XVIII

- Boa Hancock- tocan a su puerta- Hemos llegado al limite del trayecto, el barco de las piratas Kujas se dirigen hacia aquí- anuncia el Vice-almirante, la puerta se abre, la serpiente albina sale primero seguida por la emperatriz, su rostro y facciones indiferentes no se muestran alteradas.

- Eso ya lo sé- responde cortante- Para lo único que se detuvo el barco fue para reabastecerse de alimento y eso fue en una isla con base de la Marina- camina y cierra la puerta, su típico traje rosado de dos piezas la acompaña, los subordinados no pueden evitar voltear a mirarla y perderse en su belleza- El viaje ha sido más rápido de lo que creí.

- Han pedido mi asistencia en una isla en los inicios del Grand Line- explica sin muchos detalles- Por eso hemos hecho lo posible de hacer el viaje lo más rápido posible- la azabache comienza a caminar con sus pertenencias en la mano, casi al tiempo de que su interlocutor termina de hablar, sin mayor interés en los motivos de la llegada temprana a su hogar.

- "Ni Luffy, ni sus nakamas han sido avistados en la isla, deben estar en el castillo Kuja, como cuando tuve que dejar la isla"- dice en sus adentros, en el fondo estaba más relajada de poder volver junto a su prometido, pero no podía abandonar esa sensación de molestar, desde la reunión, se encontraba inquieta e inconforme de las medidas tomadas por los miembros de la Marina- Sólo espera un poco mas...- murmura, recordando lo corto que era el tiempo, reconociendo que en ese mismo momento sentía miedo, y no por ella misma o sus hermanas, sino por la seguridad del azabache.

..........

- Es un alivio verlos a salvo- suspira Brook, sintiendo un peso menos sobre sus hombros- Jinbêi-san, es un gusto tenerlo de nuevo con nosotros- le saluda.

- Cuando me enteré de la noticia, era imposible el no venir a confirmar lo que decía la invitación de la boda, por lo que veo, es totalmente cierto- los demás sombreros de paja asienten, excepto la arqueóloga la cual se limita a sonreír.

- ¿Qué raro tiene que quiera casarme con Hancock?- pregunta con inocencia su capitán acostándose en una de las camas disponibles sin pedir permiso.

- Muchas cosas Luffy- habla la ojimarrón- Primero, la palabra "amor" no estaba en tu diccionario ni en tu diario vivir, segundo, ¿Casarte con la emperatriz pirata miembro de los Ouka Shichibukai Boa Hancock, quien detesta a los hombres?, es aún más inimaginable, incluso la simple idea de pensar que vío ella en ti para enamorarse de ese modo, ¡No eres un buen partido!

- Eso último es hasta ofensivo Nami- le reprocha Usopp- Puede que a la emperatriz si le parezca atractivo como a otras mujeres no, pero no hay razón para alterarse demasiado.

- ¿Qué sabes tu del gusto femenino?- le pregunta clavandole su mirada penetrante en su espalda, el azabache siente su piel hirviendo de a poco con mayor intensidad- ¡Es inaceptable!

- Nami- le llama seriamente su capitán con seriedad- ¿Entonces dirías que la relación de Zoro y Robin es inaceptable?- le pregunta dejando boquiabierto a más de uno, por la profundidad de la pregunta.

- ¡No estoy diciendo eso!- se excusa.

- Se muy bien que no estoy a la altura de Hancock, se muy bien que somos de mundos diferentes, que por casualidad, nuestros caminos se cruzaron, siendo posible el poder conocernos, se muy bien quien es ella, que es lo que desea y lo que más anhela, conozco sus miedos... Conozco muy bien quien soy yo, un novato que desea ser la persona mas libre de todas, alguien que quiere vivir en aventuras, un chico con el sueño de ser el rey de los piratas- habla divagando en su defensa- Ella es mucho mayor que yo- menciona, el rubio inclina un poco su cabeza, el peliverde escucha con atención cada detalle, sabía que en cualquier momento, tanto él como la de cabellos negros entrarían en el tema de la conversación- Pero eso no me importa- dice muy serio, pocas veces se le escucha usar ese tono tan distante- Zoro y Robin son parecidos a nosotros, pero de algún modo, ellos se acoplan entre si, Robin es mayor que Zoro, no tanto como Hancock, pero sigue siendo mayor- alguien quería detenerle y decirle que no cuestionaban su decisión pero en el fondo querían saber que pensaba realmente- Zoro no tiene buenos modales, su sentido de la orientación es terrible, se interesaba mas por si mismo pero ahora es diferente, tiene muy poco tacto al hablar, incluso no aceptó a Robin cuando quise que fuera mi nakama, pero aun así ella lo aceptó por ser quien es, al igual que Zoro a ella.

