Habíamos caminado toda la tarde y noche después de la trágica muerte de Román, sin embargo no podíamos dejar de estar tristes por la pérdida de tan increíble persona, quien sin motivo alguno tomo la decisión de arriesgar su vida por un completo desconocido como lo era yo para él, estaba en deuda con el sin embargo no tenía idea alguna de cómo pagar aquel acto de heroísmo, era claro como tenía que pagarlo, sin embargo era algo imposible para mí porque yo simplemente deseaba que mi princesa ganara en este tablero de ajedrez, pero a pesar de todos mis deseos los actos que hemos provocado en este vasallaje han dado un giro inesperado a la historia de los juegos del hambre, por lo tanto el presidente no perdonara con tanta facilidad así que podría suceder lo que sea. Estoy confundido, mi corazón dicta que debo proteger a Naftaly porque ella es el amor de mi vida, pero el acto de Román ha provocado en mí un sentimiento de remordimiento que me dice que debo dar mi vida para proteger lo que el más adoraba, su hermana Karou.

Llegamos después de todo un día al bosque, era increíble y al parecer no había nada de peligroso en él, sin embargo me sentía triste, tal vez desorientado ya que en todo el camino Karou se mantuvo en silencio mientras miraba fijamente la nieve blanca que pisaba, además de sus ojos no dejaban de escapar incesantes lágrimas, al parecer veía pensando, quería preguntar porque de su actitud pero simplemente era obvio, aunque me inquietaban sus pensamientos y creo que de igual forma a mi Nafty.

Nos adentramos bastante en el bosque hasta que consideramos que estábamos a salvo, una vez ahí buscamos un rio que nos suministrara de agua y tal vez de algunos peces para la cena, sin en cambio nuestra sorpresa fue enormemente catastrófica ya que el agua del rio también estaba rojo como la sangre, sin olvidar mencionar que las criaturas acuáticas que lo habitaban estaban muertas, al parecer la sangre era una clara estrategia de los vigilantes para acabar lo más pronto posible con los tributos sobrantes, los profesionales y nosotros tres. No podíamos hacer nada más que intentar cazar y racionar el agua que poseían nuestras cantimploras. Nos alejamos del rio porque apestaba a putrefacción, ya bastante alejados Karou recogió un poco de madera para encender una pequeña fogata mientras Nafty y yo recogíamos algunas bayas e intentábamos cazar. Pasaron algunas horas, para entonces nuestro día de caza fue un éxito ya que conseguimos dos ardillas y un conejo pero el verdadero problema era el agua debido a que no podríamos racionarla por tanto tiempo.

Ya encendida la fogata despellejamos a las presas para inmediatamente ponerlas al fuego a cocerlas, y una vez lista proseguir a devorarlas aunque Karou tenía falta de apetito porque extrañaba a nuestro aliado caído, sin embargo la obligamos ya que era necesario que se mantuviera sana, tal vez no por nosotros pero si por su difunto hermano. Mientras cenábamos a medida que iba cayendo el crepúsculo comenzamos a charlar ya que lo consideramos prudente, tal vez para amenizar el silencio que nos acompañaba y calmar un poco el sentimiento de culpa que cargaba mi conciencia en estos momentos.

-Karou, yo sé que la perdida de tu hermano jamás podré pagarla,  prácticamente fue culpa mía que muriera y en verdad lo lamento tanto, nunca fue mi intención –dije avergonzado mientras mi mirada se centraba en la tierra húmeda porque simplemente no tenía el valor de mirar a la pequeña a los ojos.

-No fue tu culpa Isaac, mi hermano conocía las consecuencias y aun así no le importo, la verdad es que para mí es un héroe y estoy orgullosa de sus actos. Él ha demostrado que no es parte de este gran juego y yo no estoy dispuesta a seguir participando –respondió seriamente mientras tomaba con ternura mis hombros para demostrar de esa manera que no estaba molesta conmigo.

Nafty nos miraba con ternura, ella sabía perfectamente bien que yo no tenía la culpa de nada de los que estaba sucediendo en esta endemoniada arena de maniacos, al contrario en sus ojos podía percibir cada uno de sus posibles pensamientos; arriesgaste tu seguridad para protegerme en los juegos cuando Ayumi menciono mi nombre, estás dispuesto a morir con tal de que yo continúe con vida, retaste al capitolio simplemente porque no estás de acuerdo con sus actos de sadismo, demostraste un sin número de valores cuando cargaste el cuerpo de Román porque simplemente pensaste que sería cruel que Karou no se despidiera. Estaba de acuerdo en que había hecho durante este vasallaje actos de admirar, tal vez de valentía, rebeldía o sin sentido común pero me sentí orgulloso de mis actos porque Nafty estaba orgullosa de ellos, porque de alguna manera me hacía diferente a los demás, cosa que a Román también lo hizo especial.

