"Hospital"

Narra narrador:

-¿pá... Padre? -dijo un castaño conmocionado-

Ryan entraba a una habitación blanca y vacía y dentro de ella, un hombre de unos 57 años de edad que estaba durmiendo en una cama, inmóvil y respirando con un aparato artificial.

Él se acercó con miedo de adentrarse más, pero esa persona era alguien que él perfectamente conocía. Era su padre, quien estaba internado en un hospital.

Se sentó a su lado mientras lo observaba. A su lado, una flor en una jarra y una foto familiar sobre la mesa. Había una pequeña biblia y un vaso con agua, seguramente alguien venía a menudo a visitarlo.

-papá... -dijo con lástima viendo el estado de su progenitor, quería tocar su mejilla pálida-

El señor Ross empezó a estremecer su cuerpo y a toser con fuerza.

-Ry... Ryan... -pudo escuchar su nombre con sus últimas fuerzas-

El castaño sobre exaltó en el lugar y quería escuchar que tenía para decirle. Lo extrañaba mucho pero por mucho que su padre se esforzará solo abría sus ojos y miraba a su alrededor, ojos vacíos y sin esperanzas.

-¡Padre! ¡Padre! -el muchacho se aferró fuerte pero el señor Ross tosía mucho, carraspeando su garganta y pecho-

Él no sabía que hacer, ya que no había nadie quien pudiera ayudarlo. No había enfermeras alrededor. Salió a buscar a alguien por los pasillos pero nadie le prestaba atención, era como un fantasma para el resto. Volvió a la habitación y se sentó nuevamente, mordió sus labios de la rabia e impotencia que sentía por dentro.

Observó que su padre le caían algunas lágrimas pero sus ojos seguían cerrados. Ahora estaba impactado, jamás pensó que él era muy importante en su vida. De niño lo obedecía y hacia muchas cosas para que él se sintiera orgulloso, en algún momento sintió que le falló, que era imposible complacerlo pero escuchar su nombre y ver algunas lágrimas, sentir el dolor palpable que este le trasmitia le partió su corazón. Ryan lloró también a su lado.

-Ryan... hijo mío siempre estuve orgulloso de ti. -escucho una voz detrás suyo, al voltear el castaño su padre estaba parado y se veía más joven- te amo y cuídate mucho.

-¿Qué? -conmocionado volvió a ver la cama pero el señor Ross dormía, detenidamente fijo su vista en él y se dio cuenta que su corazón se había detenido- no puede ser...

Las lágrimas del castaño cortonearon sus mejillas y trató de ser fuerte.

-ahora entiendo.... Gracias papá. También te amo y perdoname por no haber estado contigo -dijo el chico Ross limpiando sus lágrimas que caían de su rostro-

Cuando volvió a voltear hacia atrás, su padre ya no estaba.

Miró a su alrededor y sintió un alivio que por lo menos su alma descansaría en paz de la agonía de su enfermedad y que su padre se había despedido con una lindas palabras que lo dejaba tranquilo.

-¿Ryan? -escucha una voz particular, se despertó y se sorprendió al ver al hermano de Garrett a su lado poniendo su mano sobre su hombro-

-¿Si? -no sabía cómo llamarlo, estaba aturdido por el sueño y apenas podía razonar-

-soy Harry, el hermano menor de Garrett. -menciono tranquilo el chico Børns-

Ryan suspiró y asintió, todavía se sentia fatigado por lo que el joven Børns le entregó una taza de té negro y unos sándwiches de jamón y queso.

-Toma, debes comer algo. -le dice el chico de ojos claros- estás muy débil y el doctor Weekes dijo que debías alimentarte después de tú desmayo.

-lo siento -solo dijo el Ross aceptando la comida de Harry- no quiero ser una carga para ti también.

-no te preocupes, mí novia preparó muchos de estos -Harry le enseñó que en su mochila traía un tupper lleno de sandwichitos, luego se sentó a su lado y ambos observaron al niño- Alex se recuperará, ya lo verás...

Ryan observó al niño que estaba acostado en la cama de una habitación del hospital, luego del ataque brutal de Keltie hacia Alex, el niño fue derivado a internación... ya que producto de un pico de estrés, su alergia había provocado que no pudiera respirar bien.

En estos momentos estaba siendo observado por los especialistas y también, Dallon y Ángeles quienes ayudaban a sus amigos y cuidaban de él en todo momento.

Cuando Ryan había despertado del inconsciente, Harry lo cuidó en su departamento. En cuánto supieron lo que había pasado con sus seres queridos inmediatamente fueron y acudieron al hospital donde están internados.

Cómo Garrett estaba cuidando a su mujer, Ryan y Harry se quedarían haciendo guardia toda la noche hasta que Alex despertará.

El castaño se sentía fatalmente culpable por lo sucedido y rezaba internamente que sus seres amados salieran de esa situación. Él no se despegó de la cama de su hijo ni para ir al baño y se había dormido por unas horas sin darse cuenta. Pero cuando se dió cuenta del lugar donde se encontraba palidecio.

Ryan tenía sus manos entrelazadas y su mirada fija puesta en el pequeño.

-no sé cómo voy a afrontar todo esto... jamas me lo perdonaré -musita leve y no quería mirar a Harry por la vergüenza- Alex estaba a mí cuidado y no fui responsable...

-Entiendo, pero no fue tu culpa. Uno nunca termina por conocer a la otra persona. -le contestó el Børns menor-

Harry empátizo con él y entendio que no debía atormentarlo, ya que Ryan no era una mala persona. Solo quería calmar esa ansiedad y si Ryan pudiera descargar esa frustración platicando un rato con él, siempre atento a su sobrino a quien no le soltaba la mano y estaba muy aferrado a él.

-Alex te quiere mucho... Eres como de la familia -lo anima el joven Børns- se va a recuperar... lo que me preocupa es Mich...

Ryan volteó para observarlo, no sabía que le sucedió a la azabache.

-¿Que le pasó a Michelle? ¿Hablaste con Garrett? -indago el castaño-

Harry negó.

-Por lo que sé, ella fue atacada por esa mujer y está internada... No sé mucho de su situación, solo que mí hermano la está cuidando.

-entiendo. -el Ross agachó su cabeza y fijo su vista en el niño, quien aún dormía con un respirador-

Ryan no dudo en cerrar sus ojos y rezar internamente pidiendo a Dios que ambos que estuvieran bien.

Al rato entra Ángeles vestida con una bata de médico y una planilla.

-Hola chicos, necesito la habitación a solas así nos encargamos de revisar al niño.

