Ficha del sospechoso

Nombre: Matt Hansen

Edad: 18 años

Relación con la víctima: Mejor amigo de Jannik

Motivo del crimen: Diferencias, enemistad, pasional

Actividad extracurricular: Jugador del equipo de americano de la preparatoria

El día estaba nublado, se podía sentir una suave brisa de aire fresco que provenía de la ventana abierta. Desde el televisor de la sala se podía escuchar el noticiero matutino, estaban hablando sobre el reciente caso de la reina del baile asesinada la noche del sábado en la preparatoria. Todavía no había detalles al respecto, pero esperaban que pronto encontraran alguna pista para dar con el culpable.

Alguien preparaba el desayuno desde la cocina mientras escuchaba el noticiero, regularmente no tenía que preocuparse por ese tipo de actividades, pero dada la situación, no le quedaba más remedio. La mujer que se encargaba de hacerlo se encontraba sentada en el sillón frente al televisor, sus ojos abiertos demostraban el pánico que había sentido mientras la vida se le escapaba de las manos. Su brazo colgando del reposa brazos, a sus pies se estaba formando un charco de sangre que provenía desde la profunda cortada que le hicieron en el cuello.

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El reloj marcaba las nueve de la mañana, dado que las clases ya habían terminado e incluso se había llevado a cabo el baile de graduación, la preparatoria debería estar cerrada hasta que se entregaran las calificaciones y los alumnos fueran a recoger las cosas de su casillero. Pero ese lunes habían hecho una excepción.

David y Tyra pensaron que sería más sencillo si pedían hacer el interrogatorio ahí mismo a los sospechosos que faltaban. De esta manera no perderían tiempo trasladándose de una casa a otra. Además, David aprovechó la tarde anterior para pedir permiso a la madre de Daphne de poder recoger las pertenencias que estaban en el casillero que usó su hija. Ella aceptó sin problema, de hecho, había sido muy cooperativa cuando el detective fue a su domicilio a revisar sus cosas.

—¿A qué hora estarán llegando los muchachos? —El detective puso a sus pies una caja donde estarían guardando las cosas de la víctima.

—No lo sé, tú dime. Fuiste tú quien los llamó anoche para solicitarles venir aquí a realizar las preguntas de rutina. —La mujer observaba los pasillos a su alrededor, todo estaba tan silencioso y tranquilo.

—Cierto, les dije que llegaran alrededor de las diez. Espero que podamos descubrir algo.

Una vez que abrieron el casillero lo primero que vieron fue un pedazo de tela blanco manchado en sangre que se encontraba sobre unos libros, ambos agentes intercambiaron miradas y rápidamente se colocaron los guantes de látex que llevaban en sus bolsillos. David tomó el pañuelo que cubría un filoso cuchillo de cocina, la sangre ya estaba seca y pegada al filo de este. Tyra no tardó en hacer la llamada al departamento de homicidios para pedir que alguien fuera hasta allá para recoger la evidencia y ver si encontraban alguna huella.

Fue cuestión de minutos para que un agente del equipo de investigación llegara a guardar la prueba en una bolsa transparente. Aprovechó para hacer una inspección rápida y tomar fotografías de lo que había dentro del casillero. También tomó algunas huellas de la puerta y el candado del casillero, pero no creía que fuera a ser muy útil, considerando la cantidad de alumnos que habrían puesto su mano ahí alguna vez, incluidas las huellas de David que había abierto la puerta tan solo unos minutos atrás.

Fuera de la presunta arma homicida, no había nada más que fuera relevante al caso. Pero de igual forma, el detective guardó todo lo que había ahí en la caja que había llevado. Tyra cerró el casillero y juntos emprendieron el camino hasta el laboratorio de química, donde estarían haciendo el interrogatorio.