La noche había caído, simplemente era tenebrosa; el viento se movía con fuerza las ramas y hojas de los árboles que nos rodeaban, sin olvidar mencionar que algunos troncos se veían escalofriantes, sin embrago tenía que ser valiente para que Karou y mi Naftaly no tuvieran miedo del escenario, ya que claramente podía notar su cara de pánico de ambas con cualquier insignificante sonido.

-Cariño..., podrías cantarnos una canción –dijo Nafty mientras abrazaba a Karou ya que al parecer necesitaba apaciguar el miedo y el recuerdo de su hermano mayor.

-Pero es que no tengo idea de que cantar, además no canto bien –respondí mientras evadía las miradas de ambas, me sentía avergonzado ya que jamás había cantado para nadie que no fuera Nafty, pero por alguna razón si deseaba cantar esta vez para ellas dos y más porque era lo menos que podía hacer por el tesoro de Román, ¿pero qué canción debería cantar? Continúe pensando y por alguna extraña razón la única letra que recordé fue una canción conocida por Panem, aunque en el capitolio tiene un ritmo distinto que termino gustándome.    

Estaba nervioso, jamás había cantado y mucho menos había intentado alegrar a una niña con una canción, sin embargo estaba dispuesto a provocar una gran sonrisa en mis pequeñas.

-Por favor Isaac, canta para nosotras, además tú tienes una hermosa voz –dijo Nafty mientras me sonreía.

-De acuerdo, hare lo posible, la verdad es que en estos momentos solo recuerdo una canción que en verdad espero les guste. Bueno comenzare... -dije seriamente mientras que mi voz claramente se escuchaba entrecortada gracias a los nervios, respire profundamente y en segundos comencé a cantar de una manera serena y lo más parecido al ritmo de la canción que me había gustado, aunque debo admitir que opte por cambiar algunas palabras para que causara impacto rebelde en Panem.

-Cuando yo era un niño

Soñaba con un lugar en el cielo,

Jugando en los campos

Luchando con escudos y

Arcos hechos de hilo

Me gustaría poder ver este mundo de nuevo

A través de esos ojos

Ver el niño en mí

En mi fantasía

Nunca envejecer

Nunca vamos a caer de nuevo

Nunca vamos a caer de nuevo

Nunca vamos a caer de nuevo

Queremos sentirnos jóvenes

Queremos sentirnos jóvenes otra vez

Busqué un mundo que es desconocido

Todo lo que tenemos es divertido

Todo el mundo corre

Hasta que el sol se pone

Me gustaría poder ver este mundo de nuevo

A través de esos ojos

Ver el niño en mí

En mi fantasía

Nunca envejecer

Nunca vamos a caer de nuevo

Nunca vamos a caer de nuevo

Nunca vamos a caer de nuevo

Queremos sentirnos jóvenes

Queremos sentirnos jóvenes otra vez

Termine de cantarla, estaba seguro que todos los distritos escucharon mi mensaje ya que la canción original dice "Nunca vamos a sentir de nuevo". En esa frase se da a entender que los habitantes de Panem jamás sentiremos una emoción real de libertad mientras exista el poder del capitolio, sin en cambio yo la cambie por "Nunca vamos a caer de nuevo" como otro acto rebelde, para dejar en claro que la muerte de Román y de muchos otros tributos jamás será perdona por nosotros. Cerré mis ojos porque sabía que el capitolio entendería mi mensaje y que eso ocasionaría problemas en un cerrar de ojos. Al abrirlo pude notar la expresión de angustia por parte de Naftaly ya que ella conocía perfectamente bien la letra original de lo que había cantado y ahora había convertido en una canción rebelde, mientras que Karou quedo fascinada con la canción ya que al parecer le habían provocado hermoso recuerdos que a la vez la motivaron a continuar con su lucha.

Pasaron varios minutos, para Nafty me beso tiernamente mientras que Karou nos abrazó a ambos fuertemente, y una vez finalizado aquel acto de afecto preparamos nuestros objetos y apagamos la fogata para proceder a subir a un buen árbol a descansar en nuestras respectivas bolsas de dormir, para que a la mañana siguiente continuáramos nuestra lucha diaria en esta espantosa arena.

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HOLA!! TRIBUTOS, BUENO DEBO MENCIONAR QUE EL CREDITO DE LA CANCIÓN ES DE Hardwell Feat. Chris Jones Y QUE LA CANCIÓN SE LLAMA Young again, AQUÍ LES DEJO EL LINK POR SI GUSTAN ESCUCHARLA  Y SI SE PREGUNTAN PORQUE LA PUSE, BUENO ES QUE CONCIDERE EXCELENTE LA LETRA ADEMAS DE QUE CUANDO LA ESCUCHE IMAGINE QUE LA  VOZ ERA DE ISAAC JEJE, BUENO ESPERO QUE LA SUERTE ESTE SIEMPRE DE SU LADO .lll.