Finalmente vuelve Klapollo!! :D contiene lemon. Espero que te guste!!!

3 de diciembre, 9:26 pm
Casa de Apollo Justice.

Uf, que cansancio....uh...¿dónde estoy?
Levanté la cabeza solo para ver qué efectivamente, me había dormido en la mesa. ¿Es en serio?
Mire el reloj solo para ver qué casi eran las 9:30, no es muy tarde. Supongo que cae dormido mientras revisaba este caso. No es nada del otro mundo, pero no he dormido muy bien estos días. ¿La razón? Digamos que cierto fiscal no deja de desvelarme, vale que él está acostumbrado a la vida nocturna pero ¿porqué me debe arrastrar con él?

Todavía recuerdo como vino esta tarde diciendo que deberíamos quedar para comer, y en eso se entretuvo toda mi tarde. Normal que esté tan cansado.

–Buenos días bella durmiente–dijo una voz detrás mío.

Voltee y sentado en mi sillón, ahí estaba Klavier Gavín, se estaba secando el cabello. Traía su traje magenta algo arrugada y la camisa semi abierta donde... ¡¡¿porqué estoy pensando así de el?!!

–¿Cuanto tiempo llevas aquí?–le dije.

–Toda la tarde tú me invitaste ¿recuerdas?

–¿En serio? Mierda, no bebi ¿verdad?

–Lo peor de todo es que no bebiste y aún así, te quedaste desmayado.

–Mierda, sabía que salir contigo era mala idea.

–Estás cansado por el trabajo así que no me eches la culpa a mí.

–Supongo, este caso es muy largo para lo simple que es.

–¿Quién será el fiscal?

–Miles Edgeworth, por lo que todo debe estar perfecto en el juicio.

–¿Y porqué no le pides ayuda al señor Wright?

–Es una buena oportunidad para demostrar lo que valgo, yo puedo hacerlo!

–Entonces no te quejes que es mucho trabajo.

–No me quejaría tanto pero tú sigues aquí distrayendome.

En eso Klavier tomo mi barbilla e hizo que le mirada a los ojos. Con una sonrisa pícara en sus labios me dijo de forma seductora.

–¿Te distraigo Señor Frente?

Mi rostro se puso más rojo que mi traje. Aparte inmediatamente a Gavín y me tape el rostro enrojecido.

–¿Qué dices? No seas idiota.

–Bueno vale, tampoco me digas mis verdades ¿porque no tomas un descanso?

–Ya tome uno bastante largo con la siesta.

–Hablo en serio Señor Frente, un poco de aire fresco te vendrá bien.

–Bueno, supongo que tienes razón.

Me levanté y en eso vi que Klavier también se levantó.

–¿Me vas a acompañar?–pregunte.

–Obvio, un príncipe siempre acompaña a su princesa.

–¡¡No s-soy una princesa¡¡

–En serio, yo ya te imagino con un vestido y tiara.

–¡¡¡Klavier!!!!

–jejeje, hablo en serio, te acompañaré.

–Como s-sea....

Salimos de ahi, era plena noche. Pero era una noche bonita. Despejada y con las estrellas brillando alegremente. ¿Las noches siempre fueron así?

–¿A dónde quieres ir?-dijo Klavier.

–Sólo a caminar por ahí, es una linda noche.

–Tus deseos son órdenes princesa.

–¡Klavier, ya cállate!

Empezamos a caminar, terminamos en un parque muy iluminado. No nos detuvimos en ningún momento, además de que veníamos callados. Pero no era un silencio incómodo, era agradable e incluso lindo.

Sentí como Klavier tomaba mi mano, yo la aparte.

–¿Qué pasa?–me preguntó.

–¿Qué haces?

–¿No le puedo tomar mi mano a mi pareja?

–No s-somos una pareja.

–Señor Frente....

–Todavía no hemos llegado tan l-lejos.

–Apollo, estás bromeando ¿verdad?

–¿Porqué crees eso?

Klavier se detuvo, dió un suspiro cansado, ¿se habrá enfadado? Sólo fui sincero, es decir, no diría que es un amigo pero tampoco sé si ya estamos en una relación seria. Es todo muy confuso.

–¿Qué tal si nos sentamos?–me dijo con su típica sonrisa.

Nos sentamos en una banca. No había nadie ya que estaba todo muy oscuro.

–¿Qué pasa Klavier?

–Apollo ¿qué soy para ti?

–¿Eh?

¿A qué viene eso?!!! Son de esas preguntas que no se hacen.
Pero no podía quedarme callado, ¿qué le digo?
Vale, seré sincero y lo que Dios quiera.

–Eres muy especial para mí, sin ti, es posible que mi vida sea muy distinta incluso aburrida.

–Ajá ¿qué más?

–¿Qué más?!

–¿Sólo hago tu vida divertida?–Ahora era él quien se comporta como la princesa.

–Si y.. adoro tu compañía y...tu personalidad...sin hablar de tu físico...

Sonreía triunfante, es como una diva a la que hay que decirle que es guapa. Se acercó y me tomo la barbilla.

–Entonces, ¿porqué sigues fingiendo que no somos nada?

–¡¡Yo no fingo!!

–Los amigos no se dicen este tipo de cosas.

–Si per...

–Los amigos no se besan y salen a citas.

–Yo...

–Los amigos no se dicen que se aman.

–Yo no he....

–Apollo, te amo.–Klavier era bueno para incomodar.

Sentí como mis pulmones exigían oxigeno. Por unos segundos olvide respirar. No podía hablar, no había palabras que expresan lo que siento. Es muy cálido, como un fuego suave que apenas roza la piel. Es muy bello.