- ¡No tienes por que...!- la interumpen.

- Nami-san- habla el cocinero- Luffy esta diciendo lo que piensa, el como se siente, no tienes porque hablar de ese modo- su voz suena calmada.

- Parece que Nami esta super celosa de la bella emperatriz- menciona Franky provocando un momento tenso en el lugar.

- ¡No lo estoy!- niega de inmediato- ¡Solo hablo respecto a lo que se me hace raro!

- Ya es suficiente Nami- habla esta vez el vice-capitan, con voz apagada y lejana- Siempre hemos aceptado, asimilado y sufrido las decisiones de nuestro capitán, esta es otra de ellas, deja de quejarte tanto, estas creando un enemigo donde no lo hay.

La pelinaranja va a alegar pero por notar la mirada fija del rubio sobre ella, se muerde la lengua.

- Discúlpame Luffty- se arrepiente Nami- Estuvo mal de mi parte hablar de esa forma.

- No importa- responde casi automáticamente pero sin mucha energía.

- ¡Han llegado al barco de la Marina!- anuncia el mentiroso.

- Están un paso más cerca de que Boa Hancock esté de vuelta- habla la ojiazúl, sin mostrar su inquietud en las palabras de Luffy, eran ciertas en su mayoría, pero sentía que algo faltaba- ¿No estás feliz capitán-san?

- No estaré feliz hasta que vea a Hancock bien, sin alguna lesión u otra cosa- habla serio- Y si es el caso, hundo ese navío de la Marina, no me importa, Chopper se encargaría de curarla.

- Claro- responde afirmativo, mostrando su sonrisa de niño.

- No puedes hacer eso Luffy- le habla el carpintero- De hacerlo, llamaríamos la atención, causando un super alboroto y no sería benefioso para nadie.

- Ya conoces como es- habla el espadachín- No nos escuchará, hará todo sin pensar como siempre lo hace- sonríe de lado- Sólo se paciente, ella volverá con vida.

- Eso espero.

..........

Una de las grandes serpientes del barco de las Kujas se inclina hacia el barco de la Marina para permitirle el paso a la emperatriz a su respectivo barco, tanto ella como Salome subieron a la parte superior de su nariz.

- Ah una última cosa Boa Hancock- llama su atención el Vice-almirante, la azabache voltea a verle de mala gana- Respecto a la decisión de la Marina, debe dirigirse al Nuevo Mundo junto a los demás Shichibukais dentro de una semana para realizar colaboración con los soldados en la búsqueda de los Mugiwaras y los piratas del corazón.

- Me niego- responde sin pensarlo, no desperdiciaría el tiempo que le era permitido pasar junto a Luffy antes de que emprendiera su viaje y sus aventuras al Nuevo Mundo- No tengo ni la más mínima intención de ayudar al gobierno.

- ¿Te niegas a una orden de arriba?- le pregunta desafiante- De ser así lo consideraré como traición.

- Me niego, porque simplemente no me da la gana de buscar a ninguna de esas dos tripulaciones, eso no hace parte del trato que hice con el gobierno- habla con tono arrogante, posa su mano izquierda en su cintura, mueve un poco la cabeza, agitando ligeramente su cabello, logrando captar la atención de todos los subordinados y las piratas Kujas, quienes comienzan a gritar por su belleza, el Vice-almirante se mantiene imparcial.

- ¿Crees tener opción?- le pregunta irritado- No puedes denegar una orden de la Marina, ¿Quieres que Amazon Lily deje de estar beneficiada gracias al gobierno?

- ¿Quien te crees que eres?- le señala con su dedo índice, los gritos se apagan, por el ambiente tenso que se forma, la azabache aprovecha esa oportunidad para utilizar sus encantos para librarse del problema- ¿Cómo puedes pedirme que haga tal cosa?- habla con voz de niña, con un tono de voz dulce que sorprende a sus hermanas, las cuales comprenden de inmediato lo que intenta hacer, junta sus manos frente a su pecho, sus pómulos toman un color rojizo resaltando más su belleza y su piel blanquecina, sus ojos muestran un gran brillo, como si fuera a llorar por las palabras "hirientes" de su interlocutor.

