༄ Capítulo #20. "Vida & muerte"

Por desgracia tuve que aceptar de golpe que fui vilmente engañada por una persona sin escrúpulos, la cual se aprovechó de nuestras debilidades para sacarles provecho desde el comienzo, ya que al tomar el lugar del verdadero Starky su poder y respeto eran incontrolables incluso para Él porque mi tío abuelo real siempre fue un hombre admirado, ejemplar y aclamado por quien tuviera el privilegio de conocerlo en la aldea hasta cuando fue asesinado, por eso, ahora era mi deber hacerle justicia tras refundir en prisión a quien se atrevió a hacerle tanto daño.

-... ¡La guerra entre 2 mundos está por empezar, eh sobrinita!, ¡Ah!, no vaya a ser que mueran más personas inocentes solo por tu culpa, así que ya sabes como solucionar esto, ¡Déjame ir y todo volverá a la normalidad o puedes continuar luchando y soportando las sangrientas consecuencias de querer enfrentarme tú sola! -dijo el hombre frente a mi con el rostro enardecido y los ojos sobresaltados, ya que me acarició el cabello lentamente mientras me susurraba al oído con la intención de volver a hipnotizarme.

-¡No!, ¡No me vuelva a tocar en toda su vida, eh maldita escoria de Satanás!, ¡Juro que pagarás por todo esto y Delfín Negro te esperará!, ¡Yo no seré quien infrinja la ley por un alacrán venenoso como usted!

-¿Estás segura?, ¡Ja!, ¡Muy bien estúpida, entonces sufrirás en carne propia al ver como los demás, tu gente se muere poco a poco solo por ayudarte en esta absurda batalla que podemos solucionar muy sencillo, ¡Ah!, ya una de tus seguidoras está pagando por tus pecados, ¡Uff!, mira hacia allá, ¡Es tu metiche hermana!

-... ¿Qué?, ¿Qué pasa con ella?

-"Su Majestad", ¡Usted es tan estúpida!, ¡Allá está esa chismosa!, ¡Ashh!, ¡Qué ternura me da la pobre gata!, de verdad, ¡Está a punto de dar a luz en ese oscuro rincón a su cría sin padre y ambos van a morir por tu culpa! -afirmó el hombre despiadadamente mientras señalaba a mi adolorida hermana, quien ya no pudo continuar luchando más porque su única hija iba a nacer en ese terrible momento.

-¡Ohhhh!, ¡Hermanita!, ¡Ay no!, ¡Por Dios!, ¡NO AHORA!, ¡Mi sobrinita va a nacer ya!, ¡Mierda!

-¡Eres tú misma quien lo decide, eh!, ¡Perfectamente puedes hacer que yo sane a tu hermana y sobrina con solo tocarlas, así no sufrirán!, ¡Ja!, ¡Sabes que tengo los poderes del real Starky y muchos más!, ¿Recuerdas?, anda reinita, ¡Hazlo y ellas vivirán, o de lo contrario morirán sin piedad frente a tus ojos!, entonces, ¿Qué eliges hacer?, ¿Es un trato? -Preguntó el vil demonio mientras que se reía macabramente frente a nosotras, pues jugaba con mis desequilibradas emociones al ver mi evidente fragilidad ante un pacto tentador.

-... ¡No Gloriana!, ¡NO!, ¡No lo hagas!, ¡Uff!, escucha, de todas maneras yo moriré como debe ser porque mi enfermedad es culpa del destino y la propia vida, ¡Solo no te dejes engañar nuevamente, por favor!, además, ¡También tienes poderes mágicos como Él!, ¡Utilízalos en su contra para ganar!, ¡Yo confío en ti!

-¡Ohhhh!, ¡Es verdad!, ¡Mis poderes!

-¡Ja, ja, ja!, ¡Estúpida!, tus poderes solo son una mentira más creada por mi solo por placer, de hecho jamás existieron realmente, ¡Yo te los di y ahora mismo te los quitaré!, ¡La magia no existe! -dijo cruelmente el mal hombre de nombre Kilomoro mientras que seguía riéndose de mi, pues me arrebató "todos" los poderes que tenía de un solo golpe.

