Capitulo 6
Su estomago era un manojo de sentimientos, podía sentir como se contraía debido a la impaciencia, el tiempo lo estaba consumiendo lentamente, pero el no era alguien impaciente, entonces ¿Por qué?
Su mente enseguida le dio la respuesta. Y el solo hecho de recordarlo le fastidio.
Se suponía que hoy seria una tarde de amigos, todos habían estado ocupados los últimos días, sin duda estar en ultimo año de preparatoria no era fácil, era casi imposible tener tiempo libre, las tareas abundaban y las actividades extraescolares para prepararte para la universidad eran un dolor de cabeza, una verdadera tortura para todos. Sin embargo después de algunos días, todos habían podido hacer un espacio en su agenda, esta tarde se encontrarían en el parque de la ciudad, aunque fuera poco tiempo se encargarían de disfrutarlo. Necesitaban una dosis de relajación y motivación, apenas iban comenzando el ciclo (Tenia tres semanas de haber iniciado) y ya querían que terminará. Cierto azabache estaba muy molesto por esto, las oportunidades para convivir con amigos y familia se redujeron al mínimo, cuando sus padres estaban libres, el no lo estaba, así que los momentos familiares se hicieron muy escasos, eso era un fastidio y sumando algo más a su molestia, tampoco había tenido la oportunidad de ver a cierto albino de ojos púrpura y algo dentro de el no soportaba eso. Necesitaba un momento de esos que solo Shinazugawa podía crear, lleno de tensión, nervios, retos y algo más, pero esto último no sabia como descifrarlo. Los momentos con Sanemi eran raros, si y mucho, como aquella vez cuando salieron a comer, el cicatrizado pidió Ohagi's a diferencia del oji azul, ese día el pidió dangos y oh sorpresa, ni siquiera pudo comer tranquilo, todo el tiempo recibió comentarios con albur por parte del más alto, ni siquiera pudo terminar su comida, porque saco a Sanemi del lugar, mientras el otro reía feliz, tuvieron que pasar el resto del día solos, ambos pelearon mucho ese día, aunque al final Giyuu fue invadido por una sensación indescriptible.
Actualmente el junto Kocho llegaron al parque juntos, escaneo rápidamente el lugar, pero no encontró a quien buscaba, se dirigió a un chico bajito, seguramente el le daría una respuesta a la ausencia del albino, lo conocía y Sanemi no era una persona impuntual, de hecho el odiaba a las personas impuntuales.
- ¡Giyuu! ¡Shinobu! ¿Qué tal?
Una animada peli rosa los saludo alegremente, Giyuu sonrió levemente, pero su atención fue hacia Iguro sin meditar o recapacitar un poco.
- ¿Y Shinazugawa?
Tres pares de ojos lo vieron curiosos y sorprendidos.
- ¿Debería responderte? Ni siquiera te agrada Sanemi.
Y mentira no era, se llevaban como perros y gatos, el azabache rodo los ojos.
- Iguro, hablo en serio.
- No es de tu incumbencia donde este.
Tenia un punto si.
- Limítate solo a responderme Obanai
La mirada heterocromatica lo escaneo molesto, la serpiente en sus hombros siseo.
- ¿Y si no que?
Nadie dijo nada, Tomioka quiso replicar pero ¿Qué diría? fue impulsivo y bastante, parecía un niño pequeño con aquel comportamiento y le fastidiaba.
- Olvídalo...
Giro su cuerpo en dirección a Kanroji, en un intento de dejar en el olvido esta breve interacción.
- Esta en una cita, llegará algo tarde, una disculpa.
No sabe que le molesto más, si el tono tan descaradamente sarcástico o saber que Sanemi estaba en una cita. Sin notarlo, sus labios se curvearon en una mueca. Shinobu y Kanroji se miraron cómplices.
Y ahí estaba la sensación en su estómago, carcomiendo sus entrañas, ¿Por qué se sentía así? Solo serian unos minutos de retraso, si solo eso, tal vez media hora cuando mucho ¿Verdad? No importaba mucho, pero era injusto, Shinazugawa arruinó la única oportunidad que tenían para verse después de varios días por una cita ¿En serio? Giyuu hizo espacio en su apretada agenda, incluso paso todas sus materias extraescolares de hoy, para mañana, aunque eso significaba no tener tiempo ni para comer, pero lo hizo para verlo, bueno ver a todos sus amigos.
