6
Eras torpe y demasiado terca.
Eras adorable y sumamente hermosa.
También eras reservada, excesivamente reservada.
Pero... nunca te vi triste después de aquel día, Rose. Nunca. Siempre portabas una sonrisa en el rostro, una que mantenías todos los días, haciendo el esfuerzo de que parecieran de lo más sincera, a pesar de que fueran todo lo contrario.
«Eras tan imperfecta y llena de facetas por descubrir que para mí, no podía existir mayor perfección»
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top