9
Wayar coloca la muñeca en una mesa y regresa a la habitación. Apenas entrando, lo ve raspar la cuerda. —Maldita sea, ¡¿y tú qué estás haciendo?! — El pirata grita dirigiéndose a él y Gulf jadea cuando el hombre agarra sus muñecas. Gulf deja caer el pendiente.
—¿Sabes cómo estoy? ¿Lo sabes? Estoy muy molesto. Demasiado molesto. Y ahora tú intentas escapar.
Él abre sus pantalones y Gulf presiona los ojos a cerrar.
—Qué, ¿no quieres mirar? Seguro estás acostumbrado a este tipo de cosas.
—De nada me sirve suplicar y no te daré ese gusto. — Gulf murmura.
El hombre sonríe con maldad y lo mira al rostro. —¿Qué hay del agujero por dónde orinas? ¿Tu lindo rey te ha follado por ahí?
Gulf abre los ojos y mira abajo. Asimilando dónde Wayar apunta su pene. —Ahí no. No se puede.
—¿Estás seguro?
—Por favor. — Gulf comienza a llorar.
—Dijiste que no ibas a suplicar.
—Por favor, por ahí no. Sangraré y podrías rasgarlo. Por lo que más quieras, no lo hagas.
—Pues yo quiero saber cómo se siente.
El chico niega y llora mientras el pirata se alinea en el orificio dónde una vez había un pene, pero Mew entra a la habitación.
—NO TE ATREVAS. — Grita, apuntando a Wayar con una espada.
Gulf mira sobre el hombro de Wayar y solloza su nombre. El pirata mira sobre un hombro con una sonrisa macabra.
—Pero qué tenemos aquí. El rey ha venido. ¿Cómo cruzaste las puertas de mi castillo?
—Hetlé no te pertenece. Jamás lo hará.
Wayar sonríe y abandona la cama. Mew revisa a Gulf desde su posición y suspira aliviado porque llegó a tiempo.
—Cuando te derrote, me divertiré mucho con tu Emperatriz. — Wayar desenvaina una daga. La rota entre sus dedos y la sostiene del pomo. —Lo follare frente a ti. Sus gritos llegarán hasta tu pueblo.
—No permitiré que eso pase. — Mew alza la espada al lateral de su rostro, agarrandola por abajo y por arriba. —Encontré mi felicidad, no dejaré que nadie me la quite ahora.
—Tierno. — Wayar corre hacia él con la velocidad de un Jaguar, incluso sube a la pared izquierda, dando tres pasos y comete un brinco giratorio. Durante, patea la espada de Mew e incluso oscila la daga. Afortunadamente, Mew se agacha y la daga solo corta el aire arriba de su cabeza.
Mew se endereza y le patea una rodilla, logrando retroceder al enemigo, sin embargo, Wayar mira arriba y corre hacia él oscilando la daga en todas direcciones. Mew las esquiva todas y lo apuñala en el costado.
El rey piensa que todo terminará ahí, pero al mirar arriba, Wayar está extremadamente molesto. Tanto que no siente el dolor.
Wayar azota su cabeza contra la de Mew y el rey jadea sin caer. Soportando el dolor sea como sea.
Wayar lo hace una segunda vez y Mew expulsa sangre por las fosas nasales. Aturdido.
Intenta resistir y sacar la espada, pero Wayar no le da tiempo y lo apuñala en el estómago.
—¡MEW! ¡NO! — Gulf grita jalando de la cuerda para ver si se rompe.
Mew apoya el mentón en el hombro de Wayar, agotado.
—Tu Emperatriz ha de estar decepcionada. ¿Ya estás cansado? Apenas estamos comenzando.
Mew arruga las cornisas de la boca aunque la sangre se cuele por sus dientes. —No, nosostros apenas estamos comenzando.
Tan pronto como dice eso, Gulf quebranta la soga y rodea a Wayar del cuello con ella. Al salir de la cama le tira la otra cuerda a Mew. Ambos tiran de la cuerda en diferentes direcciones. Cerrando un nudo en la garganta de Wayar.
Gulf tira tanto como puede. Jadeando.
—¡Malghditos! — El hombre intenta alcanzar con una mano a Gulf, mientras se sostiene de la cuerda con otra. No lo logra entonces cambia de mano.
Pero es imposible.
Wayar cae de rodillas.
Su rostro se torna morado al igual que su cuello.
Mew reune más de la cuerda y tira hasta sentir la herida en su estómago ampliarse. Hasta que Wayar se asfixia y cae muerto. Con los ojos fijos en algún punto irrelevante y la boca abierta.
Mew mira a Gulf. Ambos respiran agitados y el moreno suelta la soga. Los ojos del moreno duelen y queman, pero nuevas lágrimas ruedan por sus mejillas. —Sé que hice mal y sé que estuve mal. No te voy a pedir que me perdones. Solo, por favor, dejame explicarte. Quiero decirte la verdad.
—Solo quiero que me digas la verdad. ¡Que seas sincero conmigo…! Tan sincero como yo lo he sido contigo.
