Capítulo 8: Planes retrasados💥

Una semana después del estrés provocado por la explosión nos trae a este día de sofocante calor que comienza con las noticias contadas a través de una entusiasta reportera:

Reportera: Pero en este hermoso día algo tiene que interrumpir; otra vez y como es de costumbre Mojo atacó, destruyendo los edificios, y evidentemente disfrutando del daño que causa a las personas que se encuentran dentro.

Y si esta acción de Mojo es sumamente predecible ¡¡Aquí como siempre están las tan aclamadas "Chicas Súper Poderosas Z" llegaron para salvar el día!! Derrotando a Mojo y salvando a las personas que se encuentran dentro de los edificios.

La reportera seguía narrando los acontecimientos totalmente contenta y entusiasmada mientras que en la Alcaldía:

-Que agobiante, no puedo permitir que esto siga sucediendo- Expresó un preocupado Alcalde caminando en círculos.

-¿Quiere qué se lo comuniquemos al Profesor Utonio? Sé que no lo quieres apurar por lo que se me ocurre que podríamos contratar al Doctor Mañas para que colabore y ayude al Profesor Utonio- Aconsejó su hermosa secretaria con bastante calma.

-Si por favor, es una muy buena idea- Respondió el Alcalde, acercándose a su computadora.

-Buenos días Señor Alcalde- Se escuchó una voz desde la pantalla.

-Hola Profesor, lo necesito- Dijo el Alcalde con algo de desesperación.

-¿Qué ocurre?- Preguntó el Profesor desde la pantalla.

-Necesito que venga ya mismo para la alcaldía- Respondió el Alcalde.

-Oh, está bien, en unos minutos estaré allí- Respondió el Profesor y desapareció de la pantalla dejando un fondo negro.

En el laboratorio:

-¿Qué ocurre papá?- Preguntó el pequeño Ken acercándole un café recién hecho a su padre.

-Parece que el Alcalde quiere hablar conmigo, lo noté serio y preocupado, te dejo a cargo del laboratorio Ken- Dijo el Profesor mientras buscaba la llave de su camioneta y le dio un beso en la frente antes de irse.

-Está bien, te deseo suerte papá- Respondió Ken bastante tranquilo y sonriendo.

-Regresaré lo antes posible, no le habrás a nadie- Dijo el Profesor y luego continuó -Avísale a las chicas que hoy no vengan, ya que no voy a estar- Luego de dar todas las instrucciones a su hijo, él se fue.

-Está bien- Ya conociendo todas las instrucciones -< Supongo que me lo tomaré yo >- Pensó al ver el café recién preparado siendo abandonado.

De regreso en la Alcaldía:

-Profesor me alegra mucho que allá llegado- Festejó el Señor Alcalde recibiendo al Profesor Utonio en su oficina.

-Agradezco que después de lo ocurrido siga confiando en mí, ahora dígame ¿Qué ocurre?- Preguntó el Profesor Utonio mostrando seriedad y respeto.

-Se trata de los Monstruos que fueron creados o modificados por los rayos Z Negros, ya no puedo seguir reparando todo lo que destruyen, no me alcanzan los fondos para cubrir todos los daños...- Aclaró el Señor Alcalde muy acelerado y alterado.

-Lo sé... Y usted sabe que estoy trabajando en ello...- Respondió el Profesor manteniendo el respeto lo mejor que puede.

-¡Tenemos que hacer algo o me volveré loco! La gente comenzará a hacer huelgas, a reclamar por empleo ya que sus lugares de oficio fueron destruidos, los empresarios no tendrán como pagar a sus empleados... ¡En síntesis todo se volverá caótico! Y solo estoy mencionando la parte comercial- Explico el Alcalde muy nervioso.

-Tranquilícese estuve trabajando en un proyecto especial que purifica los rayos Z Negros y los vuelve Blancos- Explicó el Profesor Utonio en pocas palabras.

-¿Obtuvo resultados?- Pregunto el Alcalde ya ilusionado.

-No lo sé, aún no lo pude comprobar, la explosión de mi laboratorio secreto donde fabrico la nueva sustancia Z me retrasó bastante...- Respondió el Profesor manteniendo su compostura.

-Oh... Pero ¿En qué o en quién hizo sus pruebas?- Se desilusionó un poco el Alcalde pero obtuvo nuevas ilusiones.

-En el RuwdyRuffBoyZ verde, Butch para ser más exactos... Ya debería saber que todo gran invento y solución requiere tiempo, paciencia y perseverancia, no se angustie, incluso si este experimento que estoy realizando sale bien o mal encontraremos una solución, mientras tanto tenemos a nuestras veneradas heroínas para proteger a los civiles- El Profesor se expresó con la intención de tranquilizar al Señor Alcalde con palabras de aliento.

En la ciudad:

Un joven de cabellera naranja caminaba tranquilo mientras observaba detalladamente su entorno...

