Era un día como cualquier otro en Reino de Kinmoku, el Rey Yaten junto con su esporádica esposa la Reina Mina, estaban ansiosos de conocer a su segundo nieto, hijo del Príncipe Taiki el heredero al trono junto con su concubina Amy, esperaban que fuera un grande y hermoso niño, así como lo fue su primer nieto, nacido de Taiki y su esposa real la Reina Esmeralda, el Príncipe Diamante.

-- ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah! _ Se escuchaban en todo el pasillo los gritos de dolor de la Amy.

-- ¡Por favor alteza!, ¡Puje más fuerte!, .... ¡Hágalo por su bebe! _ La médico la animaba.

-- ¡Me duele!, ¡Duele! _ Muy adolorida gritaba.

-- ¡Solo un poco más!, ¡Vamos alteza usted puede! _ Una de sus damas le daba ánimos.

Afuera de la habitación, muy nervioso estaba el Príncipe Heredero al trono Taiki, se encontraba caminando entre los pasillos; al lado suyo se encontraba La Reina Madre, la Esposa Real, la Reina Mina su madre, ella también estaba muy preocupada por Amy.

-- ¡Taiki, hijo!, .... Por favor cálmate, .... ¡Te comporta como si se tratara de tu primer hijo! _ La reina trata de tranquilizar a su hijo.

Taiki volteo rápidamente hacia la puerta de la habitación de Amy, al escuchar como ella daba más gritos de dolor; Estuvo contemplando la puerta por unos minutos y desesperado por la situación de Amy, y dando paso firme hacia la puerta se fue, pero un agarre en su brazo detuvo sus pasos.

-- ¡Suéltenme!, ¡Es una orden! _ Muy alterado hablo.

-- ¡No lo haré querido! _ Una voz femenina le respondió.

-- ¿! Que haces aquí!? _ Taiki muy sorprendió volteo y la encaro.

-- ¡Qué hago aquí!, .... Querido por favor, .... La pregunta aquí es, ¿Qué haces tú aquí? _ En tono sarcástico y señalándole hablo.

Taiki, trata por todos los medios el poder controlar sus ánimos y sobretodo la repulsión que esa mujer le generaba; pero como bien se sabe uno puede disimular sus palabras, pero no su rostro, y Taiki solo le podía lanzar miradas de odio e ira a esa mujer.

Por su parte la mujer que recién había entrado, simplemente le mirada con una sonrisa burlona y de superioridad a Taiki, la mujer estaba magníficamente vestida y sobre ella su delicada corona plateada, que hacia juego con el vestido color verde que traía puesta.

-- ¡Esmeralda!, .... No deberías de estar cuidando de mi nieto el Príncipe Diamante, .... ¿Qué haces acá? _ Mina trato de romper la tensión entre ellos.

-- ¡Mi hijo!, ¡El príncipe heredero al trono!, Está tomando su siesta, .... Y simplemente vine a ver si ya había nacido su hermana _ Una sonrisa zorruna se le dibujo en su rostro.

Taiki y su madre, entendieron claramente sus intenciones de hacerse con el poder del trono; lamentablemente ella tenía un hijo varón y eso lo hacía candidato al trono, pero si Amy su amada y tierna Amy tenía un varón, ese bebe podría reclamar el trono y él lo ayudaría a conseguirlo.

-- Esmeralda, querida, .... Creo que lo me _ La Reina madre no pudo terminar ya que un grito los interrumpió.

Todos voltearon sus rostros hacia donde provenía el grito desgarrador de Amy, Taiki se sobresaltó tanto empezó a dirigir sus pasos acelerados hacia la habitación, no le importo que estuviera cerrada simplemente de un fuerte golpe la abrió; la doncella, el soldado y la médico, se asustaron mucho al ver al intruso de esa forma tan seria e imponente.

-- ¿Qué sucede?, .... ¿Por qué está sufriendo tanto? _ Taiki en claro tono de desesperación se dirigió a la médico.

