mina quien se volteó completamente confundida ya que estaba hablando con Son de algunas cosas importantes para ambas que es mejor no especificar, por el bienestar de la humanidad, elevó una ceja y dejó lentamente el teléfono en su muslo.

"Espero que sea importante". Murmuró entre dientes, si, era demasiado el mensaje que acababa de leer y necesitaba contestarlo lo más rápido posible antes de que la burbuja en la que se encontraba explotará y no pudiera seguir saliéndose con la suya con cada cosa que dice, es que moría de amor gracias a Chaeyoung, alguien que la ha ayudado bastante a confiar más en si misma, le agradece muchas cosas sobre todo el valor que le ha enseñado a tener para afrontar cualquier problema que se presente. "Sana por favor habla". Hizo un mohín para tratar de sobornarla.

Lo peor de todo es que si lo consiguió, ablandó del corazón de la japonesa quien le enseñó todo lo que sabía de la piscina y cuánto era el costo de quedarse un día ahí, Mina estaba super feliz porque era lo que necesitaba para divertirse con Chaeyoung, hace bastante que no hacen nada más que tomarse de las manos y dormir, ella necesita más porque se había acostumbrado a largas sesiones de sexo y ahora no son más que dos chicas que se sonríen la una a la otra sin tener nada más que decir, claro que lo aprecia pero no estaría mal volver al pasado, según ella.

"Esta señorita es toda una pervertida". Le apretó las mejillas a Sana quién no entendía muy bien por qué lo hacía. "Invitando a la chica que le gusta para...". Se acercó a su odio y gimió, Minatozaki la empujó enojada porque siempre la estaba molestando con eso, ella no buscaba tener sexo con Hirai, si eso ocurre ni dirá que no, pero tampoco es algo tan primordial, sintió que se le iba a salir el corazón cuando comenzó a pensar en lo que podía ocurrir con varias copas de más en su cuerpo para nada resistente al alcohol.

"No creo que tengamos sexo". Desvió la mirada a la ventana, suspirando para poder calmar a su corazón que quería salirse, no debería estar pensando en ese tipo de cosas frente a su mejor amiga, tiene que controlarse porque siente que si tiene una gota de alcohol en el sistema saltará a los brazos de la pelinegra y eso estará fuera de lugar, no es que quiera ir más lento de lo que ya van, si no que siente que las cosas van por buen camino y no quiere volver a un punto ciego en el que no se pueden ni mirar porque sienten que se están molestando.

"Le diré a Chaeyoung que iremos a ese lugar...". Asintió y miró el contacto de Momo, debía decirle pero tenía tanto miedo que suspiró y le tembló la mano, mordiendo su labio inferior tocó el teléfono y rápidamente lo colocó en su oído.

Esperaba que atendiera la llamada porque si no sería lo más incómodo del mundo, tener que ir sola con dos amigas que son novias, escucharía sus gemidos y lo que están haciendo, no sería la primera vez, pero no quiero recibir traumas del pasado, no tan lejano.

"Que linda está la casa". Dijo Momo al entrar por quinta vez, el alcohol ya le estaba haciendo efecto y eso no era muy bueno para una japonesa peli gris que estaba siguiéndola por todas partes, ya había roto un vaso, no sabía que era tan insoportable al estar ebria, como una niña pequeña que no sabía controlarse, está segura que se comporta así porque a estado estresada y tal vez quería relajarse pero se pasó, ahora parece que tiene mucha más energía solo que está fuera de sí.

Mordió su labio inferior y volvió a suspira, era demasiado linda con las mejillas sonrojadas, le recuerda cuando la besó en la sala, ese día estaba tan caliente y lo único que quería era que Momo la follara hasta no poder más, tragó saliva y sacudió la cabeza, se va a volver loca si sigue pensando en eso, traga saliva y mira a Mina y Chaeyoung, parece que se van a tragar en la piscina, no tiene ni la menor idea de cómo se pueden mantener flotando si parece que ambas están haciendo algo más que besarse.

Ella estaba esperando algo perfecto, lo que ha estado esperando por tanto tiempo y le ocurre lo peor, es que quiere llorar pero prefiere mantenerse tranquila o aparentar que lo está, porque Momo la necesita y sea como sea ella fue quien la invitó así que está bajo su cargo, como una bebé, rodó los ojos al verla sonreír y lanzarse al sofá, es que no puede con tanto, todo lo que ha hecho para que se de cuenta que lo que quiere es tener sexo o que sea su novia y siempre hace algo que rompe un poco más a Sana, quién quiere llorar porque no puede más.

