42. Veneno


Narrador

Bern se encuentra en una lujosa oficina en la madrugada empezando con su día de trabajo, como es tradición de la empresa Sonne tiene de cucus como viejos a modernos colgados en una pared que la invadieron por completo, la pared que tiene atrás de él tiene de un gran cuadro que por igual invadía la pared, este cuadro fue pintado para ser un árbol genealógico de los Bell, cada uno ha sido retratado estando en su posición correspondiente, en la última rama se encuentra Bern al lado su esposa Belen y por último, Reto su hijo que se encuentra debajo de su imagen. Y por último la pared de su lado derecho parecía ser una ventana completamente para mostrar la hermosa vista de los alpes suizos.

Lo más característico de la oficina es que todo es de madera fina, el escritorio del dueño de la empresa es de madera completamente con detalles marcados, sobre todo aves tallados que su plumaje fue marcado con pintura de cobre y en el centro del escritorio hay un sol marcado pintado de oro puro y las aves se encontraban como si estuvieran volando alrededor de la gran estrella.

Se pueden ver los marcos con las fotos de los familiares sobre el escritorio, donde una era mucho más grande que las demás, en la foto aparecen Bern, su esposa y su hijo posando para la foto formal. Bern en esa foto se encuentra con un traje fino oscuro, muestra solamente su mirada seria al no mostrar su boca por el cubrebocas especial que usa diario y tiene su mano puesta en el hombro de su hijo que se encuentra en el centro de sus padres. Reto en esa foto ya era mayor, muestra un rostro serio y una postura firme teniendo sus brazos detrás de su espalda, como su padre un traje fino igual de oscuro puesto encima, su cabello en ese tiempo lo tiene corto peinado hacia atrás pareciendo el hermano de su padre por el gran parentesco a excepción de su tono de cabello. Y Belén tiene de una cariñosa sonrisa hacía la cámara, teniendo su cabello suelto, con un vestido verde oscuro largo puesto encima, con mangas largas pegadas a sus brazos y teniendo pequeñas piedras preciosas en forma de rombos insertadas en su vestido, igual teniendo una mano el otro hombro de su hijo como su esposo lo ha hecho.

Bern estando concentrado completamente sin detenerse tecleando en su laptop de último modelo, paresia de toda una máquina para poder calcular sin calculadora o poder procesar las palabras escribiendolas sin ni siquiera mirar el teclado. Pero un pequeño timbre que proviene de su laptop sono, él de reojo vio que recibió de un mensaje de Alex Heaven, "Alex Heaven: Esta foto puede ser de tu interés. Me lo ha enviado mi princesa esta mañana."

Él al leer esa noticia apartó sus manos del teclado como si el teclado estuviera hirviendo para haber realizado un movimiento brusco, teniendo su mirada fijamente en el mensaje, él sabía que cuando se trataba de familia Heaven no eran mensajes positivos, con un rostro lleno de seriedad, él agarró su ratón empezando arrastrarlo metiéndose a la página de mensajes, frunció el ceño teniendo una mirada muy fría al ver la foto, donde Gemma y Reto se encontraban bailando alegremente disfrazados en la fiesta, él tiene una mirada bastante fría en el rostro de la mujer, una mirada del cual quiere lanzarle amenazas por estar cerca de su hijo aunque ella no esté presente.

***

Reto se encuentra acostado en su cama siendo un perezoso teniendo sus extremidades extendidas dejandose a manos de la depresión, sin tener las ganas de hacer algún movimiento o si quiera prepararse para sus clases de tenis, pudo escuchar que su celular empezó a sonar, él con un movimiento muy lento por el animal que es, gira su cabeza viendo su celular, dio un parpadeo que pudo haber tardado tres segundos para que sus párpados se juntarán.

Pero sin opción se transformó en humano estando completamente desalineado, su cabello se encuentra alborotado, tiene de unas gran ojeras al no haber dormido toda la noche por culpa de los muchos pensamientos negativos que tuvo por culpa de Scarlett, él dio un largo bostezo del cual le salió un pequeño rugido y fue agarrar celular.

Al ver quien le hablaba puso su mano en su frente mostrando angustia al ver que era su padre quien le hablaba, pasó su mano sobre su cabello tratando desvanecer esos nervios que empezó a sentir, deseando tener la opción de no contestar, pero sabía de las consecuencia que ocurriría si la tomara, él contestó antes de perder la llamada poniendo su celular en su oreja.

—Padre, me comunico contigo —dijo él saludando a su padre de una manera muy formal del cual su padre le pide contestar.

"¿Por qué has demorado en tomar mi llamada?" Preguntó su padre con bastante seriedad y Reto se rascaba de un párpado suyo ya empezando a sentir nervios al notar que su padre está muy frío con él.

—Lo lamento padre, iba a darme un baño cuando escuche que me estabas marcando —mintió su hijo de una manera profesional para no ser descubierto en su mentira.

Su padre se quedó en silencio en no mencionar nada sobre ello, Reto se quedó quieto esperando las palabras de su padre. A pesar que ya habían pasado minutos, su padre no iniciaba la conversación, su hijo desvió la mirada al que ese silencio le causara incomodidad y tensión en el ambiente.

—Padre, si fuera posible que esta llamada no tome mucho tiempo, debo prepararme para mis clases de tenis. No quiero llegar tarde.

"¿Cuánto tiempo tienes una relación de amistad con la mestiza?, Reto" preguntó su padre con un tono bastante frío que su hijo alzó las cejas mostrando una mirada de gran miedo como si hubiera visto un fantasma. Él se quedó callado quedándose paralizado al enterarse que su padre ya sabe de su secreto "¿Por cuánto tiempo me querías ver la cara de ignorante escondiendolo?"

—Padre...

"No me sorprende que tu madre esté enterada de esto, ¿Me equivocó?"

—Padre... —dijo su hijo con desesperación empezando a caminar de un lado a otro, pero se quedó callado al no saber las palabras correctas en esta situación— Ella...solo...  —él se quedó callado deteniéndose bajando la mirada mostrando un rostro adolorido como si hubiera un montón de agujas encajadas en su cuerpo teniendo esa sensación dolorosa, por el miedo, el enojo, los nervios, esas emociones que le impedían hacer mucho movimiento a causa de esa sensación.

"Responde las preguntas, Reto" dijo su padre en modo de orden con un tono de voz de exigencia, el no iba usar la amabilidad parental en esto.

—Yo...me veo con ella...desde...hace dos meses —dijo su hijo con un tono muy apagado y bajo, usando todo el esfuerzo para decir las palabras— Yo...no quería decirte por...  —él se quedó callado sellando sus labios temiendo en cómo iba a reaccionar su padre.

"Dime la razón Reto, en verdad quiero enterarme las razones de cómo mi hijo pudo cometer una gran idiotez, ¿Acaso no pensaste en cómo esto afecta en tu imagen y reputación?, no solo a ti, en nuestra empresa, en nuestra familia. Alex Heaven fue quien me ha mandado una foto donde tu estas disfrazado bailando junto la mestiza, a mi parecer te veías como un bufón humillandote de esa manera" Reto se sujetó la garganta con fuerza tratando evitar que sus gemidos de tristeza empeoren la situación"¿Cómo crees que me sentí Reto cuando Alex Heaven fue quien me ha dado el aviso?, No fue mi esposa, ni mi hijo, fue el hombre quien trato que mi condena en el inferno fuera de veinte y cinco años hace ocho años, Reto"

—Mi intención...no era...afectarte, padre...  —dijo Reto teniendo la misma posición pero con un rostro muy devastado, queriendo escaparse de ese sufrimiento, de soltar el celular y ya no querer oír las palabras hirientes de su padre.

"¿Era en afectarte a ti?, eso es mucho más severo a que me quieras afectar a mi. Sabes lo mucho que me he sacrificado por ti, Reto...

—Lo se padre... —dijo Reto con desesperación al que su padre no le tomara en serio sus palabras.

"No es lo que parece Reto, estoy pagando tu colegiatura para que estudies y puedas graduarte para que manejes esta empresa, no para que estés comportándote como un pre adolescente haciendo estupideces. Esto no me lo esperaba de ti Reto, sabiendo del daño que su padre me ha causado y siendo un traidor de nuestra raza. No sabemos en qué lugares ha estado esa mujer en haber vivido en una condición deplorable. No me quiero volver a enterar que te estás juntando con la mestiza, ¿Quede claro?"

Reto desvío la mirada empezando a irritar un poco sus ojos por las lágrimas que se le iban juntando teniendo una mirada muy apagada.

—Si...padre...no...volverá a suceder. Yo...fui un ignorante, lamento...mi error.

Bern se quedó callado en el celular.

"No puedes seguir guardando secretos, somos tus padres, tienes que tener una confianza con nosotros, no es opción Reto"

—Lo...comprendo...de nuevo me disculpo.

***

Bern en su oficina tiene su celular muy pegado a su oreja, al tener el oído agudo como su hijo, puede escuchar de los pequeños gemidos que su hijo hacía sin que fuera su voluntad por culpa de su don, él saco un suspiro exhausto masajeandose los párpados con su índice y pulgar al saber del daño que le ha ocasionado a su hijo por el regaño.

—Te empezaré a llamar más seguido. Debo colgar. Me despido Reto.

"Me...despido padre" dijo Reto con un tono bajo y sin opción tuvo que despedirse de su padre entre gemidos de tristeza al no saber como evitar eso cuando siente un gran dolor en su interior.

Bern colgó, dejó su celular en la mesa sacando de nuevo un gran suspiro tratando de quitarse la presión encima, volteo a ver el marco donde su esposa e hijo están presentes, agarro el marco teniendo su mirada en la de su hijo, una mirada del cual si muestra mucho cariño en él.

***
Gemma

Estaba haciéndole el desayunando a Celia antes de irnos a nuestros respectivos deportes, ya que Mia me dijo "Ni creas que alimentare a esa maldita" y como sigue dormida en la sala, no quise levantarla para dar la idea de ir a la manzana, además recuerdos de cuando le preparaba el desayuno a mi madre llegaban en mi mente al hacerle el favor de hacer su desayuno.

Mia se encuentra en la cocina conmigo, ella me presume del exquisito omelette que está cocinando para Maya, ella y para mí sin incluir a Celia como me lo ha dicho, yo por mientras igual le presumo de mi huevo revuelto con tocino, ella y yo nos miramos y nos regalamos una corta sonrisa, a pesar de las discusiones que obtuvimos en la fiesta por Celia, ya no se muestra molesta conmigo por eso y es por ello que ella es una gran exelente amiga.

Servimos del desayuno en diferentes platos, fuimos a servir la mesa poniendo también las bebidas, yo mire a Mia con gran curiosidad y ella volteo a verme alzando una ceja al notar que desde que me he despertado me le he quedado viendo, pero...la razón es porque tengo una pregunta que quisiera hacerle, pero se que le puede ser muy personal.

