Capítulo 13

La mandíbula casi se le disloca de la impresión cuando se detuvo frente a la fachada de la mansion Goetia, sabía que Stolas venía de una familia adinerada pero por su mente jamás pasó que viviría en un sitio tan ostentoso, pero no tenía tiempo para seguir admirando la edificación porque ya solo faltaban dos minutos para que dieran las ocho en punto. Se miró por el espejo retrovisor del vehículo mientras peinaba su cabello con sus dedos, no se veía mal, ni olia a muerto así que bajo rápido antes de que el sudor hiciera de las suyas, también tomando con el pequeño ramo de rosas rojas que planeaba darle ni bien se vieran, realmente se sentía nervioso, como si fuera la primera cita de su vida, que obviamente no lo era, pero sin duda si se trataba de la mas especial.

La enorme reja de metal se abrió justo cuando bajo de su camioneta, camino con la vista perdida en todo a su alrededor pues seguía impresionado, ya al frente de la puerta principal vio que estaba siendo esperado por un hombre mayor vestido de traje.

–Dejame adivinar, eres el mayordomo y te llamas Sebastian— dijo a modo de broma.

—En efecto señor, lo soy pero mi nombre es Alfred, puede pasar a la sala principal— se hizo a un lado para que este entrara, Blitz se quedo mas sorprendido de lo que estaba, sentía como si estuviera en un palacio, reafirmando su creencia de que Stolas era un príncipe. Camino hacia el gran sillón que habia en el medio aunque con miedo de que si se sentara ahi este se rompiera y le costarían sus dos riñones para reponerlo, todo se veía costoso, pero no quería parecer grosero así que se sentó tratando de ocupar el mínimo espacio posible.

—Bueno... emmm... ¿Stolas vive aquí?— se dio un golpe mental al darse cuenta de la pregunta estúpida que acababa de hacer —Digo... ¿Él está listo?—

—Bajará en unos minutos señor ¿Blitz, verdad?—

—Jeje si, entonces lo esperare aqui— el anciano se retiro dejándolo solo y nervioso, pensando que al menos no lo habia espantado con su aspecto, "Millie hizo un buen trabajo conmigo", aunque mas esperaba ver la reacción del chico que se robo su corazón poco a poco, esperaba que todo les saliera bien esa noche porque planeaba contarle mas detalles de su pasado, no todo de golpe, pero sí cosas que creía eran importantes que supiera. Aunque aún se estaba debatiendo en si decirle el trato que tenía con Striker y como este se lo tomaría.

—Por cierto señor Blitz— dio un salto en su asiento por el susto, pues pensó que el hombre ya habia ido a otro sitio —Quiero decirle que esta es la primera cita del joven Stolas, por lo tanto espero que esta noche la pase muy bien, que le quede un buen recuerdo, pero sobretodo, trátelo con el respeto que se merece, porque como verá, para mi no hay nada mas importante que su felicidad— dijo con seriedad, no conocía de nada a Blitz y no parecía ser mal muchacho, pero aun así quería asegurarse de que su protegido saliera de la casa en buenas manos.

—Yo...— quedo unos segundos en silencio, ¿de verdad era el primero que lo invitaba a salir? Eso si que era algo poco comun, ademas este no parecía ser un mayordomo normal o lo que creia que debia ser uno, pues sonaba bastante interesado en que el realmente fuera alguien en quien pudiera confiarle a su ¿jefe? por esa noche, mas sonaba como si fuera un padre preocupado por su hijo.

—Oh Blitz, llegaste temprano— el mencionado se levantó rápido al oír la voz de su tutor/amigo/cita en la sala, intentó saludarlo como siempre pero las palabras se le quedaron atoradas en la garganta cuando lo vio detenidamente, se veía precioso, su atuendo simple a juego con un maquillaje ligero que resaltaba sus grandes ojos y un peinado con todo su cabello tirado para atrás lo embellecieron un montón, si eso era posible —Gracias por hacerle compañía Alfred—

—No hay de que joven, por cierto, se ve muy hermoso— dijo sintiéndose orgulloso de él por haber decidido cambiar su estilo, realmente ese simple cambio lo hacia ver mas seguro, incluso se veía mas alegre.

