Advertencia: Lemon  fuerte (+18), si eres sensible o inocente NO leas.

Narra Ryan:

Había terminado la clase de cultura junto con Spencer, pero no podía concentrarme sabiendo que ella estaba detrás mío coqueteandome.

La campana para cambiar de turno había sonado y ella fue quien se adelantó a salir del curso antes de que yo lo hiciera. Guarde todas mis cosas y no llegue a escuchar a mi amigo Spencer que salí del aula para ver a dónde iba.

Fui tras ella siguiéndola por los pasillos y me condujo al gran patio del instituto. Se detuvo en un árbol con gran sombra.

-¿Sigues escapándote? -mencione un poco agitado-

Ella volteó a verme haciendo una carita provocativa.

-¿Quien dijo que me quería escapar de ti? -me tomo del cuerpo y me apego al suyo, enroscó sus manos por mis hombros y no dejaba de verme a los ojos-

Podía ver aquellos orbes brillar con tanta intensidad, la mirada de una chica enamorada. No pude contenerme y la besé.

-te extrañé -susurre en sus labios-

Se separó de mi y enarco una ceja.

-Ry, pasó un día que no nos vimos y nos mensajeamos todo el día de ayer -se excuso, aunque fuera verdad la extrañaba-

-Lo sé, pero no es lo mismo... -me encogí de hombros- Quería estar así contigo -la abrace y la acurruque en mi pecho- ¿puedes sentirlo?

Los latidos de mi corazón palpitaban intensamente. Pensé que en cualquier momento se saldría de mi.

-Lo escucho -dijo suave- el mío está peor

La aparté de mi y la mire a sus ojos.

-no me provoques así en clases, hazlo aquí que estamos solos -pellizque su mejilla y la hice ruborizar mas-

Ella miró por sobre mi hombro y me abrazó por mi cintura.

-no estamos solos, mira allá hay más estudiantes -señalo con su dedo-

-no me importa -murmuré y la apegue al árbol para tomar su cuello y atraerla hacia mí para besarla-

Nos quedamos un rato así, alejados del mundo y besándonos. La cosa estaba subiendo de tono, me hacía excitar hasta que sonó el timbre de la escuela.

-Oooh no -bufé disconforme- no quiero ir a clase de literatura -agache la mirada-

-yo tampoco quiero ir amor -me sorprendió lo que me dijo, pero al decirlo me hacía sentir especial y amado- ¿Y si nos vamos?

-¿Qué? ¿A dónde?  -inquirí saber-

-a dónde sea... iría a cualquier parte del mundo contigo. -ella estaba emocionada-

Tomé su mano y salimos del colegio sin que se dieran cuenta. Caminamos un rato largo por la ciudad y teníamos hambre.

-estaria bueno comer un poco... tengo hambre -propongo de idea-

-Genial. ¿Traes dinero? -ella revisó su billetera y apenas traía algo-

Yo urgue la mía y tenía algunos billetes, alcanzaba para comprar algo en el súper.

Encontramos un mini market y compramos patatas fritas y Coca-Cola. Disfrutamos comiendo en la plaza que estaba al frente.

Cada vez que podía la miraba... no podía evitarlo. No sé que me pasaba.

-¿Porque me miras mucho? ¿Estoy despeinada? ¿Se corrió mí maquillaje?

Negué.

-estas perfecta. -toque su mechón y lo acomodé detrás de su oreja, sin querer de los nervios el paquete de papas cayó al suelo- Ops.

Intenté recojer la bolsa pero ella tomó mí brazo y puso su cabeza recostada sobre mí hombro.

-quiero estar así... contigo. -musito leve y evito mirarme, la vi sonrojada-

-Mich... -quise tocar su piel-

No sé porque me sentía así, con esa necesidad de estar a su lado. Me sentía estúpido y embobado por su belleza.

-sabes Ry... Nunca me imaginé estar así contigo, es como un sueño. -menciona tranquila- tenerte para mí, que seas mío.

