Curmudgeon

"Buenos días bebé". Saludó la mayor a su hermosa novia con una enorme sonrisa, ésta gruñó y se cubrió por completo con la sábana, no quería despertar porque sabía muy bien como sería ese día, negó con la cabeza y bajó las manos a su vientre, sonrió levemente al recibir un saludo de su pequeña bebé, una gran patada en su mano, suspiró y se mordió el labio inferior, ya quería conocerla pero todavía había que esperar dos meses para eso, no había sido para nada fácil, aún así lo lograron con bastante dificultad. "Hay que despertarse".

"No quiero". Se cubrió el rostro cuando Hirai la destapó. "Que fastidiosa eres". Debían ir a la casa de Nayeon a una reunión que era bastante importante, no debería estar en el trabajo porque apenas y puede caminar. "Soy una ballena, no quiero ir". Pataleó, Momo se le quedó mirando y le dio pequeños besos en las manos de la contraria. "No seas así, que haces que me emocione". Los cambios de humor que tenía eran tan rápidos que apenas y sabía cuándo se encontraba feliz, triste o enojada. "Te amo demasiado". Quitó las manos y las colocó en las mejillas de la mayor quién sonrió.

"Yo te amo muchísimo más". Casi se derrite al ver como los ojos de Momo brillaron cuando conectaron con los suyos, el solo hecho de pensar que las cosas iban así de bien y que dentro de poco tendrían un gran avance la hacía sentir muy feliz, demasiado, aún con todo lo amargada que se ha convertido, lamentablemente es algo que no puede controlar y que la verdad es que la está afectando más de lo que pensó pero aún así se mantiene fuerte, no quiero que nada haga que caiga en un mal momento o que se cree malas cosas en la cabeza.

Al parecer la pequeña que estaba en su vientre era alguien de carácter fuerte por todo lo que la hacía sentir, eso era lo que creía y nadie se lo sacaba de la cabeza, siempre decía, cada que se lo preguntaban, que la bebé iba a ser fuerte, tal vez sacar su fortaleza y espera que la personalidad de Hirai, porque tampoco quiere a alguien exactamente igual a ella, si tiene de las dos será lo mejor del mundo, quiere verla a los ojos y saber que es lo que siente, si se ve feliz por verlas.

Espera que este igual de emocionada que ellas por conocerlas, también espera que no sea tan inquieta como lo fue en su niñez porque si que tendrá un difícil trabajo para mantenerla en un solo lugar, sea como sea, ansía poder abrazarla y decirle lo mucho que la ama, Hirai se le quedó mirando por unos instantes y entrelazó sus manos, acariciando el dorso con su dedo pulgar, a Sana le gustaba mucho el contacto físico sobre todo ese que era tan leve y adorable, pero ahora la molesta, la hace sentir en una caja en la que no se puede mover.

No quiere ser la mujer más amargada del universo pero sí que quería su espacio así que apartó la mano y se levantó para ir directamente al baño, eso de orinar muy seguido se estaba volviendo un dolor de cabeza para ambas, sin embargo, han buscado la forma de manejarlo con tranquilidad porque si no de seguro estarían discutiendo todo el tiempo por otra cosa, más, porque tampoco es que se mantengan como dos blancas palomas, casi siempre hay una pequeña discusión entre ambas en la que la peli gris saca su arma mortal, lo que ha estado diciendo desde que está embarazada.

No es algo que siente pero le sale natural decírselo porque se enoja y es la única forma de expresar exactamente lo que cree sentir en esos momentos en los que se siente tan agobiada, es algo que solamente se lo dice cuando ya no puede más y es lo que hace que la discusión finalice porque ninguna de las dos puede soportarlo, al principio Momo quiso frenar todo pero no lo logró, Minatozaki lo seguía diciendo cada que se sentía estresada y no hacía lo que ella quisiera con rapidez.

"Te odio"

Le dolía tanto cuando de los labios de la menor salían esas dos palabras, algo que sabía que no sentía pero que en esos momentos salía como si no le importará nada, tan rápido y frío que caía directo en su pecho como una puñalada que le helaba los huesos, siempre había querido llorar, sobre todo las primeras veces pero se mantuvo fuerte haciendo todo lo posible para no quebrarse porque ella debía ser el apoyo, la que la mantiene bien porque la ama, con cada parte de su ser y es algo que quiere dejarle bastante en claro para que se sienta bien.

"¿Crees que sea necesario ir?". Preguntó desde el baño, Hirai apretó los labios, sentía que no era tan importante pero por algo fue que Nayeon las invitó diciendo que más necesitaba urgente, además de que ahora no entendía el por que ahora no quería ir si se veía bastante entusiasmada cuando dijo que si, tenía demasiado cambios y podía llegar a entender que la incomodidad que tendrá y el tiempo de pie será bastante difícil, hará todo lo posible para que no se sienta tan cansada y cuando lo esté volverán a casa, no quiere que se sienta mal o algo por el estilo.

"Pues ir yo en todo caso, te puedes quedar aquí, claro sin salir porque sabes que te puedes tropezar o algo por el est-". Se quedó en silencio al escuchar que algo se caía en el baño, se levantó y corrió a éste encontrándose a la menor de brazos cruzados mirando el teléfono en el suelo.

"No soy inútil". Dijo con enojó, resopló y rodó los ojos, otra cosa que se había vuelto demasiado repetitiva y normal en los últimos meses, se le quedó mirando y agarró el celular para luego dejarlo en la cama.

