[2T] Capítulo 19: Castigo.
Volvimos a la aldea de la hoja después de un fallido rastreo de Sasuke, quizá debí decirles donde se encontraba, pero algo me impedía decirlos...no sabía por qué lo estaba cubriendo.
Shikamaru no me ha soltado la mano en ningún momento, eso me hacía feliz, pero también recordar lo que sucedió aquella vez me ponía triste y molesta.
Me molestaba el hecho que él le haya creído a Hikari.
Cuando nos encontramos con la Hokage, ella regañó a los demás por haberse ido sin su permiso, pero también agradeció el que me hayan encontrado.
Shikamaru me llevó hasta mi casa, él me ha dicho que Asuma nii-chan desde mi secuestro ha estado muy preocupado y que cuando se enteró que posiblemente estaba muerta se puso a llorar.
En todo ese tiempo que no estuve, él se había ido a la casa de Kurenai-san.
Cuando llegamos a mi casa no había nadie.
—Gracias por traerme, Shikamaru. —digo con una sonrisa. —¿Te gustaría pasar?
—Bien.
—Prepararé un poco de té.
—Yo descansaré en tu sillón. —decía con un bostezo.
—Vago~
Fui a la cocina a preparar el té, mientras lo preparaba miré de reojo a Shikamaru el cual se encontraba dormido en el sillón.
Debió de estar muy cansado.
Esperen, él siempre está cansado.
Terminé de preparar el té y lo llevé a la mesita que se encontraba frente al sillón. Shikamaru en ningún momento despertó, le estiré un poco su mejilla para que despertara, pero ni así lo hizo.
Después de mis intentos fallidos de despertarlo, decidí dejarlo así. Él se veía lindo durmiendo.
—Te extrañe, Shikamaru. —susurro a un Shikamaru dormido.
—Yo también te extrañé.
Él me jaló hacía él para darme un abrazo.
—¿Te estabas haciendo el dormido? —pregunté con una risita burlona.
—Desperté cuando estirabas de mis mejillas, pero me daba pereza abrir mis ojos.
—Vago~
—Problemática.
Él me dio un dulce beso, pero entonces aquel beso comenzó a subir de intensidad. Shikamaru pasó un poco su lengua en mi labio como pidiendo permiso para adentrarse, se lo permití y ahora nuestras lenguas se movían al compás.
Nos tuvimos que separar por la falta de aire y entonces él me recostó en el sillón. Shikamaru comenzó dándome pequeños besos en mi cuello, pero entonces sentí una mordedura en mi clavícula, él me miró con una sonrisa mientras pasaba una de sus manos debajo de mi blusa.
Shikamaru se quitó su chaleco chuunin junto a su playera dejando ver su cuerpo bien formado, es bueno tener esta gran vista.
—Al parecer ya no te avergüenzas cuando me vez sin la playera.
—Oh, calla. —le digo mientras lo acerco para darle un beso.
Pude sentir una de sus manos en mi pecho, él los masajeaba por encima de mi brasier.
—Esta prenda es molesta. —decía con fastidio mientras me quitaba el brasier.
Solté un gemido al sentir su boca en mi pecho derecho, él los lamía y mordisqueaba de vez en cuando.
—¿Q-Qué tanto me miras...? —pregunté entre suspiros al ver como Shikamaru me miraba con una media sonrisa. —¿Shikamaru?
Él no me contestó solo comenzó a quitarse su pantalón dejando ver solo su bóxer y su ya abultado miembro.
Antes de que él hiciera algo, me asomé un poco ahí abajo y comencé a tocarlo por encima de la tela.
Oía a Shikamaru soltar leves suspiros.
Bajo aquella prenda y coloco su miembro entre mis manos. Comienzo a moverlo de arriba hacia abajo tratando de darle placer a Shikamaru, aún era una inexperta en esto por lo que no sé si lo estaré haciendo bien.
Shikamaru me volvió a recostar en el sillón y entonces me quitó mis bragas. Él comenzó a buscar su pantalón y cuando lo encontró sacó aquel sobrecito.
¿Cómo es que siempre está preparado?
De forma lenta se adentraba en mi interior y entonces comenzó a moverse.
