Yoongi volvió a dormirse y no despertó hasta que le llegó el aroma a pastel de mandarina que le hizo recordar los desayunos de su infancia. Abrió los ojos lentamente, sintiendo una mezcla de hambre y nostalgia. Frente a él, sobre una pequeña mesa, había un plato con una rebanada de pastel y un vaso de leche tibia.

— Buenos días, Yoongi —dijo una voz suave desde la puerta. Era una mujer de pelo blanco y largo, con una expresión serena y amable—. Soy la señora Parker. He oído que has superado las pruebas de mis pequeños.

Yoongi asintió, aún tratando de procesar todo lo que había aprendido.

— Sí, lo he hecho. Solo quiero asegurarme de que Jimin esté bien.

La señora Parker se acercó y le tendió una mano que portaba un pedazo de tarta.

— Jimin está a salvo. Todos nosotros cuidamos de él, a nuestra manera. Pero veo que tú también lo amas profundamente.

Yoongi aceptó el pedazo pero en ningún momento probó un pedazo por el miedo a lo que sabía que sería capaz de hacerle.

— Haría cualquier cosa por él, lo amo.

La señora Parker sonrió con dulzura mnetras acariciaba su cabello delicadamente.

— Lo sé y por eso estás aquí. Tómate el tiempo que necesites para conocernos y si eres digno de confianza, podrás verlo.

Yoongi asintió con una sonrisa que mostraba sus encías. Sabía que la señora Parker lo estaba ya probando por lo que debía ser cauteloso para enfrentarla. Mientras fingía probar el pastel, pensaba en las alternativaspara esconder el pastel para que no se de cuenta de nada.ç

Una vez lo consiguió tirar todo sin ser visto sguió fingiendo haberlo comido mientras que la señora Parker limpiaba la habitación, se notaba que uno de sus toc era la limpieza y el orden extremo. Cuando vio que Yoongi no tenía más tarta sonrió ampliamente.

— Eres muy inteligente. ¿Cómo lo supiste?

— Me lo entregarte con los guantes, si fuera un pastel que no se encuentre envenenado solo habrías usado un par de guantes y no uno doble que te hizo volver a lavarte las manos y cambiarte los guantes nuevamente.

— Es muy observador señor Min, si así podré estar alerta por si Jimin me necesita.

— Bueno, ¿qué quiere de recompensa?

— Su historia— Yoongi no apartó la mitrada de la señora Parker, debía mostrarse seguro de sus movimientos para que no lo consideraran alguien débil.

— ¿Sabías que Jimin tiene aversión a las mariposas? Muchas personas lo ven como una debilidad por esta razón, pero yo lo interpreto como el resultado de una fobia desarrollada. Él aprecia la belleza de cada instante y la delicadeza de su entorno. Las mariposas son criaturas extraordinarias en el reino animal. En nuestra casa en Busan, teníamos un pequeño páramo donde solíamos ir con nuestra madre; ese lugar era nuestro refugio secreto en momentos difíciles en casa. Nadie más lo conocía, excepto nosotros, pero un día todo cambió; mamá había tenido una pelea con papá y se había ido de casa. Llevaba alrededor de cinco días fuera, sin que mis hermanos ni él la vieran. Un día, al regresar de la escuela, encontramos a papá con un gran bote lleno de mariposas de colores que rápidamente capturaron nuestra atención. Nos permitió jugar con ellas, siempre que le respondiéramos a cada una de sus preguntas. Nosotros, de manera inocente, respondimos a todas sin darnos cuenta de que entre ellas estaba la pregunta sobre el paradero de nuestra madre.Cuando nos permitió ir a jugar con las mariposas en nuestra habitación, nos llenamos de alegría. Sin embargo, deseábamos compartir ese instante con mamá, así que decidimos ir a buscarla. Fue entonces cuando nos dimos cuenta de que él ya la había encontrado, con signos de golpes y su cuerpo lleno de sangre nuestra madre estaba inmóvil en el suelo, muerta. El bote de mariposas se cayó de nuestras manos dejándolas libres; ellas se posaron en el cadáver de nuestra madre comenzando a comerlo.Fuimos a casa llorando por aquella escena, y al pasar, nos encontramos con nuestro tío, quien estaba bebiendo en el sillón del salón al ver el horror en nuestra cara dibujado se rió y nos dijo que a veces es necesaro que las mariposas coman sangre para mantenerse bellas. De ahí, nos pidió que le preparáramos algo de comer pronto, ya que él fue quien alimentó a las mariposas personalmente y ese esfuerzo le había dado hambre. Enseguida fuimos a la cocina, y comenzamos a cocinar, entonces vimos ahí el matarratas en la despensa y pensamos en ayudar a mi tío en descansar eternamente. Desde ese entonces Jimin no puede ver una sola mariposa.

— Él ha pasado por mucho, ¿cómo consigue seguir?

— No lo hace, sino nunca nos hubiéramos conocido.

Yoongi se quedó pensativo viendo como salía de la habitación la señora Parker Una vez que se fue vio como las hormigas que entraron atraídas por el dulce sabor de la tarta, todas estaban muertas; ahí entendió que esas pruebas serían de vida o muerte.