"No te rindas (Parte 1)"
Narra Narrador:
Michelle había despertado luego de una larga noche lleno de problemas los cuales pudo resolver pero gracias a aquello tuvo que acostarse tarde.
Cuando abrió sus ojos estaba su niña a su lado leyendo un libro y a su otro costado estaba Alexander. Lo cual le extrañó muchísimo, él también dormía.
-Uhm ¿Alex? ¿Que hace aquí? -dijo para si misma y Leah, quien estaba despierta se le arrimó dejando su libro a un costado-
-Buenos días mami ¿Dormiste bien? -pregunta la niña a su madre y acomoda su cabello para ver mejor su rostro-
Michelle se sienta en la cama y refrega sus ojos...
-¿Que hora es? -indaga, por lo visto ya era de día, la habitación era espaciosa y entraba mucha luz-
-Casi las 11 AM. -dice la pequeña, lo cual alteró a la azabache casi se agarra un infarto, jamás se despertaba tan tarde-
-¡Rayos! -se quejó y estaba por levantarse a no ser que Alex estuviera a su lado durmiendo plácidamente- ¿Porque nadie me llamó? Tengo que hacer el desayuno para todos.
-No hace falta -escucha decir la voz de Garrett que estaba en la misma habitación sentado en el sofa- la empleada dejó aquí tu desayuno, los demás ya lo hicieron.
-¿Y Alex? -mira a su niño y acaricia su cabello suavemente-
-Se despertó, desayunó con su padre según dijo y se vino a dormir de nuevo, estaba cansado -dijo la niña-
-hay que despertarlo, pobrecito mí bebé -decia la ojiazul tiernamente, lo veía muy inocente e indefenso al niño-
-No mami, déjalo así -advierte Leah haciendo unas señas de Stop con sus manos- prefiero que duerma y no que esté chingando tan temprano.
-no seas mala cariño... -Michelle se arrima y empieza a molestar a su niño para que despertara-
Cuando por fin lo logró, Alex abrió sus ojos y bosteza un poco...
-¿Mamá? Uhm buenos días -menciona el ojiazul-
-¿Que haces aquí? Deberías de estar durmiendo en tu habitación.
-Es que Elliot se despertó temprano y empezó a limpiar la habitación y no se que... -el niño ya había notado aquel primer progreso-
-¿Que Elliot? -frunce su ceño Leah pensando si era aquel niño a quien admiraba- ¿Quien...?
-Ah, el hijo de Benjamín -le dice Michelle recordando que su niña aún no lo conocía personalmente- que extraño que no te lo dije antes...
-¿Podría ser? -decia Leah pero negó, sería mucha casualidad que sea la misma persona que ella buscaba- uhm no creo... ¿Y quién es Benjamin?
-¡Es mí tío chismosa! -ambas escuchamos la voz de Alex que había hablado, cuando volteamos a verlo él estaba despierto-
-¡Ah! ¡te hacías el menso! -decia Leah y lo empujó hacia el otro lado- Tu eres el chismoso aquí ¿Que hacés en nuestra habitación? Tú tienes la tuya.
Alexander saca su lengua de burla.
-Yo vine por mamá, no por ti chismosa.
A Michelle le daba ternura su hijo, despertarse y ver su rostro descansar.
-¿Querías algo? -pregunto por simple curiosidad-
Él se sienta en la cama y junta sus dedos índices.
-mamá sé que ayer fuimos con Ben al cine -dice el ojiazul apenado y Borns escucho aquello- ¿Puedo ir con Knox, la tía Angy y Dallon a visitar la ciudad de Manchester?
Michelle se hacía la sorprendida, como si ella no supiera su plan.
-Oh, pero ayer saliste...
-Si, pero hoy es con Knox y mis tíos -menciono Alex poniendo sus ojitos de borrego a ver si su madre caía en sus encantos y le daba permiso- ¿Me dejaras ir? Porfis
-¡AH! ¡NO ES JUSTO MAMÁ! -se entromete Leah indignada- Alex salió ayer ¿Y yo cuando voy a salir de esta habitación? Estoy todo el pinche día encerrada y aburrida -objeta la niña y se cruza de brazos-
Michelle no podía con ambos y si quería que su plan de salir con Ryan funcione no puede quedar con ninguno de sus hijos por esta ocasión.
-Ok, como ya estás mejor tu padre te llevará a recorrer la ciudad y las librerías de aquí -ordena la azabache, Garrett frunce su ceño- y Alex puedes ir con Angy y Dallon, confío en ellos.
-Bien quejosa, te saliste con la tuya -le dice Alex a su hermana en voz baja-
-No eres el único que puede pasarla bien eh -dice la niña y le saca la lengua-
-No es mí culpa que mí padre sea un multimillonario y el tuyo no jajaja -se burla el ojiazul-
-¡Basta niños! -exalta la mujer frunciendo su ceño- no peleen ehhh porque no saldrá ninguno y tu Alex no te burles de tu hermana, somos familia y Garrett también es tu papá
Alex se cruza de brazos pero al darse cuenta que si podía salir con Knox y sus tíos se puso muy feliz.
-bueno mamá, iré a cambiarme, ya mismo voy a avisarle a Knox que me dejaste ir jijiji -el niño se pone de pie y brinca de la cama para irse de la habitación festejando su victoria-
Leah también pegó un brinco muy entusiasmada porque ya podía salir de la habitación, se sentía con muchas fuerzas y estaba muy energíca.
-¡Yo también! ¡Iré a bañarme y cambiare por ropa top! -menciona la niña- ¡quiero conseguir el segundo tomo de mí libro favorito!
Michelle recordó ayer que Benjamin le había dicho que no había un segundo tomo de aquel libro que su niña esperaba encontrar, como la veía muy ilusionada no dijo nada, puesto que eso la pondría triste.
-Ehm cariño... -Leah voltea y busca su ropa en la valija, después de arrepentirse le dijo otra cosa- mira, allá compre ropa para ti. -le señaló unas bolsas y sabía que su niña dejaría de estar en cama y no iba a traer puesta la ropa que usaba en Las Vegas cuando en Londres había muchas tiendas de ropa de marcas-
Leah chequeo las bolsas de compras y quedó fascinada...
-¡OH! ¡qué lindos vestidos mami! ¡Estoy muriendo! -ella observa un vestido rosado y luego otras prendas de su talla- ¡Y mira ese! ¡Dios mio! ¡Gracias!
Leah abrazaba sus nuevas prendas, era como ponerse ropa a la moda y costosas, parecería una princesa. Rápida se fue al baño a ducharse.
Michelle quedó en la cama y justamente Garrett se le acercó para traerle el desayuno.
-¿Todo eso le compraste a Leah? ¿Y tenías dinero?
-Obvio. -le mintió Michelle. No podía simplemente decirle que Ryan le dio dinero a su cuenta para que gastase lo necesario para sus hijos y ella misma- Trabajé para Harry y tenía algunos ahorros.