Mew corre hacia él y Gulf lo abraza con fuerzas. Mew también lo abraza y, por segunda vez, siente que ha logrado salvar a quién ama. Esta vez la muerte no le arrebató a su amado.
—Te diré la verdad cuando lleguemos al castillo. Lo prometo.
Más piratas llegan a la habitación y gritan por su capitán Wayar. Mew protege al moreno tras un brazo y extrae la espada del cuerpo de Wayar. Los seis tripulantes miran serios al rey. —Pase lo que pase, mantente detrás de mí. — Seguido que susurra eso, los seis tripulantes corren a ellos.
•••
Caligula destripa y degolla a todos los piratas en su paso. Grita con cada hombre que derriba y sigue matando, junto a los guardias del rey Mew. Algunos guardias reales caen, pero el resto venga sus muertes. En la guerra, no hay luto que dure hasta el mañana.
Calígula peina su cabello para atrás con la sangre de viles piratas. Ve a Mew bajar las escaleras junto a Gulf y sonríe por ellos. Ha logrado salvarlo. No sabe si llegaron tarde, pero Gulf luce bien. Eso basta.
—¡¿Terminaron con todos?!— Mew alza el tono desde las escaleras.
—SÍ, SEÑOR. TERMINAMOS CON TODOS. — Sus guardias gritan, alineándose justo detrás de Calígula. El engreído emperador los mira sobre un hombro y luego de regreso a ellos. No sabe dónde colocarse entonces permanece en su posición.
Mientras bajan, Gulf capta al bebé destrozado en las escaleras. Se abraza a su rey y oculta su rostro en su abdomen. Mew lo consuela diciéndole que ya saldrán de aquí.
—¿Él está bien? ¿Ese maldito lo hirió?— Calígula pregunta, desesperado.
—Por suerte no. Llegamos a tiempo. Pero Gulf nunca había matado a alguien. Tiene miedo.— Mew informa, comprendiendo y sintiéndose triste por su esposo.
Calígula también comprende, pero en lugar de decir algo motivacional dice: «Te acostumbrarás. Además, de no hacerlo estuvieras muerto.»
El rey niega la cabeza, pero le agradece por ayudar en la guerra.
—No es nada. Fue un placer.
•••
En el castillo, Derek cosió el vientre de Mew y lo vendó. Luego el emperador y la emperatriz yacían en la cama solos.
—Te quiero explicar todo, Gulf. Sería justo empezar por tu amiga. Ella,... — Mew exhala. —murió a manos de Imé por órdenes de mi madre. Antes de morir me pidió no decirte.
Mi madre no era una buena persona, Gulf. Era una serpiente. Hacía todo lo que estaba a su alcance para obtener lo que quería. No sé porqué llegó a tales extremos solo por ti y Lookjun, pero la detuve.
Ella abusó de mí cuando yo apenas era un crío solo porque padre era un borracho al que ya no se le paraba. Cuando se cansó de mí, engatusó al hermano mayor de Calígula. Cuando mi padre se enteró lo acusó de violación y mi padre lo mató. Calígula y yo éramos amigos cuando pequeños. Dos emperadores de pueblos lejanos.
Ella me quitó eso.
Ella siempre me quita algo.
Como si quisiera que fuera tan infeliz e incompleta como ella.
Gulf le acaricia una mejilla. Ambos se miran a los ojos. —Pero tú nunca serás como ella. No mientras me tengas a tu lado.
Ambos unen sus frentes y cierran sus ojos. —Me disculpo por pensar que tú le hiciste algo a Lookjun. También por no hablarlo contigo y solo irme–
—Descuida. Aprecio tus disculpas. De haber estado en tu posición también habría dudado de mí.
Gulf sonríe con debilidad y Mew también.
•••
Earth sale del lugar en el que trabaja despidiéndose de todos con una sonrisa, cuando Yeol se detiene frente a él con una sonrisa nerviosa. —Disculpa, cariño, mis horas de servicio han terminado.
—Lo siento, no estoy aquí por eso. Estoy aquí por órdenes del rey Mew. Solicita darte un trabajo en el castillo como amigo de La Emperatriz. Se te pagará lo mismo que a un guardia real y se te asignará alguien para las cosas que no pueda hacer por sí solo.
—Espera, ¿el rey quiere que sea amigo de La Emperatriz?
—Así es.
—¿P–Para cuándo sería eso?
—¡Hoy!
Yeol contesta eufórico y lo agarra del hombro para llevárselo consigo. Earth tartamudea nervioso hasta decir que la oferta le parece genial.
•••
En la mañana
Earth está siendo arreglado y preparado en un dormitorio. Frente un espejo. Le colocan un hermoso vestido añil, una bufanda azul claro y un collar dorado.
Ni él mismo cree lo bien que modela la ropa en el espejo. —Cielos, esto es demasiado, incluso para alguien como yo. — Se coloca de lado y observa su espalda.
*N/A: Earth😍💖🤭*
—Si me permite decir: luces espléndido. — Yeol dice en la puerta y el chico alza una ceja en el reflejo. Orgulloso de sí mismo.