En ese momento volteó y vio a un hombre comprando un pan casero, este notó que el hombre no encontraba su billetera y había dejado el pan en brazos de una nenita de aproximadamente 5 o 6 años.

-<Está es mi oportunidad>- Pensó y en un movimiento rápido le arrebato el pan a la niña dejándola provocando que la pequeña cayera al suelo y comenzará a llorar, el padre de la niña reaccionó rápidamente y le lanzó un ladrillo al joven, quien lo esquivo sin dificultad, escapando como el mejor.

Por otro lado, un jovencito con una despeinada pero hermosa cabellera rubia, ojos azules y un rostro decorado con pecas dando un semblante tierno, caminaba por las calles tarareando y pegando saltitos de vez en cuando, pues el verano se vuelve cada vez más caliente y tener su mente dispersa le ayuda a no sufrir tanto.

Se preguntarán ¿Cómo un trio de niños adolescentes pasaran el verano comiendo cartón y cubriéndose con cajas? Bueno nuestro amado rubio se lo pregunta también ahora mismo.

-< ¿Qué voy a hacer? >- Llorando por dentro e intentando pensar en otra cosa.

Más tarde:

Adentrándonos en el bosque, en una zona profunda, cercana al museo abandonado, donde el ser más malvado en la historia de la humanidad fue sellado por el reconocido Profesor Kenae y su trio de heroínas "The Chaki-Chaki Girls X".

Un viento sofocante paseaba las verdes hojas de verano... Mientras se escuchaba en crujir de los duros yuyos a causa del caminar de un jovencito con cabellera entre el azul oscuro, un violeta oscuro y el negro, ojos verdes oscuro bosque y un tono de piel prácticamente pálido. Este se detuvo en la puerta del museo, sintiéndose casi al borde de un golpe de calor mostraba preocupación...

-<Brick quedó devastado desde que aquella explosión nos derrumbó el escondite, nos costó tanto armarlo para que en cuestión de segundos sea simplemente un recuerdo>- Suspiró con pesadez mientras que a la vez disfrutaba de la sombra que brinda el bosque.

-¿Buscas algo?- Preguntó un anciano algo encorvado, con una escoba y una cubeta en manos.

-¿Ehh? No- Respondió el joven metiendo sus manos en los bolsillos mientras buscaba con la mirada una dirección a la que ir.

-¿No quieres ayudarme con la limpieza?- Preguntó el viejito mientras abría la puerta del museo.

-¿Qué? ¿Perdona? Creo que la edad le afectó anciano ¿No sabe quién soy yo?- Preguntó con ironía el joven mostrándose hasta sorprendido.

-No lo sé, ¿Alguien que valora el arte?- Preguntó el anciano entrando al museo.

-¡No! ¡Si! Bueno tal vez... Pero...- Quedo confuso el joven por lo confiado que es el anciano, una persona normal ya le habría lanzado unas cuantas rocas y lo hubiera insultado de arriba abajo por ladrón.

-Vamos jovencito este edificio no se limpiará solo, necesito piernas y brazos jóvenes para dejar este museo en condiciones, más ahora que se viene el verano y el calor arruina las pinturas más antiguas- Aclaró entusiasmado el anciano ya con las puertas abiertas.

-¿Por qué cree que lo ayudaré?- Preguntó el joven ya sin saber si correr o hablar.

-Porque no eres ningún sonso, tu cara de heladera ya me lo dijo todo, si tú me ayudas a limpiar este antiguo museo yo te entregaré la llave de una bien cuidada cabaña donde podrás pasar el verano y todos los años que quieras ¿Trato?- Puso cartas en el asunto el anciano con una mirada victoriosa.

Ante la oferta del Anciano nuestro querido RRBZ verde quedó en la nebulosa procesando los datos, recordando la tristeza de Brick por perder el escondite y que realmente necesitan un hogar para no tener que estar en la casa de Mojo Jojo.

-¿Por qué me ofrece esto? Yo podría asaltarlo y simplemente quitarle la llave, dinero y hasta su ropa si lo requiero- Se mostró confuso el joven, pero con malicia.

-No traigo dinero, la llave la deje en casa y bueno, lo de la ropa no tiene sentido, comprende es el peor conjunto que tengo y me lo puse para trabajar- Respondió el anciano de manera algo burlesca pero clara.

-Usted sabe mucho sobre el chantaje ¿No? Además, con lo que me dijo me deja en claro que si me conoce o por lo menos ha oído hablar sobre mí... Ashh de verdad no sé por qué estoy hablando con usted, viejo decrepito- Se golpeó la frente con la palma de su mano con cara de fastidio.

-¿No asaltaras a un pobre anciano? ¿Verdad? ¿Tomas la oferta o la dejas?- Hizo varias preguntas el anciano sonriente.

-Yo no debería...- Murmuró indeciso el joven.

-Chico ¿Cómo te llamas?- Volvió a hacer preguntas el anciano ya cansándose de negociar.

-Mi nombre es Butch...- Respondió aun sintiéndose indeciso.

