Las presas:


Los gemelos se fueron momentos después dejando a Yoongi bastante cansado emocionalmente, por lo que se durmió con el olor de Jimin en esa manta. Sus sueños con la vida ideal siempre estaban relacionados con Jimin, si él debiera elegir una felicidad absoluta esa era estar al lado de Jimin, amándolo y cuidándolo. Un ruido lo despertó sin previo aviso, no sabía a qué se debía por lo que trató de mantenerse alerta todo el tiempo que pudo hasta que el sonido de sus cadenas cayendo lo alertaron.

Sus pies estaban sueltos y la puerta abierta, viendo a todos los lados salió lentamente y pudo verlo. Se encontraba en un edificio lleno de habitaciones similares a las suyas, conforme pasaba por cada una de ellas veía similitudes con la suya con la única salvedad que en estas había más de una persona por habitación. Todos ellos parecían bastante demacrados y con miedo, Yoongi no entendía qué era lo que estaban haciendo ahí o con qué fin estaban ahí pero sentía curiosidad por abrir alguna de las puertas,

Llegó a una donde ambas personas atadas de sus tobillos a las camas estaban comiendo pastel de mandarina, todo parecía estar bien hasta que comenzó uno a convulsionar mientras que el otro tomó el plato de la tarta y lo clavó en su cabeza matándolo en el acto. En ese momento recordó la tarta de la señora Parker, siguió adelante hasta que encontró una habitación abierta. En esta las paredes estaban teñidas de sangre y extremidades humanas esparcidas por diferentes lados. El hedor a sangre y la frescura de la carne le hicieron ver que esa carnicería había sido reciente.

Con miedo comenzó a correr sin una dirección fija queriendo escapar de lo que había causado esa carnicería humana. No tratando de encontrar una salida al exterior sino tratando de encontrar con desesperación a Jimin para que nada le pasara. Estaba cerca de la única puerta que era diferente al resto cuando una fuerte descarga lo paralizó tirándolo al suelo, una cabellera naranja pudo distinguir antes de escuchar un batiburrillo de conversaciones entre susurros que trataban de dar con el culpable de que él hubiera salido de la habitación. Aunque hubiera deseado entender con claridad lo que decían o enterarse de quien lo había liberado, no pudo seguir luchando contra sí mismo por lo que cayó inconscientemente en un sueño profundo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top