Holis lectores!!! sorry por haberme tardado pero estaba concentrada en mi otro fanfic "Relación Peligrosa", se las recomiendo😂, ok, en serio. Me gustaria q la lean y voten y comenten q les parece. Hasta le hize un booktrailer. Gracias por su espera y les agradeceria q la leyeran, pero es su desicion. Ahora si, el cap:
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Un escalofrío recorrió el cuerpo del joven. Sintió una punzada en el pecho. ¿Por qué la vida siempre era dura con él? Podía ser atractivo, podía tener dinero de sobra, podía enamorar a todas las chicas, pero, ¿por qué él no podía ser amado? ¿Por qué no podía ser correspondido? La vida nunca estaba de su lado en la parte sentimental.

Salió furioso del hotel y se quitó la chaqueta del esmoquín. Maldito baile. Lágrimas de enojo bajaron por su rostro. Se sentó y se apoyó en la pared de un callejón. No notó a la pequeña mariposa morada volando en torno a su dirección. La notó cuando esta se atravesó su pecho.

- ohh, es una decepción que esa chica no se haya fijado en ti- habló una gruesa voz. Ethan apretó los puños.

- ¿quién eres?- cuestionó enojado.

- soy Hawkmoth, y te daré el poder para recuperar a la joven, pero a cambio debes traerme los miraculous de Ladybug y Chat Noir-

- con mucho gusto- sonrió.

Marinette se separó de Adrien.

- no te la dejaré tan fácil- le dijo.

- ¿qué?-

- una penitencia, por haber terminado conmigo sin decirme que tu padre era Hawkmoth- el rubio se arrimó a la pared.

- ok, ¿qué sugieres princesa?- la peliazul sonrió de oreja a oreja.

- no puedes contar tus pésimos chistes ni hacer juegos de palabras por un mes-

- ¿¡qué!? ¿¡por qué!?- Adrien abrió grande los ojos.

- pero si son pu-

- entonces no volvemos- interrumpió la azabache girándose y caminando lejos de él. Adrien la agarró de la cintura y la volteó.

- está bien, princesa, ¡y esa no cuenta! ¡es un cumplido!-

- ok, tranquilo- rió Marinette.

Tomados de la mano, fueron a la línea de bar, donde estaban Nino y Alya compartiendo un batido. La morena se volteo y sonrió.

- ya era hora, te tardaste mucho Agreste- dijo con una mano en su cadera.

- ¿todo bien? ¿volvieron?- preguntó Nino.

- sip, y les aseguro que no la vuelvo a dejar jamás- prometió besando la mano de la peliazul.

- vamos un rato afuera- dijo esta y se fueron.

Cuando salieron del hotel, Marinette respiró hondo. El viento en sus brazos desnudos la refrescaban de una extraña manera.

- ¿frío mi lady?-

- tranquilo gatito, necesitaba aire fresco- contestó.

Entonces, escucharon un estruendoso ruido proveniente del hotel. Asomaron preocupados sus cabezas y vieron como un akumatizado hacía temblar el edificio cuando golpeaba las paredes y sus manos se cubrían de hierro. Su traje era negro, unas botas azules neón, igual que sus manos y un pañuelo alrededor del cuello.

Algunos se escondían y procuraban que nada les cayera encima, y los demás escapaban. Adrien y Marinette intercambiaron miradas.

- ¡vamos!- dijeron al unísono. A pesar de tal escandalo, cualquiera podría verlos si se transformaban allí. Pero para la peliazul era más dificil.

- nunca volveré a usar tacones- murmuró. Frenó para quitarse los zapatos. Adrien iba a volver pero Marienette le frenó.

- ¡ve, yo ya te alcanzo!- le dijo.

Adrien hizo caso y se dirigió hacia atrás de hotel. Marinette dejó botados sus tacones y descalza corrió hacia donde estaba el modelo. Vio una luz verde y después al rubio héroe saltar al hotel.

- ¡Tikki, puntos fuera!- gritó y su vestido blanco se transformó en el traje de Ladybug.

Cuando iba a ir donde estaba el akumatizado, una voz la interrumpió.

- ¿Marinette?- se volteó.

Oh no.

- A- alya- tartamudeó.

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- ¿¡dónde estás Marinette!?- llamó frustrado Ethan.

- ¿buscas a mi princesa? ella no puede atenderte en este instante- el castaño, o mejor dicho, ahora pelinegro, se volteó furioso al ver al gatuno.

- ¡ella no es tu princesa!-

- ¿quien dice?- contraatacó con su habitual sonrksa. Ethan se relajó un poco.

- ¡ahy verdad! error mío, Señorito Agreste- habló. La sonrisa de Chat Noir cambio a una expresión confundida.

- ¿cómo te enteraste?-

- ¡era obvio! o al menos lo era cuando te ponías igual de celoso cuando yo estaba con Marinette- contestó. Corrió a propinarle un golpe en la cara pero el rubio lo esquivó.

- me da igual cretino- dijo tratando de localizar el objeto akumatizado.

Se distrajo tanto que Ethan aprovechó y golpeó con su puño de hierro una pared y los escombros le cayeron encima a Chat Noir. Este soltó quejidos de dolor. El castaño se acercó con una sonrisa maliciosa y lo tomó por la cola del traje al rubio adolorido.

- ¿eso fue todo?- preguntó divertido. El joven le rasguñó la pierna al castaño y este lo soltó quejándose de dolor.

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- ¡nada me hubiera pasado amiga!- exclamó frustrada la morena. A Marinette se le agotaba la paciencia.