—¿Sucede algo?, Gemma —preguntó ella extrañada a mis miradas y yo le sonreí de un modo nervioso.

—Mia...¿Puedo hacerte una pregunta que...puede ser personal para ti?

Ella alzó las cejas deteniendo su actividad mirándome con atención teniendo la gran duda de la pregunta que quiero hacerle.

—Adelante, sino me vas a dejar con la curiosidad —dijo ella con poca gracia, le regale una sonrisa agradecida y bajó la mirada viendo la punta de mi pie.

—Se...que este tema no te gusta, pero...solo quiero saber si...aun sientes la atracción que tuviste con Dmitri cuando estabas en la primaria.

Ella en vez de tomar mi duda con seriedad, empezó a reírse, yo la voltee a ver y ella me alzo una ceja mirándome incrédula por la duda que tengo sobre ella poniendo sus manos en su cadera.

—Es claro que ya no siento atracción por Dmitri, Gemma. Ugh, ya Scarlett lo ha ensuciado demasiado para hasta sentir asco al solo pensar lo tanto que ella y él han hecho —dijo ella haciendo una mueca de disgusto cerrando sus ojos al temer por las imágenes que iban a llegar al pensar en ello, se abrazó a sí misma sintiendo un pequeño escalofrío— ¿Te imaginas?, no, no, no.

—Pero...él...no te dijo nada cuando Scarlett y Nicole...ya sabes... —dije mirándola con preocupación yendo con ella y ella abrió los ojos alzando su mirada al techo empezando a sentir molestia por este tema— Si no quieres hablar del tema...

—No, está bien, es algo que debí contártelo desde hace tiempo, si hubiera hecho eso quizás Celia no estaría invadiendo nuestro territorio —dijo ella con algo de gracia sonriendo con malicia y yo me crucé de brazos mirándola con poco enfado.

—Mia —dije regañadientes y ella saco pequeñas risas al que esto le cause gracia, aunque prefiero eso a que esté enfadada.

—Lo único que Dmitri hizo cuando Scarlett utilizó su apariencia mintiendome que sentía atracción por mi, fue aclararme lo mismo, me dijo que no le gustaba por las razones que ella me dio, que mi familia era una asesina, pero... —ella de nuevo empezo a reirse— Solo eramos unos niños, cuando en ese entonces los niños le tienen asco a las niñas. Las mismas palabras que me dijo se las dijo a Scarlett, pero aún mejor, las recuerdo perfectamente porque gracias a lo que dijo ya no sentía mucha tristeza, le dijo que tampoco ella le gustaba, pero porque era mala y estaba molesto por haber usado su apariencia.

Yo sonreí con ternura al solo imaginarme esa escena de Dmitri de pequeño regañando a Scarlett por lo que le hizo a Mia.

—Después llegó la secundaria donde ya no era una tontuela, los hombres se volvieron unos idiotas al sentir atracción por las mujeres y como Scarlett mejoraba su don haciendo que su cuerpo madurara muy bien en ella, ahí fue donde Dmitri perdió la razón pidiéndole que fuera su pareja cumpliendole el sueño a la puttana.

—Aun no puedo creer que Dmitri este con una mujer como ella, es que no lo entiendo Mia, él a pesar que se preocupa de su relación con ella, esa maldita se comporto como toda una perra ayer en la fiesta, no lo valora como debe, él merece una mujer que lo trate bien.

—No creo que eso sea posible Gemma, esa puttana esta demente al quererlo solo para ella, fuiste testiga ayer, hasta con una mosca podría amenazar al que esta solo se haya puesto sobre el hombro de su hombre, Scarlett acusaría al insecto de ser una ramera.

Yo empecé a reírme al que eso me causara gracia y Mia alargó su sonrisa, pero mis risas se apagaron al poder ver la puerta del cristal que daba vista al patio, alargue mi sonrisa con emoción saliendome del comedor para entrar al patio y alcé mi mirada al cielo extendiendo las manos para ver que está empezando a nevar. Una escarcha de nieve con una hermosa textura fue cayendo sobre la punta de mi nariz y alargue mi sonrisa mostrando emoción.

—¡Mia está comenzando a nevar!, pero mira este copo de nieve —dije viendo mis manos para ver las escarchas que he podido juntar— Aquí si tienen de la hermosa figura —yo apague un poco mi sonrisa al ver que esta se derrite al no durar mucho tiempo.

—Ya está comenzando el invierno —dijo Mia poniéndose a mi lado y extendió igual su mano para juntar copos como yo— Yo no tengo la suerte de que en mi ciudad neve, como Maya, pero una vez que estoy en la academia lo aprovecho cada minuto —dijo ella alargando su sonrisa— Pero...tu si debes conocer la nieve, Gemma, Nueva York es una de las ciudades donde nieva más en tu país —dijo ella entre pocas risas— Me extraña que también por esto muestres emoción.

—Por tres simples razones, la primera —dije mostrando mi índice para informarle a mi amiga— El invierno es mi estación favorita —dije alargando mi sonrisa con emoción teniendo mi mirada en los copos de nieve que iban cayendo al suelo— Segunda —dije mostrando dos dedos— Aquí las escarchas si tienen su textura, en Nueva York no se les aprecia mucho —dije con una mueca poniendo mi dedo al aire como si estuviera en juego en querer juntar los copos más posibles— Y tercera... —dije apagando mi sonrisa abrazándome a mí misma— El...cinco de noviembre...cumple años mi madre.

Mia alzó las cejas al escuchar la tercera razón, ella me miró con lástima, pero me regaló una cariñosa sonrisa poniendo su mano sobre mi espalda.

—Deberías hablar con el director para que vayas a felicitarla en el cementerio —dijo ella con una gran sonrisa y yo me sobresalte un poco abriendo en grande los ojos mirándola incrédula, ella me sonrió con ternura por mi reacción— Podemos salir de la academia en ese tipo de casos Gemma, lo dice en el reglamento. Celeste que tenga la situación del fallecimiento de un familiar suyo puede salir de la academia para asistir a su funeral.

—Pero...Mia...ya pasó su funeral, yo... —dije bajando la mirada con gran tristeza al solo recordarlo— Tú lo sabes, ni siquiera...pude asistir para despedirme de ella.

—Exactamente, te falta por hacerlo y es por ello que en su cumpleaños... —dijo ella abrazándome por mi hombro— Puede...ser una gran fecha para que puedas despedirte de ella correctamente, siendo...un pequeño funeral donde solo tu estaras presente, se tenía que hacer, fuiste la persona más importante para tu madre que tenias que tener un funeral donde solo tú estés y como diría Maya, no con la chusma de tus otros familiares —dijo ella haciendo una mueca molesta y yo alargué mi sonrisa abrazándola con fuerza sacando un pequeño grito de la emoción.

Me aparté de ella teniendo mi primer pensamiento "Debo hablar ya con el director".

—Debo ir...con el director para hablar...y...puede que aproveche en lo de Celia —en ello otro pensamiento llego a mi cabeza "Reto", al solo escuchar su nombre me agarre las raíces del cabello— ¡Mia, pero si me falta Reto!, debo checar que este con bien...

—Bambina calma... —dijo ella sujetándome los hombros tratando de mantenerme calmada— Puedes hablar con el director Galder después de tus clases de deporte ecuestre, solo recuerda que debes enviarle un correo a la secretaría y puedes hablar con Reto cuando vayas al establo, lo conozco nunca ha tenido una falta, lo encontrarás sencillamente en la cancha de tenis, hablas con él y terminas con todos tus pendientes —dijo ella alargando su sonrisa y yo le di un gran asentimiento, de nuevo le di un abrazo.

—Te adoro Mia, eres mi serafina.

—Gemma ya te he dicho que no me compares con...  —ella saco un suspiro exhausta por tanto que me lo repetí— Olvidalo. Tu eres mi sorella —dijo ella abrazando con mucha más fuerza y yo mostré gran ternura en sus palabras, pero de repente Mia se apartó de mi mostrando un rostro de espanto— Gemma, el desayuno, no se nos vaya enfriar —dijo ella entrando al departamento con prisa y yo igual un poco espantada entre al departamento.

Pero al entrar, Maya ya se encuentra sentada leyendo un libro al haberse esperado por nosotras, Mia saco una sonrisa aliviada al ver a Maya ya preparada para desayunar y se fue a sentar en la mesa, yo me extrañe y fui con Maya dándole un toque en su hombro para llamar su atención, ella volteo a verme y empecé hacerle señas.

"Celia, ¿No se ha despertado?"

Ella dejó el libro en la mesa empezando a hacerme señas "Sigue dormida en la sala", yo me sujeté la barbilla muy extrañada, ¿será que se levanta tarde?

—¿Sabes en qué deporte está Celia?, Mia.

—Natación, pero no sé a qué horas —dijo Mia con seriedad al no darle mucha importancia.

—La despertaré por si acaso, ustedes empiecen a desayunar —dije dirigiéndome a la sala y sin poder evitarlo sonreí al verla.

Hasta dormida se ve mucho más tierna, yo creo que uno muestra su inocencia una vez que duerme, muestra un rostro sereno al mostrar seguridad en los brazos de morfeo, debe tener un sueño agradable para verse en paz y es muy raro verlo en ella, desde que la conozco siempre muestra nervios o temor por culpa de la enferma de su hermana, puede que su único momento de paz sea este, me odiare por despertarla, pero no quisiera que tenga una falta en su clase de deporte.

Fui con ella, me agache poniéndome a su altura.

—Celia —la nombre con una voz serena sin mostrar brusquedad para que se despierte sin miedo alguno, pero el primer intento fue fallido— Celiaaa —dije en forma de canto dándole un toque en en su hombro y ella hizo una pequeña mueca girándose dándome la espalda, es como si su cuerpo automáticamente me este diciendo "Déjame en paz" sin que ella se de cuenta, yo hice una pequeña mueca, de acuerdo, tendré que ser un poco ruda— Celia, Celia, Celia... —dije sin dejar de repetir su nombre tomándole de sus hombros sacudiéndola.

Ella se despertó un poco asustada incorporándose de golpe mirando por los lados.

—Tranquila, soy yo Gemma, estas en nuestro departamento, recuerdas —dije con una sonrisa de culpa por haberla despertado y ella volteo a verme alzando sus cejas recordandolo.

—Oh...lo lamento...  —dijo ella masajeando los párpados al verse aún exhausta— Por el sueño...se me había olvidado por completo.

—Lo entiendo, si que pasamos la noche eh —dije con poca gracia dándole un pequeño golpe juguetón en su codo y ella me regaló una corta sonrisa nerviosa asintiendo, aunque a pesar que se ha levantado tarde, aun le puedo ver un poco de ojeras— ¿Dormiste bien?, Celia —pregunte un poco preocupada— Te veo aun cansada a pesar que ya casi será medio día.

