"Hola, Xiongzhang", saludó Lan Wangji mientras se sentaba.

"Wangji", Lan Xichen sonrió cálidamente. "¿Cómo estáis tú y el Joven Maestro Wei?"

Por un momento, Lan Wangji pareció brillar de felicidad ante la pregunta de su hermano. Aunque Lan Xichen y Wei Wuxian no habían hecho ningún plan concreto sobre si interferir o no con Meng Yao, las conversaciones que mantenían parecían mejorar mucho su relación.

"Un poco sobrecargado de trabajo", respondió finalmente. "Desafortunadamente, hemos recibido algunas noticias preocupantes".

"¿Oh?"

"Al parecer, cuando Sizhui y los demás utilizaron el invento de Wei Ying, fueron algo descuidados", miró hacia arriba. "Existe la posibilidad de que Wen Ruohan también esté dentro de la simulación".

"¿Wen Ruohan?" Lan Xichen jadeó, sus ojos se abrieron de par en par. "¿Qué tan seguro estás?"

"...Wei Ying tiene algunas dudas", Lan Wangji frunció el ceño. "Su yo más joven lo insinuó fuertemente mientras nos hablaba, pero, como no sabemos realmente lo que ocurre en esa dimensión, es... difícil saber si tiene razón".

Ya era bastante malo cuando el joven Wei Wuxian reveló que la gente dentro de la simulación no quería salir. Ahora, la posibilidad de crear un mundo mucho peor se había vuelto excepcionalmente alta.

"¿Tienes alguna forma de confirmarlo?"

"Wei Ying cree que conoce una forma de entrar en la simulación. No podremos hablar con los observadores, pero cree que podremos verlos", hizo una pausa. "... ¿Te gustaría unirte a nosotros?"

Y dejar la reclusión, no se dijo.

Por un momento extraño y aterrador, Lan Xichen realmente lo consideró. Dejar la reclusión -reunirse a la sociedad sin que sus hermanos jurados le persiguieran- y ayudar. Volver al trabajo. Ofrecer ayuda.

Sus manos comenzaron a temblar.

¿Irse ahora? ¿Cómo podría hacerlo? ¿Cómo podía siquiera considerar eso cuando todavía no entendía qué había salido mal? Sabía que no debía confiar en  ̶A̶-̶Y̶a̶o̶ Jin Guangyao, pero no sabía cuándo debía dejar de hacerlo. No tenía ni idea de cuándo un poco de confianza se convertía en demasiado.

¿Cómo podía confiar en sí mismo para tomar la decisión correcta ahora?

(De todos modos, no le necesitarían).

Pero aún no había convencido a Wei Wuxian para que ayudara a Meng Yao de la otra dimensión.

Pero, ¿era realmente lo correcto?

Xichen se estremeció cuando sintió que una mano cubría sus temblores, y levantó la vista para encontrarse con los ojos de su hermano.

"Lo siento. No debería haber preguntado", Lan Wangji frunció el ceño.

"No. No, tenías razón al hacerlo. Yo... simplemente no creo estar preparado todavía".

Lan Wangji asintió una vez en señal de comprensión.

"...Espero que el otro Wei Wuxian esté equivocado", dijo finalmente Lan Xichen.

Otro asentimiento, "Yo también".

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Cuando la simulación comenzó de nuevo, la energía optimista de los observadores aún no se había desvanecido.

Y la simulación reforzó esa mentalidad. Después de días de oscuridad, fuego y sangre, las montañas frescas y nítidas, incluso si no podían sentir el viento, fueron una bendición.

Sonriendo brillantemente, Jiang Yanli hizo un pequeño giro, observando las montañas en su totalidad.

(Las mejillas de Jin Zixuan se pusieron escarlatas al verlo).

"¿Es aquí realmente donde vive Baoshan Sanren?" Preguntó Jiang Cheng, mirando hacia un camino empinado.

Frunciendo el ceño, Lan Wangji miró a su alrededor. Según el entorno y la vida silvestre allí, parecía que estaban en algún lugar cerca de Yiling. ¿Era ahí realmente donde estaba la montaña de Baoshan Sanren?

Por otra parte, casi no tenían información sobre el inmortal; esta montaña era tan probable como cualquier otra.

(Sin embargo, Wen Qing, quien también reconoció el follaje, almacenó esa información en el fondo de su mente).

Detrás de Jiang Cheng, Wei Wuxian comenzó a reírse tranquilizadoramente y respondió: "Definitivamente es donde vive. ¿Por qué sigues dudando de mí?

'Porque algunas de las cosas que dijiste no cuadran, Wei-xiong ', pensó Nie Huaisang, sonriendo exteriormente.

"¿Por qué te mentiría? ¿Para que puedas ser feliz por unos días solo para chocar con una decepción aun mayor?

Sin embargo, Huaisang no tuvo respuesta a eso. Después de todo, Jiang Cheng había recuperado su núcleo; no había otras posibilidades.

"Eso es todo", decidió Wei Wuxian. "Ven y déjame taparte los ojos".

'¿Cubrir sus ojos? ', se preguntó Wen Ruohan. ' ¿Tienes algo que esconder? '

¿O era solo parte de las instrucciones que su madre le había dejado?

Jiang Cheng se giró, permitiendo que Wei Wuxian envolviera su cabeza con una tela, bloqueando su vista. Entonces, Wei Wuxian le entregó un bastón.

"Camina despacio", aconsejó. "Aquí no hay bestias. Estarás bien. Recuerda, no puedes quitarte la venda de los ojos aunque te caigas. Nunca.... Está prohibido. No podemos molestar al gran maestro ni a los otros mayores. Lo que sea que te digan que hagas, tienes que hacerlo".

Cuanto más hablaba, más asombrado se sentía Jin Guangshan. Wei Wuxian tenía vínculos con toda una cultura llena de gobierno y reglas independientes, a las que nadie más podía acceder. ¿Cómo diablos había estado satisfecho siendo constantemente degradado como un "hijo de un sirviente" por Madam Yu?

(A menos que estuviera mintiendo).

Pero, ¿de qué otra manera podría el heredero de Jiang haber recuperado su núcleo?

Aclarándose la garganta, Wei Wuxian concluyó: "Y no olvides la parte más importante. Si te preguntan quién eres, debes decir que eres el hijo de Cangse Sanren. No puedes revelar tu verdadera identidad."

"¡Okey!"

Madam Yu se estremeció levemente, momentáneamente furiosa por el hecho de que su hijo iba a afirmar que Cangse Sanren era su madre. Sin embargo, un momento después, esa ira se desvaneció.

Si Jiang Cheng afirmaba ser Wei Wuxian, entonces Wei Wuxian nunca podría pedirle algo a Baoshan Sanren. Ella pensaría que estaba mintiendo sobre su identidad.

Wei Wuxian había renunciado a su única oportunidad de un milagro para su hijo.

"Estúpido, estúpido chico" susurró, incapaz de ocultar la gratitud en su voz.

Wei Wuxian se inclinó hacia adelante, luego dudó, su mano flotando justo por encima de Jiang Cheng. Después de una pausa momentánea, se obligó a moverse de nuevo, apretando el hombro de su hermano y empujándolo un poco por el sendero.

"Adelante, tendrás que completar el viaje por tu cuenta. Te esperaré al pie de la montaña".

Jiang Cheng asintió una vez y luego comenzó a caminar por el sendero.

Mientras la mayoría de los observadores prestaban atención a Jiang Cheng, Lan Wangji, en cambio, centraba sus ojos en la expresión de Wei Wuxian. A medida que Jiang Cheng subía más y más por la montaña, un millón de emociones indistinguibles pasaban por el rostro de Wei Wuxian.

Wangji se acercó, deseando poder hacer algo para ayudar.

Finalmente, Wei Wuxian se dio la vuelta y caminó en dirección contraria.

"Gracias, A-Xian", susurró Jiang Yanli.

"¡Siete días después!" declaró Lan Jingyi con entusiasmo.

Wei Wuxian esperaba ansiosamente al pie de una montaña, empujando la tierra con un palo. Tenía unas ojeras terribles y su mano parecía temblar ligeramente.

A pesar de ello, Jiang Cheng no pudo evitar sentirse un poco mareado. ¡Su núcleo estaría de vuelta ahora! Wei Wuxian estaba claramente cansado después de haber esperado siete días, pero pronto todo se solucionaría. La llamada "Masacre del Muelle del Loto" había terminado. Ahora, con su poder y el de Wei Wuxian añadido a la mezcla, su victoria era inevitable.

"...Digamos", comenzó Huaisang, "siempre me imaginé que Wei-xiong empezaría a utilizar su cultivo demoníaco durante una situación de gran estrés. Cuando comenzó la Masacre del Muelle del Loto, supuse que sería eso, pero, claramente, estaba equivocado."

"¿Supongo?"

"Por supuesto, por supuesto. Pero entonces... ¿qué crees que le motivará?"

"...Tu teoría tenía mérito", admitió Lan Qiren. Al principio, había sentido que después de que salieran tendrían que pasar cada momento despierto trabajando activamente para evitar que Wei Wuxian inventara el cultivo demoníaco. Ahora, incluso Lan Qiren sabía que ese no era el caso.

Cuando Wei Wuxian había prometido no usar el cultivo demoníaco después de rescatar a los conejitos, lo había dicho en serio.

Sin embargo-

"La venganza es una poderosa fuente de tentación", añadió Lan Qiren. "Además, la Masacre tuvo lugar en una sola noche. Es imposible inventar algo tan rápido. Esto es más lógico".

Nie Huaisang hizo un ligero encogimiento de hombros de aceptación, reconociendo el punto del hombre.

Una sonrisa de satisfacción apareció en el rostro de Nie Mingjue al recordar el arma que Wei Wuxian estaba a punto de darles. Era poco ortodoxo, ciertamente -y algo poco ético, teniendo en cuenta el uso de cadáveres-, pero, después de Muelle Loto, a nadie le importaba.

Una sonrisa de impaciencia se extendió por el rostro de Jiang Cheng.

Cuando Wei Wuxian empezó a hacer otro círculo en la tierra, oyó un crujido.

Había algo allí.

Lan Wangji se levantó, preparándose inconscientemente para responder en caso de que una amenaza atacara a Wei Wuxian. Sabía que no podía interferir, pero la adrenalina que corría por sus venas permanecía.

"... ¿Tal vez haya vuelto?" Esperaba Jiang Cheng.

Wei Wuxian escudriñó a su alrededor, pero no pudo ver nada inusual en la gruta.

"¿Un animal?" Lan Xichen sugirió, aunque incluso él sabía que era optimista.

La simulación no les había mostrado nada irrelevante hasta el momento, y parecía que eso iba a continuar.

Pronto pudieron oír cómo la respiración de Wei Wuxian se aceleraba. En combinación con la oscuridad bajo sus ojos, la forma de Wei Wuxian comenzó a parecerse a la de un animal acorralado.

Algo se movió detrás de él.

Una sombra golpeó su pecho.

"¿Qué...?"

Wei Wuxian salió volando hacia atrás y se estrelló contra un árbol. Se desplomó en un montón, tosiendo sangre sobre sus ropas manchadas de tierra.

Su atacante, Wen Zhuliu, se detuvo, con los ojos abiertos por la sorpresa.

"Wei Ying", susurró Lan Wangji, corriendo a su lado.

Wei Wuxian se apresuró a ponerse en pie.

Una espada le atravesó por detrás.

Jiang Yanli gritó.

Se desplomó en el suelo, con la cara sonriente de Wen Chao detrás de él.

"¡Wei Wuxian!" Jiang Cheng gritó.

Los líderes Jiang, Lan y Nie se quedaron boquiabiertos ante la escena.

"¡A-Li!" gritó Jin Zixuan, viendo cómo su prometida caía de rodillas. Volvió a gritar su nombre, pero ella no pudo oírlo porque Jiang Cheng podría estar bien ahora, pero su hermano acababa de ser empalado y ahora...

Wen Chao se rio, "¿Qué? ¿Ya estás de rodillas?"

'Donde debería estar', pensó Wen Chao alegremente, volviéndose hacia su padre para animarlo. Sin embargo, ni Wen Ruohan ni Wen Qing le prestaban atención. En cambio, miraban fijamente a Wei Wuxian.

'Su núcleo no estaba roto'.

En el pasado, cuando Wen Zhuliu rompía un núcleo, los llevaban a ver cómo se rompía. Wei Wuxian era el centro de la simulación - no se saltaría eso. Ahora, era totalmente posible que Wen Zhuliu simplemente no hubiera utilizado su mano para fundir el núcleo. Para la mayoría de los observadores que apenas le conocían, esa era la conclusión obvia.

Sin embargo, para las dos personas presentes que conocían a Wen Zhuliu lo suficientemente bien como para ver la conmoción que había aparecido en su rostro, esa no era una explicación razonable.

Justo cuando intentaba levantarse, Wei Wuxian tosió un océano de sangre. Le dieron una patada en el suelo. Debilitado, Wei Wuxian temblaba y jadeaba, incapaz de volver a levantarse.

"¿Qué pasa? ¡Lucha! Pensé que se suponía que eras bueno".

"¡Le has tendido una emboscada!" Gritó Jiang Cheng. "¿Cómo te atreves?"

"¡Alguien como tú no vale la tierra que pisa!" Jin Zixuan siseó.

"Wei Wuxian siempre será mejor que tú", gruñó Nie Mingjue.

Justo cuando Wen Chao estaba a punto de responder, sintió que su alma abandonaba su cuerpo incorpóreo.

'No pueden hacerte nada', se recordó a sí mismo. 'No hay razón para tener miedo'.

Y, sin embargo, no se atrevió a moverse. Porque, arrodillado junto a la ilusión de Wei Wuxian, Lan Wangji lo miraba con un odio que lo consumía todo.

Una oscuridad parecía rodear al segundo jade, sólo rota por el penetrante brillo de sus ojos dorados. Todo lo que Wen Chao podía hacer era temblar como un animal asustado bajo la mirada de aquel ser.

Lan Wangji hervía de rabia.

"¡Mocoso!" La simulación de Wen Chao se burló. "¿No diste bastantes saltos en la cueva de Xuanwu de la Matanza? ¿Has acabado con un solo golpe? ¡Sigue! ¡Sigue saltando! Muéstrame lo arrogante que eres".

La repugnancia se pintó en todos los rostros.

Entonces, la oscura nube que rodeaba a Lan Wangji se convirtió en un abismo que lo consumía todo.

Xichen se estremeció, "Wangji-"

"¿Q-qué?" Wen Chao tartamudeó. "Es un fugitivo. Yo no... Estoy haciendo.... ¡No me mires así! Cuando salgamos, le diré a mi Wei Wuxian que..."

(NT: No hay error de traducción si dice "Mi Wei Wuxian")

"No digas su nombre".

La mandíbula de Wen Chao se cerró de golpe.

En silencio, Jin Guangshan se acercó para asomarse al derrumbado y herido Wei Wuxian, disfrutando de su visión del tembloroso muchacho.

"¿Dónde está Jiang Cheng?" preguntó Wen Chao.

Aparte de la pesada respiración que abandonaba su cuerpo, Wei Wuxian permaneció en silencio.

"¿Qué? ¿No quieres hablar?", se rio. "No puedes salvarle aunque te quedes callado. Ahora mismo, Jiang Cheng no es más que un desperdicio de espacio, no mejor que el ganado".

Madam Yu gruñó a la defensiva.

"El Clan Yunmeng Jiang está acabado".

Aquí, finalmente, Wei Wuxian levantó la vista, mirando a los Wens reunidos.

Poniendo los ojos en blanco, Wen Qing apartó la mirada de su extasiado segundo joven maestro. Incluso ignorando la falta de moralidad de sus afirmaciones, sabían a ciencia cierta que lo que Wen Chao había dicho no era cierto.

El Clan Yunmeng Jiang todavía existía en el futuro; era el Clan Wen el que había desaparecido.

"¿Qué pasa?" Preguntó Wen Chao. "Tus viejos maestros se han ido. Deberías mover la cola e inclinarte ante los nuevos".

Con entusiasmo, Wen Chao asintió para sí mismo. Esto era lo que estaban intentando hacer; esto era lo que pasaría una vez que salieran de la simulación.

"Wen-gongzi~" Wang Lingjiao gimió: "¡Rápido! Córtale la mano. Todavía me debe una de esas!"

"Tú..."

"¡Bruja despreciable!"

"No, no, no, no nos apresuremos", decidió Wen Chao.

Un gruñido bajo comenzó a escapar de la garganta de Lan Wangji.

Mientras tanto, Wen Zhuliu se quedó a un lado, mirando su mano con confusión.

Y sólo tres personas pensaron en mirar hacia él.

(Nie Huaisang, Wen Qing y Wen Ruohan se quedaron mirando la Mano Fundidora del Núcleo, observando la indudable confusión en el rostro del hombre. Había intentado romper el núcleo de Wei Wuxian).

(Y había fracasado.)

(¿Por qué?)

Ajeno a los pensamientos que corrían por su guardaespaldas, el simulado Wen Chao tarareó un poco y continuó: "Sí, es cierto. Nos ha llevado mucho tiempo encontrar al mocoso, no nos precipitemos".

Jiang Cheng gruñó.

"Cortarle la mano hace que sangre demasiado. Si después muere, ya no será divertido".

"¡¿Qué piensas hacer?!" Lan Wangji gritó.

