Al día siguiente, Jimin llegó a la universidad sintiéndose un poco más tranquilo.

La conversación con Jungkook del día anterior había sido... extrañamente reconfortante, aunque todavía no se sentía del todo seguro con él.

Aun así, había algo en su forma de tratarlo que no lograba sacarse de la cabeza.

Se dirigió a su lugar habitual bajo el árbol, con la intención de repasar algunas notas antes de clases. Sin embargo, al llegar, vio a alguien más allí.

Un chico alto, de cabello castaño y una sonrisa encantadora, estaba sentado en la mesa de madera, viendo a su teléfono.

Jimin se detuvo por un segundo, sorprendido.

—¿Taehyung?

Susurró, sin poder evitar la pequeña sonrisa que apareció en su rostro.

Taehyung levantó la vista y, al verlo, su rostro se iluminó.

—¡Jiminie!

Antes de que Jimin pudiera reaccionar, Taehyung ya estaba abrazándolo con fuerza, envolviéndolo en su cálida presencia.

Jungkook, que se acercaba al lugar con su característico andar relajado, se detuvo al ver la escena.

Frunció ligeramente el ceño al ver cómo Jimin correspondía al abrazo de Taehyung, su sonrisa era diferente, más abierta, más... sincera.

No sabía por qué, pero sintió un molesto pinchazo en el pecho.

Jimin parecía tan cómodo con él.

Demasiado.

Apretó la mandíbula, sin querer admitir que la escena le estaba afectando más de lo que debería.

¿Desde cuándo le importaba tanto con quién se relacionaba Jimin?

Se quedó a unos metros, observando cómo hablaban, cómo Jimin reía suavemente ante algo que Taehyung decía, y cómo los ojos del recién llegado parecían analizarlo con una confianza que a Jungkook le resultaba irritante.

Jimin finalmente se percató de su presencia y sonrió levemente.

Dudó en llamarlo, ¿sería correcto?

Pero no quería ser maleducado, y después de todo Jungkook lo había ayudado mucho.

—Jungkook, ven.

El pelinegro se acercó con calma, metiendo las manos en los bolsillos de su chaqueta, pero con una mirada algo más fría de lo normal.

—Taehyung, él es Jungkook. Estamos haciendo un trabajo juntos.

Taehyung sonrió de inmediato, extendiendo la mano con entusiasmo.

—¡Ah! Así que tú eres Jungkook. He escuchado de ti.

En realidad, Jimin le mencionaba pocas cosas sobre el en las noches, pero a Taehyung le gustaba bromear.

Jungkook levantó una ceja, estrechando su mano con firmeza.

—¿Ah, sí?

Taehyung asintió, riendo.

—Jimin dice que eres muy serio.

Bromeó, dándole un pequeño codazo al rubio, quien se sonrojó levemente.

Jungkook soltó la mano de Taehyung y miró a Jimin, quien evitaba su mirada como si nada.

—¿Ah, sí?

Repitió, esta vez mirando directamente a Jimin, quien solo sonrió nervioso.

Jungkook juraba que estaba dando su lado más tranquilo ante Jimin, no se consideraba serio ante él, ¿era muy serio?

El ambiente se volvió extraño por unos segundos.

Jungkook sintió esa molesta sensación crecer en su pecho al ver cómo Jimin parecía más relajado con Taehyung que con él.

—Bueno...

Jimin carraspeó.

—Taehyung es un viejo amigo...

—Genial.

Respondió Jungkook en un tono más seco de lo que pretendía, y Jimin se sentía un tonto por haberlo llamado en primer lugar.

Probablemente ni siquiera le importe de lo que habla.

Taehyung, por su parte, no pareció notar la tensión, pero Jimin sí. Y eso solo lo ponía más nervioso.

Mientras los tres hablaban, Jungkook no pudo evitar notar cómo Jimin centraba toda su atención en Taehyung, sonriendo de una forma que rara vez mostraba cuando estaban solos.

Y eso le molestaba más de lo que estaba dispuesto a admitir.

Jungkook se quedó allí, observando en silencio cómo Jimin hablaba con Taehyung con una facilidad que nunca había tenido con él.

