Su oscura mirada penetra hasta lo mas profundo de mi ser, así como sus labios seducen mi corazón y así como sus abrazos me roban el alma.

~Mizha

Bulma Brief

Perfecto. Su beso, sus labios sobre los mios, la dulce danza de nuestras lenguas, su calidez, su cuerpo. Él era perfecto.

Lo era.

Mi ahora oscura alma, no encontraba razón para describir este sentimiento. Esa opresión en mi pecho. La sed de sangre siendo ignorada. Su cálido tacto enviando pulsaciones a todo mi ser.

Poco a poco todo empieza a desaparecer al sentir su lejanía. Mi cabello negro tornándose turquesa y mi traje tomando su color negro. Puedo sentir su como un suspiro deja sus labios al sentirlo lejos.

— Bella... —Su mano toma la mía en un intento de mantenerme cerca pero siento mi cuerpo desvanecerse.

— Vegeta, sostenla. Nos la llevaremos. —levanto la mirada y puedo ver una sonrisa en su boca mostrando supeoridad ¿Acaso no sabe que debe mostrarme respeto?

Mi cuerpo se debilita aun así me suelto de vegeta, — Dejame, no me toques. — retrocedo un poco pero vegeta sigue acercándose a mi. — Alejate Vegeta, no quiero hacerte daño.

— Bulma, Bulma, Bulma... —puedo verla acercarse y mi vista ponerse borrosa, mi traje sigue negro pero mi cabello se mezcla en turquesa y negro a la vez. — vienes con nosotros por voluntad propia o a la fuerza, tu decides azulita o debería decir morena.

Veo mi cabello de nuevo negro al igual que mi traje, mi instinto se apodera de mi cuerpo. Siento la bestia en mi dominarme. — Alejate Vegeta o te are daño. —Él simplemente se aleja sin dejar de observarme. Veo a esa perra y ella viene hacia mi con recelo.

— Vendrás a la fuerza entonces. —dice y lleva una de sus manos a mi cuello, me eleva lo suficiente como para ahorcarme, veo su sonrisa y cierro mis ojos.

Me río de ella y la veo.

— Eres de la raza demoniaca, esto debería matarte, puedo sentir tu pulso. —el asombro no cabe en sus ojos que no hace mas que soltarme.

— Te lo he advertido, soy superior a ti. —apenas suelto eso y retrocede lentamente.

— Yo soy la hija de la raza vampira. Eso me hace superior a cualquiera. ¿Que eres?

— Huuu, —me rio de ella mientras me acerco. — Como te lo explicó para que puedas entenderme, veras princesita ambas somos de la realeza, el que trates de engatusar al príncipe no te ayudaría de mucho.

— Me volvería su princesa o reina. —habla pero solo rio de ella.

— No, quedarías como una completa estúpida. Él ya tiene a su reina y ella porta la marca.

— A si. ¿Y quien es?

Chasqueo la lengua y niego con la cabeza. — Pregunta equivocada. — Su cara es toda una comedia cuando parpadeo y siento mis ojos cambiar a ese rojo profundo. El cual muestra el mismo infierno en ellos.

— Tu...

— Corre. —le susurro y sonrió.

Sin dudarlo un segundo la veo retroceder, siento mi sangre calentarse y la marca dominarme. — Mirame Bulma.

Volteo y puedo ver a Vegeta interponerse entre ella y yo, sus ojos me observan detenidamente. Su oscura mirada me penetra y por alguna razón contengo la respiración.

— Esta sola, llevensela. —ordena alguien a mis espaldas.

Veo a la pelinegra tomar a Vegeta y desaparecerlo. Se acerca a mi de nuevo al igual que alguien la retiene. La ponen contra el suelo y sigo sin entender.

— Es mejor que no te resistas princesa. — mis ojos se guían al dueño de aquella voz.

— No, no la toque. Huyan. —Fasha les advierte de repente. — Si quieren salir vivos de aquí, dejenla. —les grita.

Lo veo y por alguna razón siento que le conozco, puedo sentir como mi cabeza duele. Puedo sentir a mi bestia luchar con mi marca. — ¿Fasha, donde lo llevaste? —Me acerco a ella pero solo forcejea para soltarse.

Mi manos hacen a un lado a los dos tipos que la retienen y la levanto para que pueda ponerse de pie. —¿Donde esta Vegeta? — la interrogo de nuevo.

— A salvo. Vete de aquí Bulma, vete. — la veo y no la comprendo. Mi cabeza sigue doliendo pero se que de alguna manera estoy ganando.

— Debo... Encon-trarlo. —Mi respiración es profunda que duele, la veo pero la desesperación llega a mi. — Por favor dime dónde esta.

— A salvo, tranquila. — En sus ojos veo sinceridad y se que dice la verdad.

Fasha me sostiene cuando no puedo mantenerme de pie, veo muchas personas rodeandonos pero no hago más que caer al suelo.
Fasha forcejea con los que la retienen para venir hacia mí, a lo lejos escucho como grita que corra y huya.

A duras penas me arrastro pero unos pies impiden que continúe avanzando. — Te dije que vendrías conmigo, quiero un legado y tu me lo daras. —levantó la vista y lo que veo me deja perpleja.

Aun así, sigo escuchando los gritos de Fasha y como lucha por liberarse. Pero no hago mas que confiar en ella y perder el conocimiento.

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Gracias, gracias por leerme. Perdonen que sea corto pero sigo corrigiendo y ya había tardado mucho en actualizar.

Fasha es la novia de Vegeta y lo acaba de salvar. Repitan conmigo — Oww's. — okay, no. Pero fue lindo.

Espero les guste a mi en lo personal me encanto...
Vamos, vamos no olviden su voto y comentario.

~Mizha DB