Mí corazón loco empezó a palpitar. Sin querer estaba atrapado bajo sus hechizos.

-Pense que eras inalcanzable... Que siempre tendrías tus ojos puestos en Angy...

¿Porque me habla de Ángeles ahora? Pensé y puse mis ojos en blanco, no estaba pensando en ella.

De pronto y no se si por casualidad pasó Brendon y Garrett con bebidas en sus manos, justamente nos vieron sentados en una banca.

-¡Hola Ry! -saludo a la distancia el Urie-

De metiche se sentó a mí derecha y Garrett a la izquierda de Michelle, nos estaban invadieron en nuestra cita.

-¿Quieres? -le ofrece el cretino de Børns a mí chica-

Ella se avergüenza y se aferra a mí brazo.

-ya comimos, gracias.

Garrett no satisfecho con mí respuesta mira a mí novia y le sonríe.

-le pregunté a ella. -y le insistía con darle una bebida-

Ella niega.

-¿No deberían de estar en clases? -pregunta el Urie y me mira con picardia- si se llegara a enterar el profesor.

-¿Y ustedes no tendrían que estar también estudiando? -le devuelvo la misma pregunta-

-estudiar es para idiotas. Pero me extraña de un alumno ejemplar como vos Ross. -menciona Garrett con aires de superioridad- ¿Y vos... -inspeccionaba a Michelle, su rostro y eso me molestó, nadie podía admirarla más que yo-

Me levanto y tomo a Michelle de la mano.

-Cierto. Vamos a clases.

Ella no dijo nada y dejamos al par de idiotas en nuestro lugar. Claramente arruinaron nuestra cita.

Caminamos hacía otro lugar y ella me mira expectante...

-¿A dónde vamos? El colegio queda para allá -señala Michelle un poco confundida-

-lejos de esos dos.

-¿Crees que nos sigan? -me pregunta y negue-

-es Brendon y Garrett, no trabajan en la CIA. -le bromee pero si me pongo a pensar cuántas veces me cruzo a Urie en la escuela pareciera que si-

De mucho caminar encontramos un parque, no había chicos y estaba un poco solitario el lugar.

Michelle impresionada corrió y se subió a los columpios...

-Ryro... -ella sonreía tan feliz-

Fui tras ella y la ayude a columpearse.

-¡Woow! Parece que floto -ella reía mientras la hamacaba más fuerte- nunca me sueltes...

Su cabello suelto me volvía loco, sentía su perfume tan cerca mío y su risa única... el que flotaba era yo mismo.

-te amo... -susurre sin saberlo-

-¿Que dijiste? -pregunta mientras se hamacaba, ahora con menos velocidad-

Cuando se canso del columpio nos sentamos en el pasto, un lindo jardín y rosas. Admiramos el cielo azul por un buen rato. Tomé su mano y ella me observó a los ojos, estaba otra vez hipnotizado.

-¿Porque me miras así? -inquiere saber-

-es que....

No sabía que decirle, tenia a mí corazón a mil. Tantos sentimientos encontrados y bonitos. No pude expresar con palabras certeras lo que estaba sintiendo en esos momentos, solo admire su belleza y toque su piel... Atraje su rostro para besar sus labios y estar así un buen momento.

Antes de que atardeciera, teníamos que volver a casa pero recorrimos por última vez aquella plaza. Vimos un gran árbol y pareciera que muchas parejas venían allí para grabar sus nombres.

No lo dude y subí hasta una parte alta para tallar nuestros nombres.

-¡Woow! ¿Cómo lo hiciste? ¿No tienes miedo de caerte?

Negué.

-Entreno con papá a diario, esto no es nada -sonrei orgulloso-

-te adoro bebé -ella me abraza fuerte y me da un beso en mí mejilla- esto es lo más lindo que han hecho por mí... no sé cómo recompensarte....