Ryan se levantó de su lugar y fue al pasillo para hablar con ella a solas.

-¿Angy? ¿Que haces aquí? ¿Dallon y Knox? -ataco con preguntas-

Ángeles retrocedió un poco porque el castaño se sentía ansioso.

-con respecto a Knox, lo cuida mi mamá y Dallon está... -no sabía si decirle- está atendiendo a Michelle.

Ryan abrió sus ojos.

-¿Que le pasó a Michelle? Dime por favor -le suplicaba-

-lo siento Ryro, no puedo darte un parte médico ya que de eso se encarga mi esposo y él es muy profesional. Tendrás que preguntarle a Garrett. -menciono tranquila, luego revisó la planilla del niño sobre las observaciones de las últimas horas y la medicación que estaba tomando- solo vine a ver cómo estaba mí ahijado. Estoy terminando mis estudios y haciendo mis prácticas en este hospital.

Ryan ladeó su cabeza y largó un bufido.

-se como te sientes, pero tampoco te hagas el fuerte Ry, debes descansar. Deja que Dallon y yo nos encarguemos -lo anima Ángeles poniendo su mano sobre su hombro-

Ryan no soporto tanta culpa y mordió su labio.

-¿Crees que se recuperará? -le cambio de tema-

-Yo supongo que si, está en tratamiento con su alergia y ahora le voy a dar un corticoide. -Angeles traía consigo un oso de felpa- también le traje un osito a mi niño.

-Angy por favor, hagan todo lo posible... -menciono el Ross y apoyo su cabeza sobre su hombro- me muero... si pierdo a otra persona querida para mí...

-tranquilo Ry... -ella le palmeo la espalda para darle tranquilidad-

Ángeles lo abrazó y lo dejó sólo por un momento mientras volvía Harry y ambos se sentaron a esperar en una banca en el pasillo.

-sabes... antes de lo ocurrido... Michelle me contó sobre tu relación con Alex. -Ryan volteó a verlo y sorprendido, nunca creyó que ella sería capaz de contarle su secreto- te felicito.

Él sonrió de medio lado sin poder creerselo.

-no puedo creer que ella te haya contado eso, pensé que quería mantenerlo oculto. -menciono el Ross- pero no tienes porque felicitarme... Garrett lo crío, es su hijo y Alex lo reconoce como su único padre... yo solo seré su amigo. -decia dolido porque la relación de ambos solo sería de amistad- ¿No me odias verdad?

Harry ladeó su cabeza negando y sonriendo de medio lado.

-Si Alex te quiere y te aceptó, yo también. Tampoco veo que seas una mala persona, me caes bien. -se asincero el joven Børns- ya me decía yo si eras amigo de mí hermano o no...

-¿Porque? -pregunta curioso el castaño prestandole atención-

-nunca te he visto cerca de Garrett, solo al patético Brendon y el otro... -se puso pensativo- el rebelde Peter.

-debe ser Pete, los conozco. Fuimos compañeros todos juntos... solo que nunca me lleve con Garrett, él era de otro grupo, de los cools. -le comento breve el Ross-

-perdona mí atrevimiento... -no sabía cómo preguntar lo que pensaba, su pregunta incomodaría al castaño, pero este le hizo un gesto para que se animará y se sacará sus dudas- ¿Y que relación tuviste con Michelle?


Ryan lo observó y sonrió.

-fuimos los mejores amigos en la infancia e incluso en la secundaria. Salimos un tiempo, fuimos novios pero luego ella se enamoró de Garrett y nos distanciamos un poco, pero la amistad siguió. -El joven Børns lo miraba detenidamente y asintió, ahora comprendía el porque Garrett no lo quería mucho- yo después me fui a cumplir el servicio militar y hace poco menos de un año volví, fue cuando me enteré lo de Alex.

Harry trataba de recopilar la información en su cabeza para entender todo y no quedarán dudas.

-con razón Garrett está... siempre de mal humor jaja.

-Si, pero yo no soy una amenaza, solo quiero estar con Alex, no robar su familia -le mintió, pero Ryan muy en el fondo deseaba recuperar su familia pero quería que esa decisión la tome ella y no forzarla-

-Entiendo. Igual Michelle es muy bonita, tuvo muchos pretendientes pero mí hermano se encargó de ellos jajaja -reia el joven Børns- incluso a mí.

-¿Que? -enarco una ceja, Ryan no comprendia-

-como te conté... En mí adolescencia estudie en el extranjero, de vez en cuando venía a visitar a mis padres y un día de casualidad conocí a Michelle cuando Garrett la trajo a casa... -le contaba mientras se ponía cómodo-

Ryan se puso un poco nervioso y no sabía que sentir, quería escuchar esa pequeña historia...

Flashback.

Bajaba por las escaleras un chico de apenas 14 años hacia la planta baja en busca de alguna bebida para tomar.

Cómo era Sábado, habitualmente los padres Børns salían a cenar a restaurantes finos y volvían por la madrugada. Mientras tanto, Harry, el menor de la familia había regresado para estar con ellos y pasar el fin de semana antes de volver a la escuela.

Cuando llegó a la cocina se encontró con una chica de pelo azabache, delgada y tez blanca que estaba de espalda preparando algo de comida, estaba muy concentrada que no se dio cuenta que el chico menor Børns estaba por detrás suyo.

-Woow, mamá contrató a una linda mujer para cocinar. -solto el castaño de ojos claros-

Ella sorprendida y con las manos ocupadas, se puso nerviosa ante su presencia.

-es que... yo... no... Soy... -ella tartamudeaba sin saber qué decirle, el chico era muy lindo ante sus ojos-

-no seas tímida... ¿Si quieres te puedo ayudar? -le propone con una sonrisa y se pone por detrás a elegir su delantar-

-S-Ssii

Estuvieron platicando mientras cocinaban y Harry estaba encantado con la chica.

-¿Cómo te llamas?

-¿Yo? -él asiente y ella se ruboriza- M..M..Michelle... -el joven se le ponía cerca y la hacía inquietar- ¿Y tu?

-Soy Harry Børns. -dijo seductor acercándose demasiado hasta acorrarla contra la mesada-

-y-yoo no... -ella cerró los ojos quedando inmóvil-

-¿Que pasa aquí? -ambos escuchan la voz firme de Garrett, quien había llegado a la cocina-

Harry tomó distancia y rodó sus ojos, su hermano se había entrometido.

-estoy con la cocinera, ayudándola un poco. ¿No puedo? -le contesta un poco agresivo Harry para que su hermano se vaya-

Garrett sonrió arrogante y caminó hacia ellos, tomando a Michelle de su cintura y apegandola a su cuerpo para darle un beso en sus labios dejando a su hermano con la boca abierta.