—Muchas gracias Alfred, Angel me ayudo con todo— su rostro estaba sonrojado por el cumplido, luego volvió a prestar su atención en Blitz —Perdon por demorar Blitz, espero te hayas sentido cómodo–

—Eh... ¡Claro que si! No te disculpes Stolas, te ves increíblemente lindo ¡Ah! Esto es para ti— le entrego el ramito a duras penas porque no podía dejar de verlo ¿como habia hecho que un chico tan hermoso siquiera le hubiera hecho caso? Parecía como si el universo lo estuviera recompensado a pesar de todo lo malo que habia hecho, pero no desaprovecharía esa oportunidad que le estaban dando para empezar a hacer las cosas bien.

—¿De verdad? Es tan tierno de tu parte, ire a ponerlas en un jarrón— se lo recibio sintiéndose mucho mas feliz por ese detalle.

Nunca le habían regalado flores antes, no porque nunca le hayan dado regalos, sino que esta vez era porque realmente recibía un detalle desinteresado, que venia desde el corazon y no para quedar bien con el resto de la gente como cuando su padre le daba algo por esas fiestas de navidad con sus socios, o en sus cumpleaños, los cuales convertía en una gran celebración a la que asistía muchas personas consideradas de la alta sociedad, que por cierto ni siquiera conocía, daba comida preparada por los mejores chefs y se ataviaban de ropa de diseñador, porque quería dar la imagen de un "padre que ama a su hijo". Esto era muy diferente y se sentía bastante bien.

—Lo hare por usted joven Stolas, pueden ir ya a divertirse— dijo tomando el ramo —No lleguen tan tarde, cuidelo muy bien señor Blitz—

—Entendido Alfredo—

—Alfred—

—Si si es casi igual, regresamos antes de las doce— agarro la mano de Stolas para salir juntos de su casa, acción que los hizo sonrojar a ambos de la emoción.

Por su parte al mayordomo le entró un sentimiento de nostalgia, hace apenas un tiempo el era un pequeño que constantemente sufría por los maltratos de su familia, y ahora parecía todo un joven normal, que tenia amigos, se vestia como queria, comia lo que quisiera, salía a pasear e incluso, tenia un pretendiente, solo deseaba que su plan para liberarlo completamente de Paimon fuera yendo mas rapido, asi obtendria la verdadera libertad que se merecía. De repente el teléfono de la casa empezó a sonar, pensando que se trataba de su jefe se apresuró a responder, planeando una buena excusa para que no pidiera hablar con su hijo, pero se trataba de un número desconocido el que estaba llamando.

—Residencia Goetia— dijo a través de la bocina, lo que escuchó fueron varios segundos de silencio al otro lado de la linea, aunque no tanto asi, habia una respiración algo agitada de fondo, como si la otra persona se estuviera debatiendo en si hablar o no.

—...Alfred, soy yo— esa voz, esa voz la conocía a la perfeccion, hace mas de veinte años que penso que nunca la volvería a oir, y casi se desmaya de la impresión, está llamada lo cambiaban todo.

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La camioneta se puso en marcha tan pronto como los dos subieron, Blitz se apresuró a poner algo de música para que el viaje no fuera tan aburrido, le pregunto a Stolas si el generó de la canción era de su agrado, pues era una de rock pesado, o si quería que lo cambiase, pero este le aseguro que no le molestaba.

—Es mas, creo que debería ampliar mi lista de canciones— dijo riéndose un poco.

—De acuerdo, entonces ahi se va a quedar, y ¿que es lo que traes en ese maletín?— preguntó señalando el objeto con el que Stolas entro al vehiculo, no se habia percatado de ello hasta ahora, se quedo tan embelesado viéndolo, aun seguia asi, realmente no podía creer lo afortunado que era de que tal belleza se haya fijado en el.