- ¡claro que si! si te lo hubiera dicho podrías haber quedado akumatizada de nuevo y Hawkmoth aprovecharía y te utilizaría para que-

- respira Marinette- la interrumpio Alya. La peliazul obedeció.

- la verdad es que yo nunca lo hubiera publicado en mi blog- mencionó. - pero entiendo la razón- dijo mirando al suelo. Ladybug le dió un abrazo.

- no importa-

- es por eso que llegabas tarde- ambas rieron.

- si, pero me alegro que nunca lo sospecharas- se separó. - ahora necesito que vayas a tu casa-

- Marinette- Alya iba a protestar.

- soy Ladybug aún, ¿recuerdas?- la morena sonrió.

- cuídate amiga, por favor- pidió Alya y le dió un último abrazo antes de irse a su hogar.

- lo haré- susurró la moteada.

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- ¡gato idiota!- gritó y se miró la herida. El rasguño cortó la ropa y se notaban cinco líneas de sangre escurriéndose por la pierna.

Chat se puso de pie a pesar del dolor en su espalda. Ethan lo miró con odio y estaba a punto de pegarle de nuevo pero algo le freno la mano. Ladybug tiró del yoyo con fuerza e hizo caer al akumatizado.

- ¿estás bien?- le preguntó al gatuno.

- si, nada grave- contestó. Corrió fuera del hotel cuando Ethan volvía a levantarse.

- ¿sabes donde esta su akuma?-

- creo que no- Chat apretó su bastón al verlo salir al pelinegro.

- ¿no estabas tirado?- preguntó irritado.

- si quieres verme tirado tendrás que hacer algo mejor- retó el rubio.

Ethan se abalanzó sobre los dos tratando de golpearlos a pesar de que los héroes esquivaban los ataques. Ethan golpeó el suelo con sus dos manos causando que la calle temblara. Aprovechó que sus contrincantes detuvieran el ataque y se echó a correr. Ladybug logro enredar su yoyo en el brazo del joven pero este siguió corriendo, arrastrándola a ella consigo. La moteada le gritó a su compañero y este le agarro de la cintura.

Evidentemente, la velocidad del akumatizado disminuía. Chat jalaba de la cintura de la peliazul para tratar de frenarlo, con cuidado de no clavarle las garras a la chica. Ethan se detuvo abruptamente de modo que Ladybug y Chat Noir cayeron al piso. Ethan se desenredo el yoyo y tiro de el, lo hizo girar junto con Ladybug y Chat que se aferraba a ella.

- ¡sujétate gatito!- le grito la azabache apretando los puños. Chat solo sonrió.

Estaba mareado y sentía que su fuerza se agotaba. Se soltó y dió a parar a un poste. Recibió el golpe en el estomágo y tomó aire.

- creo que perdí una de mis siete vidas- murmuró.

Con el rabillo del ojo divisó una luz fugaz roja que salió desprendida a una pared.

- ¡Ladybug!- iba a correr hacia ella pero la peliazul se levantó de inmediato.

- ¡ve tras el!- gritó apuntando al pelinegro que salía huyendo.

Chat obedeció y Ladybug se sentó un rato. Sentía un lastimado en la espalda pero solo tomó aire. No encontró a ninguno de los chicos. Subió a los tejados y entre la oscuridad, logró distinguir una melena rubia a lo lejos. Corrió lo mas rápido que sus pies le permitieron.

Chat empalideció al ver donde es que lo conducía el akumatizado. Se detuvo en un techo frente a la mansión. Ethan se giró.

- ¿no vas a entrar? ¿temes de tu propio hogar?- se burló y por una ventana entró.

El rubio lo siguió y con sus reflejos logró esquivar el puño de su contrincante a tiempo. Justo a tiempo. Gracias a su visión nocturna, podía ver con claridad los torpes movimientos del pelinegro. Le puso el pie y lo golpeó en la espalda con el bastón haciéndolo caer. Ethan movió sus pies a los lados para hacerlo tropezar al heroe.

Cuando este cayó, el otro se levantó y frenéticamente buscó el interruptor. Al encender la luz, se tiró sobre el rubio para golpearlo en el rostro. Chat le clavó las garras en el brazo. Ethan se alejó soltando un grito. El héroe agarró su bastón y corrió tras el joven que huía por los pasillos.

Entraron a otra habitación con la luz prendida. Ethan le dió un portazo en la cara a Chat. Se pasó una mano por debajo de su nariz. Sin sangre. Bien. Alzó la cabeza pero vió a Ethan tirarse sobre él.

- ¡idiota!- le gritó el entre golpes. - ¡por tu culpa Marinette no me ama!-

- ¡nunca lo hará!- de un puñetazo se volvió a poner de pie y lo golpeó de nuevo con su bastón.

- ¡si fueras menos cretino ella te daría al menos su amistad!- exclamó.

Ethan se cubría con sus puños de los ataques del gatuno. Lo apartó de una patada y abrió la puerta oscura que Chat no había notado que estaba ahí. Antes de que el pelinegro entrara, el héroe le rasguño en la cara. Ethan lo pateó con ira haciéndolo rodar al rubio por las escaleras.

Al bajar por todas, Chat se levantó adolorido con la ayuda de su bastón. Abrió sus ojos y los volvió a cerrar hasta acostumbrarse a la luz blanca que pasaba por una ventana con un raro diseño. Soltó quejidos de dolor.

- al fin- escuchó una fría voz hablar.

- me da gusto volverte a ver, Chat Noir- el nombrado puso una expresión de odio.

- pues temo pensar de otro modo, Hawkmoth-