Ni una sola persona se sorprendió por la pérdida de compostura de Lan Wangji.

(Wei Wuxian era heroico. Y amable. Y abnegada. Y hermoso E inteligente. Y valiente. Era, en cierto modo, perfecto).

'¿Qué le vas a hacer?}' Era una pregunta que todos se hacían.

"¡Muy bien! Primero derrite su núcleo", ordenó Wen Chao, arrodillándose para agarrar el pelo de Wei Wuxian y tirar de él hacia atrás, obligando al chico a establecer contacto visual con él. "¡Quiero oírle gritar como lo hizo el bastardo de Jiang Cheng!"

Madam Yu gruñó y se levantó.

"Con su núcleo de vuelta, ya no habrá nada que puedas hacerle", siseó, mirando a los Wen.

Wang Lingjiao se rio: "¡Gran idea, joven maestro Wen! Derrite primero su núcleo y luego córtale la  mano".

Wen Qing, Jiang Yanli, Lan Xichen y Nie Mingjue saltaron hacia adelante para unirse a Lan Wangji.

"¡Corre!" Nie Huaisang suplicó.

En cambio, Wei Wuxian escupió sangre en la mejilla de Wen Chao.

Los labios de Jin Guangshan se torcieron con diversión.

Wei Wuxian se echó a reír.

"¡¿Qué estás haciendo?!" gritó Jiang Cheng.

"¡A-Xian, sólo corre!" Suplicó Jiang Yanli. "Intenta escapar".

Pero ahora estaba rodeado de Wens por todos lados. Incluso sin la presencia de la Mano Fundidora del Núcleo, escapar sería imposible.

"¡Claro!" Wei Wuxian volvió a reírse. "Cualquier técnica de tortura que tengas. Sácalas!"

"¡A-Xian!" Jiang Yanli gritó, su voz era una mezcla imposible entre suplicante y enojada y desesperada y aterrorizada y horriblemente, horriblemente confundida.

"¿Qué está haciendo?" Lan Wangji siseó.

Nadie tenía una respuesta.

Wang Lingjiao sonrió: "¿Cuánto tiempo vas a seguir diciendo eso?".

Wen Chao asintió: "¿Está tan cerca de la muerte y aun así sigue jugando al héroe?".

"¡¿Qué le pasa?!" Exigió Jiang Cheng, viendo a su hermano casi rogando por la muerte.

Wen Qing gruñó: "¿Está tratando de provocar a Wen Chao?"

Había querido que fuera una pregunta retórica.

No lo era.

"¡Es precisamente porque estoy cerca de la muerte que soy feliz!" Explicó Wei Wuxian, con una sonrisa de oreja a oreja. "¡Adelante, tortúrenme si se atreven! Cuanto más cruel sea, mejor".

La locura en sus ojos les hizo retroceder.

"Después de morir, volveré como un feroz fantasma. ¡Te perseguiré hasta que te veas obligado a unirte a mí!"

Wen Chao retrocedió.

Todas las bocas se abrieron en silencio.

"¡Ja! ¿Un fantasma feroz?" Wen Chao respiró profundamente y recuperó los nervios, golpeando la cabeza de Wei Wuxian contra el suelo.

"¡A-Xian!"

"Los jóvenes Maestros de las grandes sectas han recibido ceremonias para calmar el alma desde que eran jóvenes", se rio Wen Chao, repitiendo sin saberlo lo que Wei Wuxian le había dicho a Jiang Cheng unos días antes.

Pero Wei Wuxian siguió riendo.

"Oh, joven maestro, no podrías estar más equivocado", se burló, su tono se volvió condescendiente. "No he sido criado en el Clan Jiang desde que nací. Soy el hijo de unos cultivadores sin escrúpulos. No he pasado por la ceremonia".

Si ese fuera el caso....

"Él podría hacerlo", susurró Nie Huaisang. "Podría volver como un fantasma feroz".

Si Wen Chao lo mataba, Wei Wuxian lo cazaría y le devolvería el favor.

Todavía podría no suceder.

Pero también podría.

"¡Si muero lleno de resentimiento, te pagaré cien veces después de mi muerte!"

Wen Chao palideció.

Algo aliviado, Lan Wangji volvió a su silla, permitiendo que los Jiangs se apiñaran alrededor de Wei Wuxian.

(Ni siquiera había conocido a Wei Wuxian todavía; ¿qué derecho tenía a interponerse entre él y su familia?)

"Joven Maestro Wen, no escuches estas tonterías", sugirió Wang Lingjiao. "No todo el mundo se convierte en un fantasma feroz después de morir; el momento, el lugar y la situación tienen que ser los adecuados. Además, aunque se convirtiera en uno, la Secta Qishan Wen puede manejar un solo fantasma".

Sin embargo, Wen Chao seguía dudando.

Algo de esperanza comenzó a reformarse en los observadores.

"¿Tal vez se escapa ahora?" Nie Huaisang sugirió.

"Tiene que hacerlo", estuvo de acuerdo Jiang Yanli. "Quiero decir, esto - no se supone que suceda".

Jiang Cheng estaba recuperando su núcleo. Se suponía que iba a ser fácil de aquí en adelante. Se suponía que debían atacar de vuelta. Se suponía que Wei Wuxian no iba a morir.

(Todavía.)

Molesto, Wang Lingjiao continuó: "¿No me digas que lo dejarás ir sólo porque te amenazó?"

"¡Claro que no!"

La señora Jin maldijo: "La desollaré viva".

Sabiendo que definitivamente moriría, Wei Wuxian se tranquilizó. El odio profundo en su interior se convirtió en una determinación férrea.

"¡A-Xian, no lo aceptes sin más!" protestó Jiang Yanli. Sí, era cierto que ninguno de ellos podía ver una salida a esto, pero Wei Wuxian podía hacer cualquier cosa. Y sin embargo, parecía que no pensaba defenderse en absoluto.

(La mirada de Wen Ruohan se dirigió de nuevo a Wen Zhuliu, que seguía mirando su mano con expresión de desconcierto).

Finalmente, Wen Chao no pudo soportar la indiferencia que vio en Wei Wuxian. Había fastidio por el hecho de que sus amenazas no funcionaran, pero también había algo más.

Miedo.

Pateó el estómago de Wei Wuxian, y los otros discípulos de Wen siguieron rápidamente su ejemplo.

"Eres bienvenido a intentarlo", amenazó Nie Mingjue, viendo la mirada alegre en la cara de Wen Chao. "Sólo hay que ver lo que pasa".

Los moretones se formaron en la cara, el pecho y las extremidades de Wei Wuxian, pintando su cuerpo de negro y azul. Un Wen le dio una patada directa a la espalda, dejándole sin aliento.

Lan Wangji se mordió la lengua.

Después de lo que pareció una eternidad, Wen Chao ordenó: "¡Suficiente!"

Wei Wuxian escupió otra bocanada de sangre, y luego miró hacia atrás, todavía tranquilo.

'¿Ha llegado el momento de matarme? ', se preguntó. 'No será tan diferente incluso si muero. ¡No puede ser peor que vivir! Y hay una probabilidad entre tres de que me convierta en un fantasma feroz y busque venganza '.

Este pensamiento le llenó de una emoción sin igual.

"Espera... ¿qué?"

"¿Simplemente lo acepta?"

"No se defiende".

"¡¿Qué está haciendo?!"

Mientras más gritos de indignación pasaban entre los observadores, Wen Ruohan miró al chico. Teniendo en cuenta lo que sabía de Wei Wuxian, este comportamiento era extraño. Las circunstancias le dejaban pocas opciones, pero era innegable que el Wei Wuxian que tenía delante estaba intentando morir.

¿Por qué?

"No puede ser peor que vivir", había dicho.

¿Por qué?

(Para encubrir el hecho de que ya no tiene un núcleo dorado).

Eso era imposible.

(¿Pero qué otra explicación había?)

¿Cómo podría Wen Zhuliu no saberlo? La Mano Fundidora del Núcleo era la única forma en que un cultivador podía perder su núcleo.

'No', tanto Wen Ruohan como Wen Qing se dieron cuenta simultáneamente. 'Hay una posibilidad más'.

"Pero eso es imposible", susurró Wen Qing, en voz demasiado baja para que nadie más que Wen Ruohan pudiera oírlo.

Tan descaradamente como siempre, Wei Wuxian siguió mirando descaradamente a Wen Chao. Ante un prisionero tan inusual, Wen Chao se sintió algo intimidado. Todo este tiempo, había estado planeando poner a Wei Wuxian de rodillas y hacerle pedir clemencia.

Lo primero había sucedido, pero lo segundo parecía cada vez más improbable.

Entonces, su boca se convirtió en una sonrisa y tomó una decisión.

"Wei Ying, te crees que no tienes miedo, ¿verdad? Que eres valiente y poderoso, ¿eh?"

Los dientes de Lan Wangji rechinaron.

"Oh, mira eso. Un perro Wen que puede hablar como un humano".

Wen Chao le dio un puñetazo.

"Riendo incluso en la cara del peligro", murmuró Jin Guangshan. Levantando la vista momentáneamente, Wen Ruohan asintió con la cabeza, y luego volvió a bajar la vista.

(Tal vez, si pensaba lo suficiente en el pasado, sería capaz de dar otra explicación de por qué Wei Wuxian no tenía su núcleo).

Entonces Wen Chao sonrió con sorna, su sonrisa era horrible: "¡Bien, sigue mostrando lo inteligente que es tu lengua! ¡Veamos cuánto tiempo puedes mantener este acto heroico!"

Wen Chao hizo un gesto a Wei Wuxian, y Wen Zhuliu lo levantó.

"No", susurró Lan Qiren, un miedo aplastante le inundó hasta que "Wei Wuxian debe irse" dominó todo lo demás. Por ese momento, incluso el cultivo demoníaco parecía una táctica razonable.

Se sacudió de ese pensamiento un momento después, pero el hecho de que hubiera aparecido lo sacudió.

'Nada vale la pena', se recordó a sí mismo. 'Puedo ver por qué Wei Wuxian quería hacer eso, pero ninguna situación podría ser tan mala como para que el cultivo demoníaco valiera la pena".

No importaba cuántas veces se lo dijera a sí mismo, no cambiaba el hecho de que sus dos sobrinos parecían desfallecer de preocupación.

Mientras colgaba en los brazos de Wen Zhuliu, el cuerpo de Wei Wuxian permanecía flojo. Después de todas las heridas que había sufrido, estaba demasiado débil para correr. No tuvo más remedio que permanecer inerte mientras los Wen montaban sus espadas y volaban hacia los cielos.

Su campana de claridad se rompió y cayó al suelo.

Retrocediendo como si le hubieran golpeado, Jiang Fengmian se vio obligado a mirar hacia otro lado.

(Sí, Jiang Cheng estaba bien, pero ¿y Wei Wuxian?)

Él también estaría bien. Iba a inventar el cultivo demoníaco y convertirse en una fuerza aterradora contra los Wen.

(¿Pero por qué inventó el cultivo demoníaco?)

Mera curiosidad. Lo descubrieron en el tercer segmento, cuando Wei Wuxian propuso por primera vez la idea a Lan Qiren.

(No pudo decir eso ahora).

Entonces fue la desesperación. Después de la destrucción del Clan Jiang, ¿por qué no iba a inventarlo?

(¿Pero qué pasará después?)

Nadie tenía una respuesta a eso.

Los observadores fueron arrastrados mientras los Wens se alejaban, viajando por el cielo con ellos. Con el tiempo, las montañas se fueron alejando, dejando atrás al recuperado Jiang Cheng.

' ¿Por qué me llevan tan alto en el aire?' Se preguntaba Wei Wuxian, apenas consciente por el dolor. '¿Van a soltarme desde algún sitio y dejarme caer hacia la muerte?'

El rastro de esperanza en su tono partió en dos los nervios de Jiang Yanli.

"¿Qué... qué le están haciendo?", preguntó a Wen Chao. El heredero Wen no tuvo respuesta.

"Yo... estoy seguro de que no será demasiado malo", se consoló Jin Zixuan.

"Bueno, sabemos que sobrevive", señaló Nie Huaisang, tratando de mantener el terror fuera de su voz. "Estoy... estoy seguro de que estará bien. Asustó a Wen Chao para que lo dejara con vida, así que probablemente esté a punto de escapar".

"Cierto", Lan XIchen sonrió con maldad. "Sabemos que sobrevive con todos sus miembros intactos. Ya está tan herido - ¿cuánto peor podría ser?"

Los observadores fueron trasladados hacia adelante en el tiempo.

Ahora se encontraban en un acantilado.

A su alrededor, las montañas irregulares se clavaban en el cielo y sus formas oscuras se fundían con la negrura de las nubes. Ni un solo rastro de luz se escapaba del valle negro como el carbón al pie del acantilado, que parecía un abismo sin fin. Un tenue resplandor rojo se dejaba ver en la voraz oscuridad.

Pero los observadores no se dieron cuenta de nada de eso.

Wen Ruohan jadeó, balanceándose sobre sus pies. A su alrededor, el aire se convirtió en lava. Era tan espeso como la melaza y tan caliente como el sol. En la simulación, lo único que los observadores podían sentir era energía resentida.

Y en ningún lugar había más de eso que aquí.

Cayendo sobre sus rodillas -un océano de presión que los agobiaba- los otros observadores se esforzaron por hablar.

"Es... es esto...."

"No puede ser..."

"Los Túmulos", terminó Wen Ruohan. Todos los demás jadearon, y luego se dieron cuenta de que no podían volver a respirar.

La energía intentaba asfixiarlos.

El graznido de los cuervos volaba en círculos por encima de ellos, ignorando a los cultivadores simulados de abajo. No se preocupaban por Wen Chao, que dominaba el valle con malicia. No les importaba Wen Zhuliu, que seguía tan complaciente como siempre. Ni siquiera les importaba Wei Wuxian, arrojado al suelo para que se echara a los pies de Wen Chao. El mero concepto no les parecía inexcusable.

Los vigilantes no eran tan indiferentes.

"Wei Ying", gritó Wen Chao. "¿Tienes idea de dónde estamos?"

Wei Wuxian se obligó a levantar la vista y se estremeció.

"Así es", sonrió Wen Chao. "Los Túmulos".

Un enorme crujido resonó en toda la sala. Todos miraron, sorprendidos por el inesperado ruido. Si no podían tocar nada, ¿cómo se producía ese sonido?

Habían olvidado que lo único que podían tocar eran sus sillas.

Y el agarre de Lan Wangji había roto parte del suyo.

Incluso aplastado por la energía del resentimiento, su furia era lo suficientemente fuerte como para partir la piedra en dos.

Y, sin embargo, no había nada que pudiera hacer.

Completamente libre de obstáculos, el simulado Wen Chao continuó: "Está justo en Yiling. Estoy seguro de que incluso ustedes, los de Yunmeng, han oído hablar de ello. Es una montaña de cadáveres, un antiguo campo de batalla. Podrás desenterrar un cadáver en cualquier lugar de esta montaña".

Además de ser el escenario de una batalla, también era un lugar para arrojar cadáveres no deseados.

La energía de resentimiento aquí era mayor que en cualquier otra parte del mundo.

"Mira la oscuridad en el aire. La energía hostil es fuerte, ¿verdad? Y la energía resentida es espesa, ¿no es así? Incluso la Secta Wen no pudo hacer nada al respecto. Sólo pudimos bloquearla".

Con una sonrisa de satisfacción, su pie golpeó a Wei Wuxian contra el suelo.

"¡¿Cómo te atreves?!" Nie Mingjue gritó, extendiendo la mano para agarrar a Wen Chao. Pero fue inútil. No sólo su mano atravesó la fase, sino que la presión que lo agobiaba apenas le permitía moverse.

A pesar de que se derrumbó contra el suelo, la sonrisa de Wen Chao sólo creció ante el intento de Nie Mingjue. Ni siquiera la mirada más fuerte de Lan Wangji pudo amortiguar el regocijo de Wen Chao.

"Mira", parecían decir sus ojos, brillando con perverso deleite. 'Mira el poder que tengo sobre el Patriarca Yiling. Su vida es mía, como debe ser'.

"Wei Ying, ¿puedes oler el resentimiento aquí?"

Su pie aplastó la cabeza de Wei Wuxian contra el suelo.

"Tú..."

"¿Qué? ¿Esto es demasiado?" Wen Ruohan sonrió. "Estabas perfectamente de acuerdo con todo lo que Wei Wuxian sacrificó por tu hijo. Su espalda, su oportunidad de escapar, su milagro de Baoshan Sanren, su-"

"Basta", ordenó Jiang Fengmian, viendo cómo aumentaba la ira de su esposa.

Entonces, el simulado Wen Chao comenzó a reírse: "No olvides que cualquiera que se aventure dentro queda atrapado por toda la eternidad".

"Saldrá", se dijo Jiang Cheng. "Tiene que hacerlo".

"Por supuesto", estuvo de acuerdo Lan Xichen. Arrojar a alguien al interior de los Túmulos Superiores superaba incluso la peor tortura imaginable.

Nadie podría sobrevivir a eso.

Y Wei Wuxian viviría más allá de esto, así que...

Wen Chao agarró el pelo de Wei Wuxian para levantarlo, con una sonrisa grotesca en la cara.

Viviría, así que esto no podía estar pasando.

Sin perder ni un segundo más, Wen Chao volvió a levantar el vuelo, elevándose lo suficiente del suelo como para no ser arrastrado por el pozo de la muerte que le rodeaba.