Ella se sobresalto un poco a mi pregunta desviando la mirada de un modo nervioso, yo frunci el ceño al notar esa extraña actitud en ella, su hermana ya no está presente para que la siga mostrando.

—Solo...necesito tiempo para acostumbrarme al sillón, pero estoy bien, no te preocupes Gemma —dijo ella regalándome una corta sonrisa y yo le devolví la sonrisa.

—Anda, vamos a desayunar —dije levantándome y ella se sorprendió un poco, después empezó alargar su sonrisa mostrando ternura.

—Me...has hecho el desayuno.

—No es la gran cosa... —dije sonriendo con pena juntando mis manos— Pero...espero que te guste el huevo con tocino.

Ella me dio un asentimiento y se levantó.

—Yo...no se como pagarte lo que estás haciendo por mi...

—Pfss, está bien Celia, no me lo tienes que andar repitiendo —dije empezando avanzar hacia el comedor— Después de mi clase ecuestre, iré hablar con el director sobre el daño que te está haciendo Nicole.

—Sobre eso...Gemma...no creo que...sea una buena idea —dijo ella entrando al comedor conmigo y les regaló una amable sonrisa a Mia y Maya— Buenos...días —dijo ella de un modo educado para ser amable en dar el saludo.

Mia y Maya se quedaron calladas mirando a Celia, yo las mire con molestia en que no sean groseras con ella, Mia rodeo los ojos y bajó la mirada partiendo un pedazo de su omelette.

—Buenos días —dijo ella de mala gana y le regale una sonrisa por el intento, mire a Maya que ahora era su turno, que ella rodeo los ojos como Mia y le hizo señas a Celia "Buenos días"

Yo me senté en la mesa y Celia se sentó al lado mío, ella claramente se dio cuenta de que su desayuno era diferente al nuestro, yo sentí un poco de culpa, se que los platillos de Mia son mucho más antojables del que yo le he preparado.

—¿Tienes algún problema con tu desayuno?, Celia —preguntó Mia con bastante frialdad en su voz— Gemma se molestó en hacerlo para ti.

—No, no, no...para nada... —dijo Celia con miedo en su voz encogiéndose de hombros sin querer un contacto con la mirada de Mia y yo fruncí el ceño mostrando demasiada extrañeza ese miedo. Ahora pareciera que Mia es la que le causa ese miedo, la voltee a ver con sospecha y ella me regaló una sonrisa.

—Anda bambina, que se te va enfriar y no va a tener su buen sabor.

Yo entré cerré los ojos mirándola con mucha más sospecha, algo me dice que Mia debió tener una plática con Celia a escondidas, pero baje la mirada agarrando mis cubiertos empezando a partir mi omelette, luego haré una investigación al respecto.

—No podemos dejar que Nicole se siga saliendo con la suya lastimándote de ese modo Celia, ¿cómo tus padres no pueden permitir que Nicole te trate de esa manera?

—Se ha acobardado pidiendote que no hables con el director —dijo Mia con una sonrisa de burla y yo la mire con poca molestia— Respeto la decisión que piensas hacer al hablar con él director al respecto, pero aquí el mayor problema son los padres de Celia, ellos dependen mucho de Nicole para que controle a Celia sin importar el daño que ella le haga, les hace el trabajo sucio, ya que gracias a Nicole, las dos preciadas hijas de los Bubble están con Scarlett así teniendo una relación de amistad con los señores Heaven, por lo que tengo entendido es que el padre de Scarlett es el abogado personal de tu padre, me equivoco Celia.

Mire a ver a Celia que ella bajó la mirada con tristeza por las palabras de Mia, pero dio un asentimiento respondiendo.

—Puede que el director Galder quiera hacer algo al respecto, puede llamar a los padres de Celia para dar la advertencia o el aviso que Nicole puede ser expulsada por el daño que le ha hecho a su hermana, pero ellos sólo dirán que es lo normal en ellas al ser hermanas, que ese es su modo de convicción y que pueden presentar a su abogado para evitar que Nicole sea expulsada, además que no creo que haya necesidad para que el director Galder llame a los padres de Celia para que se presenten con él, una vez que Nicole les diga que Celia está empezando a dormir en nuestro departamento, vendrán a discutir sobre ello con el director tomando más importancia eso que lo otro.

—Mia tiene razón Gemma...es mejor...no complicar más las cosas, yo...saldré regañada por mis padres por lo que estoy haciendo, cuando eso suceda trataré de hablar con ellos...para que no hagan una escena con el director.

Yo saqué un pequeño gruñido estresada, como en esta raza puede ver gente tan enferma como mi otra mitad y lo más ridículo es que se creen seres superiores.

—Gemma...yo con que este...en este departamento sin compañía de Nicole...me es suficiente, yo...trataré...de evitar que me vuelva hacer daño otra vez. No quiero que sigas complicándote por mi.

Yo me la quede mirando, pero ella me mira con esos gigantescos ojos de canica, con un brillo suplicante en que no lo hiciera, pero...no es correcto. Yo nunca tuve la oportunidad de saber cómo es tener una hermana, gracias a Mia lo estoy conociendo, pero si hubiera tenido una...mi madre nunca hubiera permitido que nos dañaremos entre sí, con la experiencia que tuvo con mi querida tía, solo hice una mueca al recordarla, madre no hubiera deseado que hubiera tenido una relación así.

—De acuerdo...si dices que hablaras con ellos, espero...que esta pequeña rebeldía que haces durmiendo con nosotras, que ellos entiendan que estas en una pequeña rebelión por lo que tu hermana te esta haciendo —dije con una corta sonrisa y Celia me dio un asentimiento con una dulce sonrisa.

Terminamos nuestros platillos, nos levantamos recogiendo la mesa y dirigiendonos a la cocina para lavar los trastes, mire a Celia que agarro un plato y dio un movimiento con su mano apartando el agua del objeto como si estuviera presente de una gran maga, juntó las gotas creando una bola de agua flotando en aire y abrí en grande los ojos al mostrar gran impresión al que esta sea mi primera vez que la veo usando su don.

Ella con normalidad llevó la bola de agua en el lavabo dejando caer el líquido en el desagüe, puso el plato a un lado, agarró otro plato usando su don secando una manera eficaz los platos, mire a Mia o Maya para ver si ellas igual mostraban asombro como yo, pero ellas como si nada recogían de la cocina. Miré a Celia alargando mi sonrisa y ella volvió a verme frunciendo el ceño mostrando extrañeza a mi mirada.

—Celia, estás usando tu don —dije emocionada y ella alzó un poco las cejas al escucharme, empezó a sonrojarse bajando la mirada con una sonrisa tímida.

—Solo...no puedo utilizarlo cuando estoy nerviosa o asustada, pero...aun así...aun no me perfecciono en controlarlo, Gemma. Lo que hice...es muy poco.

—Pero qué dices, ¿Puedes...hacer lo mismo con el cabello o la ropa mojada? —pregunte teniendo gran curiosidad.

—Si...es lo que uso para poder secarme en corto tiempo.

—Wow...  —dije con gran asombro y Celia empezó sonrojarse mucho más— Yo...quisiera ese don, me toma mucho tiempo secar mi cuerpo y cabello, y...¿Con tu otro elemento?, ¿Qué haces?

—Para serte sincera utilizo más el control del agua, del aire...no mucho, solo he podido crear rafagas de aire o cuando hace demasiado calor, usar mi don para crearme una brisa alrededor mío quitándome del sudor.

—Eres tu propio clima —dije con emoción y Celia me sonrió con algo de gracia asintiendo— Es increíble.

—Muy interesante su plática, pero te recuerdo que tu y Maya ya tienen que irse a su clase, Gemma —dijo Mia con seriedad.

—Nomas me faltan por lavar dos platos y algunos cubiertos —dije empezando a lavarlos con más prisa, mire a Celia mientras que enjuagaba los cubiertos— ¿Tienes clase de deportes hoy?

—Si, natación, pero en una hora comienza mi clase, quisiera ir al cuarto de mi hermana para empacar unas pocas cosas y traerlas aquí, después me ducharé en los baños del lugar de natación.

—Celia, como crees, si quieres puedes bañarte en mi...

—Ejem —dijo Mia rascando sus garganta de un modo molesto y volteé a verla, ella me mira con gran enfado teniendo sus brazos cruzados. Yo le sonreí de un modo nervioso.

—No te preocupes Gemma, los baños de allá son los mismos que tenemos en nuestros cuartos. Estaré bien.

Terminé de lavar los platos poniéndolos sobre el estante de platos de secado, Celia empezó a agarrar secandolos.

—Como dice Mia debo irme, ¿No quieres esperarte a que te acompañemos por tus cosas? —pregunté preocupada por ella y ella me negó con la cabeza.

—No, se que ustedes tienen sus clases, no quiero que por culpa mía lleguen tarde, estaré bien, si sucede algo yo te marcó.

—Por favor, arrivederci Mia —dije practicando mi italiano y ella me sonrió haciéndome una seña de despedida.

—Arrivederci, sorella.

Mia también le dio una seña de despedida a Maya que ella igual le dio una seña despidiéndose de ella, las dos nos retiramos de la cocina para irnos al establo.

***

Maya y yo íbamos caminando, yo iba practicando mis señas con ella y ella me comentaba de alguno de los errores que tenía. Me detuve al ver las canchas de tenis, sonreí al ver a Reto sentado en la banca sin compañía viendo un partido de sus compañeros. Dmitri era uno de los que están jugando echando todas sus ganas golpeando la bola con su raqueta causando que la bola fuera disparada hacia el suelo del otro lado, la pareja del otro lado trataron de alcanzar la bola extendiendo sus brazos con su raqueta, pero fueron lentos al que la bola haya impactado su zona así Dmitri con su pareja ganó un punto. Yo mire a Maya y le empecé hacer señas.

"Adelantate, yo hablare con Reto"

Ella me dio un asentimiento, se fue retirando y yo como una infiltrada me dirigí a la cancha de tenis donde se encuentra Reto, no queriendo ser descubierta por su maestro trataba de hacer movimientos lentos sin causar ruido alguno, aunque su maestro se encontraba muy atento al partido checando a sus estudiantes que no creo que se de cuenta de mi presencia.

Yo con una sonrisa traviesa me senté al lado de Reto para hacerle compañía, él volteo a verme y yo le regale una larga sonrisa, pero la apague por completo al notar que su mirada ya no era la misma, se veía...diferente, ya no siento la sensación de vida en ellos, es como si...esos ojos fueran unos impostores, puedo sentir...tristeza en ellos, sus ojos antes me permitían entrar viendo mi reflejo en ellos, como si me dieran una dulce bienvenida, pero esta vez...Reto me desvió la mirada sin querer verme, solo ha volteado a verme de reojo.

—Estoy en clase Gemma —dijo él con un tono bastante frío del cual puse mi mano en mi pecho mostrando mucha preocupación por él.

