"Loca Navidad"
Narra Narrador:
Michelle, Alex y Garrett habían pasado el año nuevo en familia e invitaron a Harry y su pareja.
Luego de una semana llegaron las fotos que habían mandado a revelar para guardar en el álbum de fotografías familiares.
Michelle sintió tontamente, tenía muchas fotos y sentía nostalgia por cierto castaño adulto, con quién había pasado las fiestas de navidad en esa misma casa.
Semanas atrás....
Michelle, quien estaba harta, se tomaba de sus cabellos y hundía su cabeza en sus brazos.
La cocina era un caos, pero más su mente, al escuchar cierta voz chillona.
-Mami... -Alex jala de su brazo para llamar su atención- Papá dice que le alcances galletas a los invitados.
Ella suspira y señala tal lugar.
-Toma el tarro y dáselo
Michelle estaba encerrada en la cocina, harta de escuchar a Keltie. Peor, en su mente debía meditar para tratar de calmarse.
-¿Vas a salir a atender a los invitados? ¿O lo tengo que hacer yo? -llega Garrett y espeta serio, ella levanta la mirada y frunce su ceño-
-te recuerdo que fue tu idea, tú la invitaste -lo señala y escupe la mujer-
Flashback.
-¿Ahora como desinvito a Ryan y Keltie? Ve pensando en algo -manifiesta su desacuerdo Michelle contra Garrett, quien veía una película tranquilo-
Garrett la observa y ella estaba parada caminando de un lado a otro nerviosa.
-¿No puedes sentarte un rato a mí lado y relajarte?
-Tu empezaste esto e invitaste a esa ridícula -mascullo la chica y no le hizo caso-
Garrett suspiró.
-Ella no te hizo nada, no entiendo tu enojo -le sigue el comentario a la contraria-
-no tiene que hacerme algo para que la odie. Tú odias a Ryan y no te digo nada -contesta molesta-
-yo no lo odio ¿Quien te dijo eso? -aprovenchando que ella caminaba de un lado a otro sujeta su brazo y la inca al sofa para que caiga sentada a su lado-
-Ash esto no se va a quedar así -siguio protestando, y tomo su celular para hacer una llamada- Holis amiguis
-Hola Mich ¿Cómo estás? -escucha la voz de Ángeles-
-Si, bien. Acá peleando con Garrett cómo siempre -dice en broma, Garrett suelta un bufido- quería proponerte algo...
-Si dime -le contesta con precaución-
-Queremos invitarlos para la cena de Navidad. Obvio, a ti, tu esposo y tu bebé. Estará chida la cena. Tenía pensado hacer pavo al horno, preparar harto pasteles y budines, ensaladas y comprar algo de champagne para los mayores ¿Que dices?
Ángeles dudaba a lo que no le respondió segura.
-Si, no sé Mich. Spencer nos invitó también a pasar con él y Z. -Garrett observó de reojo al escuchar el nombre de su ex- pero no confirmamos nada.
-que se chingue el chusma de Spens y la vieja esa -rio Michelle un poco ansiosa y siguió insistiendo- vamos amiguis, yo siempre estuve contigo así que cuento contigo para esta ocasión...
-Si, pero...
-Mañana arreglamos, no me falles, bye bye. -le manda un beso y corta antes de escuchar un NO-
Garrett le saca el teléfono y lo deja en la mesa.
-ves, tu también invitas y sin mí permiso.
-no necesito tu permiso, Angy es mí amiga del alma y Keltie no es nada tuyo. -le saca la lengua- aparte yo cocino y limpio y merezco invitar a quien se me da la gana.
Garrett la sostiene del cuello a lo que ella se sonroja y le da un beso en su cabeza.
-mi celosita, vamos a ver está peli.
Ella se aparta y esconde su sonrojo.
-no soy tu celosita -infla sus mejillas-
Michelle se apega al cuerpo de Garrett y a pesar de tenerlo al lado y sentir su aroma. Podía verlo sereno y tranquilo viendo una película a su lado pero nada se comparaba con Ryan. Cuando pensaba en aquel castaño su corazón latía como loca.
Fin del Flashback
-pareces una nena -suelta Garrett y se lleva para el living el tarro de galletas-
Michelle se queda con la bronca en su garganta esperando ansiosa que su amiga Ángeles llegue a salvar la noche de navidad. Cuando de repente irrumpe cierta rubia en la cocina...
-¡Holis! ¡Holis! -anuncia su llegada para saludar a la susodicha- ¡Wooow Michelle! ¡Que diosa que estás! ¡Estás divina como siempre! -alaga la Cullen y se acerca para darle un beso en su mejilla-
Michelle intenta correr su rostro sin éxito y solo hace una mueca de lado al ver qué Keltie trajo un pastel.
-¿Y eso que es? -le cambia de tema observando lo que traía consigo-
-mira... -lo saco de su envoltorio- es un pastel de chocolate, lo hice yo misma.
-entonces ¿es un bodrio? -enarca una ceja y toma aquella caja apartandola hacia un costado-
La Cullen ríe...
-que graciosa eres -se apega a su hombro y le da una palmada-
-no te hubieras molestado, he preparado budines y pastelitos... -menciona restándole importancia-
-Si, pero es el preferido de Ryan. -cuando lo menciono, el castaño entro a la habitación tímido y saludo con su mano a la distancia-
Ella notó que Ryan tenía una galleta en mano...
-¿Y esa galleta amorcito? -indaga curiosa la rubia-
Ryan señala al living.
-Garrett está ofreciendo, bueno, ahora está con Alex recibiendo a las otras visitas...
-¿Otras visitas? -alza la ceja Keltie-
Michelle suspira e internamente sonríe, seguramente su amiga había llegado para salvarla.
-invitamos a Angy y Dallon...
Keltie se quedó boquiabierta y salió disparada a recibirlos, dejándolos a solas.
Michelle sonríe perversamente y se acerca a Ryan, está da un paso atrás y sin querer cierra la puerta. Se acerca y se aproxima a su oído para susurrar lo siguiente...
-no me gusta que esa zorra te diga "amorcito". Que te quede claro, yo soy tu amorcito. ¿Entendiste?
Ryan asiente y traga en grueso.
-Si amorcito -cierra los ojos, Michelle sonríe victoriosa-
Ella toma su mejilla y acaricia su piel, lo mira fijo a los ojos. Ambos se pierden en los orbes del otro, embobados.
Ryan intenta modular alguna palabra pero su corazón latía fuerte contra su pecho, era mucha adrenalina.
-Mich...
Ella lo calla poniendo su dedo en sus labios para que no hable.
-Shhh... -de a poco se acerca y lo abraza, dejando su rostro sonrojado sobre su hombro, Ryan sin más remedio le corresponde y acaricia su cabello- te extrañe...
-yo más... -fue lo único que pudo decirle-
No necesitaban hablar para entenderse, su corazón hablaba por ellos.
-¡Mich! -escuchan una voz familiar y se separan, ambos con el corazón exaltado y tomando una distancia prudente- ¡Oh! ¡Ahí estab... -la chica entra a la cocina y se sorprende al ver a ambos sonrojados- ¡Ryan! ¡Hace mucho no te veía! ¿Cómo estás?
