Narra Alex:

-Alexander.... Alexander... -esa voz otra vez-

Estaba en una plaza un poco solitaria caminando y conmigo traía una pelota, una perrita color chocolate corrió hacia mí contenta y movía su cola para jugar.

-Amor... Cariño ¿Donde estas? -escucho a la lejanía la voz de mamá, cuando aparece por detrás de unos arbustos la veo suspirar de alivio, ella era más joven- Alex bebé...

Corrimos emocionados hasta ella y le entregué el balón, mientras ella me abrazaba vi por detrás una silueta oscura... no me dio miedo pero si mucha intriga... Esa silueta no tenía rostro, era una figura oscura que se escondía por detrás de mamá.

Me quedé mirándola fijamente para ver qué hacía pero hasta la perrita fue hasta esa figura y la sostuvo entre sus brazos.

No podía dejar de ver y de pensar de quién se trataba...

-Tu padre... -decia una voz en mí mente-

Cuando volteé no vi a mí padre por detrás mío, y cuando enfoque de nuevo mí vista en mamá aquella silueta había desaparecido y mí perrita también.

-¿Mami y mí perrita?

-¿Que perrita amor? -ella observó hacia todos lados- estabamos jugando al soccer un poco. Toma, es tu turno de patear...

Empecé a observar hacia todos lados y no vi peligro inminente... sólo me quedo la inquietud.

Al despertar abruptamente unos ruidos molestos me hicieron abrir los ojos y esta vez no era Leah. Ella llegó al cuarto enseguida, iba y volvía con sus libros a no se donde.

Me restregue los ojos de la pesadez y ví la hora en mí mesa de noche: las 7:30AM. Que descaro de despertarme tan temprano un sábado cuando no tengo colegio ni entrenamiento.

Leah entra con una escoba y la pala para juntar la basura, empieza a barrer y a juntar lo que no sirve...

-¿Me vas a ayudar? ¿O voy a tener que juntar tus porquerías? Estás bolsas de frituras son tuyas. -empieza a retarme pero no le hago caso ya que ayer obligatoriamente me tocó limpiar a mi-

A cambio le saque la lengua...

-Tu limpia, no estaba en los 10 mandamientos de mamá que debía ayudarte. -segui acostado y tome mí móvil, Oh cierto que hoy era la fiesta de cumpleaños de Melissa. Nicky y mis amigos estarán ahi así que les envié mensajes-

De la emoción que sentía era muy importante para mí ir asistir a esa fiesta. No por las chicas sino porque nunca había ido a una fiesta con mis amigos. Quería divertirme como cualquier adolescente normal estadounidense.

De pronto entra mamá de golpe y me cubro con mis sábanas.

-buenos días mis niños, está su desayuno en la mesa. -menciona ella muy tranquila (que extraño, seguramente planeaba algo)- Alex ya se que estás despierto te vi en línea por Whatsapp, los espero a los dos abajo. -anuncia y se marcha-

Ash ¿Como sabía?

Leah asintió y dejo la pieza a medio terminar.

-Oye, te faltó limpiar la habitación, no te hagas... -le señaló la mugre revuelta por todos lados, ropa alborotada-

-No puedo limpiar con la panza vacía, haré un break para desayunar. -sonrei orgullosa, saliéndose con la suya- y este alboroto es tuyo... mira nomás... Estás calcetas olorientas son tuyas...

Leah huele mis medias con olor y las lanza a un cesto de ropa sucia y tenía un cartel "lavar Alex", el cual ya estaba muy cargado y ella tenía el suyo particular.

Me levanto y voy al baño para lavar mis dientes, mí rostro. Al mirarme al espejo podía notar los rasgos de mamá como así también sus mismos color de ojos... De lo único que estaba agradecido con Diosito porque después en personalidad me lleva la chingada.

Cuando llegué a la mesa estaban unos tipos extraños colgados en el extremo de la cocina instalando algo...

Me quedé mirando fijo mientras mí madre estaba muy emocionada viendo algo en su laptop.

-Ehm má... -musito en voz baja- ¿Quienes son?

-estan instalando las cámaras de seguridad que les dije -menciono muy tranquila, temi un poco y saque el rosario para rezar-

-asi que era verdad -dice Leah comiendo una galleta-

-tu madre no se enoja y al habla al cohete. Ese listado que les di lo tienen que cumplir y nada de objeciones. -empieza otra vez, yo pongo los ojos en blanco-

Aquellos tipos parecían que habían terminado de instalar la cámara y se quedaron ahí, vi como uno de ellos observaba a mamá de manera extraña.

-Señorita Michelle... -llama uno de los tipos, uno era gordo panzon y el otro un delgado carita de mandril- ya terminamos aquí ¿Donde instalamos la tercera?

Mí madre se levantó y fue hacia el living, esos tipos la siguieron. El cara de mandril la observaba con lujuria y eso me chocaba.

-bueno, aquí es el living -señalo y yo estaba detrás de ellos para saber que hacían- necesitaría que la cámara estuviera en ese ángulo y apunte a la puerta principal.

-Entendido. -el tipo gordo va por su escalera y el otro tenía una caja donde ahí estaba la cámara para poner en funcionamiento-

Mamá volvió a la cocina y yo me quedé vigilandolos. Algo en ellos no me agradaban, tenían un aura oscura.

-¿Se te perdió algo pequeño? -se me burla el gordo-

Simplemente lo ignore y volví a la cocina con Mamá.

-mira, puedo verme má, que genial. -decia Leah asombrada y viendo en la laptop como seremos monitoreados de aquí en más- que buena idea.

-que pésima idea -le corrijo y ya estaba de mal humor culpa de esos sujetos-

-¿Donde habrán cámaras? -pregunta Leah como siempre de metiche-

-en la puerta de entrada con salida a la calle, aquí en la cocina y el living, posiblemente una cuarta en el pasillo. Pero no pondré en nuestras habitaciones o baños ya que estando en el pasillo es más que suficiente, se escucha todo.