Todos los presentes comienzan a gritar por la aura inocente que la emperatriz desprende, varios de los subordinados comienzan a gritarle a su capitán por hacer llorar a la bella mujer, este por su lado comienza a incomodarse y a caer en el juego de la ojiazúl.

- Sigue siendo una orden- habla intentado mantenerse al margen.

- ¿No puede hacer una excepción Vice-almirante?- pide, algunas lágrimas hacen su aparición, su cabello y ropa comienza a moverse a favor del viento, aumentando el estímulo hacia sus enemigos, el capitán del barco de la Marina se sonroja un poco y voltea la cara, los tripulantes siguen gritando el nombre de la Shichibukai y le piden a su capitán que deje a Boa Hancock tranquila- Puede... ¿Vice-almirante?

- El encanto de nuestra Anee-sama esta dando efecto- murmura la ojiverde.

- Sólo falta poco para que cedan- dice la ojimarrón sonriendo satisfecha.

Voltea a mirarla, encarandola, Hancock sigue derramando lágrimas, con sus manos las limpia, el sonrojo no desaparece, se hace un poco mas intenso, los rayos del sol se posan sobre ella, resaltando el color de su cabello y de sus ojos, los esfuerzos del Vice-almirante se hacen pedazos.

- ¡Bien!- exclama derrotado- ¡No te vamos a incluir en la búsqueda de esos piratas!, ¡Haré que la Marina haga una excepción!- como señal de agradecimiento la azabache sonríe ampliamente, con los labios cerrados, algunas lágrimas aparecen, varios caen al suelo al no soportar tanta belleza frente a ellos- ¡Como sea!- exclama molesto el Vice-almirante- ¡Nos vamos ahora!, ¡Debemos volver ahora mismo y seguir con nuestras órdenes!- le da la espalda a la emperatriz dejando fluir su enojo, aprieta los puños- "Maldita emperatriz pirata"- maldice en su adentros, la maldecida deja de actuar, se da la vuelta y sonríe con arrogancia.

- "Los hombres son seres inferiores y estúpidos"- masculla en sus adentros, la serpiente la acerca a la cubierta, baja su serpiente y luego ella- "Todos excepto uno..."- se corrige al recordar a su amado, era al único hombre que sus sentimientos de asco, odio y superioridad nunca alcanzarían, era todo lo contrario, la gran serpiente vuelve a su lugar.

El barco de la Marina emprende la marcha de regreso a los inicios del Grand Line, por el momento estaba satisfecha por los resultados, pero algo en el fondo la inquietaba, las Kujas se acercan a ella, manteniendo la distancia, la saludan de manera cordial.

- Anee-sama- habla Mari- ¿Cómo ha salido todo?

- Ha sido una pérdida de tiempo- se refriega el rostro con molestia- ¡Dar media vuelta!- ordena- ¡Volvemos a la isla!

- ¡Si!- exclaman las mujeres, comienzan a correr para llevar a cabo las órdenes de la emperatriz.

........

- ¡Buenas noticias!- informa el músico- ¡El barco de la Marina se ha ido!- dice alegremente- ¡El barco de las Kujas comienza a movilizarse!

- Es una buena noticia- habla el renito, Robin mira de reojo a su capitán, quien se mantiene en su lugar, acostado en la cama, sin mostrar cambios, quizá se debía a lo que Usopp le había informado.

Flashback

- ¡La emperatriz esta sobre una de las serpientes de su barco!, ¡Parece que ya se disponen a volver!- varios se muestran aliviados, el azabache sonríe más tranquilo- ¡Alto!- exclama- ¡Ha comenzado a hablar con el tipo de la Marina!- la incertidumbre comienza a aflorar en el ambiente, dura unos segundos en silencio y luego exclama asombrado, casi embobado, por algo que observa- ¡Pero que bella se ve la emperatriz!

- ¡Oye Usopp!- le grita Luffy- ¡Es de mi reina de la que estás hablando!- le reclama.

- ¡No lo digo en ese sentido!- se defiende dejando de mirar por la ventana- ¡Parece que esta engatusando al Vice-almirante!