¡Angy! -Ryan se sorprendió y se alegro que hubiera sido ella quien interrumpió y no, otra persona-
Ryan fue directamente a abrazarla y Michelle miró hacia otro lado, celosa un poco de aquella amistad.
-bueno, ya. Aquí me tienes Angy -dijo para romper el momento y se puso entre ellos- ¿Y tu bebé?
Ángeles sonrió y dio a entender que el bebé estaba con Dallon.
-mi bebé está con mí amor... no saben lo adorable que es Dallon cómo papá... se los voy a presentar -ella quería dejar a solas a los chicos y luego agregó- no sé descuiden... yo cualquier cosa no diré nada.
Ángeles los había dejado en evidencia. Michelle inflo sus mejillas mientras que Ryan reía nerviosamente.
-¿De que te ríes?
-me encanta cuando te pones celosa, no se -dijo como si fuese una confesión-
Ella no quiso mirarlo.
-no lo hagas a propósito porque soy peor -le advirtió la chica-
-ya lo sé... mí celosita -dijo el castaño en modo divertido y la tomo de sus mejillas para darle un beso en sus labios- pero te amo tal cual eres.
Michelle se le subió el calor al rostro y Ryan se fue dejándola soñando con ese beso fugaz.
Rápida se fue a lavar su rostro así bajaba algo de temperatura.
-es un maldito -murmuro en voz baja-
....
-¡Ay que hermosho bebé! -menciona con alegría Keltie tocando la manita del pequeño Knox- es igual de encantador que su papi
Dallon sonreía nervioso hasta que llegó Garrett y Alex para su salvación.
-tuvieron un largo viaje ¿Quieren algo de tomar? -pregunto el Børns dueño del hogar-
-Si, un poco de agua. -contesto Dallon-
Alex se apegó al niño y sonreía.
-dentro de poco tendré un hermanito como Knox para jugar con él. -dice entusiasmado el pequeño Alex observando al bebé-
-Knox es un bebé, cuando crezca tu seras un adolescente. -comenta Keltie y se sienta a su lado para abrazarlo- Ryan y yo también tendremos uno y será nuestro retoño.
Ángeles regresa y se sienta al lado de su esposo, acaricia la piel de su bebé que dormía plácidamente.
-no sé cómo puede dormir tan tranquilo, esto lo heredó de ti cariño -menciona Ángeles con una sonrisa-
-Si, y agrégandole tu encanto. -decia el Weekes, diciéndole un halago y haciéndola sonrojar-
Ángeles se quedó muda ante sus palabras y se cubrió el rostro, justamente llegaba Michelle y abrió sus ojos para ver tal escena.
-amiga... tantos años ¿y te pones así sonrojada? -sonrio de medio lado- aún no cambias...
Ella negó y hundió su rostro en el hombro de su esposo que estaba a su lado.
Michelle le pidió amablemente a Dallon el bebé para alzarlo entre sus manos...
-ven con la tía pequeño Knox...
Alex sonrió emoción y se acercó a su mamá...
-¿Puedo alzarlo yo también? -insistio el niño Børns-
Ella negó con una sonrisa.
-no, tú eres muy pequeño. -mientras lo cargaba a su pecho- es tan bonito, me hace recordar cuando Alex era un bebé...
-pero a mí no me cargas nunca mamá... -inflo sus mejillas un poco celoso-
Alex observó hacia otro lado y justo su mirada enfocó hacia donde estaba Ryan en un rincón.
Fue corriendo hacia él
-¡¿Ryan podrias alzarme?! -pregunto y lo miro con sus ojitos de cachorro- ¡Por fis!
Ryan se quedó anonadados y el resto también. Él trago grueso pero desistió fácilmente, Alex tenía algo que lograba convencerlo. Se encogió y se agachó al suelo para que el niño subiera a su espalda y así se trepó quedando más alto que los demás.
-¡Mira mami! ¡Mírame!
Ella volteo y se quedó impactada, viendo cómo padre e hijo se parecían. No podía hablar...
-¿Que pasa Mich? -inquiere saber el Ross al ver qué Michelle no reaccionaba, solo mecía al bebé entre sus brazos-
Garrett irrumpe trayendo bebida y ver tal escena le desagradó.
-¿Alex que haces? Bajate ya. -lo reto y lo miró de mala manera-
-Papá no estaba haciendo nada malo -se justifica y se baja cuando Ryan se vuelve a agachar-
-no molestes a mis invitados.
-esta bien papá, lo siento -dice el niño desanimado y se sienta al lado de Keltie-
-no lo retes, él me lo pidió amablemente. -contesto el Ross en desacuerdo con la orden de Garrett-
-no importa.
Garrett le importo poco la opinión de Ryan, así que prosiguió en servir bebida para el resto de los invitados.
-Cariño ¿empezaste a cocinar? -le pregunta mientras toma asiento en el sofa-
Michelle abrió sus ojos y vio la hora en el reloj de la pared.
-¡Es cierto! ¡Ya debería haber empezado! -le alcanza el bebé a Angy y se lo entrega en sus manos- ¡Con permiso!
Dejando al resto, Ángeles se puso un poco incómoda y fue detrás de su amiga con el bebé y el coche.
Ryan se sentó más relajado en el lugar de Ángeles, el cual había desocupado.
-Amorcito voy con las chicas, así ayudo un poco en la cocina... -anuncia Keltie y le da un beso en su mejilla para ir con las mujeres-
Dallon observó un poco el lugar y le pareció pintoresco.
-esta quedando bueno el lugar. ¿Tú lo arreglaste Garrett? -saca el tema el Weekes-
-Si, mí hermano me está ayudando un poco... pero no lo quiero molestar mucho.
-tu hermano es ese chico... -musitaba Ryan recordando a Harry- no sabía que tenías un hermano...
-Claro, es que ambos fuimos a distintos colegios. -dijo el Børns estirando sus piernas-
-a comparación de la otra vivienda, está es mucho más hogareña, no es tan grande y no se siente vacía. -decia Dallon- nosotros también pensamos en comprar una casa, no quiero que Knox crezca en un departamento...
-Y tú Ryan ¿pensaran en comprar una casa? -indaga el Børns mayor al castaño, poniéndolo incómodo-
-dudo que pueda, no tengo un sueldo de médico. Apenas me alcanza para pagar la renta del departamento en el cual estamos viviendo.
-si piensan en tener muchos hijos necesitas un patio grande... -dice Garrett con una sonrisa- Keltie sería muy feliz...
Ryan observaba a Alex, que estaba a su lado un poco triste y lo abrazo, acariciando su pelo.
-Oye Alex... ¿No quieres jugar a los videojuegos un ratito? -le propuso para salir de la conversación enroscadora de Garrett-
-pero están platicando cosas de adultos... -dijo en voz baja- a Papá no le gusta que lo interrumpa...
-¡Vamos! -insiste y se lo lleva, cargándolo en sus brazos-
-¡Ryan! ¡No, espera! ¡Yo puedo sólo! -exclama el niño sonrojado, se aferra de los brazos del castaño para no caerse-
-Hace un momento querías que te cargue en brazos, ¡ahora vamos! -Ryan se lo lleva a su habitación para ir a jugar un rato a los juegos mientras las mujeres cocinaban la ceja-
Garrett suspiró, justamente quería pincharlo al castaño con preguntas y confundirlo pero este se le escapó.