Woow que feliz que estaba, ahora me sentiré más controlado que antes. Mí cara de felicidad lo podían notar a distancias.

-Alex aquí te conseguí unos cuantos libros para que estudies en el día de hoy. -eso dice mí madre mientras yo tomaba mí café-

Vi los 6 libros de gran grosor y trague grueso con café, saliva y todo.

-¿Que? ¿O sea que me voy a pasar el resto de mí sábado estudiando? -me sentí hasta ofendido-

-¿O como piensas que subirás tus notas? ¿Acaso se aprobaran solas? -ella me contesta igual de sarcástica-

Pongo los ojos en blanco y suspiré, Leah me trae los libros y los deja a mí lado ¿Desde cuándo tan amable?. Después se vuelve a su lugar.

-¿mami no hay leche vegana? -decia Leah y tenía miedo de tomar lácteos de verdad porque va en contra de sus creencias veganas las cuales practicaba con papá-

-Prueba cariño, es lo mismo. No te caerá mal. -le dice mí madre- tu padre porque está loco y se tiene que hacer como él diga. -¿A poco ella no es así?-

Leah se tuvo que tragar la taza de chocolatada con todas sus fuerzas y comer pan de molde. Que chingada tener personas veganas en la mesa.

-Señorita ya está... -menciona uno de los estúpidos que estaban de instalador-

Mí madre se levanta y yo voy tras ella. Hablan unas cuantas cosas acerca del uso correcto y del manual. Le paga y los acompaña hasta la salida para que se vayan.

Cómo mamá cerró la puerta para que no saliéramos afiera, algo malo intuía y salí por la puerta trasera que inducía al jardín.

Me quedé observando a la distancia que tanto platicaban y justamente el tipo gordo con cara de morboso estaba adentro de su coche pero el cara de mandril estaba cerca de mí madre.

-señorita con todo el respeto, usted es muy bella... -decia el tipo haciéndose el buenito delante de mí madre-

-pues gracias, nadie me lo ha dicho tan así -dice ella y no entendía que hacía todavía ahí y no entraba a la casa, seguramente le gustaba coquetear con ese tipejo-

-¿No quisiera salir conmigo? Le propongo una cita, la mejor de su vida. -ella observa hacia adentro y no le prestó atención del todo-

-pero tengo chicos... -menciona mí madre ¿No me digas que se dejaba cortejar por este mal tipo?-

-ni madre, les pago unas pizzas y se pueden quedar viendo Netflix aquí mientras usted y yo.... Ya sabes -le hace saber el descarado-

-creo que te estás confundiendo. -ella se da media vuelta e intenta irse pero cuando intenta hacerlo el tipo quiere jalar su brazo-

Ahí salgo en su defensa y le tomo su brazo.

-¿No entiendes cuando es un NO? Estupido -me enoje y estaba que me llegaba el diablo- deja a mí madre en paz.

-¡Alex no! ¡Espera! -ella alza su voz y cierro la puerta desde afuera-

-¿Que te pasa niño? ¿Quieres pelear? -el tipo pegó un jalón de su brazo que casi me tira al suelo pero me sostengo de los arbustos-

-Ash maldito -mas odio me dió porque ahora me provocaba para pelear un mano a mano mientras tenía la voz de mamá gritando para que paré-

El tipo estaba por pegarme con su puño en la jeta, por una distracción mía y antes de que sucediera aparecío mí padre que lo sujeto del brazo sin hacer el mínimo esfuerzo.

-antes de pegarle a un menor de edad ¿Porque no intentas pelear conmigo si eres tan macho? -el estaba furioso y sereno a la vez, no titubeaba... no sé cómo se contenia-

-¿Es menor de edad? Ash, yo me largo -el tipo se rindió y se terminó yendo con su compañero-

Abrí la puerta y mí madre salió desesperada con Leah por detrás mío.

-¿Eres idiota Alex o que? -me reta a mí como si fuera el culpable-

-Pero mamá... Esos tipos querían hacerte algo. No te hagas la mensa, yo vi como te miraban. -trate de justificar mis ansias de justicia y defenderla-

-Si Garrett no hubiera llegado... -ella se pone casi a llorar y Leah abraza a papá en silencio-

-bueno, ya entendí. Yo soy el malo aquí -le reste importancia y me fui furioso a mí habitación sin casi haber desayunado-

Del coraje y nervios que sentí empece a limpiar nuestro cuarto mientras los demás estaban haciendo sus cosas en la casa. Después me senté y medite un poco... ¿Porque se habrá enojado conmigo? Cómo si hubiera sido el causante de algo. Me sentía extraño con mí familia, como que nadie me comprendia, siempre soy la oveja negra de la casa.

Al rato tocan la puerta y es mamá, entra con una bandeja de almuerzo.

-hijo... -musita leve y estaba avergonzada-

No la mire puesto que estaba enojado, pero igual se sienta a mí lado.

-Alex... -susurra en voz baja y pone su cabeza en mí hombro- gracias.

No sé que le pasaba ¿Ahora me agradecía?.

-¿Que me estás agradeciendo?

-por defenderme aunque fuera en vano -dice ella y se acomoda a mí lado- sabes, tuve miles de pretendientes de toda clase pero siempre estoy con tu padre. Se cómo lidiar con esos tipos, no soy una mujer indefensa ni tampoco fácil. -decia ella con una leve sonrisa- quería evitar que te hiciera daño... Creo que no soportaría.

-yo estoy bien, sé defenderme. -le hice saber, porque Nick me enseñó un poco de defensa personal-

Ella toma mí mano para hacerme dar cuenta que todo estaba bien y no estaba enojada conmigo.

-agradezco tu valentía y buen gesto. Mí niño -ella se pone de pie y me enseña lo que había preparado- te traje carne empanada a la napolitana con puré de papas.