—Hey...¿Qué ha pasado? —pregunté preocupada tomándole de su muñeca para que tuviera la confianza en decirme, pero ni hacía el intento de querer verme, ¿Estará molesto conmigo en algo?, ¿Hice algo en la fiesta para haberlo hecho molestar?, pero...no...no puede ser, Scarlett fue la última persona con la que estuvo— ¿Qué fue lo que ha pasado en la fiesta?

Reto apartó su muñeca de una manera brusca del cual a pesar que ese movimiento no fue un golpe, pude sentirlo como uno al sentirme herida, empecé a sentir demasiada confusión y angustia, al no saber por qué se está comportando de esa manera conmigo, haciéndome pensar que el daño que él sufrió fue por culpa mía.

—Gemma, ya no quiero tener una relación de amistad contigo —dijo él repentinamente como un disparo directo a mi corazón, sin haberse trabado o batallado en decirlo, yo empecé a sentir como mis ojos empezaron arder.

—Yo...no...entiendo...¿Yo...te hice daño?, Reto...  —él se quedó callado teniendo su mirada enfrente sin querer decirme, empecé a sentir como esas cuerdas se iban formando en mi garganta para empezar a hacer su nudo.

—Mi padre descubrió mi relación contigo por una foto que Scarlett nos tomó bailando en la fiesta. Le mantuve en secreto nuestra relación porque sabía que mi padre no me iba a permitir estar contigo, por varias razones, la principal es que eres una mestiza.

Yo me aparté de él aterrada a este extraño hombre, yo empecé a negar con la cabeza sin poderme creer que era él.

—Tú no eres Reto...eres Scarlett queriendo hacerme una mala broma...

—No soy Scarlett, Gemma —dijo él levantándose de su asiento mostrándome su mano transformándola en una garra de un animal— No puedo seguir ensuciando mi imagen, reputación y mi apellido estando con una sangre sucia, mi padre ha hecho suficientes sacrificios por mí, él espera que maneje la empresa de mi familia y por ti no me voy a mostrar como un malagradecido.

Yo empecé a derramar lágrimas por mis mejillas y Reto seguia viendome con una mirada llena de frialdad.

—Pero...yo...no...no es culpa...mía...yo...yo...  —dije en cortas palabras sin ni siquiera importarme en la lógica o el orden al sentir que la tristeza invadía mi cabeza evitando que pudiera formar oraciones.

—Gemma, no me veas como un ignorante, si te has juntado conmigo fue por mi don, al que no hayas tenido la oportunidad de convivir con los animales, al conocerme no podias desaprovechar la oportunidad de convertirme en tu mascota.

—Pero qué dices ¡Eso no es cierto! —grité con gran dolor sin importar haber llamado la atención de los demás.

—Verdad o no, no puedo seguir estando contigo, mi padre me hizo dar cuenta que solo me estás perjudicando convirtiéndome en una patética, débil e ignorante persona como tu, patético por haberme dejado influenciar por ti, débil por haber sentido lástima por ti e ignorante por haber tenido el mínimo pensamiento de tener una amistad contigo —dijo él con gran enfado mostrando sus colmillos.

Todos se quedaron en un largo silencio teniendo su mirada en nosotros, yo me quede paralizada dejando que mis ojos se convirtieran en una llave dejando resbalar lágrimas por mi rostro, sintiendo mi cuerpo a altas temperatura por el esfuerzo que estoy haciendo tratando de contener ese nudo en mi garganta que en cualquier momento va a estallar, mi labio inferior era la parte que más caliente que sentía, como si tuviera una moneda hirviendo sobre ella y que hasta tiembla por la sensación.

Yo me abracé a mi misma desviando la mirada dándome la vuelta sin poder producir alguna palabra, mi cuerpo automáticamente iba avanzando al establo a pesar de las pocas fuerzas que sentía, entre al lugar y pase por al lado de las personas sin ni siquiera prestar atención de quien es eran, algunas me hablaban, pero ni siquiera dejaba que las palabras entren por mis oídos para saber lo que decían.

Pase por el lado del cuarto de Nahuatl, Maya alzo la mirada volteando a verme preocupada, pero igual que todos la ignoraba entrando al cuarto de Celeste, el al verme dio un pequeño relincho dirigiéndose hacia a mi, yo puse mis manos por los lados de su hocico pegando mi frente en la suya cerrando los ojos con presión arrojando la gran cantidad de lágrimas y libere del nudo empezando a sollozar con gran fuerza soltando pequeños gritos sin mostrar importancia que los demás podían escucharme.

***
Narrador

Celia estaba empacando metiendo su ropa y de otros objetos personales en su maleta, con un rostro decaído tratando de ignorar a su hermana que ella se encuentra sentada en su cama teniendo su celular pegado en su oreja mirándose las uñas con gran arrogancia teniendo una larga sonrisa en su rostro.

—Solo será por el rato en que la engendra de la mestiza le confiese sus secretos a Celia... —dijo ella con normalidad y Celia cerró sus ojos con gran tristeza al solo escuchar a su hermana, Nicole borró toda sonrisa haciendo una mueca de fastidio  rodeando los ojos mirando con rencor a su gemela— Si ella está aquí conmigo.

Nicole solo sacó un pequeño gruñido levantándose de su cama extendiendo su celular hacia Celia, ella detuvo su actividad mirando el celular con miedo.

—Quiere hablar contigo —dijo ella con un tono bastante serio y Celia hizo una mueca al no agradarle nada eso, pero sin opción agarro poniendo el celular en su oreja.

—Hola, padre —dijo Celia con una voz muy pagada agarrando un pequeño mechón de su cabello.

***

El padre de Celia se encuentra en su playa privada con su esposa, estando dentro de una palapa muy lujosa de madera que se encuentra sobre el mar con una vista espectacular, él está medio sentado en una reposera de madera sobre unos cojines blancos muy cómodos, teniendo ropa veraniega encima, junto con unos lentes oscuros a pesar que ya era de noche en Australia, al lado de él se encuentra unas mujeres atractivas con bikini y una falda de playa, siendo trabajadoras del lujoso hotel en Australia de cinco estrellas llamada "Paraíso", acompañando al gran dueño de ese hotel para lo que le sirva.

Mientras que la esposa se encuentra en una camilla para masaje acostada de boca abajo, teniendo solamente una toalla blanca que le cubría solamente sus piernas mostrando su espalda desnuda. dejando que un hombre igual de apuesto, siendo una gran característica en los trabajadores de ese hotel, le diera un relajante masaje en su espalda.

—Hola mi cielo —dijo su padre con una gran sonrisa en su rostro e hizo unas señas a una de las mujeres y ella con una cariñosa sonrisa le acercó la piña colada a la boca del hombre para que pueda succionar del popote.

—Saludamela...de mi parte —dijo la madre con un tono de voz muy sereno al sentir mucha relajación.

La mujer apartó la gran copa del hombre.

—Tu madre te manda saludos.

***

—Yo...igual...le mando mis saludos, padre.

"La razón por la cual quiero hablar contigo es porque en verdad nos orgullecemos de ti, Celia. Tu hermana ya me ha comentado de la pequeña broma que le piensan hacer a la mestiza, tener que ir a su departamento, debe ser mucho esfuerzo para ti"

Celia hizo una gran mueca al solo escuchar lo que le decía su padre, empezó abrazarse a sí misma con su único brazo libre. Ella miró a su hermana con algo de nervios del cual ella solo le regaló una maliciosa sonrisa. Celia insegura prefirió caminar con prisa hacia el baño.

Una vez que se metió en el cuarto le puso seguro a la puerta y abrió la llave del lavabo sin querer que su hermana escuche su conversación con su padre, Celia se pegó en la esquina del cuarto empezando a temblar al sentir muchos nervios por lo que le iba a decir a su padre.

—Padre...yo...no quiero hacerlo—dijo ella empezando a irritar sus ojos con una voz temblorosa— Nicole me...amenaza en hacerme una marca en el rostro si...no hago lo que me pide.

Pero su padre solo saco pequeñas risas, Celia empezó a soltar muchas lágrimas dejando que su espalda se resbalara en los azulejos del baño para que su parte trasera llegará al suelo.

"Mi cielo, tu hermana solo quiere asustarte, ella solo quiere lo mejor para ti, como nosotros. Esto te va a beneficiar, como cuando le hiciste esa pequeña travesura a la Cupido, ¿Recuerdas?, gracias a ello Scarlett te acepto como tu amiga. A mi me hubiera gustado estar en tus zapatos cuando tenía tu edad, no tuve la oportunidad de que Alex me aceptara en su grupo cuando estudiaba en la academia y míranos ahora, si no fuera por mi sol y mi cielo, él no sería un gran amigo y abogado para la familia en este momento."

—Pero...pero... —dijo ella con una voz temblorosa y se quedó callada sellando sus labios sin tener el valor de expresar su opinión.

"Pero..." dijo su padre en un tono alto, pero sonando más alegre para llamar la atención de su hija "Esto es diferente, la mestiza siendo hija de Kay, Alex se llevará la gran sorpresa al enterarse lo que tu hermana, su hija y tu hicieron un gran equipo para haberle hecho esa travesura con la mestiza. No te preocupes por los reportes, Alex se encargará que no salgan afectadas."

Celia se sujetó las raíces del cabello mostrando gran desesperación apretando los dientes con fuerza tratando de contener su grito, ella respiró hondo y alzó la mirada al techo dejando caer más lágrimas.

—Padre,...Mia ya me ha amenazado, si le hago esa broma a Gemma...lastimara a Minerva —dijo ella buscando una manera en que su padre le prohíba hacerle daño a Gemma, ella no estaba para nada de acuerdo en este plan, ella necesitaba alguna pequeña excusa para no hacerlo.

"Celia lo dices como si ese animal fuera de gran importancia, mi cielo te puedo comprar otro gato" dijo su padre entre risas al que le causara gracia la preocupación de su hija y Celia al escucharlo abrió en grande los ojos quedándose paralizada a esas palabras "Te puedo comprar hasta una pantera si lo deseas"

—Minerva...lo es...todo para mi...  —dijo ella con una voz muy aguda al hacer sus esfuerzo en no soltar un sollozo.

"Como lo es tu familia" dijo su padre empezando a cambiar su tono de voz a uno serio empezando a sentir enfado "Espero que como hija mía te estes preocupando por mi y en tu hermana para evitar que por culpa tuya no se rompa nuestra relación con la familia Heaven, Celia, como espero que si te estás acobardando en hacer esto sea por Minerva y no porque sientas preocupación por la sangre sucia." Celia bajó la mirada haciendo una mueca de gran tristeza "Pero son locuras mías, eso no sucederá, eres nuestro ángel, llenándonos de orgullo a que seas tan obediente y respetuosa, esperemos que no te vuelvas ese pequeño demonio como antes" dijo su padre cambiando su tono de voz a uno muy juguetón, pero no hacía ningún efecto de alegría a su hija, todo lo contrario "Porque tu hermana tendría que purificarte de nuevo"

Celia empezó a temblar con miedo abrazándose a sí misma que hasta su tono de piel se fue aclarando al volverse pálida.