Cada sonrisa, cada pequeño gesto de confianza que el rubio le brindaba a su "viejo amigo", hacía que una sensación incómoda se instalara en su pecho.

Intentó ignorarlo, se dijo a sí mismo que no le importaba, que era solo un compañero de trabajo.

Pero entonces, ¿por qué cada vez que Jimin reía por algo que decía Taehyung, sentía un nudo en la garganta?

—Bueno, ¿y qué han estado haciendo?

Preguntó Taehyung, acomodándose en la mesa mientras miraba a Jimin con evidente cariño.

Jimin sonrió, sin notar la mirada de Jungkook fija en él.

—Ah, hemos estado avanzando en el trabajo de economía. Jungkook ha sido de mucha ayuda.

Jungkook sintió un ligero alivio al escuchar eso, pero se esfumó rápidamente cuando Taehyung sonrió y dijo:

—Oh, genial. Si necesitas ayuda extra, ya sabes que siempre estoy disponible, Jiminie.

Jungkook entrecerró los ojos. ¿Jiminie?

Jimin rió suavemente.

—Lo sé, Tae, lo sé.

Jungkook se aclaró la garganta, interrumpiendo el momento.

—El trabajo ya está bastante avanzado. No necesitamos ayuda.

Taehyung lo miró, sorprendido por el tono de Jungkook, pero sonrió de manera despreocupada.

—Solo decía, Jungkook. No hay que ponerse tan serio.

Jimin miró a Jungkook, notando su expresión tensa y preguntándose por qué parecía tan molesto.

¿Pasaría algo con Jinyoung?

—Uh... sí, todo va bien con el trabajo.

Agregó Jimin rápidamente, tratando de suavizar el ambiente.

Pero Jungkook ya no estaba escuchando. Solo podía ver cómo Taehyung se inclinaba un poco hacia Jimin, cómo el rubio parecía cómodo con su cercanía, y cómo esa sonrisa tímida que tanto le costaba sacar le salía de manera natural con él.

No le gustaba. No le gustaba para nada.

—Tengo que irme.

Dijo Jungkook de repente, levantándose de la mesa.

Jimin lo miró sorprendido.

—¿Eh? Pero... aún no empezamos de revisar las notas.

Jungkook se encogió de hombros.

—Hazlo con Taehyung. Parece que se entienden mejor.

Jimin parpadeó, confundido, mientras veía cómo el pelinegro se alejaba sin darle oportunidad de responder.

—¿Qué le pasa?

Preguntó Taehyung, arqueando una ceja.

Jimin suspiró, mirando la espalda de Jungkook desaparecer entre los estudiantes.

—No lo sé... creo que está de mal humor.

Taehyung sonrió, apoyando su cabeza en una mano mientras miraba a Jimin con interés.

—O está celoso.

—¿Qué?

Jimin lo miró con los ojos muy abiertos, pero su corazón dio un brinco inesperado.

Taehyung se encogió de hombros.

—Digo, solo míralo. Estaba todo gruñón desde que llegué.

Jimin se mordió el labio, negando con la cabeza.

—No seas tonto, lo conozco hace poco...y no nos conocimos de la mejor manera...

Pero mientras Taehyung seguía hablando, su mente estaba en otra parte.

¿Celoso? No, eso no tiene sentido... ¿o sí?

Jimin trataba de ignorar las palabras de Taehyung, su mente no podía dejar de dar vueltas alrededor de la idea que había plantado en él.

¿Celoso?

Jungkook nunca había mostrado ese tipo de... interés.

Pero la forma en que se había ido tan abruptamente, cómo había cambiado de actitud cuando Taehyung comenzó a hablar con él, era extraña.

¿Podía ser realmente eso? ¿Podía Jungkook sentir celos? Jimin frunció el ceño, aún confundido por su reacción.

No tenía sentido, ¿verdad? Si apenas se conocían.

Por otro lado...

Jungkook caminaba hacia el edificio con los pasos rápidos y decididos, pero por dentro, todo estaba en caos.

Se sentía frustrado, pero no sabía exactamente por qué.