Porque nadie podía escapar de él.

Así que Wei Wuxian no podía ser arrojado al interior.

La simulación elevó a los observadores al cielo mientras los Wens llevaban a Wei Wuxian a lo alto del valle de la oscuridad. Todavía paralizado por sus heridas, Wei Wuxian no podía defenderse.

No tenía sentido que Wei Wuxian fuera arrojado a los Túmulos.

Y sin embargo...

"No", susurró Lan Wangji, obligándose a levantarse con brazos temblorosos. "¡Para! Esto..."

"¡Esto no está bien!" jadeó el aplastado Nie Huaisang, apenas consciente bajo la presión. "Esto no es... él sobrevive. Él vive más allá de esto, cómo..."

"Wei Wuxian, ¿qué estás haciendo? ¡Muévete!" Jiang Cheng gritó.

Sin embargo, Wei Wuxian no pudo hacer nada, ya que Wen Chao finalmente localizó la parte de los montículos con la energía resentida más densa.

"¡Detente!"

"Esto no es..."

"¡No se supone que sea así! Se supone que está bien!"

"¡Wei Ying!" Lan Wangji gritó, su fuerza Lan finalmente le dio el poder para ponerse de pie temblorosamente y tropezar hacia Wen Chao. Pronto, había forzado su cuerpo para llegar a un metro de distancia de él.

Alcanzó el cuerpo simulado de Wei Wuxian.

Y lo atravesó.

Wen Chao sonrió.

"Así que tú..."

"No-".

"Nunca..."

"¡Detente!"

"¡Escaparas!"

Wei Wuxian cayó.

"¡Wei Ying!" Lan Wangji gritó, hundiéndose al instante de rodillas para atrapar a Wei Wuxian, pero golpeándose contra el suelo en su lugar. Golpeó la barrera invisible debajo de él, pero sólo pudo observar.

Wei Wuxian cayó hacia abajo....

Abajo....

Abajo....

Hacia abajo.

"Wei Ying", susurró Lan Wangji entrecortadamente, golpeando sus puños con impotencia contra el suelo. "¡Wei Ying!"

No hubo respuesta.

'No', pensó, apenas registrando ya la energía resentida. 'No, esto no puede estar pasando. No a él, no a Wei Ying. No, no, no...

Los cuervos revolotearon por encima de él y Wen Chao sonrió, viendo cómo la figura de Wei Wuxian se encogía mientras caía en un abismo del que nadie había escapado.

Todos los observadores se habían vuelto tan pálidos como el marfil.

Y tan silenciosos como un cadáver.

Wei Wuxian se había desvanecido en la oscuridad de abajo.

"¿Qué?" Jiang Yanli susurró, vulnerable.

"Él no..." Jin Zixuan se esforzó por decir las palabras. "No escapó".

"¿Qué?" Jiang Yanli repitió.

Nadie tenía una respuesta.

Se suponía que esto no iba a suceder. Wei Wuxian había encontrado la forma de arreglar el núcleo de Jiang Cheng, ese era el fin de su lucha. Se suponía que debían agruparse con los Lans. Se suponía que iban a comenzar la Campaña del Sol. Se suponía que iban a salir victoriosos en una batalla tras otra contra los Wen.

(Se suponía que Wei Wuxian inventaría el cultivo demoníaco por deseo de venganza).

"... ¿Qué?"

La presión que los agobiaba desapareció abruptamente cuando los observadores fueron llevados de regreso a la gruta cubierta de hierba de donde Wei Wuxian fue secuestrado.

En el centro del campo, la campana de claridad de Wei Wuxian yacía junto a un charco de su propia sangre.

Al ver eso, la conmoción que había congelado a Jiang Yanli se convirtió en terror. Su respiración se aceleró hasta alcanzar el ritmo de una liebre, y el mareo la invadió.

Ignorando el modo en que Jin Zixuan intentaba ofrecer ayuda a su hermana, Jiang Cheng estuvo a punto de volcarse, igualmente mareado.

Wei Wuxian estaba en los Túmulos.

Wei Wuxian había sido capturada y arrojada a los Túmulos.

Wei Wuxian había sido azotado, estrangulado, perseguido, apuñalado, golpeado y luego arrojado a los Túmulos. No había escapado de Wen Chao.

Pero eso no tenía sentido.

Wei Wuxian era el más fuerte. Siempre era capaz de recuperarse sin importar lo que Yu Ziyuan le hiciera, y podía pasar todo el tiempo que quisiera haciendo el tonto sin dejar de ser el discípulo principal. Se suponía que no debía estar en peligro, pero Wei Wuxian no era así.

(Se quedó atrapado en una cueva con un Xuanwu asesino.)

(Pero lo mató. No fue para tanto).

"¿Tal vez escapó?" Sugirio Jiang Cheng. "Tal vez... los Túmulos no son tan importantes después de todo. Si ese idiota escapó sin problemas, entonces estoy seguro de que todo estará... bien".

"¿Crees que su reputación es exagerada?"

"Probablemente", Jiang Cheng se encogió de hombros en una falsa muestra de bravuconería.

Al volver a respirar poco a poco gracias a Jin Zixuan, Jiang Yanli añadió: "Eso tiene sentido. Estoy seguro de que la caída le hará daño, pero... ¿tal vez descubra el cultivo demoníaco relativamente rápido? Es-especialmente si los rumores sobre los Túmulos son realmente exagerados".

Sus padres asintieron con la cabeza.

(Wen Ruohan se preguntó si debía recordarles que la presión de los Túmulos había puesto de rodillas a casi todos ellos. Incluso si la sensación se amplificaba de acuerdo con la debilidad de los recuerdos de los que se usaron para hacerla, algo así no podía darse por sentado sin más).

(Entonces, recordó la expresión de Wen Zhuliu, y decidió que tenía cosas más importantes de las que preocuparse).

Poco a poco, los observadores empezaron a oír un sonido de arrastre mientras alguien caminaba por el bosque.

Jiang Cheng se enderezó, esperando que fuera él. Tal vez rescataría a Wei Wuxian antes de que terminara el día.

En cambio, unas túnicas blancas y puras entraron en el claro, y Lan Wangji se acercó a la campana caída. Tan pronto como la vio, su expresión se derrumbó en la desesperación.

Sabía que lo más probable era que Wei Wuxian estuviera muerto.

A pesar de saber que eso no era cierto, Wen Qing pensó que la reacción de Lan Wangji era acertada. Ella había visto la reacción de Wen Zhuliu. No veía cómo podía ser posible -no podía ver cómo alguien tomaría esa decisión- pero, con la forma en que Wei Wuxian no había sido capaz de defenderse, cada vez parecía más probable.

¿Cómo sabes que alguien está muerto? Podrías ser capaz de ver su fantasma, pero aparte de eso, ciertas heridas contarían. Fue decapitado, por supuesto que está muerto. Fue colgado, por supuesto que está muerto.

Entregó su núcleo y fue arrojado a los Túmulos, por supuesto que está muerto.

Y sin embargo, Wei Wuxian había sobrevivido de alguna manera.

(¿Realmente los Túmulos no eran tan malos como parecían?)

Lentamente, Lan Wangji se inclinó hacia adelante y recogió la campana, luego la sostuvo cerca de su pecho.

"Lan-er-gongzi", saludó alguien detrás de él. "Según los aldeanos, Wei-gongzi y Jiang-gongzi podrían haber pasado por aquí hace unos días. Nuestra gente los ha buscado por todas partes, pero no los han encontrado".

La mano de Lan Wangji agarró la campana con más fuerza, y luego la guardó lentamente dentro de su túnica.

Las manos temblorosas de su hermano hicieron que el corazón de Lan Xichen se rompiera un poco. Lan Wangji tenía diecisiete años. No debería necesitar ser fuerte y liderar una resistencia mientras su amigo podría estar muerto.

(Wei Wuxian también tenía diecisiete años, ¿no?)

Lan Xichen se sentó, obligándose a respirar profundamente.

El discípulo de Lan frunció el ceño ante el silencio, "¿Son ellos...?"

No terminó, y Lan Wangji lo ignoró para mirar al cielo.

"Wei Ying", susurró, rezando desesperadamente con solo un nombre.

Al darse cuenta de las implicaciones, Jiang Fengmian asintió una vez hacia Lan Wangji y dijo: "Gracias por buscarlos. Su ayuda es muy apreciada."

Los tres Lans asintieron a cambio.

Detrás de ellos, Madam Yu se vio obligada a mirar hacia otro lado. A estas alturas, la simulación había hecho incuestionablemente obvio que los Wen habrían atacado Lotus Pier independientemente de las acciones de Wei Wuxian en la cueva. Pero, si él no hubiera interferido y hubiera permitido que Lan Wangji muriera, entonces el Clan Jiang no habría recibido ayuda después de la masacre.

Ella se burló.

Con un giro interno de sus ojos, Madam Yu pensó amargamente: 'Por supuesto que el niño maravilla tenía razón. Es incapaz de hacer nada malo, ¿no es así?'

 ̶P̶e̶r̶o̶ ̶a̶h̶o̶r̶a̶ ̶e̶s̶t̶á̶ ̶a̶t̶r̶a̶p̶a̶d̶o̶ ̶e̶n̶ ̶l̶o̶s̶ ̶T̶ú̶m̶u̶l̶o̶s̶.̶ ̶¿̶N̶o̶ ̶e̶s̶ ̶a̶s̶í̶?̶

(Pero conociendo a ese chico, probablemente tendría todo el lugar conquistado y leal a él en una hora). Madam Yu no sabía por qué estaba tan preocupada; ya sabían que él sobreviviría).

Cuando el claro de hierba se desvaneció, volvió la voz de Sizhui.

"En el vigésimo año del reinado de Xuanzheng, el Clan Jiang de Yunmeng fue destruido".

Al menos la mitad de los presentes se estremecieron ante el recordatorio.

(Pero el discípulo principal estaría bien. Sabían que sobreviviría. Estaba bien).

"El clan Qishan Wen se volvió más y más agresivo a medida que pasaba el tiempo, tratando de establecer una oficina de supervisión en cada ciudad importante".

Nie Mingjue gruñó y dirigió una mirada feroz a los Wen, pero no tenía nada que añadir que no se hubiera dicho ya.

(Nie Huaisang encontró que el tono de Lan Sizhui al hablar de los Wens era un poco extraño. Casi... personalmente arrepentido).

Y continuando con ese tono extrañamente culpable, Lan Sizhui se obligó a concluir: "Cualquier desobediencia se encontró con una gran desgracia. La gente derramaba sangre como el agua".

'Incluido Wei Wuxian', pensó Wen Qing.

Wen Chao lo había herido gravemente antes de arrojarlo a los Túmulos. Tan mal, de hecho, que Wei Wuxian no pudo defenderse después.

Pero ni siquiera eso explicaba a Wen Zhuliu.

(Si Wen Zhuliu lo hubiera encontrado antes... no, lo habían sorprendido. ¿Lo había atrapado algún tipo de bestia? No, claramente había usado su núcleo mientras escapaba de Muelle Loto la segunda vez, y Wei Wuxian había permanecido cerca del inconsciente Jiang Cheng desde entonces. ¿Podría tener todavía su núcleo, y sólo estar demasiado cansado para usarlo? Tal vez Wen Zhuliu sólo cometió un error. Tal vez Baoshan Sanren había recuperado realmente el núcleo de Jiang Cheng).

(O tal vez Wen Qing ya sabía lo que había pasado, y simplemente no podía aceptar que un adolescente sin núcleo acabara de ser arrojado a los Túmulos).

No, estaba siendo ridícula. Debido a la incapacidad de probar realmente la teoría en ciernes, el reciente artículo de Wen Qing sobre las transferencias de núcleo no era ampliamente conocido. Sin embargo, incluso con sólo los principios de la teoría, ella y Wen Ruohan sabían que nadie se ofrecería a probarla.

Wen Qing escudriñó la sala y vio que, a pesar de su asombrosa capacidad para hacer predicciones precisas, Nie Huaisang no parecía en absoluto preocupado por la posibilidad. Eso no era una sorpresa; Nie Huaisang nunca se había interesado en el cultivo, por lo que no tendría ninguna razón para conocer una teoría de cultivo oscura e imposible de probar. Pero Wen Qing lo sabía.

Y Wen Ruohan lo sabía.

De repente, hizo contacto visual con él.

Después de que Wen Ruohan la chantajeara para que guardara silencio sobre ciertos temas, había hecho todo lo posible para evitar su atención. Sin embargo, ahora sentía que no tenía otra opción.

Después de todo, no podía ser posible. Nadie estaba dispuesto a probarlo. Nadie estaría de acuerdo. Wei Wuxian era uno de los más fuertes de su generación; había pasado casi todos los días de cada semana de los últimos ocho años practicando y refinando y trabajando en su núcleo. Era su vida. Y además, los Jiangs lo habían azotado y le habían faltado al respeto y lo habían culpado y luego lo habían ahogado. No podía tener tanta lealtad hacia ellos.

Ni siquiera Wen Zhuliu le daría a Wen Ruohan su núcleo.

Y, sin embargo, Wen Qing y Wen Ruohan se habían mirado el uno al otro, con el mismo pensamiento rondando por sus cabezas: no tenían otra explicación.

Pero no podía ser cierto.

(Pero, si lo fuera, ninguna recompensa que Wen Ruohan pudiera ofrecer a Wei Wuxian haría mella en su lealtad a los Jiang).

Nie Huaisang observó a los dos, careciendo de antecedentes de cultivo para conocer la operación, pero reconociendo igualmente la confusión en sus rostros.

Mientras la pareja pensaba en ello, la simulación continuó.

"Jinlintai, Ciudad Lanling".

Jin Zixuan se levantó ligeramente con esperanza.

Esa esperanza desapareció al instante cuando empezaron a sonar las risas de muchas mujeres.

Un ligero gruñido escapó de la garganta de Madam Jin.

Jin Guangshan estaba sentado en un pabellón, rodeado por todas partes de muchachas con las peonías de Jin recogidas en el pelo.

Tanto Madam Yu como Madam Jin se burlaron simultáneamente de la escena, pero ninguna se sorprendió.

"Líder del clan", rio una, sentándose en su regazo y dándole una cereza.

"¡Líder del clan! Líder del clan", gritó una voz mucho más frenética.

Jin Zixuan siguió el sonido de la voz y vio el rostro aterrorizado de un discípulo mayor.

"¿Qué ocurre?" inquirió Jin Guangshan, mirando fijamente la interrupción. "¿Ha venido Lan Qiren a persuadirme para que coopere de nuevo? Dile que estoy fuera".

"¡¿No vamos a ayudar?!" exigió Madam Jin, y los Lans, Nies y Jiangs dirigieron profundas miradas a los Jins.

(Jin Zixuan se hundió en su asiento).

"Ya veo", fue todo lo que dijo Wen Ruohan, con los ojos encendidos de diversión. Aunque seguramente ayudaron hacia el final, la vacilación de Jin Guangshan demostraba que los Jin no estaban del lado de la Campaña del Sol. Jin Guangshan asintió rápidamente, aliviado de que Wen Ruohan lo hubiera visto.

"N-no, Líder de Clan", informó el discípulo. "Se trata de Qishan. El Clan Qishan Wen ha enviado un mensaje".

"¿Ah? ¿Qué es?"

Nie Mingjue se puso de pie, "Así que los escuchará, pero no-"

"Ellos... quieren establecer una oficina de supervisión aquí".

Todos se congelaron en sus argumentos y se concentraron en la simulación.

"Tendrán que presentar todas nuestras grandes armas en un plazo de cinco días. O... o...."

"¿O qué?"

"O nos enfrentaremos al mismo destino... que el Clan Jiang de Yunmeng".

Jiang Cheng y Jin Ziuan se pusieron de pie, mirando fijamente mientras Wen Chao comenzaba a reírse.

Pero Jin Guangshan se limitó a suspirar: "No hace falta que.... Envía un mensaje a Su Excelencia. Me gustaría reunirme con él".

Apaciguando a Qishan con fondos e ignorando a los otros clanes, parecía.

Con el rostro enrojecido, Jin Zixuan se sentó rápidamente, sin querer establecer contacto visual con nadie más.

"Gusu", explicó Sizhui, dejando que el mundo que les rodeaba se desvaneciera en el negro de la noche. El único sonido en el tranquilo paisaje era el de una de las cascadas de los Nublados.

Por un momento, la visión llenó a Lan Xichen de una intensa nostalgia. Aunque habían estado dentro de la simulación durante menos de una semana, realmente parecía que habían pasado años.

En el medio segundo antes de que Lan Xichen lograra recuperar su habitual sonrisa tranquila, Jiang Yanli vio su angustia y le envió una sonrisa cegadora de tranquilidad.

(En el fondo de sus mentes, los pensamientos de nadie dejaron a Wei Wuxian ni siquiera por un segundo).

~🎵~

La música de Guqin resonó en el aire cuando las manos experimentadas de Lan Wangji comenzaron a tocar. El talento del jugador era innegable.

"Ah, Lan-xiong, suena tan bien ~", comentó Nie Huaisang, un apreciador de las artes como siempre.

"No es por entretenimiento", respondió Lan Wangji.

Un momento después, el significado detrás de esas palabras quedó claro. Lan Wangji estaba jugando a la investigación, atrayendo espíritus de todos lados para responder a su llamada. Bolas resplandecientes de energía espiritual condensada comenzaron a reunirse a su alrededor, atraídas por el sonido como cuervos por las joyas.

