Al otro día el cuarto del cenizo era un desastre total había ropa tirada en el suelo, en la cama, bakugo ya se estaba estresando de tanto buscar y no encontrar algo que le guste, así que dejando de lado su orgullo fue a pedirle ayuda a su padre, él sabía sobre esas cosas y que mejor para eso, fue donde su padre y lo llevo a su habitación

-que fue katsuki, ¿porque me trajiste a tu cuarto? -pregunto el castaño, pues era raro que su hijo se comportara así

-...dame- murmuro bajito, el castaño lo miro interrogante, no lo había oído nada- ayúdame, por favor- repitió mirando a otro lado

La sonrisa que le dio su padre le hizo sonrojar, quería sacar a su padre de su habitación, pero se contuvo, él no sabía sobre combinar ropa

-Muy bien hijo, dime, ¿cuál es la ocasión? - pregunto masaru aun con la sonrisa

-suspiro- el bastardo me invito a un almuerzo a su casa, no sé qué ponerme – le respondió mientras cruzaba sus brazos y miraba su ropa como si esta tuviera la culpa

-bueno..., ¿y sabes cómo es su casa? - pregunto mientras acomodaba la ropa y a combinaba

- ¡¿Cómo voy a saber eso?!, es la primera vez que voy- le respondió un poco exaltado

- el castaño lo miro curioso- ¿y que hacen entonces cuando salen los domingos? - pregunto

- hah?!, vamos al árcade, gimnasios con cuadriláteros, a comer, algunas veces al cine, - respondió recordando lo que hace con el bicolor

-oohh, bueno- respondió asombrado masaru, pues no creyó que fueran así- bueno ve a ponerte esto a ver si te queda- le dijo pasándole un conjunto con colores pasteles, el cenizo cuando lo vio hizo una cara interrogativa, pero igual se lo fue a poner al baño.

Cuando salió se fue a ver al espejo de su cuarto, que era de cuerpo completo, le asombro como le quedaba, pues tan mal no estaba, solo que no le gusta los colores

l castaño estaba contento de ver a su hijo con esa ropa, el conocía los gustos de su hijo, pero quería verlo al menos una vez vestido así.

- Me queda bien-dijo el cenizo, asombrando al castaño- pero no me gusta los colores

Así siguió por la siguiente hora, se probó toda su ropa y ninguna le gustaba, o era que ya se la había puesto, no era de la estación o no le gustaba como le quedaba, algunos conjuntos si le gusto, pero no combinaban, de algo habían servido los años que iba a las pasarelas, podía combinar su ropa, pero en situaciones especiales no sabía qué hacer, esa, por ejemplo

-te propongo algo katsuki- le hablo masaru, el igual estaba ya cansado de lo indeciso de su hijo, pero no podía hacer nada así era igual su esposa cuando eran jóvenes- tu acomodas toda tu ropa en su lugar y yo te traigo una ropa que diseñe para la anterior pasarela- le propuso para no estar buscando mas

- aun tienes esos modelos? - pregunto katsuki a su padre

-claro que los tengo, no había nadie que los modelara así que me los quede y tú no estabas- le dijo recordando que esa vez su hijo se quedó donde sus tíos porque al lugar que iría era lejos y no podía descuidar sus estudios

-bien- dijo yendo a su cama para acomodar de nuevo su ropa, no desconfiaba de su padre, pero esa ropa nunca la había visto, así que estaba nervioso, además solo le quedaba una hora para que shoto llegara por él

Estaba por la mitad cuando apareció su padre con los conjuntos, solo eran dos, pero eran bonitos

- Ve a probarte este- le dijo pasándole uno

se cambió rápido, debía admitirlo, no le quedaba mal pero muy simple

- ¿Qué opinas? - pregunto masaru a su hijo

- No va conmigo- respondió yendo a cambiarse el otro atuendo

- Ese te queda bien katsuki- dijo masaru cuando lo vio salir

El cenizo se puso frente al espejo, si, no podía negarlo, le quedaba bien, eso sí era su estilo

