Las lágrimas durante las ceremonias funerarias no se hicieron esperar, ya que para muchos de ellos la partida de aquel Miembro de la Familia Real, dejaba un gran vacío en el corazón de muchos de los súbditos.

Rini que estaba al lado de su esposo, veían como las personas de lugares muy lejanos habían acudidos a presentar sus respetos.

Ambos vivían su dolor de una manera muy diferente, ya que mientras uno había perdido a varios amigos en la lucha, el otro había perdido a varios miembros de su familia y amistades en poco tiempo.

Mientras veían como la pira funeraria se encendía, recordaron con lágrimas en los ojos, lo que había pasado días atrás en el campo de batalla.

Seiya muy dolido por todo lo que había pasado, fue rápidamente hacia el cuerpo convaleciente de su hermano.

Taiki que tan solo había llegado a unos segundos antes, se había interpuesto en el trayecto de la flecha que iba dirigida a las espaldas de Rey Sammy, pensando que aquel niño era su sobrino.

Seiya al ver las flechas habían atravesado la espalda de su amado hermano, y que la sangre se hacía presente, lo abrazo con mucho cuidado y le rogó con la voz quebrada que no lo dejara.

Taiki que sabía muy bien que su fin estaba cerca, y que solo un milagro podía salvarlo, sonrió débilmente a su hermano, y con una de sus manos llamo a su amada Sanju y al pequeño, para que se acercaran.

Rini, que veía todo muy atónita se acercó con su hermano, a donde estaba el joven que días atrás había sido huésped en su palacio.

-- ¡Hermano!, .... Aquí está tu esposa, .... Tu amada _ Con un podo de dificultad, Taiki hablo.

-- ¿Hermano? _ Muy sorprendidos hablaron Rini, Sammy, Haru y sus amigos que recien habían llegado ahí para proteger a su princesa.

-- Si, .... Taiki es mi hermano menor junto con Yaten, su mellizo, .... Perdón Bombón, te mentí mucho, .... Pero te juro por mi vida, que jamás quise hacerlo _ Muy avergonzado respondió Seiya.

Taiki al escuchar a su hermano sonrió de forma triste.

-- ¿Alguien lo puede ayudar? _ Pregunto desesperado Seiya, mientras intentaba limpiar la sangre.

-- Déjalo Seiya, .... Sabes que solo un milagro puede salvarme _ Hablo Taiki.

-- Obito, anda y trae rápido a ya sabes quién, .... Solo el, puede salvarlo, .... Sasori y Kakashi acompáñenlo _ Haru ordeno de forma seria a sus hombres.

Ellos al escucharlo, asintieron y partieron de inmediato, ya que todos sabían que le tenían una pequeña deuda de vida al joven herido.

-- Hermano, .... Discúlpame, por no decirte antes que tu esposa estaba viva, .... Discúlpame por solo haber dejado aquella carta, la cual decía toda la verdad, .... De verdad que no pude hacerlo cara a cara, .... Ya que yo también me había enamorado de ella, .... Pero yo sé muy bien que no podía traicionarte como hermano, ya que ella es tu legitima esposa _ Agitado por su estado Taiki confesaba lo que se había guardado.

-- ¿De que estas hablando? _ Seiya pregunto muy sorprendido.

-- De la carta, .... ¿Acaso no la leíste?

-- No pude, ya que cuando pensaba hacerlo, un viento fuerte hizo que se fuera lejos, .... Yaten fue por ella, pero cuando volvió me dijo, que la carta se había volado hacia el agua, y la corriente se la llevo.

-- Así que no te entrego esa carta, .... Puede que haya dicho la verdad o simplemente lo haya leído y destruyo la carta, ya que no le convenía que sepas la verdad, .... De su traición con Kakyuu, de que él es el verdadero padre del hijo de ella, y de tu legitima y verdadera esposa  estaba viva, ya que sabían muy bien que tu irías a buscarla cuando te enteres de la verdad, sin importar en que situación estabas, y como te casaste primero con Sanju, ella es tu legitima esposa.

Seiya que muy atento escuchaba sus palabras; se sorprendido de todo lo que Taiki le confesaba, ya que jamás se imaginó que las ambiciones de Kakyuu y Yaten pudieran ser tan grandes; ya que aun sabiendo todo el sufrimiento que paso por perder a su amada Rini, le ocultaron la verdad y todo por mantener aquella farsa.

-- Veo que la verdad de sorprendió a ti y a tus acompañantes.