-bueno, si fuese cocinera de mamá no diría nada... pero ella es mí novia, es mí cocinera particular -le guiña un ojo, Michelle se pone acalorada y se suelta de su agarre-

Harry hizo una mueca de medio lado, disgustado.

-¿Que me preparaste para comer amor? -le pregunta Garrett a la azabache y ve que ella tenía puesto una bandeja recién salida del horno-

-hice hamburguesas de lentejas y patatas fritas bebé... -dice un poco avergonzada-

-Genial, vamos a la habitación a comer mientras vemos una película -le propone y se va de la cocina- te espero arriba.

-Ok. -ella volteó a ver al niño Børns que estaba de mal humor y molesto, no quería mirarlos-

Amablemente Michelle dejó un poco de comida adicional para el joven Børns sobre la mesa y este se sorprendió aún más...

-buen provecho Harry, y disculpa -hizo una reverencia y luego pretendía salir corriendo con la bandeja de comida-

Pero Harry la detuvo con sus palabras...

-Espera... ¿Porque? -le pregunta, queriendo saber porque trataba de alimentarlo-

-tu me ayudaste, es lo mínimo que podría hacer por ti. Fue un gusto haberte conocido -le sonrió amablemente y se fue con su hermano a la habitación-

Harry no comprendia pero si, que ella muy amable y bondadosa. En su mente pensó que era mucha mujer para su hermano, por lo engreído que pretendía ser Garrett. Pero por respeto no haría nada malo para perjudicarla, solo serían muy buenos amigos y cómplices.
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Otro día que ella se había quedado a dormir un fin de semana por la noche en la casa de los Børns, estaba por casualidad Harry.

En una discusión en la habitación sobre una carta que le había llegado a Michelle en su casillero y Garrett lo sabía, lo puso molesto.

-¿Quien te dio esta carta de amor?

-no es una carta de amor, donde dice que me aman

-aca dice claramente que le pareces muy sexi y hermosa. -le reclamo Garrett y frunció su ceño-

-eso tal vez lo podrías haber escrito vos -le contesta ella indignada-

-Lo pienso pero yo no firmo como "J.L" -enarca una ceja- tampoco escribo cartitas, te lo digo de frente.

-Cierto, tú no eres un tipo romántico. -le contestó y evito mirarle-

-seguramente el idiota de tu ex te escribe esto para molestarme -menciono Garrett metiendo al Ross en la conversación-

-¿Porque metes a Ryan en esto? ¿Que tiene que ver? -dice aún más indignada-

-quien sea que deje de chingar que tú eres mía y estás embarazada. -contesto molesto-

-correcion: somos novios, no estamos casados, no eres de mí propiedad y este bebé es mío, no tuyo.

Harry quien estaba en la planta baja viendo una película en el living solo, vio que Michelle bajó rápidamente por las escaleras e intentaba irse, parecía muy molesta.

-¿Michelle pasó algo? -inquiere saber Harry observando como cargaba una mochila y abría la puerta principal para salir afuera-

-preguntale a tu hermano, adiós y buenas noches Harry. -dijo sin mirarle y Harry suspiró, jamás la había visto enfurecida-

Garrett bajo al rato y con cara de pocos amigos, se sentó al lado de Harry a mandar mensajes con su móvil.

-¿Que sucedió con Michelle? Ella se fue molesta... -como Garrett no hablaba, Harry siguió insistiendo- ¿Que le dijiste?

-nada, que no me agradan sus pretendientes -atino a decirle seriamente y lo miro fijo-

Harry se acomoda más en el sillón y sonríe arrogante

-vaya, la gatita tiene garras y rasguña ¿Verdad Garrett?

Garrett se lanza arriba de él y lo toma del cuello. Quedando a su merced.

-que te quede claro que es gatita que rasguña es mía, me pertenece -espeto el Børns mayor- en cuanto le pongas sus sucias uñas en ella te las verás conmigo

Harry hace unas señas en sol de paz, no pelearía contra su hermano.

-Tranquilo, no pienso robarte nada... Ya se que es de tu propiedad -menciona Harry con una media sonrisa-

Garrett lo suelta y se queda quieto en su lugar.

-ese bastardo me las pagará -mascullo el castaño de ojos café, Harry solo puso sus ojos en blanco de lo patético que se veía-

-Oye, teniendo una chica tan bonita como Michelle que te ama y está siempre contigo... ¿De qué te preocupa que otros la cortajeen? ¿No confías en ella? -le dice el joven Børns de ojos claros-

Garrett no dice y se pone a mensajear.

-listo, me voy. -menciona, dejando a su hermano con la ceja en alto-

-¿A buscarla? -vio como Garrett tomaba una chaqueta de cuero y un sombrero para irse-

Él se ríe y niega

-me voy de farranda con mis amigos. Brendon me está esperando en una fiesta... no me lo pierdo...

-Pense que te quedarías en casa -menciono algo confundido Harry no creyendo cómo había cambiado de aptitud y opinión tan rápido-

-Si, mis planes de cancelaron pero ella no me va a impedir que me divierta y salga. No va a arruinar mí sábado por la noche. -le contesta el Børns mayor con soberbia- hay comida de mamá en la nevera... nos vemos mañana.

Garrett se fue y se llevó las lleves del auto que le pertenecía. Normalmente no era de quedaste encerrado en su casa, siempre salía a divertirse con sus amigos y yendo de borrachera hasta el día siguiente.

Harry negaba de lo estúpido que era su hermano, no lo podía creer. Pensó que él día que tuviera una hermosa novia la valoraría como mujer y pareja. No sería un ridículo e hiria de borracho por ahí.

Fin del flashback.

Ryan escuchó su pequeña historia, no obstante, se sintió incómodo pero confiaba en que Michelle jamás se hubiera acostado con otro hombre que no sea Garrett o él mismo.

Ahora recordaba que en su adolescencia ella hablaba de un chico al que le decia "niño lindo", le molestaba pero no quería ser evidente porque no eran novios, no podía reclamarle nada.

Flashback.

-¡Angy! ¡Angy! -llamaba la atención Michelle muy emocionada buscando a su mejor amiga- ¡¡¡ANGY!!!

-¿QUÉ? -dijo ella un poco aturdida- estoy a tu lado ¿Que sucedió?

-¡No sabes lo que tengo para contarte!

Ryan y Spencer estaban sentados en los pupitres de atrás de las chicas, escuchaban sus conversaciones.