-- Majestad lo que sucede, es que él bebe está en una mala posición, .... Por eso la madre sufre.

-- Igual a ti hijo, .... Tu también, estabas en mala posición _ Su madre le hablo, muy preocupada.

-- ¿Pero, la salvaran verdad?, .... ¡Ella tiene que estar bien!, ¡Ellos deben estar bien! _ Cada vez Taiki se desesperaba más.

-- Ya basta Taiki, .... ¡Compórtate como el futuro rey que ere!, .... ¡Y deja de afligirte así por una simple concubina! _ Esmeralda hablo de manera desafiante a su esposo.

-- ¡Por qué se trata de ella!, .... ¡De mi Ami, es que me pongo así! _ Muy enojado y señalando la puerta y luego señalarse a él, le respondió Taiki una enojada y rabiosa Esmeralda.

De pronto los minutos pasaron y con el llego el tan aclamado y pacifico silencio, la Reyna Madre Mina, Esmeralda y Taiki, de rato en rato se dedicaban miradas nada pacíficas, ya que madre e hijo miraban con poca gracia a Esmeralda, ella sabía que ellos desean un varón y eso ella no lo permitiría, ya que eso amenazaría sus aspiraciones.

-- ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Ah! _ Un grito interrumpió el silencio.

Taiki junto con su madre, entraron muy rápido hacia la habitación, ya que aquel grito les asusto de sobremanera; Taiki al entrar observo a la médico, que sostenía entre sus brazos un pequeño cuerpo desnudo, y de él aun sobresalía el Cordón Umbilical, el cual lo mantenía unido a su madre, mina al ver al bebe ya fuera del vientre de su madre, derramo algunas lágrimas de alegría.

-- Mi señor, .... ¿Desea cortarlo? _ La medico se dirigió muy emocionada hacia Taiki.

-- ¡El no puedo hacer eso! _ Muy enojada y recién entrando Esmeralda, hizo notar su incomodidad.

-- ¡Dime una razón, por la cual no lo puedo hacer! _ Y muy firme se acercó hacia donde se encontraba la médico con él bebe en brazos.

-- ¡Por que no lo hiciste con Diamante! _ Muy enojada e indignada, Esmeralda le grito a Taiki.

-- Estaba de viaje, .... ¿Acaso se te olvido eso? _ Seguro de sí mismo, y con una sonrisa sarcástica le respondió, mientras tomaba entre sus manos, un cuclillo puntiagudo.

-- ¡Taiki!, ¡Taiki!, .... ¡Si lo haces te vas a arrepentir de eso! _ Muy enojada Esmeralda levanto su dedo índice en señal de amenaza, mientras le hablo.

-- ¿Qué me harás?, .... No puedes atentar contra mí, o mi sangre, .... ¿Se te olvida que tampoco puedes ir en contra de Amy? _ Muy soberbio Taiki, miro a Esmeralda directamente a sus ojos, mientras caminaba hacia él bebe, y se preparaba para cortarlo.

-- ¡Ah!, ¡Ah!, ¡Maldito!, .... ¡Te odio, Taiki!, .... ¡Tu hija no vivirá feliz! _ Esmeralda grito muy fuerte, y comenzaba a hacer sus berrinches porque vio como s esposo, corto el cordón umbilical de esa bebe.

-- ¡Silencio!, ¡Esmeralda, compórtate!, .... ¿Qué no vez que Amy, esta inconsciente por su trabajo? _ Mina reprendió muy enojada a su nuera.

-- ¡Es verdad, Esmeralda!, .... ¡Mi hija!, ¡Mi hija!, .... ¡No vivirá feliz!, .... ¡Por qué es un varón! _ Y levantando delicadamente a su hijo, Taiki enseño a todos a su bebe.

-- ¡Gua!, ¡Gua!, ¡Gua!, ¡Gua! _ Él bebe, gritaba a todo pulmón mientras su padre lo cargaba. Haciendose notar asi el pequeño.

