—Nate si escuchas esto márcame, por favor necesitamos hablar.

Después de que me dejó ahí, me escondí en mi cuarto le mentí a todo el mundo diciendo que tenía un horrible dolor estomacal, me di una larga ducha para quitarme por completo la borrachera, después le mandé miles de mensajes a Nate.

Al final solo me llegó un mensaje.

"Alexa, no me marques, no mandes mensajes, no me busques. Necesitas tiempo, no quiero que estés conmigo mientras amas a otro, no quiero ser el clavo que seca a otro clavo, si en algún momento de tú vida dejas de amarlo, búscame."

Aventé el celular y me acosté en mi cama mientras lloraba en silencio. No podía creer que me haya dejado, en serio lo quería no como a Sam, pero...

Alguien golpeó mi puerta, sacándome de mis propios pensamientos, me puse las manos en el rostro antes de contestar.

—Sea quien sea no estoy de humor, por favor déjame sola. —Dije frustrada.

Abracé con fuerza las cobijas, la puerta se abrió.

—Dije que me dej....

Entonces vi que Sam estaba en el marco de la puerta. Me quedé un poco sorprendida al verlo ahí.

—Solo venía a ver si estabas bien, tu madre me dijo que te sentías mal...

Cerró la puerta y se sentó en el borde de la cama, me miro con ternura. Hizo una pequeña pausa antes de volver a hablar.

— ¿Qué pasa?

—Me duele el estómago.

Él levantó la ceja., sabía perfectamente cuando mentía, a veces lo odiaba por ello.

—Alexa te conozco perfectamente, algo más te pasa.

—Nate y yo terminamos. —Lo solté, en este momento necesitaba un amigo.

Me acerqué a él y me abrazó, entonces lloré. No sé cuánto tiempo estuvimos así, pero se sentía como si hubiera estado ahí como una eternidad y no quería que terminará.

—Sé qué hace un año te dije palabras hirientes y prácticamente hui, pero ya no volveré a cometer ese error otra vez, yo te amo Alexa eres mi mejor amiga y a partir de ahora estaré para ti, sea verano o invierno siempre estaré aquí.

—Huiste, no sé el motivo, pero no importa, fue una tontería... En este año te extrañe mucho, me hacías tanta falta... Mi mejor amigo.

Sam se acercó y me dio un abrazo muy fuerte y por primera vez en mi vida no sentía que me costará respirar o que mi corazón se acelerará solo estaba normal, era como si estuviera abrazando a un viejo amigo.

—Sam, muchas gracias por estar aquí conmigo, hablamos luego... Por ahora quiero que vayas con tu novia y disfrutes de lo que queda de la fiesta.

Él soltó una pequeña risita.

—Alexa eres la mejor amiga que he tenido, volveré mañana tenemos que hablar sobre muchas cosas, prácticamente nos abandonamos por un año.

Asentí con la cabeza. Me dejó sola, solo me acosté en la cama la verdad era que había sido un largo día, lo único que quería era dormir por horas.

Cerré mis ojos y dejé de pensar en todo para poder dormir.

Ruido, desperté asustada por un horrible ruido que provenía por afuera de mi habitación, me puse la almohada sobre mi cabeza cuando escuché algo que hizo que toda señal de sueño abandonará mi cuerpo.

—Para mi novio y para Alexa.

—Sal Alexa.

Era Sam y Jake, ¿Pero qué demonios estaba pasando?, me asomé por el balcón y vi como ese par de locos estaban afuera cantando y bailando muy ebrios y repito: ¿Qué rayos estaba pasando?

Pero de algo estaba segura no era nada bueno, creo que mi tío estaba en el castillo, tenía que intervenir ahora.

Tome mi bata y unos zapatos para después salir corriendo al cuarto de mis primos, la verdad odiaba molestar a mi primo en su noche de boda, pero creo que necesitaba a los dos.

La verdad de inmediato me arrepentí de la idea porque cuando toqué la puerta mi primo me abrió semi desnudo.

—Lamento venir tan tarde, pero tienes que ayudarme.

Después de eso corrí con mi otro primo, cuando los tres estuvimos listos corrimos hasta llegar abajo, deslicé la puerta mientras los dos borrachos seguían cantando.

—Sam y Jake guarden silencio, ¿A caso quieren despertar a mi familia?

—Tal vez.

Los dos se miraron para después soltar una enorme carcajada. Genial lo que me faltaba.