-¡No quiero saber tus maratones olimpicas con Garrett! -dijo Ángeles tapando sus oídos-

-yo tampoco quiero saber de las tuyas con el frentudo -menciono indignada pero me restó importancia- no es eso... No sabes a quién conocí el sábado...

Spencer presto atención y puso una sonrisa, esto era primicia. Ryan, en cambio, su cara no mostraba emoción alguna.

-Un príncipe azul -dijo muy emocionada tomando sus manos entre si- un niño tan lindo de ojos azules, tan amable... -suspiraba al recordarlo-

Spencer golpea por la cintura a su mejor amigo, a quien tenía a su lado.

-Rayos Ryro, tienes más competencia jajaja -dijo para molestarlo-

-no me molestes que estoy concentrado en estudiar -dijo en voz baja y molesto- ¿A quien le importa?

-a ti. -dijo el ojiazul burlándose de él y echándose a reir-

-amiga... pero tienes a Garrett... -escuchan decirle Ángeles a Michelle- ¿No me digas que te enamor....?

La palabra inconclusa hizo que al Ross se le cayera la lapicera al suelo y palidrciera una vez más. De por si, no aceptaba la relación con Garrett, no estaba preparado para otro rival más.

-¡No! ¡No! Este niño es imposible amiga -le contesta ella y se sienta en su lugar- es más chico que yo... tiene 14 años y yo casi 18.

Spencer la apunta entrometienose en la conversación de chicas.

-¡Encima de desvirgar a mí amigo, ya quieres abusar de otro! -exclama el Smith, y sintió un carpetazo en la cabeza-

-¡Cierra el pico metiche! ¡Yo no desvirgue a nadie! -contesto molesta Michelle y volvió a su lugar- rayos, ya no se puede hablar que las paredes tienen oído y encima escuchan mal o lo que les conviene. -atina a mirar al ojiazul que agacha la mirada apenado- como te decía Angy... Este niño lindo es pariente de Garrett. es imposible.

Ryan no quiso escuchar más y salió del salón sin dar explicaciones. Las chicas se quedaron sorprendidas porque él no atino a decirles nada.

-¿Y eso?

-tal vez se sentía mal -musita leve Ángeles-

-fue a hacer popo, ahora viene. -dice Spencer restándole importancia al asunto, conocía perfectamente a su amigo y estaba celoso, como no podía decir nada solo se fue a llevar sus broncas a otro lado-

Spencer no quería perderse la conversación pero le preocupaba que Ryan hiciera alguna idiotez por enojo así que fue tras el castaño.

-como te decía... Harry es el hermano menor de Garrett. Es muy lindo. -suspiraba la azabache con ilusión-

-ya bastante tienes con un Børns, meterse con dos sería un caos. -le recordaba Ángeles pensando en la personalidad de Garrett, como ella lo recordaba-

-Si, igualmente este niño no es como Garrett, nada que ver -decia dibujando sin sentido cosas en su carpeta para sacar los nervios- si sabía de antemano, me quedaría con el hermano jaja...

Ángeles río también por su broma, conocía a su amiga también y no intentaría nada en contra de Garrett porque en el fondo lo quería demasiado.

-¡Tienes que pasarme la receta para estar con dos chicos a la vez! -decia en broma Michelle tomando de su brazo-

-¿Que yo qué? Yo no ando quedando con dos chicos al mismo tiempo -decia nerviosa y empezó a repasar apuntes viejos para desviar el tema- solo salgo con Brendon

Michelle la codea y sonríe.

-¿Y que tal el profe Dallon? -le guiña un ojo- ya se que te gusta, no te hagas la sonsa conmigo

Ángeles trago grueso y desvío su mirada, no caería un su trampa.

-eso te lo inventas tú...

De pronto irrumpe en el salón el profesor Dallon Weekes y Michelle con malicia le toca el hombro a su amiga, haciendo un gesto que él llego.

Cuando volteó a mirar al frente, sin querer ambas miradas se cruzaron y él no dejaba de mirar a su pupitre.

-¡Rayos! -ella se ruborizó, puesto que Dallon había llegado para empezar la clase vestido con una camisa negra, un jean oscuro y sus ojos azules observandola desde el escritorio-

Ella tosió y agachó la mirada, más colorada que un tomate.

-¿Que me decías? -Michelle sonrió victoriosa puesto que ella había ganado una vez más dejándola en evidencia-

-nada, mejor que callo. -dice Ángeles tratando de disimular su sonrojo-

-¡Hola bebé! -irrumpe el Urie de repente asustando a las chicas, se pone delante de Ángeles para tapar al profesor y luego se sienta a su lado- me voy a sentar aquí cerca tuyo, ahí le aviso a Garrett para que venga.

-¡Ay no! -dijo Michelle aborreciendo su presencia- ¿No tienen otro lugar a dónde ir? El salón es espacioso.

Brendon puso cara seria, no le agradaba que ella lo contradiga en todo.

-amor, ese lugar está ocupado por Ryan y Spencer. -le dice Ángeles para ver si este cambiaba de opinión-

-¡¿Ryan?! ¡¿Donde está?! -dijo emocionado como si se tratara del oxígeno que respiraba cada día-

-no lo sé, no lo traemos en el bolsillo. Anda a buscarlo y dejar de chingar acá. -le responde Michelle poniendo sus ojos en blanco-

-No, me voy a quedar aquí. Si viene me mudo y ya está -le guiña un ojo- siempre es lindo estudiar al lado de la persona que más amas y aprecias en toda tu vida -le contesta Brendon poniendo su mano al hombro de su novia-

Ángeles suspiró, no lo soportaba. Cuando sabía que tenían clases con el profesor Weekes, Brendon se las ingeniaba para molestarla y estar pegada a él como chicle.

Dallon tosió y repasó la lista de alumnos presentes.

-¿Ryan Ross, Spencer Smith? -pregunto y todos se hicieron los desantendidos-

-estan afuera profe, en el baño. -menciono Michelle como buena alumna-

Dallon pensó que si ellos habían asistido a la Escuela, debían volver para estar presentes en su clase y no perderse de nada.

-bueno, Urie vaya por ellos -ordeno el profesor Weekes-

Brendon enarco una ceja indignado, no quería alejarse de su novia por un minuto.

-¡Oiga profesor jirafon! ¿porque tengo que ir yo? ¡Que vaya Michelle! -le apunta a la chica- ella es su amiga.

Dallon se cruzó de brazos por la objeción del Urie y en querer rebelarse ante su decisión.

