uno
Historia con lenguaje fuerte, escenas de violencia, y contenido sexual explícito. Ambientada en una relación incestuosa.
Obviamente no estoy a favor de esto ni lo intento promover. Lean bajo su propio riesgo. Las quiero❤
Lalisa
El timbre sonó dos veces, justo en el momento en el que mi boca comenzaba a saborear a gusto la de Jungkook y sus manos grandes apretaban mi trasero enviandome una corriente de electricidad por todo mi cuerpo.
Ambos seguíamos en lo nuestro. No era como si nos importara demasiado el timbre. Sin embargo este volvio a sonar de forma insistente mientras gritaban "¡Veo las luces encendidas!".
Jungkook gruño tomando todo el control que podía ser capaz de tener, para alejarse de mí abruptamente. Yo también rodé los ojos. Nos habian arruinado el momento.
-En otra ocasión será.-bromeé. A el no le hizo ni una pizca de gracia, por supuesto. Tome mi bata de seda que me cubriría el cuerpo desnudo y luego de eso sali de la habitación a pasos tranquilos hasta llegar a la puerta de entrada.
Abri la puerta de inmediato intentando que aquella visita estupida terminara lo mas rapido posible. Mientras mas dejara pasar el tiempo peor seria, asi que puse mi mejor sonrisa y observé al chico que se presentaba frente a mí. Tenia el cabello gris platinado y unas mejillas regordetas que ironicamente daban ganas de apretarlas.
-Hola-dijo, de repente ahora avergonzado.-tu...¿tu vives aquí?
Mire hacia mis espaldas como quien no entiende la cosa. Hice una mueca.
-¿Acaso ves a alguien mas abriendo la puerta?
Mi pregunta solo provocó que se sonrojara de la vergüenza. Miro hacia el suelo nervioso.
-Lo siento. Es que... no pareces muy mayor.
-Cumpliré 17 en unas semanas.-informe como si realmente a ese chico le importara-pero en fin ¿Que haces por aquí?
-S-Soy Park Jimin.-dijo, titubeando. Agh, tontos chicos.
-Muy bien Jimin. No pregunté tu nombre. ¿A que se debe tu visita?
-Somos los vecinos de la casa de al lado y pensamos que seria agradable hacerles este past...
Mis ojos bajaron hasta lo que descubrí recién en ese entonces lo que era un gran pastel de chocolate con crema en los bordes y frutillas adornando este. Mi dedo sin pensarlo fue hasta un pedazo de crema que tenia arriba junto a las frutillas y degusté el sabor en mi boca.
-Dile a tu madre que es una excelente cocinera.-luego de limpiarme la boca, sonrei falsamente-¡Muchas gracias, nos vemos luego!
Sujeté el pastel con mis dos manos y cerre la puerta en su cara.
Mi sonrisa desapareció de inmediato dejando mi mal humor habitual y luego, me dirigi al cesto de basura para arrojar el pastel dentro.
Para ser sincera el pastel era horrible y me quedaba corta con ello.
-¿Quien era?-preguntó Jungkook terminando de abotonarse la camisa. Se veia tan sexy con su cabello despeinado. Mordí mi labio inconscientemente.
-Nadie.-respondí con una sonrisa. Me quite la bata de inmediato y camine hacia el.-ahora solo terminemos lo que empezamos.
-Debo ir a trabajar, pequeña. La hora de juegos se acabó.
Mi sonrisa fue cambiada por una mueca llena de enojo.
-¡Dijiste que hoy estariamos juntos!
-Pues no salió como esperabamos.-me dijo, frio y distante como Jungkook podia ser.
-No es justo.
-No, claro que no-respondió antes de darme un beso apasionado en los labios. Uno que por mas enojada que estuviera no pude evitar corresponder con las mismas ansias.
-Mañana empezaré la escuela. ¿Vendrás conmigo no?
-Lalice no seas tonta, sabes que tambien iré yo.-susurró bajando su mano hasta mi trasero. Lo apretó sacandome una sonrisa.-¿Quien era el chico?
-El tonto vecino. Me dio un pastel y era tan asqueroso que lo he tirado a la basura.
-Eso es de mala educación.-regañó
-Pues castigame por ello Kook.-susurré con un tono que se asimilo a un gemido lleno de deseo, muy cerca del lóbulo de su oreja. Con mi mano comence a pasar la mano por todo su pecho hasta su miembro y luego lo apreté, mirandolo a los ojos.
Y el, tensando la mandibula por aquel tacto, terminó por suspirar mientras con ambas manos me arrojaba a la cama nuevamente. Largue una carcajada. El comenzó a desabrocharse el cinturón ansioso. En sus ojos podia ver el brillo de la lujuria. Y supe en ese momento que ese día habia sido un punto para mí.
-No deberías provocarme, hermanita.
Yo sonreí victoriosa.
Lalisa 1. Jungkook 0.
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