Al final de la orilla de un río a las afueras de los Recesos de las nubes Lan Wangji se sentó y jugó, acompañado solo por un solo anciano de Lan. Una vez que los espíritus estuvieron dentro del alcance, comenzaron a flotar ociosamente a su alrededor, observando el área.

Una de las primeras cosas que notaron fue la campana de claridad que se les presentó en una roca cercana.

Al recordar lo que le había sucedido a Wei Wuxian, el buen humor de los observadores flaqueó.

Después de todo, nadie podría sobrevivir a los túmulos funerarios. No importaba lo que dijeran esos civiles en el primer segmento; fue un suicidio ir allí. Por otra parte, eso fue casi un consuelo; incluso si el tiempo pasaba sin el regreso de Wei Wuxian, estaban seguros de que había salido en las primeras horas. Tal vez simplemente se estaba recuperando antes de regresar. O tal vez había perdido la memoria después de la caída y no sabía que había un lugar al que necesitaba regresar.

(Los Jiang nunca pensaron que llegaría un momento en el que esperarían que Wei Wuxian hubiera sufrido una conmoción cerebral).

Habiendo dado a los espíritus suficiente tiempo para observar la campana, Lan Wangji finalmente hizo su pregunta.

Esperó, y uno de los espíritus se adelantó para responder.

Rebotó ligeramente en una cuerda de guqin y luego retrocedió.

La cara de Lan Wangji cayó.

Los pasos comenzaron a acercarse, y al instante se volvió hacia ellos.

Lan Qiren se tensó, rezando para que su sobrino no corriera peligro.

En silencio, Lan Wangji se puso de pie, preparándose para una posible confrontación con el intruso. Un momento después, un hombre entró en el claro y la tensión de Lan Wangji se transformó instantáneamente en sorpresa.

"Xiongzhang", exhaló Lan Wangji, el alivio lo inundó de inmediato.

"¡Da-gongzi!" proclamó el discípulo de Lan junto a Lan Wangji, toda su conducta se iluminó. Y, de hecho, Lan Xichen se paró frente a ellos, luciendo completamente ileso.

Lan Qiren se derrumbó en su asiento, sin mostrar nada del orden y la disciplina por los que era tan conocido. Lan Xichen había regresado; su sobrino había sobrevivido.

La gratitud que sintió fue tan poderosa que superó todas las demás emociones que podría haber sentido.

Su sobrino estaba vivo.

(Había estado seguro de que ese era el caso basado en el futuro, pero el futuro no había impedido que Wei Wuxian fuera arrojado a los túmulos funerarios. Sus esperanzas habían sido tentativas en el mejor de los casos).

(Pero ahora Xichen estaba aquí. A salvo. Vivo.)

La tormenta que rugía en el corazón de Lan Qiren finalmente comenzó a dispersarse.

"Wangji", saludó Lan Xichen. "Confío en que hayas estado bien."

Un momento después, Lan Wangji logró aliviar la sorpresa en su rostro y volver a su habitual expresión en blanco. Se inclinó humildemente, saludando a su hermano.

"Xiongzhang", susurró.

Nadie más podía verlo, pero el evidente alivio que permaneció en la expresión de su hermano envió una ola de calidez a través de Lan Xichen.

Ahora, si supieran lo que le estaba pasando a Wei Wuxian.

"Oí que alguien estaba haciendo averiguaciones y supe que eras tú", comentó Lan Xichen, y luego dudó. "Parece que Wei-gongzi sigue desaparecido".

Lan Wangji apretó los puños, dirigiendo otra mirada despiadada hacia el sonriente Wen Chao.

"Pero es muy extraño", murmuró el desconocido discípulo de Lan. "Han pasado varios días, y hemos encontrado mucha información sobre Jiang-gongzi, pero nada sobre Wei-gongzi. ¿Ha sido capturado por el Clan Wen o no?"

"¿Nada?" Repitió Jiang Yanli.

"Bueno, si hay algo que ningún espíritu sería capaz de averiguar sobre...."

Nie Mingjue no terminó su frase, pero no tenía que hacerlo. Si hubiera algún lugar del que ningún espíritu fuera capaz de salir, sería los Túmulos.

(Pero seguramente Wei Wuxian no podría seguir allí. Era imposible sobrevivir).

¿̶P̶e̶r̶o̶ ̶d̶ó̶n̶d̶e̶ ̶m̶á̶s̶ ̶s̶e̶r̶í̶a̶ ̶i̶m̶p̶o̶s̶i̶b̶l̶e̶ ̶e̶n̶c̶o̶n̶t̶r̶a̶r̶l̶o̶?̶

"Lan-er-gongzi ha estado preguntando a todos los que vemos, incluso a los fallecidos, pero no ha habido ni una sola pista sobre Wei-gongzi. Es como si hubiera desaparecido".

Con la gracia de siempre, Lan Wangji se limitó a acercarse para recoger la campana de claridad de Wei Wuxian, sin reconocer la desesperanza de la situación.

"Gracias", susurró Jiang Yanli, haciendo una ligera reverencia a Lan Wangji. Inconscientemente, Jin Zixuan hizo lo mismo, y luego retrocedió sorprendido.

Técnicamente, Wei Wuxian no le conocía. Técnicamente, ni siquiera eran amigos. Técnicamente, no tenía derecho a agradecer a Lan Wangji una amabilidad hecha a alguien no relacionado con él. Técnicamente, Wei Wuxian no era legalmente un miembro de la familia Jiang. Técnicamente -y aunque habían visto a su hijo- él y Jiang Yanli no estaban casados todavía.

Y, sin embargo, cada vez que veía a Wei Wuxian triunfar sobre probabilidades imposibles o luchar a través de circunstancias inimaginables, todo lo que podía pensar era "ese es mi cuñado".

Al darse cuenta de lo que había hecho, Jiang Yanli volvió a secar las lágrimas que habían empezado a formarse en sus ojos y le sonrió en señal de gratitud.

Manteniendo su expresión en blanco, Lan Wangji miró la campana de la claridad.

Finalmente, habló:

"...Tanto si está vivo como si está muerto, habrá pistas en alguna parte. Encontraremos una respuesta".

Viendo cómo se desarrollaba ante sus ojos lo que estaba resultando ser la mayor historia de amor de todos los tiempos, las lágrimas de alegría de Nie Huaisang comenzaron a formarse.

(Si su preocupación por Wei Wuxian también estaba contribuyendo al agua en sus ojos, nadie tenía que saberlo sino él mismo).

(Wei Wuxian escapó de los Túmulos. La única pregunta era cuánto tiempo permaneció dentro).

Tras una pausa, Lan Wangji se giró. Con un dramático movimiento de su manga, disipó los espíritus reunidos, y luego se inclinó ante ellos en agradecimiento por su ayuda.

"Wei-gongzi es fuerte e inteligente", comentó Lan Xichen. "Estará bien".

Jiang Cheng asintió con furia. Después de todo, sabían que Wei Wuxian sobreviviría a esto. Nadie sabía lo que realmente había pasado en los Túmulos, pero no podía ser tan malo. Además, ¿cuánto tiempo podría haber permanecido allí?

(¿Horas? ¿Días? ¿Semanas? Seguramente no.)

(Dado que era Wei Wuxian, probablemente ya había escapado. Intentando lo imposible como siempre).

Lan Xichen se acercó a su hermano, aconsejándole: "Wangji, no te preocupes demasiado".

La mirada de Lan Wangji cayó al suelo, sin responder.

Viendo que sus palabras tranquilizadoras habían resultado infructuosas, Lan Xichen continuó: "Hace unos meses, oí que tú y el tío habíais empezado a trabajar en la unión de los clanes. ¿Cuánto han avanzado?"

Wen Ruohan escuchó con interés.

(¿Qué otra cosa podía hacer? Por un segundo, había sido lo suficientemente tonto como para pensar que Wei Wuxian renunciaría a su núcleo por la persona que acababa de asfixiarlo hasta la muerte. Claramente, la simulación había deformado su percepción de la normalidad. Tendría que permanecer vigilante).

"La mayoría de los clanes dudan y no han tomado una decisión definitiva", respondió Lan Wangji con calma.

"Tu hermano es bastante sorprendente", murmuró Nie Mingjue, haciendo que Lan Xichen sonriera cálidamente. Teniendo en cuenta a quién se enfrentaban, Nie Mingjue estaba seguro de que él también estaba involucrado. Eso no hizo que Lan Wangji diera un paso adelante y posiblemente se convirtiera en un objetivo menos impresionante.

Al ver las expresiones de orgullo de los dos hermanos mayores, Lan Wangji sintió que sus orejas se calentaban hasta alcanzar un color rosado.

Por otro lado, sin saber que la Campaña del Sol tendría éxito, Lan Xichen pareció desinflarse ante la vacilación de los clanes.

"No es una sorpresa", admitió. "El clan Qishan Wen es poderoso. Destruyeron el Clan Yunmeng Jiang en una sola noche. No todos los clanes tendrán el valor de enfrentarse a ellos".

Con cada palabra, Wen Chao parecía brillar de felicidad. Pronto, Lan Qiren, Nie Mingjue, Jiang Cheng y Yu Ziyuan lo miraron con disgusto.

Las nubes oscuras que habían cubierto la luna fueron barridas. La luz de la luna entró en la gruta en la que estaban los Lans, permitiendo que sus túnicas blancas brillaran en la noche.

Al ver el dulce resplandor, Lan Wangji no pudo evitar recordar el brillo juguetón de los ojos plateados de Wei Wuxian.

El simulado Lan Wangji miró hacia arriba, "El poder del Clan Wen no durará para siempre".

Escuchando eso, Lan Xichen empezó a sonreír.

Lan Qiren asintió una vez, dando a Lan Wangji una mirada de aprobación.

(Wei Wuxian seguramente escaparía pronto de los Túmulos. Tal vez, una vez que saliera, él y Wangji tendrían la oportunidad de hablar las cosas. Lan Qiren seguía sin aprobar a Wei Wuxian, pero al menos podía reconocer que había muchas, muchas opciones peores).

"Recesos de la Nube, Gusu", explicó Sizhui.

Los observadores se trasladaron al interior de los Restos de Nube, y el cielo se iluminó bajo el sol.

Era el día siguiente.

O el día después

O el día siguiente de ese.

Pero tenía que ser el día siguiente, porque Wei Wuxian aún no había sido encontrado.

"Probablemente ya haya escapado", murmuró Madam Yu para sí misma. "Sería propio de él retrasar su aparición para hacerlo más dramático".

Todos deseaban que ella tuviera razón.

Mientras los observadores rezaban mentalmente, la sala de conferencias Lan se formó a su alrededor. Docenas de Líderes de Sectas menores y mayores estaban sentados alrededor, y Lan Qiren estaba de pie en el centro.

"Todos", saludó severamente. "El Clan Qishan Wen nos ha presionado demasiado. Si seguís retrocediendo, pronto os encontraréis en la línea de fuego".

En silencio, Lan Qiren y Jiang Fengmian comenzaron a preguntarse si celebrarían una reunión similar una vez que abandonaran la simulación.

Su acuerdo de no castigar por cosas que 'todavía no habían ocurrido' parecía más y más tenue por hora.

Mientras escuchaban, los otros líderes de la secta se miraron a los ojos.

Luego, una risa.

"Lan-xiansheng, nuestra presencia aquí demuestra que queremos discutirlo. Es solo..."

"Líder de la secta Jin, ¿qué estás tratando de decir?"

Acercándose sigilosamente a Jiang Yanli en busca de tranquilidad, Jin Zixuan esperaba que las siguientes palabras de su padre fueran aceptables. Como hijo filial, Jin Zixuan sabía que no debía hablar abiertamente en contra de su padre, pero, sin importar cuán florido Jin Guangshan lograra expresarlo, una alianza con la Secta Wen ahora era imperdonable.

¡Mataron a los padres de A-Li! ', le gritó metálicamente a su padre simulado. ¡Arrojaron a Wei Wuxian a los túmulos funerarios! ¡Incluso si eso no te importa, al menos te importa que intentaron matarme! '

Pero Jin Guangshan simplemente agitó su abanico con delicadeza y explicó: "En mi humilde opinión, no debemos apresurarnos a luchar contra el Clan Wen. En este momento puede ser demasiado apresurado."

Nie Mingjue ni siquiera trató de ocultar su burla.

"Estoy de acuerdo", dijo otro líder de la secta. "Todavía tenemos tiempo para pensarlo".

Mientras hablaba, la vista de los observadores cambió al camino que conducía a la sala de conferencias, donde una figura encapuchada caminaba con Lan Xichen. El rostro de la figura estaba envuelto en sombras, pero su paso era confiado y seguro.

El líder de la secta continuó: "Si realmente provocamos a Wen Ruohan, entonces no hay salida".

Prácticamente rezumando arrogancia, Wen Chao levantó la cabeza y sonrió al líder de la secta que acababa de hablar. Nie Huaisang no pudo evitar pensar que los líderes de la secta reunidos estarían mucho más dispuestos a luchar contra los Wen si pudieran ver la expresión de Wen Chao.

Por otro lado, Wen Ruohan parecía estar apenas escuchando la discusión. De vez en cuando levantaba la vista y tomaba nota de quién había hablado, pero estaba claro que su mente estaba en otra parte. Para la tercera vez que sucedió, la confusión de Nie Huaisang había alcanzado su punto máximo; ¿No era la campaña Sunshot la parte que más le importaba a Wen Ruohan? ¿Por qué no estaba prestando atención a un momento tan crucial?

Sin que nadie lo supiera, excepto Wen Qing, Wen Ruohan se devanaba los sesos frenéticamente en busca de una explicación, una señal, un poco de duda, cualquier cosa que indicara que su teoría no era cierta. Una transferencia de núcleo era tan imposible que casi no quería molestarse.

Y, sin embargo, cuanto más tiempo pasaba tratando de encontrar pruebas en su contra, más probable parecía.

(Después de todo, Wen Qing ya había demostrado de qué lado estaba).

"¿Momento?" Lan Qiren repitió. "¿Salida? ¡¿Estás diciendo que prefieres renunciar a tus tesoros y vivir bajo su supervisión?!"

Una risa profunda le respondió.

"Perdóname por ser franco", comenzó Nie Mingjue. "¡Pero si entregamos nuestras armas y técnicas a Wen Ruohan, solo seremos corderos esperando la matanza!"

Jiang Yanli se estremeció ante la descripción, recordando los montones y montones de cuerpos de discípulos Jiang que se había visto obligada a ver. Al ver eso, Jiang Fengmian se movió silenciosamente para arrodillarse junto a su hija.

"Yo...", cortó, sin saber qué hacer a partir de ahí. Tenía mucha experiencia guiando e instruyendo, pero consolar estaba, por desgracia, fuera de sus habilidades. La inexperiencia que tenía le hacía dudar.

Pero fue debido a esa vacilación que Jiang Cheng, al parecer, había pasado años pensando que no le quería.

"¿A-Die?", preguntó ella.

"...No pasará con nosotros", susurró él, sonriendo cálidamente. "Te lo prometo".

Aunque no fue tan tranquilizador como esperaba, no obstante, hizo que su hija soltara una pequeña carcajada y asintiera una vez con la cabeza.

"Lo sé".

Mientras hablaban entre sí, el líder de la secta que había comentado resopló indignado ante Nie Mingjue.

"¿Cómo se atreve...?"

"Ya, ya", aplacó Jin Guangshan. "Que todo el mundo se calme. Sólo quiero decir que debemos evitar la confrontación directa". Qingheng-jun también era poderoso, y el clan Gusu Lan es uno de los más fuertes, pero el resultado final del ataque de los Wens siguió siendo el esperado."

La puerta se abrió de golpe.

"Gracias por tus generosos elogios", dijo Lan Xichen, con la voz encendida de humor fácil. "En mi opinión, la falta de capacidades no es una excusa para evitar a los enemigos".

El rostro de Lan Qiren se iluminó con una sonrisa genuina al ver quién había llegado.

"Por lo que acabas de decir", continuó Lan Xichen, "¿el clan Lanling Jin planea rendirse y servir al clan Wen?"

'Ya era hora de que alguien le dijera eso ', pensó Nie Mingjue, haciendo contacto visual con Lan Xichen y sonriendo alegremente.

A pesar de poner los ojos en blanco, Lan Xichen no pudo evitar una sonrisa divertida en su rostro.

"¿Qué?" Jin Guangshan retrocedió al instante, aclarando su garganta y mirando hacia otro lado.

Jin Zixuan era un hijo filial. No debería sentirse tan complacido por esto como lo estaba.

"Saludos tío, líderes del clan", Lan Xichen se inclinó.

"Xichen. He oído que ibas a volver. ¿Por qué llegas tan tarde?"

"Ah, tuve que lidiar con algo en mi camino de regreso. Siento haberte preocupado".

Lan Qiren adelantó una mano y la apoyó en el hombro de Lan Xichen, "está bien. Me alegro de que hayas vuelto. Han pasado... meses. Estoy seguro de que no ha sido fácil".

"Tú eres el que ha tenido que trabajar duro", respondió Xichen, sonriendo cálidamente.

'Meses', se hizo eco mentalmente el verdadero Lan Qiren. 'Estuvo fuera durante meses'.

