"Sus ojos erán cafés pero cuando los mire, ví colores que incluso no existen"

Florida, Estados Unidos.

Despues de un intenso mes, se llega el día de la boda. Les tocó realizarla en Florida por que fue el único hotel de Jude que no tenía programado evento para la fecha de la boda.

En el cuarto de la novia...

Levy: Muy bien ahora solo falta colocarte el velo.

Se lo enganchó a su pelo con delicadeza, se alejó y sus ojos se iluminarón.

Levy: ¡Hermosa!

Erza: Lucy te ves increíble.

Ambas amigas con lágrimas en los ojos, abrazarón a Lucy.

Lucy: Me harán llorar y eso que este matrimonio no es real.

Levy: No lo podemos evitar es que te ves hermosa.

Alguien llamó a la puerta, Erza abrió, era Jude.

Jude: ¡Por Dios Lucy, te ves preciosa!

Su padre no contuvó su llanto y abrazó a su hija con tanto amor que Lucy se sintió mal de haber pasado el último mes con un humor de los mil demonios.

Lucy: Gracias papá.

Ella le dió un beso en la mejilla. Tenía más de dos años de no darle un beso y Jude sintió que su corazón no aguantaría con la felicidad.

Jeral: Ya están todos abajo esperando. Hace un hermoso día, fue una buena decisión hacer la boda en el jardín del hotel.

Erza: Levy como siempre haciendo las mejores decisiones para días especiales.

Levy: Lo sé, es un don innato en mí.

Lucy: ¿Día especial? Como si casarme sin amor fuera especial.

Erza: Lucy no empiezes por favor, bueno es mejor irnos ya, no hay que hacer esperar a los invitados.

En los Járdines del Hotel...

Igneel: ¿Nervioso?

Natsu: Para nada ¿porqué lo preguntas?

Igneel: No lo sé, es solo ganas de entablar una conversación; además ¿has visto a tu hermano?

Natsu: Tienes razón debería estar aquí.

A lo lejos una mujer de cabellos azules se acerca a ellos y los saluda con un abrazo.

Juvia: Natsu me alegra tanto por tí.

Natsu: Gracias aunque sabes que esto no es más que un negocio, mi estimada amiga.

Igneel: No lo digas tan a la lígera, Jude no quiere que nadie se entere de la "farza".

Juvia: Jajaja Natsu, solo espero disfrutes este año.

Natsu: Sí disfrutaré ser niñero... Ni modo, ¿has visto a Zeref?

Juvia: No creí que estaría a tu lado como padrino de bodas.

Igneel: Ya le marque al móvil pero nada.

Juvia: Iré a dar una vuelta alrededor tal vez lo encuentre.

Juvia se alejó, sin percatarse que alguién la seguía con la vista. Pasó unos 10 minutos, el abogado pidió a los pocos invitados que se colocarán en sus asientos.

Natsu: Padre ¿dónde está Zeref?

Igneel: No lo hemos encontrado, hay cuando lo vea lo castigaré como cuando eran pequeños.

Natsu: ¿Quién será mi padrino?

Igneel: Ya sé...

Inmediatamente se movió entre la gente y tomó a Juvia del brazo.

Igneel: Juvia lo será.

Natsu: ¿Juvia? Pero...

Juvia: Natsu no tenemos tiempo; además, estamos en los tiempos modernos, las mujeres podemos ser padrinos del novio.

Natsu: No tengo opción.

Juvia se colocó junto a Natsu y de pronto el abogado anunció.

Macao: ¡De pie, ahí viene la novia!

Las notas de la marcha nupcial, interpretadas por una pequeña orquesta, sonarón con tanto entusiasmo en el momento que Lucy se aproximaba al altar improvisado en el jardín.

Ella tenía un vestido estilo princesa, diseñado por Levy, y ante los ojos de Natsu le pareció una imagen tierna. Lucy tomada del brazo de su padre, él cual mostraba un rostro de genuina alegría; en tanto, Lucy parecía estar incomoda con todas esas miradas posadas en ella.

Natsu: Juvia... ¿Soy yo o Lucy se ve muy incomoda?