-- Si.

-- Ja, Ja, .... Es irónico todo lo que nos pasó hermano, .... Ya que tus dos hermanos se enamoraron de tus dos esposas.

-- ¿Te volviste a casar? _ Pregunto muy dolida Rini.

-- Si, .... Porque creí que tú estabas muerta.

-- ¿Qué?

-- Darien, me dijo que habías muerto en el ataque a la aldea, junto con Sammy; .... Y varios de los aldeanos me dijeron lo mismo.

-- ¿Cómo es posible que te dijera eso?, .... Fue por eso que nos encerró, nos prohibido decir tu nombre, nos siguió cuando fuimos por ti y hasta me dijo muchas cosas sobre ti _ Muy dolida por verdad, Rini expuso su verdad.

Seiya y Haru, que habían escuchado todo, se enojaron con el difunto General Darien, por la manera en como había tratado a la joven Princesa.

-- Hasta hace unas horas lloraba siempre por tu partida, .... Pero al saber que estabas viva, y que había luchado contra ti, no soporte más y bien a buscarte _ Con la mirada muy sincera Seiya declaro sus sentimientos a su esposa.

Rini que no soporto más se aferró a su hermano Sammy, y comenzó a llorar amargamente.

De pronto Taiki comenzó a toser y con ello también comenzó a salir un poco de sangre de su boca.

Seiya muy alarmado comenzó a llorar como si fuera un niño mientras veía como su hermano sonreía y cerraba los ojos.

-- Sanju, te dejo con tu esposo, .... Creo que cumplí mi promesa, .... Reuní a mi hermano con su esposa e hijo _ Diciendo aquellas palabras Taiki dejo de hablar, y sonrió débilmente.

Seiya que aún mantenía a su hermano en sus brazos, al escuchar aquellas últimas palabras, lanzo un grito desgarrador, y comenzó a abrazar más sobre protectoramente a su hermano.

-- No me dejes, .... Tu no, .... Por favor no me dejes Taiki, .... Ya madre me dejo, ahora tú también harás lo mismo _ Muy triste, Seiya gritaba esas palabras mientras mecía a su hermano.

Los demás al ver el gran dolor de Seiya, se acercaron a él, para poder consolarlo.

Pero al estar muy cerca de él, se dieron cuenta que de la nariz de Seiya comenzaba a bajar lentamente un hilo de sangre.

Aquello significaba que el Príncipe Guerrillero, estaba muy triste.

Luego de recordar por unos minutos lo que había pasado, Seiya junto con Rini se dijeron hacia el Salón del Trono Real.

En el trayecto se encontraron con un serio Sammy, que también se dirigía al mismo lugar.

Al llegar Seiya pudo notar, que todos los Consejeros Reales, el Primer Ministro, y algunos de sus soldados estaban ahí, pero no de la forma en que imagino.

Ya que algunos de sus soldados estaban sometidos bajo las espadas de los Consejeros.

-- Príncipe Seiya, .... Según nos comentaron, usted está casado con la Princesa Rini, ....Por lo tanto creo que la invasión que sufrimos por parte de sus tropas, queda anulada, .... Debido al matrimonio de ustedes _ Expreso muy serio Wiseman, mientras apuntaba más fuerte con su espada al soldado.

-- Si, .... Como también sabrán, ordenes directamente a mis hombres que devolvieran todo lo que tomaron, y que aquellos que fueron sometidos como esclavos, sean liberados y devueltos a sus casas, .... Y los que no obedezcan mis ordenes, serán ejecutados en el acto _ Hablo muy serio Seiya.

-- Pero, .... ¿Qué hará con todos los soldados que han muerto en esta batalla? _ Preguntó uno de los consejeros.

Seiya, sin saber que responder bajo la cabeza, muy avergonzado.

-- Creo que Milenio de Plata, no fue el único que perdió en esta guerra, .... Ya que Megaverso también lo hizo, debido a las ambiciones de Kinmoku, .... Como también perdió el mismo Kinmoku _ Expreso muy serio Sammy, mirando a todos.

-- Es verdad, .... El Rey Sammy tiene razón, no solo perdimos nosotros _ Hablo Wiseman.

Todos se sumaron en el silencio durante unos segundos, antes de que una Agitada Usagi entraba al salón.

-- ¡Majestades!, .... Disculpen la interrupción, pero es importante que el Rey Seiya y su esposa me sigan _ Hablo muy nerviosa, mientras miraba a los mencionados.