"Animos mi cielo, puedes hacerlo, tu madre y yo nos despedimos" Celia se quedó callada cubriéndose la boca cerrando sus ojos con presión como si su mano fuera un tapón para que sus sollozos no salgan de su boca, era tanto el esfuerzo que había hecho al quererlos contener que está empapada de sudor "Estamos esperando nuestra despedida mi cielooo" dijo él en forma de canto.

—A...ad...adiós —dijo Celia con un tono muy bajo y sin querer saber más colgó el celular, dejó a un lado el celular casi aventandolo y se abrazo de sus rodillas soltando todos los sollozos y gritos que contenía dentro de su ser por el dolor que ella sentía.

***

Reto se encuentra transformado en una foca estando recostado sobre la tierra estando de panza arriba sin mostrar mínimo interés en darle lecciones a su manada, Venus y Sienna sin saber aún de la depresión de su líder jugaban con Reto entre pequeñas risas traviesas tocando su cuerpo relleno, los demás se miraron entre sí sin saber qué le ocurría a su alfa y Hunter se rasco la cabeza mostrándose confundido.

—¿Desde...cuándo está transformado en una foca? —preguntó Hunter mirando a sus compañeros y Joaquín levantó los hombros sin saberlo.

—Yo cuando llegue, así estaba él —dijo Yael mirando a Reto con una mueca y Alba junto sus manos mostrando preocupación.

—Angus y yo llegamos primero que los demás y...seguía estando transformado. No se ustedes...pero...yo puedo sentir su tristeza.

—Uno no tiene que sentirlo para saberlo, claramente está en un estado de depresión —dijo Hayden analizando el estado de Reto mirándolo atentamente.

Las pequeñas al escuchar a su manada comprendiendo la situación miraron a Reto de una diferente manera ahora mostrando preocupación, Venus puso sus manos en el rostro de Reto del cual él no hacía movimiento o ruido, solo podía mostrar esos gigantescos ojos brillosos como si realmente fueran dos canicas dentro de su cráneo.

—¿Por qué estás triste?, Reto —preguntó Venus preocupada y Sienna empezó acariciarlo tratando de alegrar a su alfa, con unos acarició suaves y lentos.

—¿Es sobre lo que sucedió en la fiesta? —preguntó Meg preocupada acercándose a su líder y todos los demás se acercaron a él rodeándolo para empezar con el interrogatorio.

—¿Tuvieron una fiesta? —preguntó Joaquín alzando una ceja al apenas enterarse—  ¿Por qué no me invitaron? —preguntó él con poco enfado cruzándose de brazos, los demás le lanzaron una pequeña mala mirada que este no era el momento.

Reto se quedó en la misma postura, como si no mostrara vida, dejando que la tristeza tuviera el control sobre él, quitándole todas sus fuerzas, manteniéndolo sin razón, convirtiéndolo en un muñeco en una estatua sin habla o que en esos momentos pueda sentir otra emoción que no se trate del sufrimiento. Los demás de nuevo se miraron entre sí mostrando gran preocupación.

—Reto...solo nos das antojo al que seas este animal —dijo Hunter entre pocas risas fingidas para animar a su amigo hincándose sacudiendo un poco para hacerlo reaccionar, pero Reto solo dio un lento parpadeo sin ningún ánimo.

—Reto transfórmate en humano para que podamos hacer una conversación como se debe, te ves ridículo comportándote de esta manera —dijo Angus con algo de molestia y Alba puso su manos en el torso de su pareja indicando que tomara calma.

Pero Reto seguía sin dar respuesta, Hayden se sujetó la barbilla y sacó una sonrisa al ocurrirse una idea.

—Podemos llamar a Gemma, ella debe saber lo que le está ocurriendo a Reto. Aunque...también me es extraño que aun no llegue acompañarnos —dijo él mirando por los lados como si la estuviera buscando.

—Sienna y yo podemos ir a buscarla para que venga rápido —dijo Venus con gran sonrisa, pero con qué Reto las escuchara se transformó en humano mostrando molestia mostrando un poco sus colmillos al ya sentirse muy estresado y molesto por este tema.

—Ella ya no vendrá. Ya no tendrá relación con nosotros —dijo él con bastante seriedad juntando fuerzas para levantarse y todos se sobresaltaron al escucharlo mirándose entre sí espantados.

—Pero...¿Qué dices? —preguntó Hunter estando completamente perdido.

Reto desvió la mirada aun mostrando sus colmillos tratando de convertir esa tristeza en ira apretando sus manos formandolas en puño.

—Disculpenme, pero hoy no puedo dar la clase.

—Reto ni te atrevas a transformarte, nece...  —dijo Hunter con enfado mostrándole su índice al ver cómo el cuerpo de su alfa le empezaba a salir plumaje, pero Reto se transformó en un mochuelo empezando a volar retirándose hacia otra zona del bosque apartándose de los demás— Ne...necesitamos una explicación... —dijo él terminando su oración y sacó un rugido mostrando molestia— ¡Como detesto cuando hace sus berrinches!

—Vamos Sienna, necesitamos encontrar a Gemma para que ayude a Reto en su tristeza —dijo Venus con preocupación tomándole la mano a su amiga jalandola hacia la academia para empezar su búsqueda.

—Bueno, las niñas ya han hecho una iniciativa —dijo Yael cruzándose de brazos tratando de encontrar la solución a este problema con su líder.

—Tenemos que investigar la razón por la cual Reto nos ha dado esas palabras, hablaré con Mia, Maya o Theo para saber si ellos saben sobre algo —dijo Alba sacando su celular preparándose.

—La mayor sospechosa aquí es Scarlett, cuando Pierre me llamó para mostrar mi disfraz ante el público, me fije que Reto empezó hablar con ella y cuando Pierre los llamó a ellos dos ya no estaba presente en la fiesta. No me sorprendería que este problema fuera culpa de esa arrogante mujer. Y les aseguro que lo descubriré compañeros —dijo Meg con gran valentía empezando a retirarse del lugar.

—Yo iré con la pareja de la maldita —dijo Hunter mostrando sus colmillos al sentir mucho enfado en su interior— Vamos Hayden —dijo él tomándole el hombro a su hermano llevándolo hacia la oficina del presidente escolar.

Los demás iban buscando una manera de ayudar a su alfa.

***
Gemma

Estaba sentada enfrente del escritorio del director, no me sentía nada bien para haber venido, me hubiera gustado regresar a mi cuarto y dejar que la cama fuera mi único consuelo, no tenía las ganas de ver o hablar con alguien, ni siquiera con Mia, ni me hubiera gustado con el director Galder, pero la idiota de mi se me ocurrió separar esta hora para verlo, si se la cancelaba iba sentir que hubiera sido más complicado.

Yo solo podía tener mi mirada en las puntas de mis pies, tratando de ocultar mis ojos irritados y secos por haber vaciado todo mi tanque de lágrimas, me abracé con más fuerza tratando de darme ánimo a mi misma, maldición...¡Cómo esto me puede afectar tanto!, empecé a encajar mis uñas en mis brazos al sentir la ira por eso, me lo han hecho de nuevo...tenía que ser demasiado bueno para ser verdad, ¡Ya sabía yo que no podía confiarme!, eres una estúpida, todo esto tu culpa, la vida trato de darte una lección con Daniel, pero no, comprendelo imbécil ¡Nada bueno te va ocurrir en esta mierda de vida!

—¿Gemma?

Yo reaccioné al escuchar mi nombre, volteé a ver al director Galder que él se sobresaltó un poco al verme director a los ojos, él se levantó de su asiento apoyando sus manos sobre la mesa arqueando sus cejas mostrando mucha preocupación en su mirada.

—Pero ¿qué ha pasado? —preguntó él viniendo conmigo incandose a mi altura al que yo estuviera sentada, baje la mirada desviando la mirada haciendo todos mis esfuerzos para fingir al menos una corta sonrisa.

—Nada director Galder, es solo...que...si he venido aquí es porque...  —me mordí el labio inferior con fuerza al empezar a sentir esa maldita sensación de nuevo en mi garganta, ya debe de haber toda una maldita red de nudos por los tantos que he tenido en este día, solo causé que el director me mirara con mucha preocupación— Es que...recordé...que en unos días va a cumplir años mi madre y...eso me hizo recordarla, por ello...la tristeza —mentía.

Como tan bajo he caído, ¿Usar el fallecimiento de mi madre como excusa para dar razón de mi tristeza?, yo empecé hacer una gran mueca de tristeza ahora al sentirme muy culpable por ello, pero...no quiero hablar del tema con el director Galder, siento que una vez que comience...volveré a sentir ese veneno afectando mi cuerpo, ese veneno mortal que hace sufrir a una persona sin tener algún daño físico, es todo psicológico, ese veneno puede ser tan mortal para otros para desear hasta la muerte, te lástima de una manera lenta y cruel.

—Gemma...no creo que sea eso lo que te está afectando, por favor, tenme la confianza de decirmelo —dijo él con una mirada suplicante poniendo su mano en mi espalda como forma de consuelo, sin poner presión, solo puedo sentir las yemas de sus dedos, pero me es suficiente para poder sentir su apoyo— Has sido una persona fuerte en seguir adelante tratando que esto no te afecte de esta manera.

Yo mire al director Galder sintiendo mis ojos arder al que quisieran producir las lágrimas, pero están totalmente agotados, con algo de pena bajando la mirada me limpie la nariz con mi puño respirando hondo para que mis mocos no se salieran de mi nariz. El director siendo un gran caballero como siempre sacó su pañuelo de seda ofreciéndomelo, yo le regale una corta sonrisa agradecida verdadera agarrando el pañuelo y me sone la nariz tratando de expulsar todos mis mocos en él.

Aparte el pañuelo teniéndolo en mis manos sin importar sentirlo húmedo por culpa mía, respire hondo sintiendo mi nariz libre y saque aire para reunir valor, mire de nuevo al director Galder que él me regaló una cariñosa sonrisa de su parte para darme ánimos en que le dijera de mi problema.

Yo de nuevo baje la mirada haciendo en puño mis manos desquitandome con el pañuelo.

—Reto...rompió...su amistad conmigo —dije en un tono de voz tan bajo, pero el director lo escucho claro para abrir en grande sus ojos, yo cerré los ojos con presión empezando a respirar con poca dificultad— Me dijo que...su padre se enteró de mi amistad con él y...que su padre le hizo darse cuenta...que...que...  —deje salir mucho aire por mi nariz por el sollozo que quiso escaparse de mi boca— Solo...lo estaba ensuciando al ser...una mestiza...yo...yo...yo no pedí nacer así director Galder...no es mi culpa...