Su mirada se posó en Wen Ruohan, y las numerosas advertencias de Wei Wuxian resonaron en su cabeza. Negarse a oponerse a los Wen mientras atacaban a los clanes más pequeños había llevado a su sobrino a huir durante meses.

"No pasará con nosotros", se prometió a sí mismo.

"¡Lan-gongzi!", interrumpió alguien con sorna. "¡Eso es fácil de decir para ti, pero el Clan Yunmeng Jiang dio una pelea imprudente y terminó siendo destruido!".

Madam Yu y Jiang Fengmian tenían demasiado entrenamiento como para acobardarse en una situación política como ésta - virtual o no.

Eso no impidió que las palabras resonaran en sus cabezas.

(Deberían haberse preparado mejor. Debería haber luchado antes. Debería haber actuado antes de dejar que casi inmovilizaran a Wei Wuxian. Debería, debería, debería).

Entonces, la figura encapuchada se burló.

"¿Así que estás diciendo que si no hay posibilidad de victoria estás dispuesto a someterte al Clan Qishan Wen?"

"Espera..."

"¡Esa voz!" Jiang Yanli se puso de pie.

"¿Quién eres tú?", preguntó un líder de la secta.

La capa cayó hacia atrás y Jiang Cheng permaneció erguido y orgulloso..

"¡A-Cheng!" Declaró Jiang Yanli con una ovación.

"¡Jiang-xiong!"

"Jiang Wangyin", los ojos de Lan Xichen se abrieron de par en par con sorpresa. La familia de Jiang Cheng se apiñó a su alrededor, susurrando extasiados, y las sonrisas contagiosas se extendieron por todos los espectadores.

Excepto Wen Ruohan.

'Ya no es un suicida', observó. 'Se levanta orgulloso. Ya no está delgado".

Todo parecía indicar que Jiang Cheng volvía a tener su núcleo.

Todos los demás verían esto como un milagro que sólo un inmortal podría lograr. Pensarían que no había otra opción. Pero Wen Qing lo sabía. Y Wen Ruohan lo sabía.

Pero eso no podía ser cierto.

(Pero. Wen Qing ya se había unido a su bando).

Por supuesto que no; ella no tenía ninguna razón para ayudar a Jiang Cheng.

(Pero si Wei Wuxian le rogaba...)

Ella sabía más que eso.

(Fueron los Wens quienes destruyeron el núcleo de Jiang Cheng. Ella podría decir que no estaba involucrada, pero ¿realmente se sentía así?)

La culpa no la controlaría.

(Pero ella podía entender el amor a su hermano.)

Pero nadie ofrecería su propio núcleo. La mera sugerencia era ridícula.

(Pero. El núcleo de Jiang Cheng había reaparecido.)

(Pero. Wen Zhuliu no podía destruir el núcleo de Wei Ying.)

(Pero. Wei Wuxian ni siquiera había intentado defenderse.)

Debe haber alguna otra explicación.

Pero.

Sin darse cuenta de lo que podría significar la presencia de Jiang Cheng, los líderes de la secta simulada reaccionaron conmocionados.

"¡Líder de la secta Jiang!"

Jiang Cheng se estremeció.

"¡Por ​​supuesto que puedes decir esas cosas! ¡El Clan Yunmeng Jiang ya ha sido destruido!" El líder de la secta Yao gritó, causando que la boca de JIang Cheng cambiara a una mueca. "¡Eran diferentes! ¡Necesitamos proteger a los miembros de nuestro clan!"

"Correcto", Jiang Cheng forzó su boca en una sonrisa. "Todo el mundo tiene ideas diferentes. Puedes pensar que está bien convertir a tu gente en esclavos y prostitutas, y puedes estar dispuesto a hacer y tolerar cualquier cosa mientras vivas".

Nie Mingjue emitió un silbido bajo y prolongado.

El líder de la secta reaccionó con indignación, poniéndose de pie.

"¡Jiang Cheng!" él gritó. "¡No tientes tu suerte! Estás tratando tan duro de persuadirnos. ¡Solo quieres buscar venganza, incluso si eso significa derribarnos contigo!"

"¡Así es! ¡Quiero venganza!"

"A-Cheng", susurró Jiang Fengmian con tristeza, haciendo que su hijo lo mirara. Ahora que Jiang Cheng había hablado con Jiang Fengmian, podía ver que no había juicio en el tono de su padre, sino simpatía.

Después de todo lo que les había mostrado la simulación, era difícil que hubiera algo más.

Jiang Cheng respiró hondo y luego siseó: "¡Mientras pueda destruir el Clan Wen, estoy dispuesto a hacer cualquier cosa! ¡Si no tienes el atrevimiento de unirte a mí, siéntate y espera a que Wen Ruohan te destruya!"

Lan Xichen levantó una mano y le recordó en silencio a Jiang Cheng que devolviera el tono.

Nie Mingjue sonrió, reconociendo la determinación en el rostro de su amigo.

"Wen Ruohan es sospechoso y cauteloso. Todos lo sabemos", recordó Lan Xichen a los líderes de la secta reunidos, hablando tan formalmente que era imposible interrumpirlo. "Si nos comprometemos ahora, nos enfrentaremos a problemas aún mayores en el futuro".

"¡Bien dicho!" Nie Mingjue golpeó su taza contra la mesa. "Voy a dejar esto claro ahora mismo. ¡Ya sea que te unas a mí o no, te juro que mataré a Wen Ruohan!"

Nie Huaisang se tensó, se volvió hacia el principal cultivador y se preparó para un estallido ante la flagrante rebelión. Esperó, pero no pasó nada. Aunque Wen Ruohan todavía estaba escuchando, parecía que sus pensamientos todavía estaban ocupados en otra cosa.

'¿Qué diablos podría estar distrayéndolo durante una escena tan crucial? ', se preguntó Nie Huaisang.

Asintiendo una vez, Lan Xichen saludó a Nie Mingjue y dijo: "El líder de la secta Nie es un hombre justo. Estoy impresionado por tu coraje. Nuestro clan Gusu Lan hará lo mismo".

El rostro de Wen Chao comenzó a ponerse rojo llameante ante la rebelión abierta desde todos los lados.

Jin Guangshan comenzó a mirar a su alrededor con nerviosismo.

Al ver eso, Lan Qiren habló: "Cualquiera que decida unirse a nosotros debe hablar ahora ante todo el mundo. Si uno no se une ahora, sino que comienza a participar a mitad de camino, tendremos que discutir si debe ser recompensado o castigado una vez que termine la lucha".

Ante esas palabras, los ojos de exploración de Jin Guangshan se detuvieron abruptamente y se volvió hacia Lan Qiren.

"S-sin embargo, ¿cómo podemos ganar contra Wen Ruohan solo con los clanes que están presentes?"

Al escuchar eso, Wen Chao pudo obligarse a sentarse nuevamente. Así fue: Wen Clan tenía a Wen Zhuliu y su padre. ¿Cómo podrían los otros clanes enfrentarse a esos dos, sin mencionar a sus miles de discípulos?

Sin embargo, Lan Xichen no perdió el ritmo y respondió con firmeza: "El clan Wen puede ser poderoso, pero su gente no es tan leal como cree. Podemos persuadir a los clanes que han esclavizado para que se unan a nosotros."

Y, sin embargo, Jin Guangshan siguió dudando.

"Pero dudo que alguno de ellos se arriesgue a luchar contra el Clan Wen".

Al escuchar eso, Lan Xichen se rio a medias y luego hizo un gesto hacia afuera.

Los observadores fueron llevados a la colina alrededor de la sala de conferencias, donde un gran grupo de cultivadores marchaba cuesta arriba. Los líderes del clan se pusieron de pie para ver mejor, e incluso los ojos de Jin Guangshan se abrieron de sorpresa.

Ante ellos, se había reunido una enorme congregación de cientos de personas. Eran el ejército inicial de la Campaña Sunshot.

Aquí, finalmente, Wen Ruohan levantó la vista.

Siempre había sabido que llevaría un tiempo convertir a los clanes que había conquistado en seguidores leales, por lo que una rebelión no era una sorpresa. Dicho esto, no había nada de malo en tomarse un tiempo para memorizar los clanes de aquellos que eran lo suficientemente arrogantes como para pensar que podían matar al sol.

Los clanes comenzaron a anunciarse.

"¡Ouyang Xin de Baling! ¡El clan Qishan Wen arruinó nuestro santuario ancestral y mató a los miembros de mi clan! Gracias a Lan-er-gongzi pudimos sobrevivir. ¡Ahora, traigo conmigo a cientos de clasmen para que se unan a ustedes!"

"¡Wang Jin de Runan! El clan Wen mató a mi familia e insultó a mis hermanas. ¡Vine aquí por invitación de Lan-er-gongzi! ¡Juro ayudar a destruir el Clan Wen!"

"¡Fu Huan de Hedong! ¡Lan-er-gongzi también me ayudó! ¡Tengo más de 200 personas listas para unirse a ustedes!"

Incluso la boca de Jin Guangshan se había abierto en estado de shock.

"Hanguang-jun, ciertamente", murmuró Wen Ruohan, mirando al muchacho.

Cuando estallara la Campaña del Sol, Nie Mingjue sería molesto, pero Wen Ruohan era más que capaz de enfrentarse a él personalmente, si la situación lo requería.

Los Jades Gemelos de Lan eran una incógnita -sobre todo teniendo en cuenta el poder que Lan Wangji había mostrado como "Hanguang-jun"-, pero dudaba de que las versiones adolescentes pudieran hacer mucho una vez que la Mano Fundidora del Núcleo fuera introducida. Después de todo, Wen Xu ya había conseguido romperle la pierna a Lan Wangji. Habían inspirado a mucha gente a unirse a ellos, pero estaba seguro de que se podría hacer frente a ellos.

Aunque Jin Guangshan no se aliara abiertamente con los Wen ahora que Jin Zixuan había sido herido en el campamento, Wen Ruohan estaba seguro de que el hombre no sería un gran contribuyente en la Campaña del Sol. Su hijo tampoco era una preocupación.

Sí, esto era más de lo que había esperado. La Campaña del Rayo de Sol podría incluso sobrevivir durante unos meses -seguramente más de lo que muchos de sus discípulos de mayor rango esperaban que lo hicieran-, pero aun así no ganarían.

(A menos, claro, que consiguieran el cultivo demoníaco).

"¿Alguna otra objeción, Líderes de Clan?" Preguntó Lan Xichen. Los anuncios continuaron mientras "Sun Shan", "Li Tong", "Wu Ye" y "Yang Zaihan" se presentaban, pero el punto ya había sido establecido.

Jin Guangshan rompió el contacto visual.

La Campaña Sunshot estaba comenzando.

Jin Zixuan dio una gran ovación, tapando los gruñidos de Wen Chao. Esto fue seguido por Nie Huaisang y Jiang Cheng, quienes comenzaron a reírse con deleite.

"¡A-Cheng, has recuperado tu núcleo! A-Xian lo hizo!" declaró Jiang Yanli, con los ojos brillando en lágrimas de agradecimiento.

"Buen trabajo, Wangji, Xichen", dijo Lan Qiren.

Madam Yu asintió una vez a su hijo.

"¡Genial!" declaró Nie Mingjue, dando un paso adelante para dirigirse a toda la multitud reunida. "En la era de los Cinco Emperadores, diez soles hicieron que los ríos se secaran. ¡El sufrimiento que el Clan Wen ha traído no es menor que ese desastre! En la antigüedad, Da Yi derribó los soles para salvar el mundo".

Subió al escenario, dirigiéndose a los cientos de presentes con una energía que se extendía como un incendio, y sonrió.

"¡Ustedes que se han reunido aquí son el Da Yi de hoy! Vamos a llamar a esta batalla contra el Clan Wen ¡La Campaña del Sol!"

Levantó su copa en el aire, y una tremenda ovación estalló entre la multitud.

Las sonrisas entre los observadores eran contagiosas. Nadie podía negar el deleite que se extendía por todo. Entonces, Nie Huaisang se rio.

"Es un poco gracioso. La quema del Muelle del Loto comenzó porque Wang Lingjiao afirmó que una cometa significaba que querías 'derribar el sol'. Supongo que no estaba muy equivocada".

Jiang Cheng puso los ojos en blanco ante eso, pero incluso Lan Wangji pareció sonreír ligeramente.

Entonces se levantó el viento y el cielo se oscureció hasta convertirse en un negro tormentoso. Los cuervos graznaron en la distancia como heraldos de la muerte. Resonó un espeluznante crujido de la madera.

Cuando una presión que aplastaba el alma hizo que los desprevenidos cayeran al suelo, eliminó toda duda sobre dónde estaban.

Pero Wei Wuxian había escapado, ¿no es así? Nadie podía sobrevivir a los Túmulos. No sabían cómo podía haber salido Wei Wuxian, pero tenía más sentido que él sobreviviera allí.

Todavía de pie, Wen Ruohan soltó una respiración entrecortada mientras se adaptaba al esfuerzo.

"¿Por qué hemos vuelto aquí?

En las hondonadas entre los montículos, los huesos ensuciaban el suelo. Parecía haber un nuevo cráneo a medio metro en cualquier dirección. A lo lejos, había un rastro de movimiento en el suelo.

La figura se mezclaba con las sombras detrás de ellos, pero su cinta roja polvorienta los delataba.

"Wei Ying", exhaló Lan Wangji, con los latidos del corazón acelerados.

Apretado contra el suelo, Wei Wuxian se esforzó por levantar la cabeza.

¿Cuánto tiempo había pasado? Jiang Cheng se había reunido con Lan Xichen; de hecho, había llegado hasta Gusu. ¿No significaría eso que esto fue días después?

"Está bien", susurró Jiang Yanli. "Está bien. Todavía está vivo. Estará bien".

Con cada latido, su corazón parecía saltar de sus costillas.

Lentamente, Wei Wuxian continuó arrastrándose hacia adelante. A su alrededor, los espíritus que formaban la potente energía resentida de los Túmulos, susurraban y se reían en sus oídos.

Apenas podía mantener los ojos abiertos.

"¡¿No puede estar de pie?!" Jin Zixuan exigió. La presión que sentían los observadores era la que sentían los espíritus cercanos. No debería afectar a un cultivador en el mismo grado.

"Arrojado", susurró Lan Wangji. "Fue arrojado desde el cielo".

Después de una caída desde esa altura, no habría sido sorprendente que hubiera muerto en el impacto. ¿Tenía las piernas rotas? ¿Su columna vertebral? ¿Sus costillas?

Los dedos de Wei Wuxian se clavaron en la tierra mientras se obligaba a seguir avanzando, ignorando los silbidos y gritos que resonaban en sus oídos.

Se apoyó en el suelo, apenas pudo arrastrarse hacia delante. Estaba siendo aplastado por una energía más resentida de lo que nadie había sentido antes. Y, en la última semana, había sido azotado, asfixiado, golpeado contra el suelo, apaleado por los discípulos de Wen Chao, golpeado por la mano fundidora del núcleo y arrojado.

¿Quedaba algún hueso intacto? Apenas podía moverse, ¿podía siquiera respirar? Había tanto resentimiento y qué tal si una costilla le hubiera perforado el pulmón o qué tal si su garganta se hubiera dañado en la colisión o qué tal si tuviera un brazo roto o una pierna rota o tuviera una conmoción cerebral o un-

Una mano le arrebató el tobillo.

Nie Huaisang gritó.

Wei Wuxian fue sacudido hacia atrás, arrastrado mientras el brazo se hundía más y más en la tierra. Era un cadáver feroz, enterrado bajo la tierra por la que Wei Wuxian acababa de arrastrarse.

Wei Wuxian le dio una patada y trató de levantarse.

La energía resentida cercana reaccionó al movimiento de Wei Wuxian, condensándose en otro brazo y agarrando la pierna que intentaba alejar el cadáver de una patada.

Wei Wuxian lanzó un grito ahogado.

Jiang Fengmian se puso en pie: "A-Xian, corre...".

Pero su movimiento había atraído la atención de más espíritus.

Se arremolinaron.

"¡Wei Ying!"

Miles de feroces fantasmas atacaron a la vez, golpeando su cuerpo como un maremoto. Sus gritos crecieron en volumen, e inundaron la sangre de Wei Wuxian con su odio.

Lan Wangji se lanzó al lado de Wei Wuxian, pero no pudo hacer nada para interferir con los espíritus de la simulación mientras intentaban aplastar los huesos de Wei Wuxian hasta convertirlos en polvo.

"¡Piérdete!", gritó, con la voz quebrada por el esfuerzo físico. "¡Todos ustedes, váyanse!"

Los espíritus sólo rieron más fuerte.

"¡Wei Ying!" Lan Wangji gritó impotente.

Un tornado de resentimiento se formó a su alrededor, atrayendo a otros cadáveres feroces hacia su presa. Los cuerpos avanzaron a trompicones, rodeando a Wei Wuxian y acercándose.

"¡Para!" gritó Jiang Cheng, tratando de bloquearlos del cuerpo de su hermano.

Los cadáveres atravesaron a los observadores, y Wei Wuian luchó por escapar. Sin embargo, por mucho que empujara el suelo o se retorciera, no podía moverse.

Un cadáver le arrebató el pie y tiró de él, casi dislocándole la rodilla y haciéndole gritar. Wei Wuxian dio una patada y se deshizo de su agarre, pero la energía resentida se agolpó e inundó sus pulmones.

