Carta 3
Narra Narrador:
-arriba ese ánimo Ryro, ya no queda mucho tiempo para que podamos volver a casa -menciona un rubio mientras aprovechaban el horario del almuerzo para platicar-
-ansió ir al Burger King -alega con una sonrisa el más gordito Brent-
Ryan levanto su vista y observó a sus nuevos amigos, sonrió fingiendo una sonrisa. No podía negar muy dentro de su ser que anhelaba volver a su casa para abrazar a su madre y pasar tiempo con sus amigos.
Spencer era como su hermano, era al que más extrañaba y era con quién mantenía una relación de amistad duradera. A la vez lo mantenía comunicado a través de las cartas que se enviaban mutuamente con el tiempo.
Los meses habían pasado y ya se estaba casi al borde de cumplir más de medio año de su estadía en la milicia.
Ya no se sentía muy animado o esperanzado. Sus pocas energías eran consumidas física y mentalmente. Así que aprovecho aquel corto momento que tenía para volver a escribir una carta y contar en breve los nuevos sucesos que le depararán...
Pasaron meses, lo sé, disculpa. Cada día el entrenamiento se vuelve mas estresante y a pesar de estar comiendo e hidratandome mas me siento vacío y desanimado, por lo menos tengo de apoyo a mis nuevos amigos, platicamos a diario.
Me contaste que estudiaras computación y proyección 3D en la misma universidad que Angy ¡Que bueno, me alegro mucho! conociéndote seguro crearás videos juegos y esa clase de cosas. Mucha suerte con tus estudios. Tienes todo mi apoyo. Cuando vuelva a casa también iré a la universidad contigo, estoy pensando que estudiaré aún.
Antes de que me despida, quería contarte que hace poco me lastime la pierna y tuve que ir a la enfermería por una emergencia. Bueno, allí conocí a una chica bastante bonita (debe ser porque es la única mujer que vi en meses) y bueno, en apariencia ella es rubia y de tez blanca, por lo que supo en rumores ella es mas mayor que yo (y tiene muchos pretendientes a la espera) sino fuera por mi extrema timidez le hubiera confesado mis sentimientos pero no me animo, no puedo pedirle su número para mensajear porque no tengo un pinche movil. Ya me animaré a hablarle, necesito toda la fuerza y la voluntad posible para que me haga caso.
La mal noticia es que a partir de la semana que viene nos prepararan para usar armas de guerra, estoy aterrado, no quisiera matar a nadie. Ya nos enseñaron a cazar en caso de una supervivencia y matar animales en crudo, eso me hace sentir mal, me descompongo y me hace bajar la presion al ver la sangre sea de un animal pequeño, creo que no nací para esto. Supuestamente nos preparan para ser una máquina de matar.
Bueno, cuando tengas mas noticias las espero en la proxima carta. Suerte amigo, éxito y muchos logros. Tengo esperanzas que pronto volveré a verte.
Ryan suspiro rendido y desanimado.
-¡Oye Ry! -habla el gordito y apunta a su comida- si no te lo vas a comer ¿No me lo donas?
-¡Oye Brent! No hagas eso -se entrometió el rubio- cada uno tiene su ración. Aparte mira como está... Todo flacucho, pálido y hasta los huesos se le notan -se quejo el rubio frunciendo su ceño- deberías tú de darle tu plato al pobre Ryry, por eso no tiene buena coordinación y se lastima a diario.
Brent arrugó su frente y ofendido tomo su plato y lo agarro fuerte con sus manos. Mezquinandolo.
-¡Neeel! Está es mi comida y eso lo único que nos dieron -se molesto Wilson- aparte solo le sugerí, antes de desperdiciar su comida y tirarla en época de hambruna
Ryan suspiro y sin decir nada le ofreció su plato. Dan abrió sus ojos casi no creyendo lo que veía.
-haces mal Ry...debes de alimentarte aunque sea una verga la comida de aquí -menciona el rubio-
-no tengo tanta hambre como Brent -contesta Ross con la cabeza a gachas-
-si sigues así te vas a descompensar como la otra ves en el campo de trote tonto -espeto serio el Keyes- y si te sigues así te van a internar
Ryan se encogió de hombros.
-me parece que Ryry quiere internarse para que lo atienda a diario la Keltie -sonrie malicioso el Wilson comiendo su plato de comida-
Ryan abrió sus ojos y se ruborizo.
-¡Queeee! ¡No, no, no! -negaba con su cabeza- ¡Eso no es cierto!
-entonces ¿porque te pones colorado cada vez que hablamos de ella? -indaga el chico más robusto- Al menos admite que te gusta la chica
-¡No! -afirma evitando hacer contacto visual con su amigo- y aunque me gustase, ella jamás se fijaría en mi. Tiene muchos hombres como pretendientes
-hasta hubo un rumor que salía con el comandante Williams -Ryan observó a su amigo Keyes cuando dijo lo último- pero no te fijes, nunca sabes lo que ella necesita o busca en un hombre.