Ambos soltábamos gemidos de placer.
—M-Más rápido...—pido entre gemidos.
Él comenzó a moverse más rápido, era una sensación muy placentera.
—__-____...
—S-Shikamaru...
Después de un rato llegamos al tan esperado orgasmo y Shikamaru salió de mí.
—Aún podemos seguir. —decía con una sonrisa burlona.
Yo iba a decir algo, pero entonces unas voces me interrumpen.
Con Shikamaru nos miramos asustados y comenzamos a buscar nuestras ropas con rapidez, pero fue muy tarde.
—¡¿Shikamaru?! ¡¿____?! —exclamó mi hermano aterrorizado.
.
.
.
Encerrada en mi cuarto me encuentro, mi hermano después de lo que vio echó a Shikamaru de la casa y nos prohibió vernos.
Ja, si piensa que me quedaré así está muy equivocado.
Me acerqué a mi ventana, pero cuando la intenté abrir esta no se dejaba.
—Maldita ventana...—digo haciendo fuerza para abrirla. —¡¿Por qué no te abres?!
—He puesto un jutsu. —decía mi hermano desde la puerta de mi cuarto. —También he hablado con la madre de Shikamaru.
Oh... ahora sí que no podremos vernos.
Su madre da un miedo tremendo.
—Asuma, déjalos son jóvenes. —decía Kurenai.
—Escucha a Kurenai-san, Asuma nii-chan.
—¡No! —exclamó mientras se cruzaba de brazos. —Al menos dime que se cuidaron.
—Pues claro, no somos idiotas. —rodé los ojos. —Ya déjame ir con Shikamaru.
—No, te quedarás en casa.
—Igual tendremos que vernos cuando nos toque una misión. —le digo mostrándole la lengua. —No podrás separarnos por siempre.
—Los mantendré vigilados.
—¿A sí? —arqueé una ceja. —¿Y cómo piensas hacer eso?
—Tengo mis secretos, _____. —decía con una sonrisa triunfante.
—¿Sabes qué? —digo acercándome a la puerta. —¡Te odio!
Le cerré la puerta en la cara y me fui a mi cama a golpear mi almohada.
Estúpido hermano mayor.
Shikamaru.
Después de que Asuma nos haya atrapados, yo me fui al lugar que siempre frecuento a mirar las nubes y así dormir un rato.
Ahora me encontraba frente a la puerta de mi casa, la abrí con lentitud y entonces me encontré con mi madre, quien me miraba con el ceño fruncido.
—A la mesa, ahora. —decía autoritaria.
Yo solo suspiré con fastidio y fui a la mesa, donde se encontraba mi padre.
—¿Qué sucedió? —pregunto.
—¿Qué sucedió? —decía mi madre con una ceja arqueada. —¡Shikamaru Nara, sabes muy bien que ha sucedido! ¡Asuma ha venido a decirnos lo que has hecho!
Asuma bocón.
—Mamá...
—¡Mamá nada! —gritó. —¡Shikaku dile algo!
—Son jóvenes ya saben estas cosas pasan. —decía mi padre quien recibió una mirada asesina de parte de mi madre. —D-Digo... ¡Shikamaru has hecho mal!
—Gracias, papá. —digo sarcástico.
—Al menos dime que se cuidaron. —decía con una mano en su frente. —Aun no estoy lista para ser abuela.
—Sí.
Mi madre soltó un gras suspiro.
—Aparte de haber hecho eso, te has ido de la aldea sin autorización.
—La Hokage iba a cancelar la búsqueda y yo sabía que ____ estaba con vida. —digo con fastidio. —La hemos traído de vuelta y yo he vuelto. Ya está.
—No le respondas así a tu madre.
—¿Qué hice para que mi hijo se volviera rebelde? —decía dramática. —Cariño nuestro hijo se volvió un rebelde.
—No me volví un rebelde. —bostezo. —¿Puedo ir a mi cuarto?
—Después vendrás a ayudarme con los quehaceres.
—Qué fastidio...—murmuro.
Me fui a mi cuarto y me tiré a mi cama para dormir.
🌟Espero les haya gustado este capítulo 7w7 <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top