-si necesitas ayuda con algo del hogar te puedo dar una mano... -ofrecio Dallon su ayuda-
Garrett asintió pero su mirada estaba puesta en Ryan y su cercanía hacia su hijo. Era algo que no podía impedir.
Cuando llegaron a la habitación Ryan exploró su nueva habitación, era un poco más pequeña que la anterior pero le gustaba aquellas fotografías familiares y siempre sonriente.
Cuando volteo el niño estaba callado y en la cama sentado, un poco pensativo.
-¿Estás triste porque te regañaron? -inquiere saber el Ross y se sienta a su lado, Alex suspira pero no le dice nada- sabes, cuando tenía tu edad mí papá también me regañaba, era muy extracto.
-Ultimamente papá vive de mal humor, pero casi siempre discute con mamá y no me gusta.... -musita leve-
-pero a pesar de eso, ellos te adoran Alex. Cada regaño es un aprendizaje. -solto el castaño mayor- yo lo entendí tarde...
-¿Y tú papá Ryan? ¿Cómo es? -pregunta un poco curioso y lo observa-
-bueno, él ya no está vivo, falleció hace bastante años... -menciona y mira el cielo raso-
-lo siento. -Alex lo abraza empatizando con el Ross-
-ahora que eres chico, trata de disfrutar a tu papá y no tengas vergüenza de decir lo que sientas o que cosas quieres hacer con él... Cuando seas adultos tendrás otras prioridades.
Alex asiente y se siente un poco mejor de ánimo, de repente entra a la habitación la perrita Dottie y se sube a la cama para estar en los brazos del niño.
-Oh pequeñita... -Alex la abraza con mucho cariño y se deja lamer la mejilla-
-es muy cariñosa... -la admira el castaño y acaricia su pelaje-
-Si... Gracias por regalarme a Dottie. Es una fiel amiga, nunca me deja sólo. -dice el niño abrazando a su compañera, luego comenzó por acariciarle su pelaje a lo largo de su lomo- señor Ryan... ¿Y cómo era su padre? ¿Era bueno o malo? -insistio en saber curiosamente el pequeño-
La pregunta repentina descolocó al castaño y se puso un poco pensativo recordando a su padre George Ryan Ross II. Ryan sonrió de medio lado y revolvió los cabellos del niño...
-mi padre era muy estricto, tenía que obedecer en todo. Era muy difícil complacerlo. Pero jamás pude decirle lo orgulloso que me sentía de ser su hijo, tampoco pude despedirme de él... -musita el Ross un poco dolido por dentro, no quiso demostrar su debilidad y llorar frente a Alex, se conmovía con la nostalgia, no hablaba mucho respecto a su padre porque sentía esa espina clavada en su pecho- no sé cómo se sentía él con respecto a mí...
Alex lo observó por un momento y recordó lo amable y bondadosa persona que era el señor Ryan, se sentía cómodo y seguro a su lado.
-yo creo que él también está orgulloso. Usted es muy buena persona... -suelta Alex sorprendiendo al castaño dejando boquiabierto- mí mamá lo quiere, Dottie... y yo también lo quiero -le llega a sonreir-
Ryan limpió algunas pequeñas lágrimas traicioneras que salían de sus ojos, se sentía conmovido por sus palabras y fueron tan sinceras.
-no puedo creer que seas un niño y me hables como un adulto... -dice Ryan y se sienta a su lado- yo también te quiero mucho... Eres como un hijo para mí Alex...
Alex sonrió y se dejó abrazar por el castaño.
-¿No quieres conocer a mí mamá? -indaga el Ross, a lo que el niño asiente entusiasmado pero luego recuerda las reglas de su madre y borra esa sonrisa- ¿Que pasa? ¿No quieres?
-no es eso... Mí mamá... -se justifica en poca palabras y ambos sabían a qué se refería con "mí mamá"-
-ya lo sé. No querrá. Pero déjame buscar la manera que ella acepte sin que te reproche ¿Si? -le promete Ryan al niño y este asiente-
De repente golpearon la puerta y Michelle irrumpió con una bandeja con todo tipo de galletas, masitas dulces y porciones de pasteles.
-hasta que termine de cocinar la cena, pueden probar estos bocados.
-Mamá yo puedo i... -dijo apenas unas palabras el niño, rápidamente y con unos buenos reflejos el castaño le tapo la boca con su mano-
-...si podemos jugar a la Playstation? -completo la oración, Michelle encarco una ceja y entro a la habitación para dejar la bandeja sobre el escritorio-
-pense que ya estaban con eso... -noto que ambos tenían un joystick cerca y la televisión prendida, un juego que estaba en pausa y ellos sentados sobre la cama-
-Si, pero no te pedimos permiso. -contesto rápido y ella niega sonriente-
-que tontitos son, no hace falta que me consulten todo, Alex ya sabes... -mira a su hijo y el no dice nada, solo asiente-
-¿Falta mucho para cenar? -pregunta el niño- tengo hambre.
-y si, cuesta poner un pavo al horno. Preparar la mesa y esas cosas. Pero no sé preocupen que Angy y la ñora me están ayudando. -dice Michelle y echa por última vez un vistazo a Ryan antes de irse de la habitación-
Alex se quedó impaciente, justamente quería preguntarle a su madre con respecto de visitar a la madre de Ryan.
-Señor... Porque...
-dejame que yo se lo diga, tengo que buscar las palabras justas. Si la sorprendes de esa manera ya sabrás su respuesta.
Alex agachó la mirada y junto sus dedos.
-Conoces bien a mamá, incluso más que yo... -suelta el niño, haciendo que Ryan se atragante con su propia saliva-
-cof cof cof -intento aclarar su garganta, no quiso recordar en detalles, ya sentía un leve rubor- mí amigo Spencer, Angy y tu mamá éramos los mejores amigos. Siempre juntos, hasta el momento.
-vi fotos de mamá con Angy pero tuyas y otra persona que no sea papá no... Que raro... -decia el niño en voz baja y pensativo, no recordaba que su madre le platique de un tal "Spencer" y menos mencioné a un tal "Ryan" en su pasado-
-ya sabes cómo es tu mamá... -dijo Ryan cambiándole de tema- ¿Quieres? -le acercó la bandeja y le invito a probar unos pastelitos salados-
Alex asiente y prueba uno de aquellos bocadillos.
-mmm... Delicioso. -dice el niño satisfecho probando un pastelito de membrillo hecho por su madre-
Ryan también degustó uno.
-es verdad, tiene un don para la cocina.
Alex tomo el joystick y suspiró, en su mente se cruzaron algunas ideas alocadas y sonrió. A lo que Ryan no dejo de pasar desapercibido.
-¿De que te ríes? ¿Puedo saber? -indaga el mayor y sonrie-
Alex se acomoda y a la vez se sonroja por la idea, dudaba si contarle pero veía que Ryan era digno de su confianza.
-parece tonta la idea... pero me hubiera agradado que tú hubieras sido mí padre.... -solto de repente, Ryan no sabía que decir y casi se atraganta con las migas del pastelito que pasaba por su garganta- es que tú me tratas mejor que mí padre... -luego agacha la mirada al suelo y avergonzado- pero eso es imposible...