—Ah claro, bueno como vamos a ir a ver las estrellas crei que seria buena idea traer mi pequeño telescopio, no es tan moderno pero nos ayudará— no pudo retener su sonrisa ya que estaban hablando de una de sus actividades favoritas además de las plantas.

—Wow si que viniste preparado, nunca he usado uno, pensé que solo los científicos del espacio tenían uno—

—Jajaja, astrónomos, y bueno como dije no es tan avanzado igual como los que ellos tienen, aun así me ha permisivo ver algunos de los planetas desde mi ventana— colocó mejor su maletín en las piernas para que no se le cayera —No te lo habia dicho, pero te ves muy guapo—

—Oh no es gran cosa, solo me bañe y me peine jeje— por extraño que parezca, el tampoco estaba acostumbrado a recibir cumplidos sobre su físico, usualmente las personas le daban miradas de asco por su quemadura en el rostro o lo evitaban en el mejor de los casos. En si la mayor parte de su vida solo se la paso escuchando regaños, reproches, insultos, de desconocidos y de su propia familia, en los buenos tiempos, o mejor dicho, cuando pasaban tiempo con su querida madre siempre salía feliz, parecía que era la única que lo amaba.

Después de eso su camino siguió con normalidad, ya no le prestaban atención a la música porque se empezaron a conversar sobre algunas cosas que no habían hablado en la tarde, esta vez siendo Stolas quien le contaba lo que le estuvo pasando esos meses porque Blitz tenia que mantener la vista en la carretera, aunque discretamente bajo el volumen de la radio para solamente centrarse en su voz, porque escucharlo era mucho mejor que mil canciones de su banda favorita.

El trayecto terminó aproximadamente en cuarenta minutos, encontrándose en una zona muy alejada de la ciudad, llena de frondosos árboles a ambos lados de la pista, las hojas y las ramas estaban tan tupidas que casi no permitían ver el cielo nocturno, haciendo que las luces de la camioneta fueran la única iluminación en ese momento. Ambos bajaron del vehículo, con una linterna en la mano de Blitz, ya que el era quien sabía exactamente a dónde se dirigen, tomó la mano de Stolas para que este lo siguiera a través del bosque oscuro, el chico mas alto confiaba en el, aunque se sentia un poco inseguro de si llegarían al lugar que le habia prometido por la gran oscuridad que habia, tenia miedo de que se perdieran entre tanta vegetación.

—Se que esto parece el inicio de una película de terror donde el asesino mata a sus víctimas en un bosque, pero te aseguro que valdrá la pena, he venido aquí miles de veces— dijo sin detenerse, no era porque tuviera prisa, sino que estaba emocionado por llegar —Y ten cuidado donde pisas, hay muchas piedras mojadas aquí—

—Tranquilo Blitz, estoy seguro de que si— luego de la advertencia fijo su vista en el camino aunque fue un poco inútil ya que seguía bastante oscuro, rogaba por no caerse.

—Bien, espero que prepares tu telescopio porque ya llegamos— Stolas alzó la mirada, encontrándose con un claro precioso, los árboles estaban rodeando un gran lago que tenia una cascada, pero lo que mas destacaba era el gran cielo estrellado que lo iluminaba todo de forma mágica, ese no se comparaba con el que veía a través de su ventana, únicamente habia visto fotografías en sus libros de como era el cielo nocturno sin un rastro de contaminación lumínica, imaginando que algun dia podria verlo en directo, y hoy por fin se le habia cumplido ese deseo —¿Y bien? ¿Lindo no?—

—Wow, esto es espectacular— comentó con fascinación, manteniendo su mirada hacia arriba, pero por el contrario, Blitz estaba ignorando el cielo por completo, porque tenía una vista que era mucho mejor, la iluminación que daban las estrellas habían caído también sobre Stolas, dándole un aura casi angelical, esos tonos violáceos que el cielo les brindaba hacían que su rostro brillara de una forma muy bella, ahi ya no pudo resistirse mas, y le tomo una foto con su celular —¿Eh? ¿Blitz?—