Todos en la habitación, presenciaron muy sorprendidos el rostro de enojo y rabia de Esmeralda. Nadie podría imaginarse lo que la maldad de Esmeralda era capaz de hacer. Mina estaba casi paralizada, ante lo que acaba de pasar.

-- ¡Pobre mi nieto!, ¡No sabes el futuro, doloroso que te espera! _ Mina solo podía sentir tristeza y pena por el futuro por su recién nacido nieto.

Aquello solo lo pensó mirando, con una sonrisa triste hacia su hijo Taiki que tenía en brazos a su nieto; para después dirigir su mirada hacia su nuera, aquella que desprendía ira y odio hacia él bebe; no hacía falta saber que ella odia al pequeño.

-- ¡Amy!, ¡Amy!, .... ¡Querida mira es nuestro pequeño! _ Taiki sosteniendo al bebe, se fue hacia donde estaba Amy.

Amy que estaba inconsciente, no decía ni hacía nada. Aquello altero mucho a Taiki, y aun con su bebe en brazos se fue hacia la médico. Mientras Lita, la Dama de Amy se encontrar limpiando el sudor de su frente de Amy, estaba muy preocupada por todo lo que estaba pasando y lo que pasaría en un futuro.

-- ¿Qué pasa?, .... ¿Por qué no reacciona? _ Taiki le pregunto muy asustado a la médico.

-- ¡Alteza!, Como dije hace unos momentos, .... La concubina Amy, esta inconsciente, por todo el trabajo de parto, .... Ella recuperara las fuerzas y la conciencia dentro de un momento, .... Por ahora hay que dejarla descansar _ Muy seria y mirando hacia donde se encontraba Amy, le respondió a Taiki.

Taiki al escuchar a la médico se tranquilizó un poco, la Reina Madre Mina se acercó a su hijo, para conocer a su nuevo nieto y cargarlo unos momentos; Esmeralda que veía todo estaba verde envidiaba, tanto que ni siquiera sintió cuando su dama Unazuki fue llevándola en brazos a su hijo, el Príncipe Diamante.

-- Reina Madre, .... ¡Por favor no se le acerque!, .... ¡No ve que es un bastardo! _ Esmeralda muy exaltada y enojada hablo.

-- ¡Esmeralda!, .... Te recomiendo que guardes silencio _ Muy incómoda Mina le respondió.

-- ¡Esmeralda!, ¡Víbora ponzoñosa!, .... ¡Te ordeno que te largues de aquí!, .... ¡A menos que quieras que te abandone, en un castillo a las fronteras de Kinmoku! _ Agarrándola de una de sus brazos y jalándola hacia la puerta, Taiki la saco de ahí.

Unazuki, que vio toda la escena con Diamante en brazos, se asustó muchísimo por la actitud de su Señor el Príncipe Taiki, Diamante que afortunadamente estaba muy bien protegido en los brazos de ella, no llego a escuchar los gritos de su progenitor, y continuaba con su siesta.

-- ¡Alteza Esmeralda!, .... ¡Lo mejor será que nos salgamos de aquí!, .... ¡Recuerde que no debes exaltarse!, .... ¡Recién apenas unos meses dio a luz! _ Unazuki, con voz temblorosa le aconsejo a su señora lo mejor que podían hacer.

-- ¡Hazle, caso!, .... ¡Al menos una de ustedes tiene cerebro! _ Y acabando de hablar, volvió a entrar a la habitación.

Muy enojada y destilando toda su ira alrededor, Esmeralda se tuvo que retirar de ahí y no sin antes dirigir una mirada cargada de odio hacia la inconsciente Amy.

Taiki al ver que Esmeralda se había marchada, respiro aliviado y se concentró en hacerle pequeños mimos a su pequeño hijo. Su madre al ver la escena tan tierna que tenía su hijo, hacia su pequeño nieto, sonrió tristemente, ya que era la primera vez que Taiki, se mostraba muy afectivo.