-¿No quieres a tu papá? -se atreve a preguntarle el castaño viendo que el niño dudaba de su cariño a su padre-
-Papá se comporta extraño, ya no me quiere como antes. No juega conmigo y no me presta atención. -dice en voz baja, decirlo le dolía pero quería afrontar lo que pensaba y contarle a alguien-
-debe ser porque está estresado. Dale tiempo. Él te ama, de eso no hay duda pequeño -le confío el Ross con total seguridad-
Alex lo abrazó por su cintura y él le correspondió. Algunas lágrimas salieron de los ojos de Ryan al sentir el dolor de su hijo, no podía decirle la verdad... que él era su padre y debía mantener el secreto hasta que él fuera un adulto y sea consciente de ello. Decirle la verdad a estas instancias le dolería y podría crear una brecha entre Garrett y el niño.
Mientras tanto en la cocina...
-Keltie eso no va ahí. -dice Michelle mientras batía con el batidor de mano- se guarda allá.
-esta tan ordenado aquí que me pierdo. ¿Donde lo dejo? -le vuelve a preguntar la rubia-
Michelle señala con su dedo índice y suspira.
-amiga querías ayuda pero tú quieres hacer todo sola jeje -sonrie Ángeles mientras prepara una ensalada rusa-
-basicamente mí vida le hice independientemente. Sin la ayuda de mis padres y Garrett no estaba en casa, siempre estaba en esa odiosa oficina. -batia con más fuerza- puedo con todo, no se preocupen. Si se quieren relajar con los chicos...
Keltie viendo que Michelle preparaba una crema y Angy una ensalada. Se sentía una inútil sin poder ayudar.
-¿Puedo ayudar en algo? Puedo serles útil.
-Si, prepara la limonada y ofrecele a los reyes de la casa. -le ordena Michelle para quitársela de encima un rato-
-¿Que reyes? -pregunta algo pérdida-
-le dice a nuestros hombres, que están en la sala seguramente hambrientos. -le contesta Angy amigablemente, ya que Michelle estaba más callada y harta de la señora-
-¡Ay si! ¡Ya voy! -se dirige a la nevera y saca el jugo listo, se lleva una jarra y vasos de vidrio para servir en la sala- no me tardo chicas... enseguida chusmeamos un rato.
Cuando se fue y cerró la puerta Michelle empezó a batir más rápido con el batidor.
-amiga vas a pasarte y echarás a perder la crema batida. -dice Ángeles algo preocupada-
-¡maldito Garrett, lo odio! -mascullo- El no se tiene que aguantar a esa anciana chingona Ash.
Ángeles comprendía su enojo.
-hubiera preferido que venga a visitarnos Spens y Z Berga o no sé... El puto de tu ex. -ya no sabía que decir y dejo de batir cuando se dio cuenta y probó la crema. Se había cortado y se echó a perder-
Ángeles saco su móvil y cuando ella lo notó la detuvo.
-Estoy siendo sarcástica. No llames a nadie. -le tendió la mano y la detuvo- ya bastante tengo aquí.
-Pense que querías...
Michelle suspiro y busco en la nevera un pote de crema nuevo para preparar.
La preparó sin problemas mientras Angy la observaba en silencio.
-¿A quien ibas a llamar? -pregunto curiosa la azabache a su amiga-
Ángeles se puso pensativa hasta que recordó.
- a Spens y Z Berg. ¿Por? Pensé que querías que vengan a pasar con nosotros la navidad.
-Si, lo hubiera hecho con anticipación para que Garrett se moleste. -sonrio de medio lado con malicia- Pero no llegaba con el presupuesto de la cena, Spens come mucho.
-¿Te llevarías bien con Z Berg sabiendo que fue Ex de Garrett? -indaga la chica-
-creo que no, pero si es para devolverle el favor. Lo haría solo para vengarme. -contesta la azabache y prueba la crema con satisfacción-
-no te veo siendo amix de Z. Hasta yo dudaría jaja -rie por lo bajo-
-¿Y tú no serías amix de Sarah, la ex de tu ex? -le cambia de tema- al fin y al cabo ya no estás con el puto.
-¡ay no le digas así, pobre! Me dio lástima... -dijo avergonzada Angy- contestando a tu pregunta: no. No sería amiga de Sarah, es muy falsa y superficial. No me va su personalidad. Y tampoco con la ex de Dallon o con la única chica con la que salió, es una loca pérdida.
-esa Jess... nunca hablamos de ella. ¿Y cómo era? -pregunta Michelle viendo que su amiga estaba más suelta de palabra ahora que Keltie no estaba-
-una zorra. -concluyo Ángeles y se sirvió un poco de café-
-¿Nada más? -le insiste-
Ángeles hizo una mueca de medio lado.
-una zorra que quería colgarse de mí amor... él como es una persona maravillosa, amorosa y buen compañero se le quería tirar. Pinche loca arrastrada.
Michelle adornaba el pastel y reía por ver a su amiga celosa.
-y tú que siempre me decías que querías saber cómo eran las clases de mujeres que a Dallon le gustaba.
-no quiero saber. Es mío y punto -le muestra su anillo- se terminó la historia.
-bueno, él es feliz contigo, eso es suficiente. -le comenta al final poniendo una sonrisa- ojalá tuviera a mí chico de ensueños a mí lado.
-¿No lo tienes?... Garrett... -le pregunta en voz baja-
Ella niega.
-Ryan... es el amor de mí vida, siempre lo fue. Aunque pasen miles de años lo volvería a elegir. -confiesa con un leve sonrojo- me da coraje que esa señora lo disfrute más que yo... yo soy la que debería estar cocinandole una rica pizza que no esté quemada y sea la madre de todos sus hijos...
Ángeles hace una señal para que baje el tono, por si alguien entra.
-Lo amo con todo mí alma. Que se vaya a la verga Garrett. -dijo sin filtros- me tiene harta.
Ángeles no quería meterse mucho en ese terreno pero le parecía extraño que de la nada deteste a Garrett, después de tanto que lucharon juntos para salir adelante.
-Pense que querías un poco a Garrett... Después de todo él te eligió a ti. -dijo Angy en voz baja casi audible para su amiga-
Michelle negaba con su cabeza aún no se daba la dimensión en donde estaba parada y la locura que atravesaba.
-Yo solita me metí en este lío, por no decirle a Ryan la verdad a tiempo... Me caye tantos años. Es mí culpa. -agachaba la cabeza- y Garrett no me eligió a mí, está por compromiso, porque es su deber. Ni siquiera me ama. -apretaba su puño-
-¿Cómo sabes que no te ama? -le pregunto Ángeles un poco sorprendida-
-se lo escuché decir una vez cuando hablaba con el puto de tu ex por teléfono, obvio se fue a hablar a otra habitación en la madrugada y yo de chusma... Siempre lo llamaba para ir a fiestas sabiendo que estaba conmigo cuidando de Alex bebé. -relato en breve recordando el momento- fue muy triste escucharle decir eso pero no podía decir nada, solo callarme porque Ryan tampoco estaba.