- Ara ara~ ¿Por qué el enojo Giyuu? ¿Te molesta la ausencia de Shinazugawa?
- Para nada, al contrario, me alegra que no este aquí, ojalá no se aparezca.
- Por un momento pensamos que te habías enojado ¡Nos alegra que no sea el caso!
- ¿Qué dicen? Tomioka enojado por la nula presencia de Shinazugawa, imposible.
Frunció el ceño, no daban risas esos comentarios irónicos, parecían niños chiquitos peleando entre si.
- No hace falta que usen ese tono de voz, no me agrada.
Se cruzó de brazos y se alejo un poco de sus amigos o bueno, eso planeaba, pero Uzui lo abrazo por los hombros desde atrás.
- Ese mal humor no es para nada extravagante Tomioka. Arruinas tu día
- Ara ara~ mira quién habla, hace unos momentos tu también estabas molesto ¿Por qué será?
- Mujer, no sé de que hablas.
- Adivino, ¿Es por qué Kyojuro-san tampoco ha llegado verdad?
El azabache se hizo el desentendido. ¿De verdad había tardado tanto en descubrir la relación entre el rubio y Tengen? Cuando el y Shinazugawa vieron besarse a la pareja, fue hace dos semanas, acordaron no decirles nada a sus amigos, por respeto a la privacidad de Uzui y Rengoku.
- ¡Qué lindo! Tomioka y Uzui están preocupados por Shinazugawa y Rengoku-san ¡Eso es amor!
Giyuu parpadeo confundido. Si estaba molestó e impaciente, pero ¿Enamorado? Claro que no, solo le fastidiaba que Shinazugawa le diera atención a alguien más. El oji azul era mucho mejor que esa "cita" del albino.
- Es de muy mal gusto ocultar cosas a tus amigos. Por ejemplo el hecho de que tienes pareja.
- Si sigues de chismosa, morirás joven Kocho.
- Pero descuida, te damos nuestra aprobación, Kyojuro me agrada.
- No pedí su aprobación en ningún momento.
- ¡Necesitamos celebrar esto! Kyojuro-san ¡Es parte de nuestra familia! ¡Iguro-san y yo iremos a comprar comida! - Propuso animadamente - No tardaremos, haremos un día de campo ¡Será muy lindo!- Tomo de la mano al chico más bajito y caminaron a un restaurant cercano.
Kanroji era la mas emocionada por esta noticia, pues ella y el rubio tenían una enérgica y linda amistad a nadie les sorprendió que congeniaran tan bien, era de esperarse, pues sus personalidades son similares.
- Entonces adivine, tu y Kyojuro son pareja. ¿Desde cuando?
- ¿Acaso tengo que informarte todo lo que me pasa o que?
- Pobre de Kyojuro-san tiene que soportar tu pésimo carácter.
- ¿Eres mi amiga o hater?
- Depende.
Giyuu los observaba en silencio, sabia que no estaban peleando, así era su forma de demostrarse afecto, sin embargo, no logro descifrar si a Kocho le desagrado o no saber sobre la relación de Tengen.
- Uzui ¿Cómo aceptaste o como supiste que te gustaba un chico?
Los otros dos dejaron de pelear, miraron al azabache, no se esperaban una pregunta como esa.
- ¿Te gusta alguien?
Movió rápidamente su cabeza en negación, no lo preguntaba por eso.
- ¡No! Es solo curiosidad - Suspiro - Digo, en tu familia no te dieron ese ejemplo, al contrario, tienen chicas a montones. Y me es confuso.
Hablaba con la verdad, para nadie era un secreto que la familia Uzui, practicaba la poligamia, aunque no era bien vista por las otras familias, era algo que respetaban a petición de Kagaya-sama, sin embargo la familia del peliblanco tenia muchas restricciones debido a esto.
- Solo lo sabes y ya. Cuando comienzas a pensar demás en esa persona y poco a poco prestas atención a pequeños detalles que antes ignorabas y lo involucras en pequeños hábitos de tu vida, es cuando sabes lo que sientes. No le des tantas vueltas al asunto, Tomioka.
La mirada zafiro miraba a la nada, tratando de entender aquellas palabras, el nunca se había sentido así, se removió incomodo del abrazo, pues Tengen lo seguía sosteniendo por los hombros.
- Vaya estar con Rengoku te convirtió en un poeta ¿Eh? Recuérdame agradecerle por ver esta faceta tuya.
- Cállate, Kocho.
La azabache con puntas morada soltó una risa burlesca.