-uhm ¿Y no nos vas a acompañar con Leah a Londres? -ahora pregunta Borns, sentía curiosidad en saber que tanto tenía que hacer que no podía estar con su niña-
-Si pudiera ir, iría pero no puedo, lo siento. Tengo cosas más importantes que hacer. -menciona la azabache sin darle muchas explicaciones a lo cual Borns se queda inquieto-
-¿Cómo salir con el señor apuesto? -Garrett tenía que decirlo, lo había escuchado de la boca de Alexander y sentía que debía escupirlo-
-¿Con quien? -ella bebe tranquilamente su café, aunque estaba frío no quería verle a la cara y que su jeta arruine su mañana y el resto del día-
-Con el señor de porte. Según Alex dijo que salieron al cine ayer con él y no me habías dicho eso.
-¿Y porque te lo diría? -le dijo Michelle porque ella se sentía obstigada por Borns- ¿Tampoco te dijo Alex que salimos con su niño? ¿Que no fue una cita ni nada de los piensas? -fruncio su ceño nuevamente- Mal pensado
-¿Y si yo hago lo mismo? -pregunta como suposición- me invita a cualquier sitio la cocinera que tiene una niña y me llevo a Leah ¿Te gustaría la idea?
-Me parece perfecto, enserio -dice la ojiazul en broma, en verdad no le importaba ya que omitió rotundamente que se tragaba a su rata en Las Vegas- que se diviertan -le sonríe estando de acuerdo con la idea-
Garrett pone los ojos en blanco y paso saliva. Su paciencia se estaba acabando.
-Hoy estás ocupada ¿Y mañana tendrás algún tiempo para mí? -indaga Borns porque ya no estaba soportando su indiferencia- Desde que llegué me estás ignorando.
Ella no le contestó y siguió desayunando.
-¿Y? -insiste en saber el pelilargo-
-No sé Garrett. ¿Porque me preguntas eso? -ella estaba tratando de ser lo más pacífica posible pero el señor se dignaba a molestarla- No se que querés que te diga... Hoy puedo estar ocupada, mañana no o si, no se. No tengo una agenda programada...
Borns suspiró pero si quería reconciliarse y no perderla del todo debía calmarse.
-Bueno. Programa esto: mañana salimos solos sin los niños.
-Ok. -Michelle pensaba que sería mala idea y sería desagradable, porque por dentro lo detestaba pero aceptó de buena manera-
Ella estaba por irse pero justamente Borns la toma de su brazo y la recuesta en la cama y él se aventa arriba suyo.
-Pero qué... -no dejó que ella hablara que quiso darle un beso en sus labios pero ella se percató y corrió el rostro, el beso fue a dar a la almohada-
Luego lo empuja un poco para librarse de su agarre. Por esa misma acción la taza había sido derramada en la cama.
Garrett frunció su ceño, era la primera vez que le negaba un beso siquiera.
-Mich...
-Garrett no es momento, mira lo que hiciste... -señala la cama ahora con derrame de café- eres un descuidado.
Ella negaba pero el pelilargo tenía cosas que decirle que estaba hasta la madre y se estaba conteniendo.
Narra Michelle:
Antes de irme de la habitación la pinche rata me tendió una trampa y quiso besarme, por suerte corrí mí rostro. Jamás dejaría que hiciera algo así.
Ahora estaba ahí sentado sorprendido y seguramente tragando su coraje.
-Oye, nunca me haz rechazado un beso. -ahi empezaba su maldito show de hacerse la víctima, quería creer que finge demencia- ¿Que sucede contigo?
Yo me limpio mí ropa y trato de no verlo. Todo lo que decía es una mentira, aún no contaba nada de que tenía una amante.
-No es momento y tengo cosas que hacer.
-desde que llegaste aquí estás rara y siempre me ignoras. -no importa lo que dijera, siempre hablaba él de sus cosas y suposiciones- ya no eres la misma de antes... no eres la Mich de la que me enamoré.
JAJAJA no sabía si reírme de sus patéticas palabras, faltaba que me rogara pero su orgullo le impedía.
-¿Ya? ¿Me puedo ir? -le digo ignorando aquello, no me importaba nada de lo que dijera- si sales al centro cuida por favor a Leah.
Garrett estaba por decir algo más pero me salí de la habitación, era muy pesado. Encima debía tragarme sus mentiras.
Al llegar a la cocina me encuentro con Elliot que estaba concentrado escribiendo algo, no quise molestarlo pero enseguida se arrimó Benjamín por detrás mío.
-Shhh -susurra en mí oido- está concentrado mí niño...
-¿Está escribiendo algo? -observo como está escribiendo manualmente letras sobre una carpeta-
-Me dijo que continuaría con el segundo tomo de su libro. -menciono y me puse muy feliz por él, Ben y Leah que estaba entusiasmada en leer esa historia-
-Wooow que genial, me alegro mucho -sonrei amable, me daba mucha felicidad que ahora Elliot estaba más entusiasmado y positivo-
Cuando levanta la vista Elliot deja de hacer lo suyo y se pone de pie. Llega hasta nosotros y hace una reverencia.
-Gracias señorita Michelle. -dijo cabizbajo- espero poder llevarnos bien con usted y su familia.
Me daba ternura este niño, era muy respetuoso y asiento con una lágrima en los ojos. Poso mí mano sobre sus hombros como señal de apoyo y contención. Él levanta su vista y se reincorpora.
-Para lo que necesites Elliot, cuenta conmigo ¿Si? -le guiño un ojo y él pone una sonrisa-
-Gracias de nuevo y a ti también papá, por no rendirte nunca conmigo -dice el niño pelinegro y mira a Benjamín-
Veo a Ben y estaba muy emocionado, que lo abrazó fuerte a su hijo. Me quedé viendo la escena como una niña y admirando aquellos dos.
Luego volteó y notó que Angy le hace una seña a la distancia... fui hasta ella y ya tenían todo listo para irse.
-¿Ya se van? -indago al ver que tenía una pequeña valija a su costado-
-Si, porque Dallon y Knox querían ver algunos museos. -dice mí amiga un poco apenada después agrega- ¿Y tu que harás?
-Tengo cosas importantes que hacer, tu sabes... -le digo en pocas palabras-
-¿Cómo fugarte con...? -dice Angy pero no dejo que termine la frase-
-Shhh no digas -susurro, no quisiera que alguien más se entere- si, todo lo que supones Si. Pero antes de que te vayas espérame un ratito que me cambio y voy con ustedes...
-Ok, en media hora salimos amix. Suerte
Asentí y cubro mí rostro avergonzado, tal vez para ella no era algo asombroso sabiendo nuestros sentimientos pero para mí si lo era... tanto años odiandolo que nunca me di cuenta que el ojete siempre fue Garrett ocultandome la verdad. Su odio irracional a Ryan hizo que me alejara de él por años.
Flashback:
-¡Angy espera! -ella al verme besar con Ryan se sorprende que enseguida sale corriendo, por suerte Ryro se fue dormir, nunca supo que fuimos descubiertos pero yo debía frenarla antes que comience algún rumor en la mansión y Borns se entere antes de tiempo y arruine mí plan- ¡Dios mio!
Nunca imagine que Ángeles fuera tan rápida para las huidas, la perseguí y la encontré en la cocina yendo por más postres en la nevera.