—Gemma... —dijo él dandome pequeñas palmadas en mi espalda tratando de consolarme y yo sin poder evitarlo solté un sollozo, él se veía angustiado al verme de este modo que miro por los lados como si tratara de encontrar una solución, pero al no encontrarla me miró con gran culpa poniendo su mano en su pecho en donde se ubica su corazón— No es tu culpa, uno tendría que ser un ignorante para culparte de eso. Escucha, yo no creo que...el padre de Reto le haya prohibido juntarse contigo por ser una mestiza...

—Si lo hizo...Reto me lo dejó en claro...y todo por culpa de esa puta...

—Gemma —dijo él mostrando enfado al escuchar que maldije a esa maldita y yo fruncí el ceño mostrando enfado— En un día él se iba enterar...

—Ni siquiera estaba enterada que lo mantenía en secreto, Reto desde un principio sentía pena por mi, si no se los dijo a sus padres es por lo que soy —dije abriendo mis brazos con desesperación y de nuevo de una forma milagrosa pude sentir como si se hubiera desvanecido la sequía en mis ojos podía sentir cómo mis lágrimas se iban formando de nuevo, me abracé a mi misma desviando la mirada— Pero...esta bien...yo...creo que fue lo mejor...

—Gemma, no digas ello...

—Lo es, sabe antes me preocupaba estar con Reto...por...mi vida pasada, temía que...descubriera que fui una bailarina de tubo mostrando mi cuerpo casi desnudo a otros hombres, haber...golpeado a una chica hasta mandarla al hospital causando que perdiera un ojo, que se entere que soy tan idiota que sigo atorada en las fracciones, que...se hubiera enterado que tuve un primer novio del cual ese idiota solo me utilizó para crear su propia revista de porno...

—Gemma suficiente, no me agrada que hables de este modo —dijo él con un tono bastante serio sujetándome de los hombros y yo fruncí el ceño apretando los dientes sintiendo gran enfado, puede que esta sea la razón por la cual estas lágrimas se han creado, ya que estas no son de tristeza, más bien de coraje.

—No es nada más que la verdad. Nadie va a querer estar conmigo, ser mestiza puede que sea la salsa especial encima de todos los problemas que le mencioné, él...solo...me hizo un favor para ya no preocuparme por eso —dije cruzándome de brazos desviando la mirada tratando de convencerme de eso.

—Gemma, conozco a Reto, escucha no debió insultarte hablando con la verdad, claramente te mentía para que te apartaras de él, él hace mucho por su padre, obedeciendo, siendo él más destacado, todos los logros que Reto hace, lo hace por él, como una paga por haberle salvado la vida de esos cazadores. Si su padre no quiere que esté contigo, no es solamente porque seas mestiza, él tuvo demasiado conflictos con tu padre.

Yo mire al director Galder alzando un poco mi ceja.

—¿Qué tipo de conflictos?—El director Galder hizo una pequeña mueca desviando la mirada arrepintiéndose de sus palabras— Quiero saber, tengo el derecho de saber sobre él, director Galder.

—Si no te menciono sobre él es porque no quiero que te deprimas por su culpa y en este momento por tu estado no es conveniente que hable sobre los conflictos de tu padre y el de Reto.

—Todo lo contrario director Galder, este es el mejor momento, aún no se me termina mi tanque de lágrimas —dije con bastante seriedad señalando mis ojos y él sacó un suspiro cerrando los ojos rendido.

El abrir los ojos me miró con una mirada llena de tristeza.

—Tu padre siempre se mantenía para ser el alumno más destacado de la academia, el apellido Schlange lo obligaba hacerlo, anteriormente ese apellido era el más reconocido en nuestra raza, la familia de tu padre antes eran dueños del banco que anteriormente era la más importante de Alemania, Thron. Le ganaba en riquezas a la familia Heaven. Además de tus familiares teniendo sus dones de un nivel muy superior, el de tu tío-abuelo que llegó ser hasta un trono de nuestra serafín y el de tu padre. Es tiempo que te enteres cual es su don.

Yo saque una corta sonrisa, esto...me esta ayudando un poco para tratar de desviar la tristeza, pero el director al darse cuenta de ello, desvió la mirada de una manera fría, debe ser porque no le gusta hablar del tema, pero debe saber que significa mucho lo que hace para mi.

—El don de tu padre se maneja con su vista, con sus ojos podía escoger la suerte de su individuo —yo frunci el ceño al no entender muy bien esa clase de don— tiene de un ojo oscuro y otro claro, con el ojo oscuro puede causar que su enemigo le sucedan sucesos inoportunos, dependiendo de la fuerza con la que está usando, puede ser leve como severa, si tu padre utilizara su ojo oscuro en su oponente, puede hacer que suceda un suceso inesperado para que ese individuo salga lastimado. Por ejemplo, como en las caricaturas de cómo un hombre va caminando por la calle, si tu padre usa su ojo oscuro en él, le puede caer repentinamente un piano encima a ese hombre —dijo él con poca gracia y yo saque una corta sonrisa por ello.

—¿Y el ojo claro?

—Eso iba por mencionar, con el ojo claro puede causar que a un individuo le suceda algo oportuno. Por ejemplo, un sencillo ejemplo que un individuo se compre un boleto de lotería y tu padre puede lograr que ese hombre gane él millón, puede usar esa misma suerte en él también, pero él...la usaba mucho con tu madre —dijo él alargando un poco más su sonrisa y saque una sonrisa al escucharlo.

—¿En verdad?...¿Sabe...lo que hacía?

—Eran cosas sencillas para que tu madre no sospechara sobre él, pero a veces tu padre la llevaba a la feria, hacía que ella se ganara los premios más grandes haciéndola sentirse afortunada.

Yo sonreí con ternura al solo imaginarme a mi madre en la feria teniendo un peluche gigante en sus brazos gracias a la ayuda de mi padre. Pero borré mi sonrisa volviendo a la realidad de esta conversación.

—Vaya con él "pero", director Galder —dije cruzándome de brazos al saber que algo malo tenía que haber en esta historia y él borró sus sonrisa mostrando mucha seriedad.

—Como te había comentado tu padre como la familia Heaven tenía su fama en la academia, de pura lógica iba a ver muchos que le iban a tener envidia. Tu padre tenía más enemigos que amistades, pero Alex el padre de Scarlett y Bern el padre de Reto, ellos dos buscaban la manera de superar a tu padre. Tratando de ganar las elecciones presidenciales, en superar su nivel económico, en su inteligencia, en todo lo que he mencionado habían fracasado, pero en los eventos del apocalipsis, en nuestro primer año... —dijo él bajando la mirada al tener presente el recuerdo en tu cabeza— Tu padre ya se encontraba en el combate final contra Bern. El padre de Reto ya tenía la ventaja en esa pelea por su transformación, tu padre no iba durar mucho, pero...usó su ojo oscuro reuniendo todas la fuerza que le quedaba en Bern, él no midió la fuerza de su don que causó que el padre de Reto sufriera un descontrol en su transformación causando deformaciones severas físicas.

Yo puse mis manos en mi pecho mostrando impresión al escucharlo, empecé a sentir mucha preocupación.

—¿Deformaciones severas?

—Su cuerpo ni siquiera tenía forma, había hecho...que de alguna manera Bern sufriera una fusión de su forma humana a animal, Bern al principio sentía gran sufrimiento y dolor que...gritaba de la agonía, diciendo palabras incomprensibles, pero se entendía que pedía... que lo mataran —dijo él con un tono demasiado frío y yo me cubrí la boca al sentir miedo a esta historia— Pero...lo llevaron a la enfermería, tu...padre trato de romperle el efecto usando su don, fue un largo proceso, él realmente si sentía una gran culpa por el daño que le hizo al padre de Reto que usaba todas sus fuerzas para revertir el efecto, logró quitarle una gran parte de la deformación, pero no completamente, a pesar de todos los intentos que tu padre hacía ya no podía arreglar de unas pocas deformaciones que quedaron en el cuerpo de Bern, se quedó en conclusión que esas deformaciones ya iban a ser permanentes. La apariencia de Bern ya no se veía humana completamente como él podía hacerlo, a pesar que se transformara de animal a humano, esas deformaciones quedaron en su cuerpo, eso lo llevó a varios conflictos con sus familiares y amistades. Bern desde el día que tu padre utilizó su don en él lo odio con una fuerza que le desea la muerte, Gemma. Nunca perdonó a tu padre y para serte sincero, no creo que lo haga. Por esas razones...  —dijo él mirándome con algo de lástima— Reto debió ocultárselo a su padre, Gemma, no por vergüenza a ti, él sabía que si se lo decía le iba a prohibir que fueras su amiga.

Yo me crucé de brazos desviando la mirada.

—Pero...con lo que me dice...solo...me está dando más razones por la cual...no estar con Reto. Es lo mejor director Galder...  —dije levantándome de mi asiento desesperada— Para Reto y para mi...nos sacará beneficios no estar juntos...Reto...no tendrá conflictos con su padre por culpa mía y ya no estará con una persona como yo...

—Gemma. Reto se dará cuenta que hizo mal...

—Ya...no quiero seguir con esto director Galder...  —dije cubriendome las orejas desesperadas cerrando los ojos con fuerza— Solo quiero...ir con mi madre por favor...Mia me dijo que... puede darme la salida para ir a verla...por favor...necesito despedirme como debí hacerlo hace tiempo —dije abriendo los ojos mirándolo con súplica y él me miró con gran lástima, pero bajo la mirada de un modo rendido.

—Necesito el permiso del consejo de la serafín, pero...haré lo posible para que te den el permiso Gemma.

Yo me lo quedé mirando y apenada desvie la mirada abrazándome a mí misma.

—Yo...debo prepararme para mi clase de ballet, le agradezco...por...escucharme, director Galder, yo...me retiró.

Sin decir más me salí de la oficina para dirigirme a mi departamento, Leon dándome la sorpresa de estar en la sala de espera, bajo su revista regalandome una corta sonrisa, pero al ver mis ojos la borro completamente, yo solo pude desviar mi mirada queriendo un momento a solas y me fui retirando a mi departamento con prisa.

***

Salí del edificio con mi ropa de ballet puesta para iniciar con los ensayos.

—¡Gemma, Gemma, Gemma!

Me detuve al escuchar esas pequeñas voces agudas, voltee a ver que por el jardín Venus y Sienna venían corriendo hacia a mi, yo les regale una corta sonrisa apagada y ellas vinieron abrazarme, yo puse mi mano sobre sus cabezas acariciando su cabello con cariño.

—Hola...

Venus y Sienna se apartaron de mí alzando su mirada mirándome preocupadas.

