XXII

Quiero ver sus manos comentando y votando, si no creeré que estaban haciendo otras cosas, jeje

Escena de Marvin y Kennie

¿Están listos para lo que viene? Probablemente seré un poco gráfico, pero deben ser discretos, este es un secreto entre nosotros.

Tomo los documentos que se encuentran frente a mí, hago como que los reviso minuciosamente, escucho los tacones comenzar a resonar, el libreto decía que no podía poner reparo en ella hasta que lanzara el café sobre mí. Se acerca al escritorio y coloca con manos temblorosas la bandeja. Comienza a colocar las piezas una por una dejando al final la taza con café.

Aquí tengo un dato curioso, la taza solo contiene agua con un poco de colorante, no es café realmente. Y como ya se habrán dado cuenta, la sirvienta usa zapatillas ¿Por qué en cualquier profesión se usan tacones? Eso es algo importante, llaman la atención masculina, no hay hombre que se resista a un par de piernas en tacones y si llevan medias mucho mejor.

En cuanto saca la taza de la bandeja, la suelta de forma inmediata haciendo que caiga una parte en el escritorio y otra parte en mi pantalón.

Me levanto de golpe, aventando la silla al suelo por la fuerza con la que me levante. Ella se vuelve todo temblores tratando de limpiarme, lleva el paño a mi entrepierna y presiona, mi cuerpo reacciona inmediatamente, siento como la polla se hincha y se pone dura. Ella dentro de su papel se aleja asustada e intenta huir.

Aquí viene, tengo que hacerlo ver natural.

La tomo del cabello y la atraigo presionándola entre el escritorio y mi entrepierna— No vas a irte hasta que soluciones este desastre— Gruño contra su oído lo suficientemente fuerte para que se escuche en el micrófono, pero que no parezca que estoy gritando— Dime si te estoy lastimando— Murmuro solo para que solo ella me escuche.

Ella asiente disimuladamente, aún con su cara de miedo.

La suelto lanzándola al piso, ella se levanta fingiendo limpiar el escritorio, es momento de salir de cuadro para cambiarme el pantalón y ella comience con lo suyo.

Me paro detrás de las cámaras mientras las chicas de vestuario me tienden un nuevo pantalón, me desvisto frente a todos, no es como si en unos minutos no me vayan a ver como cuando nací mientras me follo a una mujer. Me coloco el pantalón de forma rápida, me ayudan acomodándome la camisa dentro del pantalón. Espero paciente.

Ella lanza una mirada hacia la salida después de ''limpiar'' el desorden, muerde su labio de forma coqueta, avanza sentándose en mi silla y suspira soltando un pequeño gemido. Toma la manga de mi saco en inhala, vuelve a gemir y lleva su mano a su pecho apretándolo sobre la tela.

Todo el mundo se encuentra atento a lo que hará ahora, porque es claro que todos saben lo que se viene.

Deben saber que a pesar de que están trabajando los muy hijos de perra disfrutan ver esto, son voyeristas de closet.

Kennie mira nerviosa hacia la entrada, entonces se levanta y baja sus bragas en forma de tanga y las mete en el cajón del escritorio. Se abre de piernas dejando su coño expuesto, coloca los pies en tacones en los antebrazos de la silla, lleva su mano a su coño y lo recorre de arriba hacia abajo soltando pequeños suspiros satisfactorios, con su otra mano aprieta su seno izquierdo mientras cierra los ojos y continúa gimiendo.

David me toca la espalda dándome la señal, es mi momento de volver al plato. Respiro profundamente, no me odien porque voy a comportarme como un hijo de puta y no crean que soy así.

Una de las cámaras se acerca en mi dirección, ve el recorrido que hago de la puerta hacía casi llegar al escritorio donde me detengo, ella sigue con los ojos cerrados por lo que no debe darse cuenta de que estoy aquí de pie.

Sigue tocándose animadamente, suelta pequeños gemidos y llevo mi mano a mi polla, sacándola de mi pantalón, sé que hay una cámara enfocándome y tengo que parecer realmente muy, muy excitado.

Comienzo a pajearme, lento y tortuoso, esto es lo que le gusta al público, poder ver todo con detalle, entre más detalle vean, más visitas tenemos.