Recuperándose de donde había sido pateado, el cadáver volvió a dar un paso adelante. Los espíritus le siguieron, dando vueltas alrededor de Wei Wuxian.

Pronto lo devorarían entero.

Lan Qiren sintió que su corazón se detenía.

Los espíritus se elevaron en el aire -casi fuera de los Túmulos- y luego apuntaron a su presa y se lanzaron.

Se estrellaron contra su pecho, y Wei Wuxian se atragantó con su propia sangre.

Yanli se dio la vuelta.

El tornado de energía resentida se dispersó entonces, sustituido por un vacío blanco que contenía hojas de arce carmesí. En el centro del vacío estaba Wei Wuxian, con sus ropas rectas y limpias a pesar de la forma en que había arrastrado su cuerpo por la tierra hace sólo unos segundos.

"¿Un sueño?" Murmuró Nie Mingjue.

"Estaba agotado", añadió Wen Qing. "Dado el estrés que está sufriendo su cuerpo, no es de extrañar".

El único sonido en el vacío eran los pasos firmes de Wei Wuxian. Entonces, en un gran barrido, se formó el Muelle del Loto. Era tan vivo y vibrante como antes de que los Wen aparecieran.

Después de la destrucción que se habían visto obligados a presenciar, los observadores no podían evitar encontrar la versión anterior del muelle impresionante.

Wei Wuxian levantó la vista y se estremeció al ver a Yu Ziyuan y Jiang Fengmian sentados en una mesa más adelante. Oyó risas infantiles detrás de él, y se giró para ver a dos niños de 10 años corriendo a su lado.

"¡Wei Wuxian, vamos!"

"¡Jiang Cheng, espera!"

Qué cosa tan indeciblemente cruel para mostrar a alguien que acababa de perderlo todo. Incluso sabiendo que sus propios padres seguían vivos y sanos, Jiang Yanli no pudo evitar que se le humedecieran los ojos al verlo.

Jiang Fengmian se giró para mirar a los chicos, e incluso el rostro de Yu Ziyuan se suavizó con una sonrisa que nunca había utilizado en presencia de Wei Wuxian.

Al ver eso, la adolescente Wei Wuxian sonrió cálidamente.

Lan Wangji detestaba el contacto físico con extraños, pero, por un momento, el impulso de rodear con sus brazos a Wei Wuxian fue tan fuerte que superó todo lo demás.

"A-Xian".

Al oír la voz de su shijie, Wei Wuxian se iluminó aún más y miró a la derecha, donde una ilusión de Wei Wuxian de trece años estaba sentada comiendo con Jiang Yanli.

"Despacio. No te atragantes", le aconsejó.

"¡No lo haré! Gracias".

Ante la escena doméstica, Jiang Yanli no pudo resistir la sonrisa que se formó en su rostro. Al verla, Jin Zixuan comenzó a sonreír también.

Justo cuando Wei Wuxian comenzó a acercarse a ellos, su entorno se onduló y cambió al techo de los Recesos de Nube. Era la Wei Wuxian de quince años, de pie frente a Lan Wangji durante su primer encuentro.

"¡Aquí! ¡Sonrisa del Emperador!"

"Aquí está prohibido beber".

"Parece que te valora bastante", susurró Lan Xichen a su hermano. A pesar del tono burlón, había una tensión todavía presente en su cuerpo.

Después de todo, esto era sólo una ilusión; no podían olvidar dónde estaba el verdadero Wei Wuxian.

Entonces, el Lan Wangji ilusorio se volvió hacia ellos.

"¡Wei Ying!", gritó.

La ilusión se desintegró y los ojos de Wei Wuxian se abrieron de golpe.

Por todos lados, una energía resentida se disparaba en su cuerpo. Justo cuando intentaba moverse, estalló. Los árboles muertos salieron despedidos del suelo y el polvo fue lanzado al aire. Cuando se despejó, el cuerpo de Wei Wuxian se levantaba de forma antinatural del suelo.

Dos brazos hechos de resentimiento se extendieron para entrelazar los dedos con los de Wei Wuxian, y otros brazos aparecieron para envolver su pecho, tirando de él. Los fieros cadáveres cercanos se alzaron como fervientes adoradores, esperando los restos que dejaban los espíritus.

"¡Lo está absorbiendo!"

Lan Wangji alargó la mano e intentó inútilmente levantar a Wei Wuxian, pero no había forma de que el otro chico recibiera ayuda alguna.

La energía gruñó, y dos ojos carmesí se abrieron de golpe junto a la cabeza de Wei Wuxian, un espíritu se separó de la manada para mostrar su expresión hambrienta.

Abajo, los feroces cadáveres empezaron a subirse frenéticamente unos encima de otros mientras luchaban por probar. Ellos y los espíritus comenzaron a agarrar impacientemente la forma de Wei Wuxian, esperando que su carne bajara a sus brazos.

Donde lo destrozarían.

Lan Wangji no pudo alejar a Wei Ying. No pudo detener a los fieros cadáveres. No pudo purificar los espíritus que lo arrastraban. Podía ser uno de los cultivadores más fuertes de su generación, pero no había nada que pudiera hacer para ayudar a Wei Wuxian.

Su propia impotencia le carcomía por dentro.

Entonces, Wei Wuxian cayó lo suficientemente bajo como para que el yao lo alcanzara.

Gritó.

Jiang Yanli se apartó.

Era una lucha, una batalla. Cada cuerpo feroz intentaba tirar de él hacia abajo, pero algunos espíritus intentaban tirar de él hacia arriba, y todos estaban en lados diferentes, así que lo estiraban hacia la izquierda y la derecha y hacia arriba y hacia abajo al mismo tiempo, y tiraban y retorcían, y se suponía que los cuerpos humanos no debían doblarse de esa manera, y sus gritos se hicieron aún más fuertes y...

Si no tenía un brazo roto antes, ciertamente lo tenía ahora.

Nie Huaisang se levantó y corrió hacia su hermano, sintiendo que las náuseas se acumulaban en su garganta.

No importaba cuánto gritara Wei Wuxian, los cadáveres feroces y los fantasmas resentidos no tenían razón para preocuparse.

Cerró la boca y trató de defenderse, pero los cadáveres se limitaron a darle la vuelta y empezaron a golpearlo contra los acantilados para silenciarlo. Mientras tanto, los espíritus comenzaron a atacar su cuerpo directamente. Volaron por sus venas, haciéndolas abultar y agrietar mientras invadían su cuerpo como parásitos.

Sus gritos se convirtieron en jadeos ahogados de agonía.

Entonces, el suelo se resquebrajó y un tsunami de energía resentida atravesó los feroces cadáveres para envolver las extremidades de Wei Wuxian como zarcillos. Los espíritus le sofocaban; los cadáveres le rompían; la energía resentida invadía su mente.

En un instante, las visiones se agolparon en los pensamientos de Wei Wuxian. La quema de Lotus PIer, los cuerpos de los Jiangs.

Sus ojos se abrieron de nuevo, encendidos no por el miedo, sino por la determinación.

Una mano huesuda le arañó el pecho y un chorro de sangre empezó a bajar por su brazo. Los cadáveres cercanos lo olieron.

Babeando fuertemente, el más cercano abrió la boca...

"¡Detente!" ordenó Wei Wuxian. Por un momento, pareció que iba a funcionar.

Entonces, su cuerpo sufrió un espasmo.

"¡Wei Ying!"

Al igual que cuando había utilizado el cultivo demoníaco para salvar al conejo, la energía resentida se vertió en su cuerpo e hizo que sus venas se abultaran por el esfuerzo. La última vez había estado en un bosque de los Nublados, luchando contra un solo cadáver feroz.

Ahora estaba en los Túmulos, luchando contra miles.

Wei Wuxian jadeó y se ahogó en su grito, sin tener suficiente aire en su cuerpo para emitir un sonido. Se agitaba y se retorcía en las garras de los espíritus, y el dolor se extendía por todo su cuerpo.

Pero el cadáver se había detenido.

Wei Wuxian aún no estaba muerto.

Los observadores se quedaron en silencio, viendo cómo el chico se agitaba en la agonía mientras luchaba contra la energía resentida por el control.

De repente, Nie Mingjue se rio de forma despectiva y rota: "Tenemos que 'mantenerlo alejado de la tentación', dijimos".

Al escuchar eso, Lan Qiren se congeló.

Desde las escenas iniciales, la principal razón de Lan Qiren para ver la simulación era averiguar cómo evitar que se inventara el cultivo demoníaco. Necesitaba alguna forma -cualquier forma- de evitar que Wei Wuxian siguiera su curiosidad y rebeldía hasta su oscura conclusión. Había pensado que la parte más difícil sería decidir si había una forma de detener a Wei Wuxian sin matarlo. Que tendría que apartar a Wei Wuxian del poder en todo momento.

Que Wei Wuxian había elegido inventarlo.

Su cuerpo siguió temblando y Wei Wuxian jadeó lentamente: "Fuera".

Los espíritus que habían estado pululando dentro de su cuerpo y presionando su garganta retrocedieron un puñado de centímetros.

Si los hubiera detenido incluso un segundo después, podría haberse asfixiado.

Era posible que alguien estuviera demasiado cansado para resistir un ataque. Era posible que alguien estuviera inconsciente mientras se producía un ataque. Era horrible cuando ocurría, pero era posible que alguien fuera suicida.

Pero nadie no se resistiría si sintiera que lo asfixian. Eso simplemente no era algo que los humanos fueran capaces de hacer. Si pensaba que había la más mínima posibilidad de escapar, su cuerpo le obligaría a hacerlo.

"Es..." Lan Qiren volvió sus ojos hacia el tembloroso Wei Wuxian. "No podría ser más fácil prevenir esto".

Temblando en el suelo, Wei Wuxian luchó con la energía resentida por el dominio. Su voz estaba demasiado ronca para gritar, pero la insoportable agonía permanecía.

"¿Cuánto tiempo crees que estará atrapado en los Túmulos?" se preguntó Jiang Yanli en voz alta, demasiado temerosa de la respuesta como para elevar su voz por encima de un susurro.

Habían pensado que sería imposible sobrevivir más de unas horas. La única razón por la que estaba tardando más era por el cultivo demoníaco de Wei Wuxian; los Túmulos eran claramente tan mortíferos como se rumoreaba.

¿Cuántos días más estaría atrapado en ese tortuoso paisaje infernal?

Las miradas enviadas a Wen Chao habrían incinerado a un hombre más valiente.

Entonces, con un tono asquerosamente tranquilo, Lan Sizhui narró: "Dos días más".

"¿Perdón?" Preguntó la señora Jin.

Nie Mingjue maldijo, luego dirigió su mirada a Wen Ruohan también.

Primero, oyeron el fuerte jadeo de Wei Wuxian.

Luego, lo vieron correr por el valle.

Luego, vieron de qué estaba huyendo.

"A-Xian", exhaló Jiang Fengmian.

Todos los demás se quedaron helados de asombro.

Aunque los cadáveres feroces no solían ser muy rápidos, estos eran los de los Túmulos. Su resentimiento no tenía parangón con nada del exterior, por lo que, a pesar de sus cuerpos desgastados, incluso un cultivador entrenado lucharía contra ellos. Wei Wuxian, con una férula hecha a mano alrededor de su pierna posiblemente rota, tenía muy pocas posibilidades de escapar de uno.

Y ahora mismo, docenas le perseguían.

Wei Wuxian giró en una curva cerrada alrededor de uno de los montículos, y luego tropezó con su pierna mala. Su cuerpo se estrelló contra una pequeña colina.

"¡Wei-xiong, muévete!"

Un espíritu se zambulló y creó un cráter donde Wei Wuxian había estado apenas medio segundo antes. Jadeando por el esfuerzo, Wei Wuxian se obligó a levantarse y a seguir moviéndose.

Aunque parecía que la pierna no estaba completamente rota, su velocidad seguía disminuyendo considerablemente.

Pero estaba tratando de evitar el cultivo demoníaco.

Y aun así se había visto obligado a desarrollarlo.

"Y cuatro días después de eso".

"¿Más?"

Wei Wuxian tropezó con un campo de bambú empapado de energía resentida. Aunque los fieros cadáveres no pudieron alcanzarle allí, los espíritus fueron aún más rápidos. A estas alturas, la suciedad que cubría sus ropas había hecho que incluso la túnica interior escarlata se volviera negra como el carbón.

A nadie se le escapaba que los pómulos de Wei Wuxian eran demasiado evidentes.

(La falta de comida y de descanso estaba haciendo que se marchitara).

Jiang Yanli apretó los puños.

"Y seis días después de eso".

"¡¿Otra vez?!" Lan Qiren exigió.

Wei Wuxian se vio acorralado y cayó de rodillas. La tensión de sus piernas le obligó a doblarse; ni siquiera él podía hacer que su cuerpo funcionara con tanto dolor. Los espíritus lo alcanzaron con avidez.

"Para", ordenó de nuevo, apenas capaz de hablar con lo seca que se le había quedado la garganta. Esta vez, en lugar de sufrir espasmos debido a la energía resentida que recorría su cuerpo, se limitó a respirar hondo unas cuantas veces, y luego se obligó a levantarse de nuevo con las piernas temblorosas.

Al oír el estado de su garganta, a Nie Huaisang se le ocurrió un pensamiento repentino.

La comida era una cosa, pero el agua era aún más importante. Cualquier agua que estuviera en los Túmulos, seguramente estaría muy contaminada por la energía que había allí.

¿Qué clase de efectos tendría eso en una persona?

"Y ocho días después de eso".

"¡Sólo detente!" Jiang Cheng suplicó.

Una vez más, Wei Wuxian corría sin tener en cuenta su pierna dañada o su brazo roto o su tobillo torcido o sus pulmones cortados. Sus labios estaban tan secos que parecían agrietarse de nuevo cada vez que se movían, y sus ojos luchaban valientemente por mantenerse abiertos.

Cada pocos metros, tropezaba como si se hubiera quedado dormido a mitad de camino.

"... ¿Cuánto tiempo ha estado corriendo?"

"¿Ha podido dormir algo?"

"¿Ha bebido algo?"

El silencio fue su única respuesta.

Incluso sin la presión de los Túmulos funerarios pesando sobre él, Nie Mingjue se vería obligado a sentarse.

La guerra era un evento terrible y traumático que podía dejar con pesadillas incluso a los soldados más fuertes. Había escuchado historias de soldados no cultivados que se convertían en aterradores cadáveres feroces después de la muerte debido a sus experiencias. Aunque él no había participado personalmente en una guerra (todavía), algunas cacerías nocturnas conllevaban riesgos similares. El líder de la secta Nie no estaba desacostumbrado al agotamiento por las constantes batallas. Los soldados y cultivadores podían verse obligados a luchar varias veces al día, y su sueño estaba plagado de terrores indecibles. Esta combinación había vuelto locos a muchos hombres, llenándolos de energía resentida y creando algunos de los monstruos más poderosos de la historia.

Pero al menos podían dormir.

Ahora mismo, Wei Wuxian pasaba cada minuto de cada hora de cada día corriendo por su vida sin un segundo de descanso. Dormir era un lujo en el que apenas podía pensar. Y, si no podía descansar, ¿cómo iba a beber? ¿Cómo iba a dormir? ¿Cómo iba a comer?

(¿Qué podría comer?)

A estas alturas, la piel de Wei Wuxian era tan pálida que prácticamente se confundía con los cadáveres. Si no fuera por la cinta marrón que aún llevaba en el pelo, habría sido casi imposible reconocerlo.

Wei Wuxian se giró hacia la izquierda.

Una mano le esperaba.

Los ojos de Jiang Cheng se cerraron de golpe.

Derrapando, Wei Wuxian logró evitar la mano que le golpeaba el cuello, que en cambio le agarró y le arrancó la cinta del pelo. Wei Wuxian giró para enfrentarse a los monstruos que se acercaban, con el pelo revoloteando a su alrededor.

La agotadora indiferencia de sus ojos pertenecía al Patriarca Yiling, no al Wei Wuxian que habían conocido en los últimos días.

(Pero éste era el Patriarca Yiling, ¿no es así?)

Aislado por todos lados, Wei Wuxian fue retrocediendo lentamente hacia un acantilado por los cadáveres que se acercaban. Uno saltó.

"¡Detente!", gritó de nuevo.

El único cadáver se detuvo.

Los otros se limitaron a frenar.

"¡Alto!", repitió, deteniendo a otro. "¡Para! ¡Para! ¡Para!"

Pero había demasiados para detenerlos uno por uno. Demasiados para concentrarse en todos a la vez.

Se le escapó el control, y en el siguiente segundo había caído de rodillas, tratando de forzar la energía de sus venas, de nuevo abultadas. El esfuerzo le hizo subir la sangre a la garganta.

"Fuera", susurró, sin tener energía para algo más fuerte.

Los espíritus se calmaron, pero no abandonaron su cuerpo. Los cadáveres continuaron su ominosa aproximación.

"Parar", siseó de nuevo, con la desesperación a flor de piel. "Deténganse. Deténganse. Deténganse. Deténganse. Paren".

Por fin, lo hicieron. Al ver eso, Wei Wuxian finalmente se relajó.

Las ojeras parecieron consumirle y sus párpados se cerraron momentáneamente.

En ese medio segundo de falta de atención, algo le arrebató el brazo y lo lanzó por el acantilado.

