Kale se levanta inmediatamente por recordar eso, su corazón estaba a mil y sus manos no paraban de temblar, ella se dice internamente.

Kale: No, no, no, no... yo me había olvidado de eso, porqué lo estoy recordando justo ahora? No ahora que él regresó, que podemos ser una familia, que sucede conmigo? Me estoy sintiendo culpable por mentirle, a todo aquel que me lo ha preguntado? Me convencí tanto a mi misma de eso y me olvidé, cambiándolo por enojo... soy una persona despreciable por llevar una mentira por más de seis años...

Goku siente el movimiento y se despierta, con un ojo cerrado y el otro abierto mira a Kale y le pregunta.

Goku: Oye que sucede? Deberías descansar Kale, sino mañana no tendrás energía para nada... (le toca la espalda y estaba fría y sudada) tienes fiebre?

Kale: Qué? Digo... sí, me siento un poco mal, me duele un poco la cabeza y me siento muy débil.

Goku: En el baño hay una cajita con pastillas, deja que vaya por ella y te traigo u vaso con agua.

Se iba a levantar pero ella le detiene, vuelve a echarse y le dice.

Kale: No, tranquilo no necesito pastillas ahora, estaré bien con un poco de reposo, me abrazas?

Goku le hace caso y le toma del torso, ella se pega a él y le dice en un tono un tanto arrepentido.

Kale: Yo... te amo Goku.

Goku: Y yo a ti Kale, que con ese ánimo, te sientes bien de verdad? Pareces un poco nerviosa.

Kale: Nada, es por el sueño, hay que descansar...

Goku: Tienes razón, mejor duermo otro rato.

Pasó el tiempo y mientras los dos se alistaban para salir como padre e hija, Kale tiene un momento a solas con Goku.

Goku: No te preocupes por nada, estaremos bien y vendremos a más tardar a las 6, tú tienes algo que quieras hacer por ahora?

Kale: No, ya le avisé a Caulifla para que venga en un par de horas, pero quiero hablar contigo sobre algo, es muy importante.

Goku: Pues dímelo, si es tan importante no debería esperar, que es?

Kale: Mejor regresando, es que no quiero que ella sospeche nada.

Goku: Muy bien... como gustes Kale.

Justo en ese momento llega Wendy ya cambiada, se despiden de ella y ambos se van a pasar el día juntos, en cambio Kale va a la sala y se sienta sobre el sofá, trata de articular las palabras.

Kale: Goku... yo...tengo una cosa que quiero decirte, pero no te enojes por favor... tú... no puedo hacerlo, no puedo decir eso, no quiero... que hago? Debe saberlo o si lo descubre por sí mismo es peor, Caulifla, ella debería aconsejarme algo, siempre le he tenido confianza y me a ayudado con todo lo que he necesitado alguna vez.

Se levanta para ver a una estantería con algunos tragos, vinos, coñac entre otras cosas, agarra una copa y se sirve un poco, necesitaba un trago para pensar un poco más despacio.

Kale: Espero que no pase nada grave, ya sé cocinaré para olvidarme de eso por un momento al menos.

Pone manos a la obra y prepara un poco de arroz al vapor con filete de pollo y ensalada, pone dos platos en la mesa y justo en ese momento llega.

Kale: Ya atiendo.

Abre y le abraza, la hace pasar.

Caulifla: Guau, se ve muy bonita, la casa es preciosa Kale, es tuya o de él?

Kale: Bueno es de él, pero dijo que quería cambiar de dueño por mí, tienes hambre? Justo acabo de terminar de cocinar, quieres?

Caulifla: Por supuesto que sí, te ayudo.

Mientras almuerzan Kale toma valor y le dice.

Kale: Caulifla, eres una gran amiga, no tengo forma de pagarte por todo en lo que nos haz ayudado a Wendy y a mí, somos como hermanas y me alegra haberte conocido.

Caulifla: Hay vamos, me haces ponerme colorada.

Kale: Necesito un consejo, es sobre Goku, debo decirle algo, pero creo que si le digo pasará algo malo.

Caulifla: Que puedes haberle ocultado, recién acaba de volver, que es?

Kale: No te lo puedo decir, pero dime que debería hacer, sabiendo que puede haber consecuencias?

Caulifla: Pues... es mejor que se lo digas a que se entere de otra forma, pero que podría ser tan secreto como para no decírmelo?

Kale: Es algo muy profundo, pero tienes razón, debo hacerlo yo, el problema es que no tengo la confianza para hacerlo.

Continuará...