Kennie sigue gimiendo con sus dedos en el interior de su coño, aumenta la velocidad de sus embestidas, hasta que termina lanzando un largo gemido. Abre los ojos y repara en mí, tengo la polla en la mano y le lanzo una mirada cargada de lujuría.

Se levanta rápidamente arreglando su ropa— Alteza, yo...

Suelto una risa y niego con la cabeza mientras me acerco lentamente a ella, me detengo en cuanto llego a donde está de pie y acerco mi rostro al suyo

—¿Te encanta tocarte pensando en mí?— Susurro contra su rostro— ¿Crees que no sé que te la pasas espiándome?

Tomo su cabello en un puño e inclino su cabeza dejándome acceso directo a su cuello, comienzo a besarle, morderle y lamer el cuello, así es como le gusta al público, crudo y violento. Ella comienza a forcejear, trata de empujarme, pero no la suelto. Llevo mi mano libre hacía su cuello ejerciendo un poco de presión, Kennie sabe que si siente que es demasiado solo debe tocarme el codo y me detendré.

—Encárgate de lo que ocasionaste— La impulso al piso y ella cae de rodillas frente a mí.

Acaricio su rostro con mi miembro, lo paso por sus mejillas y la coloco sobre sus labios, abre la boca ansiosa de engullirme, tomo un puño de su cabello y ladeo el rostro, le indico que debe abrir los labios y me voy introduciendo dentro de ella.

Cierro los ojos y respiro profundamente, no ayuda el que sea rubia. Mi mente comienza a maquinar escenas no propias para público sensible con nada mas y nada menos que Kitty.

No lo hagas, hijo de puta.

Concentrate

Comienzo a repetirme, una y otra vez.

Comienzo un vaivén rápido dentro de su boca, adentro y afuera, chocando contra su garganta más de una vez, causando que lágrimas resbalen por su rostro, tiene que ser crudo, esto es lo que más vende.

Veo por el rabillo del ojo la señal de David, el sexo oral ha terminado y hay que pasar al siguiente paso. Saco mi polla de su boca y con la misma mano que tenía su cabello la alzo, tratando de no lastimarla. La llevo hacia el escritorio y la coloco con el pecho sobre el mismo, alzo la falda de su uniforme y me hinco detrás de ella, quedando de frente a su coño.

No puedo quedar justo frente a ella, la cámara tiene que obtener una vista perfecta de su coño, por lo que me posiciono casi de frente, dejando un espacio en el que pueda colocarse el camarógrafo.

Llevo mis dedos a su entrada, hago círculos en el exterior. Aun no está excitada y no me gusta trabajar así, necesito que ella esté cómoda y eso significa que debo excitarla.

La mayoría de las actrices durante los videos no sufren ni siquiera un orgasmo real, por eso mi compromiso siempre va a ser que ellas obtengan, aunque sea uno, que las ayude desinhibirse y soltarse un poco, logrando que el rodaje sea más tranquilo para ambos, todo depende de cada uno, yo me preocupo por el placer de mi compañera, pero hay otros actores hijos de perra que solo se preocupan por sí mismos.

Estúpidos

No hay nada mejor que hacer que parezca real.

Jodidamente increíble

Con mi dedo índice y medio comienzo a hacer movimientos circulares en su entrada, comienzo un movimiento de arriba a abajo desde su clítoris hasta su entrada, pequeños toques sobre su botón también se hacen presentes, todo lo hago de forma sutil, pero tiene que verse intenso. Puedo ver como su cuerpo comienza a reaccionar, el ligero movimiento del abdomen bajo y el sonrojo inmediato de su zona.

Este era el momento en el que lo actuado se convertía en algo más.

La oí soltar un suspiro, comienza a hacer presencia la humedad en su zona, por lo que introduzco un poco los dedos y salen brillosos debido a sus jugos.

Perfecto

Comienzo a esparcirlos por todo su coño, causando que se encuentre brilloso. Escucho cuando suelta un pequeño gemido, una sonrisa adorna mi rostro, quiere pedir más pero el libreto no la deja hacerlo.

—Por favor— Susurra sin aliento

Me levanto y tomo mi miembro con la mano, tendremos que saltarnos el sexo oral e irnos directos a la acción.

Paso mi polla a lo largo de su coño, lo restriego contra su clítoris y puedo verla morderse el labio.