Ella deja la duda y cosas cochinas invadían mí mente, se carcajea un poco pensando que si había entendido su indirecta

-¿No quieres mí recompensa? -pregunta curiosa, pero hace una mueca de medio lado- ¿En serio no quieres?

-¿Que es? ¿Un beso? -arqueo una ceja-

Ella sonríe ladina y me lleva caminando tomados de la mano.

-es mucho mejor que eso.

Me sonroje bastante porque no teníamos sexo desde hace... y sentía un leve cosquilleo en mis entrepiernas.

-no podemos golosear en cualquier lado... ¿A dónde iremos? -observo que a nuestro alrededor habían personas paseando-

-a tu casa -propone y me quedé en blanco con su propuesta- a la mía no podemos... Está mi papá y es muy celoso... -rodó sus ojos-

Me quedé pensando su idea pero seguramente estarán mis padres... Ellos eran muy estrictos.

-mi padre se fue a trabajar unos meses...  no sé qué le diré a mi madre. -no sabía que inventar de excusa-

-puedes decirle que voy para que me enseñes algo -invento una linda excusa-

-Tú con tal de ganar... -toque su nariz con mi dedo índice-... Me gusta la idea 

Michelle me tomó de la mano y ambos nos dirigimos a mí casa.

....

Estábamos caminando como una verdadera pareja, ella no dejaba de platicarme sobre su familia y sus intereses, yo igual. Se sentía un ambiente agradable entre nosotros, confortable.

De pronto se detuvo y miró su bolsa por si traía plata, el único que había gastado en el supermercado fui yo. Se adentró en una farmacia y yo la espere afuera del lugar. No me avisó que iba a comprar... Cuando salió con una sonrisa quise acercarme a cuestionarle que fue a comprar.

-¿A qué fuiste a una farmacia? ¿Te sientes mal? -le pregunté-

Ella sonrió ladina y sacó de su bolsa lo que había comprado.

-esto compré por las dudas -me enseño una caja de condones-

Mi cara se puso totalmente roja de lo apenado que estaba.

-dios, que puerca eres jajaja -rei por lo bajo-

-no te quejes, debemos cuidarnos -contesto con una sonrisa- yo debería de tomar las pastillas anticonceptivas pero no le dije a mi madre...

-¿Porque le dirías eso a tu madre? Te va a matar cuando lo sepa... -mencione-

-jajajaja no Ry, mi mami sabe todo.... -se acercó a mí y me abrazó del cuello- Es mejor que le diga la verdad a que se la oculte...

-que vergüenza dios mío... -me tape el rostro pensando que le había contado nuestra intimidad- ¿Con qué cara miraré a tu madre?

-con la misma carita hermosa que tienes -se acercó a mi rostro y estiró mis mejillas y dejo un bello con mucho cariño allí-

No nos quedamos ahí, preferí reservar mi energía para más tarde.

Fuimos directo para mí casa, moría de los nervios de que mentira le diré a mi madre, dudo que no sospeche, llegaría a casa con una chica que apenas conocía.

Por otro lado, mi buena conducta y notas me harán más creíble, a veces invitaba a mis amigos para enseñarles las materias que no sabían o si tenían alguna duda de lo repasado. Sudaba las manos de solo pensarlo, mi madre era brava cuando algo la enojaba.

-Ry tranquilo, estamos juntos en esto -ella me reconfortaba y me tomaba de la mano a pesar de estar toda sudada, asentí a su dicho-

Llegué a mi casa y todo estaba bastante tranquilo. Abrí la puerta con mi llave y me adentre a paso lento. Deje un ratito a Michelle afuera mientras chequeaba que todo estuviera en orden. Parecía que nadie estaba así que la llame y la lleve a mi habitación sin hacer el mínimo ruido.

La dejé en mi cuarto a pesar que ya lo conocía y fui a buscar a mi madre, de seguro estaba en su cuarto.

Golpee su puerta y enseguida respondió.