- ¡¿Cómo te atreves a hablar de ese modo de tan bella Diosa?!- le riñe el cocinero indignado.

- ¡Esperen un momento!- exclama Brook- ¡Usopp-san se ha expresado mal!

- ¿Qué quieres decir con eso?- pregunta sin entender la navegante.

- Ella suele utilizar su belleza para evitar problemas por sus acciones- menciona la arqueóloga pensando en voz alta- Quizás le están pidiendo algo y ella está declinando a la petición, por medio de sus encantos- sigue hablando, pero esta vez para todos, el mentiroso vuelve a mirar por la ventana.

- Tienes razón Robin- habla el hombre de goma- La he visto hacerlo- declara.

- He ahí su respuesta- habla el carpintero- Luffy lo ha confirmado.

- ¿Estas bien Luffy?- le pregunta Zoro.

- Si todo bien- responde sin emoción, sus nakamas voltean a verse.

Fin Flashback

- Se ha terminado el peligro- habla el ex Shichibukai- ¿Aquí es la habitación de los hombres?

- Si- responde el doctor- Nos permitieron quedarnos aquí, de lo contrario estaríamos escondidos dentro del barco en estos momentos.

- Ya que lo mencionan, ¿Dónde está el barco?

- Junto a las Amazonas encontramos un super lugar donde esconderlo- habla el carpintero- No dejaría que algo le ocurriera a mi obra maestra.

- Supongo que hay que decirle a la emperatriz que uno de los invitados y miembro de la tripulación ha llegado- menciona la navegante- Jinbêi-san puede tomar la cama de Luffy y Chopper puede dormir nosotras.

- ¿Dónde dormirá Luffy-kun?

- Yo duermo con Hancock- responde sin pelos en la lengua- He estado durmiendo aquí porque ella no ha estado, pero ahora que ha vuelto, iré a dormir con ella de nuevo.

- Entiendo- responde atónito el Gyojin.

- Hay que esperar a que lleguen a la costa- habla Brook dejando de mirar por la ventana- Por lo que pude apreciar la bella emperatriz no está de buen humor.

- Se le pasará cuando vea a Luffy- dice Usopp restandole importancia, se escuchan golpes en la puerta, todos menos el hombre de goma voltean a mirar.

- Disculpen la interrupción- habla la rubia ayudante de la usuaria de Akuma no mi- Los trajes de todos están listos, las Amazonas a cargo los esperan para que puedan probarselos- informa- ¿Luffy-sama se encuentra aquí?

- Ese peso muerto esta tirado en la cama- habla el espadachín con cierta burla, al menos, para recibir algún grito pero este nunca llega.

- Hebihime-sama ha pedido por él- al escuchar esas palabras, el corazón del mencionado comienza a latir con frenesí, su humor decaído desaparece, ahuyentado por una inmensa alegría y satisfacción inquebrantables, se levanta de un salto y corre al lado de la rubia.

- ¡Vamos!- exclama enérgico- ¡Quiero ver a Hancock!

- Sigame por favor Luffy-sama- menciona con respeto y comienza a caminar, seguida por el azabache sonriente.

.........

La miembro de los Ouka Shichibukai desciende del Yuda, seguida de sus hermanas, quienes la van poniendo al tanto de como van las preparaciones para el día de la ceremonia, cosas que estaban listas y esperaban el visto bueno por parte de ella, también mencionan la llegada del ex Shichibukai Jinbêi, mencionando que estaba junto a Luffy y su tripulación, dándole la noticia de que era parte de la misma, la ojiazúl no demuestra mayor interés por ese detalle, lo que le importaba era poder ver a su amado de nuevo y revisar con calma lo que las Amazonas trabajaron en su ausencia. Van caminando hacia el castillo Kuja con paso algo apresurado, cada mujer que las ve pasar las saluda con respeto, principalmente a la princesa serpiente, a mitad de camino, Hancock detiene su caminar al avistar a su prometido venir corriendo hacia ella, junto a su ayudante Enishida, el poder verlo, observar su hermosa sonrisa y todo de él, era suficiente para derrumbar las defensas de la azabache.

- ¡Hancock!- escucha como llama su nombre lleno de energía y alegría- ¡Hancock!- siente sus mejillas arder, no puede evitar sonreír como una tonta enamorada.

- ¡Luffy!- le corresponde el llamado, demostrando su felicidad, su cariño y amor en la sola mención de su nombre.

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