-¡Angy! -estaba un poco agitada pero ella estaba bien tranquila, como si no hubiera visto nada y aunque se haga la mensa debía de aclarar las cosas- debemos hablar
-¿Ehm? ¿Ahora? -la veo con dos flanes en su mano para llevar a su cuarto- mañana amix, no te preocupes. No le contaré a nadie lo que vi -me guiña un ojo y parecía apurada por irse. Ni madres ahora me escuchas-
-no no no... No te vas a ningún lado hasta que me escuches... -y no sabía por dónde empezar o que decir, mí mente estaba en blanco. Me habían tomado desprevenida que no había pensado en alguna excusa para zafar de esta situación- es que...
-¿Te estabas dando amor con Ryan? -Dios, que vergüenza ¿Porque tenía que decir eso?- Entonces ¿Arreglaron sus asuntos pendientes?
Eso me hizo sonrojar, parecía un interrogatorio en doble sentido.
-no es lo que parece... -y aunque fuera así no le diría que me lo estaba cenando-
-Si es lo que parece Mich ¿no me lo vas a negar ahora? -me contesta con una media sonrisa, se volteó para guardar de nuevo sus postres y se sentó delante mío- ¿Entonces que está pasando?
-bueno, si. Ok. Si arreglamos parte de nuestros asuntos. -le digo en breve- y me di cuenta que Ryan no fue una mala persona y siempre estuvo cerca de nosotros y Alex.
-¿Cómo? Si desapareció literalmente 10 años. Por eso mismo tu lo odiaste -me recuerda pero ese no era el punto-
-Si, pero aquí el ojete fue Borns que me ocultó todo y se hace el menso. Ryan me había escrito cartas, mando dinero para mí hijo y encima me ocultó que el hijo de Sarah no era su hijo. -le mencioné, veo que se sorprende pero no me dijo nada al respecto- y no sólo eso... tuvo la caradurez de comerse a su amante en nuestra casa mientras estábamos aquí.
Angy no sabe que decirme, veo como sus ojos se abren y queda boquiabierta.
-¿Que? ¿Enserio?
Asentí. No solo por mis intuiciones sino que ahora lo confirmaba ya que tenía las pruebas registradas en las cámaras de seguridad de mí casa.
-¿Y como piensas que Leah enfermó? -enarco una ceja, me sentía indignada gracias a la estúpida rata- Culpa de sus descuidos, si no se estuviera tragando a su puta mí niña...
Ángeles se pone pensativa un poco al respecto, obvio ella estaba de mí lado, jamas se pondría a defender a ese bastardo mentiroso.
-Con razón ya me decía yo porque lo ignorabas a Garrett.
Y no por mucho menos, aún tiene el descaro de mentirme a diario todos los días.
-Por mentiroso, cretino hija de su chingada madre. -espeto con mucha molestia y enojo, no quería ni acordarme de él y más precisamente ahora que debía dormir en la misma habitación-
-¿Que piensas hacer al respecto? ¿Le pedirás tu separación? -indaga un poco preocupada, seguramente es lo primero que se le vino a la mente-
Pase saliva, ahora no estaba en duda ahora era afirmativo.
-Eso ya está hecho, ni se pregunta. Aparte no estamos casados y Benjamín me ayudará con todo lo necesario. También trabajaré para que no piensen mal ni que ellos me mantienen...
-Pero entonces... ¿Eso quiere decir que?
Asentí a sus sospechas.
-Si, me quedaré a vivir aquí amix -fui y me acerque a ella y la abracé, siempre estuvimos juntas y somos grandes amigas, yo creo que ella entendería- no tengo motivos grandes para volver a Las Vegas, aquí soy feliz. Ben y Elliot me tratan bien, Alex y Ryan son felices. Lo siento por Leah pero jamás le prohibire a Borns que vea a su hija, la única condición es que ella no volverá a los Estados Unidos. Si la quiere ver tendrá que verla acá y soportar.
Ella entendía mí punto y sonrió.
-Si, aparte aquí estás más radiante, más relajada y tranquila. Creo que sería muy egoísta de mí parte empujarte a que vuelvas a USA cuando sabemos que lo mal que lo estabas pasando, ni siquiera Garrett vale la pena para hacerte cambiar de opinión. Por otra parte... te quiero y quiero tu felicidad, si es aquí solo debo apoyarte... -y con una media sonrisa agrego- Y seguiré apoyando tus locuras a distancia...
Ahí me acordé de la petición de Ryro, justamente necesitaba su ayuda para distraer a mí niño torbellino.
-¡Cierto! -exclame sorprendida y ella también se pone un poco alerta- tienes que ayudarme amix...
-¿Que? ¿Con qué? -pregunto un poco desconfiada pensando que se me había ocurrido a último momento-
-Necesito que lleves a Alex de paseo, distraelo por el día de hoy. -le pido como favor, era una súplica- Así yo salgo..
Angy enarco una ceja, seguramente no me creía y a estas alturas todos ya se enteraron que salí con Ben y su niño.
-¿Otra vez? ¿Con quién?
Hasta la pregunta ofendía.
-¿Cómo con quién? Con Ryro. -me cruzo de brazos-
Ella se quedó pensando pero luego y me pregunta...
-Aaaaah... ¿Pero no saliste hoy con Benjamín? -indaga y a ella no podía mentirle porque era mí cómplice-
-Siiii pero ahora es con Ryro -le aclaro que ahora no era una salida grupal sino una cita-
Ella ya tenía su duda al respecto al igual que yo...
-¿Y Ben? ¿Que onda? -inquiere saber directamente, que ni yo misma sabía la respuesta-
Me hice la zonsa y fui hasta la nevera para buscar y sacar el postre que Angy come por las noches.
-Aaaah mira, aquí hay postre -le digo bromeando y cambiando de tema- ¿Llevas dos? ¿Uno para ti y otro para Dallon?
Ángeles no se quedó muy contenta que digamos y dejé los postres sobre la mesa poniendo mí jeta.
-Miiiiich -me retó-
Exasperaba un poco. Pero suspiré, estaba acorralada.
-Ya. ¿Que quieres saber ahora? -le preguntó para que me dijera en concreto que quería saber ella acerca de mis relaciones-
-¿Te estás comiendo a los dos? -pregunta directamente-
-Ojala. Pero no. -sonrio de medio lado y no mentía está vez- Con Benjamín somos amigos, nada más. Nunca se insinuó conmigo y eso me deja tranquila. Que puedo tener un hombre y un amigo en qué confiar.
Ángeles como que no me creía, hizo un mueca solamente.
-Aaaaah pero ojo... -me advierte- nada de cenar doble o estarás jodida eh...
-Ya sé -puse los ojos en blanco- aparte ¿como voy a cenar doble si tengo al pinche diablo de G y a Alex siguiéndome el paso a cada momento?
Era desesperante pero la triste verdad es que era vigilada por la CIA de Borns y mí niño no se quedaba atrás, parecía detective.
-Solo cuidate. -me dice amable y luego me cambia de tema y se queda embobabada- Mmmm... me espera mi daddy hambriento, espero que no se haya dormido.