—Chicos ayúdenme.

—Bien, quieres ayuda tendrás ayuda.

Idiota dos tomo la manguera después la abrió de esta salió mucha agua mojándolos, los dos perdieron el equilibrio y cayeron.

Jake se quedó dormido en el césped.

—Llévenlo adentro, yo cuidaré a Sam mientras vienen.

Entre los dos se llevaron a Jake mientras él estaba profundamente dormido.

Yo me agaché para tomar la cabeza de Sam, entonces él abrió los ojos, sus ojos azules me vieron.

—Creo que morí porque estoy viendo un hermoso ángel.

—Sam, no soy un ángel... Soy Alexa.

—Yo conozco a una Alexa la amo tanto... —En este punto sentía como mi corazón dejaba de latir.

— ¿Ah sí?

—Sí, es mi mejor amiga, siempre he pensado que es un ángel, porque seamos honestos ella es hermosa, la forma en la que sus ojos me miran, sus carnosos labios que parecen de melocotón, su pelo café, como cae sobre sus hombros, la forma en la que pronuncia mi nombre, esa sonrisa que te hacer entender que todo estará bien, ella siempre tiene optimismo, ella me hace sentir cosas que nadie ha logrado hacerme sentir, estoy... —Se cortó a sí mismo.

Iba a preguntarle algo, pero en eso pegó sus labios a los míos, inmediatamente me hice para atrás recordando que estaba borracho, que él tenía novia y que y acaba de terminar con mi novio. Aunque solo con ese rocé, solo con ese segundo bastó para que mi corazón latiera como un loco, que una descarga recorriera todo mi cuerpo.

Entonces me di cuenta de que mi corazón siempre sería de Sam. Él se me quedó viendo un momento antes de cerrar los ojos y quedarse dormido.

Mis primos llegaron justo a tiempo para llevárselo lejos de mí.

Dejaron a Jake en el cuarto de mi primo mientras que, a Sam en el cuarto de huéspedes, traté de no pensar más en esa noche así que me quedé profundamente dormida.

En la mañana me desperté con un horrible dolor de cabeza, caminé hasta el baño para darme una larga y merecida ducha.

Estuve como una hora y media en el agua, cuando se comenzó a enfriar me salí, me puse un pantalón de mezclilla, una blusa blanca de tirantes y me hice caireles, al último me puse unas zapatillas para estar más cómoda.

Salí y caminé hasta la habitación de Sam cuando me topé a mi madre en el pasillo.

— ¿Hija?

—Sí...

— ¿A dónde vas?

—Sam se quedó anoche.

—Bueno... Despiértalo y dile que venga a comer.

Asentí con la cabeza, después de eso caminé hasta el cuarto de Sam, toqué la puerta y al no obtener respuesta decidí entrar, entonces él salió en toalla, no pude evitar mirar sus marcados abdominales.

—Oh... Lo siento he tocado, pero no... Contestaste así que creí que estabas dormido.

Dicho esto, me voltee para ver a otro lado. Sentí como me sonrojaba al instante.

—No te escuché....

—Como sea, solo venía a decirte que el desayuno está listo.

—Iré en unos momentos... Por cierto, te quería decir que si luego de desayunar querías ir a nuestro lugar...

Sonreí de oreja a oreja.

—Es un hecho... Te veo allá.

Salí de su cuarto, cuando cerré la puerta me recargué en la puerta tratando de no estar tan feliz.

Caminé hasta el comedor cuando escuché gritos muy fuertes y agresivos provenientes de este mismo.

Entré y vi como mi tío golpeaba a mi primo, inmediatamente dando grandes zancadas me puse en medio de los dos.

—A mi primo no lo vuelves a golpear.

Sentía como la sangre me ardía.

—No lo golpearía si fuera un macho.

— ¿Qué? —Dije muy confundida.

Me dio un periódico donde venía en la nota principal que mi primo era gay y salían fotos donde estaba besándose y casi haciéndolo.

Oh no.

N/A

Hola :D, bueno espero que les haya gustado el capítulo los demás serán súper intensos :o porque son los últimos serán 33 capítulos ;-;

Por ahora llevo escrito 30 :3... Pero los iré subiendo cada lunes porque como saben este es el último libro :'v de la trilogía Princesa Ellie así que estoy disfrutando esto.

Mientras tanto les dejo este hermoso gif 7w7