Capítulo 2

6 días antes.

—¿QUÉ DIJISTE?

—VOY A LA COCINA, ME ESTÁN LLAMANDO.

Ni siquiera recuerdo donde está la cocina, solo empiezo a caminar entre la inmensa sala. El tipo que está controlando la música está llenándose el cuerpo de alcohol y todo mundo a su alrededor lo anima entre gritos. 

Hombres.

Debe ser más de media noche y mi papá acaba de telefonearme, eso es algo muy extraño. Le dije que me quedaría con Santiago y cuando salgo de fiesta no me llama a media noche, tal vez sí a las 10 para decirme que se va a dormir y que cualquier cosa le hable, pero a media noche no. Tal vez me ha marcado por error.

Dejo el ruido atrás en un suspiro al entrar a la cocina que por fin he encontrado. Veo al chico anfitrión, se llama Guillermo y es amigo de Santiago. Tiene la frente recargada en la pared y está hablando por el teléfono blanco que está en esa inmensa cocina.

La casa en general es enorme. Guillermo y Santiago se conocen porque asisten al mismo club de tiro. Yo soy amiga de Santiago porque fuimos juntos en la secundaria, es por eso que estoy aquí, en esta fiesta tan de "hijos de papi".

Me doy cuenta que no está hablando en español, sino en alemán. Santiago me contó que la mamá de Guillermo es alemana y que de hecho, ella, su esposo y sus hijos pequeños se han ido a Europa.

Por eso la fiesta es en su casa.

Me siento ante la barra de la cocina y empiezo a teclear rápido para enviarle un mensaje a papá. Escucho que Guillermo ha colgado el teléfono y por la periferia de mi vista veo que se acerca.

—¿Estás bien? —me pregunta.

—Sí, estoy enviándole un mensaje a mi papá.

—Creí que ibas a vomitar o algo parecido.

—No ­—dejo escapar una risa justo en el momento en que mi celular suena y contesto—. ¿Pa?

—María ¿Sigues con Santiago? —oigo su voz un poco preocupada.

—Sí.

—Bien, no estoy en la casa, a tu mamá le ha dado fiebre y vómito y vamos de camino al doctor. Si no tienes llaves mejor quédate en casa de Santiago porque no sé a que hora volvamos.

—¿Estás bien?

—Sí, solo te avisaba para que no llegues a la ca...

La comunicación se corta en el mismo momento en que la luz en toda la casa parpadea varias veces antes de volver. Eso ha estado sucediendo todo el día y seguro que CFE* ya tiene 20 mil quejas. Mamá me dijo que tal vez es una tetra del gobierno por todo el asunto de la privatización.

—¿Qué? —Guillermo sigue en la cocina y me está observando con curiosidad—. ¿Hay algún problema? Si necesitas quedarte puedes hacerlo, mis padres no van a llegar mañana, suspendieron todos los vuelos de Europa.

—¿Es en serio?

—Sí, acabo de hablar con mi abuelo. Mi familia está varada en Frankfurt. Han suspendido todos los vuelos entre cualquier país de Europa y América. ¿Crees que tenga que ver con lo que sucedió en Rusia?

Hace solo dos semanas que el mundo ha tenido una noticia que ha comenzado a generar decenas de hipótesis. Dos meteoritos cayeron en la Tierra, uno en el norte de Rusia y otro en la Antártida. Ha sido bastante extraño porque al parecer la NASA no se dio ni cuenta que venían hasta que ya estuvieron aquí. No ha habido muchas noticias sobre eso, solo que nadie salió herido con el impacto. Por supuesto, han salido un montón de teorías de conspiraciones y el hecho de que ningún gobierno diga nada no ayuda en absoluto a disminuirlas.

Guillermo me da la espalda para prender una pantalla que hay en la cocina. Busca un canal de noticias hasta que lo encuentra. Ambos observamos en silencio imágenes de aeropuertos repletos de personas que lucen impacientes.

—...miles de personas se han visto afectadas por esta repentina decisión de los aeropuertos de Europa, Asia y África. Todos han presentado fallas en sus terminales, y con el accidente ocurrido hace una hora en el aeropuerto de Moscu, los vuelos han sido interrumpidos hasta nuevo aviso —una señorita narra y se calla abruptamente antes de titubear—. ¿Cómo...? Oh, está bien, sí. Noticia de último momento, la OMS acaba de extender la declaración de emergencia iniciada en Rusia y China. Ahora también a Estonia, Letonia, Lituania, Ucrania e India, donde se están presentando repentinos casos mortales a causa del brote de gripe aviar que comenzó hace 4 días. Los países antes mencionados ya reportan más de 100 muertes a causa de este brote... vamos a enlazarnos en directo...