No sabía si lo decía literal o en doble sentido, seguramente su esposo la esperaba en la cama aún despierto y esperando darle su postre nocturno. Golosa.
-Naaambre ¿Y después me dices a mí que no puedo cenar postre doble? -enarco una ceja un poco incrédula-
Ella se ríe un poco por lo bajo y niega.
-Jajjaja bueno, mañana iremos a Manchester. -no me contesta lo que realmente le decía- Por la noche estaremos aquí.
Ahora me acordé que los Weekes eran muy fanáticos de visitar lugares que a mí niño le aburría...
-No le digas a Alex que visitaran museos o librería, sino se negará a ir. -negue pero Alex era así, si se enteraba estaría tras mío y su padre todo el dia- Mejor dile que irán a ver un partido de soccer o carreras de coches.
Ángeles se quedó pensativa y luego asintió. Miró por detrás mío sorpresiva, al girarme estaba Dallon esperando por ella en el umbral de la puerta.
-Si, pero nos tendríamos que quedar unos días para cumplir sus sueños. -menciona con una sonrisa y se lleva los postres en sentido hacia su esposo, casi brincando de alegria- Uhm daddy lindo... -llega y le toca su mejilla, luego él recibe los postres y se marchan caminando de la mano como una pareja amorosa- que descanses Mich bye bye
Me saluda a la distancia Ángeles con una sonrisa ¿y quién no se sentiría así con un buen esposo?. Yo inmediatamente pensé en Ryan ¡Ay Dios! Empezaba a delirar y me sonroje...
Fin del Flashback.
Volvi a mí habitación nuevamente con prisa y justamente estaba mí niña en el espejo ya vestida para salir con su padre.
Me acerque a ella y empecé a peinar su largo cabello con un cepillo.
-Gracias mami ¿Me haces unas trenzas?
Sonreí y empecé a entrelazar mechones de su cabello hasta hacerle dos trenzas.
-¡Que bonitas me quedan! Gracias gracias
Leah beso mi mejilla y salió muy contenta, casi brincando para ir a algún lado. Me miré al espejo y aun me faltaba elegir lo más importante: la ropa que llevaría puesta para nuestra cita.
No quería ir vulgar sino sexy para mí hombre. Mire hacia un costado y tenía las bolsas que había comprado con varias prendas combinables. Me vestí rápido antes de que algún niño me interrumpa y también me puse unas lindas botas de cuero.
Me maquillé pero al natural, no quería resaltar tanto con tonos fuertes y accesorios como aretes y pulseras. Estaba de infarto.
-¿A dónde vas a salir tan guapa? -escucho una voz del señor mentiroso-
No me giré a verlo porque su reflejo estaba estorbando mí visión en el espejo. Suspiré ¿Tan intenso se ponía?
-¿Michelle? -volvia a insistir-
-¿Que pasa Garrett? ¿Acaso no puedo salir? -me gire porque ya estaba harta de que siempre me prohíba de que pudiera ser feliz-
-Si pero... -no sabía que decirme porque seguramente le desagradaba que saliera sin él, no estaba sooortando- ¿No quieres salir conmigo?
-Ire con Angy y los niños -mencione mintiendole, creo que era la única excusa que tenía para zafar de él-
-Yo también quiero ir entonces. -espeto y estaba hasta la madre, que metiche era. Si quería salir con Ryan necesitaba sacarmelo de encima-
-No creo que puedas ir, nosotros ya sacamos boletos anticipados. -le dije para que no intente nada porque no estaría de metiche tras mío- Así que será en otra ocasión.
-¿Otra ocasión? ¿Y cuando? -se acerca por detrás mío, guarde inmediatamente mí labial en mí cartera y me corrí para tomar distancia, ahora si tenía que verle la cara- Desde que llegue que me ignoras y no quieres dormir, ni salir conmigo. Cómo si te diera vergüenza.
Me encogí de hombros, no se porque me echaba la culpa y se hacía el menso. Quisiera pensar que tiene amnesia y se estaba olvidando lo más importante: que se tragaba a su amante en mí casa en mí ausencia.
-Pues si. Ni modo. -le dije en voz baja, ya ma caía mal de por si y ahora que estaba aquí había conseguido un poco de tranquilidad hasta que él llegó a arruinarla-
Y él seguía de mala onda...
-Aparte te comportas como si estuvieras soltera pero te olvidas que somos pareja
No sabía si hablaba en serio o bromeaba acerca de eso. No quería decirle abiertamente porque sino se iría de boca y esto acabaría mal, parecía que a otra persona se le había olvidado eso hace años.
-No te confundas, nosotros no somos pareja. -conteste tajante y a los ojos fijamente de frente para que le quede claro- Yo puedo disfrutar y salir con quién se me da la gana. Si quiero salir con Benjamín, los niños, con Angy o incluso con Ryan. No me puedes prohibir y lo sabes.
Él puso su jeta inmediatamente, seguramente cuando mencioné por enojo a Ryan o Benjamin no le gustó para nada. Igualmente no necesitaba su aprobación para salir con alguien.
-¿Y que fue todo eso antes de que Alex escapará? -pregunta indignado, lo veo cruzarse de brazos y fruncir su ceño- ¿Me pediste volver a casa?
Ash ¿Se pensó que iba a volver conmigo después de causar todo este desmadre? No señor. No lo había perdonado ni olvidado.
-Para que estés con los niños, no que íbamos a volver. -me justifique rápido y pase saliva-
-Jum... -su jeta fue más larga-
Sonreí de medio lado, está discusión la había ganado yo. Orgullosa estaba de mí mismo.
-No pongas esa cara, sabes lo que perfectamente sucedió en Las Vegas y porque me separé de ti. No hay remedio, no vamos a volver. -agarre mí cartera y un abrigo que tenía cerca- Espero que te haya quedado claro.
Garrett no muy contento que digamos se interpuso en mí camino.
-¿Y que? ¿Vas a volver con ese cretino? -dice tajante y enfadado, seguramente su gran temor era que volviera con Ryan, su gran rival y enemigo- ¿Con Ryan? El mismo que te mintió y te dejo abandonada por años. Nunca le importaste.
Sonrió de medio lado, no pensaba caer en sus mentiras. Está vez elijo creer en Ryro. En él confíe muchos años y perdí mucho que ya no me quería acordar...
-Tu sabes perfectamente que así no fueron las cosas y no me hagas hablar. -le advierto y lo apartó de la puerta para que me deje pasar- Bye y cuida a Leah.
Salí al pasillo y respire profundo, ya era libre de sus garras.
-Te estaré esperando. -dice por detrás mío-
Puse mis ojos en blanco y luego volteé. No,usted no ganará está vez.
-Si, pero sentado... -le contesté con una sonrisa falsa- Volveré tarde, así que no me esperes despierto.
Ahora sí me fui y luego pude suspirar tranquila, un poco más y parecía que el mundo iba a explotar con tanta tensión ahí adentro.
No sé cómo salí de aquella habitación y con vida pero lo hice y aproveché la excusa de la salida de Ángeles para escaparme con Ryro.
-¡Angy vamos! -corri desesperada al verla-
Ya tenían todo listo para irse y yo me sumaria a su viaje pero me bajaría en cierto lugar.