-no te pedí que vayas, te di una orden. -menciono el Weekes serio- aparte no voy a mandar a una señorita a ir a un baño de hombres. Vaya usted que tiene más notas más bajas del curso.

El resto de sus compañeros se echaron a reír dejandolo en ridículo. Mientras que Brendon estaba más molesto.

-con mucha más razón debo quedarme... sino me perderé de su clase y no voy a aprender nada. -se justificó solito haciendo una sonrisa de medio lado-

Dallon también sonrió arrogante.

-no, hasta que no estén todos los presentes en el curso la clase no va a empezar. -ordena y aclara para el resto, dejando sorprendidos a la mayoría- mientras más rápido vayas, más rápido empezará la clase. -le guiña un ojo-

Brendon refunfuño algo y lo maldijo en voz baja saliendo disparado como un cohete.

-Angeles... serías tan amable de darle a tus compañeros un repaso rápido de lo aprendido la última clase. -tambien le ordena a la chica, a quien la tenía bajo su vista-

Ella asiente y sonrie, puesto que tenía un apunte preparado para esta clase de situaciones.

-viste Angy... eres la preferida del profe... -le dice Michelle a su amiga en voz baja-

Ángeles muy segura de lo que tenía de decir delante de sus compañeros, no tenía vergüenza ya que la carrera de medicina era lo que ella estudiaría. Se preparaba mentalmente para esa ocasión y bajo el ala de su mentor, que la guía y daba los mejores consejos.

Fin del flashback.

Ryan ladeó su cabeza tratando de borrar aquellos recuerdos malos. Harry sólo observaba el pasillo esperando que la enfermera Ángeles saliera de la revisión de su sobrino.

Cuando volteó y presto atención venía caminando despacio un oficial policial con una planilla en mano. Este señor se plantó frente a ellos y los observó...

-¿Si oficial? -indaga el Børns menor-

Él mira su planilla y luego habla...

-busco al señor George Ryan Ross III -espeta y el castaño levanta la mano inocentemente- ¿Tiene un momento?

Ryan asiente y este oficial le indica donde podrían hablar a solas.

-disculpe, mi nombre es Christoph Schneider y estoy investigando el caso... -se fijo en la planilla- de su pareja: Keltie Colleen.


-estoy a su disposición oficial. -dijo sin más fuerzas el Ross-

-ella está arrestada por la agresión violenta hacía la señorita Michelle y su hijo Alex Børns. -menciono- entre otras cosas... ella ha sido denunciada por el Dr. Weekes por robo, ultrajo y abuso hacía su persona. ¿Usted daría su testimonio? ¿Colaborará?

Ryan asintió sin más.

-¿Que sucedió con ella? -indaga el Ross-

-ella presento una contra denuncia hacia usted diciendo que le fue infiel con la señorita Michelle -relataba lo que decía en la denuncia que la misma Keltie reportó- que por eso motivo reaccionó de tal manera.

-Entiendo. -Ryan nunca negó su romance oculto con Michelle, no podría mentir a la ley-

-¿Presentará una demanda contra ella? -sugiere el oficial Schneider-

Ryan dudaba ya que Keltie le devolvía la demanda y podría complicar la vida de Michelle.

-Si, no lo hace él yo si estoy dispuesta... -escucho una voz femenina- hola Oficial. Mí nombre es Ángeles Weekes y esa mujer no puede quedar impune. Le hizo un gran daño a mí amiga y a su hijo, nos robó y abuso de mí esposo. Además, mintió. Clonó archivos de mí embarazo desde la base de datos de la PC, y tengo pruebas que ella buscaba comprar un bebé recién nacido en el mercado negro.

El oficial la observaba un poco sorprendido y anotó todo lo que la mujer le había denunciado.

-Ella no puede quedar libre -dijo con enojo-

-eso quería hablarle al señor Ross. Pero antes... -el oficial Schneider saco de su bolsillo el anillo de bodas de Dallon, el cual Keltie había robado de su escritorio antes de huir- esto le pertenece.

Ángeles añoro aquel anillo, tan especial y tan significativo para la pareja.

-Gracias oficial, no pensé que lo recuperaría tan rápido. A mí esposo le agradará la noticia. -dijo muy animada y guardó su anillo-

Ryan suspiró, sentía mucha presión.

-con respecto a usted Ross -lo mira al castaño- ¿Conoce a esta persona? -le enseña una foto de un muchacho rubio de rulos, pelo corto y tez blanca-

-jamas lo había visto en mí vida. ¿Quien es? -indaga el Ross-

Ángeles también mira la foto y niega, tampoco lo conocía.

-Esta persona es quien quiere pagar la fianza para liberar a la señora Colleen. -menciona Schneider sorprendiendo a ambos-

-¿Que? ¿Porque? -preguntan al unísono-

El oficial da vuelta la planilla y lee la investigación hasta el momento.

-Él quiere que Keltie quede libre y así poder llevarla a vivir a Australia, él se haría cargo de ella.

-ella mencionó algo de Australia -musito leve y cerró su puño con bronca- quiera huir con mí esposo a ese país.

-¿Y que tiene que ver ese tipo con Keltie y Australia? -le pregunta Ryan dejando de lado lo que Angy había dicho-

-por lo que dice la investigación, urgando su móvil... Al parecer Keltie Colleen mantuvo por mucho tiempo una doble vida amorosa. -Ryan enarco una ceja- una relación afectiva con usted y una relación sexual con esta persona.

Ángeles y Ryan no podían creer lo que escuchaban de la verdad que había soltado el oficial.

-Sea que tenga o no un amante no acepto que esa mujer quede libre. -le dijo no muy de acuerdo con la idea- Temo por mí familia y por la de mí amiga. Podría escapar y volver a hacernos daño.... esa mujer debe estar encerrada ya sea en la cárcel o un psiquiátrico.

Ryan se sentó un rato mientras dejaba que Ángeles se desquitara su indignación discutiendo con el oficial policial.

-¡Alex! -escucharon que Harry había mencionado el nombre del niño con mucha felicidad-

Inmediatamente Ángeles fue tras él.

-despues hablamos oficial, voy a colaborar. -dice el Ross y con desesperación quería ir a la habitación de Alex para ver su estado-

-voy a tomar testimonio a la pareja Børns, cualquier cosa lo contacto Ross.

Ryan salió disparado hacía la habitación del niño con mucha impaciencia.

Alex sonreía y estaba acostado siento tomado de la mano de su tío Harry.

-¡Alex bebé! -decia con mucho cariño Angeles mirándolo con ternura- ¿Cómo te sientes?

