Dedicado a DarkWolf-363

Hancock se viste, bajo la atenta mirada de su prometido, siempre dándole la espalda, sintiéndose un poco cohibida e intimidada, al terminar, su típico traje rosa de dos piezas adorna su cuerpo, brindándole esa elegancia que siempre demuestra, se arregla un poco el cabello, ambos salen de la habitación y caminan por los pasillos, encuentran a las hermanas menores de la Emperatriz.

- ¡Anee-sama!- exclama Sonia, emocionada, al ver su reacción, la azabache intuye que algo ha ocurrido- ¡Rayleigh ha llegado!- al escuchar ese nombre, la ojiazúl sonríe un poco, recordando al rey oscuro.

- ¡¿En serio?!- exclama Luffy lleno de felicidad- ¡¿Dónde está?!, ¡Ya quiero verlo!

- Esperábamos las órdenes de nuestra Anee-sama- explica Mari- Para dejarle pasar de la costa o recibirlo en ese lugar.

- Tenemos que tener hospitalidad con nuestros invitados, en especial con Rayleigh- dice ella cruzándose de brazos, recordando el tiempo que el mencionado cuidó de Luffy- Hay unas habitaciones disponibles, están destinadas para Rayleigh y el hermano mayor de Luffy, Sabo- habla seriamente, el azabache la mira sonriendo, intentando leer su mente- Trafagar Law no pasa de la costa, ¡Sólo lo tiene permitido el día de la ceremonia!, dependiendo de donde se lleve a cabo la despedida de soltero, puede pasar, ¡Pero si la tripulación lo hace!, ¡Tienen órdenes de atacar!

- Entendido Anee-sama- habla la peliverde- Les diré a las amazonas que arreglen ambas habitaciones.

- Perfecto- descruza sus brazos, dejándolos caer a ambos lados de sus costados- Iremos por Rayleigh, alcancenos en la costa, Sonia, Mari- les pide, comienza a caminar, con Luffy siguiéndole los talones.

- Eres muy dura con Torao- habla, haciendo puchero.

- Le estoy agradecida con que te haya salvado la vida luego de lo de Marineford, pero no termino de confiar en él completamente- explica, camina con elegancia, llamando la atención de varias chicas al pasar.

- Torao es mi amigo, no tienes de que preocuparte- desvía su mirada a su mano, mirándola de forma tentadora, en el libro leyó una parte que dice que tomarse de las manos es algo normal entre novios, prometidos y esposos, se lo piensa unos segundos para acceder a su pensamiento, tomarla de la mano y recibir un ligero apretón, la mira al rostro, viéndola sonrojada.

- Siempre eres muy confiado, incluso puede decirse que crees en las personas de forma ciega- dice, sentir su mano con la de su amado causaba un desastre, un complejo caos en su interior- Me gusta eso de ti, aunque a veces eres demasiado ingenuo- dice riendo un poco, el azabache se sonroja al escuchar por primera vez, una risa venir de ella, haciéndola lucir muy linda.

- ¿Ingenuo?- pregunta intentando olvidar esa risa cautivadora- ¿Por qué lo dices?

- Quizás lo digo ya que soy bastante desconfiada con las personas, en especial con los hombres, no confío en ellos por nada del mundo- dice molesta, pensar en los hombres en general le causaba malestar.

- Pero... confías en mi- al escuchar la voz del azabache no puede evitar sonreír con cierta gracia, le causaba un tanto de ironía el cambio de acontecimientos.

- Por supuesto, ¿Cómo no voy a confiar en el hombre con el cual voy a casarme y será el rey de los piratas?- voltea a verlo mientras hace su pregunta, causando el asombro de su acompañante, este sonríe alegre, sus palabras, las cuales demostraban su amor por él.

- Me alegra escuchar eso Hancock...

.........

Ambos llegan a la costa, sin soltar sus manos, el peliblanco los observa llegar, dejando notar su sorpresa, al verlos tomados de la mano, Luffy corre hacia él, soltando la mano de su prometida, sintiendo la ausencia de esta.

- ¡Rayleigh!- lo saluda lleno de energía- ¡Me alegra que aceptaras la invitación de mi boda!- ríe.

-No podría perdérmela por ningún motivo- dice sonriendo, le alegraba ver a su discípulo hecho un hombre y completamente bien- Incluso me sorprendió el contenido de la carta escrita por Hancock.

- Al parecer esa fue la reacción en general- dice optimista- Gracias por aceptar la invitación Rayleigh- agradece.