-- ¡Ah!, ¡Nada mi querido hijo!, .... ¡Solo que tu QUERIDA ESPOSA, esta celosa! _ Mina hizo énfasis en QUERIDA ESPOSA, cuando hablo.

Taiki le miro confundido a su madre, para luego de observarla por unos segundos volteo su mirada hacia su recién nacido, a quien este le regalo un delicado beso en su frente, y sobo suavemente su nariz con la de bebe.

-- ¿Majestad?, .... ¡Disculpe que lo interrumpa!, .... ¿Pero qué nombre le pondrá al pequeño príncipe? _ Avergonzada, la médico se dirigió a Taiki.

-- Bueno creo que _ Taiki se calló.

-- Seiya, .... Se llamara Seiya _ Una voz muy gruesa y autoritaria se hizo presente en la habitación.

Todos al escuchar y reconocer la voz que se había hecho presente en esos instantes, voltearon sus rostros hacia la puerta, Mina, Taiki, la Medico y Lita; rápidamente hicieron una pequeña reverencia.

-- ¡Tal parece que este pequeño, reunió a toda la familia! _ Yaten hablo mirando fijamente al bebe que estaba en brazos de su hijo.

-- ¡Majestad!, .... ¡Es una verdadera sorpresa tenerlo aquí! _ Taiki se dirigió a su padre muy nervioso.

-- ¡Es verdad querido, a que se debe el honor de tu presencia! _ Mina, muy sorprendida se dirigió hacia su esposo.

Yaten, espero muy sonriente y alegre la llegada de su esposa mina, que al tenerla cerca simplemente le regalo un beso suave en su mejilla y la abrazo por la cintura, a lo que Reina simplemente coloco sus manos alrededor de sus cuello, y por unos segundos se olvidaron que no estaba solo. Ya que el llanto del pequeño les hizo separarse.

-- ¡Tal parece, que este niño será igual a usted mi Rey! _ Mina con una gran sonrisa le hablo a su esposo.

-- Así parece, .... Me permites cargarlo, .... ¡Quiero conocer a mi pequeño nieto! _ Con una sonrisa sincera y ladina, Yaten le hablo a su hijo.

Taike, le entrego un poco dudoso a su padre, el pequeño Seiya al sentirse en los brazos de su abuelo abrió los ojos y le regalo una mirada seria y fija, Yaten al verlo así sonrió con ironía mientras lo cargaba.

-- Tal parece que este pequeño, será mi sucesor; .... Diamante, se ve que tu pequeño hermano te superara por creces, .... Serás la vida de tu madre, la fuerza de tu padre, y por supuesto el orgullo de tus abuelos _ Yaten tenía esos pensamientos, mientras en su rostro se dibujaba una sonrisa sarcástica.

-- Bueno querido, lo mejor será dejarlos descansar _ Mina le hablo a su esposo.

-- Si, querida tienes razón, .... Con permiso Hijo, hasta pronto pequeño Seiya, .... Médico y Lita cuiden muy bien de la Concubina Real Amy _ El Rey Yaten, entregándole él bebe a su padre se retiró de la habitación muy alegre.

Taiki, recibió a su hijo en brazos con una gran sonrisa en su rostro, el pequeño al estar en los brazos de su padre cerro nuevamente sus ojos, y se dispuso a dormir.

La medico simplemente asintió con la cabeza las órdenes del Rey, se dirigió hacia donde estaba sus hierbas medicinales para buscar alguna que le ayude en la mejoría de Amy.

Por su parte Lita, cambiaba cada cierto tiempo los paños húmedos de la frente de su Dama, Se encargaba que la fiebre que comenzaba a hacerse presente en ella, no avanzara más.

Taiki, solo se limitó a sentarse en la pequeña mecedora con su hijo en brazos a la espera de la mejoría de su amada Amy, no deseaba separarse de ella.