-Bien tía Angy. -contesta obediente el niño y mira que por detrás aparece Ryan- hola

Ryan solo saluda moviendo sus manos, algo temeroso.

-¿Estás bien? -pregunta el castaño adulto-

-Si. -él contesta algo cortante y observa a su vez la habitación, nota que no era su cuarto, había mucha luz y olía a lavandina- ¿Mamá? ¿Papá? ¿donde están? -pregunta mirando a los adultos buscando respuesta-

-ellos... -Harry no sabía que decirle, no quería mentirle pero Alex era un niño y era muy persuasivo, unido a sus padres-

-Ellos estuvieron aquí contigo y ahora están descansando en casa -le responde Ángeles y se acerca para acariciar su frente- tuviste un pico de estrés y eso afectó a tu alergia severamente. Ya verás como la tía Angy te cuidara y pronto estarás en casa.

-Debes hacer caso a los médicos y a la tía Ángeles ¿Ok Alex? -dice Harry dándole una orden al niño para que obedezca y no se ponga rebelde- nosotros te cuidaremos, tu solo descansa.

-Ok. -Alex observó a Ryan como estaba preocupado por él, no dijo nada y se quedó tomando distancia de sus amigos- me será difícil dormir sin Dottie y Jessy en los pies, ellas duermen conmigo -menciona el pequeño Alex-

A lo que Ryan observa que en la silla había quedado el regalo que Ángeles le había traído: un oso de pelpa.

-Toma... -le entrega un obsequio amablemente- no es lo mismo que un animalito pero te sentiras acompañado.

Ángeles obviamente no diría que era su regalo, pero estaba bien si Ryan se lo daba.

Alex asintió y aceptó aquel regalo, lo tomó con sus brazos y lo abrazo fuerte. El Ross como muestra de cariño se inclino hacia él y depósito en su frente un cálido beso fraternal.

-me alegro mucho que esté bien, te quiero.

Ryan sin más, salió de la habitación sin poder escuchar una respuesta de su hijo, quería darle su espacio ya que el brutal golpe de Keltie lo había dejado conmocionado y ahora necesitaba que el niño volviera a confiar en él. Sin querer volvió a tirarse sobre el asiento del pasillo y se quebró, unas cuantas lágrimas salieron de sus ojos avellanas.

-gracias papá, gracias Dios.

Ángeles siguió revisando al pequeño Alex y preguntándole cosas, para saber si había sufrido algún golpe dañino en su cerebro. Hasta el momento todo marchaba bien, no parecía haber secuelas físicas en el pequeño.

........

-¿Michelle? ¿Michelle?

Garrett intentaba entablar una conversación con su mujer pero ella estaba ida, no quería hablar con nadie.

-¿Amor? -seguia intentando-

Michelle estaba recostada en la camilla mirando al cielo raso, observando la nada misma. Pérdida. Pensando en sus hijos y su salud.

-Garrett... quiero ver a Alex... y si nuestro bebé... -ella cubrió su rostro, tenía lágrimas que salían de sus ojos y sentía una profunda angustia-

-Tranquilo, Alex está con Harry. -menciono el Børns tratando de ser paciente y no alterarse para que ella no se preocupara- del bebé tendremos que esperar al Doctor y los exámenes médicos. No te preocupes...

-Pero este bebé... -ella se angustiaba aún más- este bebé era muy importante para nosotros... quería tener este bebé contigo... Quería que seas padre... -ella no soportó-

-Que llores no aporta nada Michelle. Se fuerte por nuestros hijos, podremos intentarlo una vez más en caso que... -el tampoco estaba listo para escuchar esa decisión, no quería idealizar que su bebé había muerto en el vientre de su mujer, tenía una ligera esperanza-

Cuando volteó de lado vio que llegaba el doctor Weekes con unos papeles en mano y con cara de seriedad en su rostro.

-es Dallon... -musito bajo y tomó la mano de su mujer para esperar el parte médico-

-Hola señorita Børns. ¿Cómo está? -le pregunta el Weekes y se sienta a su lado para tomar su presión-

-Bien Dallon, no hace falta tanta formalidad. Ya no conocemos. -le respondió ella y limpio sus lágrimas- ¿Cuando podré volver a casa?

Él revisa que todo estuviera bien, desde la presión arterial, el oxígeno en sangre y que el suero llegará bien a su cuerpo.

-ya están los estudios del embarazo. -espeto el Weekes sin dar muchos rodeos-

Garrett sintió que se le bajaba la presión, veía demasiado serio al ojiazul.

-¿Está todo bien con nuestro bebé? -pregunto Garrett impaciente, Michelle también estaba igual-

Dallon sonrió.

-El embarazo sigue en pie. Pueden quedarse tranquilos. -Michelle y Garrett se abrazan, este último le da un pequeño beso para festejar el triunfo- pero... pensamos con nuestros colegas que gracias a la conmoción del ataque que podría adelantarse a la fecha prevista de parto.

Ambos se quedaron sorprendidos y Michelle acaricio su pancita.

-no importa, mientras mí bebé nazca sana y salva...

-puede que nazca a mediados de Marzo o Abril. -menciono según lo leído en el informe médico- con respecto a lo demás está todo bien, seguramente en dos días le den el alta y puedan volver a casa.

-que bueno Dallon -se relajo Garrett y sonrio- siento un alivio.

-se lo que significa tener un bebé. Pase por su situación y temí por perder a Knox y Angy cuando estuvimos en la playa. -le relató breve- me alegro que estés bien Michelle, por vos, tu esposo Garrett y tu hijo.

Michelle ahora lloraba de emoción, no cabía emoción al escuchar que su embarazo estaba bien y no corría peligro. Antes de que el Weekes se vaya y dejara a solas a la pareja Børns, ella le ordenó que su amiga la viniera a visitar más tarde para platicar.

Garrett se quedó a su lado.

-te dije que estaría todo bien.

Él se estaba por ir cuando vió que Angeles estaba en la puerta esperando entrar para ver a su amiga. Antes de que se fuera a ver a su hijo, ella habló...

-Garrett.... gracias.

Él volteó y la observó, estaba con la cabeza a gacha y su mano entrelazadas. Seguramente arrepentida de algo o avergonzada.

-¿Porque?

-por todo. Por estar aquí cuidandome, por protegerme de esa loca, por cuidar de Alex y querernos siempre. No siempre tengo el tiempo de agradecerte porque estamos peleando pero aprecio tanto todo lo que haz hecho por nosotros... No sé que sería sin ti. -decia tímida la azabache-

Garrett sonrió y volvió para inclinarse besando el dorso de su mano en señal de aprecio, que el estaba de acuerdo con sus palabras y la aceptaba.

