23| Cena en familia.

Sentía mis ojos pesados, y pequeñas voces se escuchaban de fondo.

–¿Por qué no despierta?– dijo una voz.

–Ey, cálmate.–hablaba otra voz– Ya va a despertar.

Poco a poco fui abriendo los ojos y reincorporandome en la cama, ¿Cuándo llegue a la cama? Me costó unos minutos acostumbrarme a la luz y a todo, estaba en mi habitación.

Unas horribles ganas de vomitar me invadieron, corrí rápido a mi baño y expulse todo lo que traía en el estómago que no era nada porque no había comido desde hace horas y lo que comí ya lo había vomitado.

Salí de mi baño después de lavarme la boca, mi madre estaba sentada en mi cama con los brazos cruzados.

–Hola.– dije en un susurro.

–Sientate, Karen.– dijo mi madre un poco seria.

Tomé la silla de mi escritorio y la puse frente a mi cama donde me senté. Mi madre me dio una mirada seria, mi madre odiaba que la engañaran.

–¿Por qué me mentiste?, ¿Por qué no me dijiste quién era en realidad Noah?– preguntó y yo solo me quedé callada.– ¡Respóndeme, Karen!

Respiré antes de hablar.

–Yo...– volví a respirar.– No lo sé, no estaba lista para que supieras quién es, yo no conozco del todo bien a Noah y tú insistas en saber quién era el "donador de esperma", solo quería conocerlo más antes de que tú lo conocieras.– solté y miré al suelo.

–Ay bebé, perdón por insistir pero solo quería saber si sería bueno para ti, para tu bebé.– hablo mi madre con los ojos llorosos.

–Perdoname a mi, te mentí y sé que odias las mentiras.– mi madre me abrazó y su perfume que tanto me gusta entro en mis fosas nasales.

–No hay nada que perdonar, prometo no insistir tanto.– habló y la volví a abrazar.

Ambas nos separamos y salimos de mi habitación, ahí estaba Noah y Matth hablando. Noah le dió una mirada a mi madre y mi madre le sonrió.

–Si piensas que te odio estás equivocado, no puedo odiar al padre de mi nieto, ni mucho menos al hombre que ha cuidado tanto a mi hija.– Noah le dió una sonrisa a mi madre.– Estoy muy feliz de saber que tú eres Noah.

–Muchas gracias, Alex.

–Solo que quédate cenar.– mi madre le alzó una ceja y Noah asintió.

Sonreí y bajé las escaleras con todos siguiéndome. Ya eran las cinco de la tarde, me había desmayado unas dos horas, tenía demasiada hambre.
Mi madre se adentró en la cocina para cocinar y después se le unió Kendall, que estaba en el patio viendo las flores. Yo me quedé en el mueble sentada ya que mi madre no me dejó hacer nada, Noah y Matth se quedaron charlando en el otro mueble sobre cosas de deporte.

Después de un rato Kendall salió indicando que la cena estaba lista, divisó a Noah y se acercó a él para saludarlo y presentárse, Noah la miró con curiosidad.

–Un gusto, mi nombre es Kendall Chars.– Kendall le extendió su mano en forma de saludo y Noah la tomó, estrechándola. Noah se veía confundido, algo le hizo clic y sonrió.

–El gusto es mío, me llamo Noah Thompson, soy el padre del hijo de Karen.– se presentó Noah y Kendall sonrió.

Nos acercamos al comedor y nos sentamos, Kendall iba en la cabeza de la mesa, del lado derecho estaba mi madre y del izquierdo iba yo, Noah estaba alado de mi y Matth alado de mi madre. La cena transcurso en pláticas agradables y risas, yo hablaba una que otra vez pero todo se centraba en Noah.

–Y dime Noah, ¿qué piensas estudiar saliendo de la preparatoria?– preguntó Kendall mirándolo fijamente.

Me sentía como en la cena cuando presentabas a tu familia tu novio y tu padre pregunta de todo, en este caso nos salteamos todos los "pasos" y le estaba presentado al padre de mi hijo.