Alexander estaba hablando justamente con Ryan en la puerta y mí niño voltea muy emocionado con su mochila cargada a su hombro.
-mamá ¿tú también vienes? -indaga mí hijo y seguramente eso le preocupaba-
Puse una sonrisa de medio lado y toque su nariz.
-hasta mitad de camino, tengo otras cosas que hacer.
-¿A dónde? -insiste en saber mí niño FBI-
-No seas metiche Alex. Voy a salir sola y punto. -pongo mis brazos a mí costado y mueca.
-¿Y Papá a donde vas? -ahora le pregunta directamente a Ryan que estaba a nuestro lado-
Por suerte Ryro llevaba su maleta en su mano. Espero que haya pensado en alguna buena excusa.
-Tengo una reunión.
-¿Un domingo? ¿No se supone que descansas?
Me inclino a Alex y estiró de su oreja.
-¡AAAY! ¡mamá! -se quejó molesto, luego empezó a zobar su oreja- ¿Porque hiciste eso?
-Para que respetes y no andes de preguntón. Sabes que tu padre tiene un cargo importante en la empresa y no puede relajarse como los demás.
-¿Y desde cuándo lo defiendes? -se atrevió a decirme. Fruncí mí ceño e inmediatamente se alejó antes de que le arranque la oreja por metiche-
-Uhm no... -se alejo rápido de mí y se acercó más a los Weekes- Mejor me voy con Knox.
Ryan se quedó ahí parado tímido sin decirme mucho
-Gracias por eso. -seguramente no había planeado otra mejor excusa que esa que no fuera tan obvia- pero no había falta que lo regañes...
-Hay que educar a nuestro niño sino siempre tendrá esas malas manías que le enseñó Borns. -le comento y yo también debía corregirlo aunque no quisiera que se pusiera intenso- bueno, me voy adelantando...
Ryan cuidadosamente observa que no seamos el foco de atención de los demás y me entrega un papel.
Lo abrí rápido y me dio una dirección de un lugar cerca de aquí.
Starbucks Coffee Brixton. Te espero allí.
Mi tonto corazón se aceleró como una adolescente enamorada. Enserio, hace mucho no me sentía así de emocionada.
No pude despedirme con un beso con él porque todos empezaron a mirarnos. Si, era bastante extraño que estuviéramos cerca sin echarnos leñas o más fuego para encender una fogata.
Fui hasta Ángeles y muy entusiasta le anime para salir todos juntos.
Por suerte Dallon fue muy amable de alcanzarme hasta dicho lugar y me despedí de todos, incluso de Alex.
-Cuidate bebe y haz caso a la tía eh. -le advierto, que si me llegó a enterar que se mando un lío no saldrá más con ellos- adiós
Mí niño asiente y ya lo tenía claro. Me abrazó fuerte para quedarse más tranquilo.
Llegué a dicho lugar Starbucks que había mencionado donde me esperaría pero él no estaba allí adentro. Intenté mirar adentro pero alguien tocó bocina y cuando volteé estaba justamente en su auto esperándome con una media sonrisa.
-¿Vamos?
Asentí y fui hasta su carro para subirme a él. Ahora sí le di un beso en sus labios y él pone en marcha el vehículo.
-Pense que... -observo como conducía y no sabía a dónde iriamos- ¿A dónde me llevarás?
-Es sorpresa. -menciona Ryro y me observa de reojo- estás muy hermosa.
-Bueno... es una cita ¿no? -me sonrojó un poco pero él también estaba muy guapo y más con su camisa negra y anillos y reloj puestos- no me pondría cualquier cosa para salir.
-¿Y como la pásate ayer con Ben? -pregunta y espero que no esté celoso de su hermano- Él me contó un poco lo ocurrido con Elliot...
-Si, estuvo un poco tenso al principio. Elliot estaba un poco tajante y hasta huyó que nos preocupó a todos. -le conté en breve y agache la mirada-
-Si, me contó eso también. -dijo Ryan siempre observando el frente- ¿Porque no me llamaron?
-Fue un imprevisto, no queríamos preocupar al resto. -le dije y en esos momentos mí cabeza estaba en encontrar a Elliot-
Levanté mí vista y lo vi sonreir de medio lado.
-bueno, menos mal que ahora está todo bien. Elliot está mejor y Ben feliz. Gracias. -menciono en voz baja-
-¿Gracias? Técnicamente fue mí culpa por poner mal a Elliot, le hago acordar a su madre y eso le duele. Pobre niño, quisiera que sea feliz como mí niño.
-Con tiempo Mich. -me dijo, seguramente como me conocía sabía que era muy ansiosa en ese sentido, quería ver a todos lo más felices posible, no me gustaba esperar-
Estaba tan concentrada en verlo, de perderme en su belleza que no me percate que se había vuelto de noche. Llegamos a un estacionamiento y dejamos el coche allí mientras salimos a caminar.
Ryan extiende su mano para sujetarme para caminar juntos tomados de las manos. Moría por dentro.
Me sonroje al instante al sentir su tacto, su piel. Caminamos recorriendo unos de los canales y vimos un lindo atardecer de color violeta, parecía un sueño. Cómo niña chiquita me acerque a ver el agua.
-Wooow que hermoso es todo esto.
Ryan llega por detrás mío y me abraza por mí cintura. Besa mí hombro con mucho cariño.
-Si, todo esto puede ser tuyo Mich.
Me volteo y lo vi directamente a los ojos.
-¿Enserio?
Asintió y lo vi sonrojarse.
-Quedate conmigo, aquí y para siempre.
-No planeaba volver. ¿Porque lo haría? -lo abrace por sus hombros- quiero estar contigo Ryro... empezar de cero...
Ryan miro mis labios, ahora lo entendíamos mejor ambos y como adulto, estábamos enamorados y el tiempo no pudo destruir eso. Lo besé y suave para conectar aquellos sentimientos que teniamos dormido. Necesitábamos esto.
Quería llorar pero de alegría, sentía que mí corazón se iba a salir de mí pecho en cualquier momento. Ryan se soltó de mí y me llevo de la mano hasta un parque que había cerca.
-Esto te va a encantar.
Negué, estaba a nada de explotar de ternura con este hombre. No sé cómo no pude darme cuenta antes de lo infeliz que era, viví una mentira y atrapada por años en una burbuja.
-Ooooh una rueda de fortuna. -vi que era muy alta y tenía muchas luces de colores, me fascinaba-
Ryan pagó la entrada y ambos subimos. Él se sentó primero y yo a su lado, me abrazo de nuevo. Mientras veía el paisaje a nuestro alrededor... Lo vi muy feliz.
-¿Te acuerdas Mich?
-¿Eh? -voltee, no se a que se refería-
-Cuando éramos novios falsos, nuestra primera cita falsa fue subir a una rueda de la fortuna y fingir que éramos algo.
-¡Ay! -cerre mis ojos. Si, cuando éramos adolescentes- no me quiero acordar de eso. -Ryan se sorprendió- no por ti, sino por el menso de Borns, estaba pendeja por... Ash olvídalo.
Ryan se para y se pone a mí lado para observar el horizonte.