Un hombre en una conferencia de prensa acaba de salir a escena, se pasa un pañuelo por la frente antes de acercarse al micrófono. Habla en inglés pero el noticiero comienza a hacer una rápida traducción en un español que suena a español de Miami. Dice un montón de cosas que yo no logro entender muy bien, hasta que llega a otro punto que es bastante claro.

—... que le epidemia que considerábamos se debía a la gripe aviar, ha presentado otros síntomas que nos hacen creer que estamos tratando con un virus que afecta el sistema inmunológico con una rapidez nunca antes vista. El virus no se transmite por vía aérea, pero si mediante fluidos corporales. Estamos organizándonos con las oficinas de salud de Rusia y todos sus países vecinos para la intervención oportuna...

La luz vuelve a parpadear y esta vez se va por completo, dejándonos a oscuras. Escucho que en la sala empiezan a abuchear al chico de la música. Prendo la luz de mi celular y Guillermo a mi lado hace lo mismo.

La puerta de la cocina se abre y escucho clara la voz de Santiago.

—Dejen de manosearse.

Santiago nos alumbra con su celular esperando tal vez sorprendernos in fraganti , luego nota que algo no anda bien porque deja de sonreír como tonto.

Le contamos lo que acabamos de oír en las noticias, pero no podemos hacerlo bien porque uno de los amigos de Guillermo entra haciendo escándalo.

­—¿Tienes bocinas con baterías? —es ese tono fresa de universidad particular, de esas que abundan por esta zona.

—No, pero acabamos de oír cosas en las noticias, ¿no está tu papá en Hong Kong?

—Sí. Fue a hacer un negocio con los chinitos. ¿Dónde hay más tequila?

Por Dios, solo ruego que se saque la papa de la boca.

—Leo, es que en las noticias hablaron sobre el brote de gripe aviar.

El muchacho se echa a reír estúpidamente comprobando que en definitiva está ya borracho.

—¿Y eso qué? Si se mueren muchos chinos a mí no me importa, ya hay bastantes en el mundo.

Le da un empujón a Guillermo que no se lo toma muy bien y lo empuja de vuelta. No puedo ver bien pero Leonardo ha caído al suelo de la cocina y se levanta poco contento.

—¿Qué te pasa?

—¿Qué te pasa a ti?

—Oh por Dios ya están malacopeando —no me doy cuenta en el momento en que otra chica entra a la cocina. No sé cómo se llama, solo sé que es bastante guapa y tiene un cuerpo increíble.

—Vámonos al penthouse de mi hermano, Diana. Hay que decirle a los demás. A Billy ya le está dando por ponerse nena.

Noto que el "Billy" es bastante despectivo. En cuanto esos dos salen de la cocina miró a Santiago buscando alguna respuesta.

—Si quieres que nos vayamos vas a tener que manejar tú porque tengo varias cervezas encima.

Al final casi todo mundo se va y no está tan mal porque la luz no vuelve aquella noche.

En casa de Guillermo solo nos quedamos 7 personas y dos de ellas se van muy temprano, antes incluso de que abran el metro.

Estoy en un cuarto de huéspedes tecleando en mi teléfono, esperando que mi papá me responda el mensaje que se supone le envié hace como media hora mientras busco alguna noticia acerca de Rusia o de los aeropuertos cuando Santiago entra repentinamente.

Está hablando por teléfono con alguien, supongo que es su papá. Dice "Sí" muchas veces y luego cuelga. Tiene una mirada bastante preocupada.

—¿Qué pasó? Parece que viste un fantasma.

—Mi papá dice que salga de la ciudad ahora.

El papá de Santiago es militar, tiene algún buen puesto. No está aquí en este momento, al parecer anda por Sonora, Sinaloa o por algún lugar de esos, capturando narcos, o fingiendo que los capturan, no lo sé, no quiero juzgarlo porque es el papá de mi amigo, aun si como padre ha hecho cosas que dejan bastante que desear.

Lo primero que pienso cuando Santiago dice eso es en narcotraficantes. Mi mamá siempre ha tenido miedo que Santiago sea hijo de un militar por eso mismo.

—¿Está todo bien?

—No. No hay luz en toda la ciudad.

—¿Qué?

—Necesito ir a mi casa por unas cosas —está más que preocupado y ansioso—. Mi papá me ha dado una serie de instrucciones. No vas a ir a tu casa, te llevaré conmigo.