"¡Wei Ying!" gritó Lan Wangji, obligado de nuevo a ver cómo el cuerpo incorpóreo de Wei Wuxian se desprendía de su agarre.

Wei Wuxian se estrelló contra una roca y jadeó -el viento le abandonó- y luego cayó al suelo.

No se movió.

"Le han dejado inconsciente", siseó Wen Qing, arrodillándose junto al derrumbado Wei Wuxian como si pudiera hacer algo para ayudarle. De cerca, el agotamiento del muchacho era aún más evidente.

Medio segundo de relajación había permitido que un espíritu lo tirara por un precipicio. ¿Significaba eso que Wei Wuxian tenía que mantenerse completamente concentrado en todo momento? ¿No podía descansar ni un segundo?

(Incluso con un núcleo, eso sería imposible).

̶S̶i̶n̶ ̶u̶n̶o̶,̶ ̶s̶u̶ ̶m̶u̶e̶r̶t̶e̶ ̶e̶r̶a̶ ̶s̶e̶g̶u̶r̶a̶.̶

Al ver que su presa por fin había dejado de moverse, los cadáveres dieron la vuelta y se prepararon para entrar a matar. Aunque carecían de conciencia para hacer planes detallados, su deseo compartido de atrapar por fin a la presa que se les había escapado de las manos durante la última semana les permitió cooperar.

El cadáver más fresco, al que le faltaban las piernas, se arrastró sobre Wei Wuxian.

Obligándose a seguir observando, Lan Wangji apretó los puños con la suficiente fuerza como para que le saliera sangre.

El cadáver se subió al cuerpo de Wei Wuxian.

A través de sus piernas....

Por encima de su cintura....

Por el pecho....

Llegó a su lado, y se inclinó hacia abajo.

Nie Huaisang miró hacia otro lado.

Lentamente, con cansancio, Wei Wuxian abrió los ojos.

Se estremeció.

"¡Detente!"

Alrededor de su cuello jadeante, la boca del cadáver se congeló abierta, a mitad de la mordida. Su voraz baba goteaba sobre el cuello de Wei Wuxian y se deslizaba por sus clavículas. Cuando Wei Wuxian se dio cuenta de que podía sentir los dientes que empezaban a clavarse en ambos lados de su cuello, su ritmo cardíaco se triplicó.

"Fuera", siseó. "Fuera. Suéltame, suéltame".

Presa del pánico y sin poder hablar del todo mientras le apretaban la garganta, la orden no salió más que un jadeo apenas perceptible. El cadáver no se movió.

Después de lo que seguramente fueron días y días de gritos, su garganta se había vuelto demasiado ronca para emitir un sonido.

Al ver el color de la piel de Wei Wuxian, la insana falta de grasa en sus huesos y sus venas abultadas por el frecuente uso de energía resentida, Jin Guangshan se sintió abrumado por la imposibilidad de lo que se exhibía ante él. No debería haber sido una sorpresa -la gente lo había intentado durante siglos antes de Wei Wuxian- y, sin embargo, la magnitud de las circunstancias dejó atónitos a todos los presentes.

Aunque quisiera, Jin Guangshan no estaba seguro de poder obligar a Wei Wuxian a inventar el cultivo demoníaco. ¿Acaso todo lo que había permanecido en la simulación no tenía sentido ahora?

¿Fue todo para nada?

(No. No, no lo era.)

No podían obligar a Wei Wuxian a inventarlo, pero no tenían por qué hacerlo; fuera, el verdadero Wei Wuxian estaba siendo enseñado por el propio Gran Maestro del Cultivo Demoníaco. Nadie podía quejarse cuando el cultivo demoníaco era la única forma de salir.

A estas alturas, Jin Guangshan había memorizado por completo los gustos, las aversiones, los tics nerviosos, los mayores temores y los deseos más fuertes del muchacho. Sería fácil ganarse su confianza.

Jin Guangshan miró al genio debilitado, herido y agotado, y sintió que sus labios se curvaban de satisfacción.

Mientras tanto, Wei Wuxian seguía respirando con dificultad, obligándose a no dejarse corromper por el cultivo demoníaco. Tragó, y los dientes que rodeaban su cuello se apretaron más.

"Fuera", ordenó Wei Wuxian con dureza, y luego se atragantó mientras la energía resentida inundaba sus venas.

La mera visión hizo que Nie Huaisang tuviera náuseas.

Sin embargo, los cadáveres y los espíritus retrocedieron lentamente, dejando solo a Wei Wuxian, que jadeaba con fuerza, mientras luchaba por controlar la energía resentida. Temblando, se dio la vuelta y se levantó temblorosamente del suelo.

"Hazla circular", se dijo a sí mismo. "No dejes que se prolongue".

Cada vez que Lan Qiren había visto una oportunidad para la redención de Wei Wuxian, se había recordado a sí mismo que no había excusa para inventar el cultivo demoníaco. Que nada podía justificarlo.

Tal vez Cangse Sanren estaba en lo cierto cuando lo llamó viejo tonto.

El brazo de Wei Wuxian sufrió un espasmo y luego se quedó sin fuerzas, perdiendo momentáneamente la energía del resentimiento.

"No..."

"¡Maldita sea!" Wei Wuxian gritó, suprimiendo con fuerza la energía de nuevo. Se mordió la lengua con la suficiente fuerza como para sacar sangre, y se obligó a abrir los ojos inyectados en sangre.

"Mira las ojeras", susurró Jin Zixuan.

Una vez que lo hizo, Jiang Cheng deseó no haberlo hecho.

"Averígualo", se ordenó Wei Wuxian, tratando de superar con fuerza su agotamiento. "Resuélvelo. Averígualo. Averígualo, sal, encuentra a Wen Chao y mátalo".

Sus ojos brillaron de color carmesí y en su rostro se formó una sonrisa.

El mundo se volvió negro.

✷✷⁠✷⁠✷✷⁠✷✷⁠✷✷✷

Cuando los observadores volvieron al vacío blanco, se quedaron de nuevo en silencio.

Cada uno de ellos había pensado que vería la invención del cultivo demoníaco -el nacimiento del Patriarca Yiling- con disgusto. ¿Por qué no lo harían? Incluso aquellos que esperaban utilizarlo para sí mismos no veían cómo su invención podía ser otra cosa que una apuesta egoísta por el poder.

(Jiang Fengmian sintió que le temblaban las manos y se preguntó por qué su fe en Wei Wuxian había sido tan escasa).

La gente arrojada a los Túmulos siempre moría. Si Wei Wuxian era el que cambiaba eso, no era porque estuviera dispuesto a hacer algo que los demás no hacían. Fue porque fue el único lo suficientemente brillante como para considerar una solución cuando no le quedaban otras opciones.

Y, sin embargo, le habían condenado sin piedad por su elección sin entender el panorama completo.

¿Qué podían decir ahora?

Entonces, el inusualmente aturdido Wen Ruohan tarareó.

"No usó su núcleo dorado para escapar".

"¡¿Perdón?!" Madam Yu siseó. "¡Ha sido... azotado, y los discípulos de Wen Chao le hirieron y Wen Zhuliu le golpeó y fue apuñalado! Por supuesto que no le queda mucha energía espiritual para eso!"

Pero Wen Ruohan no estaba escuchando. En su lugar, se había vuelto hacia Wen Qing, que ya le devolvía la mirada. Hicieron contacto visual durante varios segundos, y se produjo una conversación silenciosa.

Ninguno de los dos pudo encontrar ninguna prueba para refutar la transferencia del núcleo.

En cambio, lo único que pudieron encontrar fueron hechos que la apoyaban.

Wen Qing rompió primero el contacto visual, sintiendo que su corazón acelerado retumbaba en su cabeza. No importaba el tiempo que pasara pensando en ello, no podía ver cómo era posible que Wei Wuxian experimentara todo eso apenas unos días después de sentir que su núcleo le era arrebatado.

(¿Tal vez su yo del futuro había encontrado una forma de usar anestesia?)

(Quería creerlo, pero todo el optimismo que habían tenido en los últimos días se había demostrado erróneo una y otra vez).

'No, no puede ser cierto', se recordó a sí misma. 'El hecho de que Su Excelencia y yo no podamos aportar pruebas no significa que no existan. No puedes estar considerando esto honestamente'.

Y sin embargo, si alguien estaba dispuesto a renunciar a su núcleo, sería Wei Wuxian.

Al ver que Wen Qing empezaba a caer lentamente en la aceptación, Wen Ruohan sintió que se encendía en su interior una rabia aterradora. Había visto el núcleo de Wei Wuxian. Su poder era fenomenal, especialmente teniendo en cuenta su infancia en las calles. Si a Wei Wuxian se le daba la oportunidad de cultivarlo durante unos años más, los cambios que podría provocar eran ilimitados. Alguien así era más valioso que una docena de sectas menores juntas.

Y lo había regalado.

No podía ser cierto -Wen Ruohan estaba seguro de que había otra explicación, aunque todavía no se le había ocurrido-, porque el cultivo lo era todo para su sociedad. Todo líder de clan debía ser un cultivador; cualquier persona digna de respeto debía ser un cultivador; cualquier persona peligrosa debía ser un cultivador. Aunque a Wei Wuxian no le importara eso, un núcleo dorado era la puerta a la inmortalidad. Sin él, Wei Wuxian envejecería como cualquier otro no cultivador.

Estaría dando al heredero Jiang años de su vida.

Y Jiang Cheng había tratado de matarlo hace menos de una semana.

Pero ese era el quid de la cuestión, ¿no? Los Jiang le habían destrozado tanto que prefería destrozarse por ellos antes que aceptar a un Jiang Wanyin sin corazón. Podría haber logrado cualquier cosa, y sin embargo lo echó todo por la borda por él.

Intencionadamente o no, el clan Yunmeng Jiang le había arruinado.

Y seguirían haciéndolo a menos que Wen Ruohan interviniera.

Después de todo lo que se había mostrado, no había ninguna posibilidad de que la gente reunida aceptara enviar a Wei Wuxian a los Wen. Sin embargo, eso estaba bien.

Mientras Wei Wuxian se alejara de los Jiang, Wen Ruohan tenía todo el tiempo del mundo.

Las sectas Nie, Jin o Lan podrían llevarlo. Nie Huaisang era amigo de Wei Wuxian; Jin Zixuan era la prometida de su shijie; Lan Wangji era la pareja del muchacho. Cualquiera de esas sectas seguramente estaría dispuesta a acogerlo.

"¿Pasa algo, Su Excelencia?" Preguntó Lan Xichen, con voz frígida. Parecía que la mirada de Wen Ruohan se había quedado en Lan Wangji un segundo más.

Sin embargo, impertérrito, Wen Ruohan se limitó a seguir mirando fijamente y dijo: "Si necesita algún recurso extra para acelerar la fecha de la boda, Qishan estará encantado de prestarle ayuda".

Incluso Lan Wangji se quedó boquiabierto ante la oferta.

"¿Perdón?" Lan Qiren exigió. "Nadie se va a casar..."

"¿De verdad puedes decir que Wei Wuxian no se lo merece después de todo lo que hemos visto?"

El silencio que siguió dijo mucho más de lo que las palabras podrían decir. Las orejas de Lan Wangji se volvieron de color rosa brillante.

"...Wei Ying y yo aún no nos conocemos", señaló de mala gana, intentando que su voz no temblara a pesar de la abrumadora vergüenza.

(Por suerte, todo lo que tenía que hacer para dejar de sonrojarse era recordar la forma en que los cadáveres feroces casi habían destrozado a Wei Wuxian).

"¿Por qué iba a importar eso?" preguntó Jin Guangshan, captando el estado de ánimo de Wen Ruohan. "Está bastante claro que se enamoran el uno del otro casi inmediatamente. También podría mudarse a los Receses de las Nubes".

"¡Nadie va a llevar a Wei Wuxian a ningún sitio!" Jiang Cheng soltó un chasquido, olvidando por un momento con quién estaba hablando. Al darse cuenta de que le había gritado a un líder de secta, se volvió hacia su madre, temiendo un arrebato.

Pero ella simplemente asintió.

"Debería quedarse con nosotros. Es nuestro discípulo principal".

"¿No has pasado años deseando que no lo fuera?"

"Eso... eso fue un error. Él pertenece a la Secta Jiang".

Jiang Fengmian asintió: "No lo tocarás".

"¿Qué? ¿Vas a protegerlo de mí?" Preguntó Wen Ruohan con una carcajada. Qué ironía escuchar eso de las personas cuyas últimas palabras hicieron que Wei Wuxian cortara el trabajo de su vida.

Y sin embargo, tuvieron la audacia de...

"¿Por qué no?" Preguntó Jiang Yanli. "La simulación ya nos ha mostrado que A-Cheng está dispuesto a sacrificarse para proteger a A-Xian. Todavía..."

"Dada su reacción posterior, yo diría que es obvio que no se dio cuenta de que estaría sacrificando su núcleo".

Los hermanos Jiang se estremecieron.

Frunciendo más el ceño, Lan Wangji objetó: "Sin embargo, sigue siendo..."

"¿Un sacrificio digno?" Supuso Wen Ruohan con una risa burlona.

(Sabía que debía volver a retractarse. Sabía que prácticamente estaba tirando la sutileza por la ventana. Sabía que no tenía ninguna prueba. Y sin embargo...)

"¿Qué estás tratando de decir exactamente?" Nie Mingjue levantó una ceja.

En ese momento, la ira de Wen Ruohan superó su racionalidad.

"Si Wei Wuxian no hubiera estado allí, Jiang Cheng habría corrido de vuelta tan pronto como hubiera visto los cuerpos de sus padres y habría perdido su núcleo a pesar de todo. Lo que has hecho por él no es nada en comparación con lo que él ha hecho por ti".

"¿Qué?"

"Entonces", continuó Wen Ruohan, lo suficientemente impaciente como para abandonar toda forma de diplomacia. "¿Los Lans lo acogerán una vez que salgamos?"

Aunque no tenían objeciones personales, la falta de participación de Wei Wuxian en la decisión hizo que los tres Lans guardaran silencio. En esa pausa, Jiang Fengmian decidió hablar.

"...Sigue siendo mi discípulo principal..."

"Está desperdiciado por ti".

Ni siquiera Jin Guangshan pudo entender la repentina furia de Wen Ruohan.

(En silencio, Nie Huaisang miró a Wen Qing, notando la cuidadosa distancia que mantenía con los oradores).

Sin embargo, después de ese arrebato de enfado, Wen Ruohan pareció recomponer sus emociones. Sabía que ninguno de los presentes estaría de acuerdo en alejar a Wei Wuxian de los Jiangs todavía; hasta que no pudiera demostrar la transferencia del núcleo, no tenía sentido pedirlo.

Por ahora, se había demostrado claramente que la lealtad de Wei Wuxian a los Jiangs era tan fuerte que ninguna forma de soborno lo alejaría de ellos. Wen Ruohan tendría que reiniciar su proceso de reflexión. Con suerte, lo que le hizo matar a Jiang Yanli le daría algunas ideas. Teniendo en cuenta que la lealtad de Wei Wuxian había sobrevivido, Wen Ruohan no podía esperar a ver cuál era el detonante de eso.

(Brevemente, se preguntó si debía matar a Wen Qing en cuanto salieran para eliminar cualquier posibilidad de que Wei Wuxian delatara su mayor forma de protección. Un activo tenía muchos menos usos cuando se podía dañar fácilmente).

(Aunque tenía que admitir que los increíbles niveles de resistencia del chico eran extremadamente impresionantes).

A dos metros de distancia, Wen Qing evitaba con mucho cuidado el contacto visual con los demás. Sinceramente, no sabía por qué ella y Wen Ruohan estaban tan pendientes de una teoría que obviamente no era cierta. Estaban sacando conclusiones demasiado rápido para ser racionales. Era muy posible que la historia de Wei Wuxian sobre Baoshan Sanren fuera cierta.

(Pero, ¿y si no lo era?)

A medida que el silencio se prolongaba, pronto quedó claro que Wen Ruohan no tenía nada más que decir. Madam Yu enrojeció de indignación y consideró dar un paso adelante para continuar la conversación, pero una mirada suplicante de Jiang Fengmian la hizo retroceder de mala gana.

No sabía en qué estaba pensando Wen Ruohan. Trataba bien a su discípula principal.

(Ella sabía que no lo hacía.)

Entonces ella comenzaría a tratarlo bien una vez que salieran.

(¿Lo haría?)

Lo haría.

Sin embargo, no pudo evitar pensar en la disculpa que le había dado a Wei Wuxian hacía poco tiempo. La incredulidad de su respuesta había silenciado el resto de lo que había planeado decir.

Sí, podía disculparse.

¿Pero él la creería?

[Por supuesto que no. ¿Qué razón tenía él para confiar en ella? Podía decirle que la llamara "tía Yu" todo lo que quisiera, pero ya era demasiado tarde para que le pareciera auténtico. Después de todo lo que había hecho, ¿cómo podía esperar que él confiara en ella?]

Ella frunció el ceño, mirando al suelo.

Al ver eso, Jiang Fengmian se adelantó un poco, preguntándose si debía tratar de consolar a su esposa. No la amaba -su matrimonio se había producido antes de que él pudiera empezar a hacerlo, y sus frecuentes discusiones impedían que se formara nada-, pero seguía siendo su esposa. Quería tener una relación mejor que la que tenían ahora. Sabía que debía decir algo.