Seiya y su esposa, sin esperar mucho siguieron a Usagi.

De forma rápida y muy agitada los 03 llegaron a su destino, el cual era una de las habitaciones del Palacio.

Dentro de ella se podía observar que en la cama había una persona la cual estaba que intentaba abrir sus ojos, pero tenía algunas dificultades, para hacerlo.

Seiya, con los ojos llorosos y el paso muy lento se acercó hacia la cama, para acariciar de forma temerosa el rostro de aquella persona.

-- Tal parece que se recupera de forma lenta _ Hablo atrás de Seiya, una Rini muy sonriente.

Seiya asintió de forma muda ante la afinación de su esposa.

-- Sabes Fighter, a este paso Taiki se recuperará muy pronto _ Abrazándolo por la espalda y dejando su cabeza reposar en su cuello, Rini hablo.

-- Es lo que más deseo en esta vida, .... Que se recupere pronto, para poder estar nuevamente juntos _ Declaro muy acongojado Seiya.

-- Veras que lo hará, y todo será como antes _ Abrazando a Seiya, Rini lo consoló.

Luego de estar unos minutos en la habitación de Taiki, Seiya y Rini se fueron de ahí, para volver a donde habían estado antes.

Al llegar, todos los miraban impacientes por saber que era lo que había pasado.

-- Se está recuperando satisfactoriamente, .... Gracias Ministro Wiseman, jamás imagine que fuera tan buen medico _ Hablo Seiya.

-- Va, .... Eso no es nada Rey Seiya, .... Ya que prácticamente durante mi niñez y pubertad, estuve presente en todas y cada una de las operaciones que realizaba mi padre, .... Así que lo que hice no es nada nuevo para mí _ Hablo muy tranquilo Wiseman.

Los demás al escuchar aquella respuesta, sonrieron un poco.

-- Bueno creo que mejor será volver a lo que estábamos _ Demando Haru muy serio.

Los demás asintieron y siguieron con la reunión.

En ella se daba a conocer que todos aquellos soldados de Kinmoku que no cumplían con lo dispuesto por su Soberano, deberían de ser ejecutados de forma inmediata, como lo iban a hacer los que estaban en ese momento en la sala.

Todos estuvieron de acuerdo con aquella medida, ya que algunos aun no entendían que Milenio de Plata era libre.

Acabado la reunión, Seiya y su esposa volvieron a donde habían estado las primeras horas de la mañana, con la única diferencia que ahora solo había los restos de la Pira funeraria.

-- ¿La amabas? _ Pregunto Rini de forma seria.

-- Solo la amaba como hermana, .... Jamás la vi como a ti te veo _ Hablo Seiya mientras acariciaba el rostro de su esposa.

-- ¿Y por qué te casaste con ella?

-- Ya te lo dije, solo lo hice por gratitud, .... Y solo una vez estuve con ella, solo fue una vez, de la cual hasta ahora me arrepiento.

-- Sabes que te creo, .... ¿Pero no entiendo porque trajeron su cuerpo aquí?

-- Yo tampoco lo entiendo, .... No sé porque trajeron el cuerpo de Kakyuu aquí.

Rini al ver así a su esposo, lo atrajo hacia su cuerpo para poder abrazarlo, Seiya por su parte, ordeno que los restos de Kakyuu sean llevados al Templo Budista de sus abuelos, y que pongan en la lápida que era la esposa de su hermano Yaten.

Los sirvientes se sorprendieron por aquella inusual petición, pero Seiya con la mirada seria les ordeno que no debían de cuestionar sus acciones y así lo hicieron.

Los días pasaron y las cosas en Milenio de Plata como en Megaverso se iban poniendo más calmadas; en Kinmoku mientras la cosa estaba un poco tensa, debido a la desaparición repentina del Soberano, la Reyna y los Príncipes.

En Megaverso, Armando junto con su esposa y suegros estaban muy angustiados por la situación actual de Milenio de Plata, ya que no podían creer que la Princesa Rini se haya casado tiempo atrás con el Príncipe Guerrillero, y que este mismo les haya declarado la guerra días atrás.

-- Debemos partir de inmediato _ Hablo muy decidida Beryl.

-- Majestad no se está apresurando _ Comento muy nervioso Neji.

-- No, .... Es el momento justo para poder revelar aquel secreto, el cual cargo por hace más de 10 años _ Hablo Gran Sabio.

-- ¿Estás seguro de lo que quieres hacer padre? _ Pregunto Serenity, mientras arrullaba a su hijo.