-má, soy yo -espete-

-Ry llegaste un poco más temprano de lo normal, ¿Sucedió algo? -cuestiono desde el otro lado de la puerta- siempre regresas a las 19 hs.

Apegue mi oído a la puerta

-No sucedió nada malo, siempre vuelvo tarde porque me quedo en casa de Spens. Hoy faltó y me vine a casa.

-Ah bueno...¿Quieres que te prepare algo? ¿Quieres cenar?

No quería cenar, porque la cena me esperaba en la habitación...

-no hace falta, ya comí allá en el recreo -pensé que ni siquiera eso hice, me la comí a Mich- estaré en mi cuarto estudiando...

-que bien, entonces no te molestaré -escuche decirle- 

-Gracias Má... Después bajaré a cenar... -fue lo último que le dije antes de irme-

Regresé a mi habitación y vi a Michelle sentada en el borde mi cama. Me di media vuelta y cerré con cerrojo la puerta. Ella se levantó y enredo sus manos por mi hombro. Cómo ella era más baja que yo de estatura podía verla a los ojos y ella debía levantar su vista hacia mí.

-¿Que querías que te enseñe hoy? -dije con voz seductora y sexy-

-mmm... Hay muchas cosas que no sé -mordió su labio provocándome- quiero que me enseñes todo lo que sepas...

Apegue su cuerpo al mío y la tomé de su trasero levantando una de su pierna y aferrándola a mi cintura. Ahora que tenía más confianza podía soltarme un poco más.... he pensado que adquirí varios puntos en la sexualidad e intimidad.

-te vas a arrepentir querida -susurre con mi voz ronca-

-jamas lo haría -llevo su boca a mi blanquecino cuello y comenzó a dejar un camino de besos por allí-

Cerré mis ojos para sentir aquel placer y lujuria pervertida que estaba sintiendo en esos momentos.

Sus manos me atrapo mis mejillas que ardían y se separó de mi.

Me acerqué a ella lentamente y con besos apasionados deje que retrocediera hasta chocar con mi cama. Ella se sentó en el borde y con sus manos jalo de mi cinturón que ajustaba mi pantalón el cual traía puesto.

Me quite rápido mi playera y me quedé en cuero antes sus ojos lujuriosos. La tomé de sus brazos y la hice levantar para quitarle sus ropas, solo aparte su playera y la deje en sostén admirando la belleza de sus senos.

La hice sentarse y de su jean saco la caja de preservativo y abrió un sobre de allí mientras yo me quitaba mi pantalón molesto.

Me quedé en bóxer y pude ver sus ojos mirar mi erección por encima de la tela, estaba enfocada en eso. Me gustaba ver su mirada pervertida y saber que provocaba excitación con solo ver mi cuerpo.

Antes que hiciera algún movimiento me agache quedando de rodillas al suelo y tomé sus piernas con mis manos.

Me recompuse y abalancee sobre ella besando sus labios mientras jalaba de su jean para quitárselo. Gracias a su ayuda pude hacerlo. Está vez no estaba tan drogado y sabía que ambos lo íbamos a disfrutar al máximo.

La deje expuesta con sus bragas y recorrí con mi boca llenando de besos desde sus labios hasta bajar por su cuello, su pecho, aparté su sostén y besé sus senos uno por uno y mordí su pezón haciéndola gemir. Levante mi vista y le susurre que hiciera silencio con una sonrisa. Estaba colorada y eso me volvía más loco. 

Bajé con besos hasta su vientre y me quedé expectante ante su parte baja. Ella arqueo su espalda y se recostó en mi cama, sus piernas aún tocando el suelo y yo arrodillado, abrí sus piernas y me puse en medio para bajar sus bragas.