-¡AHHH! -exclamé hallándome adolorida y mareada tras lo que Él hizo, pues mis fuerzas se desvanecieron luego de ver como morían muchas más personas inocentes solo por mi culpa.

-Ya te lo dije, ¡Solo tú puedes evitar más muertes como estas!, vamos, ¡Libérame de aquí y yo detendré todo!, además haré que tu maldita hermana si pueda ver crecer a su sucia hija. -Repitió el hombre con una nueva mueca terrorífica que usó para hipnotizarme, pues estuve a punto de aceptar su llamativa oferta al encontrarme desesperada.

-¡NO!, hermana, ¡No lo hagas, ¡Por Dios no!, ¡Deja que la vida se encargue de mi!, ¡Por favor!

-... ¡Óyeme bien Kilomoro!, ¡Nunca más volverás a decirles malditas ni a mi hermana o a ese precioso angelito que nacerá pronto porque si no
te las verás conmigo!, y si, de acuerdo, acepto que me equivoqué en maldecirla cuando supe que mi sobrinita venía en camino pero hoy me arrepiento de corazón haberlo hecho y si mueren más personas no será mi culpa, ¡Es la tuya por ser un engendro del demonio!

-¡Ja!, ¡Si soy un demonio y no cualquiera, eh perra!, ¡Soy Satanás en persona!, ¡Bu!, ¡Tú jamás podrás detenerme en esta vida!

-¡NO!, ¡Ya no me das miedo a pesar de no ser mágica porque prefiero ver morir a mi hermana y a mi sobrinita que tener que ser tu esclava por toda la eternidad, ¡MALDITO! -aseguré valientemente luego de levantarme del suelo tras estar algo sucia, despeinada y con una espada secreta en mano, pues el falso Starky nos sorprendió de repente, no obstante tuve que ser fuerte y confiar en mi misma para poder continuar luchando luego de recuperar mis poderes, los cuales en realidad siempre tuve y por lo tanto volvía a confirmar lo de Christelle.

-¿QUÉ?, ¡Imposible!, ¡PERO CÓMO?, ¡Ohhh!, ya veo, ¡Ja! -exclamó nuevamente el falso Starky con una inolvidable sonrisa macabra, pues desapareció frente a nuestros ojos.

-¡NO!, ¡Por favor no!, ¡Dios mío!, ¡Deténgalo! ¡Ohhhh! -dijo mi debilitada hermana encontrándose bastante preocupada al ver como Kilomoro se estaba escapando hacia la torre más alta de nuestra aldea, pues ahí era su lugar especial para huir cobardemente de nosotros.

-¡Ohhhh!, ¡Tranquila mi amor!, ¡Tú solo encárgate de dar a luz bien y recuerda que SIEMPRE te amaré porque las 2 son como mis hijas al morir su madre pero no te preocupes más!, ¡Ahora soy yo la que me encargaré de Él! -aseguró nuestra tía Rachel tras hallarse igualmente furiosa y anonadada, pues ella también fue muy valiente junto a mi porque debía proteger a su pueblo y a la familia de aquella bestia.

Desde luego, al ver como la ira se apropiaba de nuestra tía Rachel mientras perseguía a ese demonio nos alteró demasiado y mi hermana por fin logró quedarse en paz tras dar a luz a su hijita, la cual nació completamente sana y sin ninguna complicación tal como todos deseábamos, además Catalina logró darle un nombre digno para su sin igual belleza luego de conocerla durante unos breves minutos, por eso la llamó "Natalia" en honor a nuestra fallecida madre al notar que se parecían en ciertos rasgos, más por ende su gran emoción duró muy poco tras derramar su última lágrima en vida al saber que su hija nació bien tal como le rogó a Dios, sin embargo ella murió pocos minutos después frente a mis ojos por culpa de su grave enfermedad pancreática y un flechazo que recibió por la espalda en manos de uno de los seguidores del falso tío abuelo Starky.

