Capítulo VIII: Matar a un rey.

Matar a un rey no era una cosa sencilla, desde luego. Y mucho menos con un Pridelands que le amaba en cantidad.

Pero Kion sabía algo que los demás no sabían. Su padre se había vuelto irracional y de loco juicio. Había intentado hablar muchas veces con él. Pero él ya no era el mismo de antes.

Kion no sabía en quién debía confiar para aquello, por lo que había optado hacerlo solo. Por mucho que le costara, las únicas animales a las que les pediría ayuda estaban atrapadas en un enorme socavón.

Debía matar al rey, al hijo de Mufasa. Más que eso: a su propio padre. Se había planteado algo: o Kopa o Simba. Y Kopa había ganado con creces.

Ya no sabía que otra cosa hacer para salvar a Kopa y a Kiara. Ahora estaba solo con el rey, podría hacerlo en cualquier momento.

Se acercaba la hora de la cena, la hora que él mismo había querido acordar para hacerlo. Debía salvar a su familia...

Entró en la Roca del Rey con las garras ya sacadas, para estar previsto por si el Rey se abalanzaba contra él. Vio a Simba enfrente de una gacela sangrienta recién cazada.

En frente de él, ambos empezaron a comer. Los momentos previos a la catástrofe siempre son de calma. Kion se mentalizaba. Estaba a punto de conseguirlo, cuándo una voz interrumpió sus planes.

— ¡Simba, Kion! — era el alegre Zazú, con una expresión indescifrable, entre alegre y alarmado — ¡Es el socavón! ¡Fuli y Kiara! ¡Las han rescatado!

Zazú se fue enseguida de allí, alegre, y Simba quiso ir a por ellas, pero Kion le detuvo. Era un vis a vis. Uno contra uno. Lo mataba ahora, o no lo mataba nunca.

— Aparta, hijo. Tengo que verla...

— Espero que te despidieras bien de ella — Kion se abalanzó contra su padre, pero éste le zafó con un zarpazo en la cara.

Él cayó de espaldas, y se quedó tumbado, a la espera. Simba se acercó, y en cuánto lo tuvo a tiro, le clavó toda la zarpa en la cara y los ojos.

Un rugido no muy fuerte se oyó por las paredes, retumba en el eco, seguido del desplomo del Rey.

Kion le vio la cara ensangrentada, y el cuerpo sin movimientos de respiración y se alarmó. No esperaba verle así, con un final tan trágico, con los sesos casi saliendo.

Sin darse tiempo así mismo a recapacitar, salió corriendo al lugar lugar del socavón, para ir a por Fuli y Kiara, mientras pensaba.

<< ¿Había hecho bien? ¿Habría privado a Kiara de una despedida? ¿Le pillaría Zazú? ¿Fuli y Kiara aceptarían lo que había hecho? >>

Lo primero que vio en el socavón, fue a aquellas dos animales a las que quería más que a nada.

— ¡Kion! — era su hermana.

— ¡Aquí! — era su chita.

Mientras las dos corrían a abrazarle, él sólo podía pensar en lo que había hecho.

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Hechos los reencuentros, llegó el momento en el que el inoportuno de Zazú inició su huida.

— Voy a ver dónde está el rey. ¿No ha venido contigo, Kion?

— Ah, no, se ha quedado en la Roca del Rey... seguro que ahora viene, no hay de qué preocuparse.

— Iré a echar un vistazo.

Kion se alarmó. Zazú volaba rápido, y él habría querido explicarlo todo con calma a sus chicas. Pero ahora debían correr.

Los cabos se ataban fácil, y no había tiempo de vacilar. Se giró hacia ellas en cuánto Zazú hubo emprendido vuelo.

— No tenemos tiempo, chicas, hay que salir de aquí. Seguirme, os lo contaré todo después... lo prometo...

— ¿Kion, qué te pasa? — Kiara le miraba apenada, pues no estaban al día de por qué Kion tenía aquellas pequeñas ojeras en el rostro.

— Kion, sí podemos ayudarte... — Fuli se preocupaba también por él, a pesar de acabar de salir del socavón.

— Sí. Sí. Podéis ayudarme — a Kion se le acababa el tiempo y la paciencia — Fuli, bésame. Kiara, no me confía en mí. Tenemos que salir de aquí, seguidme, os pondré al día, ¡no nos queda tiempo!

Las dos estaban algo confusas, pero decidieron confiar en la palabra de un asesino, aunque no tenían conocimiento de esto último. Ni siquiera Kion lo había pensado.

Se fueron corriendo del lugar, pero pronto empezaron a oír gritos por todos lados y de todas las direcciones posibles. Kion sabía lo que aquello significaba: iban a por ellos.

Las azuzó para que corrieran más rápido, y a que Fuli se les adelantara.

— Ésos gritos... ¿qué habrá pasado?

— Fuli, adelántate. Si no llegamos en 10 minutos, ve tú sola a buscar a Kovu, Vitani y Kopa. No nos esperes más de lo necesario y ni se te ocurra volver hacia atrás a por nosotros — ignoró la pregunta de Kiara, pues Kion estaba concentrado.

— ¿Adónde vamos? Por aquí sólo se va a un sitio, y es...

— Las Lejanías. He prometido que os lo explicaría todo, pero si me pillan, no podré hacerlo. Por eso te mando, Fuli — la miró fijamente — Sí nos pillan, que ellos te cuenten todo... aunque desconozcan algunso detalles...

Fuli decidió asentir y fue corriendo. Cuándo desapareció de su vista, Kion se giró hacia Kiara. Detrás de ella vio, a lo lejos, a una manada de cebras ir  a por ellos, gritando, algunas hasta con lágrimas en los ojos.

— Kiara, adelántate, y escóndete.

— No pienso abandonarte.

— Vienen a por mí, no a por ti. Pensarán que estáis conmigo, así que vete, alcanza a Fuli, y no dejes que nadie te vea — Kion estaba siendo insensible, pero en ése momento lo habría dado todo por su hermana.

— Kion... no podré esconderme y alcanzar a Fuli en los 10 minutos que hay de plazo... no llegaré a tiempo...

— No tienes que llegar a tiempo. Tienes que llegar. Le he dado un tiempo a Fuli para que no se quedara a merced de los animales que nos buscan y se fuera adentro, a salvo en las fronteras. Si llegas, métete directamente y no me esperes. No hay nadie en Las Lejanías que pueda amenazarte, están todos en las tierras posteriores a éstas.

— ¿Dónde Kovu y Vitani se criaron, allí, están los otros animales?

— Sí, ahora prácticamente hay comida y agua, pero debes estar en Las Lejanías. Hubo un socavón que separó remotamente ésas tierras de las nuestras. Ahora, ¡corre!

Mientras Kiara se adelantaba, Kion giraba para que las cebras lo persiguieran, y así poder salvarlas.

Se dio cuenta mientras cambiaba y tomaba otra dirección, de que aquella noche, no se había comportado cómo de costumbre. Tenía la cabeza y la sangre frías. Estaba siendo y pensando cómo el asesino que ahora era.

En fin aquí está lo prometido ¡!
He actualizado todas mis historias abiertas y renovado las bios

Espero que les guste
Cuídense ;)

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