"...Las cosas no siempre son lo que parece..., a veces las miradas mas oscuras...son las que guardan sentimientos maravillosos por dentro..."

Pov Kagome

-¿u...un...hijo?-pronuncie a penas, porque sentía que mi boca era arrastrada por la gravedad, y creo que los demás chicos también se encuentran en la misma situación ¿un hijo?, ¿Cómo que quiere un hijo?, además que sea varón...

-si, un hijo-recalco con simpleza aun no borraba esa sonrisa de su rostro, una que se aseguraba asi mismo que tenia la batalla ganada

-¿Por qué un hijo?!-le grite-te puedo entregar mi reino si quieres, todo lo demás, pero traer un hijo al mundo por un capricho eso no!

-de verdad no sabes negociar tontita, mírate en que situación te encuentras- pronuncio extendiendo sus brazos irónicamente mostrándome mi realidad- todos te han dado la espalda, solo tienes a ese cuarteto de allá y tu hermana, no tienes a nadie Kagome -mordí mis labios ante su confesión y tenia razón, no tenia a nadie y continuo- yo puedo poner el orden a  tu imperio, tan solo dame el poder absoluto y lo demás será mi propio asunto-me miro seriamente esperando mi respuesta

-¿y por que el hijo varón?-le reclame, si quiere poder ¿para que el pequeño?, guardo silencio por algunos segundos que fueron para mi una eternidad, note que sus puños eran presionados fuertemente conteniendo quizás que emoción, para responder

-fácil, así conservare mi dinastía-contesto, haciendo una leve pausa-si nacen niñas, están comprometidas a casarse con cualquier idiota que puede tomar lo que me pertenecerá, con un hijo varón, mi imperio prevalecerá

-¿solo por eso?-pregunte incrédula, no puedo creerlo que sea solo eso, no se porque presiento que hay algo mas

-si, solo eso-respondio cortante

-¿acaso no lo sabes? Nuestro imperio no ha nacido un "niño" hace mas de 500 años, nuestra dinastía se fundo gracias a los poderes del sol, descendientes de Midoriko, la diosa de la sanación y la vida, que después de mi madre Kykio, solo quedamos Rin y yo

-¿y crees que eso mi interesa?-bufo

-¿acaso no me escuchas? Solo pierdes tu tiempo-respondí, haciéndolo voltear dirigiéndose a mi hermana en los pilares con el arma cargada en su hombro

-si tu lo dices...

-¿Qué intentas hacer?-mi desesperación se hizo presente al ver que mas cerca estaba de Rin quien estaba inconsciente encadenada en ese lugar

-tu dices que solo pierdo el tiempo contigo-pronuncio con un tono aterrador, tomando el mentón de mi hermana con brusquedad- tal vez...tu hermana puede darme el hijo varón que ando buscando...-termino de decir acercándose a ella lo suficiente a sus labios para besarla, asustándome como nunca antes en mi vida, este tipo es capaz de todo para obtener lo que desea

-déjala! Ya basta! por favor! Lo hare!-grite lo ultimo muy fuerte que se escucho por toda la sala haciéndolo detener, pude notar una imperceptible sonrisa en sus labios pero no me importa si esta feliz o no, solo importa que mi hermana este a salvo, baje la mirada ante mi redición absoluta, no puedo creer sellar mi destino así

-¿de verdad?-dijo soltando la mandíbula de Rin, acercándose a mi nuevamente -¿aceptas el trato?

-si...-respondí asistiendo con mi cabeza-por favor no lastimes a mi hermana...tampoco a los chicos..., acepto el trato...-poco a poco siento que aquel sujeto llamado Jakotsu me suelta lentamente, mis rodillas caen al suelo helado de piedras y mi manos se apoyan para evitar golpearme, ya perdí mi reino, mi dignidad y mi orgullo, todo para salvarlos a mis seres queridos- mi reino es tuyo...-termino de decir poniéndome en posición de la misma en señal de que había perdido, mis lagrimas no solo marcaban en mis mejillas sino que también en el piso sonaban como la lluvia delicada de primavera