-No se pienses pero me gustó todo. Gracias.
Sentí aquello tan directo, no solo me agradecía por una tontería de adolescente, seguramente él si se lo tomó en serio y termino enamorado de mí.
-¿Gracias por qué? La cagué -agache mí rostro- no tendría que haberte engañ...
-Contigo en tan poco tiempo aprendí mucho y una vez más quiero creer que el destino nos volvió a unir. -menciona tranquilo y entrelazo su mano a la mia- así, con nuestros defectos, equivocaciones y virtudes... estamos juntos.
Apoye mí rostro en su hombro y sonreí, él tenía razón. Dios me volvió a unir al amor de mí vida...
-Esta vez voy en serio Michelle. -suelta de repente- no estoy dispuesto a perderte ni a rendirme contigo.
Parpadee y trague grueso. ¿Era una advertencia? Bueno, no me afectaba. Yo también lo aceptaba en mí vida y no quería que se vaya ni tampoco irme de la suya.
-No quiero que lo hagas.
Él me observa detenidamente y acaricia mí rostro, mí piel. Me besa en los labios y me sujeta las manos llevándola a su pecho. Me separé por la falta de oxígeno y sonreí.
El resto del viaje nos quedamos sentados admirando el lugar. Un anochecer de cuentos de hadas.
Cuando nos bajamos de la rueda de la fortuna recorrimos algunos puestos dulces, me contro algodón de azúcar color rosa y bebidas. Parecíamos unos niños. Él aún conservaba aquella alma inocente y despreocupado tal cual como lo recordaba.
-Todo este tiempo... ¿Enserio no haz salido con nadie? -me atrevo a preguntar, aún tenía esa duda-
Lo había tomado desprevenido y negó.
-Nop. -menciono breve y fruncí mí ceño, hasta no sacarle la lengua no descansaria- no es como si hubiera tenido mucho tiempo para conocer gente.
-Fuiste a la universidad, estás trabajando en una empresa, eres presidente de la misma, tienes hartos contactos de negocios. Una mujer que no te haya interesado es extraño. Hasta el pendejo de Brendon tiene novia.
-Jajjaja ¿Te parece extraño? -se burla y me puse sería, hablaba en serio- si quieres saber en profundidad si hubo mujeres interesadas en mí pero yo no buscaba nada serio aquí. Estaba concentrado en mis estudios y trabajo.
Fruncí mí ceño y puse mí mueca de lado.
-aparte esperaba a que algún día vinieras. -dice con una sonrisa mientras come un poco de algodón azucarado-
-¿Y si nunca venía a Londres? -indago, quería saber cuál era su segunda opción-
-Alex si vendría a mí. -dijo muy seguro de si mismo, no se porque presentía que esto tal vez algún día ocurriría-
-Si, pero él se enteró por un descuido del idiota de Borns.
Se quedó pensativo por unos momentos y luego espero para volver a hablar...
-Iba a esperar para hablar con él cuando tuviera 18 años y sea un adulto.
-Eso sería una traición Ryan. -me indigné si hubiera llegado a esas circunstancias-
-Dime Ryro mejor -me da un poco de algodón y lo mete en mí boca-
Naaaaambre ¿así era? Tomé otro pedazo de algodón y se lo quería meter de lleno en su boca pero antes de que lo hubiera salió corriendo. Lo seguí y empecé a tirarle bolitas de algodon de azúcar a su espalda, cuando por fin logré alcanzarlo se volteó para abrazarme fuerte y nos reíamos a carcajadas los dos...
Tenía su rostro perfecto tan cerca mío que podía sentir su aliento recorrer mí cuello, su perfume me volvía aun más loca.
Cuando levanté mí vista él me dio un ligero pico en los labios y me volteo a mirar hacia otro lado
-¿Te animas?
Observé y era una pista de patinaje sobre hielo. Me quedé sorprendida...
-Pero no se patinar, me voy a caer. -dije cabizbaja y vergonzosa-
-No te preocupes, yo te enseño mi Lady -extiende su mano para sujetar las mías y besa el dorso, no pude evitar sentirme una reina y sonrojarme con ese detalle-
Ryan abona la entrada y nos adentramos a una gran carpa, adentro podíamos ver la pista de patinaje. Había mucha gente practicando como parejas y niños.
Me quedé sorprendida y Ryan estaba en la banca poniendo sus patines, no había notado hasta el momento que él estaba cumpliendo aquellos sueños que tenía de niña, recién pude darme cuenta. Sin querer pude darme cuenta que él jamás me había olvidado ni cambiado por alguna vieja.
Me senté en la banca y como no sabía ponerme los patines, él muy amable lo hizo por mí, cuando levantó la vista me observó directamente a los ojos y sonrió.
-Oye, aferrate a mí mano y no me sueltes ¿Ok? -me dio la primera instrucción, no podía con tanta emoción y solté unas lágrimas traicioneras- ¿Que sucede?
Negué ladeando mí cabeza.
-No, nada. Sólo es la emoción. No quisiera caerme en el hielo y pasar vergüenza. -le digo con una sonrisa leve-
-Tranquila, jamás te soltare. Si te caes, nos caeremos los dos. -menciono y me miró a los ojos, sus palabras no solo sonaban como algo de un instante, por aprovechar la ocasión. También sonaba como una promesa a futuro de querer ir conmigo en serio- ¿Si?
Asentí. Sus manos me sujetaron fuerte y él se metió primero en la pista de hielo. Luego, con mucho cuidado fui yo, primero puse una pierna y luego me quedé quieta para apoyar la segunda.
-Mira... no es difícil. -él patina un poco cerca mío y me rodea, parecía facil- Es como patinar sobre ruedas. Sólo deslizate.
-Ok. -trague grueso e hice caso, empecé a deslizarme con cuidado y sujetada de la mano de Ryro, hasta yo misma me sorprendi- ¡Woooow! ¡Que genial es esto!
Ryan me tomó de mí cintura y yo hice lo mismo. De a poco empezamos a recorrer la pista...
-¿Te acuerdas cuando eras niñas y patinabas? -me pregunta sobre mí infancia, cuando tenía 12 años iba a patinaje en un club-
-Siiii, pero jamás lo hice en una pista sobre hielo. -le dije, porque no era lo mismo patinar con patines en una pista de material que una pista de hielo- gracias por esto... -le agradezco avergonzada y él sonríe arrogante-
De repente se detuvo en la pista y me sujeta de mí cintura fuerte para que no cayera. Me aferró a su pecho sintiendo su corazón palpitar fuerte.
Se queda viendo a mis ojos y yo pérdida en los suyos cómo su tonta, cómo si todo el mundo a nuestro alrededor se detuviera...
-Te amo. -suelta de repente- no quiero que te vayas, enserio.
Sonreí ¿Enserio temía que volviera a Las Vegas con Garrett? Naaambre, ni lo estaba pensando, en verdad con Ryan tan cerca mío ya no razonaba nada.
Sólo sonreí y lo abracé nuevamente, hicimos un giro en el lugar viendo nuestras miradas.