- Sí, me queda bien- respondió viéndose- bueno, me daré un baño- dijo yendo al baño a ponerse su ropa de casa, salió y fue a terminar de guardar su ropa que le quedaba en su cama- gracias por ayudarme- le dijo a su padre sin mirarlo

- De nada hijo- dijo dándole una palmadita en la cabeza y llevándose consigo la ropa que no utilizara- por cierto, hijo, lleva tu llave, hoy con tu madre saldremos y volveremos tarde, nos vemos en la noche- se despidió saliendo del cuarto.

Bueno ya tenía que ponerse, ahora solo le quedaba alistarse.

A la hora indicada llego shoto, toco el timbre y lo recibió mitsuki

- Shoto, que bueno verte, katsuki ya baja- le dio paso al bicolor

Justo en ese momento bajaba katsuki de las gradas, y se ponía junto a su madre mirando al bicolor que no podía pronunciar palabra, eso provoco una sonrisa en el cenizo

- Ya vámonos bastardo- dijo dirigiéndose a la entrada y poniendo sus llaves en un bolsillo de su camisa

- Hasta luego mitsuki san- se despidió shoto

- Me voy vieja- se despidió el cenizo y cerró la puerta antes de escuchar gritar a su madre

Shoto lo esperaba junto al auto, se subieron y el chofer arranco a la vivienda todoroki

Cinco minutos después estaban fuera de una casa tradicional de dos plantas, tenía un ingreso de piedra, con un jardín delantero con muchas flores hermosas y uno que otro arbusto, pasaron por el camino de piedra, la puerta principal era corrediza, el cenizo se quedó asombrado con tantas cosas tradicionales que había en esa casa, era simplemente hermosa y llamaba la atención ya que era la única en esa cuadra

Pasando por la puerta de ingreso daba a un pasillo con puertas a los costados, siguió al bicolor hasta la primera puerta a la izquierda, abrió otra puerta corrediza y estaba el comedor, en este había dos puertas más una a la izquierda y otra a la derecha, siguieron hasta la puerta izquierda y ahí daba a la cocina, en ella se encontraba fuyumi terminando de preparar la comida

-neesan, ya llegamos- hablo shoto llamando la atención de la peliblanca

- oh!, chicos que bueno que llegaron, natsuo dijo que se retrasaría un momento, pero que podíamos ir comiendo sin el- aviso fuyumi

- déjame te ayudo fuyumi neesan- le dijo bakugo quitándose la chaqueta y pasándosela a shoto

- okey- se resignó la peliblanca- solo lleva los tazones- le dijo pasándole los tazones

El solo los tomo y los fue a dejar a la mesa, el bicolor llevo la chaqueta a la sala y la colgó en el perchero que había en una esquina.

Se sentaron todos en la mesa y fuyumi empezó a servir, cuando todos tenían su tazón dieron las gracias, estaban por comer cuando se escuchó la puerta ser tocada, shoto se levanto antes que su hermana para ir abrir la puerta, así podría explicarle a su hermano sobre su novio, si, aun no le había dicho que era hombre, no tenían tiempo para conversar entre ellos, natsuo solo sabía que su hermanito tenia pareja y asumió que era mujer, por eso ahora se encontraba saliendo del comedor para detener a su hermano y explicarle brevemente, los dos pares de ojos se le quedaron mirando raro pero siguieron comiendo tranquilos, pero cuando salió al pasillo su hermano ya encontraba caminando hacia el comedor

-shoto, viniste a recibirme-dijo alegre mientras lo abrazaba por los hombros y caminaban al comedor- me apure en venir para conocer a tu novia, fuyumi me habla de ella alveces y me dijo que salen todos los días

- niisan- trato de hablar, pues en parte era cierto, nomás se equivocaba de género- hay algo que no te eh dicho- dijo deteniendo a su hermano antes de que ingrese al comedor