- Tomioka y yo somos los solteros del grupo, toco ser los tíos millonarios ¿Verdad, Giyuu?
- Claro, Kocho.
Ambos sonrieron, pero una cuarta presencia los interrumpió.
- Su conversación se escucha desde la entrada, son muy ruidosos.
Giyuu se tenso al escuchar esa voz, la habitual sensación llego a su cuerpo como remolino y pudo sentir como la intensidad era mas fuerte que en otras ocasiones. Sin embargo no fue el único en tensar su cuerpo, el peliblanco que los sostenía por los hombros sintió un escalofrió inusual, el oji purpura recién llegado lo abrazo de la misma forma en la que el tenia abrazado a Giyuu.
- Suéltalo.
El susurro fue apenas audible, pero perfectamente escuchado por Tengen, no supo en que momento aflojo su agarre, liberando al azabache.
- Ara ara~ Parece que viste a un fantasma.
Tomioka no entendió porque decía eso, tampoco pudo pensarlo mucho, pues en menos de un segundo tenia a Sanemi frente a el, chocando miradas y una sonrisa ladina por parte del albino.
- Te veías muy cómodo en mi ausencia, eso me duele, príncipe.
- Y-yo no...
Las palabras no salían, ¿Por qué? Intento mirar a los lados para pedir ayuda a sus amigos, pero no supo en qué momento estos se alejaron. Uzui estaba con Rengoku y Kocho parecía recoger hojas secas, pues tenía la manía de disecar y conservar todo lo que ya había cumplido su función en la naturaleza.
- ¿tu no..?
- Y-yo...
Maldecía internamente por su reacción, odiaba excusarse, no estaba acostumbrado a ser cuestionado, pero en este momento sentía la necesidad de dar una explicación y eso le parecía absurdo. Sus ojos evitaban a toda costa el contacto directo, sin embargo esa sensación de molestia regreso y recordó lo que le dijo Iguro al inicio.
- Yo soy el que debería cuestionarte.
- ¿Y por qué?
- Por tus acciones, yo hice un espacio en mi agenda ¡Y tu simplemente vas y juegas a los noviecitos!
- ¿ De que mierda hablas?
Ambos se miraron con recelo, no entendiendo la postura del otro. El brazo del azabache fue tomado con brusquedad por el albino.
- Contesta.
- ¡No te hagas el que no sabe! Obanai me lo dijo.
El cicatrizado lo miro confundido y con un tic en el ojo.
- ¿Obanai?
- El dijo que llegarías tarde por estar en una cita- Afirmo- nos hiciste perder el tiempo a todos.
- ¿Cita?
- Aparte de impuntual, sordo.
- ¿Eres idiota? El cerebro no lo tienes de adorno.
- ¿Eh?
- Si según tú estaba en una cita, puedes explicarme ¿Por qué tengo este aspecto?
La mirada zafiro escaneo el cuerpo del oji púrpura, anteriormente ni siquiera le dio una mirada, pero ahora podía notar el aspecto desalineado de Shinazugawa, este tenia pequeños rastros de sangre en su camisa, cara y manos, su pantalón estaba lleno de tierra en la parte baja y pudo notar algunos hematomas. Por instinto busco a Kyojuro, puesto que el y el albino habían llegado juntos y el rubio tenia un peor aspecto que Sanemi.
- ¿Qué ocurrió?
- Fui a una cita ¿No?
El azabache se avergonzó, hizo una notal mental para no volver a creer en algo dicho por el chico heterocromatico.
- Hablo en serio, Shinazugawa.
- No es algo importante. Fue una estupidez.
- Tienes sangre por todas parte y Kyojuro esta igual o peor que tu.
- En mi caso, la sangre no es mía. Rengoku no tuvo la misma suerte.
- ¿Qué hiciste?
- No me molestaría que confiaras más en mi, príncipe.
- Eres muy impulsivo.
- Al menos yo no le quitaría el novio a alguien.
- ¿Qué?
- Estabas muy pegadito a Tengen. No deberías hacerlo.
- Solo tu malinterpretarías la situación.
Shinazugawa soltó una carcajada burlesca, parecía haber escuchado el mejor chiste del mundo.
- ¡Deja de reírte!
- Deja de enojarte tanto, te saldrán arrugas y te pondrás feo.
- ¡Yo no seria alguien feo!
- ¿Nunca cambiaras? Siempre haces corajes.
- ¡Tú eres el culpable!