-¿Tienes miedo a que me vaya? -pregunto curiosa, no lo pensaba hacer pero me daba intriga-
Él asiente y acarició su mejilla. Me parecía muy tierno.
-Quiero quedarme contigo, te amo y creo que jamás dejé de sentirlo. -me sentí avergonzada y hundí mí rostro sobre su hombro-
Él levantó mí rostro con mucho cuidado y me beso nuevamente para sellar nuestro comienzo de amor. Correspondi enseguida y cerré mis ojos para profundizar el beso.
Con un poco más de práctica terminamos los últimos minutos patinando tomados de la mano. A su lado sentía que flotaba, era como comenzar una nueva historia de amor de película. Era increíble que hasta me olvidé de todos, solo éramos él y yo.
Cuando salimos de la pista, dejamos los patines y fuimos a nuestra última atracción antes de que se hubiera más tarde: el famoso carrusel.
Era tan hermoso el lugar que dificilmente olvidaría esto. Ryan se subió conmigo, me sostuvo para que alcance a subirme a un cabello y él se quedó parado a mí lado.
-Ryro esto es increíble... -le dije y lo veía sonriente, tan feliz como yo- no puedo creerlo.
-Me alegra verte feliz Mich. Te mereces esto y mucho más. -menciono y no se porque... cada vez que hablaba quería besarlo a cada momento o incluso abrazarlo como un gran oso de felpa- sabes... antes de que terminen las vacaciones de verano planeaba hacer un viaje de descanso a Grecia. ¿Que dices? ¿Vamos? -me propone directamente-
Me quedé congelada. ¿A Grecia? No conocía el lugar pero por fotos ya me lo imaginaba, era muy top con sus playas de arenas blancas y aguas cristalinas.
-¿Pero solos? ¿No van a sospechar que somos...? -no sé porque aún tenía miedo pero si quería cuidarme y ver cómo le diré a mis hijos que estaba en una relación con mí ex novio y el amor de mí vida-
Él se enocogio de hombros.
-¿Que tiene? -pregunta despreocupado-
Negué.
-Aun necesito hablar con mis niños, mis amigos acerca de nuestra relación, no quiero que anden con rumores por la mansión y me traten de put... -Ryan me calla poniendo su dedo índice en mí boca para que no dijera esa palabra desagradable- aparte aún está Borns molestandome...
-¿Que ocurre con él? ¿Te dijo algo? -indaga, su preocupación también era la mia-
-Quiere que volvamos pero ni caso le hago. -le comento en breve, no quería entrar en detalles porque lo estaba manejando muy bien hasta el momento- en cualquier momento perderá la cordura...
-Si, lo único que puede perder. Porque el descaro lo tiene muy presente. -espeto Ryan hasta parecía un poco molesto, para calmarlo le di un besito-
-Tranquilo, ya no me tiene de estúpida. -mencione con una sonrisa- aparte pudo engañarme por años para alejarme de ti pero no consigo nada. Estamos juntos y más fuertes que nunca.
Él me bajó con cuidado del caballo del carrusel y volvió a besarme, ahora un poco más demandante. Me sentía tan pérdida y vulnerable cuando se ponía así, ojalá sea porque este molesto y celoso.
El carrusel se detuvo y todos habian bajado a excepción nuestra. Ryan bajó rápido para decirle algo al señor que supervisaba y volvió de nuevo conmigo con una leve sonrisa. Chisqueo sus dedos y el carrusel empezó a funcionar de nuevo. Me quedé sorprendida.
-¿Qué? ¿Cómo? ¡No es posible! -dije en shock-
Ryan beso a mí mejilla y tomó de mí mano.
-Tranquila. Quiero disfrutar estás últimas vueltas contigo.
La música volvió a sonar con una canción lenta de amor.
-¡Dios mio Ryro! ¡Vas a darme un infarto! -me aferre a su pecho-
-Gracias por confiar nuevamente en mí, te amo y agradezco está nueva oportunidad. -espeta con total sinceramente besando el dorso de mí mano- espero no defraudarte.
Negué, confiaba que esta vez no sería así. Mirando sus orbes no me percate que aquellas vueltas habían terminado. parecía todo un sueño.
Cuando mire la hora en su reloj eran casi las 22 hs. Imagine que Alex y los Weekes estarían en casa sospechando porque no estábamos en casa. Que Ryan desaparezca bueno pero que los dos lo hiciéramos al mismo tiempo sus sospechas serían certezas.
-Ryro... debemos volver... -musito leve y preocupada-
-Tienes razón, me deje llevar jeje -el baja primero y sostiene mí mano como una dama y con mucho cuidado bajo de aquel carrusel quedando atrapada en sus brazos- Oh, cuidado mí vida... no quisiera que tropezaras.
El señor que supervisaba el carrusel se nos acercó con una leve sonrisa.
-Ustedes hacen una bonita pareja. Hace mucho no veía a una pareja llena de tanto amor. El señor todo un cabellero y la dama muy preciosa. -el nos halagaba y ambos nos pusimos avergonzados, Ryan sujetó mí mano y la entrelazo a la suya como si en verdad fuéramos una pareja, no lo había notado hasta el momento-
-Gracias señor por su amabilidad -dijo mí Ryro y quiso sacar su billetera para darle algo extra al señor pero este no aceptó-
-No te preocupes. -sonrio aquel señor y rechazo su dinero- con solo verlos me dieron ganas de ser joven y volver a sentirme así de enamorado. Que lo disfruten.
Asentimos los dos mientras aquel señor se despedía y alejaba a hacer dos cosas antes de cerrar la atracción. Quedé sonrojada por todo lo dicho. En verdad no me había dado cuenta pero necesitaba sentirme así, de querida y valorada.
Con Ryro volvimos caminando de la mano hacia el estacionamiento y nos subimos a su auto con destino de regreso a casa.
-esto fue maravilloso, no sé cómo te lo voy a agradecer. -pongo mis ojitos de borrego, solo quería que me pidiera algo a cambio para sentirme satisfecha-
-¿Dejando ya mismo a Borns? -me observó seriamente-
Abrí mis ojos. ¿Enserio me lo pedía? Luego de un momento de silencio se echa a reír.
-Era broma amor jaja
Hice una mueca de lado, a veces cuando hablaba serio me lo creía.
-uhm casi caigo y estaba por hacerlo... -le dije, en realidad lo pensaba y como ya no éramos pareja y tenía a Leah conmigo solo me faltaba deshacerme de él-
-¿De qué? -me pregunta Ryan haciéndose el desentendido-
-de correrlo. -pongo los ojos en blanco, creo que él no sabía lo insoportable que era Borns- Es un chingo y me molesta cuando estoy en la habitación, no puedo relajarme tranquila.
-Si quieres puedo darte una habitación nueva así no tienes porque soportarlo. -me propone como idea y no estaba mal, pero tampoco deseaba verlo caminar por los pasillos y que respire mí oxígeno-
-Si, pero necesito a Leah conmigo. -le digo, jamás dejaría a mí niña cerca de él- Ni loca dejo a mí niña dormir con él, a ver si le hace algo.