- no te preocupes, de seguro le caeré bien- dijo natsuo ingresando al comedor con shoto- buenas perdón por la demora- hablo a los presentes, vio que solo estaba su hermana y un chico rubio, pero no había la supuesta novia de shoto-oohh, eso querías decirme, no vino tu novia- dijo mirando a su hermano.

escucho como una tos ahogada y vio que se trataba del rubio que se estaba ahogando con la comida y su hermana dándole golpecitos en la espalda, luego escucho un golpe suave a su costado, su hermano se había golpeado la frente

- Hum? ¿Dije algo malo? - pregunto curioso

- ¿No le dijiste shoto? -pregunto fuyumi pasándole un vaso de agua a bakugo

- Sabes que para en la universidad y con su novia y es más despistado que yo- dijo avanzando hacia bakugo- ¿te encuentras bien? - pregunto en tono preocupado

- Si, si estoy bien- dijo tosiendo un poco y sacudiendo su mano restándole importancia

- ¿De que me perdí?, ¿que tenía que decirme shoto?, y ¿por qué no está la novia de shoto? - bombardeo con preguntas el peliblanco

- Bueno los dejo conversando- dijo fuyumi, levantándose y saliendo de la habitación

- Niisan, te acuerdas que te conté que tenía pareja, verdad- pregunto mirando a su hermano a los ojos

- Si me acuerdo – respondió mientras se sentaba y se servía un vaso de agua

- Bueno- dijo acomodándose mejor- te acuerdas que esa persona es importante para mí y que la quiero mucho verdad- pregunto tanteando terreno y no decirlo todo de una

- Hum-dijo asintiendo con la cabeza mientras tomaba agua,

el cenizo ya cansado de tanto drama, pues desde que empezaron a charlar él no había emitido palabra por respeto, pero ya se estaba acabando su paciencia de tantas vueltas que le daba shoto

- Yo soy su novio- hablo por fin bakugo haciendo que shoto lo mirara un poco asombrado y para luego escuchar que ahora era el peliblanco que se ahogaba con el agua, okey quizás debió ser un poco más sutil con su elección de palabras, pero ya estaba harto y la comida se enfriaba

- Es-espera, cof cof, ¿novio? -dijo mirando a shoto asombrado, a lo que el bicolor asiente con la cabeza- ¿y por qué no me dijiste antes? - pregunto haciéndose el indignado

- Te lo dije, solo que tú estabas en tu celular y cuando te iba volver a decir llego el viejo- respondió con un poco de odio en su voz al decir esto ultimo

- Oohh, ya veo- dijo recordando esa vez- ¿sabes que esto jodera al viejo verdad? - pregunto mirando serio a ambos

- No me importa su opinión, yo quiero estar con él le guste o no- respondió igual de serio que el peliblanco

Bakugo solo miraba la conversación de ambos hermanos, llego a una conclusión, ambos odiaban a su padre, se notaba por el tono de desprecio cada que lo nombraban, luego le preguntaría al bicolor sobre esa duda que tenia

- Bueno ya dejemos de hablar del viejo- hablo el peliblanco- soy natsuo todoroki, soy hermano mayor de este, puedes decirme natsuo, este....

- Bakugo katsuki- respondió a la pregunta no emitida

- Bien, bakugo- llamo el peliblanco- ¿qué intensiones tienes con mi hermanito? - pregunto mirándolo lo más serio que podía

- ¿¡Ha!?, No es de tu putff- shoto cubrió a tiempo la boca de bakugo antes de que habla impropios

- Niisan, no es momento para tus bromas- hablo serio shoto aun tapando la boca de su novio y este le golpeaba para que le soltara y este obedeció

- NO VUELVAS HACER ESO EN TU PUTA VIDA, BASTARDO MITAD MITAD-hablo gritando bakugo mientras lo agarraba del cuello de su polera, el peliblanco se quedó mudo al escuchar el vocabulario del rubio

Fuyumi entro cuando escucho al rubio gritar, ya presentía que se había aclarado todo.