-¡AHHH!, ¡Uff! -exclamó mi hermana estando enserio adolorida tras dar a luz a su bebé en medio de la sala real en donde estábamos.

-¡Tranquila hermanita!, ¡Yo estaré contigo siempre!, ¡Ohhhh!, ¡Dios mío!, ¡Solo mírala!, ¡Tu hijita es tan hermosa y lo mejor es que está muy bien de salud porque es una niñita de mejillas regordetas y bastante rosaditas, si, ¡De verdad se parece muchísimo a ti porque yo te recuerdo así de pequeñita y dulce!, y dime algo, ¿Cómo llamarás a esta preciosura?, ¡Ya se!, ¿Catalina? -Pregunté estando en verdad muy feliz y emotiva de tener a mi única sobrina entre mis brazos al haber sido yo quien la trajo al mundo aquella difícil mañana tras conocerla por primera vez.

-¡Ohhhh!, ¡Mi hija!, ¡Dios mío!, ¡Es muy HERMOSA!, ¡Qué alegría escucharla llorar antes de irme para siempre!, ¡Uff!, ¡Por favor escúchame hermana!, ¡Llama a mi bebé ppr el nombre de Natalia tal como nuestra fallecida madre!, ¡Ah!, si, ¡Siempre estaré con ustedes a donde quiera que vayan!, te lo prometo querida hermanita, ¡Mi sabia Reina!

-¿Na-ta-lia?, ¡Ohhhh!, bien, bien, ¡Tu pequeña tendrá ese nombre pero porfavor lucha por tu vida!, ¡Naty te necesita muchísimo!

-... No, ¡Ya no puedo más!, ¡Perdón!, ¡Este será mi fin sobre la Tierra pero no el tuyo, eh!, ¡Tú deberás seguir luchando como siempre porque se desde el fondo de mi alma que tú vas a reinar toda Rusia algún día junto a nuestra familia, y por favor Glo, ¡Nunca le entregues a mi hija a su desalmado padre!, ¡Cuídala tú misma como si fueras su madre en mi lugar al igual que la tía Rachel lo hizo!, ¡Por favor!, ¡Te amo demasiado y nada ni nadie va a poder cambiar eso!, ¡Te lo prometo! -exclamó de pronto mi hermana con una débil y cálida sonrisa, pues a como pudo tomó a su única hija entre brazos para darle un último beso de madre porque más pronto de lo pronosticado la pobrecilla terminó falleciendo como alguna vez se le advirtió.

-¡Ohhhh!, ¿Catalina?, ¡Ay no!, ¡No!, ¡HERMANA!, ¡NO!, ¡Catalina por favor!, ¡Ahora no!, ¡Despierta!, ¡No te vayas aún! -exclamé llorando y gritando muchísimo al ver que mi último familiar directo había muerto, por eso tomé a mi sobrina recién nacida entre brazos para evitarle el trauma de ver a su progenitora muerta, ya que apartir de ahora yo sería la única representación de madre y protectora que tendría.

-... ¡Lo lamento mucho mi Reina pero la princesa Catalina acaba de fallecer! -aseguró de pronto una mujer a mi lado luego de ayudarme a asistirlas, pues la dulce bebé no debía ver la sangre de su madre.

-¡NO!, ¡DIOS MÍO!, ¡NO!, ¿Por qué me pones estas pruebas tan difíciles?, ¡No más por favor! -Grité estando enserio muy desesperada tras todo lo ocurrido, pues abrazé fuertemente a mi hermana por última vez mientras que mi pequeña sobrinita Natalia lamía mis dedos tiernamente en señal de amor verdadero hacia mi.

Gracias a Dios la justicia divina llegó después de la trágica muerte de mi hermana, pues mi tía Rachel logró asesinar con sus propias manos y de un solo golpe al hombre más despiadado del mundo por encima de Christelle luego de insultarla y escupirle en el rostro antes de todo, lo cual desató su más grande ira interior, una que ya había mostrado ante mi años atrás, por eso esa fue la ocasión ideal para liberar cada una de aquellas frustraciones y emociones.