El mismo olor me daba hambre y hacia rugir mí estómago. Era una mezcla de pizza con carne. Ya no sabía si prestarle atención a mamá o a la comida.

-despues de comer si quieres te ayudo con tu tarea y te enseño algo de lo que te haga falta. -dice por último y se marcha cerrando la puerta-

Cuando terminé de comer llega a irrumpir Leah y se asombra de ver la habitación limpia y ordenada. A excepción del plato sucio que deje pelado.

-Woow ¿Ese rosario que te dio el lindo de Matt funcionó? ¿Me lo prestas?

Niego, ¿ahora que quiere?

-¿Para que si no eres católica?

-vos tampoco, a ti te bautizo el diablo. -me contesta burlona y cuidándose de sus palabras porque había cámaras- lo quiero para ponerme a rezar así limpias el cuarto a diario.

-claro, así tú no limpias -le contestó y me lo guarde adentro de mí playera-

-¿Cuando vendrá Matt? -me cambia de tema- hace mucho no vienen a jugar a los juegos contigo.

-¿No era que te molestaba mí consola? -indague, porque siempre que juego se molesta porque no la dejo leer en paz-

-no dije que la consola me molesta, tú me molestas. -se seguía burlando la niñata-

Hablando de mis amigos me hizo acordar algo...

-Ah cierto que hoy vamos a ir a un cumpleaños de una amiga -hablo para mí mismo pero en voz alta-

-¿Y mamá te dió permiso? -enarca una ceja-

-no necesito su permiso, papá me dijo que si fuera por él no tendría problemas.

-bueno, suerte. Mira que si pregunta por ti no te defenderé ni mucho menos cargaré con tu cruz. -dice Leah y se va a su litera de arriba a leer o a estudiar-

Me llevo conmigo mí plato sucio y lo dejo en la bacha, mamá ve que lo dejo abandonado y me obliga a lavarlo.

-ahora, después de comer cada uno tiene la responsabilidad de lavar sus trastes.

-¿Y papá dónde esta? -le cambie de tema porque después de lo ocurrido no lo vi por aquí-

-Está cortando el pasto del jardín ¿Puedes ayudarlo? -me pregunta mí madre amablemente-

Asentí, luego hacer todos los quehaceres del hogar y ayudar a papá con la limpieza del jardín y su carro, me fui a tomar una ligera ducha. Me puse ropa cómoda y me di cuenta que estaba oscureciendo, un rico aroma me llevó a la cocina y era la cena que ya estaba casi lista.

-mmm que rico huele... -digo para halagar a mamá que era una gran chef, yo con suerte si quemó la olla- ¿Que es?

Mí madre trae con guantes de cocina puestos una gran bandeja de vidrio y la posó en el centro de la mesa.

-Es lasaña. Espero que les guste.

Leah y papá ya estaban sentados en la mesa obviamente en su laptop con un libro al costado. Mí hermana ya estaba muy obsesionada con la lectura y con escribir.

-¿Y tiene carne? -pregunta Leah-

Yo me siento a su lado y pongo los ojos en blanco, mientras mamá nos sirve una porción para cada uno (omitiendo a papá), y ella a su vez se sienta a mí lado.

-Si cariño, tu debes comer carne. Olvídate del veganismo. -menciono dándole una orden- de hoy en más te alimentaras como una niña normal.

-¿Leah te parece normal? Si ella es un monstr... -no me dejó terminar la palabra que ambas me fulminaron con su mirada de tiburón- no dije nada.

-Yo me niego a comer carne. -ahora habla mí padre con su voz gruesa y autoritaria-

Mí madre se levantó y fue al horno a buscar algo, cuando saco la bandeja le colocó la comida en su plato...

-Hamburguesas de lenteja y quinoa con brócoli al vapor. Buen provecho. -ella se sienta en su lugar satisfecha y quiere dar las gracias-

Antes de cenar mí madre saca de su blusa un rosario que llevaba puesto y todos nos quedamos viendo que haría...

Cómo matriarca de la casa ella toma mí mano y a Leah a su vez, y Papá toma nuestras manos a ambos hasta escuchar su oración.

Mí madre cierra los ojos y empieza a orar...

-Señor, bendice estos alimentos que recibimos de tu generosidad. Da pan a los que tienen hambre y hambre de Dios a los que tienen pan. Bendito seas, Señor por esta comida que vamos a compartir y que es signo de paz, de alegría y fraternidad.

Por dentro pensaba que era una broma porque justamente aquí no había paz, alegría o fraternidad. Tal vez se estaba auto exorcizando o a nosotros para calmarnos.

-¿Mami eres católica? -indaga Leah y mí padre le resta importancia poniéndose a comer-

-pues claro cariño -ella orgullosa empieza a comer y después de probar un bocado añade- lo siento si no pude bautizarlos pero quisiera que lo hagan cuando sean conscientes y encuentren el amor de Dios.

Si, justamente yo estoy con ansias de buscar el amor de Dios.

-Entonces cuando sea mayor me bautizare en tu iglesia, para seguir al pie de la letra todo. -menciona Leah con orgullo-

-y nada de novios hasta que seas mayor y te cases... -le bromea mamá y Leah se sonroja-

-¿Que? ¿Enserio? -dice sorprendida y mira a papá-

-hazle caso cariño. Tú primero debes ir a la Universidad y graduarte. Ser una escritora, es tu sueño. -le dice mí padre para animarla- si te pones a tener novios de joven y te embarazas fuiste. Estarás atada a ellos.

Mí madre parecía un poco molesta por aquellas palabras...

-los niños son una gran bendición. Yo estoy muy orgullosa de ellos. -dice mí madre tomando nuestras manos a mí y a Leah-

-mamá si no te hubieras embarazado de Alex ¿Que te hubiera gustado estudiar? -pregunta Leah metiche como siempre-

Ella se acomoda y se pone a pensar un poco.