-claro, si nunca lo intentas no lo sabras -se entromete Brent-
Ryan rodó sus ojos y contemplo las sugerencias de sus amigos, se sentía aliviado de tener amigos positivos que lo ayudaban y aconsejaban sanamente.
Observó de nuevo su plato y con un poco de ánimo empezó a probar bocado. Dan y Brent se miraron entre sí y sonrieron.
-Oye Ry -intenta captar la atención de su amigo el rubio más grande- nunca nos platicaste de tu novia -se rasca la nuca un poco nervioso- si es que la tuviste ¿No?
-Si tuve -dice sin decir más y se enfoca en comer dejando con la intriga a sus amigos-
Al no obtener una historia como respuesta Brent soltó de repente...
-¡Vamos! ¿No nos vas a contar acerca de Michelle? -Ryan inmediatamente casi se atraganta con la comida y escupió parte de ella, reaccionó muy exaltado y con los ojos grandes como platos-
-¿Quien te dijo de ella? ¿Leíste mis cartas o que? -le increpo Ross un poco enojado, no le gustaba que se metieran en sus asuntos-
-no -ladeo la cabeza negando- tu mismo -lo señala- cuando te vas a dormir siempre balbuceas su nombre incontables de veces -Ryan observa a Dan, esté con una sonrisa y afirmando lo dicho por el Wilson-
Ryan tapó su rostro de la vergüenza.
-Dios mío -susurraba leve-
-no te preocupes amigo, todos tenemos a alguien que nos espera en casa -lo anima Brent- yo tengo a mi prometida esperando por mi.
Dan asiente también. Pero Ryan no le contó el echo que aquella chica mencionada era su ex novia y ella formó ya su familia con otra persona. Sólo agachó la mirada muy apenado y con una amargura en su boca.
-Michelle ya es parte de mi pasado -solto sin más- quiero olvidarme de ella y rehacer mi vida una vez que salga de aquí y cumpla lo prometido.
-ok ok ok amigo -lo palmea por su espalda Wilson con una leve sonrisa-
-pero recuerda, un clavo no quita el otro Ry -menciona el rubio, ambos chicos lo miraron extrañado y con el ceño fruncido- ah, por si tenías pensado salir con Kelt.
-no tenía pensado usarla, aún no sabe de mis sentimientos así que -el castaño le resto importancia-
De golpe se escuchó un estruendo y el comandante llamo a todo el grupo de jóvenes para dar por terminado el almuerzo. Si hubiera o no comido era de menos importancia para él. Con un poco de hambre Ryan obedeció a las órdenes de su superior junto a sus amigos y salieron del recinto.
......
Mientras tanto.
-¿Extrañas a tu amigo? -indaga un joven de ojos azules a su primo-
-demasiado -dijo desanimado mirando el cielo raso mientras estaba recostado en la cama de su primo- la vida aquí sin él no es la misma.
-lo sé, es como un hermano para ti Ryan -alega el Weekes- siempre los recuerdo cuando eran niños y estaban siempre juntos, casi como un hermano para ti.
Spencer bostezo y no dijo nada, se ponía a leer las últimas cartas del castaño y se sentía triste por no tenerlo cerca y compartir un grato momento a su lado.
-lo siento por venir a molestarte hasta tan tarde, sé que mañanas tienes trabajo en tu consultorio -menciona Smith con un poco de tristeza- espero que Angy no se enfade. -comenta a triste el chico ojiazul- yo no puedo molestar a mi linda novia porque tiene que dormir temprano para ir a trabajar -agacho la mirada-
-¿Porque crees que Angy lo hará? -pregunta Dallon un poco curioso- ella es una chica muy buena y bondadosa, entiende tu situación. Aparte a mi no me molestas en absoluto. Me haces compañía en mi departamento.
Spencer abre los ojos de lo que se le vino a la mente.
-primo si te sientes sólo ¿Porque no le dices a Angy que venga a vivir contigo? -se atreve a decir Spencer poniendo en jaque a los pensamientos de Dallon-
-no lo sé, hace unos meses conocí a sus padres y me brindaron su apoyo. No quisiera robarle a su niña -habla Dallon un poco dubitativo-
-que niña ni niña -rie tontamente Spencer- de las revolcadas que habrá echo con el frentudo se le habrá ido toda su inocencia.
-no quiero saberlo, gracias -trata de ignorar lo último-
-yo sé que ella estaría encantadisima de vivir contigo -se acerca a su primo- desde que salen se la vé más radiante y feliz. Hizo bien en elegirte -lo alaga- pensé que la habíamos perdido cuando se corrio aquel tonto rumor que se iba a casar.
-ella me contó que no lo iba a hacer. No lo amaba a ese muchacho -roda los ojos mientras escribia algunas cosas en una gran planilla- pero lo voy a pensar.
-¿Sobre qué? -enarca una ceja Spencer-
-de decirle a mi novia de que si quiere vivir conmigo aquí -contesta con una sonrisa el más grande-
Spencer sonrió un poco feliz, desde que veía a su primo y a su mejor amiga llevar una relación de noviazgo de varios meses se los notaban felices a ambos y eso lo complacía a él mismo.
-Continuara-
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