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La semana pasó y ya el viernes estaba en curso cuando la ojiazul miraba el techo del salón de clases totalmente pensativa. Su venganza no estaba resultando y todo porque en cuanto estaba con el rubio, tuviese la identidad que tuviese, ella olvidaba todo pensamiento oscuro. Estaba tan sumergida en sus pensamientos que ni siquiera notó cuando el profesor de Artes había salido y había entrado Madame Mendeleiev.
-Bien, los alumnos que tengan pendientes conmigo son los que tienen que quedarse, los demás son libres de irse.
Y tras dar una lista en la que solo los nombres de Adrien y Max no estaban, la profesora se dirigió a los chicos y les dio salida.
-¿Cuantos te faltan?
Preguntó la morena a la ojiazul y ella negó.
-Solo corregir el último trabajo.
Dijo y una fotografía le llegó al celular al instante. Eran las respuestas del ejercicio. Adrien se las había pasado.
Él modelo se levantó con el asa de su maleta sobre su hombro, girandose hacia la ojiazul que le miraba agradecida.
-Si necesitas ayuda con los temas, dime.
Dijo sonriendo antes de salir seguido de Max. Dupain lo pensó. No por eso significaba que ya lo iba a perdonar. Seguro le había pasado el ejercicio solo para calmar su conciencia.
La azabache con la fotografía terminó en un dos por tres, levantándose y entregándole la tableta a la profesora, llegándole la inspiración para un plan que se encargó de idear en los segundos que la mujer había tardado en revisar el trabajo.
En cuanto la profesora le dio salida, la ojiazul recogió sus cosas y se despidió vagamente de Alya, intentando esconder esa sonrisa maldosa y con dobles intenciones que su rostro no podía evitar mostrar. Entonces salió corriendo y vio al Agreste apunto de cruzar la puerta de salida, sabiendo que si llegaba a salir no podría efectuar su plan hasta el lunes. ¡Tenía que detenerlo!
-¡Adrien!
Gritó sin pensarlo ni un poco y este giró a mirarle. Ella a la velocidad de la luz corrió donde él, tomándole del brazo mientras se recuperaba.
-¿Me podrías apoyar con un tema de química?
Dijo entrecortadamente a lo que él sin pensarlo asintió.
-Claro, ahora mismo tengo tiempo ¿Vamos a la biblioteca?
Sugirió y la ojiazul en su interior festejó. Perfecto, había dicho lo que ella esperaba que dijera, el paso uno del plan estaba completado.
Navegando con bandera de inocente, ambos se dirigieron hacia la biblioteca, él completamente ajeno a los maquiavélicos planes de su secreta novia y ella con sus más perversas intenciones. Con eso mínimo le arruinaría el fin de semana, tal como él le había arruinado su semana a ella.
Sabía que eso no estaba bien, pero él tampoco lo estaba, además quería portarse mal y hacer una maldad con alevosía y ventaja por primera vez en su vida. ¿Acaso eso no estaba bien?... No contesten.
El rubio empujó la puerta de la biblioteca y la dejó pasar primero, observando como no había absolutamente nadie ahí dentro. Claro, aún era horario de clases y nadie pasaría una hora libre en un viernes tan soleado como ese, nadie excepto ellos.
Para la ojiazul, ese era el ambiente perfecto para llevar su plan acabo.
Para el Agreste, el lugar estaba tan solo que ese podría haber sido el escenario perfecto para una película de terror.
A pesar de la diferencia de ideas, ambos se sentaron lado a lado y la ojiazul tomó su libro, abriendolo con nerviosismo. ¿Y si en realidad Chat no era Adrien?
-Este tema.
Dijo despejando sus pensamientos con decisión ¡Lo iba a hacer! Él rubio acercó su cabeza para leer el tema del libro que estaba sobre la mesa, mirando la azabache aquello con un ligero temblor en sus manos. Así que con disimulo comenzó a acercar el libro hacia ella con un desliz en sus dedos, obligando así a que el rubio, inconscientemente, tuviera que acercarse aún más para seguir leyendo.
¡Lo iba a hacer!
En cuanto lo vio lo suficientemente cercano, tanto como para sentir sus exhalaciones en su mejilla, sin previo aviso estampó sus labios en los de él robándole un beso corto. Él la miró tan sorprendido como la situación lo ameritaba, abriendo sus ojos completamente. Se quedaron mirando tres segundos en silencio, antes de que el rubio quisiera hablar, pero antes de eso la ojiazul le volvió a robar otro beso igual de fugaz que el anterior. Adrien volvió a mover la boca y la ojiazul repitió la acción esa vez ya sin rastros de inseguridad e incluso con una sonrisa juguetona. Mas rojo que un tomate, el rubio frunció su ceño y ella le dio un piquito en la nariz, con esa burla leve en su sonrisa.
Entonces Agreste no resistió más. La tomó por la cintura y se lanzó a besarla con tal frenesí que incluso cayeron ambos de sus sillas con severidad, no habiendo sentido el golpe por el calor del momento.
Diez minutos después, un chico que iba a sacar unas copias, entró a la desolada biblioteca con algo de miedo pues parecía el escenario perfecto para un crimen. Eso fue hasta que aún desde la entrada, miró a la lejanía como dos chicos salían de debajo de una mesa tan despeinados y tan desaliñados que parecía que habían pasado por una estampida.
¡Fiú! Que alivio, al menos no estaba solo ¿Será que había habido un akumatizado?
Con tranquilidad el estudiante pasó y cruzó unos estantes dispuesto a hacer lo suyo tras perderlos de vista. En cuanto los ojos azules de la chica miraron que el chico no los veía, ella tomó la nariz del rubio con su pulgar e índice y tiró de ella para darle un último piquito.
-Gracias, ya entendí el tema.
Le dijo antes de irse tan sonrojada que incluso se veía preocupante pero sin quitar esa sonrisa que pocas veces él había visto en ella.
-No sé cómo me siento.
Dijo el rubio a su kwami que lo único que sentía era asco.
-Prefiero mil veces estar en el anillo, al menos así no soy aplastado por esa chica. Por cierto, ¿no has notado que tiene un patrón con los rubios ojiverdes?, alejala de Fe...
-Calla.
Dijo enojado, antes de salir de la biblioteca pensativo. En cuanto salió, miró como Marinette se reunía con Alya y se iban juntas, saludandolo como si nada hubiese pasado minutos antes.
Continuara...
Uy. No tuve valor de cortar el capítulo, es como un capítulo doble. Literalmente tiene 1133 palabras. Generalmente hago estos capítulos de no más de 500 o 600.
En fin, disfruten.
Edit: no se que pasó pero se eliminó y renovó y quien sabe qué. No se si es el capítulo que ya había perfeccionado o el borrador. Mañana checo, ahora me muero de sueño.
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