Jennie apretó con fuerza las correas de su mochila. Empezó a bajar las escaleras de su casa con el corazón latiendo a mil, como siempre que tenía que pedir algo o esperarlo.

Se encontró con Jisung, sentado en el sofá, mirando la televisión y ¡oh, sorpresa! bebiendo cerveza.

Se paró cerca de la puerta y lo miró, si intentaba salir de nuevo sin pedir permiso o avisar volvería a tener un feo hematoma como el de su pierna... asi lo habia conseguido.

Puso un mechon de cabello rebelde detras de su oreja y carraspeó.

- ¿Pa-papá? -preguntó sintiendo ácida esa palabra. El no era su padre, ella no tenia padre.

Jisung la miró y la escaneó de arriba a abajo. Eso le ponía los pelos de punta.

- Haz hecho muchas amigas en este tiempo, Jennie. -comentó al aire.

- A-algo asi...

- Te quiero el domingo en aquí y mas vale que llegues antes del anochecer porqué sino te arrepentirás de haber nacido. -le dijo con una mirada de muerte y la voz grave que usaba al golpearla.

- Si, lo p-prometo. Estaré aquí el domingo.

- Ya vete entonces.

Jennie asintió y rapidamente salió de su casa sin mirar atras. Caminó hasta la proxima cuadra y se topó con el auto negro de su novio.

Se subió sin dudarlo y largo aire mas tranquila.

- ¿Todo bien? -preguntó Yoongi preocupado y tanteando su rostro y sus brazos en busca de golpes nuevos.

- Si, es solo... el momento de despedirme.

Yoongi puso el auto en marcha y se acercó para besar sus mejillas rellenitas y su nariz de boton. Jennie sonrió como siempre al sentir la ternura en él y volteó su cabeza para que besara sus labios.

Su celular vibró. Lo sacó y sonrió al ver los mensajes.

Nayeon 🐰:
Todo listo, JenJen.
Si tu papá pregunta ya tenemos las fotos y sí llama le pasaremos los audios. Pasala bien con tu cita 💕
¡Figthing!

Me:
Gracias por todo, son las mejores.
Prometo traerles algo.

Nayeon 🐰:
Consigueme un novio 😢

Me:
¿No podía ser algo menos complicado?

Nayeon 🐰:
Traenos los nuevos labiales MAC de edicion primavera.

Me:
Un novio será.
Haré mi mejor esfuerzo.

Nayeon 🐰:
Solo diviertete y envíanos fotos tuyas pasandola bien, ¿si? xoxo 💕

- ¿Ya podemos irnos?

- Ahora si.

Bloqueó su celular y se relajó en el asiento mientras Yoongi pasaba el semáforo y continuaba el viaje.

- Todavía no puedo creer que te ayudarán con esto.

- Tampoco yo... casi no lo logro. -rió suavemente. -Estaban muy ansiosas por saber con quien me iría de viaje a Seúl el fin de semana y me chantajearon para decirles quien era mi cita...

- No soy tu cita, soy tu novio. -se quejó haciendo un puchero y sacándole una sonrisa genuina a su chica.

- Aun asi, no les dije quien era pero prometí enviarles fotos.

- ¿No mostraras nuestras caras, verdad?

- Exacto.

- Suena bien para mi. -prendió la radio y piso el acelerador. -Son tres horas hasta llegar. ¿Crees poder aguantar a tu muy mayor y quejón novio?

- Por supuesto que si, lo hago siempre. -le guiñó un ojo.

- Cada vez te pones mas insolente. -negó fingiendo tristeza. - ¿Donde esta mi niña?

Jennie acercó su rostro y besó detras de la oreja del mayor.

- Aquí. Siempre estaré aquí.

🎹

- Bebé, despierta. Ya llegamos al hotel. -las manos enormes de Yoongi le hicieron cosquillas detras de las orejas y sus labios se posaron en su frente.

Jennie abrió sus ojos y adormilada miró a su novio.

- ¿Tan pronto?

- Me hiciste compañía una hora y luego te dormiste.

- Lo siento. -bostezó y se frotó los ojos con su puño.

- Anda, debemos registrarnos.

Se dio vuelta para seguir el rastro de su novio pero cuando miro el frente del hotel se despejó completamente. Wow.

- ¿N-nos quedaremos aquí?

- Si. ¿No te gusta? -preguntó preocupado.

- N-no es eso... es que... wow...

Yoongi rió ante su expresión sorprendida. Tomó su mano y ambos entraron de la mano.

Un hombre mayor atendía la recepcion. Lo saludaron y el encargado les dio las llaves magneticas para que ingresen a su habitacion.

- El desayuno se sirve de 7 a 10 de la mañana. -les dio un par de folletos y un precito. -Ese es para poder entrar a la zona de relajacion, que lo disfruten. -hizo un asentimiento y la pareja camino hacia el ascensor.

- ¿Que es un area de relajacion? -preguntó ya en el elevador.

- Supongo que donde estan las piscinas, jacuzzis y saunas... -se llevó una mano al mentón. -Generalmente es un área se masajes.

- Wow...

- ¿Es todo lo que vas a decir en el viaje? -pregunto riendo. Jennie golpeó su hombro.