-¡Eres una estúpida, eh!, ¿Creíste que me engañarías así de fácil?, ¡No, no lo hiciste pero ahora mismo acabaré contigo, pues no tienes perdón ni de Dios! -aseguró mi tía Rachel tras seguir al viejo hasta la torre más alta, ya que ella estaba muy molesta mientras que lloraba un poco al sentirse nuevamente violada.

-¡Ja!, ¡Vieja estúpida!, ¡No podrás alcanzarme!, ¡Tú eres la que es una basura, ya que solo resultaste ser una farsa de mujer porque todos aquí y en China saben que no eres más que una sucia PROSTITUTA que buscó refugio en Gloriana por ser la Reina y nada más!, ¡Ah!, si, ¡La sigues odiando por la trágica muerte de tus hijos y a mi no me lo puedes negar!

-¡Ohhhh!, ¡Ahora si te morirás, eh perro malnacido!, ¡Yo soy una de tus Reinas al ser la tía de Gloriana, estúpido ignorante!, ¡Ah!, ¡Obvio que a mi valiente sobrina Gloriana no la odio más tal como antes!, ¡Al contrario!, ¡La admiro demasiado!, y no, no soy una prostituta como dices, solo que al parecer el día de hoy me convertiré en asesina. -aseguró mi tía Rachel encontrándose muy agitada mientras corría, pues logró alcanzarlo como quería y tomó su retorcido cuello entre sus ásperas manos con la intención de acabar con Él.

-Anda, ¡Mátame!, pero querida, la guerra para tu familia no acabará jamás por más que quieran y siempre serán vistos como unos asesinos que tomaron el poder a costillas del pueblo ruso... -aseguró el hombre tras manipular psicológicamente a mi pobre tía Rachel, quien estaba al borde del colapso por culpa de ese asqueroso demonio.

-Sabes algo Kilomoro, antes yo era como tú, es decir fría como el hielo, despiadada tal cual una bruja y demasiado cruel, principalmente con mi valiente sobrina Gloriana a quien amo con toda mi alma después de todo, por lo tanto no me provocas miedo al vivir en un infierno toda mi vida, ¡Ah!, y te aseguro que NADIE en este mundo es tan diabólico como yo cuando se enoja o hacen sufrir a mis seres queridos, pero tranquilo maldito, ¡Yo no soy una asesina como quieres que sea! -aseguró mi tía Rachel hallándose completamente furiosa y agotada, pues sacó su fiera interior al ver como Kilomoro se reía de ella y no lo soportó más tiempo.

-¡Vaya, vaya!, ¡Si tienes agallas!, pero igual yo decido si muero con o sin ayuda, así que, ¡Adiós, puta!, por cierto, SIEMPRE te culparán por esto que haré, ¡Será como si tú lo hubieras hecho sin tocarme un solo cabello, "sobrinita"!, ¡Nos vemos en el infierno! -dijo el hombre estando algo aturdido, pues se lanzó boca abajo desde la torre más alta al querer suicidarse, lo cual dio resultado porque por fin murió.

-¡Ohhhh! -exclamó mi tía Rachel estando en completo shock, ya que sus manos le temblaban y las tenía ensangrentadas al igual que su demacrado rostro, por eso se preocupó por lo que aquel hombre sin alma dijo antes de morir.

-Mi Reina, ¡Tranquila!, ¡Ese hombre ya estaba condenado mucho antes de engañarnos!, ¡Todos lo vimos y hay cámaras que lo evidencian!, ¡Nadie podrá culparla de nada porque Él se suicidó! -aseguró uno de los guardias reales atrás de ella luego de apoyarla como nunca se imaginó, pues creía que todo lo sucedido era su culpa como dijo el falso Starky.

-¡Ay Dios mío!, es verdad, ¡El terror finalmente acabó!, pero, ¿Qué sucedió con mis sobrinas? -Preguntó mi tía Rachel preocupándose un poco al recordar como mi hermana Catalina estaba a punto de dar a luz.

-¡MADRE! -Gritó de pronto mi prima Alondra con la intención de alertar a mi tía mientras que lloraba muchísimo cuando llegó el momento de llevarla hacia el cadáver de Caty.

