-¿Y bien?- Preguntó mi compañero después de un largo silencio. Llevábamos desde la visita a Himeko sin hablar, mientras caminábamos hacia la nada, realmente y yo golpeaba al caminar una piedra. Le había cogido cariño y todo.

-No sé.- Me hundí de hombros.

-¿Cómo que «no sé»? ¿Despues de todo lo que te ha dicho Himeko, solo vas a decir «no sé»?- Noté cierto tono de enfado en su voz.

-No sé.- Lo sé, soy un espíritu rebelde. Lee se dio una palmada en la frente.

-¡Maldita sea! ¡Tenemos que recuperar al maldito bipolar de Neji Hyuga de hace unos años y tu no sabes que mierda hacer! ¡El mundo va a acabar pronto! ¡Mi maldita juventud! ¡El calentamiento global! ¡Los sujetadores de viejas!- El loco vestido de verde gritaba histérico, y una vena en mi frente se hizo notar.

-¡Tranquilizate, pelo raro!- Una de mis manos agarraro su hombro, mientras la otra le golpeó en la cara.-Era necesario, y lo sabes mejor que nadie.

Lee se tambaleó sobre sus pies, sobando su mejilla y me miró, para luego asentir.

-Sé que podrás hacerlo, pero, uhg.

-Te entiendo. Pero ni si quiera se que hacer cuando me presente a las 5 frente a él.- Moví mi mano señalando la dirección del campo de entrenamiento.- Quiero decir, la pelea no me preocupa, puedo matarle si quiero. Soy temible.- Emití un ruido con la intención de intimidar, pero la piedra que golpeaba antes daba mas miedo que yo.- Pero el problema es que no quiero hacerle daño. Es como, «llego después de tres años y oh, te amo, tu estas enfadado, pero voy a arreglar las cosas partiendote la cara, si. De verdad que te quiero. ¿Y en estos años qué? ¿Todo bien? Me alegro. Anda ven y dame un beso que me deje bien muerta matada, mi amor.» ¿Entiendes lo que quiero decir, Lee? ¿Lo entiendes?- Pregunté cogiéndole de los hombros y zarandeandole. Y ahora fui yo quien fue golpeada. Para eso están los amigos.

-Respira, loca de la cabeza.- Exigió.- Vas a ir a allí y le vas a mostrar lo fuerte que te has vuelto, ¿no es lo que querías? Que vea que estos tres años han merecido la pena y no han sido una pérdida de tiempo.- Lee miró hacia donde estaba la gente por las calles.- Y el irá enserio. Ya sabes, te mirara con la cara de «macho que se hace respetar» e ira a... por ti, no lo dudes.- Me cogió del brazo y empezamos a caminar hacía un hombre.- Disculpe, ¿tiene hora?- El nos miró y sonrió. Luego observo el reloj que había en su muñeca.

- 4:30.- Contestó.

Nosotros le agradecimos.

-Vas a ir allí y le vas a decir, «soy fuerte». Vas a darle una paliza y le vas a ensuciar su bonita melena, ¿esta bien?- Decía Lee mientras me daba unos retoques a la ropa. Yo hice un puchero.

-Me gusta su pelo.- Hablé colocando la cabeza de lado.

-No te quedes con eso.-Se quejó.- ¡Venga, vete! Suerte.-Se dio la vuelta y antes de irse caminando giro su cabeza para mirarme de reojo.- Y paciencia.- Rió.

Yo di un largo suspiro y me miré los pies. Comencé a caminar, toque el pequeño bolso que tenia atado a la pierna derecha y manosee, asegurándome que tenia de todo. A lo mejor podría utilizarlo de excusa para irme corriendo. Era lo que más deseaba ahora.

Peine nos dos largas coletas y las aprete. Ajusté bien el top negro que me tapaba hasta por encima del ombligo. Mis pantalones grises anchos y largos los agarré y los subí un poco y me aseguré de tener mis sandalias bien colocadas. Coloqué los guantes negros sin dedos en mis manos y me crují los nudillos.

Hoy precisamente no tenia un aspecto muy femenino. Aun no era algo que me preocupara, estaba cómoda, que era lo importante. Pero, oh Dios, quería agradarle a Neji.

Pasé la mano por mi frente quitando una pequeña capa de sudor, y mire al frente, dándome cuenta de que ya estaba frente al lugar acordado. Di un paso al frente. Me miré de arriba a abajo, tenia los hombros rojos de los nervios, y supongo que la cara también, pero ¿¡los hombros!? Soy tan ridícula. Maldito cuerpo que no sabe donde acumular la sangre.

Me comencé a morder las uñas hasta que vi la figura del Hyuga a lo lejos. Sacudí la cabeza y me concentre, apretando los puños.

-Buenas tardes.- Salude, poniendo mi peso sobre la pierna derecha y con la mirada en un punto inexistente.

-Dejate de formalismos.- Gruñó él.

-Es educación.- Respondí de igual manera.- Parece que te falta.- Contraataqué.

-Tal vez se fue contigo hace tres años.-Contestó, enfadado. Yo me mordí el labio inferior.-No he venido a discutir con una perdedora.-Alardeó y tuve ganas de ir y golpearle en sus partes, pero me contuve, haciéndome sangre en el labio por la fuerza que había hecho con mis dientes.

-No se de quien hablas.-Me hundí de hombros. Me coloqué en posición de pelea.- Soy fuerte.-Me hablé a mi misma pero él pareció escucharme y soltó una risita.

-Habrá que verlo.- Añadió, poniéndose en posición y asintiendo.

La pelea había empezado.

Hola chicas, ¡nuevo capitulo!

Estoy deseando de escribir el próximo. Será emocionante.

¿Qué tal estáis, por cierto? Yo me siento muy bien últimamente. :D.

Ah, y estoy escribiendo otra novela, "Ángel. [Naruto]", por si os queréis pasaros.

También agradeceros por leer y a las chicas que se ofrecieron para la portada.

La pregunta de hoy es... ¿Cúal es vuestro Anime favorito?

Recordad que si me queréis preguntar algo ponerlo en los comentarios y en el próximo capitulo reapondere. Y que sí queréis alguna red social mía, las daré encantada.

Muchas gracias por los ánimos que me dais. Os lo agradezco de verdad.

Os quiero mucho. ♥