-seguramente administración, algo que sea dinámico y no que acabe con mí paciencia. Sino trabajar de Cheff en algún importante restaurante.

-¿Pero ustedes me tuvieron apenas cursaban el último año de secundaria o no? Yo a mamá le llevo 16 años más o menos. -le meto en su conversación, papá se lo vio un poco incómodo y mamá se encogió de hombros-

-¿Y como se enamoraron? -pregunta mí hermana, esa cuestión hizo que se atragantaran ambos con su comida-

Mí madre tosió un poco mientras pensaban una respuesta en su mente.

-Tu madre siempre me buscaba por los pasillos pero concretamos nuestro amor en una fiesta de cumpleaños de un amigo mío. -contesta mí padre por ella-

-porque el señor antes salía con otra zorra... -le aclara mí madre, Leah que estaba en medio no sabía a quién enfocarse-

-no me hagas hablar porque tu tampoco eras una santa... -musito leve mí padre mientras se comía sus brócolis-

Uy, yo estaba en medio de lo que sería una posible pelea, saque mí rosario y empecé a orar.

-es verdad, pero ahora maduramos y formamos una hermosa familia juntos. Olvidemos el pasado. -cuando abrí mis ojos apenas había escuchado esas palabras no lo podía creer ¿Enserio no se encabrono mí madre?-

Mire el rosario que Matt me dio y había funcionado. No sé que milagro hice pero el resto de la cena fue tranquila y en paz.

Después de terminar de cenar estuvimos un rato platicando cosas de la escuela y ellos de su trabajo como para pasar el tiempo en familia.

-Hoy me quedaré a dormir aquí -dice mí padre pero la única feliz era Leah que se le abalanzó-

-¿Veremos una película juntos? -le insistía Leah y era bien cargosa-

-Si, ya compre las palomitas -asiente con una sonrisa, le gustaba consentirla-

Ella lo llevó de la mano y ambos se sentaron en el sofá.

-¿Hay lugar para mí? -dice mí madre incluyéndose en su grupo- ¿Que película planean ver?

-una de terror: la casa del miedo. -dice Leah y se apega a papá, mamá también y se quedan los tres juntos-

-¿Alex te incluyes? -me pregunta mamá que tenía en su regazo a Jessy (nuestra perrita)-

Negué, no era del tipo fanático del cine de suspenso o terror, sino más bien de acción y de guerra.

Volví a mí cuarto y vi mí guitarra ahí a un costado, la tomé para tocar un poco de música. Ya olvidaba lo bien que se sentía distraerme.

Al rato me cae un mensaje de Matt que ya estaban en la fiesta, mire el horario y eran casi las once de la noche. Guarde mí guitarra en el placard y subí a la litera de la cama de arriba para meterme en ella y hacerme el dormido.

-estuvo buena la película ¿No mamá? -escucho la voz suave de Leah por los pasillos-

-Si cariño pero la próxima elijamos una de romance -le dice mí madre-

Luego entrar a la habitación y ven que está todo oscuro, la consola apagada y yo cubierto por las colchas sin moverme demasiado.

-Oh Alex ya se durmió y justamente le traía su postre de flan casero que tanto le gusta... -¡Ay no! Pensé, mamá me había traído un postre y yo aquí fingiendo- debe estar cansado por todo lo que trabajó y limpió.

-Si, si es la primera vez que hace algo jeje -dice Leah burlándose de mí- ¿Mami me das su postre? Así no se desperdicia.

-Si amor, que descanses. -se escucha como le da un beso y se despide- que sueñes con los angelitos.

Cuando escucho que mamá se fue, inmediatamente me bajo de la cama de arriba para arrebatarle a Leah mí postre.

-Oye, eso es mío. Dámelo.

-tu estabas durmiendo mentiroso, no te doy nada -ella se da media vuelta y me saca la lengua, maldita- ¿O quieres que llame a mamá? -enarca una ceja-

Dios, el sacrificio que debía hacer. La dejé en paz con tal que no me delate.

-Ok, tu ganas gordinflona. -me moleste por comerse lo que era mio y empecé a buscar alguna ropa que escaje para una fiesta-

-¿Piensas salir? -pregunta Leah mientras se devoraba mí postre-

Yo asentí, ya lo había decidido.

-¿Y por dónde vas a hacerlo? Papá está durmiendo en el sofa y mamá está en el living trabajando. -menciona ella un poco preocupada- ten cuidado.

-¿Ahora te preocupas por mí? -enarco una ceja-

-no, porque si te cachan me echarán la culpa por ser tu cómplice. -me regaña un poco ofendida-

Me cambié rápido adentro del placard y esperé a que me vinieran a buscar. Nick me envió un mensaje a mí móvil.

Nick: oye Bro ¿No quieres que te pasen a buscar? Nosotros ya estamos en la fiesta...

Alex: si, espera un poco. Si vienen que esperen en la casa del vecino. Porque mis padres aún están despiertos.

Nick: OMG ¿Que clases de vampiros tienes como padres?.

Alex: ya estoy listo. Cuando quieran 🤙🏻

Nick: alguien te espera afuera, sal... 👍🏻

Aproveche que Leah se fue a dormir a mí cama de abajo y ya que su cama de arriba estaba pegada a la ventana que daba al jardín trasero, intenté salir por ahí. Tenía que tener cuidado con la cámara de seguridad que mamá implantó para vigilarnos... pero cuando toque el suelo, tierra firme la mejor opción fue saltar el cerco del vecino de junto.

Cuando corrí por su jardín había una moto que me esperaba afuera en la calle con las luces apagadas.

-¿Nicky?

-Sube Alex -ella enciende su moto y me entrega un casco adicional-

Asiento y me subo a la moto. No sabía cómo agarrarme y cuando arranco con un poco de velocidad me sostuve sin querer de su cintura.