- ¿Debo pedir disculpas?
Giyuu lo fulmino con la mirada, se arrepintió de haber dicho que extrañaba los momentos con Sanemi, ahora que lo veía bien, eran situaciones molestas.
- No me mires así, soy masoquista y me éxito.
La oceánica mirada se desvió, fingió no escuchar aquello.
- Me gusta cuando guardas silencio. Así eres aun más lindo, príncipe.
De repente cierto oji azul comenzó a sentir como su corazón se aceleraba, podía jurar que era una taquicardia ¿Iba a morir?, no, no se sentía en peligro, pero podía escuchar los latidos de su corazón cada vez mas rápido, como si fuera a estallar.
- ¿Quieres saber algo?
Como pudo asintió, fue muy leve, pero perceptible por parte del albino.
- Nunca nadie tendrá mi atención, solo tu, así que no vuelvas a ponerte celoso y cuestionarme. - Hubo una pausa. - Yo intentare hacer lo mismo, siempre y cuando Uzui se mantenga alejado.
Su corazón se detuvo, el aire en sus pulmones dejo de llegar, pudo sentir un corto circuito en su cabeza, no entendía esas palabras, pero las entendía a la vez. Era algo muy complicado de explicar, de sentir, eso era completamente nuevo para el, ¿Por qué se sentía así? ¿Qué era todo esto? No era un remolino de emociones, eso era poco, sentía un huracán, un torbellino ¡Incluso un tsunami! todo eso dentro suyo, pero no identificaba ninguna emoción, todas eran nuevas, únicas y ¿Lindas?
Cierto chico estaba sumido en sus pensamientos, no ha vuelto a hablar en todo el rato con el cicatrizado, ambos mantuvieron distancia, pero se observaban de reojo. Sanemi estaba más feliz de lo Usual (o así lo decía Giyuu), en cambio el azabache era un enjambre de fuertes emociones.
Se había mantenido al margen, cuando se acercaron a sus amigos, Giyuu no se involucró mucho en la plática. Al contrario, se aisló. Shinobu estaba limpiando las heridas de Rengoku, pues ella siempre iba preparada con un mini botiquín de emergencia, por otro lado Sanemi y Uzui estaban hablando, sin embargo el segundo se encontraba a la defensiva, por un motivo desconocido para todos. Después de un rato, veinte minutos para ser exactos, Mitsuri y Obanai llegaron con mucha comida y postres, todos se sentaron en el pasto, pero Giyuu decidió sentarse al otro extremo, evitando a toda costa al cicatrizado.
- ¡Felicidades por su relación Rengoku, Uzui! - Hablo la pelirosa, mientras
- Mi más sentido pésame para ti Kyojuro. Sin duda tu peor desicion.
- Por única vez, concuerdo contigo, insecto.
- ¡Dejen de hablar de mi relación! Somos una pareja extravagante.
- No le veo nada de extravagante soportarte, pobre Rengoku.
- ¡Ustedes son unos envidiosos!
- ¿Envidia de que?
- Pues al menos yo si pude decirle lo que siento, no como ustedes - Señaló a Obanai y Shinazugawa. - Principalmente tu Iguro. ¿Cuando le dirás lo que sientes a Kanroji?
- ¡Cállate Tengen!
El mencionado se burló, todos los demás se quedaron callados, miraban al heterocomatico expectantes, el único que no estaba al tanto de aquella situación era Giyuu, el solo comía Salmón con Daikon ignorando lo demás.
Mientras Iguro y Uzui peleaban, Kanroji y Rengoku hablaban animadamente, Kocho comía tranquilamente y alejaba la comida que podía salir "herida" por la riña de los otros dos. Aprovechando la distracción de todos, Sanemi se dirigió hacia el azabache disimuladamente, llegando a su lado.
- ¿Te comió la lengua el gato?
Silencio.
- Príncipe, me molesta que me ignoren.
-...
- ¿Fue por lo que dije hace rato?
-...
- ¿Te molesto?
- ¿Tu que crees, Shinazugawa?
- Que no, porque cuando te molestas me das una mirada un poco cruel o haces un puchero y no hiciste nada de eso.
- ¿Tu que sabes?
- Ahí está, mi príncipe de siempre, peleando conmigo sin motivo. Pobre de mi.
- Tu estás molestando, yo solo quiero comer.
- Puedes comerme a mi también.
- ¡Shinazugawa!
- Solo bromeó, relájate.