-que mañoso el menso de Brendon... -dijo imaginando la escena-
De pronto la puerta se abre y aparece el susodicho.
-escuche mí nombre de casualidad. -dijo el castaño algo tímido entrando a la cocina y con bandeja vacía- gracias por esto, estuvo delicioso.
-¿Ahora se te contagio lo chusma de Spencer o de Brendon? -arquea la ceja la azabache y haciendo una mueca de lado- hubieras golpeado la puerta.
-Lo siento... -Ryan sentía rara la expresión de Michelle y su manera de hablarle, estaba molesta evidentemente, solo dejo lo que había traído y se estaba por volver a la sala junto a los demás-
Ángeles le hizo una seña a Michelle para animarla y le hablara mejor al castaño.
-Oye Ry... ¿Y Alex? -pregunta Angy cambiando de tema-
Ryan voltea inocentemente.
-se durmió. Pobre, estaba cansado. -espeto seriamente-
-es temprano, iré a arroparlo -dice Angy poniendo una excusa para dejar a esos dos a solas y hagan las paces- enseguida vuelvo.
Angy se fue y los dejo a solas. Ambos estaban callados, no sabía que decirse, era incómodo el momento y se sentía tenso el ambiente.
-Ryan... Discúlpame -admite la azabache algo arrepentida-
-¿Porque? ¿De que te disculpas?
-por mí trato... no debí... -ella mordió sus labios y justamente algunas lágrimas salieron de sus ojos, parte de su aflicción estaba en su pecho, la angustia era palpante-
El castaño fue preocupado y corrió para abrazarla por su espalda
-¿Que sucedió? ¿Está todo bien? -apoya su mentón sobre su hombro- cuéntame...
-no, no está todo bien. Estoy harta de esto... -hablo con total sinceridad- te amo y odio que todo me esté saliendo mal en esta vida... Nosotros deberíamos estar juntos... no quiero perderte.... -confesaba con la vez quebrada, Ryan la abrazo más fuerte-
-jamas me perdiste, mí corazón está contigo siempre, no importa que tan lejos estés de mí, estamos juntos. -Ryan también entendía a qué se refería ella, porque también lo sentía- solo mírame.... voltea Mich...
Ryan la hace girar de a poco para verla a los ojos.
-No llores, eres una mujer valiente y muy fuerte, incluso más que yo. Tienes que salir y dar todo de ti. -el toma su mano y la entrelaza a la suya- te amo y siempre serás mía y yo tuyo.
Michelle lo abrazo fuerte y hundió su rostro en su pecho.
-no soy fuerte. Te doy esa impresión. -dijo en un leve susurro-
-eres explendida, la mejor. -le correspondió entre sus brazos- vamos, anímate
.....
La noche navideña parecía que no terminaba más. El frío, la neblina y la nieve comenzaba verse alrededor.
Un joven azabache caminaba sin rumbo por la plaza, donde solía jugar con sus amigos cuando era un niño.
Nostálgico suspiró. Porque ahora estaba merodeando solitariamente mientras todo el mundo disfrutaba de la velada familiar.
Flashback.
-Bren... Cariño... ¿A dónde vas? Estoy por servir la cena... el pavo...
Brendon se gira de talón, mientras se envuelve la bufanda sobre su cuello y se coloca su mejor abrigo.
-mamá... -menciono- voy a dar una vuelta... Empiecen sin mí, no te preocupes...
Su madre lo detiene en seco y se pone delante de él impidiendo su paso.
-¿No quieres quedarte porque tu hermana trajo a su novio? ¿Es eso? -arquea una ceja- irte así nomás nos harás quedar mal como familia... ¿Que pensará ese muchacho? -empezo su madre a recriminarle un poco indignada-
Brendon negó ladeando su cabeza, no quería hablar y herir a su familia, prefería callar a que lastimar a alguien.
-eres igual que tu padre... -solto su madre casi a punto de llorar- otra decepción...
Brendon le dolía escuchar aquellas palabras porque ahora sabía lo que realmente ella pensaba de él.
-no importa lo que yo haga, siempre seré un patán, un idiota, una completa decepción para la familia... para ti... -espeto- no le deseo el mal a nadie y ojalá mí hermana se casé con ese abogado y sea muy feliz... pero yo que soy tu propio hijo... Soy la decepción... -dijo mordiendo su lengua- porque no pude radicarme en el extranjero como lo hicieron Matt y Masón. Kala vive en Canadá y es profesora de francés, Kyla está por recibirse este año y yo... soy un inútil que no tiene una pareja.
Su madre no sabía que decirle porque el azabache quería llorar, las lágrimas brotaban de sus ojos pero estaba siendo muy castigado consigo mismo.
-Dejalo que se vaya mamá... estará bien y nosotros también. -se entrometio su hermana- personas como él no suman, solo restan.
Su hermana Kyla abrazó a su madre y la corrió para que no le impida el paso al Urie menor.
-pero cariño... -ella cubrió su rostro en el hombro de su hija mientras veía al menor abriendo la puerta-
-no te preocupes, tan lejos no irá. No tiene otro hogar, tampoco tiene novia o amigos.... está sólo. Bueno, tendría que volver por Bogart así que... -dijo ruda la muchacha restándole importancia-
Brendon la observó y no objetó nada para defenderse, en el fondo sabía que ella tenía razón.
Algo adentro suyo se había quebrado pero era normal sentirse así en navidad, estaba solo y su familia no lo quería. No podría fingir y aparentar ser el hermano perfecto con la familia perfecta si no lo eran.
Inconscientemente caminó abrigado, con frío y guantes en las manos admirando la nieve fría, la cual representaba a su corazón. Sacó su móvil para saber si alguien había enviado algún mensaje y no había nada.
Fin del flashback.
Había caminado varias cuadras sin darse cuenta que había terminado en las puertas de la oficina de su trabajo, fingió una sonrisa y de lo idiota que se sentía al ver qué estaba en el lugar que tanto amor/odio le había traído.
Quiso abrir la perilla pero estaba todo cerrado, por su cabeza se imaginó que Till estaría en el putero ó en compañía de alguna de sus gatitas.
Negó ladino y siguió su camino, sin pensarlo, inconscientemente volvió a aquella plaza y se mecio en el columpio. Mientras lo hacía en silencio, se sentía vacío, sin algún propósito porque luchar o seguir adelante.
Copos de nieves empezaron a caer del cielo pero no le asombró, tocaba su piel y no sentía nada, solo el frío, así sentía a su corazón.
-puedo saber ¿Que haces acá Brendon? -escucho una leve voz masculina pronunciar su nombre-
Levanto la vista para saber de quién se trataba pero la neblina era un poco espesa por lo que le dificultaba ver al individuo que se aproximaba lentamente.
-¿Usted es el diablo? -hablo un poco temeroso, esa persona era alta y corpulenta-
-Oye, me estás ofendiendo muchacho. -dijo con una leve sonrisa y se dejó ver-
-¡Oh Till! -expreso y abrió sus ojos- entonces si era el diablo -murmuro en voz baja, para cuando Till se sentó en el columpio de al lado, Brendon le pregunto- ¿Que hace aquí? ¿No debería estar festejando la navidad?
Till se echó a reír pero el azabache frunció el ceño.