-- Si hija, .... Ya es tiempo que la verdad sea dicha y que la verdadera Reyna, gobierne Milenio de Plata y Kinmoku.

Los demás asintieron a las palabras de la Reyna en silencio.

Mientras que, en el camino hacia Milenio de Plata, se podía apreciar la presencia de 04 viajeros, todos ellos iban cubriéndose los rostros; su destino era llegar hacia el Palacio Plateado.

Los días fueron pasando y Seiya tenía que viajar a Kinmoku para poner las cosas en orden mientras preparaba el recibiendo digno de su esposa a su reino.

-- ¿Tienes que irte tan pronto? _ Pregunto muy triste Sammy, mientras veía como su amigo se preparaba para su viaje.

-- Si, .... Tengo que hacer algunas cosas, antes de que tu hermana se vaya conmigo.

-- ¿Por qué me la quieres quitar?

-- Ja, Ja, Ja, .... No te la quiero quitar, es solo que no puedo estar un momento más, lejos de ella, .... Y creo que ella piensa lo mismo que yo.

-- Bueno creo que tienes razón, .... Pero, .... Antes de que te vayas termina de contarme la historia.

Seiya al observar la ilusión del pequeño por saber en cómo termina aquella historia, sonrió y se acomodó a un lado para contarle el final.

-- Dime, ¿El Príncipe regreso? _ Pregunto Sammy, mientras se sentaba en el regazo del adulto.

-- Si, .... Regreso al lado de su amada después de haber pasado mucho tiempo alejados, .... Y lo hizo con una gran tropa de soldados, elefantes, caballos y todo lo demás, .... Y cuando la joven Princesa lo vio llegar, corrió hacia los brazos de su amado y le dijo lo mucho que lo había extrañado, .... El Príncipe, así abrazados le prometió nunca más volver a separarse de ella, ya que la joven era su vida entera, .... Y la joven Princesa al escucharlo, sonrió muy feliz y lo beso _ Conto muy sonriente Seiya.

-- ¿Y vivieron feliz por siempre?

-- Si vivieron felices por el resto de sus vidas, en compañía de sus hijos.

-- Si lo sabía, .... Era justo que ellos quedaran juntos después de haber estado separados por mucho tiempo.

Seiya al escuchar la respuesta del infante se rio.

Rini por su parte, que había llegado hace unos minutos, se había quedado afuera escuchando el relato.

Las horas pasaron, y la partida de Seiya ya estaba lista.

Rini estaba muy nerviosa, ya que no quería ver partir a su esposo, no ahora que después de mucho tiempo lo había encontrado y podía estar a su lado.

-- Regresare, .... Te prometo que esta vez solo nos separaremos por poco tiempo, .... Tengo que hacer algunas cosas, pero luego volveré por ti, .... Te lo juro Bombón, y cuando vuelva jamás volveremos a separarnos.

-- ¿De verdad?

-- Si, de verdad, esta vez nada ni nadie podrá volver a separarnos.

Rini al escuchar aquella respuesta rio y abrazo de manera posesiva a su esposo, sin importarle las miradas de los demás.

Los días siguieron pasando, y Seiya llego cansado a Kinmoku, en donde lo recibieron como siempre lo hacían, con flores y canticos.

Pero esta vez Seiya no se vanaglorio mientras entraba a la ciudad, más al contrario avanzaba todo serio.

Algunos de los pobladores comenzaron a susurrar cosas por cómo estaba su soberano.

Otros, por el contrario, no le tomaron importancia, y siguieron mirando el cortejo.

Cuando ya estaba dentro del Palacio Dorado, Seiya convoco a todos los Consejeros y Ministro.

Cuando estaban todos ya reunidos, se sorprendieron al ver que a la reunión se hacía presente Lita, la Dama de la difunta madre del soberano.

-- Bien, como pocos de ustedes sabrán, .... Antes de casarme con Kakyuu, yo me case con otra mujer, .... Guarden silencio, .... Bien, .... Como decía, yo estuve casado con otra mujer, pero al momento de venir hacia acá, .... Ella sufrió un pequeño atentando en el cual cuando fui a su reencuentro días siguientes, .... Me dieron la noticia de que ella había fallecido, .... Debido a aquella noticia, yo me hundí en una gran depresión en la cual no me importaba si moría o vivía, .... Luego como sabrán sufrí ese ataque en el campo de batalla y luego mi vida estuvo en peligro, .... En ese lapso de tiempo fue que conocía a Kakyuu y que me case con ella por agradecimiento _ Hablo muy serio Seiya, mientas los demás analizaban sus palabras.