-Alondra, hija, ¿Qué sucede, ah?, ¡Vamos dímelo! -Preguntó mi tía Rachel estando paralizada de miedo y con expectativas de todo lo que sucedía a su alrededor, pues tenía la piel de gallina al escuchar los terribles gritos de su hija mayor.

En esos momentos de tensión nuestra tía Rachel sintió como una fuerte corriente de escalofríos recorrió todo su cuerpo de pies a cabeza, pues la situación se daba para sensaciones increíblemente terroríficas causadas por aquel engendro del demonio que misteriosamente decidió suicidarse aunque siempre nos quedó la maldita duda de si enserio murió o solo nos estaba perturbando aún más.

-¡Madre!, ¡Ven abajo por lo que más quieras!, ya, ¡Rápido!, ¡Por favor!, ¡No Dios!, ¡Es por mi pobre y desafortunada primita Catalina!, vamos, ven enseguida. -aseguró mi prima Alondra con una expresión de absoluta pena, pues lloraba muchísimo al igualmente dolerle demasiado que ella se muriera.

-¡Ohhhh!, ¿Qué... -Seguía preguntando mi tía Rachel tras estar enserio preocupada cuando de pronto me vio con mi sobrinita recién nacida en brazos mientras que lloraba a mares porque me encontraba junto al inerte cuerpo de mi hermana al igual que de otros soldados, guardias, amigos, conocidos y aldeanos fallecidos en aquel lugar, los cuales también lucharon hasta el final por la poca paz que aún nos restaba.

-Mamita, solo camina y trata de no pisar a las personas, por favor, ¡Ah!, e intenta no voltear a ver a mi prima Caty, quien ya está con mis tíos Natalia y Yorhanny en el cielo como una verdadera princesa... -aseguró mi prima Alondra estando un tanto asqueada tras tener mil nudos atorados en la garganta, pues trató hasta donde pudo de hacer que no veía lo que era nuestra nueva realidad al parecerle totalmente inhumano y sangriento.

-¡Ohhhh!, ¡No!, ¡Me niego a aceptarlo!, ¡No puede ser verdad!, ¡No!, ¡DIOS MÍO!, ¡NO! -exclamó mi tía Rachel estando completamente llena de dolor, pena y angustia, pues se hincó frente a nosotras mientras lloraba muchísimo porque al final no logró cuidar a quien alguna vez se le encomendó con amor.

-Mi hermanita, tía, ¡Ella se ha ido para siempre!, ¿Qué rayos haré ahora?, ¡NO, NO, NO! -exclamé casi sin poder respirar, con los oídos tapados debido las lágrimas y a las notorias heridas que tenía en los brazos, las cuales sangraban mucho, por eso se demostró que mi enfermedad aún crecía aunque Kilomoro muriera.

-¡NO!, ¡No la pude proteger!, ¡Le fallé a su madre!, ¡Ohhhh!, ¿Y el bebé de tu hermana?, ¿Está bien?, ¿O a caso también murió? -Preguntó mi tía Rachel estando muy alterada y realmente dolida por su repentina muerte, ya que al final ella solo era una triste niña que empezaba a vivir y a descubrir el mundo.

-¡No, no murió!, Dios no fue tan cruel en ese aspecto, querida tía, pero todo esto es culpa de ese maldito de Kilomoro, que por cierto, ¿Qué sucedió con Él después de que lo perseguiste como loca hacia la torre más alta? -Pregunté como con mil nudos atorados en la garganta, ya que el dolor de perder a mi única hermana fue mucho mayor que mi voluntad de pollo.

-... ¡Tranquila Glo!, ¡Ese demonio está donde debe estar, pues la justicia para mi prima por fin llegó y su muerte no será en vano!, ¡Te lo juro!, además, mi madre lo hizo todo mucho más fácil al final de esta gran tragedia inolvidable. -aseguró mi prima Alondra mientras que lloraba mucho, pues me dio la mano en señal de empatía y duelo absoluto.