- Entonces... Lo que dijiste hace rato ¿También fue una broma?
- Dije muchas cosas hace rato - Dijo. - Se más específico.
- Lo último
- No lo recuerdo. ¿Me ayudas a hacerlo?
El oji azul dudo por un momento, suspiro pesado, intentando ignorar la sensación ansiosa en su estómago.
- Tu dijiste... - Jugo un poco con su plato de comida, dudoso. - Tu dijiste que solo yo tenía tu atención y no debía estar celoso y cuestionarte.
- Eso dije.
- ¿Era una broma?
Sanemi no respondió de inmediato, cosa que aumento la ansiedad de Giyuu, no soportaba ese silencio. No hubo una respuesta con palabras, el albino simplemente tomó el rostro del otro con ambas manos, mirándose fijamente, cuando el azabache quiso desviar la mirada, el cicatrizado lo impidió, obligando a verse sin interrupciones, ajenos a su entorno.
- ¿Q-que...?
- Odio las bromas.
Su voz ronca, erizo la piel blanquecina, se removió bruscamente, con desesperación.
- Pero tú...
Sanemi coloco un dedo en los labios rosados, silenciando al menor, no quería preguntas, pues ni siquiera tenía las respuestas, solo actuaba por impulso, como casi siempre.
- ¡Giyuu!
El albino maldijo por la interrupción, soltando rápidamente a Tomioka, quien no se movía, seguía en la misma posición, tembloroso.
- ¿Puedes venir un minuto, Giyuu?
Miro a Sanemi una última vez, quien se levantó alejándose del azabache.
- ¿Que sucede, Kanroji?
- ¿Puedes ayudarme a sostener los platos? ¡Traje un pastel, delicioso! Pero no puedo sola.
- ¿Ah? Claro, Mitsuri.
Aún con las manos temblorosas ayudo en todo lo que pudo, muchas veces intento controlar su respiración, pero está parecía no ceder y alterarlo más. Eso no era muy bueno.
- ¡Listo! Gracias, Giyuu, por ayudarme te daré una porción más.
- No es necesario, estoy bien.
Pero fue ignorado, agradeció por el pastel y se alejo un poco.
- Ara ara~ Desde hace rato te noto distante ¿Paso algo?
- Nada.
- Soy tu mejor amiga, puedes decirme.
-...
- O vamos Giyuu, no voy a juzgarte.
- ...
- Giyuu.
- ...
- Si no me dices, te voy e envenenar.
Ah sí, su amiga era experta en medicina, ambos padres eran doctores y habían inventado muchos tratamientos y curas, así que Kocho era una experta en los farmacéuticos y por ende en los venenos.
- ¿Cómo te tomaste la noticia de Uzui y Rengoku?
- ¿Bien? Digo, Kyojuro me cae bien a diferencia de sus dos amigos.
- ¿No te desagrado algo?
- Uzui no nos dijo nada antes, eso sí me molestó -. Afirmó - Pero si te refieres a su relación en si, no me molestó, somos amigos, aunque a veces no seamos tan cariñosos, siempre nos apoyamos ¿No?
- Si, pero...
- ¿Te gusta Uzui? O ¿Por qué tantas preguntas sobre su relación?
- ¡No! Claro que no, nunca vería a un amigo de otra forma.
- ¿Entonces?
- Nada.
- Te gusta alguien más.
- No.
- No fue pregunta.
- ¿Eh?
- Las mejores amigas siempre sabemos - Hablo sería. - Pero descuida, cuando lo quieras hablar, lo puedes hacer. Pero no tardes, porque si lo haces, tendré que envenenarte.
El chico asintió, agradeciendo con una leve sonrisa, su amiga solo tocó su hombro en señal de apoyo.
Habían pasado dos horas y media, el atardecer estaba en todo su esplendor, pronto iba a anochecer y la tarde de amigos terminaría. Aunque al inicio del día el azabache estaba ansioso por ver a Shinazugawa, en este momento deseaba estar en el otro extremo del mundo, para evitarlo a toda costa. La taquicardia no se había ido, si bien había disminuido, cuando recordaba algo con referencia al oji púrpura, su corazón volvía a salir de su pecho, intento dejar de pensar y parar todo sus pensamientos.