—Lo siento, es que, te veías tan hermoso, no lo pude evitar— dijo avergonzado por ser descubierto —Pero, me alegra que te haya gustado, una vez dijiste algo de que en pocos lugares se ve el brazo de la galaxia, y que querias verlo alguna vez, por eso queria que vieras este lugar—

—Realmente... Estuviste escuchándome— esto lo dijo muy conmovido, pues aun pensaba que tal vez aburría a Blitz cuando hablaba de los temas que le gustaban.

—Claro que si, siempre lo hago ¿como podría ignorarte si tienes una voz tan linda?— le tomo unos segundos en darse cuenta de lo que habia dicho, y estuvo a punto de retractarse, pero ya se habia prometido en dejar de ser cobarde y para eso debía demostrarle a Stolas lo que realmente sentía por el.

—L-Lo siento... Es solo que... Aun no estoy acostumbrado a... Esto— desvió la mirada hacia otro lado, no sabía si ese era el momento justo para soltar todo lo que llevaba dentro, la noche habia comenzado bien y no quería arruinarlo.

—¿A que te refieres con "esto"?— pregunto con curiosidad.

—Bueno, creo que es a... Tener esta libertad... Tener amigos... Una cita— dijo con la mirada perdida en el cielo.

—Wow, lo dices como si hubieras vivido en una prisión— pensó que seria un comentario gracioso, para alivianar el ambiente, pero al ver el rostro cabizbajo de Stolas empezó a arrepentirse —¿...Si lo... estuviste?—

—Algo así...— ese era el momento indicado, no ya no podía seguir evadiendo el tema de su vida en la mansion —Creo que esto sera algo largo—

—Tenemos mucho tiempo aun—

Entonces fue que comenzó a contarle desde su niñez hasta el momento, la frialdad con la que fue criado, los castigos que recibía por no ser "perfecto" como su padre quería, como era presionado para ser el mejor en todo, pero lo que mas le sorprendio a Blitz, fue que este Paimon Goetia lo tuvo tan controlado por años, años que le impidieron ser un niño, adolescente y adulto normal, ahora podía entender por que Alfred le habia dicho eso antes de que salieran, prácticamente tuvo a su hijo encerrado en una jaula de oro donde lo manejaba a su antojo.

—¿Entonces es por eso que te pusiste tan nervioso por perder una clase?—

—Si, el no solo me tenía vigilado en mi casa, también en la universidad, diciendome que los profesores le mantendrán informado de todo lo que yo hacía, si sacaba malas notas, si no entregaba tareas, si faltaba, tenía miedo de que...— hizo una pausa al recordar esa golpiza que le dio cuando rompió la botella de vino.

—¿De qué...?— preguntó tomando su mano para animarlo a continuar —¿Hacia algo mas que encerrarte?—

—... Me pego— ahi le contó el incidente de la cena, le contó absolutamente todo, lo que Stella le dio en la cocina cuando fue mandado ahi, y con mucha vergüenza, lo que Andrealphus le hacia, esto ultimo le daba mucha pena admitirlo, ni siquiera a Angel se lo habia contado. Por su parte, Blitz estaba con la sangre hirviendo del coraje, no podía creer que alguien tan bueno como Stolas tenga que vivir con esos monstruos.

—Ese bastardo hijo de... Y esa perra... Pero ese puto anciano... Ni siquiera se como armar una oración— las palabras simplemente no le salían.