Las horas pasaban y con ella la mejoría de la salud de Amy, pero también el cansancio que tenía Taiki aumentaba, así que su cuerpo no pudo soportar más y se durmió en la mecedora con su pequeño hijo en brazos.

Ambos dormían plácidamente, ante la mirada de ternura que Lita les regala cada vez que podía; por su parte la médico le informo a Lita que en cualquier momento podría despertar Amy, y una vez que lo hiciera que se dedicara a darle de amantar al pequeño Príncipe Seiya.

Lita simplemente movió la cabeza en señal de afirmación, mientras seguía cambiándole los paños de agua tibia a Amy. Como el agua ya se estaba enfriando, la muchacha decidió que lo mejor sería cambiar el agua, y no espero mas sostuvo entre sus manos la vasija con agua y emprendió su camino.

-- ¡Lita!, Lita!

Lita al escuchar su nombre en la voz de su señora, volteo rápidamente hacia donde se encontraba ella y se sorprendió al verla completamente sentada y sin signos de cansancio.

La medico al ver que su paciente había reaccionado, se limitó con ir rápidamente hacia ella y comenzar a tomar el pulso y verificar si verdaderamente su semblante estaba en relación con su estado de salud.

Lita, al ver a su señora despierta y sentada en su lecho corrió hacia ella con una gran sonrisa en su rostro, no se había que sin querer había derramado un poco del agua sobre el rostro del Príncipe Heredero Taiki, lo que ocasiono que se despertara abruptamente y un poco enojado.

-- ¡Mi señora despertó! _ Lita con los ojos vidriosos y con vasija en mano hablo con la voz temblorosa.

Taiki al escuchar aquellas palabras por pate de Lita, giro su rostro hacia donde se encontraba Amy, y al verla despierta y sentada una gran sonrisa se le dibujo en su rostro.

-- ¡Majestad!, .... ¿Sabe dónde está mi pequeño? _ Amy se dirigió dulcemente a Taiki.

-- ¡Amy!, ¡Querida!, .... ¡Al fin despertaste! _ Y sin impórtale que tenía un recién nacido en brazos, Taiki se fue corriendo hacia Amy.

Amy, al ver la desesperación y la alegría en que su amado se acercaba a ella, le causo un poco de sonrojo, pero todo eso fue borrado cuando se dio cuenta que entre sus brazos traiga consigo a su pequeño bebe.

-- ¡Taiki!, ¿Se puede saber qué clase de padre eres? _ Incomoda y molesta por la acción de Taiki, Amy le reprendió.

Lita, al escuchar el tono de voz de su señora, junto con la médico voltearon sus miradas hacia el Príncipe Taiki, y se dieron cuenta, a que se refería la joven madre.

-- ¡Podrías! _ Y extendiendo las manos hacia Taiki, Amy le volvió a hablar en ese mismo tono.

-- ¡Eh!, ... ¡Así!, ¡Disculpa querida!, .... ¡Tómalo, con cuidado, que aun estás débil y el está cansadito! _ Y con tono avergonzado, Taiki poso en sus brazos a su hijo.

-- ¡Hola pequeño travieso!, ¡Sabes soy tu mamá! .... ¡Hay que lindo bebe eres!.

El pequeño Seiya cuando estuvo en los suaves y cálidos brazos de su madre, abrió los ojos perezosamente y le dedico una mirada profunda, y junto con su boquita hizo una pequeño "O"; Amy al ver esa reacción en su hijo sus ojos rápidamente se cubrieron de pequeñas lágrimas, mientras que Taiki se sentó a su espalda y los abrazo a ambos protectoramente.

-- ¡Seiya!

-- ¿Ah?, .... ¿Qué dice Majestad?.

-- ¡Que su nombre es Seiya!.

-- ¿Qué?, ¿Por qué?, .... ¿Quién le puso así?, .... ¿Yo pensaba llamarlo como usted?