-Lo siento -estaba un poco nervioso y manoteando por detrás mío encontré el manillar para agarrarme de ahi-

Ella levantó el vidrio de su casco y me observa por su espejo retrovisor durante todo el viaje.

Cuando llegamos la casa de su amiga podía notarse la oscuridad, la luces, la música fuerte, chicos de todas las edades entrando y saliendo con alcohol.

-no pensé que tú me irías a buscar... Pensé que vendría Nick. -le saco un tema de conversación-

-yo me ofrecí. No te preocupes -ella me sonríe de manera extraña y sigue viéndome a los ojos- Oye Alex... ¿Tienes novia?

Esa pregunta me inquietó mucho y negué, al hacerlo veía que Nick y Matt venían hacia nosotros, y el segundo no tan feliz con un vaso cada uno.

-¡Alex si viniste hermano! ¿Que tanto hablaban? -inquiere saber el rubio de mí amigo-

-recien llegamos -le dice su hermana- bueno, voy a guardar la moto en el garaje. Nos vemos en la fiesta.

Yo me encoji de hombros y Nick me empieza a observar...

-Oye ¿Porque estás callado? ¿Paso algo con mí hermana? -el se sonríe cómplice y me hace poner incómodo-

-no pasó nada, es tu hermana amigo. -le hago saber que si le tenía respeto y nunca me aprovecharía de esa chica- solamente me sorprendió. Pensé que algunos de ustedes me pasaría a buscar.

-Ella quizo ir, aparte tiene moto y  licencia. -se excusa Nick y aferra a mí- prueba esto amigo...

Nick le saca su vaso de bebida a Matt y me lo entrega, pruebo un poco y si, era alcohol.

Mientras caminábamos por el jardín de dicha casa Nick se quedó saludando a algunas chicas que conocía por su hermana.

Matt estaba serio y ya me lo podía imaginar.

-no te preocupes amigo, no pasó nada con Nicky. -le digo con toda mí sinceridad-

Él suspira y se lo nota nervioso.

-es que hoy iba a confesarle mí amor, tenía miedo que me ganarás.

-¿Estás loco? Jamás traicionaría a mí mejor amigo y menos por una mujer. -le digo porque es lo que pensaba-

Cuando entramos a la fiesta estaban casi todos los conocidos del 1,2 y 3 año de secundaria. Seguramente los padres de Melissa no estaban en casa como para dejar que esto sea un descontrol.

Los de tercer año estaban jugando al pool y fumando marihuana, los de segundo tomando alcohol y platicando, al mismo tiempo se escucha la música a todo trapo.

Fuimos por tragos con Matt y ahí nos encontramos con Nick platicando amistosamente con la cumpleañera.

-Oigan chicos, ella es Meli -menciona nuestro amigo-

-Feliz cumple -decimos al unísono-

-ya no caben más gente en la casa, que genial todo esto. -decia Matt felicitando por la mega fiesta-

-y atrás hay una piscina para darse un chapuzón. -decia ella, parecía que estába borracha porque se inclinaba a los hombros de Nick- no vayan a las habitaciones de arriba, están ocupadas...

-¿Porque? -indague curioso-

Ella se hecha a reír sobre Nick.

-que gracioso tu amigo jaja.

Cuando observó a Matt que estaba más nervioso que yo, le ofrezco un trago para que se relaje, yo me serví uno igual. Dejamos a esos dos platicando y nos fuimos hacia el living.

No era como lo esperaba, habian muchos borrachos haciendo estupideces, otros platicaban, bebían alcohol, y alguno que ya no se podían poner de pie.

Me senté en el sofa para relajarme, tenía ansias de fumar. Vi la hora en la pared y eran las 1 AM. Cómo había pasado las horas tan rápido que ni cuenta me di, sin darme cuenta el alcohol me hizo relajar y me dormí un rato.

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Me desperté por el ruido de la música era fuerte y aún había gente riéndose y pasándola bien. Mis amigos bien perdidos en la fiesta, me sentía un aguafiestas como mamá. Lo primero que fui a hacer es levantarme del sofa y buscar a mis amigos... No los podía ver a simple vista.

Cuando urgía de ir al baño noté que el pasillo que conecta a dicho lugar estaba bloqueado... Pero más me sorprendió ver a Matt besándose con la hermana de Nick... Me quedé en shock.

Ella lo besaba y sostenía un vaso de alcohol, parecía que no quería dejar respirar a mí amigo, cuando abrió sus ojos y notó que yo los observaba siguió besando a mí amigo sin dejar de verme a los ojos. Me puso incómodo. Así que pase por entre medio de ellos y me fui al baño igual.

No tenía porque influir una niña en nuestra amistad y más si mí amigo estaba muy enamorado de ella, debía estar feliz por él.

-debo ser un idiota. -me pegue la cabeza con el cubículo del baño mientras orinaba- rayos...

Cuando terminé mí asunto no quería salir de aquí, sabía que afuera estaban ellos dos besuqueandose y yo como un estúpido niño de mamá sólo.

De pronto entran los bravucones de la escuela pero solo Ares y Esteban, el tercero venía con una chica que la tenía entre sus brazos amarrada y se la llevó a los baños encerrándose allí

-Oh, mira quién está solito -menciono Esteban burlandose de mí como de costumbre, ya era un pasatiempo para ellos ser su objeto de burla- ¿Alguien perdió el pañal? JAJAJA

Hago caso omiso y me quedo allí adentro a propósito, saco un cigarro y me pongo a fumar.

-¿Y ustedes a qué vienen juntos al baño? ¿Se ayudan mutuamente a masturbarse o le dan una mano a su amigo cuando acabe? -me burló a su misma altura-

Esteban se enfureció que quería venir a atacarme pero su amigo lo detuvo.