Juvia: Esta nerviosa, es entendible, este es el "día más especial" para una mujer pero que eso no te preocupe.

Natsu: Ahora siento que esto es un error.

Juvia: No te acobardes ahora, recuerda es por el bien de tu familia.

En ese momento Lucy llegó ante Natsu. Ella le dió un beso en la mejilla a su padre.

Jude: Te quiero mucho hija.

Lucy: Tambien te quiero papá.

Su voz denotaba decepción, se volteó hacia Natsu y le dedicó una sonrisa fugaz.

Natsu: Te ves muy linda Lucy.

Lucy: Gracias...

Sus ojos cafés estaban tristes, haciendo que Natsu se sintierá fatal por dentro por seguir con esa farza.

Macao: Estamos reunidos...

Las palabras del abogado eran distantes para ambos, entonces Natsu le tomó la mano con más fuerzas, como buscando fortaleza o queriendo trasmitirla a Lucy. Ella correspondió con la misma angustia.

Macao: Muy bien, ¿Natsu Dragneel aceptas a Lucy Heartfilia como tu legitima esposa?

El corazón de Natsu latía a mil y en ese momento volteó su rostro hacia Lucy, encontrandose con esos ojos cafés angustiados y su corazón se partió -¡Es por su bien!- apretó las manos de Lucy, dedicándole una sonrisa amplia y jovial, respondiendo con suma lentitud.

Natsu: Sí, acepto. Cuidaré bien de tí, manzanita.

Cuando dijo esas palabras, los invitados se enternecierón por la dulzura con que hablo. Mientrás Lucy se quedó sorprendida por decirle manzanita y sabía que se refería a su mal humor.

Lucy se sintió cobarde en ese momento, su corazón latía frenéticamente pero con las palabras de Natsu, se daba cuenta que ya no había vuelta atrás, ella no puede retractarse pero ¿qué pasaría si diría no? ¿su padre se molestará? No es tan relevante pero... La empresa Dragneel estaba prácticamente en sus manos por que su padre no dudaría en retirar el dinero y hundir el esfuerzo de una familia era muy cruel.

Macao: Lucy Heartfilia, ¿Acepta a Natsu Dragneel como esposo?

Las palabras salierón solas, sí el estaba dispuesto a seguir con la farza solo por un capricho de su padre, ella lo haría tambien, por que no tenía valor de hacer quedar mal a Natsu enfrente de todos los invitados y hundir a su empresa en la bancarota.

Lucy: Sí, acepto.

Macao: Ahora el intercambio de anillos.

Juvia le entregó el anillo de bodas a Natsu y Erza entregó a Lucy el anillo de bodas.

Macao: Ahora sí hay alguno de los presentes está en contra de esta unión, hable ahora o calle para siempre.

En la congregación nadie dijo nada.

Macao: Sí es así, los declaró marido y mujer. Puedes besar a la novia.

Acto seguido Natsu elevó el velo de Lucy sobre su cabeza, la agarró por los hombros y la besó. Lucy solo sostenía su ramo. El beso fue dulce y fugaz pero lo suficiente como para que Lucy experimentará una sensación de calidez.

Cálido, ese beso le había transmitido muchas cosas que tenía mucho de no experimentar pero principalmente ternura. Cuando Natsu posó sus labios sobre los de ella había mordido levemente su labio inferior, más le pareció caricia que mordida, eso hizo que abrierá un poco la boca permitiendolé a los labios de él que encajará perfectos en los de ella y como la cereza del pastel, él tomó su rostro con su mano derecha, acariciando su mejilla suavemente.

Luego de eso procedierón a la recepción, entre felicitaciones y saludos. Juvia se acercó a su mejor amigo.

Juvia: ¿Cómo te sientes?

Natsu: Aturdido...

Juvia: Lo que dijiste fue muy tierno, hasta ella se sorprendió y el besó, no se diga, convenciste a todos de que estan enamorados de verdad.

Natsu: ¿En serio? Creo que ahora Lucy si me odia.

Juvia: Bueno te odia desde que aceptaste las condiciones de su padre pero un año pasa rápido, ya verás que todo saldrá bien.

Natsu: Gracias por tus palabras; bueno... Solo será un año.