-¿Ya tienes todo? Vamonos entonces- decía un pelirrojo a su amigo, hechandose la mochila al hombro. 

Un chico moreno de ojos grises y con ojeras, miraba algo sorprendido el interior de su casillero, había algo allí, que no estaba cuando había iniciado su jornada escolar.
-¿Que ocurre Law?- preguntaba el pelirrojo intentando mirar el casillero de su amigo, sin embargo, este lo había cerrado de golpe.
-¿Porque no te adelantas Kid? Te alcanzaré luego...- dijo el moreno mirando al pelirrojo.
Su amigo algo confuso, sólo se encogió de hombros y dejó al ojigris.
Law, espero a que su amigo estuviese lo suficientemente lejos para abrir otra vez a su casillero y sacar un sobre.
No había remitente, no había nada escrito en el sobre, y el muchacho miró a su alrededor como si esperara ver al dueño de esa carta, sin embargo no vio a nadie. En pasillo siguiente de donde estaba el ojigris, un joven tambien moreno de enormes y hermosos ojos negros,en el que llevaba una cicatriz del lado izquierdo, estaba de espalda a los casilleros, apoyado, oyendo ahora, solo unos ruidos metálicos, como si cerraran una pequeña puerta, y los latidos que golpeaban fuertemente su pecho.  

Vio pasar a al chico pelirojo, espero un momento y luego se fue.

El joven, en el otro pasillo seguía mirando curioso el sobre, y salio de su trance al oír un leve golpe metálico y un correteo presuroso, el joven caminó al pasillo contiguo donde no encontró a nadie, y pensó que solo había sido su imaginación, guardó el sobre en su mochila y dejo el recinto escolar en dirección a su casa, allí revisaría aquel misterioso sobre.

Mientras dejaré esta pequeña parte, luego lo continuaré por que es un fic en progreso en el cual no he podido avanzar lo suficiente como para que vea la luz, pues estoy actualmente enfrazcada en "Si, soy un Chico"  pero no creo que pase mucho para terminar este short.