-¿eres tan vivo Alex? -dice su líder y saca de su bolsillo un cigarro especial- ¿Porque no pruebas esto?

Enarco una ceja y lo mire desinteresado, sabía lo que era. Marihuana.

-¿Acaso tu mamita no te deja o tienes que pedirle permiso? -me reta el idiota de Ares al mismo me lo ofrece-

-¿Mami me dejas hacer una paja? JAJAJA -se burla el otro idiota-

Le arrebate su cigarro y a la vez tire el mío al suelo, pisándolo para apagarlo. Lo encendí y me lo lleve a la boca para probar una poco.

-¿Y que sientes? De a poco dejas de ser un niñito. -dice Ares y hasta visualizaba su rostro como un diablo con cuernos y todo-

Su amigo también estaba feliz por lo que había hecho (de fumarme todo el churro de marihuana) y como el efecto no fue tan mágico se lo devolví amablemente.

-no fue nada. -aunque estaba un poco mareado y las cosas a mí alrededor confundían, no podía mantener la cordura de lo real e irreal- podría con aún mucho más...

-mmm ¿Enserio? -Esteban saco de su bolsillo una bolsita blanca, la preparo sobre la mesa de lavamanos con cuidado y armó una linea- mira esto...

Esteban con un sorbete que lo metió en su nariz hizo fuerza para meter ese polvo blanco adentro de sus fosas nasales, inmediatamente su personalidad cambio de un momento a otro y sintió un poder sobrenatural en su cuerpo, fue y le pegó una piña a la pared con todas sus fuerzas sin causarle un daño.

Después Ares toma mí mano y coloca ese polvo y hace una línea.

-Inhalalo Alex. -ordena Ares y me mira fijamente retandome con la mirada-

Trague grueso pero si no lo hacía me cargarían por el resto de mí vida en la secundaria.

Cuando estaba por hacerlo sentí un golpe en mí brazo que hizo que aventara el polvo blanco y se esparciera por el suelo, haciéndolo inservible.

Todos nos volteamos a ver quién había sido el causante y era Nick, estaba furioso y arremetió contra Esteban sujetandolo del cuello.

-¡Maldito cobarde! ¡Estabas por darle cocaína a mí amigo! -escucho decirle-

Matt entra al baño y me sujeta del hombro, vio que estaba un poco mareado...

-¿No inhalaste esa porquería verdad?

Negué.

-pero si marihuana... -mencione en voz baja-

Esteban se quitó a Nick de encima... Y él aún tenía el efecto de la cocaína que había inhalado.

-Si, le iba a dar Coca ¿Y que? ¿Quieres pelear? Si él quiere probar es su problema... -empieza a gritar que estaba con la adrenalina a full-

-Nadie lo obligó -se mete Ares a defenderlo-

Esteban se estaba por meter a luchar contra Nick por mí culpa... Matt me sujeta y me saca del baño...

-no puedes dejar a Nick sólo, van a matarlo... -sostengo con mis últimas palabras y casi entro en shock sintiendo una angustia que casi me pongo a llorar por si le llegará a pasar algo malo a mí amigo, me sentiría bien culpable-

-no le harán nada Alex -menciona seguro de sus palabras Matt- estás así por la marihuana, estás más sensible...

Matt me sienta en el sofa pero yo quiero ir a ayudar a Nick.

-Quedate aquí, yo iré con Nick.

Estaba mareado, no tenía las fuerzas suficientes para ayudar a mis amigos. Soy un cobarde e inútil.

-¿Alex estás bien? -llega Nicky con su amiga Melissa y se sientan a mí lado-

-tu hermano... está en peligro... Ayúdenlo.

Nicky se sorprende y empieza a acariciar mí frente como lo hacia mamá cuando era niño.

-el estará bien, no te preocupes.

-¿Y quién invitó a esos bravucones? Yo no los invite -dice ofendida Melissa- ojalá que no le hagan daño a Nick...

-Matt fue con él... -dice Nicky en voz baja y preocupada-

-hay otro de ellos encerrado en el baño con la novia... -menciono en voz baja-

Nicky me observa con lástima y se aferra a mí brazo. Melissa se pone de pie y va a ver qué todo esté bien y no les hagan daño.

-Alex... Yo... -ella quería decirme algo pero yo no estaba en mis cavales-

-hacen linda pareja con Matt, él te ama. -le digo para romper con alguna confesión la cual no necesitaba ni tampoco explicaciones- solo espero que tu hermano esté bien...

-admiro mucho su amistad, gracias por apoyar a mí hermano -dice por último y sonríe-

Yo sin querer me dormi...

Fin de narración de Alex.

Narra Narrador:

En casa de los Borns:

-¿Mich aún sigues trabajando? Es sábado. Ya vete a dormir. -ordena Garrett-

-me falta lo último, sino pues ve a dormir a la habitación así no te molesto con los ruidos y las luces, yo me quedaré un poco más. -menciona la muchacha enfocada en su laptop-

Michelle observó que el clima estaba un poco pesado, ya que no faltaba mucho para el verano, tenían que prender los ventiladores de techo y el aire acondicionado.

Garrett buscaba su almohada para irse a dormir a la habitación... hasta que algo, una intuición le hizo recordar "si hacía calor ¿Porque Alex estaba durmiendo en la cama de arriba (cosa que nunca ocurría) y todo arropado?" Esa duda existencial hizo que se ponga a chequear las cámaras de seguridad y cuando diviso algo extraño en las afueras alrededor de la medianoche...

Inmediatamente fue hacia las habitaciones de la planta alta pasando entre medio de Garrett que se quedó impresionado y abrió cuidodamente la puerta de la habitación de sus hijos, sin hacer mucho ruido y sin despertar a la pequeña Leah que dormía en la cama de abajo con un oso de felpa en sus brazos, quitó las colchas de la cama de arriba para ver si Alex efectivamente estaba allí durmiendo.