Lo hice lentamente para deleitar lo que veía. Ella cubrió su rostro y pude ver cómo mordía sus labios de contenerse internamente del placer que imaginaba que le iba a causar

Vi su intimidad deseosa de mi así que  metí dos dedos en su interior... Entraba y salía mientras observaba con detenimiento. Sus ojos no querían verme, estaba mirando el cielo raso sintiendo el más lujurioso placer que podía darle. Sentí que no era suficiente y le mandé un dedo más. La penetraban con mis dedos una y otra vez, haciendo un ruido con su sexo, podía sentir sus fluidos pero no me importaba.

Seguí así un ratito más hasta que saque mi mano y vi retorcerse mordiendo mi almohada. Me miró y vio como saque de su interior lo que le daba placer... Chupe mis dedos con sus fluidos aún en él y sonreí ladino. Ella se tiró hacia atrás volviendo a la misma postura de antes.

Ahora que era de día y podía ver más, con más detalles. Nada comparado con lo que uno lee o ve en las novelas. Tuve que mirar mucho porno desde que empezamos a tener intimidad como para darme una idea de todos los deseos sexuales que debía cumplir.

Quería hacer que mordiera la almohada y gritara mi nombre a pesar que este mi madre en el otro cuarto.

Me agache de nuevo y ahora metí mi lengua en su interior, se sentía tan rico. Besé su sexo y su clítoris que la hice gemir. Con mi mano libre llegué hasta ella y le tape la boca. Introduje lo más que pude mi lengua en su intimidad mientras succionaba lo más delicioso que salia de su interior. Se me ocurrió también entrarle con un dedo en su vagina a la vez. Arqueo nuevamente su espalda, la estaba haciendo gozar.

-¡AAAY RY! -gime como loca entre mi mano a pesar que se la había tapado, me mordió-

Deje de hacer lo que estaba haciendo para estar arriba suyo y besar sus labios para que se callara y se contuviera un poco. Los mordí y con mi mano recorrí su cuerpo con caricias hasta llegar a su sexo que estaba bien húmedo. 

La besé y con mi mano tomé su vulva e introduje un dedo en su interior y la penetre lo más adentro que pude en su interior. No deje que gritará, con mi otra mano tape bien su boca metiendo 4 dedos míos para que mordiera y se entretuviera. Sus manos me rodearon el cuerpo y clavo sus uñas por mis brazos y mi espalda. "Rayos, debo cortarle esas uñas antes de que Spencer sospeche lo que imaginaria" pensé.

Sacaba y metía mi dedo en su interior y podía verla retorcerse. Me aparte, ya la había preparado bien... me puse de pie y ella estaba sudada, excitada al mil por ciento. Se sentó en el borde de la cama y pude verla con una sonrisa. Tomó el sobre del preservativo y lo abrió con su boca.

La verdad no tenía mucho conocimiento de cómo se usaba correctamente pero ella lo abrió. Bajó mi bóxer sacando mi pene erecto y mojado. Lo metió en su boca e hizo movimientos con el, cerré mis ojos y disfrute aquel momento. Tomé su cabello junto a su cabeza y la apreté más adentro, casi se atraganta porque la hice tocar fondo hasta su garganta.

Saco mi pene de su boca con su saliva inclusive, lo había limpiado bien. Colocó el preservativo en mi miembro, delicadamente con sus manos sin romperlo con sus uñas largas.

Cuando estuvo listo me tomó del brazo y me abalanceo sobre sí misma. Levante su trasero un poco y me acomode arriba suyo. Me posicione entre sus piernas y con mi mano metí mi erección en su interior. ¡Aún seguía estrecha maldita sea! Levante sus piernas hacia arriba viendo lo sonrojada que estaba debajo mío. Sus ojos miraban hacia atrás cuando la empecé a embestir. Quería hacerla sudar en mi cama, trataba de contener sus gemidos que eran como que era como el cantar de las aves para mí. Le metí hasta el fondo y me agache hasta ella para susurrarle en su oído "¿Te está gustado?" Ella asintió y con la voz entrecortada dijo "quiero más".

Se dio media vuelta dejándome a mi abajo y ahora ella se posicionó arriba mío.