-de pie-ordeno, no tuve mas opción que obedecerle, mis ojos eran cubiertos por el flequillo de mi cabello-mírame- levante un poco la vista para ver los ojos del asecino que acabo con mi pueblo, o al menos eso creo o no se qué creer si él dijo la verdad, su mirada es azulada y sin una mayor emoción o brillo especial, que forma tan vacía de mirar, cuando siento que me toma la mano rápidamente, para guiarlas a sus labios besando mi dorso con sutileza, no pude evitar abrir mis ojos enormemente ante aquella acción tan extraña de su parte, incluso parecía hasta gentil proviniendo de él, para jalarla con brusquedad botándome al piso-nómbrame rey majestad, ante el consejo real y el poder absoluto en las tierras, después veremos lo demás-dijo para marcharse

-espera!- le grite deteniéndolo de forma abrupta-libera a mi hermana y a mis amigos

-lo hare, yo cumplo lo que digo-y siguió avanzando

-detente!

-¿ahora que quieres?

-¿y si no nace el bebe varón?-solo me daba la espalda, podía ver su trenza llegar hasta la altura de su cintura, su forma de pararse, la manera de caminar, todo, es un completo guerrero, solo movió su rostro para verme y responder

-simple, lo intentaremos de nuevo-contesto con simpleza para marcharse-llévenla a su aposentos-ordeno a sus soldados, pero aun él no había liberado a mis amigos o a mi hermana

-espera! ¡Libera a mi hermana!, Rin! Rin!- nuevamente ese tipo llamado Jakotsu me tomo del brazo un poco mas delicadamente que Bankotsu, pero con fuerza para no forcejear, aun así lo hice hasta que me arrastraba hacia mis aposentos, mi mayor terror era que Rin le sucediera algo malo y que mi "trato" no habría servido para nada, para dejarme en allí, me miro con determinación, para luego cerrar la puerta, con llave, camine lo mas rápido posible para golpearla con fuerza, quiero respuestas y las necesito ahora

Fin pov Kagome

En la habitación algo lejana a todo el alboroto, aun dormía la joven princesa plácidamente en los aposentos, hasta que lentamente abrió sus ojos-que me...paso...-susurro apenas se levantaba tocándose la cabeza sintiéndose un tanto mareada-recuerdo que...corría y...Kagome!-se sobresalto al ver que me encuentro en una de las habitaciones del palacio-¿Qué paso? ¿Dónde esta mi hermana? Kagome! Kagome!-la comenzó a llamar, pero era inútil, nadie podía oírla

-al fin despertaste!-le dijo una voz chillona, debajo de su cama, al asomarse no pudo evitar aparecer lagrimas en sus ojos llenas de felicidad y este pequeño ser continuo- dormiste demasiado niña! Hay un alboroto afuera y...-no alcanzo a terminar cuando fue tomada por la joven princesa abrazándolo fuertemente hasta el punto de casi asfixiarlo

-que bueno que esta bien! Estoy muy feliz señor Jaken!- decía con enorme felicidad aun sin romper el abrazo

-mocosa me asfixias!-se quejaba el pequeño sapo

-no lo soltare!-le contesto- ¿Kohaku ha venido a salvarnos? -pregunto la joven con inocencia, abriendo enormemente los ojos del pequeño individuo

-pues...mocosa...eso...-tartamudeaba, no sabia que decirle ¿la verdad? Imposible de todas las maneras posibles, ella sufriría y a él lo matarían, así que aguardo a silenciarse y alargar su comentario lo mas posible para que se le ocurriera una respuesta rápida a la joven

-no vendrá-contesto una voz dejando a ambos paralizados, mirando hacia una dirección oscura, se acercaba una imponente presencia ante ellos, un hombre con estola colgando sobre su hombre, una gruesa armadura, de cabellera plateada y un rostro único que ella no sabia si definirlo como un asecino o un salvador

-¿Quién es usted? ¿Por qué esta aquí?-pregunto ella aun sin soltar a Jaken entre sus brazos aferrándose mas a él

-no lo entiendo...-pensó con rapidez al ver la escena entre ellos, respiro suavemente para serenarse -soy Lord Sesshomaru, princesa

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holaaa espero que les guste esta pequeña parte de este capitulo, muchas gracias por los bellos comentarios que lamentablemente no he podido responder, por falta de tiempo, muchas gracias besos!!! perdon las faltas de ortografia

¿que sucedera? ¿Kagome negociara algo mas? ¿Bankotsu aceptara las peticiones de Kagome?