–Quiero estudiar medicina.– respondió Noah, lo miré sorprendida.– En unos meses presentaré mi examen a la universidad estatal.

–Wow, la medicina es una carrera fuerte.– habló mi madre y Matth asintió en forma de apoyo.

–Si, pero desde niño me ha gustado todo eso.– yo seguía impresionada.

Bebí un poco de agua y cerré los ojos, las náuseas se hicieron presentes haciéndome correr hasta el baño, Noah estaba ahí parado junto a mi sosteniendo mi cabello.

Regresé a la mesa después de enjuagarme mi boca con agua y me senté en la mesa.

–Bebé, has tenido muchas náuseas.– mencionó mi madre preocupada.– Cuando estaba embarazada de ti no tuve muchas náuseas, solo ciertos días pero con el paso del tiempo me fuí acostumbrado.

–Yo cuando estaba embarazada de Matth vomitaba casi todos los días, fue un bebé muy inquieto.– mencionó Kendall y mi madre me dio la razón.– Amor, ¿Te acuerdas cuando me desmayé en la universidad en plena exposición?

Mi madre rió y asintió.

–Ese día estaba muy nerviosa, tenía una pequeña exposición de mi carrera donde tenía que participar ya que contaba con más del ochenta por ciento de mi calificación, me desmayé cuando me tocó mi turno, ese día descubrí que estaba embarazada.– nos contó con una sonrisa Kendall.

El resto de la cena mi madre y Kendall se la pasaban contando anécdotas sobre sus embarazos.

Parecía que éramos una familia, era una cena en familia.

La noche se fue rápido, ya eran casi las once y Noah se tenía que ir, mi madre lo despidió y le dijo que viniera cuando quisiera que era bien recibido, Kendall le mencionó lo mismo, habían encajado bien, Matth solo se despidió normal y charlaron un poco más, por mi parte lo acompañe a la puerta.

– Gracias por todo.– agradecí con una sonrisa, él me abrazó y yo no dude en responderle el abrazo.

–Gracias a ti, me la pasé genial, Kendall y tu madre son geniales, jamás me lo imaginé.– dijo refiriéndose a el hecho de que Kendall es mujer.– Tu familia me cayó demasiado genial, a ver qué día conoces la mía, igual desean conocerte.

Le di un sonrisa.

–Si, a ver qué día.– Noah me dió una última sonrisa y me jaló de la cintura para pegarme a él.

Nos miramos fijamente, amaba sus ojos, se fue acercando poco a poco hasta unir nuestros labios, era un beso lento, nuestras lenguas se encontraron y empezaron a jugar entre ellas, ¿Por qué teníamos que respirar para vivir? Nos separamos por falta de aire y nos quedamos mirando.

–Entonces... Nos vemos luego.– se despidió y asentí.

Noah me dió una última mirada y caminó hasta su auto, yo me quedé parada en la puerta con una sonrisa tonta.

¡Karen no, no y no!

Moví mi cabeza bruscamente y entré a la casa para ir a mi habitación y cambiarme. Me puse mi pijama y me acosté en mi cama, rápidamente caí en los brazos de Morfeo.

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¡Ho-holaaaaaaaaaaaaa!

Perdón por qué es un capítulo muy corto, pero es que he tenido una semana ocupada y pues se hace lo que se puedeeee, los amo.

Espero que se la hayan y se la estén pasando bien estas fechas, yo salí de vacaciones con mi familia y me enfermé brutal:(, pero bueno, eso no impide no traerles un capitulo chiquito pero con mucho amor.

No olviden seguir el Instagram de la historia bc ahí subo cosas de la historia, y pues no sé lo pueden perder, ok?

Ig: xpunteriaperfectax

¡Preguntas q no pueden faltar, eh-eh!

¿Cómo han estado?

¿Semana ocupada?

¿Les gustó el capítulo?

¿Algo que más odien en la vida?

¿Qué estudian o qué les gustaría estudiar?

¿Quien quiere q Noah y Karen estén juntos ya?

¡Fiiinnnnnnnn!

Nos leemos pronto.
-E