Se sentó en mi abdomen y cuidadosamente paró mi pene y se lo introdujo adentro suyo. Recargue mi cuerpo en la cama y deje que ella se moviera con movimientos circulares pélvicos. Inventó una pose nueva, consistía en subir y bajar haciendo que entre y salga de su interior. No podía con tanto. Me recompuse para succionar sus senos haciéndola gemir.

La tomé de su cintura y la embestí más fuerte, se apegó a mi rostro y beso mi cuello dejando mordiscos allí. Con mi mano apreté sus pechos. En cualquier momento sentía venirme adentro suyo, trate de contenerme. Sentí su cuerpo tensarse y aumentar la velocidad de la embestida. Luego de morder mi oreja entre gemidos la vi relajarse y apoyar su cuerpo sobre el mío. La tomé de nuevo de su cintura y seguí penetrándola.... Mi cuerpo también estaba tenso... Ya sentía acabar adentro suyo, gracias a que tenia el preservativo puesto, no debía de preocuparme. La Levante con mis manos y la bajaba. Arriba abajo arriba abajo. Esto era mucho mejor que diez mil masturbadas. Sentí venirme adentro suyo. Sentí un relax de mi cuerpo, ella se quedó recostada arriba de mi cuerpo sudado.

Acaricie su cabello y acomode su mechón detrás de su oreja.

-jamas pensé que haría esto contigo... -solté de repente, ella estaba toda sonrojada a causa mía-

-yo tampoco pero me encanta... -susurra suave-

Aún estaba adentro suyo, despacito se levantó y vio aquel preservativo lleno de semen.

-lastima, hubiera sido exquisito tomarla. -sonrió ladina-

-para la próxima -le devolví la sonrisa, me quedé sin energías, ella también estaba agotada-

Quitó eso de mi pene con mucho cuidado de no ensuciarse las manos. Lo habrá tirado por ahí en el suelo de mi habitación. Vino a mi y se recostó en mis brazos. Me di vuelta al ver su cara mirarme con detalle.

-¿Que miras? -le pregunté admirando su belleza-

-ya no eres más un niño, eres un hombre Ry, mi hombre -decía románticamente-

Sonreí y acaricie su mejilla. A decir verdad jamás me pensé ver en esta situación con ella de esta manera, se me había olvidado hasta de mi madre, la escuela y Spencer.

Escucho que golpeaba puerta.

-Ry... -llama mi madre-

Cubro a Michelle con mi colcha, aún estábamos desnudos. Me levanté y me coloque rápido mi ropa interior y mi jean.

-¿Que pasa mamá? -alze la voz-

-vino tu amiga Angy a estudiar contigo. -menciona-

¡Cierto! Lo había olvidado.

-ah si -voltee a ver el reloj que estaba en mi mesa de luz y ya eran las 21 hs y luego la reacción de Mich de sorprendida y de hacer una mueca de medio lado, tal vez eso no me gustó escuchar- ¿La hiciste pasar?

-esta en el living esperándote.

-ok mamá, aguarda un momento... -dije un poco apurado acomodando las cosas esparcidas en el suelo- Enseguida bajo.

No escuché nada proveniente de ella. Me quería matar, estaba exhausto. Pero ya estaba adentro de mi casa y debía cumplir con lo prometido.

Michelle se vistió rápido sin decirme nada, ese silencio lo decía todo.

-¿Que pasa amor? -me acerque a ella y la abrace por su cintura-

-no me dijiste que Angy iba a venir. -contesto molesta-

-solo quería que le enseñé cálculos matemáticos, nada más. -le dije la verdad, lo que había acordado- Me olvidé de decírtelo.

Rodó sus ojos molesta. Me acerqué hasta ella y la acorrale entre mi cama haciendo que me mire a los ojos, no iba a mentirle.