Se sentía tan molesto pero a la vez pudo entender muchas cosas sobre Stolas, como se ponía nervioso las primeras veces que tenían un mínimo de contacto físico, cuando le pregunto si no lo veía como un "cerdo" y por que todas clases las tenían en la biblioteca, Paimon no le permitía ir a otro lado que no sea de su casa a la universidad y viceversa, siempre pensó que la gente con dinero viviría feliz y sin preocupaciones, pero tal parece que volvía a algunos unos monstruos —Si los tuviera en frente los torturaría hasta que te rueguen perdón—

—Lo siento, no quería hacerte enojar—

—¿Que? No no no no, no tienes por que disculparte cuando eres la víctima aquí, solo... Me da mucha impotencia que tengas que vivir todo eso— dijo reforzando el agarre de sus manos —¿Como has podido salir hoy? ¿Te escapaste?—

—No, todos se encuentran de viaje, desde hace mas de un mes, por eso digo que he tenido mas libertad, aunque sea por solo un tiempo— bajo la mirada recordando que su familia no estaría fuera por siempre.

—En ese caso hare que pases los mejores momentos estos días, te aseguro que tendremos muchas mas citas—

—¿De verdad? Espera ¿Eso significa que...—

—Si Stolas, quiero seguir saliendo contigo, no como amigos, sino como algo mas, me refiero a algo romantico, digo, solo si tu quieres tambien— pocas veces en su vida se habia sonrojado como en ese momento, pero era porque estaba siendo sincero con sus sentimientos.

—Blitz... Pero claro que si, desde hace tiempo que siento eso por ti y no sabia como decirlo, tenía miedo de... Bueno, no miedo, mas bien, es la primera vez que me siento asi por alguien, y no tenía idea de cómo actuar o expresarlo— sentía que el corazón se le iba a salir del pecho de lo acelerado que estaba, la persona que le gustaba le habia correspondido, ahora tenia una gran sonrisa adornando su cara, Blitz demostró que no le importaba de dónde venía o que tanto habia sufrido, lo quería tal cual era.

—Sabes Stolas, no soy el hombre perfecto, tengo miles de defectos e inseguridades también, pero te prometo que soy sincero cuando digo que... Tu hiciste que cayera por ti—

Ambos no cabían de la felicidad, se podría decir que los dos estaban viviendo juntos su primer amor, solo que por un lado, uno realmente lo experimentaba por primera vez en su vida, luego de haber estado encerrado y controlado por su padre, creyendo que nunca nadie lo miraría de otra forma, mientras que por el lado de Blitz, a pesar de todas las relaciones que tuvo a lo largo de los años, en esta si decía lo que realmente sentía, porque estaba con la persona indicada.

—Oh Blitz— pero justamente por su inexperiencia no sabia que hacer a continuación, ¿debería agradecerle? ¿Abrazarse? ¿O seria demasiado rápido? ¿O era algo que debió hacer desde el principio? Su cabeza daba vueltas alrededor de esa misma duda.

—Jejeje, lo digo en serio, perdon si no es el escenario mas romántico para confesarse—

—¡No no! Es perfecto, no puedo imaginarme un lugar mas lindo y sobretodo porque es un sitio muy importante para ti, solo ¿que pasara de ahora en adelante?— preguntó con un poco de vergüenza.

—Simplemente, veremos cómo van avanzando las cosas, pero que te parece si continuamos con nuestra cita, me muero por saber que cosas hay en el espacio y que mejor forma de que un experto me lo explique—

—Oh por supuesto ¿tienes mi telescopio?— y si, entre toda la emoción recién se dieron cuenta de que habían olvidado el artefacto en la camioneta.

Los dos se rieron por ser tan distraídos, pero no pensaron mas en ello y regresaron a donde el vehículo para recogerlo, aun les quedaban unas dos horas para hacer lo que querían desde un principio, y asi se la pasaron el resto de su cita, con Blitz fascinado por ver otra perspectiva de las estrellas, los nombres de algunas de ellas, como fueron descubiertas, aprendiendo mucho de su ¿pareja? Quiza era muy pronto para llamarse asi, pero ya habian dado el primer paso importante, y ese era aceptar sus sentimientos mutuos hacia el otro.