—Gemma, Reto está triste porque no llegaste a la clase, después se molestó diciendo que ya no ibas a ir, ¿Por qué no has llegado? —preguntó ella con tristeza y empecé a sentir de nuevo ese horrible dolor, pero me hinqué de un modo para estar a su altura y las niñas me miraban con mucha atención.

—Algodón de azúcar...escucha...Reto...ya no quiere que sea su amiga —dije tratando de sonar tranquila para que las niñas no se preocuparan, pero aun así dieron un pequeño salto de la impresión, Sienna se cubrió la boca sin poder creerlo y Venus mostraba demasiada confusión— Por eso...ya no quiere que los acompañe a su clase.

—Pero no...él...no quisiera eso...eres parte de la manada, un alfa no expulsa parte de su manada, al menos que lo hayas retado a un combate por su puesto de líder y hayas perdido.

Yo le sonreí con dulzura por esa bella inocencia que tiene, empece acomodar de su cabello con gran cariño.

—Es que...eso fue lo que pasó...quise ser líder y...perdí, Reto se molesto mucho que hubiera querido quitarle el puesto de líder que por eso...me expulsó de la manada.

Venus empezó a mostrar mucha tristeza junto con Sienna empezando a juntar lágrimas en sus ojos, yo empecé a sentir como esa devastadora mirada me iba acuchillando el pecho.

—Pero...¿Por qué quisiste ser líder?, Reto...te trata como una beta.

—Yo...no soy tan buena mujer como ustedes creen niñas... —dije levantándome apartandome de ellas alzando la mirada reuniendo todo el valor para dejarlas— Reto...sabe lo que hace, es mejor que ya no vuelva a presentarme en su clase.

Empecé a caminar cerrando los ojos sin querer ver cómo iban a mostrar gran tristeza por esto, pero sentí como Venus me sujetó la muñeca con fuerza impidiendo que me aleje y yo abrí los ojos volteando a verla con gran dolor, pero me sorprendí al ver a Sienna que me mira con suplica.

—No te vayas —dijo ella escuchándola por primera vez y alce las cejas mostrando gran impresión al escucharla, ella tiene su mirada suplicante pegada a mi— Por favor.

—Podemos hablar con Reto para que te acepte de nuevo en la manada Gemma, pero no nos dejes, si eres parte de nuestra manada...también eres parte de nuestra familia.

Empecé a enrojecer mis ojos de nuevo y me hinqué extendiendo mis brazos pidiéndoles un abrazo, las dos vinieron abrazarme y yo las abrace con gran fuerza.

—Tu...me has ayudado a quitarme la tristeza y quiero hacer lo mismo contigo, para ser como tu —dijo Venus abrazándome con mucha más fuerza y empecé a dejar caer algunas lágrimas sacando una dulce sonrisa. Preferí rendirme ante ellas recibiendo todo el cariño que necesitaba en este momento.

—Pero qué conmovedor.

Las niñas al escucharla espantadas se escondieron detrás mío para que Scarlett no les hiciera daño, yo me levante tomándole de las manos a las pequeña mirando con gran amenaza a Scarlett y Nicole del cual las dos me regalaron una larga sonrisa al tener su ropa de ballet para la clase.

—Te pediré amablemente que te retires junto con tu demente amiga... —dije con un tono bastante frío mirando a Nicole que ella frunció el ceño mirando con enfado— Porque están asustando a las niñas.

—Eso me sorprende, naturalmente todos los infantes sienten admiración por mi —dijo ella alargando su sonrisa doblando un poco su espalda para bajar su cabeza acercando su rostro al de las niñas que ellas pegaron sus rostros en mi espalda sintiendo gran miedo.

—Intentaste expulsarlas de la academia por solo ser metamorfas, estupida, por eso te tienen miedo —dije con mucha seriedad y Scarlett se incorporaba alzando sus cejas empezando a mirarme con gran burla.

—Muy cariñosa con los niños y acabas de decir una grosería enfrente de ellas, aunque tengo esa duda... —dijo ella pensativa sujetándose la barbilla— Así de groseros, salvajes y sucios como tu son los niños indigentes, ¿Es de nacimiento empezar a comportarse como una rata?.

Nicole se echaba a reír por las burlas que me hacía Scarlett y Venus asustada me abrazaba con mucho más fuerza.

—Vamonos niñas, no tenemos nada que hacer aquí —dije dándome la vuelta empezando apartarlas de esas malditas.

—Pero si solo he venido contigo porque estoy muy preocupada por ti —dijo ella poniéndose enfrente mio bloqueando el camino y frunci el ceño empezando a sentir gran enfado— Todos hablan sobre la discusión que tuvieron tu y Reto esta mañana... —dijo ella alargando más su sonrisa y empecé a sentir una gran ira al solo escucharla que por el bien de las niñas les solté de su mano— Que hasta te escucharon llorar como María magdalena en el establo. ¿Qué fue lo que sucedió?, era algo sobre.. ¿Una foto? —preguntó ella fingiendo pensarlo y Nicole parecía estar muy alegre con todo esto.

—Tu bien que sabes lo que sucedió, Scarlett. Por primera vez te pediré ayuda para que me resuelvas esta pregunta —dije con demasiada seriedad y ella alzó una ceja muy intrigada a la pregunta que iba hacerle con una sonrisa algo juguetona divirtiéndose con esta plática— ¿Por qué?

Scarlett saco pequeñas risas de gracia.

—Que lástima das para que no te des cuenta, pero te haré el favor que me pides, la respuesta es sencilla, tu tratas de apartarme a un ser amado, yo hago lo mismo contigo quitandote a un ser querido tuyo.

Yo gruñí con desesperación agarrándome las raíces del cabello.

—Ya te dije que yo no siento nada por Dmitri.

—Y puede que sea verdad, pero no me importa Gemma —dijo ella siguiendo sonriéndome con gran satisfacción y me quedé perpleja a su respuesta— Lo que sucedió esta mañana les fue de una gran ayuda para ti y para Reto. Su padre me hizo el gran favor para hacer recordar a su hijo lo que eres Gemma, como él te ayudó a recordártelo. Eres una mestiza, ni humana, ni potestad, un ser erróneo de este mundo, ni siquiera siendo humana lo hiciste bien... —dijo ella entre risas y empecé apretar los puños con mucha fuerza— Viviendo en las calles con las manos siempre alzadas pidiendo de una limosna, ignorante, deforme... —dijo ella bajando la mirada viendo mi mano humana— Ya habíamos tenido una discusión sobre esto, pero te hago el favor de acordarte que eres inferior y por esas razones nadie quiere ensuciarse de ti. Y al decir esto me es obligación decirlo a las pequeñas niñas que tienes contigo —dijo ella fingiendo un rostro amable e inocente para las niñas que ellas empezaron a mirar con poca molestia a Scarlett — Hagan caso a su...alfa, como dirían ustedes, en que la mujer a la que quieren es un ser monstruoso...

—No —dije con mucho enfado dando un paso al frente aun protegiendo a las niñas y Scarlett me volteo a ver con gran burla siguiendo regalandome de esa molesta sonrisa— Yo soy una mestiza, pero una la cual hizo que te eliminaran de las elecciones presidenciales... —dije dando otro paso al frente poniéndome enfrente de ella y ella empezó a borrar su sonrisa— Yo soy una mestiza que te mostró que no puedes jugar conmigo... —dije con más enfado dando otro paso del cual ella tuvo que dar un paso hacia atrás apartándose de mí frunciendo el ceño empezando a mostrar mucho enfado a mis palabras— Yo soy una mestiza del cual hubo más invitados en la fiesta que he organizado que la tuya —dije empezando a tener mis ojos directos a ella muy intensamente empezando a caminar de un modo que ella se iba haciendo para atrás apartándose de mí alzando un poco las cejas por mi mirada.

>Me dices eso no haciéndolo recordar a mi, lo haces para tratar de hacerte creer eso de mi, solo tienes envidia Scarlett —dije haciendo que ella se topará contra una escultura del jardín y ella empezó a mostrarme sus dientes empezando a irritar su rostro al escuchar mis palabras— Y lo reconozco, porque he conocido a tantas mujeres igual de envidiosas como tu...

Ella me dio una fuerte bofetada del cual fue tanta la fuerza que hizo que diera una media vuelta sujetándome la mejilla muy adolorida.

—¡Gemma! —gritaron las niñas asustadas al mismo tiempo viniendo conmigo, pero les hice una seña que no se acercaran, yo me di la vuelta para ver a Scarlett que ella tiene una mirada en mi llena de gran odio, pudiendo sentir que con su mirada quería dañarme con ella como si tuviera algún don escondido, pero ella saco una sonrisa muy histérica empezando a sacar pocas risas.

—Sé que escondes secretos Gemma... —dijo ella alargando sonrisa como toda una psicópata y yo me aparté de ella sin poder evitarlo sintiendo un pequeño escalofrío a ese demente rostro— Y si no los mencionas es porque tratas de esconder la evidencia que yo tengo la razón, pero los descubrire de alguna forma y cuando eso suceda ¡Les mostrare a todos los de esta academia lo que realmente eres! —gritó ella con gran desesperación y yo negué con la cabeza al sentir lástima por ella.

Yo me di la vuelta yendo con las niñas que ellas tienen los ojos llorosos al sentirse muy asustadas por Scarlett, les tome de la mano a Sienna y con un brazo cargue a Venus del cual ella me abrazó del cuello, me alejaba de esas dos mujeres por la seguridad estas inocentes criaturas.

***
Narrador

Cuando Gemma se retiró Scarlett miró con gran enfado a Nicole del cual ella nerviosa desvió la mirada. Ella con gran ira empezó a dar pasos fuertes empezando a dirigirse por su cuenta a la clase de ballet, su amiga trago saliva de una manera muy nerviosa y sin opción empezó acompañar a Scarlett sin mencionar ninguna palabra.

Meg se bajó de la rama en donde estaba escondida de un salto teniendo los ojos muy bien abiertos y las cejas alzadas al ver la gran discusión, ella se sujetó su barbilla muy intrigada alzando su mirada al cielo.

—¿Una foto?, ¿Padre de Reto?, tengo las piezas de los rompecabezas, pero me falta armarlas.

—Quizás pueda ser de tu ayuda.

Meg se sobresaltó al escucharlo, ella volteo a ver a Leon recargado en un árbol estando de brazos cruzados regalándole una juguetona sonrisa y ella lo miró con enfado.

—Ahora comprendo que era lo que apestaba a lagartija, debo poner un recordatorio en mi celular que apestas como una para que no se me vuelva a olvidar —dijo ella frunciendo el ceño mostrando gran molestia— ¿A quién espiabas?, espero no escuchar mi nombre en tu respuesta —dijo ella con amenaza mostrándole sus colmillos y Leon saco pequeñas risas poniendo sus brazos detrás de su espalda dirigiéndose con Meg.