–Apollo, deja de hacerte el inocente–me dijo con tranquilidad–tú tambien me amas lo sé.

Deje que me besará, seguía en shock pero igual le correspondí el beso. Era un parque pero no me importa que nos vean. Con Klavier no tenía que preocuparme de nada.
El beso se profundizó más, abre mi boca y el no dudó en explorar con su lengua.
Era de hora de dejar de actuar como niños.

Me acarició la espalda y su lengua paso a mi cuello. Gemi por el tacto pero no opuso resistencia. Mi cuerpo exigía más de esos toques. Klavier se percató de eso.

–Señor Frente, es usted un pervertido.

–¿Cómo?

–Apenas te toco y ¿ya estás así?–dijo mientras apuntaba lo que sería mi entrepierna. Qué vergüenza!

–Yo...n-no...no es...

–Señor Frente–me tocó mi mejilla–¿así que ya quieres hacer cosas de adultos?

–...Klavier...yo...

–Si es así no hay nada de malo-–me sonríe–ha decir verdad, yo también deseo esto.

Se levanta y me toma de la mano. Se a donde nos dirigimos así que sacó la llave de mi bolsillo.
Llegamos a mi casa, abro la puerta y lo primero que pasa es un nuevo beso por parte de Klavier.
Nos vamos a mi habitación tropezando y chocando con todo. Pero cuando llegamos caímos en mi cama donde los besos continúan.
También las caricias aumentan de nivel.

Se pone encima mío y devora mi cuello. Aquí si puedo soltar todos los gemidos del mundo. Sus manos exploran mi pecho y veo como me quita la corbata y el chaleco.

–Mi princesa, no necesitas todos estos vestidos....

–No me llames así.

–¿Sabes? Creo que ese será tu nuevo apodo princesa.

–Eres un imbécil como siempre.–No pude evitar sonreír.

Me desnuda la parte de arriba. Yo no me quiero quedar atrás así que le voy quitando la chaqueta. Cuando le retiró la camisa y veo su pecho bronceado siento que me desmayo.
El me sonríe como diciendo "Te gusta lo que ves?" Es un presumido pero al menos es MI presumido. Y aunque soy un marica, soy SU marica.

Klavier se quita los pantalones y me baja el cierre del pantalón con los dientes. Sentir su aliento ahí abajo me estremece.

–Bueno mi princesa ¿puedo?

–No hace falta que lo preguntes, seria estúpido si no lo hicieras.

Me baja los pantalones junto con la ropa interior. Cierro los ojos de la vergüenza. Nunca había estado así con alguien.
Siento sus hábiles manos en mi rostro.

–Apollo, no hace falta que te avergüenzes.

Los abro un poco para verlo, me doy cuenta de que también está desnudo.
Su sonrisa siempre me tranquiliza, me da seguridad y la fuerza que necesito.

–Klavier, dar este paso contigo...

–¿También es de amigos?

–Idiota, como siempre, arruinas el momento.

–Jejeje a mí también me emociona dar este paso contigo.

Sonrió y le acaricio su bonito cabello rubio. Para nada comparado a mis cuernos. Según el, son lindos.
Se mete 2 dedos en su boca y los introduce en mi entrada. Cómo era de esperar, me dolió, me moví bruscamente.

–Aarggg!!!

–Duele lo sé, se te pasará.

–Lo sé... sólo...no seas muy brusco...

Una vez me acostumbro al par de dígitos, los mueve de adentra hacia afuera una y otra vez. Lo hace para prepararme, sinceramente no le veo sentido pues el miembro de Klavier no es del mismo tamaño que sus dedos. Pero debo admitir que se siente bien.

Una vez ya terminado. Se acomoda encima mío, me besa y me toma de la mano.

–¿Listo?

–Si.

Siento como mi interior es complementado. Ahogo un grito y cierro los ojos. Abro mis piernas como sea pero la sensación es la misma. Pero no es doloroso ni horrible como suele ser la primera vez.
Es muy placentero, suelto gemidos que se oyen por toda la casa. Abro mis ojos para ver la cara de excitación de Klavier.

–Apollo...me movere...

–Si, házlo.

Toma mis piernas y se mueve metiendo y sacando. Mi cuerpo y el suyo reaccionan de la mejor forma. Un placer mutuo impresionante. Gritó, exigo mas y gimo su nombre.
Es una faceta que hasta yo desconocía.

El también gime mi nombre, y se mueve muy rápido, tanto que no soy capaz de seguirle el ritmo.
Su cara está sonrojada pero no deja de mirarme. Me sonríe y yo se la devuelvo.
Nos besamos mientras vamos a máxima velocidad. Los sonidos que hacíamos eran muy a la imaginación.
Estábamos al límite pero queríamos más. Por unos segundos pensé que nos desmayariamos pero resistimos hasta el final.

–Apollo...me voy a venir...

–Yo... igual... juntos Klavier...

Las últimas embestidas fueron las más crueles y ambos gritamos cuando nuestros cuerpos expulsaron todo.
Sentí mi entrada llenarse con algo muy tibio y vi que le manche el abdomen a Klavier.
Caímos rendidos y nos tapamos con una cobija.

–Entonces, somos una pareja–dije con cansancio.

–Así es–No tardó nada en responder.

Puse mi cabeza en su pecho y dije con timidez.

–Te amo Klavier.

-Jejeje yo igual princesa.

Qué apodo tan molesto.
Cómo dije, es un idiota y un presumido.
Y aún así, es la persona que me hace olvidar de todo y simplemente perder la noción del tiempo.
La inocencia es vital entre nosotros.

Fin.

Hace mucho que no escribía de Ace Attorney XD posiblemente escriba un Phoenix x Edgeworth.

Gracias por leer!!!
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