-- Pero, .... ¿A qué quieres llegar con todo esto? _ Pregunto muy impaciente Jedaite.

-- Pues, que hasta hace poco en medio de la guerra descubrí que mi legitima esposa está viva, .... Y que en todo el tiempo que estuvimos separados, nunca dejo de buscarme, .... Tanto que hasta vino aquí a Kinmoku a buscarme _ Declaro Seiya, muy nostálgico.

Todos al escuchar aquellas palabras se sorprendieron, ya que jamás imaginaron una confesión tan grande.

-- Ósea, .... ¿Eso significa que Kakyuu nunca fue Reyna? _ Pregunto Jedaite

-- Obvio que no, ya que nuestra verdadera Reyna, estaba viva, .... Ella simplemente fue una usurpadora _ Demando uno de los consejeros, muy serio.

-- La Reyna Kakyuu, jamás fue una usurpadora, .... Ya que jamás supo la existencia de la primera esposa del Príncipe, .... Más bien creo que ella fue la usurpadora y no la Reyna Kakyuu _ Demando otro de los consejeros.

-- Jamás, .... La única Reyna y esposa Real del soberano Seiya es su primera esposa, .... Ya que el mismo dijo que nadie sabía que estaba viva.

-- Como pueden apoyar a alguien que no conocen, y que jamás se interesó por Kinmoku, como lo hacía la Reyna Kakyuu.

-- Deja de llamar Reyna a quien solo fue la concubina, .... Ya que la verdadera Reyna es otra y no ella.

Todos los consejeros de pronto se pusieron a discutir unos contra otros, debido a sus diferentes ideas.

-- Basta, .... Ya dejen de decir tonterías, .... Como lo explique, yo no sabía que mi Bombón estaba viva, por ese motivo me case con Kakyuu, .... Pero luego de un tiempo, ella se enteró de que mi primera esposa estaba viva y jamás me lo dijo, .... Yo recién apenas unos días me entere de la verdad, .... Y si ella jamás se interesó en Kinmoku, fue porque nunca le dije quién era, .... Ya que para ella yo era simplemente un soldado de Kinmoku.

-- ¿Jamás le dijo la verdad? _ Pregunto muy confundida Lita, para sorpresa de todos.

-- No, ella recién se enteró de toda la verdad, .... Recién se enteró que además de ser Princesa de Milenio de Plata, es también la legitima Reyna de Kinmoku _ Hablo muy serio Seiya.

Todos los consejeros que estaban en contra de Rini, se sorprendieron y pidieron disculpas, por sus anteriores palabras; ya que jamás imaginaron algo así.

Jedaite, por su parte estaba muy alegre, ya que jamás imagino que sin querer había cumplido con el juramento que le había hecho años atrás al amor de su vida, su amada Serenity; el de unir en matrimonio a una de sus hijas con el Príncipe Seiya.

Y mientras que, en Milenio de Plata, en el castillo Plateado, llegaban los Miembros de la Familia Real del Megaverso.

Rini como era costumbre fue a darles la bienvenida, mientras era acompañada por su guardia personal, junto con su hermano.

Beryl, al ver a Rini corrió a abrazarla.

Gran Sabio por su parte, se dirige al Joven Rey, y lo saludo de forma paternal.

Las horas pasaron, y con ello llego la noche y eso trajo la presencia de las 04 personas encapuchadas.

Todos ellos estaban parados a las puertas de Palacio Plateado a la espera de que aquella persona que los había ocultado por muchos años, llegue y los deje pasar.

-- ¡Qué bueno que ya llegaron! _ Hablo el desconocido, mirándolos.

-- Si, .... Ya es tiempo de que la verdad sea revelada mi Señor _ Hablo uno de los encapuchados.

-- Tienes razón Artemis, .... Y ya va siendo hora que ustedes vuelvan a sus puestos.

-- Creo que eso no será posible.

-- ¿Por qué?

-- Estamos muchos años viviendo en el anonimato, que ya nos acostumbramos a esa vida.

-- Ya veo, .... Pero entonces, cuando necesitemos de sus servicios, .... ¿Podremos contar con ustedes, como ahora?

-- Si, .... Claro que si Señor, .... Jamás dejamos de servirlos.

-- Me alegra escuchar sobre su lealtad, .... Pasen y pónganse cómodos en las habitaciones que prepararon para ustedes.