-- ¡Fue su majestad!, ... ¡El Rey Yaten!.

-- ¿Qué dices Lita?, .... ¡Su majestad!, .... ¿Estuvo aquí? _ Muy sorprendida Pregunto.

-- ¡Si mi señora!, .... ¡Así como lo oye!

Amy no podía procesar las palabras que recién había escuchado, ya que esa revelación era muy fuerte para ella y después de unos segundos, se mareo un poco debido a la impresión que le causó.

Por fortuna, Taiki se encontraba sentado atrás de ella, y pudo amortiguar su repentino estado de salud, y la abrazo más hacia su pecho.

-- ¿Qué te sorprende?, .... Mi padre, estuvo presente también en el nacimiento de Diamante, .... Era lógico que viniera a conocer a nuestro bebe.

-- ¡Si!, .... ¡Pero no se trata del heredero!, ¡Creí que no vendría! _ Tímidamente y abrazando más a su bebe, Amy hablo.

-- ¿Qué?, .... Amy, mi amor, .... ¿Quién te dijo que Seiya no puede ser el futuro Rey de Kinmoku? _ Mirándole fijamente a Amy, hablo Taiki.

-- ¿Pero tu primogénito es Diamante?, .... ¡El es hijo de tu esposa, la Reyna Esmeralda!, .... ¡No es hijo de una concubina como yo! _ Bajando la mirada, para ocultar su pena Amy hablo.

-- ¡Eso no me importa!, .... ¡Inculcare a Seiya, desde pequeño el arte de la guerra!, ¡Veras que hasta mi padre, deseara que Seiya sea el próximo emperador de Kinmoku! _ Besando la cabeza de Amy, Taiki, intento subirle el ánimo.

Amy, solo le regalo una sonrisa muy triste, ya que sabía desde muy ene l fondo de su corazón, que la Reyna Esmeralda haría lo imposible porque eso no pasara, ya que ella le dijo muchas veces que su bebe sería una niña, porque de lo contrario lo iba a lamentar mucho.

Lita, al ver el rostro de preocupación de su señora, solo movió su cabeza negativamente y siguió con su trabajo, ella sabía muy bien de las constantes amenazas que la Concubina Real tenía que soportar.

-- ¡Por favor, Señor Krishna!, .... ¡Protege a mi señora y al pequeño príncipe!, .... ¡Te lo suplico! _ Lita se escondió y elevo una pequeña plegaria.

Por muchas horas Taiki permaneció abrazando a Amy, no deseaba dejarla sola ni un solo segundo, ella por su parte al sentir e cuerpo de Taiki, se sentía muy protegida y relajada.

Varias veces fue que el pequeño bebe, se había levantado y también se había dormido, todo ante la atenta mirada de sus padres, Amy, también por su parte había ocasiones en las que se dejaba vencer por el sueño y dormitaba pequeños minutos, luego se despertaba muy sobresalta, pero al sentir a Taiki se tranquilizaba.

Taiki por su parte fue el único que soporto todo el tiempo despierto, no se quería perder ningún detalle de su familia. Lita los miraba entre alegre y aterrada, sabía muy bien que Unasuki, la dama de la Reyna había estado espiando al Príncipe y su señora, y eso no era nada bueno.

-- ¡Así que está ahí!, .... ¿Sabes que tuvo la maldita de Amy? _ Sarcástica y ocultando un gran odio, Esmeralda pregunto a su dama.

-- ¡Un niño!, .... ¡Nació un Pequeño Príncipe, más! _ Con malicia en su tono de voz, Unazuki le contesto.

Hola dostys, esta otra linda adaptación, ya saben ahora es 80% adaptación y 20% obra mía. Las actualizaciones de esta si serán súper lentas ósea, cada mes.

Espero que tenga una buena aceptación así como la tiene Volviendo a Casa; sin más que decir, Vibras positivas y abrazos de conejitos.

¿Qué creen que haga la Reyna Esmeralda?