13
"Soy Zero, pero eso ya lo sabes" respondió.
"Jaja sí, hablan mucho de ti, demasiado" el chico le dio una mordida a su almuerzo y luego notó la mirada baja del otro "Cosas buenas, cosas buenas" levantó el pulgar.
"Sé que no es así... Nadie quiere sentarse conmigo y los Reploids me evitan" confesó.
"Rara vez se topan con alguien que haya derrotado al Comandante Sigma" comentó "Pero dale tiempo, aprenderán a quererte"
Zero sonrió.
"Gracias, X"
"Oh... Tengo una idea" dijo el chico "¿Qué te parece si somos amigos?"
"¿Amigos?" cuestionó confundido.
"Sí, sí, los mejores de los amigos" levantó su meñique y Zero respondió entrelazando su meñique con el suyo.
"Sí, mejores amigos" y esbozó una relajada sonrisa.
×××
Zero bostezó. La fiesta era increíblemente aburrida y simplemente se había quedado junto a la mesa de aperitivos esperando su oportunidad. Tomó un pequeño bocadillo y lo saboreó, sabía bastante bien pero no estaría mal comerse una pizza.
Todos los docentes y asistentes estaban ahí, tras la renuncia de Marcus, Zero no tenía uno. Observó a la distancia a Axl junto a una preciosa chica rubia a quien reconoció como Alia. Dirigió entonces su mirada al espectáculo principal: había unas mesas con sillas para los cinco comandantes de las cinco divisiones y el General. X llevaba un esmoquin azul oscuro y mantenía una pequeña conversación con uno de los invitados. Al fijarse en el menor no pudo hacer más que fruncir el ceño. Observó entonces como X se disculpaba y desapareció tras un telón, sabía perfectamente que ahí se encontraba el equipo de sonido y cosas por el estilo, miró hacia la entrada del lugar y observó como llegaban nuevos invitados, entre ellos el Comandante Signas junto al General, sonrió. Avanzó lentamente entre los presentes, docentes y Reploids que nunca había visto, saludó a un par de los presentes y finalmente se escabulló tras el telón, sabía perfectamente que Signas buscaría a X detrás, era su oportunidad.
Avanzó lentamente entre la oscuridad, un par de lámparas iluminaban tenuemente el lugar, al menos lo suficiente como para poder ver hacia donde se dirigía, podía escuchar las voces de los invitados charlando al otro lado del telón, finalmente encontró a X recogiendo unos papeles de una mesa y regresando por donde había venido, pero cuando este levantó la mirada y se topó con Zero, dio un salto hacia atrás asustado.
---¡¿Qué mierda estás haciendo aquí?!--- susurró tratando de que nadie más que Zero le escuchara.
---Creí ver a alguien sospechoso y quise investigar--- dijo tratando de disimular.
---Además de nosotros dos no hay nadie aquí y no lo habrá durante unos quince minutos, creo--- afirmó, esta era toda la información que Zero necesitaba ---Están en su descanso.
---Oh... Estamos solos--- dijo y esbozó una sonrisa.
---Largo de aquí--- ordenó el menor y siguió con su camino, pero Zero lo tomó del brazo y lo jaló hacia sí.
---Vamos, bailemos--- colocó su mano en la cintura del ojiverde ---Podemos divertirnos un poco más en un rato si quieres...--- solo debía provocarlo para que X hiciera una escena y se viera obligado a despedirlo.
---No quiero bailar contigo--- se quejó y trató de alejarse, pero el rubio no le soltó. El joven ojiazul acercó su rostro hacia su acompañante y sonrió.
---Te divertirás conmigo, todos lo hacen--- susurró a su oído provocando no solo ira en el menor, sino también un notorio sonrojo.
---¿Estás loco? Estoy comprometido, no quiero nada contigo--- afirmó.
---¿Seguro?--- y finalmente acorraló al joven contra la pared más cercana y tomó sus muñecas para así evitar que este se resistiera más. Por cada segundo que pasaba, Zero se ponía cada vez más ansioso deseando que X se enojara, pero este parecía estar tratando de mantener el control.
X no respondió a la pregunta y simplemente sostuvo la mirada del mayor casi retándole a intentar algo, pronto, el ojiazul pareció acercarse muy lentamente aumentando la tensión entre ellos, el ojiverde supo al instante que el mayor buscaba un beso.
---No, espera--- dijo el ojiverde tratando de apartar la mirada.
---Por lo viejos tiempos ¿Te parece?--- el roce del mayor provocaba escalofríos y nerviosismo en el menor, fueron estas últimas palabras lo que lo sacaron de su concentración.
"Los viejos tiempos" pensó. Rara vez se había detenido a recordarlos, habían sucedido muchas cosas en ese entonces, pero X había tratado de olvidarlas a todas.
Zero acarició la mejilla del menor, haciendo que este devolviera su mirada de nuevo hacia él. Depositó entonces un beso en los labios de este que eventualmente intensificó. X no se quejó más, había algo nostálgico y al mismo tiempo erróneo en ese beso, no quería detenerse. Su mano libre acarició suavemente el pecho del rubio y su traje de color negro, subió lentamente hacia su cuello hasta su nuca donde acarició finalmente los cabellos del mayor sostenidos en una coleta. Ninguno de los dos se dio cuenta de la alta figura que los espiaba en la oscuridad, escondida tras un par de cajas.