En lo que llegaban los interrogados, estuvieron platicando acerca de lo averiguado la tarde pasada, cuando cada uno tomó un rumbo diferente. El detective, que se había encargado de ir hasta el domicilio de la víctima, tuvo una breve charla con la madre de Daphne para saber si ella sabía de alguien que quisiera hacerle daño a su hija, pero no tuvo suerte. En su habitación no encontró ninguna pista a pesar de que revisó todos los cajones, no tenía un diario y en su computadora tampoco había nada relevante más allá de documentos sobre tareas. En la papelera de reciclaje encontró fotos de ella con Jannik, tenían fecha de haberse eliminado el mismo día que salió de fiesta con sus amigas en su noche de chicas solteras.

Por su parte, Tyra le contó cómo le fue en casa de Blue. La mujer había pasado toda la noche dándole vueltas a lo que había platicado con la joven. Su experiencia le decía que la pelinegra tenía más puntos a su favor para ser considerada la culpable: sufrió bullying de niña, quien fuese su mejor amiga y salvadora pareció darle la espalda en cuanto entraron a la preparatoria, su amistad terminó y pudiera ser que el odio creció dentro de la joven, al grado de llevar a cabo un crimen y la más importante, tenía detalles que nadie fuera del caso sabía. Pero no podía dar nada por hecho, no sin una prueba concreta.

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Poco después de las diez de la mañana, se escuchó un golpeteo en la puerta del laboratorio. Tyra se aproximó a abrir.

—Hola, pasa. —Tyra la sonrió al recién llegado. 

Era un muchacho alto, fornido, de cabello café claro y ojos color avellana. Al igual que Jannik, se notaba lo que el ejercicio constante podía dar como resultados. El muchacho se veía apagado, sin muchos ánimos, incluso en su vestimenta se reflejaba su pesar. Llevaba una camisa de manga larga negra que se veía algo desgastada, sobre ella, la chaqueta del equipo de americano al que pertenecía, unos pantalones de mezclilla y unos tenis que en su momento debieron ser blancos, pero ahora se veían ligeramente amarillos.

—Tú debes ser Matt. —Comentó David mientras pasaba de un expediente a otro hasta dar con el del chico —. Yo soy el detective David Popkins y ella es mi colega Tyra Winkler. Te llamé anoche porque queremos hacerte un par de preguntas.

El chico tomó asiento en una de las sillas altas detrás de una de las mesas. Los agentes ocupaban la mesa asignada al profesor.

—Pregunten —sonaba muy tranquilo.

—Veo en tu expediente que ya tienes 18 años, ¿cierto? —Cuestionó el detective.

—Sí, los cumplí hace un mes.

—Por favor cuéntanos un poco sobre la relación que tenías con la víctima, Daphne. —Tyra sacó su libreta de notas.

—Éramos amigos, nos llevábamos bien porque ella era novia de Jannik, mi mejor amigo y compañero en el equipo de football. Coincidíamos en los partidos porque ella era la capitana de las animadoras y también llegamos a salir juntos algunos fines de semana con más amigos de ambos equipos.

—Sobre la noche del sábado, ¿qué puedes decirnos al respecto? —El detective se levantó de su asiento y se recargó en la mesa del profesor.

—Estuvimos gran parte de la fiesta juntos, por lo menos hasta que fue la coronación. Después de eso ella se fue con Jannik y ya no la volví a ver —bajó la mirada.

—Alguien nos comentó que te vieron con actitud sospechosa, como si escondieras algo en la chaqueta de tu traje. —Tyra sacó a colación el comentario que le había hecho Blue la tarde anterior.

—¿Escondiendo algo? —Eso pareció alertar al chico —. ¿Quién? Yo no escondía nada, y quien quiera que les haya dicho eso está mintiendo. Claramente intenta culparme a mí para salvarse a sí mismo. —Era notable su molestia.

—Matt, necesitamos saber la verdad. Blue mencionó...—Pero en cuanto el detective dijo el nombre de la chica, Matt lo interrumpió aún más molesto.