Ella se cubrió su boca al ver que su niño no estaba durmiendo allí y casi le agarra un ataque de nervios. Garrett que estaba medio dormido quiso ver qué tan apresurada estaba por ir al cuarto de los niños y cuando quizo chismear Michelle lo empujó para salir desesperada.

-Dame las llaves del auto Garrett. -ordeno Michelle furiosa y exigiéndole-

-¿Que? ¿A estas horas? ¿A dónde vas? -indaga el pelilargo-

-¿me vas a interrogar o a dar las llaves? -ella no estaba para perder el tiempo-

Garrett le da las llaves soltando un bufido.

-¿No quieres que te lleve?

Ella niega.

-Tu quédate. Cuida la casa y a Leah. -salia del pasillo para ir a la planta baja con suma prisa, busco su móvil, un abrigo y su cartera-

-cuidame el auto -dice por último Garrett esperando en la puerta mientras ve que  Michelle intenta arrancar el vehículo-

-¡Ya se! -le grita- metete a casa y no chingues.

Michelle encendió el vehículo y condujo sin destino aparente.

Cuando estacionó en una estación de servicio se fijó en su móvil el GPS donde podía vigilar a su familia mediante una app de rastreo. En su mente solo pensaba usarla en Garrett pero le hicieron un descuento por usarlo en otros móviles. No era para vigilarlos sino para monitorearlos con casos como estos.

Cuando accedió a la ubicación del lugar donde presuntamente Alex estaría allí fue manejando con destino a dónde el GPS le marcaba.

...

Alex fue despierto cuando la fiesta había terminado, muchos de los chicos ya se estaban yendo a sus casas. No había música ni alcohol.

Nick y Matt estaban a su lado al igual  que preocupados.

-¿Estás bien amigo? -indaga el rubio-

Él asiente y mira hacia todos lados desorientados.

-¿por mí culpa termino la fiesta? -pregunta Alex y se sentía culpable, vio que su amigo tenía vendada su mano izquierda- Oh tu mano Nick ¿Que ocurrió?

Nick se mira así mismo y sonríe.

-no te preocupes, es mí culpa. Nunca debimos dejarte sólo Alex. -menciono el rubio muy decepcionado de si mismo-

-Siempre prometimos cuidarnos entre nosotros -aclara Matt que lo tenía a su lado también- tu eres nuestro hermano Alex...

-esa marihuana venía compuesta... por eso estás asi -dice Nick- no se cómo pudieron hacerlo...

-Si inhalabas la coca seguramente te morías... -menciono Matt preocupado-

Nick se acercó a su lado y estaba un poco molesto...

-Jura por nosotros o por lo que más quieras que nunca más aceptaras drogas de esos estúpidos o cualquier otro. -Nick lo reta como si fuera un padre-

-Lo prometo -el ojiazul levanto su mano en jura- y lo siento por preocuparlos.

-menos mal que ya reaccionaste Alex. ¿Estás mejor? -pregunta Melissa y le trae una aspirina con un vaso de agua-

-estabas totalmente ido clamando por Nick -se reía Nicky que venia a su lado- tienes un buen amigo hermano, que se preocupa harto.

-¡Oigan! -Alex se sonrojo, no era lo que pensaban- temia por él, nada más.

Todos rieron por la situación y se quedaros platicando un ratito más. Aún no había amanecido y Alex supuso que en su casa estarían durmiendo.

Cuando salieron al jardín despidiéndose de las chicas apareció un auto muy familiar que los dejo en shock a todos, inclusive al adolescente Borns con la boca abierta.

-¡Alexander sube!

Todos se quedaron helados ya que la expresión de la madre de Alex no era para nada buena.

Alex chocó los puños en señal de despedida a sus amigos.

-despues hablamos. -musito leve-

Su madre abrió la puerta y no se atrevió a pegarle una cachetada a los amigos de sus hijos porque eran menores de edad y podría traerle problemas.

-mamá.

-Callate Alex, hablaremos cuando lleguemos a casa. -ordeno en una voz gruesa-

Michelle estaba furiosa porque él niño había desobedecido sus órdenes cuando fue bastante clara.

Al llegar Alex se tiró al sofa para descansar, el efecto de la marihuana se había ido de su cuerpo pero estaba cansado y necesitaba dormir.

Cuando se levantó para ir a su cuarto su madre lo detuvo en seco.

-¿A dónde crees que vas? ¿Piensas que vas a desobedecer mis órdenes y te vas a dormir como un ángelito? No señor.

Cuando Alex se da media vuelta poniendo sus ojos en blanco Michelle siente el olor a cigarro en su ropa y sin decir una palabra le pega una cachetada en su cara, ella de la conmoción llora tapando su boca.

-Estupido ¿Que tienes en mente? -ella empieza a recriminarle la estupidez que acababa de hacer- Casi me muero cuando supe que no estabas en casa... te saliste sin mí permiso y yo bien mensa creyendote para que me engañes y salgas con tus amigos a drogarte a una fiesta...

Los gritos hicieron que Garrett se despierte y Leah también pero ellos observaba desde el umbral de sus habitaciones.

-¿Y que esperaba que hiciera mamá? -Alex se cubría su mejilla la cual ardia- ¡Tú nunca me dejas hacer nada! ¡Todos se me burlan en la escuela! ¡Soy un gran estúpido mientras todos los chicos de mí edad salen a divertirse!

-¿No pueden salir a divertirse sin drogarse? -enarca una ceja-

-Si te hubiera pedido permiso igual te hubieras opuesto, nunca quieres que haga lo que yo quiera, siempre a tus reglas. -empieza a molestarse Alex- quiero ser libre mamá, déjame ser yo mismo.