-¿Quien rayos festeja esa patrañas? -le contesto un poco gracioso-
-la gente normal -rodo sus ojos-
Till sacó de su saco una petaca de whisky y le ofreció al Urie.
Brendon tomó un sorbo y sintió un calor subirse a su pecho.
-¡Woow! Es bueno.
-es un regalo que me hice cuando me fui a mí viaje de negocios.
Brendon le devolvió la botella porque ya no sentía frío, sino calor en su sangre.
Ambos se quedaron observando la noche, la nieve caer y la neblina a su alrededor.
-Tu me haces acordar a mí cuando era joven... guapo y con mucha energía. Eres como un hijo para mí. -solto sinceramente Lindemann tomando un sorbo de esa petaca-
-jefe... -Brendon se sonrojo- ¿no me diga que ya está borracho? -le bromeo, Till carcajeo un poco, era la primera vez que lo veía más suelto, sonriente y de buen humor- bueno, yo también lo siento como un padre.... de hecho... El mío nos abandonó para rehacer su vida con su nueva familia pero eso, no lo quiero ver... Él no me necesita... y mí mamá... -Brendon se quedó pensando en su madre y en como lo trataba- y mí madre tampoco...
-Brendon estás en la edad justa para empezar tu nueva vida... solo necesitas a la mujer correcta a tu lado. No necesitas a tus padres, ya no eres un pichón que salió del huevo. Eres un ave, un Alcón sediento de poder. -le contesto Till muy seguro y hablando de si mismo-
Brendon se miró así mismo y no entendía a qué se refería pero si que quería demostrarle a su familia que él no era un completo fracaso.
-señor Till a veces me da miedo jajaja -agacho la mirada con una leve sonrisa-
-Tengo un negocio en mente y los necesito para llevarlo a cabo.
-¿De qué trata? Si se puede saber. -insistio curioso-
-es secreto. Pero si todo marcha bien, los recompensare muy bien a todos. Ustedes son mí única familia... -Till lo tomo del cuello y le hizo un coscorrón en su cabeza- más te vale no estropear nada y me espantes a Paulina ¿Ok?
Brendon negó y se sonrojo al escuchar su nombre.
-no, no quisiera que me arranque la cabeza jefe....
Después de platicar un rato salieron a caminar un rato por la ciudad.
-pense que estaria en el putero hoy... -saco de conversación el azabache-
-Si, me dirigí hoy mismo pero llegué y estaba cerrado. No me acordé que era noche buena o navidad -rodo sus ojos-
-jajaja usted jamás cambia -carcajeo el azabache-
Till se le plantó en su cara y se puso serio, tanto que asustó a Brendon y este pensando si lo había ofendido.
-no me digas "usted". No estamos en la oficina. -espeto, y luego lo abrazo con una sonrisa-
-ok ok ok -suspiro de alivio-
-¿No deberías de estar con tu familia? -ahora le pregunto Till-
Brendon miro la noche, ya se había despejado y la nieve cesó.
-¿Para qué? Religioso no soy y mí familia me tiene de idiota, no les importo. -planteó el Urie y patio una piedra-
-¿Seguro?
Brendon asintió.
-Yo quiero que me valoren, que no me tomen de idiota, que soy capaz de todo y quiero, necesito poder... ser como usted, para que nadie más se burle de mí y me tengan respeto.
Till sonrió y miró el cielo, algunas estrellas eran visibles.
-tenemos un pacto muchacho, no me decepciones -dijo Till dejando en sus manos una caja pequeña y se marchó, dejando al azabache sentado en el columpio-
Brendon se quedó anodadado con lo que acababa de pasar, no podía creerlo. Su jefe hacia desaparecido en el horizonte entre la nieve y la neblina.
-¡Caray! -se miro así mismo a ver si tenía algo diferente y miró detalladamente su palma- entonces el jefesito si es el mismísimo diablo -musito un poco asustado y cagado hasta los calzones- ¿Que pasará cuando vaya a la oficina? -decia para si mismo- le haré caso...
Brendon miró a su alrededor y vio que en a su alrededor con la poca visibilidad, que no había nadie en la calle. No sé había dado cuenta de lo importante que era este día. Un día especial que debía compartir con su familia. Preocupado por su madre volvió rápidamente a su casa.
-¡Má! ¡Mamá! ¡Mamá! -entro a su casa y fue recibido por Bogart, su perrito cariñoso- Oh, feliz navidad pequeñito -lo acarició un ratito hasta escuchar unos pasos adultos acercarse-
-¡Mami! ¡Ahí vino Brendon! -advirtio su hermana- ¿Dónde estuviste? Estábamos preocupadas por ti. -decia ella con una cara típica de preocupación- feliz navidad tonto -su hermana lo abrazo fuerte, haciendo que Brendon se dé cuenta que si era importante para su familia-
-lo siento... no quería preocuparlas -contesto el Urie menor- feliz navidad Kyla.
La madre se hizo presente con lágrimas en los ojos y un postre que traía en mano para ofrecerle.
-cariño... feliz navidad. -espeto la madre muy conmocionada-
Le dió el postre a su hija para abrazar a su hijo.
-algo en esta vida debí haber hecho para que me gane su desprecio -murmuro cerca de su oido- pero te amo hijo... mi hijito... Estoy muy orgullosa de ti.
Brendon no podía creer lo que escuchaba así que simplemente se dejó abrazar.
-te amo mami... gracias por haber sido la mejor.
Su hermana veía el abrazo entre su hermanito y su madre que la hizo conmocionar.
-¡Oigan! ¿Ya cenaron? ¿Mi cuñado se fue? -hablo el Urie con una felicidad, caminó con su hermana y madre hasta el living dónde estaban cenando-
Kyla reía y negó, su novio estaba viendo una película navideña.
-¿Y dónde fuiste Brendon?
El azabache sonrió y recordó lo que Till le había regalado.
-me había olvidado algo en la oficina. -sonrio tontamente y sacó aquella caja mientras se sentaban en la mesa principal-
-¿Es un regalo de navidad? -pregunto curiosa su madre y se acercó a él-
Brendon también estaba curioso por saber y abrieron el paquete misterioso.
Algo resplandeciente se dejó ver qué su madre, su hermana ni él mismo podían creer.
-¡Woow! Mira ese anillo, ese arete... son tan... -no sabía que decir de lo bonito que se veian-
-es para ti mamá, feliz navidad. -sonrio Brendon dejando atónita a su madre-
-¿En serio? -pregunto ella, él asintio-
-gracias bebé... -lo volvió abrazar y cuando el azabache le entrego aquella caja, su madre notó que las joyas veían de Munich- ¿De dónde sacaste dinero para comprar joyas alemanas?
-son un obsequio mamá, no te preocupes que me lo gano honestamente. -admitio Brendon y empezó a servir la comida-
Justamente su móvil empezó a sonar y él atendió.
-hola Brendon...
-¿Pau? -dijo dubitativo- hola... ¿Como la estan pasando con tu mami?
-Bien, ya terminamos la cena. Iremos a pasear al centro a ver las festividades y los fuegos artificiales. Espero que estés pasando una bella noche.
-gracias Pau, la estoy pasando increíble acá con mi madre, mi hermana y mi cuñado.