- Que bien que ya aclararon todo, ahora siéntense bien terminemos de comer- hablo fuyumi haciéndose notar

Al instante se sentaron y siguieron comiendo tranquilamente, algo raro viniendo de katsuki, pero debía comportarse, cuando terminaron de comer bakugo ayudo a levantar todo y a lavar los tazones, cosa que fuyumi se negó, pero viendo la insistencia del cenizo no tuvo de otra que ceder para dejarlo tranquilo.

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Ahora el bicolor le estaba dando un recorrido por la casa, le mostro el jardín trasero, el estanque, el sauna, la sala de entrenamientos y por ultimo su habitación

El cenizo se quedó asombrado con tanto lujo que veía, más le encanto la sal de entrenamiento, que tenía variedad de máquinas, y el sauna, al final de recorrido se encontró frente a la habitación de shoto, en ese momento se puso nervioso, nunca había estado en su habitación, entro junto con shoto y de nuevo quedo mudo por lo que había en su habitación, pero esta vez no dé la impresión, sino que no sabía que decir, su cuarto era simple, estaba cubierto de tatami el piso, tenía unas plantas de bambú en la esquina, tenía un armario que combinaba con las paredes de color neutro, había una puerta corrediza, que daba a otro jardín interno, en el centro había un kotatsu con sus cojines, la otra parte del cuarto había una pequeña elevación, sobre esta había un futon. No le sorprendió mucho, pero era muy estilo todoroki shoto.

Fin del flashback

Luego de esa extraña visita a la casa todoroki, las cosas iban bien, pocas veces iba bakugo a la casa del bicolor, este le decía que no quería que se encuentre con su padre, al cenizo no le importaba eso, pero respetaba la decisión del bicolor ya que él decía que solo la opinión de sus hermanos le importaba y nada más.

Se turnaban de casa para entrenar, el cenizo aprovechaba para entrar al sauna luego de sus ejercicios.

Con el tiempo el cenizo iba mostrando su verdadero ser, solo cuando ambos estaban solos en alguna de sus habitaciones, él se comportaba de marera cariñosa, le gustaba que él lo consentía y le daba mimos, eso lo hacía dormir durante un rato, pero frente a los demás seguía siendo un gruñón mal hablado y mandando a morir a todos, pero aun así se enamoraba cada vez más de él, le parecía tierno cuando se enojaba o cuando gritaba.

De igual manera el bicolor iba soltándose más con bakugo, ahora el cenizo sabio cuan perezoso resulto ser su bello novio, también se enteró que su platillo favorito era la soba, que le gustaba dormir hasta tarde, que le sacaba fotos a los gatos que se encontraba por la calle, pues una vez se puso a ver su galería y encontró fotos de gatos, eso le resulto tierno, e igual en sus redes sociales había fotos de gatos y flores, cada vez le gustaba más.

Ambos se empezaban a profundizar cada vez más en el otro, no se decían seguido cuanto se querían, no eran esa clase de pareja, sabían que se querían y lo demostraban con momentos, con carisias, con acciones, pequeños detalles que se daban y pasaban desapercibida de las demás personas, así ellos demostraban su querer, pero había días en que ambos se echaban juntos y se ponían a decir palabras cursis que le salían del momento, mayormente lo empezaba diciendo shoto, ya que a bakugo aún le daba algo de pena hablar así con él, pero una vez empezaba era la persona más cariñosa que había.

Ese día era uno de esos, ahora se encontraban recordando las primeras cosas que hicieron como pareja, en ese tiempo sentían nervios y ahora como algo divertido de recordar, como la primera cita que tuvieron, eran un mar de nervios y no sabían que hacer, pero eso lo dejaremos para el siguiente capítulo.