—¡¿Blue?! ¿Le van a creer a alguien que llegó de manera ilegal a este país? — Tyra y David se miraron extrañados —. ¿Acaso no sabían que su familia llegó de contrabando en un barco que traía mercancía proveniente de China? Llegaron sin papeles y nadie ha hecho nada por regresarlos a su país —el chico se cruzó de brazos —, bien deberían haberlos encarcelado por haberse establecido aquí.

—No sabíamos eso, pero nosotros no somos parte del equipo de migración así que es irrelevante para el caso. —Mencionó Tyra —. Además, bien lo has dicho, su familia pudo haber llegado de forma ilegal, pero ella nació aquí. Por lo tanto, es una ciudadana más, así como tú y yo.

—Le voy a pedir, señorita Winkler, que no nos compare. Ella y yo no somos iguales —espetó —. Además, si me lo preguntan, podría casi asegurar que quien asesinó a Daphne fue precisamente Blue Wo. No pudo soportar cómo Daphne se volvió tan popular, la envidia y el odio transita por sus venas.

—Quizás usted actuó en petición de alguien más. —La mirada del chico se dirigió al detective —. Sabemos que hace poco la víctima terminó su relación con su mejor amigo, Jannik. Tal vez, le pidió a usted, joven Hansen, que la asesinara.

—¿Qué estupideces está diciendo? —Hizo una mueca de desagrado —. Jannik no sería capaz de algo así y por supuesto que yo tampoco le habría hecho daño a Daphne. —Su rostro se relajó y volvió a bajar la mirada —. Ella era muy buena, nunca le hizo daño a nadie. Incluso era tan buena que durante varios años fue amiga de esa. —Soltó con desprecio —. Afortunadamente pudo recapacitar. Ella era la persona más dulce que pudieran haber conocido además que era divertida e inteligente, el mundo no la merecía ¿saben? Lástima que puso sus ojos en Jannik. —Ese último comentario no pasó desapercibido para la psicóloga.

—Entonces afirmas que ni tú ni Jannik fueron los culpables de esta desgracia. —David se puso frente a la mesa que ocupaba Matt —. Pero apuntas hacia Blue, por el desprecio que sientes hacia ella. No creo que estés siendo muy imparcial con tus comentarios.

—Yo solo le digo lo que sé, antes de que nos dieran aviso de la tragedia, Jannik y yo estábamos con otros compañeros del equipo planeando el after que sería en mi casa, puede preguntar a cualquiera de ellos y le dirán exactamente lo mismo. —Esa parte coincidía con lo que había dicho Jannik.

Cuando Matt salió del laboratorio, Tyra y David se tomaron unos minutos antes de pasar al siguiente sospechoso. Tanto Joss, como su novio Gregory, se encontraban en el pasillo esperando a que los llamaran.

—¿Qué opinas? ¿Cómo viste a este chico? —David sacó del bolsillo de su pantalón la cajita de Tic Tac y se introdujo una pastilla a la boca.

—Algo me dice que no fue sincero al decirnos que no escondía nada en la chaqueta del traje, pero hay algo que puedo decirte. Matt Hansen tenía sentimientos hacia Daphne, sentimientos que iban más allá de una amistad.

—¿Por qué lo dices? —el hombre terminó de revisar algunos papeles y posteriormente los guardó.

—La manera en la que habló de ella, tanta devoción hacia quien fue la novia de su mejor amigo. —Tyra se encontraba en la puerta, observando por la ventana de la misma, a la pareja que esperaba pacientemente afuera para ser llamados a entrar.

—Un amor no correspondido también puede ser razón para terminar asesinando a alguien. Quizás creyó que tendría una oportunidad al saber que ella y su amigo habían terminado. Pero se llevó la sorpresa de que ni así era correspondido y ya sabes, esa frase de si no eres mía, no eres de nadie.

—Es una posibilidad que no descarto —soltó un suspiro largo.

—Si me preguntas a mí, de entre los tres sospechosos que hemos interrogado, me inclino más hacia que la asesina de Daphne, fue Blue.

—Eso parece, pero mejor hagamos pasar al siguiente —Tyra abrió la puerta y le hizo una seña a Joss para que se acercara.