-llamaba para desearte feliz navidad... -se ls escuchaba tímida- cuando vaya a la oficina te daré un regalo.
-yo también tengo uno para ti, seguramente nos estaremos viendo en la oficina pasado mañana. Así que disfruta tu tiempo con tu madre... Y feliz navidad para vos también.
Su madre y hermana prestaban suma atención, se miraban cómplice. Cuando Brendon volvió a la mesa luego de hablar por teléfono con Paulina lo quedaron viendo.
-¿estas seguro que no querrás darle el obsequio a esa persona llamada "Pau"? -insistia en preguntar su madre con picardía-
Brendon la observó y no estaba dudando acerca de su decisión.
-No, es para ti mamá. No te preocupes, ya tengo su mejor regalo y no precisamente joyas. -sonrio ladino pensando en una cena romántica o darle un beso a aquella chica que le atraía mucho-
-mmm... Me pregunto que clase de regalo será... -decia su hermana tratando de adivinar, y poniendo en evidencia al azabache-
-no... Nada que les incumba... -dijo sonrojado-
-¿Y cuando me vas a presentar a tu novia? Quiero conocerla. -insistia su madre- ¿Es rubia? ¿Alta? ¿Sus ojos? ¿Es bonita? ¿No es gorda verdad?
-¡Mamá! Aún no es mi novia, ni siquiera tuvimos una cita -se cubrió su rostro- y respondiendo a lo otro... es una chica normal.
-¿Que es "normal" para vos? -le seguían preguntando para obtener información- pensé que nunca me ibas a presentar a una mujer, ya estábamos dudando de tu sexualidad -comentaban y se reían de sus suposiciones- a todo esto... no me dijiste cuando la vas a traer.
Brendon rodó sus ojos y sonrió de medio lado. Primeramente pensó en su jefe y en cómo le agradecería lo mucho que lo había ayudado. Todo había vuelto a su normalidad en su casa y esa depresión o aura oscura que lo tenía preocupado había desaparecido de su corazón.
.....
Con la familia Borns:
-bebé ¿No vas a cenar? -inquiere Keltie para saber si su novio tenía algo en el estómago, porque no había probado un bocado-
El banquete navideño estaba servido en la mesa frente a todos los invitados con Garrett a la cabeza junto a Michelle. Del lado de ella se sentaron Angeles y Dallon, del lado de Borns, Keltie y Ryan.
El bebé Knox dormía en el cochecito y Alex en su habitación.
Garrett empezó a servir el pavo y su mujer la ensalada. Dallon hizo los honores y orar en la mesa agradeciendo a Dios por la comida servida y un mensaje de amor a sus amigos.
Después de eso, empezaron a comer y a probar alimentos (salvo una persona).
-¿Cariño? -volvio a insistir-
Garrett lo observaba en silencio, esperaba que comiera así él también empezaba.
-¿Que pasa Ryan? ¿No te gusta nuestra comida? -pregunta algo indignada Michelle. Ofendida, porque la comida la cocino ella junto a su mejor amiga- mira que no tiene picantes...
Ryan levanto la vista, y vio sus ojos. Seguramente está molesta. Observo el plato que le habían servido y le parecía inmoral tener que comer sin su hijo.
-Disculpen. Esto se ve muy delicioso y no dudo de tus habilidades en la cocina pero.... -todos pusieron su mirada en él y escucharían su objeción- no puedo empezar a comer sabiendo que falta alguien importante en la mesa, sería de muy mala educación de mi parte.
-¿Amor quien falta? Estamos todos aquí presentes. -contesto Keltie observando su alrededor-
-lo siento -se levantó e hizo una reverencia frente a todos pidiendo disculpas- lo siento...
Y se fue sin mirar a los demás, se sentía avergonzado.
Michelle tomó una servilleta y limpio algunas lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos... estaba conmovida y no dudaba que Ryan era el padre perfecto para su hijo. Ese gesto hizo amarlo mucho más.
Garrett se quedó callado y con bronca aparente en su interior.
-bueno, después vendrá. Ya tendrá hambre... Vamos a comer -cambia de tema Keltie y empieza a probar la comida- está delicioso.
Ángeles y Dallon se miraron entre si, luego ella dirigió su mirada a su amiga buscando su aprobación.
-vamos a comer, no sé puede desperdiciar la comida. -admitio Michelle, luego observó que su pareja estaba callada sin decir algo al respecto- ¿Ahora que pasa? ¿Tu tampoco tienes hambre?
Garrett le atino su mirada seria y corrió su plato. Tampoco cedería ante el Ross.
-Cuando Alex se levanté también voy a comer, prosigan sin mi. -contesto y se levantó para ir a refrescarse en el baño-
Michelle rodó sus ojos, a veces era insoportable su comportamiento.
Después de que Ryan y Garrett decidieron no comer en el banquete familiar, los demás si lo hicieron y platicaron mucho sobre sus proyectos y trabajos. Keltie era otra insoportable pero se toleraba.
Mientras Garrett se lavaba su rostro para quitarse la mala vibra, Ryan en cambio fue a la habitación del niño a ver si había despertado.
Cómo aún dormía plácidamente, trato de hacer el menor ruido posible y se sentó a su lado, en el borde de la cama.
-eres un niño increíble... No te imaginas cómo has cambiado mi vida Alex... -le acaricio su pelo- ojalá hubiera pasado por esa experiencia de poder cuidarte y cambiarte los pañales, jugar a la pelota juntos, montar un barrilete, llevarte a la escuela, darte de comer.... -Ryan se sentía nostálgico de solo imaginarse de grandes momentos que se perdió a su lado- espero que nunca crezcas, que seas un niño siempre... Así te puedo enseñar lo que aún te falta.... Te amo.
Mientras él le decía en susurro aquellas palabras y se conmocionaba, su corazón se quebraba. No podía describir lo mucho que amaba a su hijo y esa necesidad de tenerlo a su lado.
Detrás de esa puerta se encontraba Garrett escuchando como Ryan se abría de corazón a un Alex dormido. Por un lado entendía que él era su padre biológico y había una gran conexión entre ellos que ni él mismo podía destruir. Otra cosa que no dejaría que él se lleve a su mujer porque él también la necesitaba.
....
-¿Ryan? -pregunto un Alex somnoliento, el pequeño se refregaba sus ojos- Oh si eres Ryan -se levantó eufórico, no podía creer que él estaba a su lado sentado- pensé que ya te habías ido.
-no puedo irme sin comer. -sonrio el Ross- toma... Feliz navidad Alex -le entregó un obsequio-
Alex entusiasmado abrió su regalo de navidad y era un muñeco, una figura de acción reconocida entre los niños.
-Gracias Ryan, está súper. -dijo el niño pero luego se miró así mismo y se puso serio- yo no tengo que regalarte...
-con un abrazo me alcanza, no te preocupes pequeñito...
Alex de agradecimiento lo abrazó fuerte sin darse cuenta de lo mucho que significaba para Ryan.
-si quieres me quedo con esta foto... Si no te importa. -le señaló un portarretratos que había en su mesita de luz, es una foto que le llamaba mucho la atención-
-Si... Pero sale mi mamá...