Me levanto de la cama sin entender que demonios está sucediendo. Es en ese momento cuando Guillermo se asoma. Luce de lo más pálido y lleva consigo una radio de pilas.

—Fui a buscarla —nos dice antes de subirle el volumen.

—...no es una situación que esté sucediendo solo aquí, ni en el país. Las personas ya están asustadas Rodrigo y hay muchos científicos que piensan que todo tiene que ver con los meteoritos que cayeron hace casi dos semanas en Rusia y en la Antártida ¿Por qué nadie dice nada? ¿Por qué la NASA no se dio cuenta? La fotografía que estuvo circulando sobre esa nave espacial no es ningún montaje. Tampoco estoy diciendo que hay que entrar en pánico, pero si usted nos está escuchando, lo mejor será que si presenta algún síntoma acuda inmediatamente al hospital más cercano.

—Perdona que te interrumpa Alonso, a las personas que nos acaban de sintonizar, les decimos: esto no es ninguna broma, no es ningún simulacro, esto está sucediendo en el país. La luz se ha ido en la mayor parte de la ciudad, CFE emitió un comunicado, están intentando reestablecerla y le están dando prioridad a la zona de hospitales. Use las líneas solo si es una emergencia para que no se saturen. Si usted no tiene nada urgente que hacer este sábado, mejor quédese en su casa. Si usted presenta uno de los siguientes síntomas acuda inmediatamente al hospital más cercano...

Mi teléfono suena y ya soy un manojo de nervios que casi se me cae de las manos. Contesto asustada y casi oigo a mi papá gritarme.

—¿Está Santiago contigo?

—Sí...

—Ponlo al teléfono, rápido.

Le doy mi celular a Santiago, que mientras escucha me mira de reojo. Sale de la habitación y entonces Guillermo sale tras él.

Intento prender la televisión que hay ahí, pero nada, sigue sin haber luz. Oigo unos pasos que se acercan, es una chica muy alta y delgada que se asoma tímida a la puerta.

—¿Qué es todo eso que está sucediendo? —me pregunta en voz baja.

Me encojo de hombros y ella va y se sienta a mi lado. Todo es silencio nuevamente hasta que se vuelve hacia mí.

—Soy Carmen ¿y tú?

—María —mi nombre completo es en realidad María Pía, pero odio que me digan Pía.

—¿Eres amiga de Santiago?

—Sí.

—Quiero irme a mi casa ­—me cuenta enseñándome su celular—, no sé si es mi celular el que está fallando o de verdad no hay ningún  uber** disponible.

Ella se lleva la mano a la garganta y carraspea.

—Creo que tengo cruda —ríe.

En ese momento Santiago entra a la habitación. Le exijo mi celular con una mano y cuando lo miro me doy cuenta que se ha agotado la batería.

Excelente.

—Tu papá me pidió que te llevara a casa de tu abuela.

—¿Cómo? No podemos ir hasta Querétaro.

—Lo haremos, pero primero pasaremos a mi casa.

—¿Crees que puedas llevarme a la mía? —salta Carmen con una sonrisa.

­—Lo siento no, tenemos que salir lo más rápido que podamos. Mi papá es General —le explica rápido a Carmen—. Las cosas se van a poner feas.

Cuando salgo detrás de Santiago para reclamarle que no podemos salir hacia Querétaro así nada más, me topo con Guillermo y doy un paso atrás.

Lleva una mochila de campamento en la espalda y no solo eso. Tiene dos rifles sobre su hombro.

—Wow, ¿De dónde sacaste eso? ¿Es del club de tiro? —dice Carmen acercándose y tocando su brazo—. Yo voy con ustedes.

Hace solo un momento que quería irse a su casa. Tengo ganas de empujarla y decirle "¿Es que no piensas en otra cosa que en coquetear en un momento como este?"

—Yo le dije que los trajera —habla Santiago enfrentándome con sus ojos castaños como si acaso yo estuviera reclamando de algo. Parece muy dispuesto a llevarme a rastras si es necesario, tiene esa expresión que pocas veces me ha dirigido. A veces él es como un hermano mayor y cuando se pone en ese plan es horriblemente insoportable—. Los necesitaremos.





*CFE: Comisión Federal de Electricidad. Provee de energía eléctrica en México.

**Uber: empresa de taxis. Existe en muchos países.



¿Quejas? ¿Comentarios? No duden en dejarlos. De verdad me ayudaría mucho :)

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top