Parte 23. Esto No Es Normal.
Capítulo dedicado para:
midnight1712
Pov. Marinette.
Marinette: ¡Ah! - grité mientras me caía de la cama.
Mi trasero dolió.
Me enderezé un poco solo para lograr ver como un gran bulto se removió en mi cama de un lado a otro.
¿Qué es esto? ¿Un akuma!?
Cómo pudéme armé de valor y tiré de la sabána solo para encontrarme con una chica de cabello entre rojo y rosa, lo definiría como Fusha.
Le miré confundida.
XX: Marinette...- me llamó - Al go extraño me paso - se miró las manos con espanto - ¡Esto no es normal en un Kwami! - chilló espantada.
Marinette: ¿K-kwami? ¿¡Tikki!? - cuestioné en un grito sin poder creerlo.
Sabine: Marinette - le escuché llamarme preocupada - ¿Está todo bien?
Marinette: ¡S-si! Todo esta bien - respondí mientras seguía mirando a la chica que se autoinspeccionaba.
Llevaba una blusa blanca de tela delgada con un pequeño moño rosa, una falda del color de su cabello con motas negras, uans medias hasta el muslo de color blanco y unos zapatos que hacían juego con la falda.
Tikki: Vuelvo a repetirlo, ¡Esto no es normal en un Kwami! - se giró a verme - ¡Marinette! Llevamé con el maestro Fu! - chilló mientras se acercaba a mí.
(...)
Pov. Adrien.
"No sé que pasa, pero hay un chico en mi cama"
Miré al pelinegro dormir plácidamente mientras acaparaba toda mi cama.
Me acerqué a él y comenzé a removerle para que despertasé.
Adrein: Hey...disculpa...- el chico se removió un poco y soltó un quejido.
XX: Cinco minutos más...- movió la mano tratando de apartarme.
Su voz me resulto conocida
Miré en todas direcciones buscando al que sería mi Kwami, pero no logré divisarlo.
Ante esto, salí de mi cuarto.
Minutos despúes regresé con una bandeja en mi mano, en ella bastante queso Camenbert.
Me acerqué al chico dejando la bandeja a escasos centímetros de su rostro. Pronto abrió los ojos y fijó su vista en esta.
XX: ¡Camenbert! - exclamó mientras se levantaba de la cama para quitarme la bandeja.
Tomó un trozo de queso y lo dirigió a su boca pero de la nada se quedó estático.
Miró su mano con extrañesa y parpadéo un par de veces.
Llevó el trozo de queso y se lo comió de una sola. Dejo la bandeja de lado y se puso en pie.
Camino hasta un espejo de cuerpo completo que había en la habitación.
Se miró unos segundos y luego sonrió de lado.
XX: Vaya, si que soy apuesto - se pasó una mano por el cabello.
Adrien: ¿Plagg?
Plagg: ¿Quién si no? Soy el mismo, pero en carne y hueso.
(...)
Pov. _____.
El pelirojo comenzó a sacudirse mientras trataba de apartarme de su persona.
Pronto tomó la almohada y me acestó un golpe con ella haciendo que cayesé de la cama.
XX: Cielos...casi...muero...ahogado! - expresó entrecortadamente por la falta de aire.
_____: ¿Quién eres y que haces en mi habitación? - tomé la almohada y le señalé a modo de amenaza.
XX: ¿Así quieres descubrir quién es Ladybug? - me miró cínicamente - N-ni siquiera sabes reconocer a tu Kwami! - chilló un poco.
_____: ¿Roaar? - cuestioné mientras me ponía en pie para sentarme frente a él en el colchón - Pero qué demonios...- cuestioné mientras alzaba su rostro solo para reconocer que en serio era él.
Créo que nunca en mi vida estuve más confundida, no, es mentira, el día en que estuvé más confundida fue cuando nos presentaron a Koro-sensei.
_____: ¿Cómo sucedió? - cuestioné observando al que al parecer era mi Kwami.
Roaar: N-no lo sé, Esto no es normal, nunca me había pasado, pero, tenía mucho sin tener un portador, puede que las cosas hayan cambiado mientras estuve cautivo en mi prodigio - le miré temblar un poco, ¿Es que tiene pánico? No lo dudaría, cuando recién lo obtuvé se mostraba más reservado y tímido, cambio por el hecho de que había más confianza entre nosotros.