-no importa, la guardaré muy bien. -le dice Ryan y le guiña un ojo- ¿Vamos a comer? La cena está lista.
-¡Si! ¡Tengo mucha hambre! -dijo muy energético-
Ryan acompaño al pequeño hasta la cocina cargandolo a upa.
-¡Ma! ¡Mami! -menciono el niño y se bajó al suelo para correr hasta donde estaba ella- tengo mucha hambre.
Ella volteo y se alegro de verlo, le hizo una seña a Garrett quien hablaba con Dallon y Angeles. Keltie estaba entretenida con su celular y algo cortante.
-¡Que bueno bebé! Les guarde la cena. Vayan a sentarse, enseguida les sirvo. -dijo amable sin objetar nada-
Mientras Alex se sentaba y Ryan de su lado izquierdo, mientras que Garrett lo hacía a su derecha.
Michelle sirvió comida para los que faltaban. El único contento era Alex por tener a su dos personas favoritas a su lado. Ryan lo veía contento por lo que no le importo el silencio de Garrett.
-¿Papá Noel ya pasó? -indago curioso el niño- quería conocerlo.
-te lo perdiste por quedarte dormido, pero me dejó tu regalo. -comento serenamente Borns-
-muero por saber que me trajo -dijo muy ilusionado-
Ryan comía y veía de reojo que Keltie estaba callada, no podía dejar de pensar si estaría molesta y lo regañaria después.
-gracias mami por la comida, estuvo deliciosa -menciono el niño y fue directamente a abrazarla-
-¿Quieres ver los regalos que te trajo Papá Noel?
Alex asintio y tomo su mano para ir al living, dónde estaban los demás regalos. Habían obsequios para todos los invitados.
-mira que bonito amor -decia Angeles mostrando tres suéteres navideños con el mismo diseño pero de distintas tallas- es para que lo usemos juntos
Dallon se acercó y le encantó. Se probó el suéter y junto a Angy le colocaron a Knox.
-que monos -decia enamorada-
Keltie había recibido un perfume pero no sé entusiasmo, era de usar de los más caro.
-bueno, está bien el regalo. Tal vez lo usé cuando vaya a visitar a mi madre.
-¿Y cuando vas a ver a tu madre? -arqueo una ceja Ryan preguntarle, porque recordaba que nunca visitaba a su familia-
-algun día cariño. -y guardo su regalo en su cartera- ¿y a ti que te dieron?
-un perfume igual. Este era mi preferido cuando iba a la secundaria, nunca lo pude comprar porque no tenía dinero. -decia Ryan y su mirada viajo a dónde estaba Michelle, quien era la que sabía aquel secreto, Keltie le resto importancia-
-otro perfume barato -susurro la rubia y le quitó su perfume para guardarlo-
Michelle había recibido unas prendas para su nuevo bebé y un par de aretes nuevos.
-crei que ya lo tenías todo... Espero que te guste Mich. -decia tímida Angeles haciendo mención si la prenda de bebé le había gustado-
-Gracias amiga, te adoro -ella la abrazo- menos mal que elegiste blanco, porque no se que sexo es aún.
-no importa, siempre estará rodeada, rodeado de cariño y una madre espectacular. Amor nunca le faltará.
-pueden contar con nosotros en lo que necesiten. -aclaro Dallon a la pareja anfitriona-
-Gracias por su visita, siempre serán bienvenidos. -contempla Garrett y estrecha su mano al Weekes-
Michelle es tomada de la cintura por Borns mientras sus ojos no podían dejar ver a Ryan y Alex quienes abrían los regalos, este niño se ponía feliz de ver muchos regalos. Sin querer se suelta de Garrett y pensaba dirigirse hasta donde estaba Ryan pero Keltie se entromete entre ellos y ya no avanza en acercarse. Cambia de tema y toma su regalo y se lo entrega a Garrett.
-espero que te guste...
Garrett frunció su ceño, extrañado. No esperaba que su mujer le regalará algo.
-¿Que es?... -noto que solo era un gran sobre color marrón, con un listón verde, ella le insinúa con su mirada dándole el positivo para que lo abriera-
Garrett abrió aquel sobre y se llevó una gran sorpresa...
-es.... es... ¡Es niña!
....
Presente:
-¿te acuerdas aquel día? -escucho una voz melosa que se sienta a su lado y la abraza por la cintura- me diste la noticia más feliz de mi vida -le daba un beso en su cuello- voy a ser padre de una hermosa niña Borns.
Michelle asintio, se sentía muy feliz por la noticia y también por Garrett, se lo merecía por todo el esfuerzo que hizo por ella y su hijo.
-Si, un día antes había retirado los estudios, ni siquiera yo lo sabía, lo descubrí contigo.
-Esto cambiará nuestra vida mi amor... -menciono Garrett-
Michelle lo observó.
-hace mucho no me decías "mi amor", es lindo volverlo escuchar de tus labios. -decia ella mientras dejaba que él la bese-
-necesitamos pasar más tiempo juntos... -decia Garrett y tomó su rostro para besarla apasionadamente, mientras con sus manos acariciaba su cuerpo, quería poseerla en ese mismo momento, en el sillón del living-
-Cariño... Alex está arriba, en cualquier momento puede venir. -ella se aparta y toma oxígeno-
Se pone de pie para bajar la temperatura antes de que alguno explote y va por bebida fresca.
Garrett se desparramó por el sofá y tenia una idea...
-¿Que te parece si enviamos a Alex algunos días con Ryan? -le propone como idea-
-¿Porque propones semejante locura? Ya sabes la respuesta. -dijo sería, no le agradaba para nada-
-bueno Alex se lleva de diez con Ryan ¿Cuál sería el problema? -insiste el Borns con su idea- aparte él es... -no quiso decirlo- piénsalo, tendríamos más tiempo para estar juntos.
-bueno, hubiera sido mejor idea dejar a Alex en su antiguo colegio, ahí tenía materias extracurriculares y te hubiera dado tiempo a qué te quites lo caliente. -bufo la mujer y se sentó algo preocupada, aún no estaba lista para dejar ir a su hijo con otra persona que no sea Ángeles y Dallon, no le tenía confianza aún así si fuera Ryan y su pareja-
-¡Oye! Yo no soy el único ardiente aquí -sonrie ladino- ¿Quieres que hable de lo que ocurrió hace algunos días en la bañera? Ahí no te preocupo si Alex iba o no a un colegio de paga.
-no, y no se discute el tema. -contesto seria- es mi hijo y yo decido con quién dejarlo.
Garrett frunció su ceño y se levantó para buscar sus llaves.
-claro, ahora que es "tu hijo" -hizo enfasis con sus dedos y siendo sarcástico- Corrección: es nuestro porque yo también lo estoy criando. Te guste o no, algún día crecerá. Es mejor que te adaptes ahora.
Garrett se fue molesto a dar una vuelta con su coche dejando a Michelle en shock.
-no... mi bebé no... -decia en sollozo-
Le dolía saber que algún día ocurriría algo semejante, no quería que Alex se aleje de ella, era lo más apreciado y su única que conexión a Ryan, al único hombre que verdaderamente ama.
-Continuara-
Holis, aquí nuevo capitulo. Espero que les haya gustado y disculpen la demora en actualizar 😸
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