Ella se quedó aún más sorprendida cuando esté se puso de pie y beso sus labios para darle su momento.

-pensamos igual. Descansa que después vuelvo para alimentarte.

-no hace falta -dice ella avergonzada-

-no vas a poder comer con el suero en tus brazos y necesitas alimentarte. Nada de objeción. -él sonríe y sale de la habitación-

Ángeles entra a la habitación y nota a su amiga que estaba pendeja viendo cómo Børns se iba.

....

-¿Cómo estás campeón? -escucha la voz de Garrett-

Ryan despertó, justamente cuando dormía en el pasillo del hospital.

-¡Hey! ¡Despertaste Ryan! -le hablo Harry que estaba a su lado chateando por mensaje con su novia- te dormiste del sueño.

Harry, el también traía profundas orejas en su rostro pálido.

-tu tampoco te ves muy bien que digamos. ¿Acaso dormiste algo? -le pregunta Ryan a Harry-

Este niega y sonríe.

-mi novia también dice que soy un vampiro, duermo muy poco.

Cómo eran las 18 hs (horario de visitas para los pacientes) Garrett había ido a visitar por un lapso de una hora para ver a su hijo.

-bien papi... Estoy bien. Me duele la cabeza y un poco el brazo.

-te vas a recuperar, eres fuerte. -le contesta Garrett-

-¿y Mamá? Quiero verla. -se lo escuchaba preocupado-

-Ella está bien, no pudo venir por el embarazo pero me dijo que te diga que te ama mucho y desea que te recuperes así pronto volveremos a casa con ella y las perritas. También te extrañan.

Alex se quedó callado por un momento, cosa que inquieto a Ryan. El castaño se levantó despacio y se acercó al umbral de la puerta para saber más acerca de la reacción del niño.

-¿Que pasa? ¿No estás feliz? -inquiere saber Garrett y le da de comer un poco de yogur-

-es que... Cuando mamá sepa que estoy aquí se molestará. Tengo miedo. -le dice el niño- me va a regañar feo -el estaba asustado por la reacción de su madre cuando supiera que estaba internado-

Alex sin querer se angustia y solloza.

-¿Quien dijo que ella se molestará contigo? -arquea una ceja Garrett indignado- te prometo que si se molesta contigo yo la regaño ¿Ok? -le guiña un ojo dejando en claro que no pasaría nada bajo su control-

Alex asintió y limpio sus lágrimas. El Børns adulto notó que el niño traía un osito en sus brazos, el cual se estaba aferrando a él con fuerza.

-¿Y ese osito? ¿Quien te lo regaló? -indago Garrett un poco curioso-

-Ryan. -solo dijo su nombre- me vino a visitar un rato con Harry y la tía Angy.

-Ok. -Garrett se lo pidió para observarlo y lo apreció- es bonito y dice tu nombre aquí. -le señala la panzita del oso, donde su nombre estaba puesto adentro de un corazón Azul-

Alex sonríe un poco.

-¿Que quieres hacer cuando salgas de aquí? -le cambia de tema Garrett- ¿A dónde te gustaría ir?

-¡A Disney! -responde emocionado-

-para tu cumpleaños prometí llevarte. -le dice Garrett y une su dedo meñique al del niño- es una promesa ahora, pero primero debes hacer caso a los médicos que pronto estaremos en casa.

-gracias papi. -sonrio Alex cambiando su actitud, de pesimista a ser positivo-

-te amo hijo -Garrett lo arropa en la cama y le deja un beso en su frente antes de irse- mañana vendré a verte.

Antes de que saliera Garrett de la habitación, Ryan vió como Garrett se despedía de su pequeño hijo y luego tomó su bolso. En un instante, una milésima de segundo notó una silueta de un hombre sentado al lado del pequeño Alex, no podía identificar su rostro pero se parecía a su difunto padre, quien acariciaba el cabello al niño y sonreía a la vez. Eso hizo dejarlo en blanco, no sabía si intervenir pero cuando reaccionó tenía de frente a Børns. Cara a cara, sin querer lo había chocado.

-Ryan. Despertaste. -menciono Garrett serio y poniéndose de frente-

-Si.

Garrett observó que su hermano Harry estaba mirando la escena de atrás, así que no hizo nada ni ningún saboteaje para rebajarlo.

-Alex está bien, posiblemente mañana o pasado le den el alta médico. -le hablo Garrett-

Ryan asintió y por dentro sintió un alivio que nada malo le había pasado al pequeño.

-Gracias por cuidar de él -solto de repente, dejando sorprendido al castaño por ese rebaje de su parte-

-no... -nego Ryan humildemente- fue mí culpa... Si lo hubiera cuidado mejor... -él aún se sentía culpable así que Garrett le apoyo su mano sobre su hombro-

-esta bien, no todas las mujeres son iguales. Te puede tocar una mujer maravillosa como Michelle, una chica simple como Ángeles o un diablo como Keltie. -Ryan no dijo nada acerca de su comentario- pero no es tu culpa, ya todo pasó y se va a solucionar.

Harry se lanzó por detrás de Ryan para meterse en la conversación.

-¡Oye! ¿A mí no me agradeces? -dice un poco burlón-

Garrett sigue sin expresión alguna en su rostro.

-Gracias.

Harry arquea una ceja.

-Eso no es un agradecimiento genuino, debes sonreír más -Se quejaba el Børns menor, Ryan sonreía de la incomodidad- Ash, es Garrett... Estoy pidiendo mucho. -rodo sus ojos pensando que era imposible- me desvivo para cuidar a mí sobrino y ni un gracias.

Harry se fue a echar al asiento de la sala de espera. Ryan volvió con él y si le apoyo su mano en su espalda.

-Oye gracias -le sonríe y se sienta a su lado- gracias por estar al pendiente y cuidar a Alex. Estaré eternamente agradecido por tu humilde ayuda Harry.

Él castaño de ojos claros casi llora de la emoción.

-¡eso! -festeja y le apunta a su hermano- ¿No quieres ser mí hermano Ryan?

Ryan sonríe pero no contesta su broma.

-¿Tienes hermanos verdad? -inquiere saber más el ojiazul-

El Ross niega.

-soy hijo único.

Harry dejo de sonreír porque le parecería triste no tener hermanos. Aunque con Garrett no se llevaba de diez lo quería harto y no imaginaba una vida sólo.

De pronto llega Garrett y se planta frente al Ross, quien estaba sentado.