_____: Descuida Roaar - acaricie su cabello - Todo va a estar bien - comenté mientras me ponía de pie, le tendí mi mano para que también lo hiciera.
Una vez se paró, miré su ropa, vestía una camisa roja y un pantalón negro.
_____: ¿Vamos con quién me dio el Prodigio? El maestro Fu si no recuerdo mal, ¿Sabes donde vive? - el asintió - Entonces vamos...- tomé su mano y mi bolso, salí rapido de casa evitando así que mi madre me viese con el chico, la que le hubiera tenido que inventar si llegaba a verme con Roaar.
(...)
Me encuentro en un local de masajes, al parecer este es el hogar del guardián de los prodigios.
Roaar ha tenido que entrar a solas, pronto seré llamada para que el maestro Fu me expliqué que ha pasado, aunque dudo que él lo sepa, tras recibirnos y presentarse mi kwami, el hombre abrió sus ojos con sorpresa.
Justo ahora me encuentro sobre una silla, pintando con marcador rojo todas y cada una de las fotografías que tomé a las chicas con cabello igual al de Ladybug.
Escuché la puerta del local abrirse, seguí en lo mío.
XX: Maes-- escuché a una chica parar su grito en seco.
Marinette: ¿_____? - alzé la vista solo para reconocer a mi amiga que venía con la chica de cabello Fusha - ¿Q-qué haces aquí? - me miro nerviosa.
_____: Solo estoy esperando a un amigo que ha venido por un masaje - inventé, vaya, soy buena mintiendo en el momento - ¿Y tú que haces aquí? ¿Quién es tu amiga? - cuestionr mirando a la chica.
Marinette: Eh...ella también viene a ver al ma-- al hombre de los masajes...- sonrió de manera extraña.
Asentí.
Ella se sentó a mi lado y la otra chica al suyo, observó durante un tiempo lo que hacía.
Marinette: ¿Estás tratando de descubrir quién es Ladybug? - me preguntó, asentí.
_____: He tomado fotos a todas las chicas con cabello similar al de ella, solo les estoy pintando un antifáz - confesé.
La puerta del maestro se abrió, este nos miró a los tres en el sitio.
Fu: Oh, señorita Dupain Cheng, estaba esperando a su amiga - miró a la pelirosa - Puedes pasar - le comentó.
XX: Si - la chica se puso en pie y entro a la habitación donde esta mi Kwami.
¿Roaar sigue ahí dentro?
Miré a Marinette nerviosa y algo distraída, así que le dí un poco de espacio para que pudiese pensar con tranquilidad.
De entre las fotos que aún me quedaban, apareció la de mi amiga a mi lado, sonreí al verla de lado, que increíble sería que ella fuese esta heroína.
Con emoción comenzé a pintar sobre la cara de mi compañera, obviamente en la foto, pronto saqué un marcador de color negro y dibujé motas sobre el antifáz dibujado.
Alejé mi creación un pocoaolo para poder observarla con detenimiento.
Mis ojos se abrieron de la impresión al ver aquello, ¡NO PU-E-DE SER!
Me giré a ver con insistencia a mi amiga, pronto ella sintió mi mirada y se giró a verme.
Marinette: ¿Qu-qué pasa? - cuestionó nerviosa.
_____: ¡ERES TÚ! - grité mientras le daba la vuelta a la fotografía, ella se espantó.
Marinette: ¿Qué!? ¡N-no! ¡No sé de que me hablas!
_____: Entonces...la chica que venía contigo es en realidad tu Kwami! - continué hablando - Como se llamaba...- divagué entre mi mente - Oh sí! Tikki!
Marinette: ¿Có-cómo lo sabes!?
_____: Acabas de confesarte - le señalé como si en mis manos trajesé una pistola - Oye tranquila - expresé al verla híperventilarse - Nadie sabrá esto - rompí la fotografía que había pintado - Ni siquiera Alya mucho menos...Adrien...
Marinette: ¿Qué tiene el que ver en todo esto? - la tomé por los hombros y le dí la vuelta - A-adrien...
Adrien: Hola _____, Marinette - sonrió calidamente llegando junto a un chico pelinegro.
Plagg: Oh, pero si ya estás aquí - comentó mirandomé.
_____: ¡Ustedes! ¡Vengan conmigo! - los señalé a ambos - Debemos hablar - y de inmediato los llevé conmigo fuera del lugar, no sin antes guardar los pedazos de fotografía en mi bolso.
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