-Te quiero Mich, no haré nada malo... -bese su cuello para hacerla sentir querida y segura de mis palabras, no pensaba fallarle- Angy tiene novio...

-pero tú... -evitaba mirarme-

-pero nada, tú eres mi novia y mi prioridad. -bese sus labios cerrando mis ojos para profundizar mi beso- nadie va a destruir lo nuestro...

Estaba por ir abajo a la sala del living hasta que Mich jalo de mi brazo. Tenía un desodorante y me echo de su perfume. Enarque una ceja.

-¿no me digas que piensas bajar a atender a Angy con olor a sexo? -dije un poco divertida y me sorprende su repentino cambio de parecer-

-¿a poco se siente? -le pregunté, ella tenía más conocimiento en este tema, apenas era un principiante-

-SIII -alega exageradamente- hasta tu madre se percataría de ello.

Sonreí graciosamente. La vi hacer una mueca de lado mientras me miraba a los ojos provocativamente.

-¿harás entrar a Angy a tu cuarto? -cuestiona-

La miró de reojo mientras acomodo la cama.

-Si, lo estoy pensando.

-bueno, si quieres me puedo esconder debajo de la cama hasta que se vaya -menciona y a decir verdad era tarde, ella debería de estar en su casa-

-no se cuanto tardaremos, deberías volver a casa... Tus padres... -dije hasta ser interrumpido-

-No importa, no estoy apurada. -se cruza de brazos, no iba a ganarle a su pulseada- Me quiero asegurar...

-¿de que?

-que no hagan nada raro en tu pieza -rodé los ojos-

-no vamos a hacer nada, ella tiene novio ¿lo olvidas? -fruncí mi ceño-  si lo hubiera querido ya lo hubiera intentado. -le reste importancia a sus dichos, Angy era la chica mas buena y respetuosa, jamás intentaría nada, no debía de qué preocuparse-

-mmm tienes razón. -afirmo- igual me quedare -se agachó al suelo para meterse debajo de mi cama-

-celosa -susurre leve-

-calla y vé -pude ver su sonrojo mas de lo normal-

Salí del cuarto y fui directamente al living. Le hice dar a entender a mi madre que estaba ahí y llamé la atención de Angy para que viniera a mi. Así lo hizo.

Nos saludamos, ella estaba con su mochila al hombro aún.

Nos metimos a mi cuarto.

-lo siento si te hice esperar mucho allá abajo con mi mamá -trate de hablar tranquilo-

-no te preocupes, tu mamá es encantadora. -alego con una sonrisa- pero no debiste haber mentido Ry

-no entiendo -me hice el desentendido-

-de que supuestamente fuiste a clases  jajaja yo estuve en su clase y tú no, te fuiste.... -no podía mentirle, ella me conocía mas que a nadie-

-es que... No me sentía muy bien... -trate de tocar mi panza- me duele la barriga feo...

Ella me miró tiernamente y acarició su estómago. Enseguida enrojecí.

-debiste haber comido algo en mal estado... -menciona-

-tal vez -evite mirarle a los ojos, temía de Mich que escuchase más de la cuenta-

Ella se apartó de mi y me dio la espalda inspeccionando el lugar con su mirada lo pintoresco que era mi cuarto.

-bueno, solo me llevaré tus apuntes si me los prestas y me iré a casa a estudiar tranquila -dice sin mirarme-

Asentí.

-déjame buscar dónde dejé la mochila -buscaba con mi mirada en donde podría estar-

Dirigí sin querer la mirada hacia la ventana y vi unos cabellos asomarse por el umbral. Me quedé idiotizado con eso.

-en dos meses harán el cumpleaños de Wentz en un boliche en el centro de la ciudad, Brendon nos invitó a ir -me comenta Angy, enseguida la preste atención- si quieren ir Mich y tú...