Es demasiado estrés para ella, no es alguien que aguante demasiado el llanto pero ahora se ha vuelto toda una experta que prefiere mantenerse tranquila como que no pasa nada cuando lo único que quiere es gritar gracias a toda la frustración que ha estado guardando por casi un año. "La casa está hermosa pero tú lo estás aún más". Sonrió y se acercó para besarlo, Minatozaki la miró a los ojos esperando la aprobación de alguien que de seguro no sabía ni en donde estaba, dijo que podía aguantar dos botellas pero no fue así, con media ya estaba hablando de absolutamente todo.

"Tú también eres hermosa". Susurró, se le hacía un poco más difícil hablarle así porque estaba sobria, o bueno tomó lo suficiente para estar consciente de lo que iba a ocurrir, porque pensó que así sería pero si que estaba equivocada, como siempre, se está comenzando a cansar pero es que daría lo que fuera por repartir una y otra vez la cercanía de sus cuerpos de ésta manera, en la que parece que se besaran pero a la vez no, es lo mejor del mundo juega con lo que siente y quiere.

"¿Por qué no me besas?". Miró sus labios con tanta intensidad que sentía que si seguía así se iba a desmayar, así que con todas las fuerzas que tenía se acercó y la besó, colocando uno de sus brazos detrás de su cuello para acercarla más y profundizar el beso, el sabor a alcohol y la sensación de la lengua de Hirai lamiendo su labio inferior fue demasiado para ella, entre abrió los labios dándole permiso a que pasará, Momo lentamente la tomó de los muslos y la obligó a sentarse en su regazo, bajando las manos a su cintura para acercarla un poco más si es que eso era posible.

Una batalla de lenguas para saber quién dominaba en ese beso que estaba haciendo que Sana perdiera la cabeza, jadeaba por falta de aire pero aún así no se apartaba porque sabía que si lo hacía las cosas se tornarían incomodas y era lo que menos quería porque todo estaba yendo tan bien que la más mínima cosa haría que ambas no quieran ni verse, porque así es todo, entre más arriba estés peor será la caída, es por eso que no quería ilusionarse tanto porque si llegaba a suceder algo no saldría tan lastimada.

Gimió al sentir como la mano derecha de Momo apretada su piel, el beso se iba intensificando cada vez más al punto en el que en la sala solo se podían escuchar sus jadeos y gemidos por cualquier fricción de sus cuerpos, estaban ardiendo a un punto máximo en el que si una no hacía algo o se movía las cosas escalarian a lo que Sana exactamente quería, sentir a Momo dentro ella, sonrió un poco a mitad del beso al escuchar un gemido ahogado de Hirai, se estaban quedando sin aire pero aún así seguían como si no fuera tan importante para ellas, le dolía la cabeza pero le daba igual.

El sabor de los labios de Momo era tan adictivo que no podía detenerse, seguía y seguía apretando los ojos pensando en que pronto podría respirar con tranquilidad, debía disfrutar y sentirse bien, justo cuando sintió la mano de la pelinegra subir por su muslo lago al lado de ellas se cayó, un estruendo tan fuerte que hizo que se separaran asustadas, Mina y Chaeyoung se les quedaron mirando con los ojos muy abiertos, en medio de ellas habían partes de un jarrón destrozado.

Sana jadeando por aire miró de reojo a Momo que seguía con las manos en su cintura, cosa que se le hizo linda porque parecía que no quería detenerse sin saber que a ésta se le había ido todo el efecto del alcohol y sentía que se iba a desmayar de la vergüenza, ella no pensaba tener su primera vez, con Sana, en medio de una sala, estaba tan ebria que no pensó en ello, se sintió bastante mal por lo que haría pero con la mirada que se compartieron ambas se dieron cuenta que si, que necesitaban...

Más tiempo.

Las Michaeng como siempre arruinando lo que Sana tanto había planeado.

Disculpen la tardanza he tenido unos días terribles, espero que les haya gustado este cap y me gustaría agradecerles todo el apoyo que le dan a esta historia, es una de mis favoritas.

Y bueno...(aquí pueden dejar los insultos a las Michaeng, comienzo yo)

"ES QUE NI CAMINAR PUEDEN SIN CAGARLA"