—Espiaba a la misma mujer que tú, Scarlett. No estaba enterado que fueras una buena espía para que hasta ella no se diera cuenta de tu presencia y del modo más ridículo, estando colgada de cabeza en una rama. ¿Es por algo en especial que los murciélagos hacen eso? —preguntó él poniéndose enfrente de la mujer y ella le regaló una sonrisa fingida.

—Es para que pueda volar bien apartándome de ti, querido —dijo ella fingiendo amabilidad, pero borró completamente su sonrisa mostrando seriedad— Me he especializado en espionaje, ya que mi don no me ayuda mucho en el combate, me ayuda a conseguir información que me es útil. Pero basta de juegos, Leon, ¿Por qué también mostrarias interés a Scarlett?

—Porque al igual que tu soy muy curioso, me gusta estar al tanto de todo y ya he usado mi don en la conejita y en Scarlett para saber lo que ha sucedido en la fiesta y en esta mañana, el gran chisme de la academia —dijo él alzando sus cejas alargando su sonrisa— Y como te he escuchado hace rato, te puedo otorgar la información que quieres, completa, aprovechalo vampiresa.

Meg rodeo los ojos cruzándose de brazos.

—¿Cuánto?

Leon hizo una pequeña mueca al escuchar su pregunta.

—Cien euros.

—Se maduro por una vez.

—Hablo en serio, solamente pido cien euros —dijo él mostrando sus palmas como manera de inocencia y ella rodeó los ojos.

—No desperdiciare cien euros para que me digas información falsa —dijo ella empezando a caminar retirándose.

—Maldita sea, ¿Quieres que le suba a quinientos?, te hablo con la verdad que te lo doy a ese precio y no te dare información falsa.

—¿Me crees ignorante?, ese claramente no es el precio que otorgas a tus clientes, siempre son arriba de cinco mil euros.

—Entonces te lo dejo a cinco mil euros —dijo él sonriendo con burla y Meg empezó a entrecerrar los ojos mirándolo con mucha sospecha— Escucha, como me das lástima que tengas ese don siendo una rata con alas te lo dejo a cien euros.

Ella solo rodeo los ojos sacando un pequeño chillido de murciélago de enfado sin poder evitarlo, ella se cubrió la boca al darse cuenta de ello y Leon abrió en grande los ojos al escucharla, se cubrió la boca tratando de no arruinar su plan queriendo sacar carcajadas y ella dio un pisotón en el suelo gruñendo con gran molestia.

—Eres un...idiota —dijo ella empezando a dar pasos muy molestos queriendo apartarse de Leon.

—Es...espera... —dijo Leon entre pocas risas tratando de controlarse y ella lo volteo a ver con gran ira mostrándole sus colmillos— Scarlett le hirió los sentimiento a Reto diciéndole que al ser metamorfo no tenia oportunidad con Gemma que por eso se retiró de la fiesta —dijo él calmando sus risas hablando con seriedad y ella sin prestarle atención seguía caminando— Scarlett le tomo una foto a Gemma y Reto para enviarla a su padre y él se la enviará al padre de Reto, él al ver la foto le prohibió a Reto seguir viéndose con Gemma.

Meg se detuvo volteando a ver a Leon con seriedad, él la miró con una mirada seria del cual ella alzó un poco las cejas al ver que si mostraba seriedad.

—Reto queriendo obedecer a su padre insultó a Gemma para que se aparte de él, razón por la cual él se encuentra en ese estado depresivo. Puedes creerme o no, pero cuando te enteres de la verdad, esperaré el sobre con mis cien euros en mi departamento —dijo él con poca gracia y empezó a retirarse.

Meg lo miró con gran curiosidad a ese comportamiento de él.

***

Dmitri se encontraba en su oficina tecleando en su laptop concentrado en una tarea, la puerta se abrió de golpe y él presidente miró con bastante seriedad como Hunter entró al cuarto entre gruñidos muy molestos poniendo sus manos sobre el escritorio con fuerza para hacer sonar el golpe para llamar toda su atención.

Hayden entró al cuarto con una pequeña sonrisa nerviosa cerrando la puerta del cuarto.

—Lamento que mi hermano haya entrado sin tocar la puerta y...haber venido sin cita previa...

—Hayden, no venimos con intenciones amistosas —dijo él con molestia y volteo a ver a Dmitri que él sin mostrar alguna mínima expresión de importancia se le quedo viendo al metamorfo tigre que está enfrente de él que le empezó a sacar gruñidos muy amenazantes— Confiesa, ¿Qué le hizo tu pareja a Reto en la fiesta para que Gemma también salga afectada?

—No estoy informado de lo que mi pareja le dijo a Reto en la fiesta, pero tengo información que puede tener relación a su pregunta —dijo él con seriedad.

—No te hagas el complicado "presidente" —dijo Hunter haciendo conejitos en la última palabra y Hayden solo rodeo los ojos—¿Qué nos estás ocultando? —su gemelo le dio un empujón a su hermano sin mucha fuerza para quitarle del lugar.

—Nos está ofreciendo información, no podemos desperdiciarla, Hunter. Mejor deja que yo me encargue de esto —dijo Hayden con seriedad y su hermano sacó un pequeño gruñido cruzándose de brazos. Dmitri sabía que esto iba a tomar tiempo así que bajo la pantalla de su laptop. Hayden le regaló una corta sonrisa a Dmitri— De nuevo me disculpo por la actitud grosera de mi hermano, Dmitri, pero ¿podrías decirnos cuál es esa información que comentas?

—Si les daré de esta información es por Gemma, espero que ustedes le puedan dar su apoyo, Reto la ha dañado verbalmente —Hunter y Hayden fruncieron el ceño mostrando confusión— Sucedió esta mañana en la cancha de Tenis...

***
Gemma

Me encontraba en mi cama abrazando mi almohada con fuerza, teniendo a la oscuridad abrazándome al tener todas las luces apagadas, no quería cerrar los ojos porque se que Leon va a querer hablar conmigo sobre el tema y es algo que no quiero, ya tuve suficiente platica sobre eso todo el día.

Escuché que alguien abrió mi puerta, yo no tenía ganas de ver quién era que me quede quieta dándole toda la bienvenida sin importar que fuera algún ladrón o asesino.

—Hey... —dijo Mia sentándose a mi lado poniendo su mano en mi espalda, yo sin poder evitarlo pegué mi rostro en la almohada sabiendo que va a querer hablar sobre eso— Alba me ha hablado, me ha comentado lo que ha pasado, se han enterado por Meg, Hunter y Hayden al hacer su propia investigación estando preocupados por ti y por Reto...

Aparte la almohada de mi cara.

—Mia no quiero hablar de esto, por favor...lo he hablado como tres veces. Dame...tiempo.

—Y respetaré tu decisión es solo que...Maya se sintió algo culpable al no saber como ayudarte en el establo, si no te ha ayudado es porque ella no es muy buena cuando se trata de la tristeza, solo...para ella misma.

—Dile...que no se preocupe, necesitaba privacidad...como...ahora la necesito.

—Gemma, Reto lo está haciendo por su padre...

—Mia por favor, realmente no estoy de humor —dije con desesperada incorporándome volteando a verla con algo de enfado y ella se apartó un poco de mi mostrándose asustada. Yo la mire con culpa desviando la mirada— Lo...lamento...no...quise reaccionar así.

—Está bien...estuvo...mal de mi parte por...no escucharte —dijo ella abrazándose a sí misma algo herida y la mire con gran culpa.

—Te prometo que yo misma te contaré lo que me ha pasado en este día, pero en este momento...no puedo.

—No necesitas prometerlo, yo lo entiendo, pero quiero recordarte que puedes contar conmigo —dijo ella regalándome una sonrisa levantándose— Buenas noches.

—Buenas noches.

Mia me dio un beso rápido en la mejilla como madera de despedida, se salió del cuarto cerrando la puerta de mi cuarto, yo con tristeza me volví acostar abrazando mi almohada pegando mi rostro en ella auto dañandome en sentir un poco de asfixia.

***
Narrador

Reto como un zorro iba comiendo del pato muerto que ha cazado cerca del lago, pero la manera en que despedaza la carne eran algo débiles, como si aún no tuviera las fuerzas para apartar el pedazo del animal, él sacó unos pequeños gemidos estresado dejando de morder el cuerpo del animal estresado al notar que no tenías las energías siquiera para comer.

Él teniendo sus orejas hacia atrás pegadas a su cuello con la cola abajo por su tristeza se recostó en el suelo poniéndose en forma de bola moviendo su cola de un modo para apoyar la barbilla de su hocico en ella, cerro sus ojos tratando de obligarse a dormir en el bosque.

Pero abrió de golpe los ojos al sentir que alguien le aventó un pedazo de carne en su cabeza, Hunter como un tigre le ayuda a su amigo a despedazar el pato y Reto alzó su cabeza mirándolo con atención. Hunter agarró un pedazo grande teniéndolo en su hocico y se fue a recostar al lado de su alfa empezando a comer con él.

Reto se le quedó mirando con gran tristeza, Hunter le dio un pequeño gruñido indicando que comiera moviendo con su hocico el pedazo de carne que arrancó del cuerpo del pato para él, poniéndolo a su frente. Reto se transformó en humano mirando con una mirada muy apagada a su estudiante.

—Hunter, no quiero compañía —dijo él con un tono demasiado serio.

Hunter se transformó en humano teniendo aún un pedazo de carne en su hocico, se la quitó agarrandola apartandola de su boca regalandole una sonrisa burlona a su amigo.

—Si no hubieras querido compañía te hubieras transformado en un gorila dando un rugido de amenaza, después hubieras sujetado mi cuerpo y me hubieras aventado por los aires, pero no lo hiciste, no tienes fuerzas alfas —dijo el poniendo su índice en la punta de la nariz de Reto que él frunció el ceño mostrando enfado— Por esa razón te transformas en animales que no tengan gran fuerza. Quizás deba aprovechar el momento para retarte por el puesto alfa —dijo él con poca gracia y Reto solo desvió la mirada sin sacar ninguna sonrisa, su amigo apagó su sonrisa mirándolo con preocupación— Meg, Hayden y yo hicimos nuestra investigación para saber lo sucedido...

—No quiero hablar de eso —dijo él con molestia mostrándole sus colmillos a su amigo.

—Sabía dirias eso y no te molestare Reto, no esta noche, yo sólo quiero asegurarme que mi alfa recupere sus energías. Si es necesario cazar un venado, lo buscare como una manera de paga por las tantas presas que me has compartido —dijo él alargando su sonrisa y Reto se le quedo viendo con tristeza— Y para que me creas, me transformare en animal para no molestarte con ninguna plática, como a ti te gusta.

Hunter sin decir más empezó a transformarse en tigre nuevamente empezando a devorar su cena, Reto a pesar de tener el rostro caído por la depresión, le regaló una corta sonrisa a su amigo agradecido, se transformó en zorro de nuevo empezando a comer con uno de su manada.

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