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—Mon' Ange, sin importar lo que diga esa carta, tu siempre seras una gran estrella— Alastor se encontraba en la casa de Angel para brindarle su apoyo luego de que este lo llamara.

Esa noche habia recibido una carta de la compañía de "Ozzie's", todos las audiciones ya terminaron y solo le quedaba esperar a que le dieran una respuesta definitiva, esa noche por fin recibió lo que tanto estuve esperando, pero le daba miedo el contenido de ese trozo de papel que definiría su futuro, si su sueño se haría realidad, se encontraba solo ya que Cherri seguía en sus ensayos para su próxima presentación, y con Alastor ahi se sentia mas seguro.

—Bueno, creo que ya es el momento de abrirla— rasgo el sobre en sus manos y saco la carta desdoblándola, sin embargo sus ojos no pudieron leer mas haya de las letras grandes con el nombre de la compañía —¿Al no quisieras hacerlo tu?—

—Oh mi arañita, no tienes que tener miedo, pero si eso te hace sentir mejor, lo leeré en voz alta— primero lo hizo en su mente sin mostrar alguna expresión en su rostro porque quería mantener el suspenso, pero el resultado no fue sorpresa para el, era justo lo que se esperaba:

Ozzie's Entertainment

"Estimado Anthony,

Nos complace informarte que has sido seleccionado para formar parte de Ozzie's, nuestra prestigiosa compañía dedicada a la formación de futuros cantantes. Tu talento, dedicación y pasión por la música han destacado durante el proceso de selección, y estamos emocionados de tenerte como parte de nuestro equipo.

En Ozzie's, creemos firmemente en el potencial de cada uno de nuestros talentos y estamos comprometidos a proporcionarte las herramientas y el apoyo necesario para que alcances tus metas artísticas. Durante tu tiempo con nosotros, tendrás acceso a clases especializadas, entrenadores vocales de primer nivel, y oportunidades para presentarte en eventos importantes..."

—¡Espera! ¿De verdad dice eso?— le quito rapidamente el papel a su novio, solo para confirmar que todo lo que leyó era cierto, todos sus esfuerzos habían valido la pena —¡El mismísimo Asmodeo me acepto en su compañia!— ya se encontraba derramando lagrimas de felicidad, que fueron rápidamente secadas por Alastor, quien estaba igual de feliz que el, porque el habia visto todo por lo que pasó Angel para prepararse, preocupándose por su salud en ese periodo porque de tanto ensayar se saltaba las comidas o reducía sus horas de sueño.

—Estoy muy orgulloso de ti mon amour, te lo mereces mas que nadie, ahora solo queda mostrarle al mundo entero quien es Angel Dust— la pareja se dio un gran abrazo lleno de amor y confort.

—Te amo tanto Al, gracias por ser mi apoyo siempre— con sus manos acaricio ambas mejillas de su novio, acercandose de forma lenta para despues plantarle un beso en los labios, sintio como este lo tomaba de la cintura para cortar por completo la distancia entre los dos.

—¡Hola hola! ¡Ay lo siento, no quería interrumpirlos!— Cherri habia llegado a su hogar luego de un dia largo de ensayos, y no se esperaba encontrar ahi a la acaramelada pareja.:

—¡Cherri!—

—Tranquilos, yo subiré a mi cuarto, no hagan mucho ruido— rápidamente fue a las escaleras para dejarlos solos.

—Que vergüenza— dijo Angel cubriéndose la cara con sus manos apenado.

—No te preocupes nene, si quieres, podemos pasar la noche en mi casa— este lo volteo a mirar sorprendido, pues rara vez Alastor tomaba la iniciativa cuando de intimidad se trataba, pero le encantaba cuando pasaba.

—Por supuesto mi Al—

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Ya estamos junio, se supone que este mes se estrena Apologys Tour, Y NO HAY NI LUCES DEL CAPITULOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Pero bueno, al menos tienen una actuaizacion aqui.

MIK.

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