-¡Vamos! Ya decide- Lo apuró ya que esperar a que el joven Butch se decida se torna largo.

-¡Esta bien! ¡Lo haré! Pero escúcheme bien, si llega a ser mentira lo de la llave y la cabaña ¡Será a ti a quien encuentren muerto entre en alguna cueva!- Advirtió Butch bastante serio y con cierto enojo.

-Gracias por la advertencia ahora limpia chico- Le entregó la escoba y la cubeta a Butch.

-¿Tú que harás?- Preguntó Butch sintiéndose estafado.

-Yo te iré dando instrucciones- Respondió el Anciano sin quitar su sonrisa.

-¿Pretende que ordene todo el museo yo solo?- Preguntó viendo enorme el edificio.

-Seguro, con tu juventud y mis instrucciones este hermoso museo volverá a brillar- Afirmó el Anciano.

-¿Pretende que haga brillar este museo viejo y abandonado en un día?- Preguntó Butch sintiéndose pequeño a comparación a tan antiguas estructuras.

-Naaaa, no vine chupado, tenemos todo el mes para dejarlo reluciente- Respondió el anciano.

-Querrás decir que tengo lo que queda del mes para limpiar esta choza- Corrigió Butch con tono de queja.

-La vida no es gratis jovencito, además... ¡Esta preciosidad no es una choza!- Corrigió la corrección (opinión) del joven Butch.

-<No puedo creer lo que voy a hacer>- Pensó Butch para sus adentros... -Gracias- Dijo poniéndose rojo por la vergüenza... -<Para un villano esto es humillante>- Refunfuñó para sus adentros bastante avergonzado.

Y así fue como comenzó la limpieza. El Anciano le colocó un importante delantal, le entregó una escoba y comenzó la lucha de Butch contra las telas de arañas y las mismas arañas, alacranes, cucarachas, serpientes, una vez haber vencido la guerra contra todo tipo de insecto, bicho y hasta algún que otro animal que se refugió dentro del museo, comenzó el momento de sacar los sillones, sillas, cortinas, telones, banquitos, cintas, pinturas abandonadas, manteles, almohadones, objetos frágiles como vasos y antigüedades, hasta que llegó el momento de sacarle el polvo a los cuadros sin arruinarlos, ósea con extremo cuidado.

-¡Frota el algodón con más cuidado!- Lo regañó el Anciano.

-Si- Respondió en seco Butch.

Ya habiendo estado como unas 5 horas limpiando comenzó a oscurecer y Butch ya empezaba a agradecer que el sol no le dé por el sofoco de tanto esfuerzo. Descubriendo que no le gustan los alacranes ni las serpientes, que se asquea, pero no por eso le teme a las arañas y cucarachas y que el olor a abandono apesta. Limpiar es más agotador que intentar razonar con Brick y... Que nada es gratis en esta vida.

-<Estoy seguro de que tanto Brick como Boomer se reirán de mí, pensarán que mi "maldad" es de boca para afuera y tal vez tengan razón... La verdad es que no me gusta ni el calor ni el frío... Sólo por eso hago esto... No quiero pasar ni calor ni frío... Tendré de dejar de preocuparme por mi dignidad y dejar pasar las burlas... Naaa los obligaré a callar>- Pensaba Butch mientras cumplía con su parte del trato.

-¡Bien! acompáñame pequeño- Salió del museo y comenzó a adentrarse en el bosque.

-¿Qué? ¿Cómo?- Agarró su chamarra y comenzó a seguir al Anciano.

Caminaron hasta poder observar una cabaña a lo lejos...

-Aquí tienes, gracias por el esfuerzo, te recomiendo que te des un buen baño y busques a tus hermanos, "Por la noche los ratones juegan"- Aconsejó el anciano entregándole la llave de la cabaña.

-< Pero ¿¡Qué!? Eso no es un dicho ¡¡Esta mal dicho!! >- Reaccionó con rechazo Butch.

-¿No era que no traía la llave con usted?- Preguntó Butch mientras recibía la llave.

-Jajaja si te decía que "si", no hubieras trabajado- Respondió el Anciano.

-¿Y no que me necesitaría lo que queda del mes?- Preguntó Butch.

-¿El resto del mes? Naaa un amigo me ayudará, le dije que no viniera hoy porque un pajarito me contó que te tendría disponible, además mientras más presión te echaba mejor trabajabas así que fue una táctica para motivarte, bueno tengo que cerrar el museo, nos vemos chico.- Se despidió el Anciano.

En ese momento Butch se quedó pensativo, ¿Tanta pena da para que un Anciano fanático de las obras antiguas se compadeciera? El Anciano parecía perdido en el pasado, pero realmente tenía muy clara su situación... Cuando Butch volteó para saludar... Ya no había nadie.

.

.

.

Continuará:

Mi respeto y admiración a los autores de estas dos imágenes que usé en el inicio de este capítulo.

Actualizado 14-04-22

Actualizado 29-04-23

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top