El resto de nuestro equipo favorito pasaba caminando por uno de los enredados túneles, con Spitelout a la cabeza, Hiccup pisándole los talones, seguido de un paranoico Patán que observaba a todos lados, los gemelos dándose empujones y un preocupado Patapez que miraba a Heather, quien iba algo rezagada.

-¿Vas bien?- se atrevió a preguntarle, pues incluso podía escuchar los jadeos de la pelirroja a través de su máscara. No obstante, ella se limitó solo a asentir

Aunque su mismo cuerpo se rehusaba a darle la razón, ya que pronto empezó a sudar de más, sentía las gotas caer por su piel, casi podía pensar que su frente lloraba sin razón alguna, también comenzó a marearse, ya no lograba enfocar con precisión su vista y apretó su agarre en la Varita Suprema consiguiendo otro terremoto.

-¿Eres tú? ¿Tú lo estás haciendo?- Haddock volteó rápidamente a verla.

-Oye, salvadora, creo que no entendiste el concepto de ser sigilosos y rápidos.- le reclamó el menor de los Jorgenson al mismo tiempo que se apoyaba en una pared para no caer por el movimiento.

-La verdad que yo tampoco lo entiendo.- admitió Brutacio alzándose de hombros.

-Heather, relájate.- intervino Brutilda tratando de mantener el equilibrio- ¡Nos vas a matar!- le indicó alzando la voz.

-Si me concentro cuando sé que voy a estornudar, lo logro evitar.- le habló dulcemente Ingerman, quien al ser el más cercano, optó por tomarla con delicadeza del brazo. Sin embargo, sólo logró que Heather se sintiera más ofuscada y se alejara de inmediato.

-No voy a estornudar otra vez, Patapez.- musitó retrocediendo unos pasos, como si así fuera a llevar más aire a sus necesitados pulmones.

-¡Solo muevánse, tenemos que seguir!- les gritó Spitelout a todos. La urgencia en su voz logró calar a Berserker, quien se sobresaltó, pero detuvo aquel sismo de forma abrupta.

-Ok, para la próxima, solo tenemos que gritarle.- comentó el Thorton con una sonrisa de oreja a oreja.

-¿Ya estamos cerca?- le cuestionó el castaño al mayor del equipo.

-No te preocupes, tortolito, verás a Astrid muy pronto.- se burló el pelinegro con una gran sonrisa de lado, pero luego dejó de caminar, por lo que casi Hiccup choca con su espalda, para después mirar a todos lados buscando otra salida.

-Sólo admítelo, te perdiste, compadre.- fue el turno de Brutilda para burlarse.

-No. Me estoy orientando.- refutó Spitelout entre dientes, hasta que divisó al líder de los trolls caminar amhacia ellos, seguido de algunos de sus secuaces.

El nudo que se formó en su garganta por poco lo deja sin respiración.

-Ahg, qué maldito día.- se quejó el más grande con su hermano y ambos detuvieron sus pasos al encontrarse con el nuevo grupo- Me enteré de un derrame en uno de los niveles más bajos, necesito un par de supervisores allá para que vigilen que los inútiles lo limpien bien. Ve tú.- señaló al más bajo.

-¿Yo? Ah, ah...- balbuceó Patán cuando sintió cada vello de su cuerpo erizándose- No, pero gracias, qué considerado de su parte en notar mi talento de supervisión, no pasa muy a menudo.- agradeció mirando, a través de la máscara, con desdén al hijo de Estoico y Valka.

-¿Qué dijiste?- gruñó el hermano del líder intentando acercarse, pero el mayor le restringió el paso.

El ojiazul rió nerviosamente antes de poder contestar.

-¡Qué me encantaría, su señoría! Sin embargo, eh, tengo que subir para, eh...- se detuvo un instante, esperando que alguna de sus neuronas lo ayude tratabajndo en una mentira convincente, pero justo antes que Heather intervenga, Odín pareció escuchar sus súplicas- ¿Motivar a las tropas? ¡Sí, eso! Deben estar deprimidos, porque se les quitaron los descansos.- improvisó con una exagerada sonrisa.

-Te dí una orden. ¡Obedécela!- le gritó el jefe a centímetros de su rostro y el humano sólo pudo abstenerse de no hacer un comentario sobre su mortal aliento.

-Claro, por supuesto. Era una bromita.- musitó encogiéndose de hombros para luego seguir al grupo de trolls que lo llevarían hasta la zona indicada.

-Qué imbécil.- se atrevió a decir la gemela, fingiendo una voz más gruesa, cuando los hermanos les dieron un últimos vistazo a todos y se fueron a encargarse de sus propios asuntos.

Patapez, Heather e Hiccup, una vez que estuvieron solos, soltaron el aire que habían estado reteniendo.

-Bueno, ya se nos fue, ahí quedó.- habló Brutacio llevándose sus manos al pecho con pesar- ¡Yo me quedo con su hacha y su habitación!- exclamó efusivo luego de unos segundos de silencio.

-Estará bien, es bueno bajo presión.- pudo decir Spitelout, antes de seguir con su camino hacia las jaulas.

∞ ∞ ∞

Camicazi tocó una puerta que Alvin le había señalado, sólo bastaron unos segundos para que un relajado troll la atendiera sin estar alerta.

-Disculpa, ¿y el baño?- le cuestionó la hechicera con inocencia y, cuando él quiso levantar su hacha, ya fue muy tarde. Astrid tomó el arma igualando la velocidad de un rayo y Alvin aprovechó el momento para derribar al troll de un sólo puñetazo.

-Dijiste que nadie escapaba jamás.- le recordó la joven al fornido castaño, mientras avanzaban con una cautela guiando sus pasos.

-Pues, estaba en una fase complicada, buscando algo de paz interior, me sentía algo letárgico y atrapado. ¿Sí me entiendes, princesa?- le cuestionó sarcásticamente mirándola por sobre su hombro y Hofferson alzó una ceja.

-Fue hace como 8 minutos.- indicó incrédula.

-Y ha pasado mucho desde entonces. ¡Ahora estoy de vuelta!- exclamó girándose para poder tomarla por los hombros- Encontraremos a Ragnar, saldremos de aquí y, al fin, podré retomar mi gran pasión: beber hidromiel.- señaló con efusividad, antes de volver a darse la vuelta y seguir su camino como si nada.

-Este tipo está loco.- le murmuró la princesa a la hechicera, quien secundó su comentario asintiendo con la cabeza.

∞ ∞ ∞

Tras su accidentado encuentro con aquel grupo de trolls, en el que uno de ellos se había osado a refutar una orden, los hermanos iban de regreso a la base de jaulas para poder regodearse en la desesperación de sus prisioneros. Sin embargo, cuando dieron sólo un paso dentro del lugar, sus venas ardieron de ira al darse cuenta que habían escapado.

-¡Encuéntrenlos!- le gritó el líder a su hermano menor, quien salió corriendo tras un sobresalto.

Cuando los tenga nuevamente frente a él, ninguno de ellos saldría con vida.

¡Hola hola, genteeeeeeee!

Espero que les haya gustado el capítulo de hoy, lo hice con mucho cariño para ustedes. 💗

Ya no falta casi nada para que todos se reencuentren y, por fin, vean la forma de salir de aquella montaña con vida y seguir en la búsqueda de Eret, al parecer, al pobre lo tengo olvidado, jiji.

¿Qué tal les va pareciendo la historia hasta aquí?

Bueno, eso es todo por hoy...

¡Nos leemos pronto! 🥰

A_Hiccstrid