-Se lo voy a decir cuando la vea -le dije haciéndole entender que no estuve con ella-

-seguro la ves siempre, si son novios jeje -dice pero no le presto atención-

Observe de soslayo a ese cabello asomarse... ¡SI! ¡lo ví de nuevo!... pensé que estaba loco viendo alucinaciones pero no.... Encontré mi mochila al tropezarme con ella en el camino.

Llegó hasta la ventana y abro el vidrio. No había nada ni nadie espiándonos.

Voltee y Angy me miraba extraño.

-¿Había algo? -pregunta preocupada por mi reacción-

Negué ladrando mi cabeza.

-no, solo fue producto de mi imaginación.

-entiendo. -se limita a decir, mira hacia un costado dirigiendo su mirada a cierto punto y veo el preservativo tirado con líquido seminal adentro-

Camine disimuladamente hasta eso y lo patie con mi pie a un rincón cerca de un mueble. Ojalá Angy no lo haya visto pero a juzgar por su semblante dudo que si. Trague grueso.

Le entregué los apuntes que necesitaba y la acompañe a la salida de mi casa. Ya se estaba oscureciendo

-hace mucho que no nos reunimos como amigos... Los extraño -soltó ella decirme un poco sonrojada-

Sabía a qué se refería.

-desde que estamos de novios no tuvimos tiempo a nada, pero ya pasará... Deja que las cosas mejoren ¿Si? -la anime, ella levantó su rostro a verme y sonrió-

-no olvides el examen Ry, es está semana -menciona-

De pronto aparece de la nada caminando con suma paciencia el frenton Urie con su ego por las nubes.

-¿Amor vamos? -la abraza por su cuello- mira, me corté el pelo en la peluquería ¿Te gusta?

-Siii te queda hermoso mi amor -contesta sonrojada tocando su cabello-

-hermoso ya soy -dice soberbio como siempre- ¿Que más soy?

-Divino, encantador, mi rey, mi diablito, mi todo -le dice mirándolo-

-te amo -le dice él tomando su mentón y la besa mirándome a los ojos-

Evite mirarlos, ya era demasiado.

-Aaah Ry... -se acuerda que estaba presente- Mañana hay ensayo con la banda ¿Vienes? -propone-

-tal vez, no te confirmo nada... -le reste importancia- 

-vení con tu chica así mi Angy no está sola -me guiña un ojo-

-puedes ser .. bueno adiós chicos -me despido de ellos- cuídense

Me adentre a mi casa y fui directo a mi cuarto por Michelle.

Ella estaba sentada en mi cama viendo las fotografías de bandas de rock que tenía pegada en la pared.

-¿Vamos? -le pregunté e hice que voltear a verme- es tarde, te llevo a casa preciosa

Ella salto de un brinco y salimos de mi casa en puntas de pie para el exterior.

Caminamos tomados de la mano platicando cosas triviales viendo más estrellas.

Llegué a su casa y la tomé de la cintura, apegue su cuerpo al mío y no pude contenerme más en querer besarla. Nos separamos y la solté para dejarla ir. Era demasiado tarde y supuse que su familia estaría preocupada.

-Te quiero mi Ryro hermoso, nos vemos mañana... -me saluda desde lo lejos casi entrando a la puerta principal de su hogar-

-que duermas bien hoy y sueña conmigo eeeh -le advierto-

Ella voltea con una media sonrisa.

-Si ¿Con quién más? Jeje -fue lo último que dijo antes de entrar a su casa-

Me quedé parado viendo cómo entraba. A decir verdad no pensé que ella y yo estaríamos juntos. Pensé que amaba locamente a Garrett pero esto del trato falso de ser novios me unió más y me hizo quererla. La amaba.

No estaba seguro de querer enamorarme de nuevo pero al ver lo dulce que es conmigo tal vez me dé esa oportunidad.

Debo dejar ir a Ángeles y que sea feliz con Brendon,ella es feliz y yo también lo seré.

-Continuara-

Espero que les haya gustado, hasta la próxima ;-)

(si te llega la notificación, estoy reeditando algunos capítulos) 😄