-Ryan. ¿Quieres ver a Michelle? -le propone el Børns sin imputarse-

Este traga grueso y no sabía si confiar o dudar, solo asiente.

-ella está internada en el edificio de adultos en la habitación 703. Solo golpea que yo estaré allí con ella.

Sin más, él se fue dejando al Ross con la boca abierta. Harry sonrió y sabía que él no podía verla porque estaba a cargo de vigilar a Alex en el turno noche.

Luego de pasar por esa tensión notó que una mujer delgada de tez blanca pálida y ojos azules, cabello azabache venía hacia ellos con aires de superioridad. Una mujer empoderada y joven.

-Amorcito te estuve buscando -dice la mujer azabache plantandose adelante de los varones, Ryan estaba confundido-

-Oh Katy bebé -Harry toma su mano y la sienta a su lado, ella le da un beso para saludarlo- justo vino mí hermano, estuvimos platicando un rato sobre Alex y no estuve al pendiente de tus mensajes, discúlpame cariño.

-¿Katy o Katia? -musito leve el Ross enarcando una ceja-

-es mí novia y prometida Katy. -le presento Harry a su novia y ella sonríe amablemente- él es Ryan, un amigo.

-encantada, un gusto. -ambos estrechan sus manos-

-Ella es abogada y nos ayudará con el caso contra Keltie, no tendrá problemas. -anuncia Harry dejando a Ryan sorprendido- yo soy contador, lastimosamente no estoy al tanto en este ámbito.

-¿Y como se conocieron? -indaga el castaño un poco curioso-

-Ella es hija de una de las clientas de mí tío Till Lindemann, que ya conoces y ambos estudiamos en Inglaterra hace algunos años.

Ryan cuando más la observaba no podía dejar de ver el calco de Michelle, se parecían mucho. Ambas de Tez blanca y pelo azabache oscuro, a diferencia de sus ojos que eran azules. En su mente pensó que tal vez Harry se había enamorado de Michelle en el pasado y había conseguido a una mujer igual a ella.

-Bueno, sería genial, Michelle y Garrett estarán satisfechos que ella los represente. -menciona el Ross y espía un poco para la habitación de Alex, quien estaba recostado en la cama viendo algo en una tablet que Garrett le había traído- en un rato iré a verla.

-Chicos ¿no quieren pizzas? -pregunta la azabache de ojos azules- traje porciones para cenar esta noche.

Katy sorprendió a ambos con porciones de pizzas.

-¡Wooow! ¡Pizzas! ¡Mis favoritas! -exclamo Harry muy contento y cuando ella abrió el tupper degustó una porción que se la llevó a su boca- soy muy afortunado en tenerte bebé, me salvaste la noche.

-Cariño, debes descansar. Cuando Alex se duerma lo vigilare mientras tú también duermes un rato ¿Si? -dice la muchacha mirando a su novio- no quiero que estés tanto tiempo sin dormir.

-Obvio que no... pero es Alex... -Sonrie Harry y cuando nota la presencia de Ryan hambriento que solo ve la porción de pizza como un tesoro- ¡Oye Ry! ¿Quieres una? -el castaño le ofreció otra porción que no había sido tocada por ellos-

Ryan no sabía si contenerse o comer, no se había alimentado bien y su estómago crujía.

-Come sin vergüenza -le sonríe el joven Børns-

Ryan comió aquella porción como si fuera el último bocado que había probado en su vida, estaba muriendo de hambre y con todo el asunto de Alex/Michelle y Keltie su estómago era un revuelto.

-Gracias, moría de hambre. -declaro una vez que terminó de comer-

-Sirvete más si quieres -le insiste Harry pero él también estaba hambriento-

-no, está bien, te agradezco. Si fuera por mí te dejaría sin comer a ti y a tu novia pero no puedo hacer eso.

-yo estoy a dieta, por mí no se preocupen -se reía la muchacha que estaba en medio de la conversación- le dejaré mis porciones a Alex.

Ryan se inclinó ante ellos como muestra de agradecimiento.

-sabes Harry, no te conocía mucho pero ahora entiendo porque Mich te tiene mucha confianza. Eres un gran tipo. Me caes mejor que Garrett -solto el Ross un poco avergonzado por sus palabras dejando a Harry sorprendido-

Rápidamente se fué a ver a Michelle, estaba sumamente preocupado pero también le inquietaba si ella se molestaría con él por haberle fallado.

Cuando fue hacía la habitación 703 se encontró con Garrett en la sala de espera cruzado de brazos y con los ojos cerrados.

-Hola Garrett. -hablo el Ross un poco nervioso, este sólo abrió sus ojos y notó su presencia- ¿Cómo está ella?

-Mejor, seguramente en dos días le den el alta médico, por suerte su embarazo no salió afectado -dijo el Børns con una sonrisa y tranquilo en su lugar-

-me alegro mucho que no le haya pasado nada -escucho decirle, ahora se sentía aliviado-

Ryan se apegó sobre el umbral de la puerta de la habitación y se debatía mentalmente si entrar o no.

-queria decirte una cosa... -Garrett se levanta de su lugar y le advierte- por nada en el mundo le digas a Michelle que Alex está internado aquí en este hospital, lo que menos quiero hacerle es causarle inquietud y desesperación. Se volvería loca e intentará irse por su propia voluntad. ¿Ok?

Ryan asiente.

-¿Y que le digo? -sugiere el Ross una idea para no meter la pata-

-que él está a cuidado de Harry y mis padres, está bien, que la extraña y que desea que vuelva pronto a casa. Solo eso. Omite todo el tema de lo sucedido en tu departamento. -insistio el Børns mirando serio al Ross, intimidandolo con su mirada- yo después le contaré más tranquilo cuando estemos en casa.

-entiendo.

Ryan suspira por la presión y el estrés, así que decidido toca la puerta de la habitación esperando la aprobación de la azabache para entrar.

-¿Quien es? -escucha decir desde el otro lado de la puerta-

-Cariño, tienes a alguien que quiere ver cómo estás. Te viene a visitar y va a pasar para hablar un rato contigo. -anuncia Garrett con su voz varonil-

-mientras no sea la Brendan, que pase quien quiera -menciona la muchacha-

De pronto, antes que Ryan se metiera en la habitación para ver a Michelle aparece una persona delante de ellos.

-Hola, soy el oficial Schneider. Buscó a Garrett Børns.

Ambos jóvenes se miran entre si, uno está un poco ansioso y preocupado. El otro serio, como de costumbre.

-Continuara-


¡Holis, nuevo cap! Espero que les haya gustado, hasta la próxima ☺️

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