- No tienes nada que agradecer- dice- Es un honor asistir a la boda de ambos, Shakky envía sus felicitaciones- dice recordando a su mujer.

Flashback

- Ya sabes Ray-san- dice advirtiéndole- No hagas nada imprudente en las tierras de Hancock- le reitera- Es un extraño acontecimiento que no volverá a repetirse, así que, no causes problemas.

- Eso ya lo se Shakky- dice guardando el regalo de bodas, junto a su ropa- Hancock sólo permitirá esta vez, la entrada de varios hombres a la isla, sólo espero que Nyonba no esté molesta por esa decisión.

- Tienes razón- dice alejando el cigarrillo de sus labios- Envía mis saludos a todos, incluyendo a los prometidos, aprovecha este tiempo con Monkey-chan, quizás no lo vuelvas a ver en mucho tiempo.

- Su nueva etapa de vida, lo mantendrá muy ocupado y tendrá que ponerle un nuevo orden a la misma- cierra su bolso para voltear a mirar a la mujer.

- Cuídate Ray-san- pide la azabache.

- Tu también Shakky- se despide y sale de la taberna, para dirigirse al pequeño barco que lo llevaría a la isla de las mujeres.

Fin Flashback

- Me alegra escuchar eso- habla el moreno emocionado- ¡Tengo muchas cosas que contarte!

- Supuse que dirías eso, pero por ahora....- se sienta en un roca- Quisiera descansar un poco, el viaje hasta aquí es un tanto agotador.

- No te pongas tan cómodo Rayleigh- dice la ojiazúl muy seria, dándole a entender al rey oscuro, que su paso no sería permitido- Las amazonas están organizando la habitación en el castillo Kuja para ti- explica sonriendo un poco.

- ¿En el castillo Kuja?- pregunta sorprendido- No me esperaba ese detalle- dice sin salir de su impresión- Ha llamado mi atención ese toque de hospitalidad de tu parte Hancock.

- No te acostumbres a el, no durará demasiado- específica un tanto burlona, pero, no se le nota mucho la burla.

- ¡Anee-sama!- la llama su hermana menor, quienes corrían hacia ellos.

- Justo a tiempo- dice mirando hacia el mar un rato- Nos faltan dos invitados, aún queda un día para la despedida de soltero.

- ¿Quién más tuvo la oportunidad de asistir a esta boda?- pregunta interesado el peliblanco.

- Mi nakama Jinbêi, mi hermano Sabo y Torao.

- ¿Torao?- pregunta confundido.

- Se refiere a Trafagar Law- explica Marigold- Ya sabes, su aliado, con el cual causó revuelo en el Nuevo Mundo.

- Comprendo- dice- Ambas tripulaciones se unieron para investigar un tema olvidado con el pasar del tiempo y derrotar dos Yonkou.

- No es del todo cierto- dice negando el capitán de lo sombreros de paja- A Robin le interesa mucho ese tema.

- Lo había olvidado, ¿Y tus nakamas Luffy?- pregunta el rey oscuro.

- Deben de estar en el castillo- comienza a saltar- ¡Vamos!, ¡Quiero contarte muchas cosas!

- Estarán muy ocupados- menciona la peliverde- Si Luffy esta distraído con alguien mas, Anee-sama puede hacer sus obligaciones.

- ¿Tienes trabajo?- le pregunta un poco desanimado.

- Si lo lamento- se disculpa sonriendo un poco- Te veré más tarde no te preocupes.

- Está bien- dice haciendo un pequeño puchero infantil, provocando el sonrojo de la emperatriz- Mientras tanto estaré con Rayleigh- se acerca a ella para darle un beso en la mejilla, sintiendo el impulso de querer pasar tiempo con ella.

- Los veré más tarde- se despide y se da la vuelta, intentando calmar sus nervios- Sonia, lleva a Rayleigh al castillo Kuja y muestrale su habitación, Mari, ven conmigo- ordena, sintiendo todo su cuerpo temblar.

- Como digas- dice la pelinaranja, siguiéndola en su camino.

- Vamos Rayleigh- dice saltando de la alegría- Estoy seguro que los chicos estarán felices de verte, shishishi.

- Vamos entonces.

Comienzan a caminar al castillo Kuja.

..........

- ¡Robin!- corre el renito hacia ella- ¡¿Dónde estabas?!, ¡Estaba preocupado!

- Tranquilo Chopper- dice levantándolo para darle un abrazo- Estoy bien, Zoro estaba conmigo.