---No puedo hacer esto, Zero--- dijo ---Está mal--- de nuevo juntó los labios con el mayor salvajemente.
---Eso lo hace divertido--- pronunció y continuó con el beso. Su otra mano se dirigió a la cintura del ojiverde para sostenerlo con más firmeza. X llevó su otra mano el hombro del mayor que eventualmente comenzó a besar su cuello.
Y fue entonces cuando notó el anillo en su dedo, el anillo lo sacó de su lujurioso trance y X empujó a Zero de nuevo.
---No, basta, esto no es correcto--- dijo con voz quebradiza ---Me tengo que ir...--- arregló su traje y se alejó.
La alta figura ya no los observaba.
Zero se quedó parada ahí y observó al menor irse y desaparecer tras las cortinas del telón. Se había dejado llevar y no sabía siquiera si lo había logrado.
---Mierda...--- susurró y salió de ahí tiempo después. Se dirigió al balcón para tener un rato libre para pensar. La noche era fría y nadie saldría al balcón durante el discurso de X y mucho menos durante el posterior baile.
Miró la ciudad que se mostraba frente a él, miles de luces que se extendían hasta donde la vista alcanzaba, era un paisaje hermoso y debía admitirlo.
"¿Qué estoy haciendo?" Se preguntó. Aquel pequeño roce le había dado darse cuenta de que los ojos de X no tenían comparación, por meses creyó que eran muy comunes, que todas sus parejas tenías ojos iguales a los suyos, pero se dio cuenta de que no era así. Los ojos de X eran especiales y no tenía idea del por qué.
No se dio cuenta cuando una alta figura se presentó tras él, ni siquiera le escuchó cuando sus pesados pasos se dirigieron tras el ojiazul y dirigió su mano hacia este agarrando su hombro.
Zero dio un salto.
---¡General!--- saludó con un nudo en la garganta ---No lo escuché.
El general rió.
---Mil disculpas--- dijo con una cálida sonrisa ---No era mi intención sorprenderte de esa manera.
---¿Qué hace aquí afuera, señor? Si es que me permite preguntar--- para Zero, el general era la figura con más autoridad que se podía encontrar, todos le temían, podía acabar con la carrera de alguien con una sola orden.
---Solo quería tomarme un pequeño descanso--- sacó un cigarrillo y lo encendió ---Oh, qué maleducado de mi parte ¿No te molesta--- Zero se negó ---¿Quieres uno?--- rara vez podía verse a un Reploid fumando, no les hacía daño, pero tampoco era disfrutable. Decidió tomar un cigarrillo.
---Gracias.
---La ciudad es hermosa ¿No crees?--- preguntó dirigiendo su vista al horizonte. Zero concordó ---¿Sabes por qué?
---Mmm... No...
---Porque Reploids como tú y yo hacemos nuestro trabajo día a día, ayudando a las personas de esta ciudad y asegurándolas cada día de los Mavericks... Pero...--- su semblante amigable cambió casi de repente, dio media vuelta y se apoyó en el barandal ---Aún parece haber Reploids que no comprenden el peligro de esos sucios Mavericks...--- el rubio comprendió perfectamente que hablaba de X, pero solo asintió, no quería quedar mal con el mayor ---¿Pero qué hay de ti? He escuchado que tú y ese chico no se llevan tan bien... Aunque tal vez me esté equivocando...
---Hemos tenido altibajos...--- el rubio no quería dar muchos detalles realmente.
---Sí... Entiendo--- el General se llevó el cigarrillo a la boca por un segundo ---¿Sabes? Aún cuando te mantienes callado, sé lo que estás pensando... En realidad, no hay cosa que a mí se me escape, en especial si alguien dañó a alguno de los Comandantes--- Zero quedó atónito con esta declaración, pensó en decir algo pero el mayor continuó hablando ---Así que... Ustedes dos se odian.
---Pues... Básicamente sí.
---Debe sentirse horrible. Alguien a quien odias teniendo éxito mientras tú te estancas, realmente te hizo mal--- a Zero no le agradaba esa condescendencia, pero se mantuvo callado ---¿No te gustaría que fuera diferente? ¿Que cambiaran los papeles?
Zero levantó la mirada y miró al mayor. Debía admitir que hasta ese momento no lo había pensado así, pero ahora que el General arrojaba luz sobre el panorama se sentía molesto, tenía razón ¿Por qué alguien como X debía tener éxito y él no? ¿Por qué lo tenía en primer lugar? Ah sí, era porque el idiota de Signas estaba detrás de X, respaldándolo ¿Pero y si...?
---Sí, me gustaría...
El General colocó su mano en el hombro del ojiazul.
---Entonces, amigo mío, creo que yo te puedo ayudar...
Uy... ¿Qué tal, lectores? Espero muy bien uwu espero les guste el cap de hoy, bai.
Pd. Ya no podré poner música unu. TE ODIO WATTPAD
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