-mientras vivas bajo este mismo techo vivirás bajo mis reglas ¿Oíste? -impuso la azabache y se acerca a su rostro para aclararle una vez más- nada de amigos, nada de juegos y consolas, nada de celulares, nada de fiestas ni mucho menos novias hasta que te gradues. Ese será tu castigo -le dice directamente-

-¡No puedes hacerme eso! -dice Alex entrando en shock y unas lágrimas salen de sus ojos- aparte papá si me dejó ir a la fiesta...

Michelle apuntó su mirada asesina hacia Garrett que estaba por detrás de su hijo.

-A mí no me metas en tus líos Alex, te dije que le preguntarás a tu madre. Yo no tengo nada que ver con... -el no termino la frase que cerró el pico ya que Mich lo miraba con ojos de diablo- buenas noches.

-esos amigos tuyos no los quiero ver más en esta casa, voy a pedir el cambio urgente de instituto. -dice Michelle teniendo como principal idea-

-¿Que? ¡No! ¿A dónde iré a estudiar? ¡Estás loca! -le alzó su voz entrando en shock porque no quería perder la amistad con sus amigos-

-Al mismo instituto que asiste Leah y Knox. Sino pues a un internado. Tú elijes. -Michelle se dio media vuelta y cuando volteo de nuevo para verlo le dio mucha lástima verlo llorar pero sabía que era lo mejor para él- mañana mandaré a poner rejas a toda la casa.

-pero mamá... -Alex aún no podía creer al extremo que podía llevar su madre con tal de ganar- está bien, haz lo que quieras... Si te hace feliz verme sufrir sin amigos... hazlo. Tú siempre acabas con todo lo que me da felicidad.

-Si fueras obediente y no me causarias problemas sería otra cosa. Estoy decepcionada de ti.

Esas últimas palabras hicieron que Alex lo quebraran y no pudo resistir y ponerse a llorar. Entro a su habitación, empujó a Leah hacia el pasillo y cerró la puerta con llave.

-¡Alex! ¡Ábreme! -Leah aún quería dormir pero no podía entrar ya que no tenía acceso a abrir la puerta- ¡Maldición! ¿Donde voy a dormir? Uhm -ella se cruza de brazos y ve a su padre que la llama haciendo señas- ahhh

Ella se va a dormir a la habitación de sus padres a dormir el resto de las horas con su padre.

En cambio su madre volvió al living y no pudo evitar llorar. Pensando en su mente que su hijo le podía haber sucedido cualquier cosa... miraba las fotos que tenía en una carpeta de cuando era bebé y un infante y le partía el alma que aquel tierno niño ya era un adolescente rebelde.

-mi niño hermoso... creciste tan rápido... ¿Que hice de mal en esta vida para que me trates así? Siempre fui amorosa y te consenti con lo mejor que tengo. -ella no podía contenerse porque cuando más fotos veía de aquel Alex de niño más lo extrañaba- hubiera deseado tenerte así por siempre.

......

En Londres:

-aqui el informe señor Ross. -dice una secretaria modestamente para entrar a la oficina de su jefe-

Ryan, quien se encontraba con mucho trabajo y un pilón de carpetas, amablemente contestó...

-gracias ¿Puedes dejarlo sobre el escritorio? -pide sin mirarla a la muchacha-

-Si, con su permiso. -dice su secretaria- ah, quería avisarle que está su hermano y quiere hablar con usted. ¿Lo hago pasar?

El joven Ross asiente y ella se marcha.

-hola hermanito ¿Estás con mucho trabajo? -saluda su hermanastro mayor, ahora eran familia ya que su padre había contraído matrimonio con su madre-

-Si. Pero enseguida acabo. -decia enfocado en sus papeles- ¿Noticias nuevas?

-Hoy es el cumpleaños de mamá, harán la fiesta en casa. ¿Vendrás no? -pregunta el azabache de pelo corto observando lo ordenado que estaba su oficina-

Ryan se levanta y camina en su oficina para mirar por la ventana y ver el hermoso jardín.

-Si, obvio. A nuestra madre le encantará ver a toda la familia junta.

-eso si, extraña a su nieto y quiere verlo. -comenta el adulto y ve que en el escritorio del Ross había una fotografía de él junto a un pequeño niño idéntico a él-

Ryan se encoge de hombros y recuerda al niño que siempre lo tenía en su corazón, imaginaba como podria estar su hijo ahora de adolescente.

-eso ya no depende de mí... -se justifica el Ross, ya que había insistido en poder tener contacto con el chico pero las cartas enviadas nunca fueron contestadas- pobre, tu papá se siente sólo, al único que quiere ver es a su nieto...

-mi hijo está con él y tu mamá cuidándolo. Me preocupa porque no quiere saber nada con ir a la escuela y hacer amigos... desde que murió mí esposa. -comenta su hermanastro preocupado también por el suyo-

-no te preocupes Ben... dale tiempo a Eliot, su madre murió hace 5 años, es normal. Pero siempre debes apoyarlo en todo. -le dice Ryan y en su mano tenía un sobre-

-¿Y ese sobre? -indaga Ben un poco curioso- ¿Es para enviar a los Estados Unidos?

Ryan se gira y asiente.

-Si, le mandaré a mí hijo. También dinero para sus estudios y pueda comprarse ropa o zapatillas nuevas. -Ryan metió en el sobre 2000 liras esterlinas para enviar a su hijo mediante correo-

-¿Lo extrañas? -indaga Ben- Yo espero conocerlo, si es tu hijo no creo que sea tan malo o ¿Si?.

Ryan sonrió con esperanzas, tenía la corazonada de poder ver a Alex pronto. En dicha carta le escribía como si fuera su amigo de antaños pensando que el joven la leería pero no sabía exactamente si obtendría una respuesta.

Lo que no sabía Ryan es que mediante ellos había un mediador que interferia en el mensaje emisor hacia el destinatario y hacia desaparecer las evidencias escondiendolas en algún sitio que nadie las encontraría.

-Continuará-

Holis, nuevo cap 🕊️ espero que les haya gustado.