- No llegaron a dormir anoche, ¡Nos preocuparon!, ¡En especial a mí!- lloriquea entre los brazos de la ojiazúl, esta sonríe amistosa.

- Tranquilo, nada malo va a pasarme- le acaricia la cabeza.

- ¿Qué estuvieron haciendo marimo?- le pregunta inconforme el cocinero.

- Nada que deba importarte- responde cortante, pero de un mejor humor, lo cual, sorprendió a los miembros de la banda- No quiero arruinarme el día por tu culpa.

- Es extraño ese comportamiento- menciona el francotirador.

- Ussop-san tiene razón, ¿Se encuentra bien Zoro-san?

- Estoy bien- responde luego de un gruñido- Escuchamos un gran alboroto cuando llegamos, ¿Alguien llegó?

- Si- responde la navegante- Rayleigh-san ha llegado a la isla, supongo que Hancock y Luffy fueron a la costa a recibirlo.

- ¿Rayleigh?- pregunta el gyojin, interesado.

- Es un viejo amigo, el se encargó de Luffy, los dos años que estuvimos separados- explica Franky.

- Lo conozco, estuve con Luffy-kun cuando el se presentó en la isla, el mismo rey oscuro- explica.

- ¿Lo conoces desde entonces?- pregunta el renito.

- Si- responde- También al tal Torao del cual hablan, él trató mis heridas, al igual que las de Luffy-kun, luego de lo ocurrido en Marineford, apareció de la nada en su submarino, diciendo que iba a curarlo.

- ¿Curarlo?- aleja el cigarrillo- Creo que Law tenía a Luffy entre sus planes desde hace mucho tiempo, creo que desde el momento en que todos los novatos se encontraron en Sabaondy.

- Odiaría decir que no, pero es lo mas probable- dice Nami- Y como nuestro capitán es tan confiado, nunca a dudado ni un segundo de él.

- ¿Otra vez están hablando de la alianza que tuvimos con Torao?- pregunta el capitán entrando en la habitación.

- ¡¿Luffy?!- exclama varios.

- ¡¿A-a a que horas llegaste?!- pregunta el narizon alarmado.

- A tiempo para escuchar lo que hablaban de Torao- suspira- Chicos, todo estará bien ¿Si?, Torao es mi amigo, así que no desconfío de él, deberían de hacer lo mismo.

- De ser así estoy seguro que le patearias el trasero- dice optimista el vicecapitan.

- De ser así no tengo de que preocuparme- menciona con tranquilidad la azabache.

- "¿Cómo pueden estar.... tan tranquilos?"- se preguntan varios nakamas del sombrero de paja, con rostros de horror.

- Dejando ese tema- se hace a un lado- Creo que un viejo conocido quiere saludarlos- dice sonriendo.

El peliblanco entra en la habitación, sonríe al ver a todos los Mugiwaras a salvo, los saluda.

- Veo que han tenido un merecido descanso en el tiempo que llevan aquí- menciona.

- ¡Rayleigh!- exclaman varios y se acercan a él.

- Es bueno volver a verlos- dice la ojimarrón sonriendo.

- No ha cambiado nada- habla el rubio sonriendo un poco.

- ¿El viaje estuvo tranquilo?- pregunta alegre el doctor, siendo sujetado por la arqueóloga, que solo se dedicaba a admirar con una sonrisa la escena.

- ¡Super!- exclama Franky haciendo su pose- Habrá una celebración mayor el día de mañana, ¡Aho!

- Se ha tomado el tiempo de ser parte de esta locura- dice lloriqueando de forma dramática Usopp.

- ¿Qué diablos haces Usopp?- pregunta seriamente su capitán sin comprender la situación.

- Debe de estar cansado por el largo viaje, Luffy-san, ¿Por qué no lo deja descansar?

- Yo vine por decisión propia, Luffy no me ha traído a rastras- deja su bolsa a un lado- Quería verlos antes de que este muchacho de aquí robara toda mi atención.

- Entiendo- le mira un poco- ¿Ha visto barcos de la Marina super cerca de aquí?

- Nada se estuvo movilizando cerca de donde estaba navegando- responde con seriedad- Aunque dudo mucho que estén por el Calm Belt, casi nadie se tomaría el tiempo de venir por este lugar, en especial, sabiendo que Hancock está en esta zona.

- A pesar de ser considerada la mujer mas hermosa, también temen su verdadero poder, ¿No es así?- habla Robin con ese tono misterioso y enigmático que la caracteriza.