—Voy a follarte hasta hacerte gritar— Suelto en tono duro— Y no tienes permitido quejarte porque soy el jodido príncipe y tu una simple sirvienta

Ella se queda muda justo como lo indica el guion. Me introduzco en ella de golpe, esto debería dolerle, pero debido a la cantidad de fluidos que estaba produciendo solo debió causarle una ligera molestia. Ella suelta un sonido ahogado debido a la intromisión, hay ciertos sonidos que no pueden contenerse y me siento complacido debido a ello.

Llevo una de mis manos a su cabello y lo tomo en un puño en mi mano, aprieto su cadera para que se levante sin necesidad de jalarla, se incorpora sutilmente pegando su espalda a mi pecho, debe parecer como que la levante jalando del cabello, pero no es así. Llevo mi brazo libre debajo de sus pechos sujetándola para darle soporte, suelto su cabello y llevo mi mano a su cuello, acerco mi rostro a su oído y susurro

—¿Estás lista?— Ella me dirige un asentimiento ligero— Dime cuando sea demasiado

No voy a ser arrogante, pero puede ser difícil soportar un tamaño como el mío. No voy a decir que soy un caballo porque es imposible, pero tengo algunos centímetros más que la media.

Comienzo a embestirla de forma rápida, no puede ser suave, tiene que verse salvaje como si fuéramos desconocidos, como si no me interesara en absoluto, porque en las recónditas mentes de la mayoría de los hombres esto es lo que les gusta, follar a las mujeres de forma salvaje.

Por esa razón ven porno.

El único ruido en el set son nuestras respiraciones agitadas, la fricción de nuestra ropa, los gemidos de ambos y el chapoteo que ocasiona ante cada estocada.

Comienza a soltar cortos grititos con cada embestida, quito mi brazo de su abdomen y la llevo a su cadera, ayudándole a impulsar las embestidas contra mí, cambio mi mano de su cuello a su pecho, jalo la blusa del uniforme abriéndola y lanzando botones por todos lados, así tengo acceso directo a su pecho libre de sostén, pellizco entre mis dedos su pezón y suelta un grito. Paso mi boca por su hombro que ha quedado descubierto por la ruptura de la blusa, regando besos y dando lametones saboreando su piel, que comienza a cubrirse con una ligera capa de sudor.

—Alteza más— Dice entre gemidos, aun no es momento de cambiar posición por lo que sigo embistiéndola de la misma manera— DIOS SI

Lleva su mano hacia mano que se encuentra en su cadera y aprieta, está cerca pero todavía no puede hacerlo. David se percata y hace señas para que cambiemos a la siguiente escena. Salgo de su interior y llevo mi mano a la parte posterior de su cuello, inclinándola contra el escritorio. Alzo su pierna izquierda y la flexiono subiéndola sobre el mismo, dejándola más abierta.

—¿Así es cómo te gusta pequeña Zorra?— Gruño mientras doy un azote contra su trasero tornándolo rojo, lo aprieto para después volverlo a azotar— Te encanta que el príncipe folle tu coño

—Joder si— Suelta mientras empina más su trasero— Follame ya

Lamo mis tres dedos centrales y los llevo a su coño, no fue necesario después de todo estaba chorreando, realizo movimientos circulares en su clítoris y ella comienza a gemir más alto, está sufriendo tratando de contener lo que está a nada de suceder.

Me introduzco lento en ella, tiene los puños apretados y los ojos cerrados, está tratando contenerse con todas sus fuerzas. Su labio entre sus dientes es la prueba ferviente de ello.

—Carajo— Susurra sin aliento con cada penetración

Sus palabras se alternan entre maldiciones y gemidos altos cada vez que me introduzco en ella, parte de su cabello está cubriendo su rostro, por lo que lo quito para que la cámara capte su cara de placer, tiene la boca abierta y los ojos entrecerrados.

Comienzo a aumentar la velocidad de las embestidas, causando que los gemidos comiencen a verse entre lo natural y lo exagerados, entre más ruidos más visitas.

Sus paredes internas comienzan a apretarme cada vez más, todos en el set están esperando a que suceda.

—Por favor— Kennie lo repite una y otra vez, entre susurros y gemidos.

El color rojo ha adornado su rostro, está tan sonrojada. Puedo sentir sus latidos a lo largo de mi polla, su corazón está latiendo tan rápido que temo que algo le suceda. Trato de respirar, tratando que esto dure solo un poco más.