Dentro de unos minutos, es dirigido a la habitación de Gulf quién permanece en la cama como reposo.
Earth tiembla de los nervios. Teme no caerle bien a La Emperatriz, pero está dispuesto a esforzarse.
—Emperatriz, — Yeol llama en la puerta y los cuatro sirvientes se dispersan para revelar a Earth. —este es Earth. El rey lo ha asignado como su confidente más cercano.
Gulf observa curioso a Earth y el mismo adelanta tres pasos hasta inclinarse. —Buenos días, Emperatriz, espero que nos llevemos bien.
Gulf sonríe. —Buenos días. Puedes venir a sentarte, ¿gustas un té? ¿O quieres dar un paseo afuera?
«Tiene mucha energía. ¿Normalmente es así?» Piensa Earth. Alza el rostro para responder, pero ahoga un gemido cuando Gulf ya está frente a él con una sonrisa. Demasiado entusiasmado por tener alguien con quién hablar.
—Un paseo sería lindo, Emperatriz. ¿Pero no está usted muy cansado? Me contaron los sucesos de ayer--
—No se preocupe. No estoy cansado. Solo me gustaría tomar el sol.
•••
Ambos dan un paseo por alrededor del castillo hacia el jardín. Custodiados por dos guardias reales alejados para que hablen entre ellos.
—La verdad sí tengo miedo. Aunque me defendí y ayudé al rey, asesiné a alguien. ¿Eso me convierte en una mala persona?
—Oh, Emperatriz, por supuesto que no. Usted solo luchó por su vida. Y por la de su esposo el rey. Debería estar orgulloso.
—¿De verdad?
—Así lo creo, Emperatriz.
—Oye, si seremos amigos, llámame por mi nombre. — Gulf corta una orquídea con sus dedos y la coloca tras la oreja de Earth. Earth intenta ver la orquídea con sus ojos, pero sonríe tierno.
—Gracias por confiar en mí, Gulf.
Calígula llega corriendo hacia ellos con un ramo de rosas cuyos pétalos no han resistido la velocidad.
—¡Emperatriz! Mira lo que te he traído. Reunidas con amor desde el fondo de mi corazón. Porque aunque el rey y yo somos amigos, puedes tenerme como amante. — Calígula sonríe todo engreído. Luego mira a Earth. —¿Y quién es este? ¿Por qué es guapo también?
—Y--Yo soy el nuevo confidente de la emperatriz. Mm, ¿no te parece descortés querer al esposo de alguien más?
—El amor es amor, pulpo deforme.
—¡¿Perdón?!
—Chicos, chicos, — Gulf ríe nervioso y acepta el ramo de rosas dañado. —es un bonito detalle de tu parte, Calígula. Gracias. Pero las veré como un acto de amistad.
—Dicen que el amor no es fácil, entonces esperaré. — Calígula responde, infinitamente enamorado y testarudo. Le vuela un beso a Gulf y pregunta por el rey con una voz gruesa.
—Él está bien. Aunque no quiere que trabaje a su lado incluso cuando tiene el abdomen vendado. Me preocupa.
Earth también se preocupa.
Calígula también, solo que finge no hacerlo. El silencio los acapara. Consternados.
•••
Calígula llega a su pueblo tarde en la noche y pasando unos callejones, un grupo grande de mujeres lo adentra a un callejón. Dos mujeres lo retienen contra una pared y otras dos de las manos.
—¡¿Qué creen que hacen?! Soy su emperador y gobernante.
—¿No nos recuerdas? Somos todas las mujeres que violaste en nuestras bodas. ¡Pero esta venganza es de alguien que dejaste viuda en el día de su boda! — Contesta una de las mujeres que lo retienen contra una pared.
Él se retuerce, pero no hay cómo escapar.
La viuda aparece desde el callejón a la izquierda sosteniendo un bastón con un águila como cabeza.
—Oigan, oigan, ya no lo haré. He dejado de ir a las bodas. Lo siento. ¿Quieren votos? ¿Eso es lo que quieren?
De las seis mujeres dos le bajan los pantalones y la viuda posa detrás de él.
—Les juro que ya no lo hago. Les daré votos. Les daré voz. Sí. Lo que ustedes quieran.
La viuda alza el bastón con ambas manos. Tiene los labios secos y bolsas negras bajo sus ojos. Su cabello ha perdido vida y cuelga como hilos sudados de su frente. —Ya es muy tarde. — Jura antes de encestar el bastón en Calígula.
*N/A: No se esperaban eso con Calígula, I Know. 😱 Bueno, chicos & chicas, creo que añadire dos caps más y ya. Hasta sentir que la historia esté completa. 💖 Ustedes me dicen, todo depende de cómo la sientan también y si quieren que continúe. Nos vemos, les agradezco muchísimo el apoyo que le han dado a esta historia. Sus comentarios me motivan a seguir y sus votos aún más, muchísimas gracias. Tengan un buen día🙌🏾✨*
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