Poema XVIII

Son las estrellas dulces compañeras
de la señora de copa blanca que sale cada noche y se esconde cada mañana.
Más allá del cielo anochecido,
hay un cosmos infinito,
donde planetas astrales con impotencia se alzan .
Las constelaciones forman sin pasar desapercibidas una bella danza de puntos luminosos y de mágicas miradas.
Los agujeros negros,
círculos perversos que se roban lo que por ellos pasan,
sin piedad ninguna con todo arrasan,
y aún creen los humanos que son la llave hacia una nueva galxia
En la Vía Láctea carretera de estrellas y de nebulosas coloradas ,
pasan los fieros meteoritos que a los planetas amenazan,
con su fuerza bruta y sus cuerpos en llamas.
Y es el cosmos mismo un lugar de universos infinitos,de cuerpos celestes, de meteoritos,
Y de otras cosas que el hombre aún no ha conocido.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top