- ¡Yah! Es mi primera vez fuera de Daegu. -se cruzó de brazos.

- Pero no la ultima. -acarició su mejilla con su pulgar y sostuvo su rostro con su mano. -Asique vete acostumbrando.

Llegaron al cuarto piso y caminaron hasta la habitacion 102. Yoongi abrió con su llave y la cara de Jennie se volvió a transformar.

- Dejame adivinar: Wow.

Sus ojos se abrieron en grande, no podía creerlo. Nunca habia estado en un lugar con tanto lujo. Ese hotel debía costar una fortuna.

- No puedo creerlo.

- Pues creelo. -comenzó a acarrear las valijas de ambos y subió la suya a la cama. - ¿Deberiamos desempacar o salir a recorrer un poco?

- ¿Es eso una silla masajeadora?

- O podríamos dejar las cosas en las maletas.

- ¡El agua de la ducha sale de la pared!

- Se llama finlandesa Jen. ¿Y deberíamos avisar que llegamos?

- ¡Oh por Dios! ¡La vista es increible!

- Ahhh. -suspiró cansado de hablarle al aire. -Tu diras, pequeña... -acarició su cabeza para relajar su emoción y sonrió mostrando sus encias.

Estaba muy feliz. El rostro de Jennie era todo lo que necesitaba para sonreír de esa forma. Su felicidad era tambien la suya.

Sacó su celular y le aviso a su hermano y a sus amigos que ya estaba en Seúl. Acordó, mediante Kakaotalk, que se verían en Lotte Tower y le darían un completo tour a la pequeña Jennie.

La castaña salió del baño y se abrazó al torso de Yoongi con fuerza. Hundiendo su rostro en su pecho, ya que era hasta ahí donde llegaba. Era muy alto y ella todavía bajita aunque no creía crecer mas.

- Lo siento, me emocioné demasiado y no te preste atencion.

Yoongi puso sus manos en sus caderas y comenzó a mecerse como si fuera un baile. Levantó su menton y besó sus labios.

Ambos inclinaron sus cabezas del lado opuesto y el mayor saboreó el labio inferior de Jennie con su lengua. Ella profundizó el beso y adentró su musculo tambien para que jugueteé con el del pelinegro.

Yoongi gimió casi sin querer cuando Jennie hizo aquel osado movimiento y continuó besando y lamiendo sus labios de forma lenta pero agitada.

Se separaron con las respiraciones entre cortadas y se miraron para despues sonreirse. Yoongi besó su cabeza y Jennie apoyó su mejilla en su pecho.

- Me haces feliz. -dijo bajito pero sabiendo que él la escucharía.

- Tu tambien me haces feliz. -una de sus manos acarició su espalda de arriba a abajo y se separó con pesar. -Saldremos ahora. ¿Quieres cambiarte?

- Tal vez.

- Bien, yo tambien lo hare entonces.

Yoongi camino hasta el baño con un par de valijas y se cambió allí. Queria darle un poco de privacidad a su novia, no sabía si le molestaba o la incomodaba asique la dejó que se prepare en la enorme habitacion.
Lo cual parecia un poco raro para Jennie teniendo en cuenta que hace un par de semanas sus besos se iban haciendo mas apasionados y sus toques sutiles se volvían calientes en su piel.

Giró la cabeza tratando de sacar esos pensamientos indecorosos de su mente y se dispuso a cambiarse. Un jean azul, unas zapatillas blancas y un sweater rosa bebé con hombro caído fueron su eleccion.

Queria verse natural pero linda para Yoongi asique se aplicó un poco de rimmel para sus pestañas y brillo labial con un toque degradado, como le enseñó Mina. Dejó su cabello suelto, lacio y llovido cómo lo tenia en el momento.

La puerta del baño se abrió de repente y Jennie se tuvo que morder los labios y fingir que miraba hacia otro lado para no tirarse encima de su novio.

Yoongi salía con un pantalon denim negro, sus clasicos -y costosos- zapatos del mismo color, un sweater cuello de tortuga negro y un saco largo que le llegaba a las rodillas. Un look total black que a Jennie la hizo suspirar.

El contraste que habia en ellos, sus rostros y sus ropas era increible. Completos opuestos.

- ¿Lista? -preguntó.

- Si, si. Ya estoy. -tomó su celular y lo puso en el bolsillo de su pantalon. El sweater era holgado y lo cubría.

- Estas hermosa. -se acercó para agarrar su mano.

- Estoy como siempre. -negó. -Pero te daré un punto por intentarlo.

Yoongi rio y negó divertido tambien.

- ¿Asique debó juntar puntos? ¿Cuantos tengo hasta ahora?

Caminaron para salir de la habitación y cerraron la puerta. Se dirigieron al ascensor y subieron.

- Tienes todos.

- ¿Cuantos serían?

- Mmm, no lo sé... ¿Cuantos besos me haz dado durante todo este tiempo?

- Chica lista. -dijo y acercó su rostro para besarla con muchas, muchas ganas.

🎹

- ¡Hyung! ¡Yoongi hyung!