"Se que no eres inútil". Aseguró con una pequeña sonrisa. "Solo no quiero que te sobre esfuerces". Se agachó y depósito un beso en su vientre bastante abultado. "No quiero que nada le pasa a mis dos personas favoritas en todo el mundo". Sana se le quedo mirando por unos instantes buscando las fuerzas hasta de dónde no tenía para no derretirse o llorar por lo linda que estaba siendo la pelinegra, se sentía mal por ésta ya que casi siempre la trataba mal porque todo se lo tomaba así, se odiaba por lo tonta que estaba siendo.

"Ahora vamos a bañarnos juntas". La jaló al interior del baño y trancó la puerta, a veces si tenía recompensa el hecho de aguantar sus enojos.

Se quedó mirando a Mina mientras la escuchaba hablar de las cosas que hace Hyejoo, parece que es una niña que ha pegado mucho con Chaeyoung pero que las cosas con ella no han sido muy sencillas y puede llegar a comprender el por qué, a veces es demasiado seria o amargada, eso puede que esté influyendo en la relación con la pequeña pero no le dirá nada que no quiere escuchar porque no desea salir corriendo siendo perseguida por una japonesa rabiosa.

"Me gustaría escuchar que ella me diga que le cuente un cuento no que llame a Chaeng para que lo haga". Gruñó y tomó un gran sorbo del vino, era una lastima le tocaba tomar juro de naranja porque era lo único que era bueno para la bebé, tanto que le gustaba el vino y ahora debía aguantar el aliento de Myoui, de seguro el de Momo que la verdad es que no le importa. "Espero que mi sobrina si me quiera, no me gustaría estar tan excluida". Asintió. "¿Tienes algo que decir al respecto?".

La verdad es que no porque no estaba entendiendo absolutamente nada de lo que ella veía como algo terriblemente trágico, en lo único que pensaba era en las soluciones que podía implementar para poder llevar a cabo un plan para tener una gran y fuerte conexión con la que ahora es su hija, eso es lo que debería tener en mente y dejar de quejarse por cientos de cosas que al final no la van a llevar a absolutamente nada más que el enojo y la frustración, si que no entiende lo que le pasa a ésta nueva persona que se hace pasar por su mejor amiga.

Porque antes no se ahogaba con un vaso de agua y ahora sí, siendo ella la cascarrabias parece que alguien más también lo es y eso la tranquiliza bastante. "Lo que debes pensar es ¿cómo vas a solucionar ese problema con Hyejoo?". Frunció los labios y tomó un poco de jugo antes de rodar los ojos, como le enojaba cuando las personas se ahogan en un vaso de agua, bueno, ahora se enoja con absolutamente todo así que Mina no se lo toma tan en serio cuando la ve ofuscada.

"Siento que tu hija será igual de amargada que tú ahora". Dijo antes de irse y dejarla sola, otra persona que se iba de su lado por algunos comentarios que se escapaban de sus labios y no los podía controlar, pero es que estaba siendo sincera que ahora les doliera, elevó ambas cejas mientras tomaba el jugo y veía como Myoui se acercaba a Nayeon le decía algo al oído, ambas se le quedaron mirando y negaron con la cabeza, no había sido tan fácil estar embarazada como pensó, le molestaba todo el mundo, hasta saber que tenía personas a su alrededor.

Mordió con fuerza la parte interna de sus mejillas y desvió la mirada a Son quien se acercó con una enorme sonrisa se veía bastante feliz. "Hasta que por fin llegas". Con el típico tono sarcástico que adoptó luego de su segundo trimestre, la rubia la miró y rodó los ojos, no iba a caer tan fácil a los malas vibras de una embarazada, en cambio la abrazó y dejó un pequeño beso en la mejilla izquierda, la peli gris suspiró y sonrió a los pocos instantes, debía aprovechar que estaba de buen humor para hablar.

"Que mal que te hayan dejado sola pero aquí estoy yo para hacerte toda la compañía que desees". Por un segundo le cayó bien pero luego recordó que no debía dejarle el camino tan fácil, si todo el tiempo que la conocía la había molestado, no podía dejar de hacerlo solo por algo lindo. "Te ves muy bien con ese vestido, se te ve perfecto". Otra cosa linda, ya parecía que la e estaba coqueteando, no sabía si eran las hormonas o que cosa pero estaba viendo a la coreana con otro tipo de ojos.

Cosa en la que Momo se percató y saltó a los brazos de su novia, ésta la recibió con una pequeña sonrisa, no era la primera vez que le pasaba había estado coqueteando con todo lo que tenía falda y otras veces con chicos que se espantaban con una sola mirada cuando cambiaba de humor, ya no entendía lo que le pasaba pero si algo tenía claro es que debía estar cerca y cuidarla ya que al parecer era mucho más coqueta de lo que era normalmente, así que tenía mucho cuidado porque si que habían muchas personas que se querían aprovechar.

Sabía que Chaeyoung no estaba en esa gran lista pero se notaba que quería salir corriendo así que la ayudó, como siempre siendo una buena amiga que necesita algo a cambio que luego se lo pedirá, por ahora no porque estará abrazando y mimando a su cascarrabias favorita que parece estar en una racha de buen humor continúo que aprovechará al máximo para demostrarle que la ama demasiado y que siempre quiere estar a su lado, sobre todo cuando no la hace querer llorar y estar en una esquina de la habitación en posición fetal.

A veces era bastante hiriente con las cosas que decía.






Solo queda un capítulo, ¿lo subo hoy o mañana? ya no se qué elegir, elijan por mi, no sean flojos.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top