Artemis y su familia asintieron, para después seguir a Wiseman.

Los días fueron pasando y las cosas en el Milenio de Plata estaban un poco tensas, ya que no sabían cómo abordar aquel delicado tema de la Legitima Soberana del Reino.

Beryl, muy insistente exigía que se haga cuanto antes la reunión, en la cual se revele la verdad.

Wiseman, apoyaba aquella idea junto con Usagi.

Pero Armando, decía que se debía de esperar a la llegada de Seiya, para poder decir la verdad, ya que aquello también le interesaba a él.

Y así estaban en una pequeña discusión, cuando de pronto la puerta se abrió de forma abrupta.

Al dirigir su mirada hacia la entrada, todos los presentes observaron muy sorprendidos a la persona que estaba ahí.

-- ¿Qué han dicho? _ Con los ojos abiertos debido a la sorpresa y la voz confundida pregunto aquella persona.

-- ¿Desde cuándo está ahí? _ Muy nerviosa Usagi pregunto.

-- El tiempo suficiente como para saber que todo lo que viví es una mentira, .... ¿Por qué hicieron todo esto? _ Reclamo muy enojado, mientras se acercaba a ellos de forma retadora.

-- Disculpemos Príncipe Sammy, .... Pero si ocultamos la verdad de las cosas fue para protegerlo a usted, y la Princesa Serena, .... Además, esto fue decisión de sus padres, .... Nosotros solo nos limitamos a obedecer sus órdenes _ Hablo Wiseman, mientras se arrodillaba y bajaba la cabeza.

-- ¿Cuándo planean decirle a mi hermana?

-- Aún no sabemos cuándo debemos de hacerlo.

-- Saben, que cuando esto se llegue a saber, .... Tengo que entregarle todo el Reino, ¿Verdad?

Todos asintieron mudos ante la pregunta.

-- Bien, aclarado esto me retiro, .... Ah, una última cosa, .... Deseo estar presente para cuando mi hermana se entere de todo _ Demando muy serio Sammy, para después salir y dejar a todos muy asombrados.

Sammy, con paso firme se fue hacia su habitación, una vez solo se apoyó en la pared y comenzó a bajar de forma lenta mientras derramaba silenciosas lágrimas.

-- Jamás tuve una hermana, .... Jamás tuve una verdadera familia, .... ¿Por qué me hicieron esto papá, mamá?, .... ¿Por qué me quitaron a mi hermana? _ Susurraba Sammy, mientras se aferraba a sus rodillas dobladas y lloraba.

Los días siguieron pasando, y fue en una tarde caluroso y resplandeciente que Seiya llegaba con un gran cortejo a Milenio de Plata para estar por fin al lado de su amada y adorada esposa.

Rini que sabía de la llegada de su esposo, se vistió con las viejas ropas con la cual ellos se casaron, solo que ahora ella tenía puestos sus joyas reales.

Seiya cuando vio como estaba vestida su esposa, sonrió ampliamente; ya que aquella imagen le traía muchos recuerdos.

-- ¿Te gusta? _ Pregunto una sonriente Rini, mientras era abrazada por su esposo.

-- Me encanta, .... Esto es como si no hubiera pasado el tiempo, .... Como si solos nos hubiéramos separado unos pocos días y no meses _ Declaro Seiya, mientras besaba a su esposa delante de todos.

Rini al escuchar a su esposo sonrió gratamente.

Luego de la bienvenida y de atender a los que habían venido cómo se corresponde; decidieron que ya era momento de hablar con la verdad.

Así que Sammy reuniendo a todos en el Salón del Trono, se preparaba para lo que iba a suceder.

-- ¡Hoy por fin, Milenio de Plata vuelve a su legitima heredera! _ Declaro muy seguro Sammy, mientras observaba como entraban al salón Rini, Usagi, Beryl, Serenity, Hinata, Gran Sabio, Seiya, Armando, Neji, Wiseman, Jedaite, Artemis y su Familia, los Consejeros Reales y Haru con sus hombres.

FIN

Hola Dostys de verdad una gran disculpa por la demora, pero por motivos personales, no pude actualizar.

Gracias de verdad a todo el apoyo que le han dado a este fic.

Ojo aun falta el epilogo no se alarmen.

Dedicado a : LilianaVern, Athzaar, Valita1984, DanielaAlejandraAlbo, CristinaZaragoza3, LuzMaria613.

Vibras positivas y abrazos de conejitos.