- Por supuesto- concuerda el rey oscuro- Lo mejor que puede hacer cada persona, es nunca demostrar la última carta de su baraja, así el último truco será el menos esperado, siendo el más simple o el más complejo- se explica, el moreno intenta entender sus palabras pero le es muy difícil, al menos, por el momento.

- ¿La emperatriz es tan fuerte?- pregunta el francotirador.

- Por supuesto, por algo obtuvo 80.000.000 millones en su primera recompensa y logró el puesto de Shishibukai, hay que tener cuidado con esa mujer- dice recordando a la azabache.

- Lo sabía- dice sonriendo- Hancock es muy fuerte, shishishi- todos lo miran.

- "A pesar de que su única debilidad sea Luffy"- dice en sus adentros- ¿Quién es el que se encargará de la despedida de soltero?- pregunta.

- Sanji- dice haciendo una reverencia exagerada- Su servidor.

- Espero sea la mejor despedida que se hayan visto y haya bastante sake.

- Concuerdo contigo Rayleigh- dice el espadachín sonriendo.

- Me haré cargo de todos los detalles, incluso les pedí a las chicas si me permitían preparar el banquete para el día de mañana.

- ¡¿En en serio?!- exclama Luffy con estrellitas en los ojos y babeando- ¡¡Muchas gracias Sanji!!

- Aún no me agradezcas, al ser mi capitán te mereces la mejor despedida de todas- habla para darle una bocanada a su cigarrillo, alejarlo de sus labios y expulsar el humo.

- Concuerdo- dice el maestro del moreno, toma su equipaje- Bueno, me retiro ya, los veo quizás en el almuerzo o en la cena- se despide- Vamos Luffy, Sonia nos espera.

- ¡Claro!- exclama emocionado- ¡Nos vemos chicos!- se van de la habitación.

- Robin- la llama Nami- ¿Por qué mencionaste eso de repente?

- ¿Con respecto a Hancock-sama?- su nakama asiente- Quien sabe...- responde sonriendo, dando a entender, que no diría nada mas o que no tenía una intención clara.

........

- ¿Es tan necesario que aprenda a hacer todo esto?- pregunta consternada la emperatriz.

- Claro que si Hebihime- dice Nyonba- Para ser una buena esposa, debes saber hacer estas cosas tan simples- toma el pergamino- Debes mejorar tus habilidades culinarias, debes saber como atender a tu esposo, debes saber como organizar las cosas, como limpiarlas y reorganizarlas, sobre todo, ser comprensible, pero no del todo flexible, claramente, estar dispuesta a ser madre- esto último hace que el rostro de la azabache se encienda del rojo vivo- Y saber que hacer en el caso que quedes embarazada de Luffy- intenta pensar en otra cosa, pero la imagen de poder crear una familia con su amado, se creaba en su imaginación.

- ¿N-no crees q-que es muy r-rápido pensar e-en eso u-último?- tartamudea nerviosa.

- Nada de eso- la reprende- A pesar de que Luffy no vaya a pasar mucho tiempo en este lugar, no puedes dejar de atenderlo si lo desea, sin llegar al punto de estar siempre sobre él, este también necesita su espacio.

- Entiendo- asiente- Tendré que mejorar mis habilidades en el hogar, sin descuidar a Luffy y sin descuidarme a mi misma.

- Entiendes rápido, eso nos ayudará mucho- dice para comenzar a explicarle cada punto importante a la emperatriz.

........

- "No puedo creer que eso me dejara agotada"- dice en sus adentros, abandonando su traje rosa, para poder ponerse algo más cómodo, se despoja de sus tacones, sintiendo el frío del suelo, se quita la parte de la falda, para quedarse en su ropa interior menos atrevida y llamativa, se quita el corpiño, usando su largo cabello para ocultar un poco sus pechos. Un tacto externo, muy familiar, la hace estremecer después de abandonar su blusa sobre la cama, siente una respiración cerca a su cuello, usa sus brazos para cubrir su pecho.

- Hancock...- la llama en un susurro, apenas audible para ambos.

- Luffy...- dice sonrojada y nerviosa- ¿Q-qué haces?- pregunta al sentir su tacto en sus caderas.

- Quería sorprenderte- responde un poco agitado- Pero me he llevado una mayor sorpresa yo mismo.

- ¿A-a que t-te refieres?- pregunta tartamudeando un poco.

- Hancock... quiero tocarte.