-¿Tu crees? -Ryan no sabía lo que era capaz de hacer ese tipo cuando se enojaba, si antes se ponía agresivo conmigo con Leah sería peor, más porque es una niña inocente y vulnerable-
-ya no se ni de que es capaz de hacer. -le digo mí temor, que se meta conmigo todo bien pero que no toque a ninguno de mis hijos- O sea, cada día se supera más.
Ryan conducía lo más tranquilo y sereno. Su auto era muy particular y tenía un olor agradable.
-Antes de regresar a casa ¿No quieres comer algo?
Casi brinco como una adolescente emocionada y lo abrazó por su cuello.
-Siiii pero... -me vuelvo a mí lugar desmotivada- no tenemos tiempo para ir a comer a un restaurante, perderíamos mucho tiempo.
Ryan para tranquilizarme agarra mí muslo y pone una leve sonrisa.
-vamos a un AutoMac Mich, ni te preocupes que ni siquiera tendríamos que bajar del auto.
Me quedé asombrada. ¿Comeríamos alguna comida chatarra arriba del coche? Se que no sonaba una idea top para una dama inglesa pero él tenía esos gustos fascinantes por esas comidas que yo también amaba.
-¿Enserio? Eso suena muy cochino pero amo. -menciono muy de acuerdo con su propuesta- Amo esa idea.
Condujo hasta un McDonald's y pasamos a pedir hamburguesas por el automac, dos combos de triple hamburguesa con papas, aderezos y gaseosas. Estacionó cerca del famoso reloj Big Ben y comimos allí un buen rato hasta llenar y saciar nuestros estómagos.
-mmm... estuvo delicioso. -digo satisfecha y desabrocho mí camisa un poco-
Ryan me observó ligeramente y tocó de nuevo mí muslo. Las venas de sus brazos estaban bien marcadas y él no sabía pero amaba harto.
Me quedé en silencio pérdida en ver su brazo y él mirando mis piernas, seguramente le gustó mis medias finas caladas. Sin querer empecé con mí tacto a tocar su piel, despacio y suave. Luego mire sus ojos, estaba pérdida en ellos.
-Mich... -musito leve- debemos volver...
Estaba por encender el carro pero no lo deje, no quería volver y me dejara con las ganas de comerme el postre.
-Ryro espera...
Rápido se levantó y me subo arriba suyo, quedando arriba de su regaso y abrazada a su hombro.
-Es que... yo no... quería que pienses mal... por eso. -no se porque tartamudeaba si ya nos conocíamos hace años, sé que moría por hacerme suya a dónde fuera que sea- quería que está vez sea una cita genuina y sin sex...
-¿Y que tiene de malo hacerlo? ¿Lo haces para ser más caballero conmigo? -trato de indagar y lo miró fijo a los ojos- pero la otra vez ya me desvonociste dos veces y no me importó...
-Disculpame enserio, no quería... -negaba, no quería que se arrepintiera ahora de nuestras dos revolcadas porque yo lo disfrute mucho y lo deseaba harto-
-¡Ay! no te hagas ahora... ya está y lo ame mucho. -le digo mí postura y la verdad no me importaba- pero eso si, usa condón porque sino puedo quedar de nuevo...
Ryan mira de lado y suspira, luego hunde su cabeza en mí hombro como que escondía algo con respecto a eso y me dio miedo.
-No te preocupes por eso, nunca vas a quedar. -confiesa y me quedé en shock-
-¿Qué? ¿Porque? -me sorprendí y casi se me baja la presión-
Su silencio me daba miedo pero creo que no tenía de otra...
-Hace algunos años me sometí a una vasectomía y por lo tanto no podré tener más hijos, lo siento mucho. -ahora si lo veía un desánimado y arrepentido-
-¿Que? ¿Pero porque hiciste eso? -inquiero saber rápido- ¿Y tu familia lo sabe?
Él asintió.
-Benjamin fue quien me recomendó a su doctor, él también lo hizo. -confeso y me dejó atónita. De Benjamín podía creerlo pensando que tuvo algún enojo por la pérdida de su esposa ¿pero Ryan?-
-no lo puedo creer. Aunque me lo expliquen no lograré entender. -negue y no me hacía la idea-
Sostuve su rostro con mis manos y veo sus ojitos, estaba un poco triste y me daba lástima verlo así.
-Es que... después de llegar a Londres me deprimí al ver que no ibas a volver conmigo por más explicaciones que te haya dado y de simple enojo lo hice. -contesto mí Ryro y podía notar que tenía razón, seguramente ahora pensaba que yo quería tener más niños suyos o él también quería- Fue una tontería...
-Bueno, no es que quisiera traer más Alex al mundo pero no importa, enserio amor -le digo con una sonrisa y lo abrazó para no preocuparlo- con razón no estabas preocupado por nuestros encuentros sexuales jeje me hubieras avisado de príncipio.
-No sabía cómo te iba a caer la idea, pensé que en algún momento quisieras tener más hijos...
-Con mis niños soy feliz no te preocupes... -le contestó a sus dudas, y en estos momentos no estaba en mis planes embarazarme aunque fuera una mujer joven- ¿Que otra alternativa hay?
-Bueno, también pueden usar mí esperma y juntarlo a tu óvulo para embarazarte artificialmente. -me dice y enarco una ceja- Hasta puedes elegir como quieres que salga tu bebé, color de ojos, pelo, piel. Lo elijes desde la computadora.
-Naaambre ¿Enserio? -casi no caigo en lo que me decía, la ciencia había avanzado demasiado que no me di cuenta-
-Si, así lo hizo Brendon con Pau. -me contó un ejemplo y casi me ahogo de risa al escuchar aquello-
-Jajjaja ¡Ay no! -no estaba soportando, esperaba que fuera otra broma suya pero no fue así, el estaba serio- No me digas que...
-Si, Brendon embarazó artificialmente a Paulina. -menciono y como no era su pedo no quería revelar en detalles- Bueno, eso sucedió.
-tan puto no puede ser...-porque pensaba que por lo menos había dejado de serlo pero esto lo confirmaba aún más, no fue ni capaz de meter su cosa adentro de esa mujer para dejar su semilla- bueno, de Brendejo nada podría sorprenderme pero no... -negue con una sonrisa- mejor nos quedamos así, con Alex y Leah estoy bien.
-Gracias por comprender. -volvio a mirarme con sus ojitos tierno y estaba por hacerme a un lado para que me regrese a mí lugar y deje de estar arriba suyo-
-naaambre y piensas que te ibas a librar de darme el postre. -me indigne, no me subí arriba suyo para no obtener nada- ¡Ahora me lo das! -le ordenó y me aferró más a su hombro-
Ryan cerró sus ojos llevando un suspiro, acorralado entre mis brazos lo besé intensamente, estaba desesperada que ardía y lo necesitaba ahora mismo. No me importó nada que empecé a desvestirme delante de sus ojos, sentí su bulto crecer por debajo de mí trasero, empecé a moverme para motivarlo y que se prenda. Él sostuvo fuerte mí cintura y luego empezó a besar mí cuello. Solté un gemido, ya no estabamos razonando nada.
-Continuará-
Holis, nuevo Cap 1/2 😅 espero que les haya gustado, esperen el próximo. Gracias ☺️
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top