—¿Quieres correrte?— Susurro sin aliento, ella asiente entre lloriqueos. Me recuesto sobre ella sin dejar de embestirla, lamo su oreja y ella suelta un gemido— Dámelo entonces

La presión en mis testículos es insoportable, comienzan a dolerme de tanto contenerme.

Se deja ir con un grito largo, sus piernas comienzan a temblar y ella se mueve descontroladamente, las lagrimas corren por su rostro y yo me vacío en su interior, me invade una sensación de alivio en todo el cuerpo y me dejo caer sobre ella totalmente. Recargo mi frente en su espalda e intento que el oxigeno entre a mis pulmones. Ella sigue quejándose y sus paredes siguen contrayéndose.

Misión cumplida

Salgo de su interior y la mezcla de sus fluidos y mi semen comienza a caer contra el piso y a resbalar por sus muslos. Paso mi mano por su coño y los esparzo por toda su entrepierna. Me incorporo y le doy una palmada en el culo que la hace respingar.

—Terminamos— Suelta David cortando la grabación

Kennie sigue sobre el escritorio respirando rápidamente con el uniforme mal colocado y el cabello revuelto. Guardo mi polla en mis calzoncillos sin cerrarme el pantalón.

Las chicas de vestuario se acercan, mi camisa está pegada a mi torso debido al sudor y comienzan a quitármela— ¿Estás bien?— Susurra Susy mientras desabotona mi camisa

Asiento, estoy frito y no sé porque

—Kennie— La llamo, sigue sobre el escritorio mientras Lola coloca una bata sobre ella

—Te odio— Su voz es baja y suelto una carcajada— Siento que me voy a morir, si me muevo me caigo

Susy me tiende una toalla, me seco el rostro y el torso, me acerco a donde sigue Kennie recostada.

—Tienes que cambiarte y limpiarte— Lola está susurrándole a Kennie mientras acaricia su espalda

—Voy a caminar como Bambi cuando recién nació

—No seas exagerada— Suelto en tono de broma, se incorpora un poco y me mira con el ceño fruncido

—No fue a ti a quien te metieron 30 centímetros

—Oye esa es una exageración— Ese tamaño debe ser antinatural— Son solo 21 centímetros, relájate un poco

—Me duele todo Marvin— Se incorpora poniéndose de pie y siguen saliendo restos de fluidos cayendo al piso— Upsi

Se acerca a pasos temblorosos hasta quedar frente a mí, se recuesta contra mí soltando un suspiro— ¿Estás bien Kennie?

—No— M dirige una sonrisa— Creo que me acabo de enamorar de ti ¿Dónde aprendiste eso?

Suelto una carcajada con ganas— Es experiencia detrás de tantos años

—Cuando te cases tu esposa será la mujer más envidiada del mundo— Se acerca a mi rostro y besa mis labios— Hay que repetir después

Me da la espalda y Lola la envuelve en la toalla. Niego con la cabeza

—Nos tenias a todos encantados— Susurra David— La pobre Kennie apenas y se puede mover

—Solo hacia mi trabajo— Palmeo su hombro

—¿Cómo lo haces?

—¿El qué?

—Follar a otras mujeres, gustándote alguien más— Frunzo el ceño

¿A que viene esto?

Realmente me gusta Kitty pero estoy separando mi trabajo de mi vida privada, y lo estaba haciendo bien hasta que lo preguntó

—No sé como me siento, digo estoy haciendo mi trabajo pero ahora siento una acidez en el estómago

—Lo siento

—Son cosas diferentes, por estas mujeres solo comparto una relación sexual sin sentimiento y con Kitty es más algo sentimental— Me encojo de hombros— No creo que sea algo que se pueda comparar

—Supongo que tienes razón— Mira hacia el fondo y puedo adivinar a quien ve— Ve a casa Marvin, y descansa

Se va dejándome de pie con la duda carcomiéndome

¿En serio empiezo a sentir algo más por Kitty que solo atracción?

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Me estaban carcomiendo las ganas de subir este capitulo ya 

Disculpame @kimdgdo1121 pero ya no podía esperar más. ¡FELIZ CUMPLEAÑOS ADELANTADO! de parte mía y de Marvin.

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