La voz inconfundible de Taehyung, su cuñado, la hizo darse vuelta de aquel local con carteras costosas que miraba con su novio.

- ¡Jennie! ¡JenJen, por aquí!

La suave voz de Rosé que salía como una dulce melodía tambien se hizo escuchar. Los dos caminaban de la mano -como ellos- y se acercaron para abrazarlos. Bueno, mas a Jennie.

- ¿El viaje estuvo bien?

- Sin complicaciones.

- ¡Oh, vamos, sueltate hyung! Viniste a Seúl con tu novia, deja de ser tan serio.

- Jungkookie y Lisa estan esperándonos en Paris Baguette. ¿Vamos?

Chaeyoung se ajustó al brazo de Jennie y se la llevó antes de que pudiera negarse. Comenzaron a hablar mientras Rosé se aferraba a su brazo y la abrazaba a la vez, pregúntale cómo habia estado esas dos semanas después de que se fueran de Daegu para volver a Seúl.

- Queríamos quedarnos pero yo tenía una sesion con Ceci y era imposible cancelarla. -hizo un puchero. - ¡Pero ahora que estas aqui, el grupo estará completo!

- ¿El grupo?

- ¡Si! Lisa y yo estabamos esperando conocerte despues de que Jisoo unnie nos contó sobre ti. Ahora seremos mejores amigas y nos juntaremos siempre que puedas.

Atras de ellas, los hermanos Min conversaban tranquilamente al ver la buena quimica que sus novias tenían.

- Se llevan bastante bien, hyung.

- Veo.

- Creo que seran buenas amigas. -sonrió cuadradamente al verlas hablar y comentar sobre prácticamente todo.

- Eso espero, Jennie se esta abriendo mas a la gente...

- ¿En serio?

- Si, antes no tenía amigas en la escuela y hace poco se pudo integrar a un grupo.

- ¡Eso es genial! Seguro pasará lo mismo con Jisoo noona, Lisa y mi Rosie.

Los dos llegaron a la entrada del café dentro del enorme mall.

- ¡Allí estan Kookie y Lisa!

Jennie pudo ver a dos personas, igual de altas que su cuñado y su novia. Ese muchacho se veía joven pero igualmente mas grande que el. La chica a su lado parecia una muñeca de porcelana. Cabello rubio perfecto y unas piernas que parecian durar dias, el chico a su lado no se quedaba atras: podía notar los musculos detras de esa enorme camiseta blanca.

- Vamos. -la voz de Yoongi y su mano entrelazada con la suya la hizo dejar de analizar a las personas que las llamaban en el fondo de la cafeteria.

Caminaron juntos y vieron a Jungkook y Lisa levantarse para saludar.

- ¡Hyung! ¡Tanto tiempo!

- ¡Suga oppa! ¡Por fin vuelves de visita!

¿Suga oppa? ¿Suga?... ¿Sugar?

- Hola, mocosos. -los dos se le tiraron encima y lo abrazaron con cariño.

- ¿Tuviste un buen viaje, hyung?

- Claro, tuve la mejor compañía.

Se corrió para el costado dejando ver una tierna chica, algo sonrojada, mordiendo su labio nerviosa. Yoongi le dio un empujonsito en su cintura y mantuvo su mano allí.

- Anda.

- ¿Eh? Oh... Soy Kim Jennie. -se reverenció. -Es un gusto.

- Awww, ¡que linda! -Lisa se acerco y la abrazó por el cuello. -Eres tan tierna y pequeñita. ¡Soy Lisa por cierto! Lisa Manoban y él. -agarró el brazo musculoso de su compañero. -Es Jeon Jungkook, mi novio.

Ambos sonrieron y Jennie devolvió el gesto con un poco mas de valentía. Jisoo y Rosé la habian preparado para eso.

- Es un gusto, Jennie. -dijo Jungkook sonriendo con sus dientes de conejo y Lisa tiró de uno de sus brazos y Rosé del otro para que se sentará a su lado y con ellas.

Yoongi suspiró y se sentó con sus amigos mientras -secreta pero no tan secretamente- espiaba a su novia y trataba de ver si pasaba algun mal momento.

- Yah... deja de mirarla, la esta pasando bien. -susurró Tae.

- Lo sé, solo quiero estar seguro de que este divirtiendose.

- Bueno... Lisa y Rosé son buenas personas, hyung. Nunca le harían nada malo a nadie.

- Ya lo sé, es solo qué es su primera vez de viaje y...

- Entiendo. -dijo su hermano. Había hablado con él, solos, y le habia contado un poco sobre la vida de Jennie. El menor se indigno de inmediato y le dijo que si necesitaba irse de allí, su casa en Seúl siempre estaría abierta para ella. Yoongi lo apreció mucho. Sin embargo, las chicas aun no lo sabían.

El mayor creyó que, si iban a formar lazos amistosos, debería ser ella quien les contara su verdad.

La escuchó reír y hablar como nunca antes. Pensó que era el sonido mas maravilloso del mundo, mejor que cualquier cancion.

Pensó en lo mucho que quería seguir escuchandolo, no importaba si debía discutir o pelear con quien sea por ello.

La alegría de Jennie lo valía.