-¿Pero y el bebé?, ¿Dónde está?, ¿Murió como ella?, ¿Es eso y no me quieres decir? -Preguntó nuevamente mi tía Rachel con una actitud bastante alterada al creer que mi sobrino también estaba muerto.

-No tía, ¡Gracias al cielo no!, ¡Ella está viva porque mi pequeña sobrinita es una preciosa niñita de ojos azules y cabello color oro como su madre!, además está muy sana al nacer bien, ¡Ah!, mi hermana Catalina la pudo ver por primera y última vez, por eso con mucho amor la llamó Natalia, tal como nuestra madre fallecida. -afirmé algo feliz tras mostrar a mi sobrina con ternura y amor, pues ella y mis hijos serían mi más grande tesoro para siempre

-¡Ohhhh!, ¡Es bellísima!, ¡Mi Dios!, si, ¡Natalia será su nombre y lo llevará con gran orgullo!, ¡Uff!, mira que sorpresas da la vida, ¡Ya tengo 3 traviesos sobrinos nietos!, ¡Jesús santísimo!, ¡Estoy envejeciendo rápidamente! -dijo mi tía Rachel encontrándose igual de feliz al tener a la bebé con nosotros, por eso fue algo sarcástica para amenorar la tragedia de la muerte de mi hermana, pues ella tomó a la pequeña bebé entre sus brazos al ahora ser una más de nuestras niñitas consentidas.

-¡Yo te juro tía que ella será como otra hija para mi, pues la amaré como mi hermana lo hubiera hecho y se convertirá en la hermanita menor de Ángel y Mary!, si, ¡La protegeré de quien sea y la amaré demasiado para siempre! -afirmé estando muy segura de mí misma mientras que veía a mi bella sobrina en señal de un pacto entre ambas, pues la bebé me sonreía al sentir mi presencia.

-¡No te preocupes Glo!, ¡Yo la cuidaré, pues tu hijito aún es muy pequeño y deberás hacer el doble de trabajo por ambos!, vamos, ¡Déjamelo a mi!, ¡Yo me encargo de ella!, ¡Confía en mi!, recuerda que soy la madre de 3 hijos y tengo más experiencia en esto de la crianza. -afirmó mi tía Rachel estando completamente segura de lo que iba a hacer, pues a ella le hacía bien volver a cuidar a un bebé para prevenir su depresión.

-¡Alto ahí!, ¡Ella es mi HIJA y yo tengo todos los derechos sobre ella!, ¡No me la van a quitar! -aseguró de pronto el idiota de Ignacio, el padre biológico de la niña tras volver a aparecer en nuestras vidas como si nada hubiera sucedido porque el muy descarado me arrebató a la bebé recién nacida, pues según Él mi sobrina era solo de su propiedad.

-¡Ohhhh! -exclamé encontrándome en verdad indignada al ver lo que había hecho, pues literalmente la hizo arrancada de mis cálidos brazos como a un sucio retoño de calabaza.

-¡Aléjate de... -dijo mi tía Rachel hallándose igual o más molesta que yo, pues se acercó a Él con toda la furia del mundo, sin embargo estaba muy cansada por luchar contra el desgraciado de Kilomoro.

-¡Shh!, tía Rachel, no te desgastes más por otro malnacido, ¡Ja!, ¡De Él yo me encargaré ahora mismo y de una sola vez por todas, pues como sabes sigo siendo la Reina de esta aldea y debe obedecerme lo quiera o no! -aseguré riéndome hipócritamente de aquel chico adolescente al estar en verdad muy molesta e indignada, ya que en realidad a Él nunca le importaron ni mi hermana o su inocente hija.

-¡Oh mi Dios!, ¡Mi hija es hermosa!, ¡La llamaré Grace como mi tía abuela!, si, ¡Los 2 seremos muy felices en su choza mientras estamos muy lejos de aquí!, ¡Ja!, adiós a todos, ¡Feliz oscuridad! -dijo el maldito de Ignacio descaradamente tras estar a punto de irse de ahí con la niña entre sus brazos así de fácil mientras que se reía de nosotros como loco.