Y así fue, su mente se desconectó un momento, al sentir las manos de su amiga en su cabello, lo relajaba y después de tantas emociones, eso era lo que necesitaba. Mitsuri le pidió permiso para peinar su cabello, a lo que Giyuu accedió casi de inmediato, podía relajarse al menos un rato. Sentir las manos desenredar y tomar pequeños mechones, lo hizo recordar su infancia, cuando su madre lo peinaba, mientras hablaban de algo poco relevante. Era lindo.
- ¡Listo Giyuu! ¿Te gusta?
Se miró en el pequeño espejo que tenía frente a él, y aunque parecía el hermano perdido de Kanroji (pues tenía el mismo peinado que ella, tres trenzas caían por sus hombros, a excepción de su característico fleco, en su lugar solo tenía pequeños mechones sueltos) le gustaba su aspecto.
- Gracias, Mitsuri.
- ¡Te ves adorable, Giyuu!
- Ara ara~ ¿Tengo que llamarte Giyuu Kanroji?
- ¿Verdad que se ve lindo, Shinobu?
La nombrada asintió.
- Yo siempre me veo lindo.
Sus amigas rieron, por su vanidad. Pero no lo contra dijeron, a final de cuentas era verdad.
- Ya está anocheciendo, debemos irnos.
Cierto, el tiempo volaba, ya eran las siete y cuarto.
- ¡Me encantó este día! ¿A ustedes, no?
Algunos asintieron, otros simplemente sonrieron, pues en verdad si fue un buen día, aunque pasaron cositas, pero detalles.
- ¡Salgamos la próxima semana! No podemos dejar de vernos tanto tiempo, menos cuando hay parejitas en el grupo.
- ¡Estoy de acuerdo con Kanroji! ¡Algún día deberíamos hacer una pijamada!
- No gracias, ustedes capaz hacen de todo menos dormir.
Todos rieron ante el comentario de Obanai.
Sin embargo la risa de Giyuu fue interrumpida por una presencia detrás de el, quien se agachó a la altura de su hombro.
- ¿Y ese peinado?
- Shinazugawa, no hagas eso -. Pidió, pues se sobresalto al sentirlo. - Me lo hizo Kanroji, ¿Por qué?
- Luces precioso, pero...
- Si no te gusta, no es mi problema.
- No pongas palabras en mi boca. Me gusta - Menciono. - Pero no necesitas parecerte a alguien.
- No lo hice para parecerme a Kanroji, solo es un peinado, cállate.
- Siempre a la defensiva, príncipe - Rio leve. - Me encanta, pero me gusta más tu cabello suelto.
Y dicho esto deshizo el peinado en un abrir y cerrar de ojos, robando todas las ligas que ataban el cabello azabache, dejando su larga cabellera caer por su hombros y lucir mucho más precioso, según Shinazugawa.
- Definitivamente me gusta más está vista.
- Devuelve mis ligas, no es justo.
- Es bastante justo. Tu aún no me devuelves mi camisa de hace días.
- Te dije que estaba en la basura.
- Mentir es malo, príncipe.
- No lo hago.
- Ya vete, Kocho te esta esperando.
- ¿Me estás corriendo?
- No, pero puedo ver a tu amiga desde aquí, esperando en su carro.
Giyuu lo miro confundido, nadie los interrumpió para despedirse, todos se habían marchando y efectivamente, Shinobu estaba a unos metros, en su camioneta esperando a Tomioka, no supo en qué momento pasó todo.
- Nos vemos luego, príncipe.
Y pudo verlo alejarse, mientras en sus manos jugaba con las ligas que le había quitado a Giyuu. Ese día había Sido un día de locos.
¡Hola! perdón por tardar en actualizar, me enferme y acabo de entrar a la prepa por lo que tuve menos tiempo está semana y aparte me entró un mini bloqueo escritor. No me gustaba el resultado del capítulo, Pero ahora creo que quedó muy bien ¿Ustedes que opinan? ¿Les gusta?
Aquí ya vemos un poquito de más cercanía sentimental, cabe recalcar que ninguno siente nada profundo aún, pero eso irá cambiando.
El próximo capítulo me emociona mucho, porque será fundamental para la cercanía y cambio de perspectiva entre El Sanegiyuu, en la semana lo publicaré, solo necesito corregir y editar unas cosas.
También estoy pensando en escribir una historia basada en la canción Boyfriend de Dove Cameron, ¿Les gustaría que salga a la luz? Ya escribí unos capítulos y está candente la cosa.
¡En fin, me despido! No sé olviden dejar su voto y comentarios, espero les haya gustado el capitulo.
Muchas gracias por su apoyo, los tqm ❤️
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