Entonces, recordó la cara de Wei Wuxian, impregnada de cansancio y dolor, y recordó que una de las últimas cosas que había hecho Madam Yu había sido azotar la espalda de Wei Wuxian hasta hacerla sangrar.

Y entonces ella le había culpado, pero aun así había esperado que protegiera a Jiang Cheng "aunque muriera".

(¿Fueron sus propias últimas palabras realmente mejores?)

Algunos refunfuños y discusiones continuaron entre los adultos, pero la mayoría de los presentes se quedaron callados. Tras el arrebato de Wen Ruohan, los observadores habían tenido por fin la oportunidad de asimilar lo que acababan de ver.

Ahora mismo, no se podía negar: estaban equivocados, Wei Wuxian no había tenido elección en el asunto.

No había nada que pudieran decir.

✷✷⁠✷⁠✷✷⁠✷✷⁠✷✷✷

Poco antes de que ese segmento terminara, se abrió una puerta en una dimensión paralela pero futura.

"¡Hanguang-jun!" Lan Jingyi saludó con su habitual emoción cuando Lan Wangji entró.

"Ah, ¿eres tú Lan Zhan?" Wei Wuxian llamó desde otra habitación. "¡Ven aquí!"

Una vez que entró en la habitación trasera, Lan Wangji vio que Sizhui, Zizhen y Jin Ling ya estaban presentes. Se sentaron alrededor de Wei Wuxian, esperando ansiosamente nuevas instrucciones.

"Muy bien", Wei Wuxian dio una palmada. "Ahora que estamos todos aquí, es el momento de la explicación. Aunque esto nos permitirá ver a la gente de dentro, no vamos a poder interactuar con ellos. También podremos ver la visión que les has enviado, aunque puede que esté un poco confusa por la cantidad de capas que tiene. Bueno, pues... Lo que realmente nos importa es la gente que está mirando de todos modos, así que está bien".

El cuarteto de rábanos asintió en señal de comprensión.

"¡Genial!" declaró Wei Wuxian. "¡La operación "Averiguar lo mal que han ido las cosas" está en marcha! Recuerden tomar notas de la gente que vean allí, tendremos una discusión sobre cómo su error impactará en ese mundo cuando regresemos."

Un coro de "Sí, Senior Wei" siguió.

"Muy bien, entonces, todos vayan a acostarse ahora", instruyó Wei Wuxian. "No tengo suficientes recursos para hacer esto de nuevo, ¡así que será mejor que lo hagamos valer esta vez!"

Con un movimiento de su dedo, Wei Wuxian recogió una mezcla de su propia sangre y material de los túmulos funerarios que potenció el poder de la técnica. La matriz era bastante sencilla, pero su naturaleza experimental significaba que Wei Wuxian incluiría todas las precauciones de seguridad imaginables.

No aceptaría que uno de los jóvenes resultara herido por su culpa.

Finalmente, la matriz estaba terminada, y el orbe rojo de la Puerta Píngxíng se colocó en el centro. Un momento después, todo se volvió negro.

"¡¿Señor Wei?!"

"¡Wei Wuxian!"

"¡Todos vamos a morir!"

"Cálmate", ordenó Lan Wangji, silenciando los gritos de Ouyang Zizhen, Jin Ling y Lan Jingyi. "Te dijo que esto pasaría, ¿no es así?"

"Estoy bastante seguro de que sí", añadió Wei Wuxian.

La repentina oscuridad había puesto en marcha a los juniors, pero ahora agradecían que nadie pudiera ver el rubor en sus rostros. Al menos los únicos presentes eran su Hanguang-jun y el Senior Wei; si Lan Qiren hubiera estado presente, el sermón que recibirían duraría hasta el final del día.

"Oh, creo que la luz se está asentando", observó Wei Wuxian.

Y tenía razón. En los siguientes segundos, el oscuro abismo que rodeaba a los cuatro rábanos y a los dos adultos iluminó el mundo de un gris deprimente. Sin embargo, a los recién llegados no les importó; sus ojos se concentraron en los vigilantes del otro dimensión.

Había algunas caras conocidas y otras desconocidas. Gracias a los uniformes, no era muy difícil saber quiénes eran todos. El adolescente Hanguang-jun, Sandu Shengshou, Zewu-jun y el Agitador de Cabezas eran los más fáciles de reconocer, pero los demás se podían deducir con bastante facilidad.

"Espera... ¿es eso....?" Jin Ling se giró para hacer una doble toma, pero sus ojos no le engañaban. "... ¿A-Niang? ¿A-Die?"

Wei Wuxian se estremeció.

Los jóvenes se quedaron boquiabiertos, mirando a Jiang Yanli y Jin Zixuan, que estaban acurrucados. A Wei Wuxian y a Lan Wangji les pareció extraño, porque la pareja sólo había empezado a gustar de verdad después de la guerra.

(Aunque sea, Wei Wuxian se alegró de que la imagen idealista de Jin Ling del amor eterno de sus padres no se rompiera).

En silencio, Wei Wuxian se unió a Jin Ling frente a Jiang Yanli, disfrutando de su brillo durante unos preciosos segundos.

"¿Es realmente un joven Hanguang-jun?" preguntó Lan Jingyi, acercándose y mirando descaradamente.

"Lo es", confirmó Lan Wangji. Sizhui y Zizhen se acercaron corriendo, observando incrédulos a un Lan Wangji más joven que ellos. Zizhen incluso alargó la mano para tocarlo, sólo para atravesarlo y sonrojarse, recordando que no podían interferir. Miraron hacia atrás para ver si el Hanguang-jun adulto les estaba mirando, pero sus ojos estaban centrados en su hermano.

(¿Realmente habían pasado sólo unos meses desde que Lan Xichen parecía tan seguro de sí mismo? Parecía que habían pasado años).

"El tío Jiang y la señora Yu también están aquí", observó Wei Wuxian. "Y un joven Jiang Cheng".

A Jin Ling le resultaba increíblemente extraño ver a su tío con 15 años, así que rápidamente centró su atención en los dos primeros que Wei Wuxian había enumerado. Mientras Jin Ling seguía mirando emocionado a su alrededor, Wei Wuxian se giró hacia la izquierda, y sintió que los ojos se le aguaban de nuevo.

"Ah, A-Yuan.... Ven aquí".

Como el hijo filial que era, lo hizo.

"Esta es tu tía Qing", explicó Wei Wuxian. "La hermana mayor de Wen Ning".

"Me has hablado de ella", asintió Lan Sizhui, con los ojos muy abiertos. Había escuchado muchas historias de Wen Ning y Wei Wuxian, pero ésta era la primera vez que tenía una imagen visual de alguien de su vida pasada.

Sintió que las lágrimas empezaban a caer y se limpió apresuradamente los ojos.

(Detrás de él, Wei Wuxian mantenía sus ojos pegados a Wen Qing, evitando muy intencionadamente a Wen Chao. No había nada que Wei Wuxian pudiera hacerle, así que mirar sólo le haría enfadar para nada).

Entonces-

"Los encontré", informó Lan Wangji. Wei Wuxian echó un vistazo y descubrió que Lan Wangji miraba de un lado a otro a Jin Guangshan y a Wen Ruohan.

Jin Ling y Sizhui parecían no poder decidir si querían o no mirarlos.

En el rostro de Jin Guangshan, había una terrorífica sonrisa de hambre que ni siquiera intentaba ocultar. Por otra parte, su talento radicaba en influir en la opinión del público, así que quizá no veía razón alguna para llevar una máscara mientras los únicos presentes eran los que ya le conocían.

Entonces, Wen Ruohan.

A diferencia de Jin Guangshan, Wei Wuxian nunca había tenido la oportunidad de familiarizarse con Wen Ruohan. Los modales y los motivos de este hombre le eran casi totalmente desconocidos.

Por eso no estaba seguro de si la rabia blanca en el rostro del hombre era una mala señal.

"¿Qué están mirando todos?" se preguntó Zizhen en voz alta, notando lo que parecía ser un terror abyecto en los rostros de los demás. Ahora que los demás habían tenido algo de tiempo para reponerse de su shock al ver a los presentes, vieron lo mismo.

Incluso Jin Guangshan -que era el más interesado en lo que se estaba mostrando- parecía estar aturdido por la simulación. Preocupado, Lan Wangji siguió sus ojos, pero la simulación era demasiado borrosa para poder determinar de qué se trataba.

Había demasiados pasos entre la simulación y la gente del futuro; las capas de energía resentida dejaban esta parte nublada.

"Hazte a un lado", ordenó Wei Wuxian, recibiendo un acatamiento instantáneo. No había querido hacerlo, pero las expresiones en los rostros de todos le preocupaban.

La simulación cortaba el acceso de uno a su cuerpo, y el cultivo espiritual era imposible sin acceso a un núcleo dorado.

El cultivo demoníaco, sin embargo, no lo era.

Con un largo y agudo silbido, Wei Wuxian despejó los restos de energía resentida.

La imagen que reveló le dejó helado.

Un joven -más joven incluso que Sizhui y Jingyi- corría por un valle gris entre dos colinas. Estaba enfermizamente pálido y apenas parecía vivo. Un momento después, la imagen se aclaró aún más, y pudieron ver lo que seguía.

Cadáveres, fantasmas, monstruos y yaos corrían hacia el chico, subiéndose unos encima de otros y derribándose en su prisa por dar caza al humano.

Una mano saltó, tirando de una cinta sucia del pelo del chico.

"Es que..."

"Quiero decir, se ve diferente, pero-"

".... ¿Senior Wei?"

Se giraron para obtener una respuesta, pero Wei Wuxian se quedó congelado. Miraba fijamente a la versión más joven de sí mismo, observando cómo el chico retrocedía lentamente hacia el borde de un acantilado.

"¡Detente!", gritó su otro yo, el sonido apagado debido a la energía residual resentida, pero no menos desesperado. "¡Para! ¡Para! ¡Para!"

Uno a uno, los cadáveres comenzaron a detenerse.

El joven Wei Wuxian no tuvo tiempo de detenerlos uno a uno.

"Qué..." Jin Ling se volvió hacia Wei Wuxian. "¿Por qué no los detienes? Te he visto detener a muchos con un silbido antes. ¿Por qué no estás...?"

"Todavía no había descubierto cómo hacerlo", respondió Wei Wuxian sin ton ni son, sin poder apartar los ojos de la escena que tenía delante.

"Espera, ¿estás diciendo que ahora es cuando inventaste el cultivo de demonios?" preguntó Lan Jingyi.

Wei Wuxian no dijo nada, pero la escena que tenían delante hablaba por sí misma.

"Ya hemos visto suficiente", decidió Lan Wangji, mirando los ojos apagados de Wei Wuxian. "Wei Ying, es hora de partir. Abre la matriz que nos sacará de aquí".

Pero Wei Wuxian parecía no responder.

"... ¿Wei Ying?"

Los ojos de Wei Wuxian permanecían firmes en la escena que tenía delante. Mientras su otro yo retrocedía hasta el borde del acantilado, centró su atención en los espíritus y cadáveres que se acercaban.

Manos - por todas partes - agarrando, tirando, tirando, sujetando, rompiendo, mordiendo-.

Todavía no lo hacían, pero lo harían.

Le rodeaban el cuello y le mordían la piel, y podía sentirlas en los huesos: habían mordido, estaban mordiendo, no habían mordido aún, pero lo harían...

Alguien gritó algo a su lado, pero Wei Wuxian no pudo oír lo que decían.

Lo único que oía era que le arrancaban las piernas de sus órbitas, que le rompían los brazos, que le rompían la columna vertebral, y que sus manos y sus dientes estaban por todas partes, en todos los brazos y en todas las piernas, en el pecho y en la cara, que le apretaban el cuello, que le arrancaban la piel y que le arañaban, que le mordían, que le hacían crujir, que eran sus huesos...

Wei Wuxian era una persona feliz. Lo era de verdad, genuinamente. Alegre, abierto, confiado, casi arrogante, pero....

Uno no olvida simplemente la forma en que murió.

"Está bien", susurró Wei Wuxian para sí mismo, tratando de calmar su acelerado corazón. "Está bien. Salí... logré salir. Me vengué y luego..."

Y entonces rompió el sello, así que se volvieron contra él y rasgaron y mordieron y masticaron y desgarraron y tiraron y comieron y comieron -sus dedos, sus pies, su tobillo, su pecho, su muslo, su cuello- asfixiándose -no podía respirar, no podía respirar, no podía respirar- entonces sus dientes atravesaron la piel y-

Por el rabillo del ojo, Wei Wuxian vio un cadáver que trataba de agarrar, tomar, desgarrar, comer, y supo que su vida se acabaría si no se movía.

Envió un tsunami de energía resentida, pero sólo consiguió hacer retroceder al cadáver unos metros-.

¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?

El cadáver se acercó de nuevo, y Wei Wuxian levantó una mano.

"¡Detente!", ordenó, pero era como si el cultivo demoníaco no tuviera ningún efecto sobre este cadáver.

El corazón de Wei Wuxian se congeló.

"¡Para!", gritó de nuevo. "¡Para! ¡Para! ¡Para! ¡No - para! ¡Quítate!"

Le agarró del brazo -no podía escapar- y Wei Wuxian dio un chillido que helaba la sangre.

"¡Para! ¡Suéltame! ¡Piérdete! ¡Piérdete!"

El cadáver se congeló y retrocedió, soltó su agarre, pero Wei Wuxian apenas se dio cuenta. Todo lo que podía sentir eran los cadáveres clavando sus nudillos en su carne, mordiéndole el cuello y arrancándole los ojos.

Mientras los recuerdos asaltaban su mente, todo lo que Wei Wuxian pudo hacer fue caer de rodillas y dar un grito destrozado.

Gritó y gritó y se desgarró la garganta hasta que sintió que tragaba fragmentos de cristal. Apenas podía emitir un sonido, pero los gritos continuaron de todos modos.

(¿Pero por qué iba a importar? Nada de eso importaba. Los cadáveres no se detendrían por mucho que él gritara).

Detrás de él, cuatro rábanos se quedaron congelados en shock.

Cuando Wei Wuxian había aclarado la imagen, se habían quedado confundidos. Seguramente ese no podía ser su Senior Wei. Sí, sabían que el cuerpo original de Wei Wuxian era diferente al de Mo Xuanyu, pero aun así no podían imaginar que su senior se hubiera visto tan acorralado.

(Cuando Wei Wuxian se desmayó tras salvar a los líderes de la secta en el segundo asedio, Lan Wangji les había recordado que Wei Wuxian también era humano. De alguna manera, lo habían olvidado).

(No, incluso si no lo hubieran olvidado, no había forma de que pudieran esperar lo que vino después).

La energía resentida había estallado desde Wei Wuxian, derribando a los adolescentes y empujando incluso a Hanguang-jun hacia atrás unos metros. Se había acumulado y acumulado sobre sí misma hasta destrozar la zona en la que se encontraban, obligándoles a salir de la simulación.

Se habían despertado en sus cuerpos reales.

Y entonces empezaron los gritos.

'Podríamos cambiarlo todo!', gritó simultáneamente el cuarteto.

Sizhui rechazó la idea de pedirles a Hanguang-jun y Wei Wuxian sus recuerdos porque no quería forzarlos a recordar. No tuvo en cuenta las consecuencias de mostrar a unos parientes desconocidos sus momentos más débiles.

Por primera vez, comprendieron lo ingenuos que habían sido.

Lan Wangji intentó acercarse a su marido, pero fue empujado hacia atrás por otra oleada de energía resentida.

"¡Detente!" gritó Wei Wuxian. "¡No me toques! Piérdete".

Lan Wangji se estremeció de nuevo.

"Wei Ying", intentó. "Wei Ying, soy yo. Wei Ying, por favor respira - lentamente - inhala y exhala-"

"No..."

"Wei Ying. Inhala. Fuera."

Ante la suave persuasión de Lan Wangji, Wei Wuxian finalmente dejó de hiperventilar. La desesperación temerosa todavía estaba allí, pero la energía resentida no atacó cuando Lan Wangji se acercó de nuevo.

"Para", susurró Wei Wuxian, cada vez más suplicante y angustiado cada vez que su orden no funcionaba. "Detente. Para. Vete... bájate. Piérdete".

Sin tocarlo, Lan Wangji se arrodilló delante, esperando que Wei Wuxian hiciera el primer movimiento. Durante varios segundos, Wei Wuxian se limitó a mirarle fijamente, como si esperara que le atacara.

Entonces, por fin, la energía resentida que los rodeaba se dispersó. Lentamente, y de forma vacilante, Wei Wuxian se acercó y enroscó sus dedos en la túnica de Lan Wangji, hundiéndose en ella como si quisiera esconderse del mundo.

Con la misma lentitud, Lan Wangji rodeó con sus brazos a Wei Wuxian, acercándolo.

Entonces, la puerta se abrió, permitiendo a Lan Xichen y Lan Qiren entrar.

Lan Xichen, que salía de su reclusión por primera vez en meses.

"¿Zewu-jun?" Lan Sizhui preguntó incrédulo.

"Yo..." parpadeó dos veces. "He oído a alguien gritar".

Los juniors bajaron la mirada, incapaces de reconocer lo mal que lo habían hecho.

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Notas del autor:

He añadido mis propias escenas para el tiempo de Wei Wuxian en los Túmulos, ¡espero que esté bien! ¡Sólo pensé que sería divertido ampliarlo un poco! La pregunta de "qué comió" será respondida en un capítulo posterior :)