Había algo en la manera en que Taehyung se acercaba a Jimin que lo ponía de los nervios. El tono con el que le hablaba, ese apodo cariñoso de Jiminie, la forma en que lo hacía reír con facilidad...todo eso lo molestaba sin razón aparente.

Se sentó en una de las bancas cercanas, recargando los codos sobre las rodillas y mirando al suelo, perdido en sus pensamientos.

¿Por qué me molesta tanto? Se repetía una y otra vez.

No era como si realmente tuviera derecho a sentirse de esa manera, ¿cierto? Jimin no le debía nada.

Pero, a pesar de eso, no podía evitar la sensación de que algo no estaba bien.

Se pasó una mano por el cabello y suspiró profundamente.

Solo es Jimin. Se decía.

Nada serio.

Pero las imágenes del rubio riendo junto a Taehyung seguían dándole vueltas en la cabeza.

Y, por más que intentaba convencerse a sí mismo de que todo estaba bien, esa incomodidad persistía, como una sombra que no podía deshacerse.

Jungkook, por un momento, pensó en ir a casa y dejar todo atrás, pero no podía evitar pensar en lo último que había dicho Taehyung y logró escuchar.

¿Celoso? La palabra resonaba en su mente como un eco, un eco que se hacía cada vez más fuerte.

—Eso no es posible...

Murmuró para sí mismo.

Mientras caminaba por los pasillos de la universidad, la idea de Taehyung seguía rondando en su mente.

¿Qué sabía él? ¿Era posible que, en alguna parte de su subconsciente, Jungkook estuviera celoso de la conexión entre Jimin y Taehyung?

—Es absurdo.

Se dijo.

Soy solo su compañero, no hay nada más.

Pero esa era la verdad más difícil de aceptar.

No podía dejar de pensar en Jimin, en la forma en que le sonreía, en cómo todo parecía ser más fácil con Taehyung.

Y eso lo dolía.

Mientras tanto, Jimin, sin saber la pelea interna que Jungkook estaba teniendoen su cabeza, trataba de concentrarse en la conversación con Taehyung, aunque su mente no podía evitar volver a lo ocurrido con Jungkook.

¿Por qué reaccionó así?

Pensaba.

¿Por qué se fue tan de repente?

A pesar de su sonrisa, Jimin no podía deshacerse de la sensación de que algo estaba mal.

Había una incomodidad palpable en el aire, algo que no podía identificar pero que le revolvía el estómago.

¿Será que me malinterpretó?

Se preguntó, mientras miraba a Taehyung, quien parecía completamente ajeno a la situación.

—¿Tae... crees que algo anda mal con Jungkook?

Preguntó Jimin, casi sin darse cuenta, mientras observaba el lugar por donde se fue Jungkook.

Taehyung lo miró, sorprendido por la pregunta.

—¿Por qué lo dices?

Preguntó, con una sonrisa curiosa.

—¿Estás preocupado por él?

Sonrió pícaro.

Jimin se sintió tonto al instante, pero asintió con la cabeza.

—Solo... no sé, parece que algo lo molesta.

Respondió, rascándose la nuca de manera nerviosa.

Taehyung observó a Jimin con una mirada pensativa, como si estuviera tratando de entender el porqué de su preocupación.

Finalmente, suspiró con una sonrisa ligera.

—Tal vez solo necesita tiempo. Las cosas no siempre son tan complicadas, Jiminie.

Jimin frunció el ceño, sin estar completamente convencido.

—¿Estás seguro?

Taehyung se encogió de hombros.

—Déjalo ser, Jimin. Si algo estuviera mal, él te lo diría, ¿no?

Dijo con tono ligero.

—No, no somos tan cercanos...

Jimin lo miró.

Quizás estaba sobrepensando las cosas, pero la preocupación seguía ahí, inquietante.

En ese momento, Taehyung cambió de tema, desviando la conversación hacia algo más trivial, pero Jimin seguía distraído, observando el lugar por el que Jungkook había desaparecido una y otra vez.

[♤♡]

Jimin es alguien que no confía fácilmente debido a su experiencias pasadas. Cuando mira a Jungkook mira a Jinyoung cuando recién lo conoció, así que prefiere protegerse.