-¿A dónde crees que te llevas a mi sobrina, eh?, ¡Tu no eres nada suyo y jamás lo serás!, ¡Ashh!, engañaste a mi pobre hermana, la sedujiste, la abandonaste por casi 6 meses al saber que estaba encinta, ¿Y ahora dices ser su padre?, ¡Pues no lo creo, escoria!, ¡Ah!, y sin mencionar que eres cómplice de ese hombre llamado Kilomoro, el cual acaba de morir pero nos engañó a todos y tú pagarás por sus culpas porque ya lo se todo sobre ti y ahora mismo puedo asesinarte frente a todos como el barbaján que eres. -aseguré firmemente decidida a proteger a mi sobrina con garras y dientes si era necesario, pues ella también era parte de mi.

-¡No!, ¡Grace es mi hija y yo tengo derecho sobre ella como su padre que soy! -Siguió diciendo el obstinado de Ignacio tras estar decidido a escapar de mi vista con mi sobrina mientras que ella sonreía inocentemente.

-¡NATALIA!, ¡Ese es su nombre real!, ¡Ashh!, ¿En verdad eras tan patético como para no ver la realidad?, no, ¡No podrás escapar de mi porque perdiste todos los derechos como su padre al dejarla a la intemperie cuando supiste que venía en camino!, ¡Am si!, de hecho esta fue la última voluntad de mi hermana, o sea no dejarla contigo... Ahora, lo diré de otra manera para que los tontos como tú comprendan sin herir su orgullo, ¡Como tu Reina te ordeno que me entregues a mi sobrina si no quieres acabar decapitado por complicidad y conspiración en contra de tu pueblo!, ¡Tú eres quien lo decide al final, infeliz traidor! -afirmé estando firmemente decidida en lo que estaba haciendo, pues solicité el apoyo de los guardias atrás de mi porque Ignacio podría ser capaz de hacerme mucho daño a mi o la pequeña bebé.

-¡Ashh!, de acuerdo, ¡Pero voy a volver por ella, eh!, ¡Mi Grace se quedará conmigo para siempre!, nada más mírala, ¡Me sonríe!, ¡Sabe que su papá está aquí porque es tan inteligente como yo pero por ahora debo dejarla! -aseguró el vil y asqueroso de Ignacio con una sonrisa descarada que brilló a kilómetros, pues el muy inmaduro pretendía jugar con mi poca paciencia.

-¿Que te sonríe dices?, ¡Pues no!, déjame decirte que estás muy equivocado, pues ella será tan dulce, hermosa, inteligente, bondadosa y sabia como su fallecida mamá, ¡Ah!, solo sonríe cerca tuyo porque su mamita la ve desde el cielo con mucho amor y tranquilidad, es más, desde ya te lo aseguro con firmeza, ¡Ella nunca se quedará solita en la vida porque para eso me tiene a mi y a todos nosotros!, ¡Yo no la desampararé como tú ni en un millón de años! -aseguré estando bastante alterada mientras que me acercaba al joven con autoridad y firmeza, pues tuve que calmar a mi sobrinita recién nacida porque lloraba mucho al escuchar tantos gritos cerca.

-¡Ja!, ¡Adiós, "su Majestad"!, la verdad es que cuando menos lo esperes volveré por mi hija y tú vas a volver a sufrir en carne propia lo que es perder a alguien... -dijo el idiota de Ignacio con una mirada despreocupada al no importarle su hija, pues escapó de la aldea a toda velocidad a pesar de dejar a la niña, su única hija junto a mi tal como le ordené al verse amenazado por mi actual poder, gracias a Dios.

Después de ese incómodo momento me juré a mí misma que jamás dejaría a mi sobrina por nada del mundo tras protegerla y amarla junto a mi tía Rachel, quien resultó ser muy maternal después de perder a sus 2 hijos de golpe, pues ella se ofreció voluntariamente a darme una mano como dijo para poder criar juntas a esa nueva y bella niña Romanov sin nada ni nadie que nos hiciera daño, al menos durante un corto tiempo.

...


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